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Biotecnología Sostenible
Un área tan completa que combina ámbitos como química, física, biología,
matemáticas, entre otras tiene el deber de ser sostenible, es decir, de acuerdo con Fonseca
(2016) la sostenibilidad se define como:
Disciplina emergente de investigación que estudia las interacciones entre los sistemas naturales
y sociales (incluyendo la tecnología), así como la manera en que dichas interacciones afectan a
las diversas trayectorias de desarrollo, buscando mediante su estudio dirigir dichas trayectorias
hacia horizontes de mayor equidad y justicia social, en los que se conserve la integridad
funcional de los diversos sistemas de generación y mantenimiento de la vida en la Tierra.
De hecho, la biotecnología tiene varias divisiones que podrían ser unas más
sostenibles que otras, por ejemplo, la biotecnología roja se aplica para procesos médicos, la
biotecnología blanca es completamente industrial, la biotecnología azul se dedica a las
aplicaciones de esta en ambientes acuáticos y la biotecnología verde es aplicada a procesos
agrícolas como plantas transgénicas. Podría decirse que esta última es la que considera más
los ámbitos políticos, sociales, sustentables y económicos y no solo se limita a el
mejoramiento de plantas sino también a la biorremediación, esta es definida como “el
empleo de organismos vivos para eliminar o neutralizar contaminantes del suelo o del
agua” (ArgenBio, s.f.).
En nuestro país hasta la fecha existen más de 400 empresas que desarrollan o
utilizan biotecnología moderna, de estas 75 en agricultura, 82 medio ambiente, 54 en salud
humana, 86 en alimentos, 118 en actividad industrial y el resto en salud animal,
acuicultura, entre otros. Sin embargo, la industria biotecnológica aún se encuentra en
desarrollo en México. Se espera que para el 2020 el valor mundial de la industria
biotecnológica aumente 2.2% y que México se especialice más en la agrobiotecnología y
biotecnología roja. (ProMéxico, 2016). Las empresas que dominan el mercado en México
son las mismas que aquellas de manera internacional, aunque cabe destacar que existen
start-ups que buscan darle más auge a la inversión nacional y hay empresas mexicanas
como Biomex que comienzan a despegar.
Argumento de hecho
Argumento de hecho
encontraron consorcios bacteriológicos en aguas de la península de Yucatán que sugieren este tipo de
actividad en 2017.
Argumento de autoridad
En nuestro país existen asociaciones profesionales que dependen del gobierno y del marco
de lo político que buscan representar los intereses de los que participan en el rubro de la
biotecnología y además también la regulan como la COFEPRIS, Servicio Nacional de Inspección
y Certificación de Semillas (SNICS), Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los
Organismos Genéticamente Modificados (CIBIOGEM), BioRed del CONACYT, Cámara
Nacional de la Industria Farmacéutica (CANIFARMA), entre otros. También en el ámbito político
en 2012 México firmó el Protocolo de Nagoya – Kuala Lumpur sobre responsabilidad y
compensación suplementaria al Protocolo de Cartagena sobre Seguridad de la Biotecnología, este
tratado busca principalmente regularla de manera internacional. En 2016 el director general de la
FAO, José Graziano da Silva, declaró que la biotecnología va más allá de los transgénicos y que
espera que esta ciencia logre una mayor productividad y sostenibilidad, especialmente con los
retos del cambio climático o el crecimiento de la población. (ONU, 2016).
Para la biotecnología es esencial seguir avanzando en todos los rubros, sobre todo en
aquellos que tengan que ver con un mejor trato de los trabajadores, agricultores y aquellas
sociedades vulnerables. Deben aumentar las compañías sus esfuerzos en lo ético y lo sustentable.
Es necesario el diálogo entre estas y organizaciones que se han mostrado en contra de los
productos que ofrecen y llegar a un acuerdo que beneficie lo más posible a ambas partes. También,
en nuestro país es urgente que se avance más para poder competir con aquellos países que son
potencia y atraer más inversión nacional y extranjera. La biotecnología puede ser la solución a
grandes problemas de salud, contaminación, hambruna, entre otras; pero la regulación debe existir
ante todo y con ello la sostenibilidad.
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Referencias
Anónimo. (2011). Una bacteria patagónica para degradar hidrocarburos contaminantes. Argentina
Investiga. Recuperado de:
http://argentinainvestiga.edu.ar/noticia.php?titulo=una_bacteria_patagonica_para_degradar
_hidrocarburos_contaminantes&id=1309
Pallares, M. (2018). Lo que debes saber sobre la compra de Bayer a Monsanto. El Universal.
Recuperado de: http://www.eluniversal.com.mx/cartera/negocios/lo-que-debes-saber-
sobre-la-compra-de-bayer-monsanto
Narváez, M. (2017). Las bacterias que limpiarán el golfo de México. Conacyt. Recuperado de:
http://www.conacytprensa.mx/index.php/ciencia/quimica/15750-bacterias-limpiaran-golfo-
mexico
ONU. (2016). FAO: Destacan importancia de la biotecnología como herramienta de ayuda para la
agricultura familiar. ONU Noticias. Recuperado de:
https://news.un.org/es/story/2016/02/1350861
Northoff, E. (2009). 2050: un tercio más de bocas que alimentar. FAO. Recuperado de:
http://www.fao.org/news/story/es/item/35675/icode/
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