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UNIDAD VI

Facilitadora:
SONJA RODRIGUEZ P.
DOMINGO ANTONIO RAMOS TEJADA

Matricula: 16-3751
Introducción
En el presente trabajo trata sobre el proceso Constitucional del Habeas Corpus, es
una institución jurídica de trascendental importancia para el desarrollo de una
sociedad, toda vez que trata de una acción de garantía que procede en lso casos
en que se violen o amenacen los Derechos Constitucionales por acción o por
omisión de actos de cumplimiento obligatorio.

Hábeas corpus quiere decir "que tengas el cuerpo, y tiene su origen en tas actas
que en Inglaterra garantizan la libertad individual, permitiendo a cualquier persona
presa ilegalmente acudir a la High Court of Justice.
El requerimiento va dirigido a toda clase de autoridades, lo que se trata de aclarar
es, si ellas han adoptado o no esa medida dentro de su competencia y de manera
legal.

El Habeas Data se encuentra considerado como una nueva institución jurídica


relacionada con los nuevos derechos y garantías constitucionales, dentro de los
actualmente llamados derechos de la tercera generación. Esta denominación
quiere asimilarse a la idea objetiva del Habeas Corpus pero con la salvedad de
referirse a la presentación, salvaguarda, rectificación o anulación de los datos
personales del ciudadano, relacionados con el ámbito de la intimidad o privacidad,
que se encuentren depositados en Bases o Banco de Datos automatizados.
Realiza un análisis de lectura en no más de dos hojas respecto de los
siguientes tópicos:
El Hábeas Corpus.
El hábeas corpus es una institución jurídica que persigue “evitar los arrestos y
detenciones arbitrarias” asegurando los derechos básicos de la víctima, algunos
de ellos tan elementales como son estar vivo y consciente, ser escuchado por la
justicia y poder saber de qué se le acusa. Para ello existe la obligación de
presentar a todo detenido en un plazo preventivo determinado ante el juez de
instrucción, quien podría ordenar la libertad inmediata del detenido si no
encontrara motivo suficiente de arresto.

Toda persona privada o cohibida en su libertad sin las debidas formalidades de ley
o que se viere inminentemente amenazada de serlo, tiene derecho, a petición
suya o de cualquier persona en su nombre, a un mandamiento de habeas corpus
con el fin de que el juez o tribunal decida, sin demora, sobre la legalidad de la
medida de privación de libertad o de tal amenaza. No procede el habeas corpus
cuando existan recursos ordinarios o pueda solicitarse la revisión de las medidas
de coerción.

El Habeas Corpus tiene en nuestro país rango constitucional. Esto significa que
esta institución procesal, su estatuto, está por encima de la ley adjetiva al
encontrarse expresamente consagrada en nuestra carta magna. El Habeas
Corpus tuvo su origen en Inglaterra y en la República Dominicana fue adoptado en
el 1914. Con el Habeas Corpus se busca proteger a las personas de una prisión
arbitraria. La expresión significa literalmente “presentar el cuerpo”. Estos términos
provienen de la orden que daba el Juez al carcelero para que llevara a su
presencia la persona detenida, pudiendo el juez rápidamente examinar las
razones de la prisión y ordenar su libertad. Es el Código Procesal Penal el que lo
reglamenta como uno de los procedimientos especiales, es decir, distinto al
procedimiento ordinario por el que se conocen las violaciones a la ley. El Código
Procesal Penal dispone que se puede ejercer una acción de Habeas Corpus en
las siguientes hipótesis: 1) que la persona esté ilegalmente privada de su libertad.
La clave a determinar es cuándo una persona está ilegalmente privada de su
libertad. Digamos que en sentido general esto se produce cuando la persona es
detenida por una autoridad que no tiene competencia para ello, cuando una
persona es detenida sin la orden de un juez o cuando la persona es detenida fuera
de los casos de crímenes flagrantes, o cuando transcurren mas de 48 horas de la
detención sin que la persona sea presentada ante el juez. En todos estos casos, la
persona esta siendo víctima de una prisión ilegal y por tanto puede apoderar al
juez del Habeas Corpus para procurar su inmediata puesta en libertad. . 2) El
Código Procesal Penal contempla una segunda y tercera hipótesis: que la persona
se viere inminentemente amenazada de ser privada ilegalmente de su libertad o 3)
que existan motivos suficientes para suponer que la persona puede ser trasladada
ilegalmente fuera de la República. En estos dos casos se trata de una acción
preventiva de habeas corpus, mediante la cual la persona se adelanta y se pone
en manos de un juez para que este examine dichas amenazas y evite se
materialice la detención o la deportación. En la acción de Habeas Corpus hay que
distinguir varios momentos:

1- La solicitud. Se trata del apoderamiento del juez para que decida sobre la
legalidad o no de la privación de la libertad, o de las otras situaciones referidas. La
solicitud no está sujeta a formalidad alguna. Se puede hacer por escrito firmado o
por declaración en secretaría. Está exenta del pago de todo impuesto, tasa,
valores o tributos. La solicitud puede presentarse cualquier día.

