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"Al fin al cabo somos lo que hacemos para cambiar lo que somos" Buenos días

padre director Fray Roman Argumedo Rodríguez ODM, directiva, coordinadores,


profesores, padres de familia y alumnado en general. Quienes les habla Aimi De La
Gala Subauste de 5to año A de secundaria de la promoción jubileo 2018. Hoy
estamos a punto de concluir una etapa de nuestra vida, que nos causa una
esperanza, tristeza y un poco de miedo por no saber que nos depara el futuro, pero
todo depende de nuestros actos y así demostrar que todo nuestro esfuerzo actual
valdrá la pena. Todos sabemos que la vida en la escuela tiene muchos altibajos,
quiero decir, que a veces eres importante para todos y otras veces no eres nada.
Es difícil poder acoplarse al colegio cuándo vienes de otro país, ya que las
costumbres y el idioma son muy diferentes, es como empezar de nuevo. Siendo
sincera, cuando llegué de Japón logré atemorizarme, porque nada era igual, pensé
que jamás me iba a adaptar. Sentí rechazo, pero me di cuenta que era por la falta
de comprensión entre esas personas y yo. Gracias al apoyo de algunos
compañeros, profesores y a mi propio empeño pude encajar, no tuve que fingir ni
imitar a nadie para que me acepten. Amigos me da mucha alegría haberlos
conocido, logrando con ustedes una bonita amistad. A pesar de algunos conflictos
entre nosotros, siempre logramos estar unidos, y aprendimos que no todos
pensamos ni opinamos igual, esto nos enseñó a ser tolerantes y conocernos más
el uno al otro. Por otra parte, es muy triste pensar que ya no nos veremos todos los
días, extrañaré los momentos en los que contábamos nuestras anécdotas y
reíamos sin parar. Les deseo lo mejor en el transcurso de sus vidas y decirles que
no se rindan ante el primer obstáculo, que aprovechen todas las oportunidades que
les da la vida, estás siempre están allí solo hay que aprender a observarlas. Yo sé
que al concluir la escuela todo será difícil, de nosotros depende nuestro futuro y lo
que hagamos para cumplir nuestros sueños Debemos agradecer a nuestros padres
por su amor, comprensión y apoyo incondicional, por desvelarse con nosotros para
ayudarnos con nuestros trabajos, por su lucha del día a día para brindarnos un
techo, comida, salud y educación, por corregir nuestros malos actos y hacer las
personas de bien. Así mismo, debemos agradecer a los maestros por su labor en
educarnos y prepararnos para el futuro. Gracias a nuestros padres y profesores
terminamos satisfactoriamente una etapa de nuestra vida. De la decisión de sus
actos en el presente dependerá su futuro, "al fin y al cabo somos lo que hacemos
para cambiar lo que somos".

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