Arquitectura de tierra

contemporánea:
tendencias y desafíos
Rodolfo Rotondaro
Buenos Aires, y al Consejo Nacional de
APUNTES vol. 20, núm. 2 (2007): 342-353

Investigaciones
Científicas y Técnicas, por el apoyo material y
logístico parcial brindado para la realización de la
investigación. En este trabajo se considera la
Este artículo es producción de la arquitectura de tierra
producto de una línea
de trabajo del contemporánea y sus he-chos asociados,
Programa de que han surgido principalmente en el
Investigación
Arquitectura y
período de las últimas tres décadas. La
Construcción con escala es global, pero el énfasis está
Tierra, arconti. Este
puesto en algunas manifestaciones
programa tiene sede
342 institucional en la latinoamericanas, ele-gidas por su
Facultad de significatividad en tanto representan
Arquitectura, Diseño y
Urbanismo de la varias de las tendencias de desarrollo que
Universidad de Buenos se mencionan. Sin pretender realizar una
Aires, fadu-uba, es
dirigido por el autor y revisión exhaustiva del estado actual de
cuenta con apoyo la arquitectura de tierra, ni tampoco
material y financiero
de la fadu-uba y del
presentar una galería de obras y
Consejo Nacional de proyectos contemporáneos, el objetivo se
Investigaciones
orienta a plantear más bien aquello que
Científicas y Técnicas,
conicet. La investigación invita a la discusión y a la reflexión sobre
se inició en abril de la transforma-ción que está ocurriendo en
2006 y continúa. El el hábitat construido y en la mente de
autor agradece la muchas personas, a partir del fenómeno
colaboración de los
arquitectos Rafael F. de la revalorización de la arquitectura de
Mellace y Eliana tierra a escala global.
Bórmida, de la
Argentina; del El concepto “arquitectura de tierra”
arquitecto Eduardo es cono-cido y aceptado en general para
Salmar, de Brasil; del
identificar todo tipo de manifestación en
ingeniero Patricio
Cevallos Salas, de el hábitat construido, en el cual la tierra
Ecuador; y del cruda es el material principal o el único,
arquitecto Rubén Roux
Gutiérrez, de México, denominación que se adopta en adelante.
por su colaboración en Este concepto fue debatido
el artículo con la
información de sus recientemente por el Proyecto Proterra,
proyectos y obras. para el cual se debe incluir “el conjunto
Asimismo, el autor
de todas las manifestaciones cons-
agradece al Instituto tructivas, arquitectónicas y urbanísticas
de Arte Americano de
que han sido proyectadas y construidas
la Facultad de
Arquitectura, Diseño con la tierra como material
y Urbanismo de la
predominante” (Neves, 2004).
Universidad de
 O son hechas y
tro mantenidas por
asp sus
ect autoconstructores- no sólo la producción arquitectónica
o usuarios. El oficial, la privada empresarial y de las
organizaciones no gubernamentales,
imp alcance de lo
sino también la de la arquitec-tura
ort contemporáneo
doméstica anónima: es también
ant debe tener en
arquitectura de tierra contemporánea.
e cuenta, entonces,
Resulta muy difícil hablar de
par
arquitectura de tierra sin mencionar la
a
obra del arquitecto egipcio Hassan Fathy,
ten
incansable pensador y hacedor que en el
er
siglo xx y por más de cincuenta años
en
concretó un formidable aporte a la
cue
arquitectura de tierra contemporánea, en
n-ta
particular a la árabe. Trascienden sus
es proyectos y obras de vivienda, mercados,
el edificios culturales, escuelas, palacios y
hec mezquitas en Egipto y varios países de
ho Medio Oriente, Mallorca y Estados Unidos
de (Fathy, 1970) y su participación en planes
que urbanísticos, de los cuales el más
casi conocido es el poblado de Nueva Gourna.
un La mayor parte de su obra fue concebida
terc con la tierra como material principal.
io La tierra como material constructivo
de es va-lorada cada vez más con base en
la sus caracterís-ticas más saludables
hu comparado con materiales industriales
ma- como el hormigón armado, el ladrillo, el
nid acero. Para estos últimos se necesita
ad mucha energía de producción y
viv transporte, la cual no sólo es no
e renovable sino que contamina. En la
en construcción con tierra prácticamente no
con se ge-nera contaminación ambiental, el
stru material no contiene sustancias tóxicas,

ccio en su producción y transporte se necesita

nes mucho menos energía y demanda

menores costos, y puede ser recicla-da
de
casi en su totalidad, volviendo a ser parte
tier
de la naturaleza.
ra,
Salas sostenía que “hay más que
la
ma síntomas de que la vuelta a la tierra

yor como material puede

par
te
de
las
cua
les
 que sea una noble reacción primaria desde Estados Unidos y Aus-tralia hasta
contra las recientes orgías de hormigón y Francia y Alemania” (p. 69), y hablan de
acero” (1987, p. 12), en la presentación “la vía empresarial y la vía pública” como
de unas jornadas sobre el tema dos ámbitos en los cuales se ha venido
organizadas por el Instituto Torroja de generando una “… moderna arquitectura
Espa-ña, en franca alusión al de tierra…” (p. 72).
renacimiento del tema en Europa, Desde un punto de vista tecnológico
Estados Unidos y Latinoamérica. y te-niendo en cuenta la relación
Al respecto podemos decir que en la indispensable entre arquitectura y
actua-lidad están en movimiento diferentes tecnología en toda arquitectura, en la
tendencias de desarrollo, que surgieron Arquitectura de Tierra contemporánea se
principalmente en las últimas tres décadas y presenta una situación de intercambios y
sobre las cuales se pun-tualizan sus de con-
aspectos relevantes en este trabajo. Son
artífices tanto los países llamados “en vías
APUNTES vol. 20, núm. 2 (2007): 342-353

