Professional Documents
Culture Documents
LA INFRACCIÓN PENAL
Artículo 18.- Infracción penal.- Es la conducta típica, antijurídica y culpable cuya sanción se
encuentra prevista en este Código.
Delito es la infracción penal sancionada con pena privativa de libertad mayor a treinta días.
Artículo 20.- Concurso real de infracciones.- Cuando a una persona le son atribuibles varios
delitos autónomos e independientes se acumularán las penas hasta un máximo del doble de la
pena más grave, sin que por ninguna razón exceda los cuarenta años.
Artículo 21.- Concurso ideal de infracciones.- Cuando varios tipos penales son subsumibles a
la misma conducta, se aplicará la pena de la infracción más grave.
CAPÍTULO PRIMERO
Artículo 22.- Conductas penalmente relevantes.- Son penalmente relevantes las acciones u
omisiones que ponen en peligro o producen resultados lesivos, descriptibles y demostrables.
SECCIÓN PRIMERA
TIPICIDAD
Artículo 25.- Tipicidad.- Los tipos penales describen los elementos de las conductas
penalmente relevantes.
Artículo 26.- Dolo.- Actúa con dolo la persona que tiene el designio de causar daño.
Responde por delito preterintencional la persona que realiza una acción u omisión de la cual
se produce un resultado más grave que aquel que quiso causar, y será sancionado con dos
tercios de la pena.
Artículo 27.- Culpa.- Actúa con culpa la persona que infringe el deber objetivo de cuidado, que
personalmente le corresponde, produciendo un resultado dañoso. Esta conducta es punible
cuando se encuentra tipificada como infracción en este código.
Artículo 28.- Omisión dolosa.- La omisión dolosa describe el comportamiento de una persona
que, deliberadamente, prefiere no evitar un resultado material típico, cuando se encuentra en
posición de garante.
Se encuentra en posición de garante la persona que tiene una obligación legal o contractual de
cuidado o custodia de la vida, salud, libertad e integridad personal del titular del bien jurídico y
ha provocado o incrementado precedentemente un riesgo que resulte determinante en la
afectación de un bien jurídico.
SECCIÓN SEGUNDA
ANTIJURIDICIDAD
Artículo 29.- Antijuridicidad.- Para que la conducta penalmente relevante sea antijurídica
deberá amenazar o lesionar, sin justa causa, un bien jurídico protegido por este Código.
Tampoco existe infracción penal cuando se actúa en cumplimiento de una orden legítima y
expresa de autoridad competente o de un deber legal.
Artículo 32.- Estado de necesidad.- Existe estado de necesidad cuando la persona, al proteger
un derecho propio o ajeno, cause lesión o daño a otra, siempre y cuando se reúnan todos los
siguientes requisitos:
Artículo 33.- Legítima defensa.- Existe legítima defensa cuando la persona actúa en defensa de
cualquier derecho, propio o ajeno, siempre y cuando concurran los siguientes requisitos:
SECCIÓN TERCERA
CULPABILIDAD
Artículo 34.- Culpabilidad.- Para que una persona sea considerada responsable penalmente
deberá ser imputable y actuar con conocimiento de la antijuridicidad de su conducta.
Artículo 36.- Trastorno mental.- La persona que al momento de cometer la infracción no tiene
la capacidad de comprender la ilicitud de su conducta o de determinarse de conformidad con
esta comprensión, en razón del padecimiento de un trastorno mental, no será penalmente
responsable. En estos casos la o el juzgador dictará una medida de seguridad.
1. Si deriva de caso fortuito y priva del conocimiento al autor en el momento en que comete
el acto, no hay responsabilidad.
2. Si deriva de caso fortuito y no es completa, pero disminuye considerablemente el
conocimiento, hay responsabilidad atenuada imponiendo el mínimo de la pena prevista
en el tipo penal, reducida en un tercio.
3. Si no deriva de caso fortuito, ni excluye, ni atenúa, ni agrava la responsabilidad.
4. Si es premeditada con el fin de cometer la infracción o de preparar una disculpa, siempre
es agravante.
Artículo 38.- Personas menores de dieciocho años.- Las personas menores de dieciocho años
en conflicto con la ley penal, estarán sometidas al Código Orgánico de la Niñez y Adolescencia.
CAPÍTULO PRIMERO
LA PENA EN GENERAL
Artículo 51.- Pena.- La pena es una restricción a la libertad y a los derechos de las personas,
como consecuencia jurídica de sus acciones u omisiones punibles. Se basa en una disposición
legal e impuesta por una sentencia condenatoria ejecutoriada.
Artículo 52.- Finalidad de la pena.- Los fines de la pena son la prevención general para la
comisión de delitos y el desarrollo progresivo de los derechos y capacidades de la persona con
condena así como la reparación del derecho de la víctima.
En ningún caso la pena tiene como fin el aislamiento y la neutralización de las personas como
seres sociales.
Artículo 53.- Legalidad de la pena.- No se impondrán penas más severas que las determinadas
en los tipos penales de este Código. El tiempo de duración de la pena debe ser determinado.
Quedan proscritas las penas indefinidas.
La interdicción surte efecto desde que la sentencia cause ejecutoria e inhiba a la persona
privada de libertad de la capacidad de disponer de sus bienes a no ser por sucesión por causa
de muerte.
Artículo 57.- Reincidencia.- Se entiende por reincidencia la comisión de un nuevo delito por
parte de la persona que fue declarada culpable mediante sentencia ejecutoriada.
La reincidencia solo procederá en delitos con los mismos elementos de tipicidad de dolo y
culpa respectivamente.
CAPÍTULO SEGUNDO
CLASIFICACIÓN DE LA PENA
Artículo 58.- Clasificación.- Las penas que se imponen en virtud de sentencia firme, con
carácter principal o accesorio, son privativas, no privativas de libertad y restrictivas de los
derechos de propiedad, de conformidad con este Código.
Artículo 59.- Penas privativas de libertad.- Las penas privativas de libertad tienen una
duración de hasta cuarenta años.
La o el juzgador podrá imponer una o más de estas sanciones, sin perjuicio de las penas
previstas en cada tipo penal.
Artículo 270.- Perjurio y falso testimonio.- La persona que, al declarar, confesar, informar o
traducir ante o a autoridad competente, falte a la verdad bajo juramento, cometa perjurio,
será sancionada con pena privativa de libertad de tres a cinco años; cuando lo hace sin
juramento, cometa falso testimonio, será sancionada con pena privativa de libertad de uno a
tres años.
Si el perjurio se comete en causa penal, será sancionada con pena privativa de libertad de
siete a diez años.
Si el falso testimonio se comete en causa penal, será sancionada con pena privativa de libertad
de cinco a siete años.