Ted A. Villanueva Torres.

A01273562
Ana Paulina Montes Robles. A01375804
Aldo Labra Rueda. A01749029
Análisis y Expresión Verbal Gpo. 18
Trabajo escrito para Debate

Mexicano, mexicana. Adj. nombre masculino y femenino. Persona que es solidaria.

Esta crisis humanitaria en forma de caravana está integrada por más de 3,000 personas, entre
menores edad, mujeres y adultos mayores, quienes vienen huyendo de una ola de violencia, de
la pobreza, y graves violaciones a sus derechos humanos; motivos por los cuales se encuentran
en un estado de urgente necesidad. Durante esta travesía de migrar de su lugar de origen a
otro, por huir de la agravante situación en la que están, arriesgan su salud, su integridad y en
ocasiones hasta la vida.

Cifras de la ONU dan cuenta de cerca de 3,000 personas, que son quienes integran esta
caravana migrante que partió el pasado 13 de octubre de San Pedro Sula, Honduras. Son más
del 68% de la población, aquellos que viven en condiciones de pobreza en Honduras y otros
países de origen, a quienes les es difícil pagar aquellos servicios que son los que garantizan
nuestros derechos humanos, como los disparados precios de la canasta básica, el alto coste del
consumo de energía eléctrica, hasta pago por agua potable, todas estas condiciones que han
conformado la realidad de todas las personas que huyen de su país. El presidente de los Estados
Unidos, Donald Trump, ha condenado los actos migratorios de estas personas, además que ha
amenazado a los gobiernos de los países de origen de los migrantes, con retirar el apoyo
económico que el gobierno norteamericano les brinda para el caso de que estos no detuvieran
y contuvieran la masa de migración ilegal que se ha desatado en días anteriores; ello a pesar de
la grave responsabilidad que su gobierno ha tenido en las situaciones particulares de cada país.
El gobierno mexicano ha calificado esta situación, como “una situación inédita” y a pesar de
haber anunciado que no permitirá la entrada de los migrantes de manera irregular y mucho
menos de manera violenta, por medio de los organismos correspondientes, ha manifestado su
apoyo y como siempre reiterando su solidaridad y compromiso con la comunidad mundial, tal
y como lo expreso el Comisionado General de la Policía Federal, Manelich Castilla Craviotto,
“Si tienen visa, podrán pasar, si tienen otra situación, que es lo que me he enterado por los
medios, de que hay gente que viene huyendo y a solicitar refugio, México se ha caracterizado
por dar refugio, siempre y cuando nos permitan hacer nuestro trabajo” (Ramírez, 2018), no
obstante; puede que México no se encuentre la mejor posición ni en su mejor momento para
ayudar a una crisis externa, ya que existen algunos indicadores que arrojan que “que la pobreza
continúa siendo un problema apremiante en México. La tasa de bajos ingresos que captura la
tasa de pobreza después de impuestos y transferencias para la población de 18 a 64 años, se
situó en 13.9% en 2015, colocando al país detrás de Chile en la OCDE.” (Staff, 2018);
información que nos muestra que tal vez el 68% de nuestra población no está en situación de
pobreza, como es el caso de Honduras y otros países centroamericanos, pero si el 43.6% de
nuestra población es la que se encuentra en situación de pobreza, lo que significa que 4 de cada
10 habitantes tiene esta condición. (Castro, 2018).

De lo antes enunciado se desprende el objetivo de análisis que persigue y atiende el

presente trabajo, para dar respuesta y justificación al cuestionamiento social que ha producido
esta situación, debido a las diversas posturas adoptadas por los gobiernos de otros países,
como el de el actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, quien ha denegado la
colaboración de su país y el acceso a este para los migrantes que forman la caravana. Es a raíz
de ello, que se ha desatado el cuestionamiento para saber cual es la postura de nuestro país,
en los diferentes aspectos como son el social, económico y político, ahondando un poco hasta
develar cual es la responsabilidad y obligaciones que ha contraído nuestro país en materia legal
y contractual, ello devenido de sus legislaciones y de los tratados internacionales y
convenciones en las que este es parte. Luego entonces, partiendo del panorama mundial que
tiene la presente controversia y comprendiendo la situación propia de nuestro país es que se
hace el presente análisis, confrontación de ideas y postura.

