“REVOLUCIÓN INDUSTRIAL, CAUSAS Y

CONSECUENCIAS”
 RESUMEN

La Revolución Industrial, que tuvo su epicentro en Europa, principalmente

Inglaterra, es uno de los períodos, etapas y/o procesos históricos de la humanidad
que ha dejado profundas transformaciones en el ámbito tecnológico, económico,
social y cultural, y a través de ello en el estilo de trabajo y en consecuencia en la
forma de pensar, todo lo que trajo un cambio en la estructura de la sociedad, sismo
cultural que perdura hasta hoy, es decir cambió el mundo tal y como se conocía
hasta el siglo XVIII.

Uno de esos cambios vino de la mano de diversas innovaciones y la utilización de

nuevas fuentes de energía, lo que comenzó a sustituir la mano de obra dando paso
en esta primera etapa a la fuerza de las máquinas y con eso a nuevos métodos de
organización en la producción ahora de “masa” con un aumento del consumo y por
ende del comercio.

Todo esto ¿pudo cambiar la estructura social?, la respuesta es un nítido sí, de ahí
la importancia social y cultural de esa era.

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 INTRODUCCIÓN

La velocidad de la banda ancha, la imagen que entrega un dron, el poder y

fuerza de un auto de alta gama o la comodidad y rapidez con que un tren bala une
países, son antiguos sueños, pero hoy concretas, cotidianas y hasta rutinarias
realidades. ¿Qué tienen en común?, todas herederas de la Revolución Industrial.

En la humanidad en lo social y cultural son claros y nítidos los gigantescos

saltos que el hombre ha dado en su evolución y que se siguen dando hasta hoy.
Uno de ellos sin duda fue el descubrimiento del fuego, lo que logró cambiar la
historia, la confirmación social del hombre en comunidad, su cultura y hasta su
fisonomía y estructura corporal. Con el fuego no sólo se encontró la comodidad de
comer mejor, sino que eso mismo iluminó lo que sería el nuevo transcurso histórico
de la humanidad con cambios sociales y culturales profundos como el ahora
quedarse asentado en un solo sector y de allí a conformar comunidad.

Dando un nuevo salto social e histórico podríamos decir que la Revolución

Industrial es otro hito estructural para la humanidad, así como otros que en este
caso no son motivo de análisis, pero respecto de este tema no fue sólo lo industrial
que se revolucionó, sino también el propio hombre, su relación con el entorno, con
sí mismo y con los demás.

Nuevamente un proceso social importante deja profundas consecuencias

sociales y culturales en la humanidad. Así es tal como se detallará no sólo se trató
de producir mas rápido, en serie y en mayores cantidades, se trató mas bien de un
nuevo profeso social que entre múltiples aspectos consideró un nuevo orden con
clases sociales emergentes, al desarrollo intelectual profundo de los hombres ahora
enfrentados a nuevos desafíos e incluso un nuevo trato social y cultural al aumentar
la migración a la ciudad y comenzar a conformarse las nuevas urbes.
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ORÍGENES, DESARROLLO Y CONSECUENCIAS

Si de marcar su origen se trata, podría situarse el proceso de la Revolución

Industrial en la segunda mitad del siglo XVIII teniendo como centro Gran Bretaña,
extendiéndose por gran parte de Europa y América.

Para contextualizar este desarrollo social, económico, cultural y político, es

importante recordar que la economía y la sociedad antes de la Revolución Industrial,
estaban basada en la agricultura y en lo artesanal, gran parte del mundo “moderno”
de la época era agrícola y artesanal, apoyada en el autoconsumo y no en la
comercialización con una productividad muy baja. Había campesinos libres
propietarios de sus tierras, arrendatarios o colonos e incluso en zonas de Europa
como en el Este todavía había siervos que no podían abandonar sus tierras. Aún
existían grandes propiedades de miles de hectáreas que pertenecían a la
aristocracia.

Las ciudades eran pequeñas y poco desarrolladas, el régimen de gobierno

eran las monarquías en las que todo lo que habitaba sus terrenos, y eso obviamente
incluye a las personas, se consideraba una propiedad del rey.

La tierra era trabajada por la familia campesina, que se convertían en

jornaleros que trabajaban las tierras del propietario habitantes del campo que
constituían un vecindario unido por lazos económicos y por tradiciones de todo tipo.

El modelo político de ese antiguo régimen de la monarquía absoluta,

concentraba todos los poderes del Estado en el monarca, lo que en la época estaba
justificado por el derecho divino, es decir, que su autoridad procedía de Dios.

