El uso de fuentes renovables para generar energía crece cada vez más en el país, y no solamente a la

luz de importantes empresas, sino también de emprendedores que están buscando su camino y
apuestan por la innovación. Las startups relacionadas con este tema ofrecen soluciones originales y
sustentables, con la mirada puesta en el futuro.

Es el caso de Sebastián Groll, quien vino de Alemania en 2004 y se instaló en la zona de Cafayate, en
Salta. Allí diseña juguetes a partir de materiales reciclables. Estos tienen pequeños paneles solares que
fabrican energía y les dan movilidad. Las piezas están hechas con madera que aportan los artesanos de
la región, y así se construyen pequeños aviones, helicópteros con hélices móviles, autos y casas, por
ejemplo. Se evitan los materiales sintéticos, las baterías y las pantallas. Este proyecto fue premiado por
el Programa Nacional de Emprendedores para el Desarrollo Sustentable (Proesus), que llevó adelante
el entonces Ministerio de Ambiente de la Nación.

Otro emprendimiento es el de Eco-iD, que fabrica cocinas solares, que funcionan con la energía que
viene de la luz. Se trata de conos hechos con cartón reciclado y cubiertos con papel de aluminio. Luego
se los tapa con una capa transparente y dentro se coloca el recipiente en el que se va a preparar la
comida. Este tiene que ser negro, para captar la luz solar. Este proyecto fue diseñado por Carolina
Truchero, que es diseñadora industrial, egresada de la Universidad de Buenos Aires y se especializó en
energías renovables. En un viaje al norte, en Iruya, tuvo la idea de confeccionar estas soluciones, que
contribuyen al medio ambiente ya que evitan, por ejemplo, el encendido de leña, que emite dióxido de
carbono.

Eco Carhué es otra iniciativa que fue seleccionada en el programa Proesus. El proyecto consiste en
ofrecer climatizadores de ambiente que funcionan con energía solar. Creada por Tamara y Facundo
Guereño, la empresa ofrece este tipo de soluciones para viviendas ya construidas. También venden
calefones solares y se enfocan en los sectores que no tienen acceso al gas natural.

Un emprendimiento argentino, que se radicó en California, es el de Semtive. La empresa desarrolla

turbinas eólicas verticales de baja potencia, de menor tamaño que los paneles solares. Los ofrecen para
generar energía en las casas y aseguran que pueden girar solo con una brisa suave. La revista Fast
Company, recientemente publicó el ranking 2018 de las empresas más innovadoras del mundo. Dentro
de las de Latinoamérica, reconoció esta iniciativa.

En otros países también existen propuestas innovadoras relacionadas con las energías renovables. En
España, por ejemplo, está Onyx Solar que produce vidrio fotovoltaico para edificios. Este material es
capaz de generar electricidad mediante la energía fotovoltaica, un proceso que ayuda a reducir las
emisiones de carbono. El vidrio además, puede aislar térmica y acústicamente y filtra el 99 por ciento de
las radiaciones solares nocivas. La empresa tiene proyectos en Estados Unidos, Brasil, Chile, Francia y
China.

Otra es Ampere Energy, que fabrica elementos para la gestión energética, tanto para viviendas como
para empresas. Ofrecen baterías inteligentes para el autoconsumo de energía solar, que permiten
alcanzar independencia energética. Estos dispositivos almacenan el excedente de energía generado por
los paneles solares durante el día para que se puedan utilizar las 24 horas. Además, pueden
autogestionarse, predecir la producción solar, analizar los precios del mercado eléctrico y las pautas de
consumo del usuario, para alcanzar así el máximo ahorro.
En México, la empresa Caliza produce energía solar y se enfoca en escuelas y centros
culturales, a los que les promete ahorrar un 80% en el precio. También ofrece el servicio en
casas particulares, a las que les cobra una suscripción por la que ahorran un 35% en el precio
de la electricidad. Se definen como una “empresa social” que busca reducir el impacto
ambiental en el país. Fue seleccionada como una de las seis mejores startups del sector
energético en México.

En Estados Unidos, un emprendimiento innovador es el de Ethosgen, que utiliza la energía

residual para convertirla en electricidad. Ofrece sus servicios a empresas, a las que les vende
energía barata y eficiente. Se enfocan más que nada al sector militar, industrial, centros
tecnológicos y renovables.

Muchas startups a lo largo y ancho del mundo se dedican a crear aplicaciones que monitorean
el consumo energético de una casa. Tienen como objetivo concientizar sobre el uso de este
recurso y fomentar el ahorro. En la Argentina, Wabee es una de las empresas que abarca ese
espectro.

Seguramente, en los próximos años cada vez haya más iniciativas relacionadas con las
energías sustentables, ya que el uso de fuentes renovables crece día a día en todo el planeta.