de desarrollo” como aquellos llamados

“desarro-llados”, las clases ricas, las medias
y las pobres, las regiones áridas y las
húmedas, la montaña, el desierto, la llanura,
la ciudad y el mundo rural. Son
protagonistas y usuarias millones de
personas que incluyen a la población
común, a los auto-constructores, técnicos,
profesionales, científicos, líderes,
344 entusiastas, políticos, organizaciones no
gubernamentales, organismos comunitarios
y un variadísimo universo de instituciones y
organiza-ciones interesadas en la
arquitectura de tierra.
En la actualidad más reciente, es en
Asia, Medio Oriente, África y
Latinoamérica en donde se manifiesta un
decidido desarrollo y vinculación con el
campo de la vivienda y el hábitat “de
inte-rés social”, mientras que en Europa
occidental se percibe una mayor
preocupación por los pro-blemas del
reciclado de materiales, el ciclo de los
edificios, el gasto energético y la
contaminación ambiental que genera la
construcción. Estados Unidos y Australia
muestran un énfasis en el desarrollo
tecnológico y los emprendimientos
empresarios, aunque sin descuidar el
estudio de la historia de las técnicas y el
patrimonio arqui-tectónico de tierra.
Figura página anterior:
Tapia de Capilla de la Algunos estudiosos europeos
Gratitud, Mendoza, mencionan un alcance extendido
Argentina. Bórmida &
importante de la arquitec-tura de tierra
Yanzón, arquitectos.
Autor: actual. Maldonado R. et al. (2002)
Rodolfo Rotondaro. señalan: “… por casi todos los países en
vías de desarrollo…”, así como también
“… en los países más desarrollados,
dici urso so-bre la uso de siliconas, resinas y polímeros en
ona evolución de la obras de conservación y restauración.
mie tecnología de En el campo de las técnicas
nto construcción con constructivas surgieron innovaciones que
s tierra, González incluyeron cambios en la preparación del
mu C. señala la material, en el diseño de equipos y
y presencia de un molderías, y en la organización de la
par “… renacimiento obra. Hubo también iniciativas orientadas
ticu de la tecnología a racio-nalizar las técnicas tradicionales
lar de construcción que motivaron cambios tales como la
es, con tierra…”, a reducción dimensional de los
en pesar de “… la componentes básicos, menor espesor en
los lenta agonía que los muros y, en general, una aceleración
cua sufrió a mediados de los tiem-pos constructivos.
les del siglo xx…”

el (2002, p. 30). Arquitectura de la vivienda

des En el
arr presente se La vivienda autoproducida y la
ollo observan cambios vivienda de interés social
tec cons-tructivos
nol importantes en la El primer tema de relevancia que aparece
ógi arquitectura de es el de la vivienda. En este contexto es
co tierra. En cuanto necesario tener en cuenta que una parte

ha al material importante de la humanidad está alojada en

jug original, la tierra el llamado “hábitat popular”, el hábitat

ado cruda o sin cocer, autoproducido más grande del planeta. En

un tuvo cambios que él, millones de personas viven en

rol alteraron sus pro- construcciones de tierra, y es aquí, en la

det piedades y sus vivienda de tierra, donde tal vez esté

er posibilidades en representada con mayor amplitud de

mi- tanto material y soluciones la arquitectura de tierra.

nan en tanto Esta primera modalidad de vivienda de

te tecnología. tierra está condicionada brutalmente por las

en Mediante la si-tuaciones de pobreza e inequidad. Aun
mu estabilización con así, es un protagonista eterno y, en lo
cho productos inmediato, todo indica
s naturales o
asp industriales, y la
ect com-pactación, se
os. alteraron
S aspectos tales
obr como la
e durabilidad, las
est resistencias, las
e terminaciones y
asp los modos
ect productivos. Esto
o, dio lugar, incluso,
en al empleo a
un escala masiva de
clar materiales como
o el suelo-cemento
disc y el suelo-cal, y al
que lo seguirá siendo. Es identificada por “modelo” de producción de vivienda está muy extendido y d
lo gene-ral como una manifestación vincula por lo general a familias y comunidades con centros e
tradicional más que como una vecinales, municipios, cooperativas y organiza-ciones no
arquitectura contemporánea, o bien es gubernamentales. Incluye a la vivienda para una familia y a i
reconocida dentro del patrimonio por su pequeños grupos de vivien-da masiva, con o sin n
valor his-tórico cultural. Sin embargo, es microcrédito para la adqui-sición de materiales o v
tan protagonista del hábitat actual como herramientas. e
cualquier otra arquitec-tura En una tercera modalidad se pueden incluir los s
contemporánea, privada u oficial. En prototipos de vivienda generados por centros t
alusión a ella, la Unesco mencionaba ya en i
la década de 1980 la evolución de las g
construcciones de tierra en el sentido de a
su existencia en todas partes del mundo, c
con la visión de su posible desarrollo para i
hacer frente al aumento poblacional en ó
los países “en vías de desarrollo”. n
Existe allí donde la tradición de la
construc-ción con tierra está vigente y y
donde el impacto de la depreciación del
material o la prohibición oficial no han p
llegado. Está presente en cuatro continen- o
tes, principalmente en los países “en vías de r
de-sarrollo”, pero también en países
“desarrollados”. Según su localización, p
puede ser dispersa o inte-grar el tejido de r
un aglomerado rural, de un barrio o
periurbano o incluso de un sector céntrico y
en las ciudades actuales construidas en e
tierra. En su concreción no hay actividad c
previa de proyecto pro-fesional ni t
documentación de obra, pero sí hay un o
sistema de conocimientos populares - s
valiosísimo, producto de la transmisión oral
familiar y comuni-taria ancestrales. En su
c
materialidad se reconocen
i
los sistemas constructivos tradicionales, a e
partir de los cuales también ha surgido el n
resto de la arquitectura de tierra t
contemporánea: el moldeo directo, el í
trabajo de bloques –adobe, champas–, la f
tierra apisonada –tapia–, los entramados i
y mixtos –quincha, bahareque, fajina, c
chorizo, paja embarrada, rellenos, o
tortados, etc.–, y los revesti-mientos y
-
terminaciones a base de tierra cruda.
t
Una segunda modalidad de vivienda
e
social de tierra es aquella autoconstruida
c
con asisten-cia técnica, o bien desde la
n
etapa de proyecto y durante toda la obra,
o
o bien solamente durante la obra –
-
selección y análisis de materiales,
l
estabili-zación, organización de obra,
ó
empleo de equipos y herramientas–. Este
g
icos, como pueden ser El modelo está construido con btc de 0.10 x
los que se desarrollan 0.14 x 0.28 m. La cimentación empleada es
en zonas con de zapatas de concreto armado; la losa de
enfermedades entrepi-so y azotea es a base de vigas de
endémicas como el mal madera, las cuales se fijaron a una cadena
de Chagas, en zonas de de concreto… en la losa de azotea se colocó
emergencia por ca- impermeabili-zante integral de 3 mm. Los
tástrofes naturales, en aplanados son a base de mortero cal-arena
zonas con riesgo en proporción 1:1 utilizando agua con
sísmico o en “baba” de nopal para el mezclado, la pintura
reconstrucciones de exterior e interior es de cal con agua y
barrios. En estos casos “baba” de nopal, las instalaciones
se trata de dar hidráulicas son a base de tubos de
respuestas a las polipropile-no, las sanitarias de pvc, las
demandas espe-cíficas eléctricas a base de tubo Conduit de acero
de comunidades y galvanizado y el sis-tema eléctrico es mixto,
gobiernos para realizar alambrado a base de energía solar y
contribuciones en el contactos sistema tradicional (Roux
ámbito de las Gutiérrez et al, 2006).
soluciones
habitacionales. Esta En el mismo camino pero en otra escala,
modalidad de gestión los conjuntos de vivienda de tierra masiva
de la vivienda lleva constitu-yen un fenómeno muy reciente, tanto
décadas y la vastedad en la esfera de la planificación oficial como en
de ex-periencias es un la de la indus-trialización al estilo del mercado 345
claro testimonio de que convencional de la construcción. Este
es un camino que se va fenómeno se ha extendido sobre todo en
consolidando en la países latinoamericanos y evidencia un cambio
búsqueda de un importante en los sistemas de cono-cimiento y

