EN RAIMONDI…CREAMOS!!!

… PORQUE QUEREMOS LO QUE HACEMOS

Lic. William Leonel Tinajeros Torres

En este largo camino por más de 10 años, fueron muchas las experiencias vividas en nuestras creativas clases
de arte; una de ellas y la más importante fue ver a nuestros niños(as) alumnos(as) desarrollar la pasión artística
cortando, pegando, cociendo, doblando, actuando, esculpiendo, modelando, pintando y tocando un instrumento,
todo ello como jugando. Esto al inicio no fue fácil porque recordemos que en nuestros primeros años tuvimos
muchos talentos ocultos que gritaban por querer ser descubiertos. Es aquí que el arte ofreció a nuestros estudiantes
la oportunidad de comunicarse significativamente consigo mismos, y así liberarse de sus miedos, amenazas, y
sentimientos negativos o de aquellas sensaciones que le impedían conocerse. Pues la sencilla práctica aumento en
ellos la capacidad de expresarse, frente a los pequeños que solo se limitan a las labores escolares. Un claro ejemplo,
fue ver a un niño empezar a plasmar sus pensamientos en un papel y luego verbalizarlos; es decir, compartirlo con su
entorno. Además de ello ver a nuestros estudiantes competir sana y artísticamente frente a otras instituciones
creando así en ellos un espíritu competitivo y un equilibrio por expresar lo que sentían por medio del dibujo y la
pintura. Todo esto nos mostró en este tiempo que para nuestros estudiantes el curso de arte era algo más que un
simple pasatiempo que equivocadamente una parte de la sociedad le da como concepto, mostrándonos nuevamente
que en nuestra aulas el niño y joven no hacia lo que quería, sino QUERIA LO QUE HACIA.

En nuestros estudiantes las artes en general les sirvieron como un momento de encuentro puesto que no
todo es formulas, números, fechas y acontecimientos sino también trabajar ese lado tan sensible que poseen los
sentimientos y las emociones en general, desarrollando así la EMPATIA en todos nuestros chicos. Es por ello que el
arte en la vida de los jóvenes puede cumplir como una función de terapia. Los jóvenes viven con angustias y
preocupaciones, pero pueden encontrar en las manifestaciones artísticas una salida que les permita enfrentar a
distracciones e incluso a los medios de comunicación masivo, drogas y hasta la tecnología mal usada.

Los tiempos han cambiado y nuestros niños y jóvenes están expuestos a todos estos riegos. Como sociedad
nos queda involucrarlos a una formación integra donde también las actividades culturales y artísticas formen parte de
sus vidas como acudir a una exposición artística, un concierto, un espectáculo musical, una puesta teatral,
indistintamente del nivel socioeconómico al que pertenezcan.

Por último y como resumen podríamos entender claramente que toda manifestación artística juega un rol
importante en el desarrollo formativo de un niño o joven dentro de la institución Educativa y esta demás decir
también que desarrolla su creatividad, siendo esta para el arte una de las aptitudes más enriquecedoras en la vida;
sensibilizando corazones ya que el hombre se está convirtiendo en un observador pasivo de su cultura, antes que en
un constructor activo de ella.

Y solo para terminar podría confirmar nuevamente después de 10 años: que enseñar arte en el Colegio
Raimondi, es ALFABETIZAR ESTÉTICAMENTE LA VIDA para los niños y jóvenes de nuestro futuro.