You are on page 1of 7

La cientificidad del Derecho: Una mirada desde su método de estudio.

El presente ensayo pretende dar respuesta a la pregunta ¿Se puede concebir el Derecho

como una ciencia o como un arte? Pues bien, para desarrollarlo, inicialmente se hará una breve

definición de éstos tres términos, posteriormente se hará un análisis de la definición de derecho,

el objeto de la investigación científica y la investigación jurídica y sus resultados, y finalmente se

hará una crítica al Derecho como ciencia o como arte.

En muchas ocasiones, las personas se preguntan qué es ciencia, para algunos es un conjunto

de saberes o de conocimientos, para otros es una habilidad o simplemente una herramienta, pero

siempre bajo la condición de que se pueda demostrar a través de ecuaciones matemáticas. La

Real Academia Española define ciencia como un conjunto de conocimientos obtenidos mediante

la observación y el razonamiento, sistemáticamente estructurados y de los que se deducen

principios y leyes generales. Por otra parte, Aristóteles (Citado por Salgado) 2012, define ciencia

“como el conocimiento de lo universal y de las cosas necesarias, y la existencia de unos

principios de la ciencia y de lo demostrable (pues la ciencia es racional, el principio de lo

científico no puede ser ni ciencia, ni arte, ni prudencia: porque lo científico es demostrable”.

Ahora, al escuchar arte lo primero que llega a la mente de las personas, es expresión,

cultura y creatividad. Martínez (2006) expresa que arte es una necesidad ineludible del ser

humano que pertenece a la esencia de éste y que le ayuda a comprender mejor la realidad. Es esa

herramienta que sirve para complementar lo que existe en todo lo que se conoce, se nutre de

otras disciplinas para completar esos vacíos en la existencia del ser humano.

Pasando al segundo aspecto del presente escrito sobre el análisis al objeto de estudio del

Derecho, éste, se define como el conjunto de normas que regulan las relaciones interpersonales
de la sociedad. Su objeto de estudio, como lo describe (Gómez) 2010, son “los comportamientos

humanos que se desarrollan al interior de cada sociedad y que en momentos históricos y

determinados son de trascendencia para un Estado, tal trascendencia lo lleva la necesidad de una

regulación normativa.

Es así como su forma de llevar a cabo esa regulación, lo hace través de las normas jurídicas,

como por ejemplo las obligaciones que nacen por las disposiciones que otorga la ley a las

personas, como las que tienen los padres con los hijos; lo que le otorga un gran nivel de

importancia al Derecho, puesto que, si el Derecho no regulara su objeto de estudio, como se

vería la sociedad. No se trata de positivizar todas las conductas humanas, sino crear normas para

que existe un equilibrio entre la realidad y lo ideal.

Para lograr su objetivo, el Derecho no se retroalimenta solo, no se describe por medio de

ecuaciones matemáticas que definan una conducta, no existen conceptos o variables

predeterminadas para alcanzar sus objetivos, lo hace a través de la observación, el análisis del

comportamiento, la hipótesis como la búsqueda a la solución de una conducta, para finalmente

regularlo a través de una norma. Por ende, no existe la concepción del Derecho como ciencia

formal, pero si se integra dentro de la clasificación de Mario Bunge (1349) como ciencia fáctica.

Entiéndase por ciencia fáctica, aquella que se refiere a sucesos y procesos, es decir a lo empírico

y requiere de herramientas como la observación y la experimentación para corroborar sus

hipótesis. A diferencia de las ciencias formales que son aquellas que se refieren a la relación de

los signos y utilizan procesos deductivos para hallar la solución a sus ecuaciones.

Ahora bien, para entrar a discutir si el derecho es propiamente una ciencia, se debe tener en

cuenta lo que busca la investigación científica y la investigación jurídica, la primera se encarga


de encontrar información adicional a la existente, con base en conocimientos predeterminados; y

la segunda, busca la adecuación del ordenamiento jurídico, a los diversos fenómenos sociales y

transformaciones culturales. Se evidencia, como el Derecho se entiende como una ciencia social,

que tiene como fin generar un equilibrio en las relaciones interpersonales y las relaciones con el

Estado.

Por otro lado, hay autores que consideran que, para hablar de la cientificidad del Derecho,

hay que conocer de la ciencia del derecho en sentido estricto.

Ciencia jurídica o, jurisprudencia hace referencia a un procedimiento reflexivo,

sistemático y crítico que permite a los jueces, abogados y juristas, teóricos y demás

operadores del derecho, resolver una hipótesis (problema) posible o real dentro del marco

de referencia de reglas y principios propuestos por el sistema jurídico. Carrillo (2008).

Compartiendo la descripción de éste autor, se muestra que el Derecho si tiene una serie de

procedimientos científicos para lograr sus fines, la sensibilidad que deben tener los actores que

intervienen en éste, puesto que, resolver problemas no es una tarea sencilla, requiere de

conocimientos e investigación para ir más allá de lo que a simple vista puede percibir el ser

humano.