arquitectura de tierra contemporánea

“hábitat sostenible”. Se en las modalidades de la arquitectura de
pueden identificar en tierra, que acercan las bondades de la tierra y
ella la propuesta del su tecnología al hábitat y la vivienda llamados
“superadobe” de Khalili “de interés social”. Algunos ejemplos
para la emergencia y la interesantes son
vivienda en California,
las viviendas de adobe
reforzadas de Fundasal
en El Salvador; los
prototipos con tapia
reforzada de Borges R.
en Venezuela, y el
actual prototipo de la
Universidad de
Tampico, en México.
Este último es descrito
por sus autores como
un “modelo de
edificación sustentable
de tierra”. En su
memoria técnica los
autores señalan lo
siguiente:
 los pequeños y medianos conjuntos de mo “arquitectura ecológica”, “natural”,
vivienda que desde la década de 1990 “regional”, “solar”, “sana”,
están mostrando un perfil de “bioconstrucción” y otros, con el
“arquitectura social”, con modelos de interés por distinguirla e identificarla
gestión mixta para acciones de con las bondades de la tierra.
mejoramiento y de vivienda nueva. Las Algunos casos interesantes se
intervenciones de Zacatecas en México, pueden apre-ciar en Uruguay en las obras
Lak’a Uta en Bolivia, Ñandua e Ypahú en de vivienda y restau rante con adobe, btc

Paraguay, Ecosol en la Argentina, y y fajina de Etchebarne et al. (2006),

Vaimaca y Guyunusa en Uruguay, son
algunas iniciativas más recientes.
La vivienda de otros contextos sociales
Dentro del campo de la vivienda, pero
APUNTES vol. 20, núm. 2 (2007): 342-353
quien insiste en el desarrollo de una
arquitectura de tierra de muy alto nivel; y
de Al-derton, quien emplea la tecnología
del terrón en la vivienda unifamiliar de
gran porte. En la misma región, las
viviendas de adobe revocado de Merlini

orientada a sectores sociales más en la Argentina y las de tapia reforzada

pudientes, la iniciativa privada de Pereyra en Chile, se inscriben dentro
profesional y empresarial viene desarro- de esta orientación de diseño.
llando una fuerte apuesta a la producción Un poco más al norte, en el caso de
de una “moderna” arquitectura de tierra. la casa Garcés, construida en Quito
Las manifesta-ciones de esta tendencia (figuras 1 y 2), se han buscado un patrón
se pueden encontrar en la vivienda formal y un sistema constructi-vo que
unifamiliar de uso permanente, en la dialoguen convenientemente con el clima
vivienda de uso temporario y en local. Con un área de 289 m², consta de
346 construcciones del equipamiento – cuatro habitaciones con baño cada una,
quinchos, cobertizos, depósi-tos, sala comedor diario y de visitas, cocina,
salones–. estudio y zona de ser-vicio. En la
Los argumentos que soportan esta memoria descriptiva del proyecto, Ce-
modali-dad se basan en criterios distintos. vallos S. señala aspectos relativos a las
Por un lado, en genuinas preocupaciones premisas del diseño:
por una arquitectura sostenible, en alusión a Se halla en un valle con un micro clima
las reconocidas ventajas de la construcción caluro-so, por esta razón se ha
con tierra –bioclimatismo, construcción sin diseñado una vivienda muy abierta
contaminación, ahorro energéti-co, para poder refrescarla de manera
reciclabilidad–. Por otro lado, están natural y aprovechar corrientes de
Figuras 1 y 2: Vistas viento. Los muros son de tapial de 0.50
presentes también intereses más efímeros
de conjunto y de la sala
de visitas de la Casa como pueden serlo las modas del momento m de espesor y todas sus culatas se
Garcés, ubicada en El y los revivals, en los cuales la preocupación han construido de baha-reque, la
Arenal, Quito,
puede estar centrada en, por ejemplo, la cubierta está diseñada de madera con
Ecuador.
Autores del proyecto: imagen de lo rústico, o lo “regional” con un cielo raso de madera, un
Arq. Esteban Jaramillo. impermeabi-lizante, una loseta de
identidad local, o en cuestiones estatutarias
Autores de la obra:
y de jerarquía. Han aparecido nombres tales hormigón armado de 5 cm. de espesor
Ing. César Jaramillo, Ing.
Patricio Cevallos Salas. co- y un recubrimiento final de teja
Propietario de la obra: española de arcilla cocida (Cevallos
Dr. Diego Garcés.
Período de construcción Salas, 2006).
de la obra: 2003. En la escala de los conjuntos de
Autor:
vivienda, hay proyectos interesantes con
Patricio Cevallos Salas.
empleo de tecno-logía de tierra, como los
de Predock en el barrio La Luz en
Albuquerque, en la década de 1970, y los
de la empresa Adobe Construcciones s.a.,
en El Salvador, que desarrolla en la
actualidad propues-tas con btc revocado
en La edilicia
barr contemporánea
ios alcanza también a
cerr una gran
ado diversidad de
s. construcciones en
el campo del
A equipamiento y la
r infraestructura de
q
servicios, en
u
áreas urbanas y
i
rurales, con
t
mayor desarrollo
e
c
t
u
r
a