Se debe empezar por analizar cual es la posición en la que se encuentra México en

materia de migración y política, en torno al panorama mundial, ya que vivimos en un mundo
globalizado. Dicha postura encuentra su fundamento en el articulado y contenido de normas
internacionales, que incluyen la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948, los
cuatro Convenios de Ginebra (1949) sobre el derecho internacional humanitario, la Convención
de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados así como en su Protocolo de 1967, además de una
multitud de tratados y declaraciones internacionales y regionales, vinculantes y no vinculantes,
que abordan específicamente las necesidades de los refugiados, tratados de los cuales el
estado mexicano es parte. En las declaraciones y tratados antes enunciados, los estados
contratantes están sujetos a garantizar el bienestar, a salvaguardar la vida de cualquier persona
que entre en calidad de refugiado, donde establecen que de ninguna manera deberán devolver
o expulsar a las personas refugiadas en su país ni colocarles en situaciones donde su vida peligre
por causa de la alteración del orden público y graves violaciones a los derechos humanos a los
que pudiese quedar expuesto. (Unidas, 1951), específicamente la Convención de 1951 abarca
las cuestiones referentes a sus derechos, tales como la adquisición de bienes, el derecho a un
empleo remunerado, a una vivienda digna, a la asistencia pública y a la legislación del trabajo
y seguros sociales en vigor para el país, contenidas en los artículos 13,17,18,19,21,23 y 24
respectivamente; así como de igual manera en su artículo segundo este indica que “cada
refugiado tiene deberes respecto del país donde se encuentra, y debe respetar las leyes y los
reglamentos vigentes, así como las medidas adoptadas para mantener el orden público”
(Unidas, 1951, pág. 3). Entonces sería menester del Estado Mexicano el garantizar los derechos
de conformidad con las normas y leyes internacionales de las que este es parte.

Así como en su homologa legislación mexicana, la Ley Sobre Refugiados, Protección

Complementaria y Asilo Político, la cual en su articulo 13º nos dice que recibe y se reconoce la
condición de refugiado a aquel que ha huido de su país de origen, porque está en peligro su vida
por violencia generalizada y conflictos internos, por violación masiva de los derechos humanos
u otras circunstancias que hayan perturbado gravemente el orden público (Unión, 2011, pág.
4), así como ordena que ningún refugiado podrá en modo alguno ser rechazado en cualquier
frontera o devuelto a su país de origen o al territorio de otro país donde su vida peligre y que
basta con el simple hecho de que existan razones fundadas para considerar que estaría en
peligro de ser sometido a tratos inhumanos o degradantes (Unión, 2011, pág. 3). Para actualizar
este supuesto que establece la ley es de citar una testimonial que dice: "Yo no quise salir en la
primera caravana. Pero, la semana pasada, las maras me amenazaron y decidí irme de
Honduras" (Rojas, 2018), explico Carlos, uno de los integrantes de la caravana migrante para la
cadena de noticias BBC; es entonces que el caso de las personas que están en nuestro país,
provenientes de países centroamericanos que sufren de estas condiciones, encuadra dentro de
los supuestos de las legislaciones locales e internacionales. De lo anterior se desprende la
responsabilidad que tiene México con la comunidad mundial y con los migrantes que arriban a
nuestro país en calidad de refugiados.

