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PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE

FACULTAD DE ARQUITECTURA, DISEÑO Y ESTUDIOS


URBANOS
INSTITUTO DE ESTUDIOS URBANOS Y TERRITORIALES

SISTEMAS SOCIOTÉCNICOS PARA EL ABASTECIMIENTO

DE AGUAS DOMICILIARIAS EN EL PERIURBANO DE LA

REGIÓN METROPOLITANA DE SANTIAGO

POR

ERIKA FUENZALIDA TOLORZA

Tesis presentada al Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales


de la Pontificia Universidad Católica de Chile
para optar al grado académico de
Magíster en Asentamientos Humanos y Medioambiente

Profesora Guía:

Claudia Rodríguez Seeger

Marzo, 2011

Santiago, Chile. © 2011, Erika Fuenzalida Tolorza.


© 2011, Erika Fuenzalida Tolorza.

Se autoriza la reproducción total o parcial, con fines académicos, por cualquier


medio o procedimiento, incluyendo la cita bibliográfica que acredita al trabajo y
a su autor.

Marzo, 2011. Firma.

erifuto@gmail.com
Dedicatoria

Dedicado a los sistemas comunitarios de


abastecimiento de agua potable rural, APR.
Agradecimientos
Quisiera agradecer a la ex presidenta Michelle Bachelet por haber
implementado la modalidad de currículo ciego para postular a la beca
Presidente de la República Nacional, pues esta modalidad y el patrocinio
otorgado por los ex ministros Eduardo Bitrán y Sergio Bitar del Ministerio de
Obras Públicas, me permitió acceder al financiamiento para obtener el grado de
Magíster en Asentamientos Humanos y Medio Ambiente.

También deseo reconocer el apoyo, colaboración y generosidad de Alejandra


Rasse, magíster en sociología; Claudia Rodríguez Seeger, doctora en
geografía; y Manuel Godoy Irarrázaval, licenciado en ingeniería civil sanitaria,
por compartir sus conocimientos, enriqueciendo y orientando mis ideas; y a
Jaime Núñez Segovia, doctor en ingeniería, por su paciencia, estímulo, soporte
y guía, necesarios para llegar a puerto con este estudio.

Al finalizar quiero expresar gratitud a mi familia, en especial a mi hermana


Paulina por su cariño, aliento y comprensión.

Muchas gracias a todos/as.


Índice
Dedicatoria ............................................................................................................. i

Agradecimientos ................................................................................................... ii

Índice ....................................................................................................................iii

Resumen. ............................................................................................................ vi

1. Introducción. ..................................................................................................... 8

2. Marco teórico .................................................................................................. 14

2.1. Antecedentes Históricos de los Servicios Sanitarios Rurales en


Chile ....................................................................................................... 14
2.2. Sistemas de Agua Potable Rural (APR) ................................................ 24
2.2.1 Los recursos naturales de agua y suelo. ....................................... 25
2.2.2 Las soluciones de ingeniería destinadas a la producción de
los servicios de agua potable y alcantarillado. ............................. 27
2.2.3. Las organizaciones sociales operadoras de los servicios de
agua potable y alcantarillado ....................................................... 33
2.2.4. Los usuarios del servicio de agua potable. .................................. 34
2.2.5 La Unidad Técnica (UT). ............................................................... 34
2.2.6 Marco Regulatorio y Política Pública del Sector Sanitario
Rural. ........................................................................................... 35
2.2.6.1 Normativa Legal para el sector sanitario ............................ 36

2.2.6.2 Política Pública de Saneamiento Rural. ............................. 41

2.2.7. Interacción de los elementos constitutivos de los APR ................ 43


2.3 El Enfoque Sociotécnico para los sistemas de APR. .............................. 46
2.3.1 Enfoque teórico: sistemas sociotécnicos....................................... 46
2.3.2 Los APR como sistemas sociotécnicos. ........................................ 53
2.4 Sustentabilidad y factores de sustentabilidad de los sistemas
comunitarios de agua potable ................................................................ 62
3. Pregunta, Hipótesis y Objetivos ...................................................................... 72
4. Metodología .................................................................................................... 75