d
e
l

e
q
u
i
p
a
m
i
e
n
t
o

l
o
s

s
e
r
v
i
c
i
o
s
en los países “en vías de desarrollo”. Incluye de ado-be para zonas sísmicas en Ecuador, entre tantos d
edi-ficios del sistema educativo, del sistema otros similares. a
de salud, oficinas, salas de uso público y En la arquitectura para el sector salud hay también s
comunitario, edifi-cios del soporte de la una numerosa producción de arquitectu-ra de tierra nueva
producción rural –depósitos, silos, galpones, que busca expresiones locales. Por ejemplo, el Centro de n
criaderos, secaderos, fábricas–, edificios Salud de Qotowincho (Barrionuevo, 2005), construido con u
para la cultura –museos, centros cul-turales, quincha pre-fabricada y techos livianos, y el centro de salud b
teatros– y edificios en reservas y áreas Yucay del Programa Amares, resuelto con bóve- i
protegidas tales como centros de a
interpretación y bases de terreno. Los s
diseños de esta producción responden a
variados modelos de gestión que incluyen d
desde los más simples, impulsados por e
grupos y comunidades aisladas, hasta
aquellos multisectoriales más complejos, en a
los cuales par-ticipan instituciones públicas, d
comunitarias, ong o embajadas en apoyo o
técnico-financiero. b
En la arquitectura de estos e
edificios se pueden apreciar también ,
interesantes aportes proyectuales y
tecnológicos. A veces son el resul-tado s
de una cantidad considerable de años o
de investigación y desarrollo científico- n
tecnológico, en proyectos que han
logrado continuidad tem-poral, y en a
otros casos surgen de situaciones de l
emergencia producidas por catástrofes g
naturales que obligan a planes de u
reconstrucción con plazos inmediatos. n
Dentro de este ámbito, el Sistema de a
Escue-las Rurales del Perú, serp, es un s
caso interesante desarrollado en la
década de 1970 en la emergen-cia p
causada por el sismo. La gestión del r
gobierno peruano contó con la asistencia o
de un experto de la Unesco, el arquitecto p
Miguel Cangiano, y se diseñó con la u
premisa de construir edificios escolares e
con rapidez pero acordes con las con- s
diciones del aislamiento propio de estas t
zonas rurales. Así, la propuesta combinó a
el montaje rá-pido de la cubierta metálica s
con la construcción posterior de los
cerramientos –muros de adobe–, con una i
modulación que permite flexibilidad n
formal y de crecimiento. En obras más t
recientes del sector educación se sigue e
construyendo con tierra, incorporando r
innovaciones en el diseño y la tecnología e
constructiva, como es el caso de los s
proyectos de Cevallos S. de aulas nuevas a
n
tes en zonas edificios públicos de tierra construi-dos
sísmicas del Perú. en Auroville, India. Los mencionados son
En los edificios dos de los tantos casos impulsados por
para la cultura, su gobiernos y organizaciones de países “en
diseño refleja vías de desarrollo” que se vienen
igualmente la realizando por todas partes y que
preocupación articulan tradiciones y recursos locales
proyectual por con nue-vas tecnologías y participación
encontrar una de especialistas.
arquitectura de tierra Otras obras asumen el carácter de
“moderna”. En algunos edificio-prototipo para cumplir un rol
casos la imagen final demostrativo como centros de
aclara una inten-ción entrenamiento y formación. En algunos
de identificarse con lo casos estos modelos surgen gracias al
local, como ocurre por apoyo del sistema científico-tecnológico y
ejemplo con el museo universitario arti-culado con instituciones
de San Pedro de oficiales y comunitarias locales. La Estación
Atacama, en Chile, con Científica Pozuelos, ecip, en la Reserva de
muros de adobe a la Biosfera Unesco “Laguna de Pozuelos”
vista y techos de (Rotondaro, 1996, pp. 32-38) y el Centro
madera y paja, y en Regional de Investigación de Arquitectura
otros casos se emplea de Tierra Cruda, Criatic, en la Universidad
tecnología tradicional Nacional de Tucumán (Mellace, 2003, pp.
pero con mejoras, 36-37), en la Argentina, son dos casos
como se observa en el representativos de estas propuestas. 347
centro cultural del En el caso del centro de Tucumán
Tantanakuy infan-til de (figuras 3 y 4), cinco cuerpos definen en una
Humahuaca, superficie aproxi-mada de 600 m2 las áreas
Argentina, de adobe de administración, docencia,

arquitectura de tierra contemporánea

revocado, madera de experimentación y producción, y de
álamo y cubiertas de servicios, articuladas por una galería que
barro. bordea un patio central de exposiciones. Sus
En otros proyectistas señalan lo siguiente:
proyectos de mayor Su diseño arquitectónico-estructural
alcance tem-poral se tuvo en cuenta un solo nivel y
desarrollaron plantas sencillas, con diseños
propuestas que específicos y una estructura sismo
lograron producir una
arquitectura de tierra
nueva, iden-tificada o
no con las
condiciones locales,
en sus resultados
espaciales, formales,
tecnológicos y
estéticos. Es el caso
de construcciones de
adobe para secadero
de hortalizas y para
biblioteca en la sierra
central peruana,
donde intervino
craterre Perú, y de los
 Vista interior del sector rresistente particular para cada
de aula-taller del módulo. Desde lo formal se buscó la
Criatic-fau unt. Muros
de mampostería de integración del conjunto con las
btc y tapial, cubierta características edilicias del entorno.
de bóvedas de cañón
corrido con btc livianos. Autor: Dado el carácter de prototipo arqui-
Rafael Mellace. tectónico y constructivo, se combina el
uso la tierra cruda con materiales
naturales locales y materiales
industriales mediante la aplica-ción de
varios sistemas constructivos en muros
y techos: tapial, bloques comprimidos
de suelo-cemento (btc) y bloques
articulados de tierra estabilizada,
Sistema Lamars (batc), y mixto (quincha
y entortado en algunas cubiertas)
APUNTES vol. 20, núm. 2 (2007): 342-353

(Mellace, 2006).

Arquitectura y turismo

Aunque desde hace mucho tiempo la

construcción con tierra forma parte de los
emprendimientos tu-rísticos y de
Figura 3: arquitectura comercial, su reciente
Vista de conjunto “renacimiento” ha empezado a convertirse
–desde el patio– del
3 centro Criatic-fau en un insumo interesante para el consumo
4 unt, ubicado en la de luga-res con arquitecturas nuevas con
8 Facultad de
sesgo “local”, “regional”, “de la vida sana
Arquitectura y
Urbanismo de la en contacto con la naturaleza”. En esta
Universidad Nacional historia, la tierra y su tecno-logía ocupan un
de Tucumán,
Argentina.
lugar cada vez más buscado, en convivencia
Autores del con los históricos socios de la tierra: la
proyecto y piedra, la madera y los vegetales. Textura,
dirección
técnica: color, rusticidad, tradición, romanticismo,
Arq. Rafael F. tranquilidad, naturaleza y varios sustantivos
Mellace (Director)
más pueden ser conceptos clave en las
y GrupoTierra
Tucumán. premisas de diseño para definir la
Aportes materiales y arquitectura en viviendas de descanso,
financieros para la
cabañas, posadas, albergues, hoteles,
obra: fau unt, Consejo
de Investigaciones- restauran-tes, templos, galerías, granjas y
ciunt, Agencia
establecimientos turísticos. No en todos los
Nacional de
Promoción Científica casos el programa tiene intenciones
y Tecnológica, anpcyt, proyectuales orientadas en la
Secretaría de
Innovación
Productiva de
Tucumán.
Propietar
ios: unt-anpcyt.
Inicio de
construcción:
2004.
Au
tor
:
Rafael Mellace.

