El Cobre

El cobre es un elemento químico que pertenece al grupo de los metales y cuyo número
atómico es 29. Este metal de transición se caracteriza por su brillo y su tonalidad rojiza.
Proviene de la palabra latina cuprum y éste a su vez de la expresión aes cyprium que
significa literalmente de Chipre debido a la gran importancia que tuvieron las minas de cobre
de la isla de Chipre en el mundo grecorromano.
Junto con aluminio y el hierro, el cobre es uno de los metales que más se usan y el metal
más antiguo del hombre Esto se debe, en parte, a su gran capacidad para conducir la
electricidad que tiene un sinnúmero de aplicaciones de uso cotidiano y también en
artefactos de alta tecnología. El cobre además es un material maleable y dúctil que nunca
pierde sus propiedades mecánicas.
Es uno de los metales más conocidos existentes en la naturaleza y es al que mayor uso le
ha dado el hombre a lo largo de la historia. Es clave para la generación y distribución
eléctrica ya que es un excelente conductor de esa energía. En el caso de las
telecomunicaciones es la materia prima más común en la fabricación de cables telefónicos,
y el desarrollo de nuevas tecnologías para aumentar la eficiencia en la transmisión de datos
también posiciona a este material como una opción importante para el desarrollo de
conectividad con banda ancha.
El cobre es vital para la salud de los seres humanos, los animales y las plantas, y una parte
esencial de la dieta humana. Alimentos ricos en cobre incluyen frijoles secos, almendras,
brócoli, chocolate, ajo, soja, guisantes, productos de trigo integral y mariscos.
El cobre maximiza el rendimiento de los productos que lo contienen, lo que ayuda a ahorrar
energía, CO2, dinero y vidas. Por lo que es un contribuyente vital y positivo para la
humanidad y ha mejorado nuestra calidad de vida durante siglos.
Durante gran parte del siglo XIX, Gran Bretaña fue el mayor productor de cobre del mundo,
pero la creciente demanda del mercado global llevó a continentes como África y países
como Estados Unidos, Perú y Chile a abrir nuevas minas, transformándose estos últimos,
en países con la mayor participación mundial en la extracción del metal.