2-El Mandamiento. El juez evalúa si la solicitud procede, y en caso positivo emite


un mandamiento de habeas corpus, es decir, una orden para que le presenten al
impetrante ante él o el tribunal. Este mandamiento debe ser cumplido y ejecutado,
sin que pueda ser desconocido por defectos formales. El funcionario que se
resista a presentar a la persona, sin alegar causa de fuerza mayor, comete
desacato y puede ser conducido en virtud de una orden general de captura emitida
por el juez o tribunal.
3-La audiencia. El juez o tribunal, puede decidir el habeas corpus luego de oír al
impetrante, el día de su presentación. O puede fijar una audiencia sin demora
innecesaria y siempre dentro de las 48 horas siguientes, pudiendo disponer que el
funcionario que tiene bajo su control al impetrante, se presente y exponga sus
motivaciones. La audiencia no puede suspenderse por ningún motivo y el juez o
tribunal ordena la libertad o rechaza la solicitud.

4-La ejecución. La negativa, el retardo, o ejecución negligente de la libertad


dispuesta por el juez, por parte del funcionario responsable, lo hace reo de
encierro ilegal, procede su destitución y la acción civil por daños y perjuicios
causados.

Requisitos para la solicitud del Habeas Corpus


La solicitud de mandamiento de habeas corpus no está sujeta a formalidad alguna
y puede ser presentada por escrito firmado o por declaración en secretaría, por la
persona de cuya libertad se trate o por su representante, en lo posible con
indicación de:
1) El nombre de la persona en cuyo favor se solicita;
2) El lugar en donde se encuentre;
3) El nombre o designación del funcionario o la persona que haya adoptado
la medida de privar, cohibir o amenazar en su libertad física a otra o el
encargado del recinto en el cual se encuentre;
4) Una breve exposición de las razones por las que se invoca que la medida
que le priva, cohíbe o amenaza en su libertad es ilegal;
5) La mención de que no existen recursos ordinarios ni es posible la revisión
de la medida conforme a las reglas de este código.
6) Esta solicitud puede ser presentada cualquier día.

Presentada la solicitud de habeas corpus, si procede, el juez o tribunal ordena la


presentación inmediata del impetrante. Una vez oído el impetrante, resuelve
inmediatamente sobre la acción o fija una audiencia sin demora innecesaria,
siempre dentro de las cuarentiocho horas siguientes, para lo cual dispondrá que el
funcionario demandado comparezca a los fines de que exponga los
motivos legales que justifiquen su actuación.

El Hábeas Data.
El Habeas Data constituye una nueva institución jurídica para poder lograr
efectivamente, en un Estado de Derecho, la protección, seguridad, exactitud o
rectificación, preservación o destrucción justificadas; el secreto o privacidad sobre
los datos del ciudadano, que el Estado u otros entes públicos o privados tengan
sobre ellos con el propósito del conocimiento y difusión permitidos de los mismos,
ya sea que estén archivados o guardados en medios electrónicos o similares,
porque ellos constituyen testimonios o proyecciones de la persona, de la vida, de
la identidad, pensamiento cultural o instrucción, actividades sociales, económicas,
religiosas, así como los de la genética, salud, orientación sexual, pensamiento
político, sea que ya se hallen registrados o por registrarse, según el amparo y
protección que la Constitución y las Leyes respectivas lo ordenen.

Este derecho se fue expandiendo y comenzó a ser reglamentado tanto por leyes
de hábeas data como por normas de protección de datos personales. También se
encomendó a agencias estatales el control sobre la aplicación de estas normas.
Así existen en diversos países (como Argentina, España y Francia) agencias del
estado que tienen por misión supervisar el tratamiento de datos personales por
parte de empresas e individuos. También se suele exigir un registro del banco de
datos para generar transparencia sobre su existencia.

El Habeas Data es una garantía procesal que tiene por objeto la evaluación de la
calidad de datos personales que se hallen archivados en una determinada base de
datos ya sea manual o electrónica. Cuando hablamos de calidad, nos referimos a
la exhibición de los datos y de su finalidad para así lograr por parte del
responsable de los mismos su actualización, rectificación o cancelación, cuando
proceda.