Figura 4:
bús d como propietaria decidió conservar, como
qu arquitectura. memoria de un paisaje natural que se
ed La arquitectura modifica acele radamente por la
a de las cabañas de colonización vitivinícola. Den-tro de
de Rogers y del hotel esta filosofía, la Capilla de la Gratitud
un Kooralbyn en se concibió también como parte de la
a Queensland, memoria, pero reformulada en clave
arq Australia, y los arquitectónica con-temporánea. La
uit proyectos para tipología retoma el concepto de capilla
ect hotelería de Hill, en andina tradicional: un recinto ce-rrado
ura la isla de Bali, son con muros gruesos de tierra y
bie ejemplos donde se ventanas pequeñas, para atenuar los
n pueden observar rigores del sol, y un atrio cercado al
log prolijos diseños que frente, que puede usarse como capilla
rad combinan la tapia a abierta. Entre ambos espacios se han
a; la vista con la interpuesto dos volúmenes ciegos, con
se madera, del mismo servicios, que permiten incorporar
ve modo que en un esculturas modernas, que sacralizan el
n restaurante en exterior y le dan escala y
ta Uruguay, contrapuntos. La materialidad escogi-
mb Etchebarne (2006, p. da, la tapia, viene de la historia
ién 7) lo hace pero con regional, pero ha sido actualizada para
obr adobe revocado y mejorar su compor-tamiento
as fajina. sismorresistente. Interiormente lleva
cuy En otro caso, cielorraso suspendido encañado y
a formando parte de un embarrado, formando un lucernario
pri proyecto turístico- longitudinal. El aca-bado interior y
nci cultural vinculado a la exterior deja la tierra en bruto,
pal industria del vino, en protegida con un hidrófugo que no
pre una zona de altera su expresión. La pureza y
ocu excelencia de la austeridad de la caja muraria se
pac Argentina, se acompaña con pisos de cemento
ión construyó la “Capilla alisado natural y cantos rodados, con
es de la Gratitud”, con el vidrios oscuros y desnudos, la puerta
el obje-tivo preciso de de algarrobo macizo, un altar de plomo
ma brindar un tributo al y piedra y bancos de madera de olivo
rke lugar por la actividad (Bórmida y Yanzón, 2006).

tin industrial que se

g, desarrolla mediante

per las bodegas de la

o firma, a modo de

de agradecimiento.

du En la memoria
dos descriptiva los
a autores del
cali proyecto indican
da que
Esta capilla está
situada al pie de
los Andes, en
una reserva de
flora y fauna que
la empresa
El proyecto en zonas con riesgo sísmico bloques, con encastres horizontales y d
verticales, huecos, salientes y quiebres, i
La importancia del tema ha generado una que se fabrican con bloqueras y equipos s
etapa de investigación y experimentación adaptados a estas exigencias. El sistema de e
sistemáticas en las últimas décadas. A muro reforzado con bloques Irpha-Ram ñ
partir de ella surgieron avances en varias diseñado por Albarracín y su equipo (2006, o
direcciones del diseño y la tecnología de p. 35) para zona sísmica en la Argentina es
las construcciones de tierra con el fin de un ejemplo de los cambios men-cionados. b
mejorar su comportamiento en las zonas En el caso de las tapias, propuestas i
mala, el sistema o
sísmicas. Hay cambios en los programas como las de Minke para la vivienda social
de Componentes c
y en las formas de proyectar y de en Guate-
Estructurales con l
construir edificios nuevos, así como
Tierra Armada, cet, i
también se impulsan ideas y soluciones
para mejorar las construcciones exis-
del Perú y la m
tentes en el hábitat popular, empleando Capilla de la á
métodos e instrumentos accesibles a sus Gratitud descrita t
moradores. más arriba, i
Desde un punto de vista incorporan c
diseños, o
arquitectónico, estos cambios crean
algunas limitaciones en las aspectos modulaciones y
Se
morfológicos, a partir de recomen- refuerzos que de
algún modo asoc
daciones tales como la simetría de
modifican la ia
formas, de cargas, el centrado de
arquitectura de frec
aberturas en los muros y la conveniencia
tierra en su uent
de construir una sola planta. Sin
expre-sión final. eme
embargo, ello no invalida la posibilidad
Otras iniciativas nte
de crear arquitectura: en todo caso es un
interesantes son la
nuevo desafío para la actividad
los diseños del arqu
proyectual, que debe considerar como
prioridad la seguridad de las personas. En “domocaña” itect

este sentido, desde los diseños más peruano para ura

simples de vi-vienda o equipamiento resolver techos de

hasta los edificios de gran porte, se está livianos en la tierr

demostrando que se puede hacer vivienda social, y a
arquitectura de tierra con aceptables las fajas de con
márgenes de seguridad en zonas revoque sobre la
sísmicas. malla para arqu
Son singulares en este ámbito el reforzar la itect
“superado-be” propuesto por Khalili en la vivienda de ura
década de 1980 para construcciones con adobe existente biocl
bóvedas y cúpulas, y la solución del muro que experimenta imát
de adobes cuadrados armado con cañas la Pontificia ica.
del Ininvi peruano. Este último es un diseño Universidad Si
que se ha replicado en cantidad de obras Católica del Perú bien
y en diversos países, en especial en (Blondet et al., los
proyectos para la vivienda social. Es el 2005, pp. 240- pun-
caso de los prototi-pos de Fundasal, en El 241). tos
Salvador, y de los barrios del Fondo de
Nacional de la Vivienda, Fonavi, en la Arqui cont
Argentina. tectur acto
También cambió el componente a de son
básico de las mamposterías de tierra: tierra muc
aparecieron cantidad de formas de y
hos,
que un edificio esté hecho en tierra no Figura 5:
Esquema axonométrico de la Capilla de la Gratitud,
implica automáticamente que es
ubicada en el Alto Valle de Uco, Tunuyán, Mendoza,
bioclimático, así como también si una parte Argentina. Superficie: 225m2.
ínfima de un edificio bioclimático está Autores del proyecto y dirección técnica: Bórmida y
Yanzón, arquitectos.
construida con tierra no significa una
Asesor en arquitectura de tierra:
arquitectura de tierra. Arq. Rodolfo Rotondaro. Cálculo Estructural: Ingenieros
Elías Japaz y Mayin Mayol.
Autores de la obra: Empresa Constructora Santiago
Monteverdi Construcciones Civiles s.a.
Propietarios:
Bodega Salentein.
Período de
construcción:
2004-2005.
Fuente:
Bórmida y Yanzón, arquitectos.

Figura 6:
Vista del frente de la Capilla de la Gratitud, Mendoza,
Argentina.
Fuente: 349
Bórmida & Yanzón, arquitectos.

Figura 7:
Vista interior de los muros de tapial visto, altar de
piedra y cruz calada en placas de plomo, en la Capilla

arquitectura de tierra contemporánea

de la Gratitud, Mendoza, Argentina.
Fuente:
Bórmida y Yanzón, arquitectos.
 Figuras 8 y 9: elegimos un área donde podíamos
Vistas de conjunto e hacer un corte en el terreno con dos
interior del Atelier
Marcos Guimaräes, objetivos: semi-enterrar el edificio y
ubicado en la ciudad de recolectar tierra para la construcción
Valinhos, a unos 70 km
de las paredes. Las paredes de suelo-
al Nordeste de San
Pablo, Brasil. cemento monolítico poseen un espesor
Autores del proyecto:
Arq. Lourenço Dantas-
Arq. Eduardo Salmar.
Autor de la obra: Arq.
Eduardo Salmar.
Propietario:
Sr. Marcos Guimarães.
Período de
construcción:
Enero a agosto de 1989.
Autor:
Eduardo Salmar.
APUNTES vol. 20, núm. 2 (2007): 342-353

No tiene sentido forzar el diseño para

afirmar que todo edificio hecho en tierra
debe ser bioclimático, o viceversa. Lo que sí
resulta interesante es la po-sibilidad de un
diseño acorde con los conceptos del
bioclimatismo, y que su tecnología
aproveche las ventajas que la tierra ofrece
como material.
350
Los edificios de tierra, por su lado,
pueden lograr un comportamiento de
confort muy ade-cuado si en su diseño se
consideran los inter-cambios edificio-clima-
entorno; tienen ventajas comprobadas en
este sentido por su capacidad de
acumulación de calor solar y de regulación
higro-térmica. En este ámbito temático, son
anteceden-tes interesantes la Karen Terry
House y las obras del grupo dirigido por
David Wright en Estados Unidos, en la
década de 1970, así como también obras
recientes como el atelier de Guimaräes en
Brasil. En el caso de este último (figuras 8 y
9), se trata de un singular atelier de pintura
construido hace casi dos décadas, que
aprovecha las venta-jas térmicas y estéticas
de la tierra planteando una envolvente de
tapia a la vista.