4.1. Tipo de estudio y enfoque metodológico. .............................................. 75


4.2. Definición y selección de los sistemas para el caso de estudio............. 76
4.3 Selección de los casos de estudio. ......................................................... 80
4.3.1 Comité “Batuco de Santa Sara”..................................................... 80
4.3.2. Cooperativa “El Bollenar”. ............................................................ 82
4.3.3. Cooperativa “Santa Margarita”. .................................................... 84
4.4. Técnicas de recolección y muestra de participantes en la
investigación. ......................................................................................... 87
4.4.1. Técnicas de recolección de información ...................................... 87
4.4.2. Muestra de participantes en la investigación. ............................... 90
4.5. Procesamiento y análisis de la información ........................................... 91
4.5.1. Procesamiento de la información ................................................. 91
4.5.2. Análisis de la información. ............................................................ 93
5. Análisis de la información. .............................................................................. 95

5.1 Construcción del discurso....................................................................... 95


5.1.1 Capital Físico................................................................................. 95
5.1.1.1 Cantidad de recurso hídrico. .............................................. 95

5.1.1.2. Calidad del recurso hídrico ............................................... 97

5.1.1.3. Morfología del suelo.......................................................... 99

5.1.1.4 Textura del suelo. ............................................................ 100

5.1.1.5. Infraestructura de los sistemas de producción de


agua potable y alcantarillado........................................... 102

5.1.2 Capital financiero......................................................................... 106


5.1.2.1. Ingresos .......................................................................... 106

5.1.2.2. Egresos ........................................................................... 110

5.1.2.3. Ahorros ........................................................................... 113

5.1.2.4 Patrimonio. ....................................................................... 114


5.1.2.5. Inversión. ........................................................................ 117

5.1.3. Capital Humano.......................................................................... 121


5.1.3.1 Edad. ............................................................................... 121

5.1.3.2. Escolaridad. .................................................................... 124

5.1.3.3. El género. ....................................................................... 127

5.1.3.4. Capacitación y asesoría de la unidad técnica. ................ 131

5.1.4. Capital Social. ............................................................................ 139


5.1.4.1. Personalidad jurídica ...................................................... 139

5.1.4.2. Liderazgo. ....................................................................... 142

5.1.4.3 Estatutos. ......................................................................... 150

5.1.4.4. Sentido de pertenencia al sistema .................................. 152

5.1.4.5. Asociaciones y relaciones. .............................................. 154

5.1.4.6. Institucionalidad y normativa del sector sanitario


rural. ................................................................................ 160

5.2 Análisis integrado del discurso ............................................................. 169


6. Conclusiones. ............................................................................................... 184

7. Bibliografía y páginas web. ........................................................................... 194


Resumen.
El trabajo que a continuación se desarrolla es el producto de la investigación
“Sistemas Sociotécnicos para el abastecimiento de las aguas domiciliarias en el
periurbano de la Región Metropolitana de Santiago (RMS). Esta investigación
se desarrolló durante el año 2010 para acceder al grado de Magíster en
Asentamientos Humanos y Medio Ambiente.

El marco teórico de este estudio considera a los sistemas comunitarios de


abastecimiento de aguas domiciliarias como sistemas sociotécnicos,
compuestos por el subsistema técnico y el subsistema social.

Por medio de un estudio de caso, se buscó dar respuesta a la pregunta:


¿Cuáles son los factores que subyacen en los niveles de desempeño de los
sistemas de agua potable rural (APR) y que se encuentran en la base del
crecimiento y desarrollo de estos sistemas comunitarios para dar
sustentabilidad al abastecimiento de las aguas domiciliarias1 a la población del
periurbano de la RMS?