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 Así el panorama a mediados del siglo XVIII, en Gran Bretaña, se inicia la
Revolución Industrial, la que fue posible por la existencia de una monarquía liberal
ya no absolutista, casa real que de alguna manera interpretando correcta y
hábilmente los dinámicos acontecimientos sociales de la época consiguió evitar el
“contagio” de las revoluciones que se estaban extendiendo en otros países y así
Reino Unido quedó libre de guerras estableciéndose además una moneda estable
y un sistema bancario organizado el que se fundó en 1694.

Estos cambios, como muchas veces, eran una de las transformaciones más
sustanciales que la humanidad vivía, lo que provocó la desaparición de la sociedad
tradicional basada en lo rural y controlada por la nobleza y la aparición de la
sociedad basada en la industria y con ello la lucha por tener ahora el control otra
clase social, que es la burguesía.

De esta forma la primera gran etapa de la Revolución Industrial fue la que se

desarrolló entre los años 1760 y 1870, caracterizada por el uso de la máquina de
vapor y el carbón para mover las máquinas. La rueda, el fuego y ahora el vapor,
mágico poder y fuerza que comenzó a mover el mundo.

Las principales industrias fueron la textil (lana y algodón), la minera (carbón)

y la industria siderúrgica. El Ferrocarril y el barco a vapor fueron los medios de
transporte característicos, periodo marcado por continuos inventos, pues esta
revolución y la energía de sus nuevos procesos abrieron el conocimiento al mundo,
así como al mismo tiempo la sociedad comienza a sufrir profundas transformaciones
de la mano de las “ideas”, pues ante una nueva realidad social llegaron las ideas
más modernas y liberales.

Uno de los detonantes para esparcir estas ideas por Europa y el mundo fue
la revolución francesa, así como algunas victorias bélicas como la de los ingleses
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en la Batalla de Trafalgar (para derrocar a Napoleón del trono imperial y disolver la
influencia militar francesa en Europa), la que de alguna manera sirvió para fomentar
el auge de la Revolución Industrial, pues este triunfo hizo que Gran Bretaña,
símbolo de la Revolución Industrial, dominara en parte el mar en el Mediterráneo
abriendo con ello un comercio global y los adecuados para que las ideas
librecambistas llegaran aún más lejos.

Pero estos cambio industriales y políticos, se mezclaron con los culturales y

sociales pues en la época el conocimiento y la información se extendió rápidamente
(aunque ello parezca incluso actual) en lo científico y técnico lo que derivó en
cambios sociales y hasta el crecimiento de las ciudades con el imparable transitar y
migración del campo a la ciudad.

Como evidente consecuencia de lo anterior señalado se produce un fuerte

aumento demográfico y densidad urbana, elevándose la natalidad e incluso el
descenso de la mortalidad pues como en muchos procesos históricos sociales, una
cosa llevo a la otra y así como la producción llevo a mayor conocimiento, también
hubo avances sanitarios como con vacunas y una mejor alimentación, lo que
provocó que la población europea se multiplicó en pocos y comenzó a correrse el
cerco de la esperanza de vida.

En este tema también se habla de una “segunda” revolución industrial, la que

se sitúa a finales del XIX y a primera mitad del XX, ahora ya “dominando” los
procesos, el foco fue el descubrir y controlar nuevas fuentes de energía como el
petróleo y la electricidad, donde las industrias de mayor desarrollo fueron la química,
la eléctrica desarrollándose fuertemente el transporte a través de la automovilística,
el avión y en comunicaciones el telégrafo y el teléfono entre otras.

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 Pero la revolución industrial no sólo supuso un cambio en los procesos, sino
que además en lo social pues la acumulación de dinero estaba en manos de los
colonizadores debido al comercio; la revolución agraria convirtió las tierras de cultivo
en pastizales para alimentar a las ovejas, por la demanda de producción textil y la
actividad ganadera privó de tierra a los campesinos, lo que no tardó en significar
ello muchas personas sin propiedad y obligados a trabajar de peones y obreros. Por
su parte los artesanos, tan cotizados en otros tiempos, con la aparición de la
máquina sustituyó al trabajo manual.

Así esta “nueva sociedad” sin los mismos medios de producción y viviendo
de su trabajo, ahora tenían que adquirir sus alimentos (los que antes cosechaban)
vestirse y otras necesidades, por lo que descendió la población empleada en el
sector agrario y aumentó la del sector industrial.

Consecuencias de la Revolución Industrial

Muchas y en distintos ámbitos podrían ser las consecuencias de la

Revolución industrial, como que en lo social se constituyó el origen de la sociedad
contemporánea, lo que significa que se produjeron cambios profundos creando
incluso, político y cultural, desde fines del siglo XVIII hasta hoy.