Por consiguiente, la diferencia entre las ciencias formales y las ciencias fácticas, es que

las primeras pretenden dar explicación a todo lo que rodean al ser humano, y las segundas viven

en constante trasformación, ya que deben adaptarse a los cambios socio-culturales de la

sociedad. Será que la ciencia debe ser exacta, con teoremas que permiten deducir y encontrar

explicaciones, o puede referirse a experiencias que rodean al ser humano y a esa búsqueda de la

verdad, el equilibrio y la justicia. Gómez (2010), manifiesta que “el objeto de estudio de la
jurisprudencia es cambiante en el transcurso del tiempo y la historia, y que es imposible separar

la jurisprudencia del estudio del derecho, ya que el derecho además de razón es también pasión”.

De la misma manera, Lell (2013), considera que los objetos de las ciencias naturales

conservan sus características en todo tiempo y espacio, pero cuando por fin se halla el auténtico

concepto de una institución es probable que el objeto ya haya cambiado. Es precisamente por

éste cambio, que algunos autores, no tratan al Derecho como ciencia, sino como una disciplina,

que vive en constante cambio y transformación.

Es aquí donde radica la inquietud, si bien es cierto el Derecho es cambiante, está sujeto a

lo que trascienda en la sociedad en cierto momento histórico, pero para producir esa regulación

normativa aplicada a través de la jurisprudencia, se necesita de investigación, puesto que su

objeto de estudio no es estático, es dinámico. Entonces si se observa, se analiza, se generan

hipótesis y se produce conocimiento, ¿no se estaría hablando de investigación científica, y si es

investigación científica, no se hablaría de ciencia? Tampoco se podría expresar que el Derecho

deja de ser ciencia, porque requiere de otras áreas del conocimiento para fortalecer su estudio, ya

que, a pesar de que la física es una ciencia formal, requiere de los instrumentos de las

matemáticas para demostrar sus postulados.

Luego de un breve análisis a conceptos, definiciones, u opiniones, se podría afirmar que

el Derecho si es una ciencia, esto basado en su método de estudio que puede demostrar sus

postulados, ya que como se manifestó anteriormente, si produce conocimiento, se convertiría en

ciencia. Obviamente nutriéndose de otras ciencias sociales como la sociología, la antropología, la

psicología, entre otras, y de áreas del conocimiento como la matemática, la administración, el

arte; en fin, todas aquellas que sirvan como fuente para llevar a cabo su objetivo.
Podemos concluir también que el derecho es un arte, porque ambas disciplinas comparten

características propias, pero el derecho es prócer porque la potencia representativa de la ley

jurídica es enorme y por eso, la del arte del derecho supera cualquier potencia representativa de

otro arte, llegando a cubrir todos los aspectos de la vida del ser humano ya que el derecho a toda

persona que si bien puede que aún no sepa la consecuencia de sus actos, sabe que no desea una

sanción por parte del mismo, evitando las consecuencias que puede traer sus actos a la hora de

aplicar las normas.

Desde mi punto de vista de la cientificidad del derecho, el derecho es arte y ciencia, es

decir, ¿es una ciencia que se inspira en el arte, pero a qué se debe esta unificación? Se debe a la

importancia de la información que brinda el arte y la ciencia, ya que por medio del arte podemos

estudiar el conjunto de todas las formas, patrones y modelos de las prácticas humanas para así

darle paso a la ciencia de la cual se encargaría de estudiar, observar, experimentar, explicar,

generalizar y predecir el estudio de las normas, leyes o jurisprudencia, para llevar a la sociedad

de un estado, a la libertad y la armonización de una convivencia sana gracias a la aplicación de

dichas leyes o normas.


Referencias.

Bunge, Mario. (1973) La ciencia su método y su filosofía. Buenos Aires, Argentina.

Ediciones siglo veinte.

Carrillo de la Roza, Yezid. (2007-2008). De la cientificidad a la racionalidad del discurso

dogmático jurídico (el puesto de la razón práctica en la dogmática jurídica). Revista Telemática

de Filosofía del Derecho. 11. 335-348.

Gómez Caballero, Leider. (2010). El problema de la cientificidad del Derecho: Una

aproximación al investigar jurídico. 43-57. Recuperado de:

http://www.revistapielagus.com/articulos/05.-el-problema-de-la-cie.pdf

Lell, Helga Maria. Tres concepciones en torno a la cientificidad del derecho. (2013).

Revista de Filosofía y Ciencias Jurídicas. 3. 48-66.

Muñoz Martínez, Rubén. Una reflexión filosófica sobre el arte. (2006). Thémata, 36.

Página 240-254.

Raúl, Pablo “y” Peña, Jairo. (2006) Filosofía del Derecho. Recuperado de

http://www.ejrlb.net/biblioteca2011/content/pdf/a6/6.pdf

Salgado González, Sebastián. La filosofía de Aristóteles. (2012). Duererías. 3-10.


La cientificidad del Derecho: Una mirada desde su método de estudio.

Jean Carlos Medina García.


Cód.: 1.090.449.216.

Universidad Libre – Seccional Cúcuta.


Especialización en Derecho Penal y Criminología VIII Cohorte.
Cúcuta.
2018.

You might also like