Durante el proceso de investigación se desarrollaron 20 entrevistas al grupo


relevante de actores de los sistemas sociotécnicos de Agua Potable Rural
(APR). Es decir, se entrevistó a dirigentes, trabajadores (10 entrevistas semi-
estructuradas) y usuarios de los APR (3 grupos focales), y a los actores
relevantes localizados en el contexto público y privado de los APR (7
entrevistas abiertas). Cabe señalar, que en este grupo se distinguen a actores
del contexto público y actores del contexto privado, por lo que se utilizó el
concepto de stakeholders para referirse al conjunto de actores que tiene

1
Para efecto de este estudio se definen como aguas domiciliarias a los servicios de agua
potable, alcantarillado y tratamiento de aguas servidas. Se deja fuera el tratamiento de las
aguas lluvias.
incidencia en la toma de decisiones para el diseño y difusión de estos artefactos
tecnológicos.

La información obtenida en las entrevistas y grupo focales se organizó en fichas


de sistematización, con el fin de usarla como los insumos de información en el
análisis, y construir el discurso social que identifica y define los factores que se
encuentran en la base del crecimiento y desarrollo de los sistemas.

En forma posterior, se realizó un análisis integrado a partir de la interacción de


los elementos que subyacen en los niveles de desempeño, tanto entre ellos
como con los subsistemas (técnico y social) de los APR.

La interacción entre los referidos elementos, así como con los subsistemas
(técnico y social) de los APR lleva a concluir que se acepta la hipótesis, pues en
la base del crecimiento y desarrollo de los sistemas de APR, el capital físico
actúa a modo potencial o de latencia en el nivel operacional, mientras que los
capitales financiero, humano y social le otorgan realidad y gestión a la
potencialidad del sistema operacional.

Por lo tanto, el vínculo e impacto de los capitales físico, financiero, humano y


social le otorgan a los APR niveles de desempeño diferenciados, que potencian
o debilitan las capacidades adaptativas de los APR para sustentar el
abastecimiento de las aguas domiciliarias.
1. Introducción.
El presente estudio se desarrolla como respuesta a los requerimientos
académicos del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales (IEUT) para otorgar
el grado de Magister en Asentamientos Humanos y Medio Ambiente, y se
enmarca en lo que este instituto define como tesis profesional.

Como tesis profesional, el área y objeto de estudio estuvo determinado por la


observación del comportamiento de los sistemas comunitarios de
abastecimiento de agua potable en las localidades rurales, obtenida a partir de
la práctica profesional y la experiencia laboral de la investigadora. Por lo tanto,
el estudio “Sistemas Sociotécnicos para el abastecimiento de las aguas
domiciliarias en el periurbano de la Región Metropolitana de Santiago (RMS)”,
surge de las experiencias laborales y se materializa para dar respuesta a los
requerimientos académicos de la investigadora.

Los sistemas comunitarios de abastecimiento de aguas domiciliarias son


actores centrales en el saneamiento rural de Chile. Sin embargo, la literatura e
investigaciones en torno a estos sistemas son escasas y parcializadas. Su
individualización como sistemas ha sido estudiada por fragmentos; en
ocasiones se ha colocado el énfasis en las soluciones de ingeniería, y en otras,
en la forma de gestión comunitaria.

Esta investigación propone observar a los sistemas comunitarios de


abastecimiento de servicios sanitarios básicos de manera integral, e incorporar
las soluciones de ingeniería y la forma de organización de los operadores como
un todo sistémico. A este todo sistémico la teoría lo define como un sistema
sociotécnico.

Observar los sistemas de abastecimiento de servicios sanitarios básicos o


aguas domiciliarias -rurales o urbanos- como sistemas sociotécnicos nos

8
permite focalizar a escala local la operación del abastecimiento de los servicios
de agua potable y alcantarillado, como productos u outputs de sistemas abiertos
y complejos.

Estos sistemas sociotécnicos están compuestos por dos subsistemas. Un


subsistema técnico que les confiere a los operadores eficiencia potencial para
cumplir con el abastecimiento de los servicios sanitarios básicos o aguas
domiciliarias; y un subsistema social. La interacción entre estos dos
subsistemas, le otorga a los sistemas sociotécnicos eficiencia real para operar
el abastecimiento de las aguas domiciliarias.