Por ejemplo, aumentó la riqueza del mundo beneficiando principalmente a un

grupo, lo que al menos según distintas cifras continúa hasta ahora, por ejemplo, en
nuestro país permanece de acuerdo a datos publicados por el Banco Mundial y la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y según un
estudio del PNUD el 1 por ciento más rico en Chile capta el 33 por ciento de lo que
genera la economía.

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 De esta forma, y volviendo al proceso de la revolución industrial, aunque los
beneficiados fueron mayormente los industriales y comerciantes, también los
pobres mejoraron algo en sus niveles de vida, tanto en lo relacionado con los
salarios, la alimentación, vestimenta, educación y cultura.

“La gran multiplicación de la producción de todos los diversos oficios,

derivada de la división del trabajo, da lugar, en una sociedad bien gobernada, a esa
riqueza universal que se extiende hasta las clases más bajas del pueblo” frase de
Adam Smith autor de ‘La riqueza de las naciones’, economista y filósofo.

Respecto de la población mundial aumentó, pues se produjo una mayor

expansión colonial, eso marcado por la economía pues se comenzaron a abrir
nuevos mercados para entre otras cosas obtener materias primas. Así nace el
capitalismo industrial y se consolida la burguesía capitalista, con una producción
masiva. Por su parte a pesar de la migración a la ciudad, el campo no queda
abandonado, pues la agricultura se mecaniza lo que posibilita abaratar precios y
mayor volumen.

La Revolución Industrial da pie a una nueva sociedad, “sociedad Industrial”

con dos clases sociales claramente marcadas y antagónicas como son la capitalista
industrial y la proletaria u obrera, lo que conlleva problemas de clases o lucha de
clases.

“El desarrollo de la gran industria socava, pues, bajo los pies de la burguesía,
las bases sobre las que esta produce y se apropia de lo producido. Produce, ante
todo, sus propios sepultureros. Su hundimiento y la victoria del proletariado son
igualmente inevitables.”, manifestaba Karl Marx, filósofo, economista y político
(nació en reino de Prusia actual Alemania).

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¿REPRESENTA UN PELIGRO PARA LA CULTURA O MÁS BIEN UN
BENEFICIO?

La Revolución Industrial como ya ha sido planteado, es un proceso no sólo

histórico, sino que además posee dimensiones políticas, económicas, sociales y
culturales. Como muchas etapas de cambios o convulsiones sociales, no
necesariamente son “creadas” para generar algo, sino más bien es la sociedad la
que en distintas etapas va haciéndose consciente de lo que le está tocando vivir y
se provocan los cambios.

En este contexto, la revolución industrial es más bien una etapa que viene a
enriquecer parte del desarrollo y tránsito de la sociedad, y de su cultura, sobre todo
si se entiende a la cultura como todo lo que el hombre realiza, es decir como un
“conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo
artístico, científico, industrial, en una época, grupo social”, según la definición de la
Real Academia Española.

Así las cosas, la cultura sin lugar a dudas se modificó con la Revolución
Industrial y eso hasta nuestros días. Lo económico, lo político e incluso la forma en
cómo se comenzaron a realizar los distintos procesos de producción cambiaron
parte importante en cómo el hombre se relacionaba consigo mismo. Con los demás
y con su entorno.

Alguno de esos cambios fueron positivos como por ejemplo el mejoramiento

paulatino de la calidad y condiciones de vida, ya sea por el ingenio y conocimiento
adquirido, como por aspectos como la salud así como por aspectos sociales, pues
el hombre se fue haciendo más consciente de su propia realidad, de su propia
condición en el lugar en que se desempeñara en la sociedad ya sea como proletario
y/o burgués y desde ahí impulsar nuevos cambios.
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 En lo negativo podrían estar la lucha de clases, la desigualdad social, la
competencia impulsada por el mercado, son sólo algunos aspectos que modificaron
la nueva relación entre las personas, más si se considera la nueva forma de vida,
ahora copando ciudades, y generando nuevas urbes lo que conlleva nuevas
relaciones sociales y políticas.

¿CUÁLES SON LOS PROBLEMAS QUE SE PRESENTAN?

Uno de los principales problemas que evidenció la Revolución Industrial es el

nuevo “orden social”, dado por ejemplo en lo económico pues la concentración de
la producción y la riqueza comenzó tempranamente a marcar su tendencia, es decir
la acumulación de los recursos en pocas manos. La economía comenzó entonces
(y hasta hoy) a definir las pautas del nuevo orden social y de esta nueva relación
entre las personas, lo que a poco tiempo significó la diferencia y antagonismo de
clases.