Esta garantía ha cobrado gran importancia en la actualidad, con el auge de los


bancos informáticos de datos, a los cuales se puede acceder fácilmente de muy
diversos y sofisticados modos, todo lo cual multiplica la posibilidad de propagar
datos personales, cuya difusión pudiera perjudicar a su titular, agraviando así su
derecho a la intimidad.

En consecuencia, el habeas data presupone la existencia de cinco objetivos


principales:
1) Que una persona pueda acceder a la información que sobre ella conste en
un registro o un banco de datos;
2) Que se actualicen los datos atrasados;
3) Que se rectifiquen los inexactos;
4) Que se asegure la confidencialidad de cierta información legalmente
obtenida para evitar su conocimiento por terceros, y;
5) Supresión en los procesos de obtención de información del requisito de la
llamada información sensible, entre la que cabe mencionar la vida intima,
ideas políticas, religiosas o gremiales.

Caracteres del Habeas Data


El habeas data se caracteriza porque: es una acción de garantía constitucional, es
de naturaleza procesal, es de procedimiento sumario, sirve para defender los
derechos informáticos.

Cuando nos referimos que es una acción de garantía constitucional no sólo lo


hacemos porque está consignada en el título de garantías, sino porque sus
alcances son proteccionistas y pretende dar seguridad, para los nuevos derechos
informáticos. Y es una acción porque implica tocar las puertas de los organismos
jurisdiccionales, aduciendo el derecho a la jurisdicción para entablar una
pretensión o dilucidar en dichos organismos. No es pues un derecho, sino una
garantía a determinados derechos.

Por su parte, decimos que es de naturaleza procesal porque representa un


mecanismo procesal, que se encamina mediante estadios hasta alcanzar una
resolución que ampare o no la pretensión del accionante. Esta característica
implica la intervención de un accionante y la de un demandado, en este caso la
autoridad o el funcionario que ha vulnerado o amenazado uno de los derechos
específicos de tipo informática. Y lógicamente, requiere la intervención de un
órgano jurisdiccional competente, la medida proteccionista.

Además es de procedimiento sumario porque su trámite es breve y sus términos


son del mismo carácter, muy semejantes al procedimiento de la acción de Amparo,
bajo el mismo espíritu que inspira las otras garantías constitucionales, de dar
protección oportuna a los derechos fundamentales de la persona.

Por último y no menos importante, esta acción defiende derechos constitucionales


informáticos. Los que están comprendidos en la Constitución de cada Estado,
frente a vulneraciones o amenazas.

Tipos de Habeas Data


El habeas data puede ser clasificado según en el objetivo perseguido y en la
pretensión expresa por el sujeto activo:
 Informativo; Su objetivo se limita a obtener la información, pudiéndose
indicar los subtipos siguientes:
 Exhibitorio: Qué es lo que se ha registrado;
 Finalista: Para qué y para quién se recabó la información;
 Autoral: Quién obtuvo los datos;[4]
 Derecho de Inserción: Derecho simétrico al de cancelación, pudiendo ser
utilizado tanto para agregar datos que permitan una mejor comprensión de
su perfil personal, para actualizar la información, así como para pedir ser
incluido en un registro del cual se lo ha omitido.[5]
 Rectificador o correctivo: Tiene por finalidad corregir o sanear
informaciones falsas, inexactas o imprecisas.
 Reservador: Asegura la confidencialidad de los datos almacenados, en
suma, que la información sea accesible sólo a quien está legalmente
legitimado para requerirla.
 Exclutorio o cancelatorio: La finalidad de este tipo es la de eliminar la
información contenida en un registro, cuando no exista motivo para
mantenerla almacenada, y también cuando el contenido de ella, por ser
potencialmente dañino amerite su exclusión.

Acción de Amparo.
Como acción, el amparo consiste en proteger, de modo originario iniciando el
proceso, todos los derechos diferentes a los que se encuentren regulados
especialmente por la misma constitución o por una ley especial con rango
constitucional, como por ejemplo el derecho a la libertad física o ambulatoria (este
derecho se encuentra protegido específicamente por el hábeas corpus). Así como
el hábeas corpus garantiza el ejercicio de la libertad física o ambulatoria, o como
el hábeas data garantiza la libertad de disponer de la información propia, el
amparo tiende a garantizar cualquiera de los demás derechos fundamentales que
no se encuentren regulados especialmente. De modo que puede recurrir a esta
acción quien se vea privado de ejercer cualquiera de los derechos reconocidos
expresa o implícitamente por la Constitución, una ley o, en su caso, en tratados
internacionales.