En la descripción del proyecto,

Salmar des-taca lo siguiente:
El atelier de tierra construido para el
pintor Marcos es un edificio proyectado
para un perfecto funcionamiento
térmico y esta era una condición
fundamental para la pintura de frescos
a desarrollar por el pintor y tam-bién
propietario de la obra. Primeramente
d n pilares de y escalonada en escalones, para que el
e hormigón armado cerramiento de esos vanos fuera hecho
que hacen el con ladrillos de vidrio, creando así una
3 amarre vertical iluminación zenital para el interior, muy
0 de las cuatro favorable para el trabajo del pintor
paredes. Las (Salmar, 2006).
c paredes tienen Más reciente, otra cantidad importante
m aberturas con vi- de pequeñas obras reafirman una voluntad
drios estrechos y de experi-mentar con la tierra y la energía
y altos, permitiendo solar, en edificios de pequeño porte,
la entrada de luz públicos y privados, urbanos y rurales,
a natural en fajas como por ejemplo el Jardín de Infan-tes y
l verticales, Centro Comunitario en Rosario, Argentina,
t evitando la diseñado por Di Bernardo, Araya y Cortés,
u incidencia del sol cuya envolvente es un muro Trombe con
r por largo tiempo
tapia.
a en las telas, al
mismo tiempo El impulso de la innovación tecnológica
m que hay una
e entrada de luz en La arquitectura de tierra contemporánea
d las caras norte, se ha visto influida en parte por los
i sur y este, desarrollos cien-tífico-tecnológicos que
a evitando el uso surgieron en las últimas décadas a escala
de iluminación global. Los avances se origi-naron a partir
d artificial durante del conocimiento en profundidad del
e el día. La ven- material y sus propiedades –con
tilación es importantes aportes desde la química–,
5 cruzada en como también a partir del estudio del
sentido comportamiento físico-mecánico,
m longitudinal del estructural y de durabilidad de las
. atelier con las construcciones de tierra. El repertorio de
L aberturas a partir prensas, encofrados y equipamientos que
a de los 2,5 m del se han venido inventando des-de mitad
s nivel del piso del siglo xx acompañan estos cambios en
c interior. Las la tecnología y en la arquitectura.
u paredes al Una de las “vedettes” es el btc, el
a interior recibieron bloque de tierra comprimida, con
t pintura blanca a variedad de diseños que son empleados
r base de cal principalmente en las propues-tas para el
o permi-tiendo que hábitat social en los países “en vías de
la pared ‘respire’
desarrollo”. Aunque se usó en Europa en
e al mismo tiempo
la ii
s uniformizando la
q iluminación
u interna. Para una
i luz de 7,5 m de
n largo del atelier,
a proyectamos una
s cubierta con una
t losa de hormigón
i arma-do
e directamente
n apoyada en las
e paredes de tierra
Guerra Mundial en situaciones de interior. En Colom-bia se construyen paredes y techos en cúpula u
emergencia, su difusión y empleo empleando entramados de guadua y tierra, con interesantes s
masivos comienzan en la segunda mitad repertorios formales y estéticos, y en Chile, Cortés construye con un a
del siglo xx, con la revolución que inició la sistema de quincha empleando estructuras metálicas, tierras y cal.
d
mítica Cinva-Ram de Ramírez y el centro Otras realizaciones aportan ideas no tan convencionales
a
Cinva de Colombia. El btc ha influido mucho pero son igualmente innovado-ras, como los earthships –naves
s
en la arquitectura de tierra y lo sigue de tierra– de Reynolds en Nuevo México, que emplean llantas
haciendo. Es uno de los componentes
básicos que más posibilida-des de y
aceptación social tiene, tal vez porque se
asemeja a los componentes de los muros o
conven-cionales industrializados –ladrillo t
cocido, ladrillo hueco, bloque de r
hormigón–. En la actualidad hay muchos o
fabricantes de btc y los diseños de las s
prensas y los equipos necesarios se
adecúan al tipo de producción buscado,
m
aunque por lo general se trata de
a
producciones de pequeña y mediana
escala. t
El barrio piloto francés Le domaine e
de la terre y los equipos especializados r
de la empresa alemana Kirschbauhof son i
casos interesantes de tecnología del btc, a
así como también en La-tinoamérica se l
han desarrollado muchas expe-riencias. e
Dentro de ellas se puede mencionar el
s
“tijolito” del Sistema Andrade Gutiérrez y
las pren-sas Sahara en Brasil, el Ado-
d
bloque fabricado por Ital-mexicana y el btc
del centro cta de Paraguay, y las e
experiencias del bloque Mattone y el
centro Cecovi en la Argentina, entre otros. d
La tapia también ha tenido e
interesantes avances en sus diseños y s
aplicaciones. Prin-cipalmente, en la c
sistematización del proceso constructivo a
y en el diseño del equipamiento. La
r
moldería es como un mecano con piezas
t
adecua-das para tramos rectos, esquinas
e
y encuentros de muros. Los dispositivos
de montaje y desmolde se diseñan para
ahorrar tiempos constructivos; con r
pisones neumáticos y un molde con e
altura de din-tel se puede levantar una l
tapia en pocos días. l
En el caso de los sistemas mixtos, e
apare-cieron prefabricaciones de n
entramados, como la quincha peruana del
a
Instituto Ininvi, con pa-neles livianos de
d
madera y caña entrelazada, y la fajina
o
uruguaya trabajada por Etchebarne y su
grupo, que es empleada en muros de s
envolvente como también en tabiquería
y revocados con serio como es la creación de una casa
tierra. (citado en Steele, 1988, p. 8).
En la opinión de muchos otros autores
Comentarios de síntesis: la tierra y constructores, hay coincidencia en la
en el futuro del visión sobre las potencialidades de la
hábitat, un desafío arquitectura de tierra en tanto aporte
de la cultura posible para el hábitat social, así como
también por la menor contaminación del
La arquitectura de ambiente.
tierra, en tanto La arquitectura de tierra “avanza” en di-
expresión de la cultura, ferentes direcciones, las cuales se vinculan y
es una parte necesitan cada vez más porque se están
importante del hábitat comple-mentando. La vivienda de interés
construido, ya no hay social de bajo coste en zonas sísmicas debe
dudas sobre ello. resolver su diseño particular para tener un
Pareciera también que comportamiento acep-table frente al sismo; la
está empezando a ser restauración de un friso hecho en arcillas
considerada cada vez locales necesitará posiblemente del auxilio
más como una del ensayo químico de laboratorio para
alternativa conveniente fabricar un material similar; y así podríamos
para el hábitat del se-guir enunciando cantidad de temas que
futuro. Sin titubeos, reflejan esta situación.
Fathy re-flexionaba con También hay que decir que existen situa-
claridad sobre la ciones conflictivas y desfases que afectan a la
magnitud de la tierra arquitectura de tierra. Dentro de ellos
351
como material de la podemos mencionar las diferentes visiones e
arquitectura: intereses sobre el tema, la competencia con
El lugareño el mercado convencional de la construcción,
construye sus casas el énfasis en lo tecnológico, las carencias y
mediante ba-rro, o