En materia laboral, por lógica se argumentaría que la migración tiende a elevar la tasa
de desempleo y a reducir los salarios de los trabajadores nativos, debido a que los inmigrantes
incrementan la demanda laboral y compiten por los puestos de trabajo con los trabajadores del
país receptor, por lo que algunos de estos pueden ser desplazados y ver sus salarios reducidos,
a pesar de ello; un estudio de campo realizado por el Consejo Nacional de Población indica que
la eventual disminución de los salarios de los trabajadores nativos, atribuible a la oferta laboral
de inmigrantes en ciertos sectores económicos, es esencialmente trivial o inexistente, ya que
la demanda de mano de obra inmigrante en el mercado laboral, comúnmente se concentra en
trabajos de baja remuneración y calificación, que regularmente los trabajadores nativos no
están dispuestos a aceptar. (CONAPO, 2018)

En materia social es de destacar que el gobierno federal saliente a cargo de Enrique

Peña Nieto, mediante un comunicado conjunto de la Secretaría de Gobernación y la Secretaría
de Relaciones Exteriores, ha ofrecido el plan Estás en tu casa que pretende otorgar atención
médica, educación, una CURP temporal y empleo temporal; este sería el primer paso para que
los inmigrantes obtengan la condición de refugiado en México, proceso el cual está
completamente regulado por dos premisas, la primera de ellas es que los que apliquen esta
solicitud deberán concentrarse en los estados de Chiapas y Oaxaca ; la segunda es que las
personas que soliciten el apoyo deberán presentar su solicitud ante el Instituto Nacional de
Migración y el trámite de este proceso será gratuito (Beuregard, 2018). Además de que a partir
del sexenio entrante van a aperturarse bastantes fuentes de empleo como la construcción del
aeropuerto de Santa Lucía, el Tren maya, la construcción de 300 caminos rurales, los cuales
requieren de bastante mano de obra en los estados de Oaxaca y Guerrero, obras las cuales en
concreto generaran más de 50,000 empleos. (Hernández, 2018).
Concluyendo, efectivamente México no cuenta con las mejores y más sanas estadísticas
referentes al empleo, la pobreza y la situación económica del país, estas arrojan datos que
podrían ser contradictorios a la “solidaridad” que nuestro país pretende, independientemente;
nos encontramos materia laboral con una situación en la cual los mismos nativos mexicanos
rechazan las ofertas laborales, dejando un espacio sin ocupar, el cual fácilmente podrían cubrir
los migrantes centroamericanos además de que como indicó Mark Manly, representante en
México de la ACNUR, “Hay muchas posibilidades en México y para un país de 125 millones de
personas no estamos hablando de un flujo muy importante de inmigrantes” (EFE, 2018); en
materia cultural se podría presumir que exista una relevancia y se superpondría la cultura de las
personas pertenecientes a la caravana migrante, sin embargo; tenemos decenas de países
como Estados Unidos, Canadá, Inglaterra entre otros, los cuales son países con raíces
multiculturales y son el claro ejemplo de que esto no ha de afectar a la población nativa; por la
cuestión económica se podría argumentar sobre el coste del traslado y estadía de los migrantes
en el país, ya que ello como visto en noticieros y otras fuentes de información representa un
gasto económico muy fuerte, en respuesta a esto cabe destacar que la ONU emitió un
comunicado en el cual dio a conocer que por medio de ACNUR está reforzando su capacidad
en el sur del país para brindar asistencia humanitaria, psicosocial, asesoría legal y todo tipo de
apoyo que el país requiera para la atención de los migrantes. (ONU, 2018) disminuyendo con
esto el gasto que pueda realizar el estado por ello recalcando que como siempre México se ha
caracterizado por dar refugio (Ramírez, 2018). Entonces discrepadas todas las controversias
que pueden surgir de si “México debería de dar asilo y refugio a los migrantes de la caravana”,
la respuesta claramente es afirmativa, independientemente de todos los factores que puedan
influir y partiendo desde un punto de vista humanitario, en pro de los derechos humanos y la
preservación de la raza humana, los cuales son intereses primigenios del hombre.

Bibliografía
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1.
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 http://www.conapo.gob.mx/work/models/CONAPO/intensidad_migratoria/pdf/Ef
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Beuregard, L. P. (26 de octubre de 2018). México ofrece trabajo y atención médica a la
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las razones de los cientos de hondureños que siguen los pasos de los que ya
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