La Acción de Amparo protege todos los derecho constitucionales que no sean


cautelado ni por el Habeas Corpus, ni por el Habeas Data. Descartado el uso de
estos dos, y existiendo un derecho constitucional amenazado o vulnerado,
procede el Amparo.
Protege los demás derechos constitucionales que no sean la libertad u otros
conexos a ella, que son defendidos mediante el Habeas Corpus, por ejemplo:
Cuando violen nuestro domicilio, cuando violen nuestra libertad de trabajo, cuando
pretendan restringir nuestra libertad de contratación (nos obliguen a contratar a
alguien que no queremos) o de empresa, cuando violen nuestro derecho
de propiedad (el Estado una persona pretendan apropiarse de nuestra propiedad),
etc.

También procede el amparo para proteger los siguientes derechos no


expresamente contenidos en el texto de la Constitución:

Aquellos a los que se refiere el artículo 3 de la Constitución como "...otros de


naturaleza análoga o que se fundan en la dignidad del hombre, o en
los principios de soberanía del pueblo, del Estado Democrático de Derecho y de la
forma Republicana de gobierno".

Probablemente determinar estos derechos pueda ser problemático en muchos


caso: empero, la garantía del Amparo procederá porque este artículo les da rango
constitucional.

Aquellos derechos que, escritos en nuestro texto constitucional, adquieran un


significado específico, o una más amplia, por aplicación interpretativa de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos de Naciones Unidas así como
por otros tratados y acuerdos válidos en el Perú, en cumplimiento de la Cuarta
Disposición Final que dice:

Procedimiento ante el Tribunal Constitucional.


En la práctica de nuestros tribunales, sin embargo, quienes han acudido al hábeas
corpus, ya no en base a la ilegalidad de la prisión, sino en su arbitrariedad o
irrazonabilidad, esgrimiendo esta posición fundada ya en la Convención
Americana de Derechos Humanos, ya en el nuevo texto constitucional de 2010,
han venido recibiendo la misma respuesta al amparo de lo previsto por el artículo
381 CPP: “No procede el hábeas corpus cuando existan recursos ordinarios o
pueda solicitarse la revisión de las medidas de coerción”.
Sin embargo, el 14 de enero de 2014, el Tribunal Constitucional emitió la
Sentencia TC/0015/14, que parecería abrir el camino para que el hábeas corpus
opere aun cuando haya un proceso penal en curso. A esta decisión me referiré en
la próxima entrega.

Un aspecto de resaltar es también el hecho de que el Código Procesal


Constitucional señala que le es aplicable el procedimiento del proceso de amparo
para el hábeas data, con la sola excepción de la no exigencia de firma de abogado
patrocinante para este último, lo cual estaría acorde con el hábeas data propio
más no el impropia que requiere un procedimiento singular, más aun teniendo en
cuenta que por la naturaleza de los derechos tutelados vía hábeas data, resulta
íntimamente ligado con el hábeas corpus por encima de amparo, dado que
mediante la autodeterminación informativa se protege una especie del derecho a
libertad individual.
Conclusión
Luego de realizar las investigaciones pertinentes al tema y tras recopilar y analizar
la información correspondiente, he podido concluir que:

El Habeas Corpus es un Procedimiento de origen inglés, destinado a proteger al


individuo de las detenciones arbitrarias, o sea aquellas que no cumplan con las
formalidades legales requeridas para privar de libertad a cualquier persona. Dicha
figura ha tenido marcada presencia en la historia legal y doctrinal del mundo,
sobre todo a partir de los grades movimientos revolucionarios que se dieron en las
distintas monarquías predominantes del pasado.

Contra de las sentencias conclusivas de Habeas Corpus proferidas por jueces o


magistrados, distintos al Pleno de la Corte Suprema de Justicia, sí caben
Demandas de Inconstitucionalidad y Amparos de Garantías Constitucionales.

Cabe señalar que el proceso constitucional de hábeas data, en nuestra patria se


encuentra en un estado incipiente, dado que la ciudadanía no tiene cabal
conocimiento del ámbito de aplicación y los derechos tutelados por ese esta
institución, pese a las jurisprudencias esgrimidas por el Tribunal Constitucional en
ocasión de diversos procesos entablados a con el objeto de lograr el acceso a la
información tanto pública como privada. Por lo que resultad de capital importancia
que el máximo interprete de la constitución aclare el concepto de
autodeterminación informativa, como presupuesto de tutela por el proceso de
hábeas data, toda vez que mediante ella se puede solicitar la rectificación y/o
actualización de datos contenidos en un banco de registro ya sea de índole
público como privado cuando exista un interés valido de por medio por parte del
recurrente.

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