arquitectura de tierra contemporánea

ausencias en la planificación, y las
con ladrillos de dificultades relativas a cómo
barro, los cuales
obtiene del terreno
y seca al sol. Y aquí,
en cualquier lugar
en Egipto, está la
respuesta a mi
proble-ma. Aquí, por
años, por centurias,
el lugareño ha
venido sabia y
tranquilamente
explotando los
obvios materiales
de construcción,
mien-tras nosotros,
con nuestras
modernas ideas
aprendidas en
escuela, nunca
soñamos en el uso
de una ridícula
sustancia como el
barro para algo
 mejorar todo el hábitat construido en folklorismos, y por otra parte, una nueva
tierra que ya existe en las zonas credibi-lidad que aleje aquellos tabúes y
sísmicas. confusiones sin fundamento científico,
Es bastante común, además, que se técnico o ético.
asocie solamente como “modernos” y de Las posibilidades de una
calidad los pro-ductos de la innovación arquitectura de tierra de cara al futuro
tecnológica que cumplen las normas pueden incluir distintos ámbitos y
establecidas, evadiendo la dimensión modalidades: arquitectura domésti-ca,
arquitectónica y de hábitat construido arquitectura de la vivienda,
que tiene la arquitectura de tierra. arquitectura del equipamiento
De todos modos y así exista una comunitario, arquitectura de la
planifica-ción concertada, tal vez hasta infraestructura de servicios,
que no confluyan en una misma dirección arquitectura indus-trial, arquitectura
el pensamiento colectivo y sus escolar, arquitectura hospita-
paradigmas de progreso con la voluntad y
APUNTES vol. 20, núm. 2 (2007): 342-353

los intereses de políticos, planificadores y

decisores, se seguirá creciendo por
“pulsos”. Un claro indi-cio de que esto
aún no ocurrió es la escasez de normativa
y la dificultad por lograrla, en general,
tanto en países “desarrollados” como “en
vías de desarrollo”.
Los organismos oficiales
productores de di-seños y de obras de
vivienda están todavía muy
352
condicionados por varios aspectos: las
dudas sobre la durabilidad y la
resistencia, la acepta-ción social, la
sanidad… Pareciera que la imagen de
la vivienda tiene que ser similar a la
vivienda industrializada producida
habitualmente por concurso público y
ejecutada por una empresa
constructora.
Las políticas oficiales de vivienda
emplean sistemas constructivos con
tierra, pero por los pre-juicios que aún
existen siguen utilizando premisas de
diseño que tienen que ver con, por
ejemplo, requerimientos de imagen y de
estatus –“hay que revocar el adobe”, “si
tiene estiércol tendrá olor y bichos”,
entre los comentarios más comu-nes–, y
han generado diseños particulares.
Sin embargo, es significativo el
hecho de que coexistan dos desarrollos
importantes en el campo de la vivienda:
el de los modelos para el “hábitat social”
junto con los de la edificación pri-vada,
que siempre se asocia a algo de “mejor
cali-dad” y representa poder y estatus en
el colectivo social. Esta situación permite,
por una parte, una puesta en valor del
material sin exageraciones ni
laria, arquitectura del ofertas dig-nas posibles en su contexto. Las
turismo. No es demasiado mayorías debe-rían poder elegir –y acceder a
arriesgado decir también la vivienda– dentro de una diversidad de
que las posibilidades de modelos y expresiones que se deberán
desarrollo que brinda la “inventar” siguiendo el camino de los
tierra como arquitectura, modelos alternativos existentes.
para las zonas urbanas y Asociado al anterior, existe el desafío de
periurbanas, aún no ha legislar para poder contar con una normalización
sido considerada de fácil acceso y reconocida internacionalmente,
seriamente ni explotada. adecuada y suficiente para apuntalar la
En esta situación y confianza en la tierra como material
contexto actual, hay que constructivo. Si bien hay avances importantes
destacar que un resultado en diversos países y con-textos de aplicación, las
muy interesante de la normas establecidas no alcanzan para la tarea
cooperación internacional en el terreno gubernamen-tal, ni como
es la generación de instrumentos de confiabilidad para la sociedad y
productos y ac-ciones sus organizaciones. Es el caso de la normativa
demostrativas, por su específica para construir con tierra en zonas
efecto multiplicador y sísmicas, cuyo debate forma parte de la agenda
formativo, y que en de muchos países, así como también el caso de
muchos casos apunta por la poca credibilidad en cuanto a las resis-tencias
sobre todas las cosas a y la durabilidad de las construcciones de tierra,
demostrar que la algo que se refleja en los códigos y normas
arquitec-tura de tierra nacionales.
tiene un potencial
extraordinario. Otro de los desafíos es la posible
Teniendo en cuenta industriali-zación de los sistemas
estos comentarios de constructivos con empleo de tierra cruda, ya
síntesis, en el presente sea por cuestiones asocia-das a la imagen, al
de la arquitectura de descrédito tecnológico, a la conveniencia
tie-rra aparece una económico-empresarial y política, o a la
problemática que refleja combinación de varias de estas razones.
dimen-siones y escalas
que caracterizan a los
grandes desafíos que
enfrenta. Uno de ellos
es lograr que la
construcción con tierra
sea valorada por parte
de los amplios sectores
sociales de menores re-
cursos como una
alternativa confiable y
de hábitat digno, en el
campo de la autogestión
y la autopro-ducción de
la vivienda. Es uno de
los extremos del
problema: por un lado,
las mayorías pobres
quieren vivir en una
casa igual a la de los
ricos, pero, por otro
lado, tampoco tienen
Pese a los intentos, éstos son Barrionuevo, R. (2005). “Proyecto de desarrollo en Qotowincho”. Bór
dispersos; la edi-ficación con tierra no Libro Terra en Seminario. iv siacot-proterra cyted (pp. 156-159). m
forma parte del mercado convencional Lisboa, Portugal. i
de la construcción en la mayoría de los Blondet, M., Vargas, J., Tarque, N. y Velásquez, J. (2005). “La tierra d
países. armada: 35 años de investi-gación en la pucp”. Libro Terra en a
Un cuarto desafío es poner en valor Seminario. ,
las ven-tajas ecológico-ambientales de la iv siacot-proterra cyted (pp. 240-241). Lisboa, Portugal.
construcción con tierra en cuanto a la E
reducción de la conta-minación ambiental .
y el gasto energético en rela-ción con la
producción de edificios, y en cuanto a la y