En lo político tal como se ha mencionado se potenció y terminó creando dos

clases sociales que no convivieron de manera naturalmente en sus diferencias, sino
que, en pugna frontal, las diferencias ahora ya no eran del pueblo frente a los
beneficios de la monarquía, sino que ahora era la lucha de clases entre capital y
asalariados. Lo anterior no deja de ser en todo caso una curiosidad histórica, pues
justamente donde se dio con fuerza y de manera concreta esa lucha de clases, no
fue precisamente en la Europa industrializada de Gran Bretaña, por ejemplo, sino
que en la Rusia aun campesina, aún con monarquía.

En lo social, uno de los principales problemas fue la relación que aumentó la

diferencia de clases y desigualdad creando nuevas zonas urbanas, eso con la
evidente migración del campo a la ciudad creando con eso nuevas zonas o barrios
y tener que asumir nuevas formas de convivencia social. Ya no es la producción
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personal en el campo lo que da el sustento familiar, sino que ahora es el estar
asalariado la fuente de los ingresos donde poco a poco el mercado comienza a
imperar en las relaciones sociales incluso en lo personal, pues ahora el esfuerzo
por producir es el que generará bienestar, situación que se prolonga hasta hoy.

CONCLUSIÓN

De revoluciones y evoluciones es como la humanidad se ha ido abriendo

paso en su transcurso histórico y cada etapa es el pavimento y los cimientos para
el crecimiento social.

Primero defenderse de los depredadores, luego el fuego que iluminó no sólo

la oscuridad, sino que fue el comienzo para descubrir nuevas etapas. Luego la
revolución industrial que permitió gran parte de los cambios que se han indicado,
donde la inteligencia y el conocimiento ubicó en una posición superior al hombre,
allí primero se imaginaron las máquinas, luego se construyeron, después
funcionaron, se dominaron y con ello cambió y aumentó la producción y el tiempo
adquirió otro valor.

La importancia de la revolución industria sin duda es principal en la historia

de la humanidad pues no sólo significa la creación de maquinarias y mejorar la
producción, sino que eso fue capaz de modificar para siempre la relación del hombre
y la sociedad.

Huachipato, Enap, la consolidación de puertos, le época de oro de la industria

del carbón, son sólo algunas muestras de como la revolución industrial terminó
golpeando a todo el mundo incluso a países tan alejados como Chile y nuestra
región.
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 Esta época industrial dio paso a mejorar procesos productivos y a potenciar
la inteligencia y el conocimiento, así la revolución industrial dejó un desafío que hoy
está plenamente vigente en esta sociedad actual, pues sin este necesario y principal
proceso social no habríamos pasado a la nueva revolución o nueva era, que es la
del conocimiento, de la información y de la tecnología.

Cada vez más países como Finlandia, Singapur o Corea por nombrar sólo
algunos, que no cuentan con importantes reservas de materias primas, basan su
desarrollo en la información y lo que se vende y exporta es “inteligencia”, pues la
era de aprender por instinto, de inventar y hacer funcionar máquinas y de llenar esas
máquinas con información ya pasó, todo lo que contribuyó a que ahora la sociedad
se plantee nuevos desafíos como tener las habilidades intelectuales y personas ya
no sólo para producir, sino que hacer con inteligencia, es decir los cambios son
necesarios para ser lo que somos hoy y pensar en el futuro que ya se vive, por lo
que el paso de la revolución industrial fue fundamental, para transitar ahora a la era
del conocimiento.

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LINKOGRAFÍA
 Causas y consecuencias de la Primera Revolución Industrial. Recuperado de
https://apuntesparaestudiar.com/historia/causas-y-consecuencias-de-la-
primera-revolucion-industrial/
 La Revolución Industrial: Causas, Desarrollo y Consecuencias. Recuperado
de https://sobrehistoria.com/todo-sobre-la-revolucion-industrial/
 Progresos técnicos y científicos. Recuperado de
http://www.icarito.cl/2010/03/369-3086-9-la-revolucion-industrial.shtml/#
 Cambios producidos por la revolución. Recuperado de
http://www.icarito.cl/2009/12/91-380-9-cambios-producidos-por-la-
revolucion-2.shtml/
 La Revolución Industrial. Recuperado de
https://www.biografiasyvidas.com/historia/revolucion_industrial.htm
 La Revolución Industrial. Recuperado de
https://www.lacrisisdelahistoria.com/la-revolucion-industrial/

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