posibilidad de su reciclado como material

Y
–al menos en un alto porcentaje–.
a
También, y en una dimensión que
n
abarca de modo transversal a los anteriores,
z
uno de los desafíos más importantes es
ó
lograr instalar en la educación técnica y
n
universitaria la formación de recursos
,
humanos, de manera responsable, en
cuanto a las ventajas y las limitaciones de la
M
tierra como material y como arquitectura.
.
La circulación de información calificada y la
realización de cur-sos y seminarios son muy (
numerosas, pero, para-dójicamente, en 2
pocas escuelas de arquitectura, ingeniería y 0
tecnología, la temática está integrada a sus 0
programas formales de enseñanza. 6
Tal vez hoy el principal motor del )
impulso que mantiene la arquitectura de .
tierra sea el para digma de la
sustentabilidad, con el fundamento “
que le otorgan sus ventajas ya M
comprobadas. Y tal vez cabe pensar e
que esto ocurrirá cuando la m
sustentabilidad del planeta sea el o
interés común de los distintos sectores r
de poder y de las socie dades, para i
a
que lo que por ahora se consolida co-
mo tendencias de desarrollo, pueda
d
evolucionar a la “categoría” de
e
movimiento que caracterice a la
s
construcción del hábitat humano
-
durante el siglo xxi.
c
r
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Argentina”. (s. d.).
Neves, C. (2004). “Proyecto
6 proterra/cyted”.
 Arquitectura de
tierra Resumen
Este trabajo reflexiona sobre las principales
contemporánea: tendencias que surgieron en la Arquitectura de
tendencias y desafíos Tierra en las últimas décadas y los desafíos
actuales en este campo a escala global. Se
seleccionaron proyectos y obras de distintos
(págs. 342-353) contextos geográficos y culturales, con énfasis
en el hábitat latinoamericano, con el fin de
identificar distintos modos de proyecto,
construcción y producción de edificios de tierra.
Se consideraron distintas posiciones sobre los
alcances

Rodolfo Rotondaro
Universidad de Buenos Aires, Argentina
rotondarq@telecentro.com.ar
369-383

Arquitecto recibido en la Universidad Nacional de Mar

del Plata,
2(2007):

de la Construcción en Tie rra, crat erre, de la Escuela de Arquitectura

Argentina (1980), con título de magíster del Centro

Internacional
de Grenoble, Francia (1986). Actualmente es
Investigador Inde-
núm.

pendiente del Consejo Nacional de Investigaciones

Científicas y
20,

Técnicas, conicet, y Profesor Adjunto de la Facultad de

Arquitectura,
vol.

Diseño y Urbanismo de la Universidad de Buenos

Aires, fadu uba.
APUNTES

Es Director del Programa de Investigación “Arquitectura

y Constru-
cción con Tierra”, Arconti, y de la publicación digital
“Construcción
con Tierra”, ambos con sede en el Instituto de Arte
Americano
de la fadu uba. Es también uno de los Directores de
Terrabaires,
382 Centro de Investigación y Asesoría en Arquitectura y
Construcción con Tierra, con sede en la Ciudad de
Buenos Aires. Especializado desde 1986 en la
investigación y el desarrollo de la Arquitectura de Tierra,
trabajó en distintos proyectos y obras en áreas rurales y
urbanas de la Argentina, en temas vinculados con la
vivienda de interés social, edificios institucionales,
tecnología en áreas prote-gidas, y desarrollo de
elementos constructivos de bajo costo. Ha sido asesor
de distintas entidades públicas y privadas de su país de
residencia. Ha dictado seminarios y cursos de
capacitación teórico-prácticos y ha realizado tareas de
transferencia de tecnología en la Argentina y en otros
países de la región. Ha publicado más de cuarenta
trabajos científicos y de divulgación general, como único
autor y en coautoría, en revistas especializadas y en
enciclopedias internacionales tales como Biosfera y evaw.
Realiza sus estudios de doctorado en la Facultad de
Arquitectura, Diseño y Urbanismo, Universidad de
Buenos Aires.

Recepción
18 de enero de 2007

Evaluación
30 de septiembre de 2007

Aceptación
16 de noviembre de 2007
del material “tierra” y sus manifestaciones en el hábitat social, y
su vinculación con la teoría de la sustentabilidad. Se encuentran
avances importantes en el campo de la vivienda, en edificios del
equipamiento urbano y en las recomendaciones para construir
en zonas sísmicas. También en el proyecto de una arquitectura
bioclimática, en las iniciativas para la infraestructura turística y
en la innovación tecnológica enfocada en el estudio del material
y el comportamiento de los sistemas constructivos. Como líneas
futuras de investigación aparecen la normalización de la
construcción con tierra con miras a la industrialización de
sistemas y procesos; la innovación tecnológica orientada a
mejorar el parque habitacional existente en zonas sísmicas; la
enseñanza y la capacitación en to-dos los niveles educativos; y
la generación de modelos alternativos apropiados en la
autogestión y la autoproducción de viviendas en el hábitat
popular.

Palabras clave del autor

Arquitectura de tierra, contemporánea, tendencias,
hábitat, sustentabilidad.

Descriptores*
Construcciones de adobe – Investigaciones
Construcciones antisísmicas - Pruebas
Arquitectura – Innovaciones tecnológicas

Contemporary earthen architecture:

trends and challenges
Abstract
This article reflects on the principal tendencies in earthen
architecture during the last decades and the actual challenges in
this field at a global scale. Projects from several cultural and geo-
graphical contexts were selected, emphasizing on Latin America,
in order to identify different ways of constructing and producing
buildings of earth. Several opinions on the reach of earth as a
bu-ilding material, its manifestations in social housing and its
links to the theory of sustainability are considered. Important
advances are found in the fields of housing, public buildings,
recommendations for construction in seismic regions, bioclimatic
architecture, tourism infrastructure initiatives and technological
innovation focused on the study of materials and their behavior
in construction systems. As future research subjects are
recommended: normalization of construction with earth towards
the industrialization of systems and processes; the technological
innovation oriented at improving existing dwellings in seismic
regions; education at all levels; and the creation of alternative
models of do-it-yourself building in so-cial housing.

Author Key Words

Earthen architecture, contemporary, trends, habitat,
sustai-nability.

Key Words Plus*

Building, adobe - Research Earthquakes
and building - Testing Architecture -
Technological innovations

* Los descriptores y key words plus están normalizados por la

Biblioteca General de la Pontificia Universidad Javeriana.