Esta eficiencia real, al concretarse e interrelacionarse con el contexto, les


otorga a los operadores sociotécnicos de aguas domiciliarias adaptabilidad
sistémica para abastecer de los servicios de agua potable y alcantarillado a la
población asentada en los territorios periurbanos.

La adaptabilidad sistémica de estos operadores sociotécnicos en Chile se


puede observar desde los cambios vividos por el sector sanitario a partir de la
Gran Reforma del Sector Sanitario (Alfaro. 2008), iniciada en 1977. En efecto,
esta reforma le entregó el patrocinio y centralización de los servicios del sector
sanitario al Servicio Nacional de Obras Sanitarias (SENDOS), “bajo la tutela
reforzada del Ministerio de Obras Públicas (MOP)” (Pflieger, 2008).

En forma posterior, con la promulgación de la Ley General de Tarifas de


Servicios Sanitarios (1988), junto al Decreto Supremo n° 456 de 1989, se
establecieron las bases de los procedimientos y normas que hacen posible la
fijación de tarifas para los servicios sanitarios y el régimen de aportes
reembolsables.

El mismo año se promulgó la Ley General de Servicios Sanitarios (1989), que


fijó la normativa de operación de las empresas de servicios sanitarios o aguas
domiciliaras públicas y privadas, las condiciones de servicio y el régimen de

9
concesiones aplicables a éstas (Alé, J. en revista AIDIS Chile. 2009). Esta
modalidad de concesión les otorga la responsabilidad del abastecimiento del
agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas residuales a operadores
privados.

Los territorios rurales quedaron exentos de la modalidad de concesiones que


regula la Ley General de Servicios Sanitarios, por lo que la operación del
abastecimiento de las aguas domiciliarias rurales se ubicó en un espacio
intermedio entre la política pública de salud, la de infraestructura y vivienda
rural, y la política medio ambiental.

Por otra parte, la regulación jurídica del sector sanitario rural está dada por un
conjunto de cuerpos legales que señalan disposiciones relativas a la prestación
de los servicios y la calidad del agua, potable y residual domiciliaria.

Esto, porque al encontrarse excluidos de la ley que autoriza al Estado para


desarrollar actividades empresariales bajo la figura de sociedades anónimas en
las áreas de agua potable y alcantarillado (ley 18.777 de 1989), están exentos
de la normativa de urbanización y la del régimen de concesiones, que recaen
sobre todos los sistemas públicos sanitarios.

En síntesis, la reforma del sector sanitario no dio respuestas a las necesidades


del saneamiento rural y en la actualidad, al igual que ayer, las acciones
tendientes a dotar de saneamiento básico a la población rural no concesionada
son diversas, y en ellas participan tanto instituciones del Estado como privadas.

De este modo, es posible observar en Chile dos modalidades para operar el


abastecimiento de las aguas domiciliarias. Una modalidad basada en sistemas
sociotécnicos de operadores privados, bajo la figura jurídica de sociedades
anónimas, y otra forma de operación basada en sistemas comunitarios de
abastecimiento de aguas domiciliarias con personalidad jurídica de comités o
cooperativas.

10
Este estudio se centra en la situación de los operadores sociotécnicos
comunitarios de agua potable y alcantarillado rural (APR) emplazados, a partir
de la intervención del Estado2, en las localidades periurbanas del la Región
Metropolitana de Santiago (RMS).

En estas localidades de la RMS, el abastecimiento del servicio de alcantarillado


se presenta como una necesidad derivada del progresivo aumento poblacional
que han experimentado estos territorios; con tasas de crecimiento hasta del
200% (Heinrichs, Nuissl y Rodríguez. 2009: 32), como consecuencia de la
política de viviendas sociales y el crecimiento del mercado inmobiliario de las
parcelas de agrado. Esta situación de crecimiento poblacional tiende a la
subdivisión predial inferior a los 200 metros cuadrados por familia. Esto dificulta
que la solución fosa – pozo, tradicional en los territorios rurales, dé respuesta a
la necesidad de transporte y tratamiento de las aguas residuales domésticas.

Los sistemas comunitarios de abastecimiento de agua potable rural, al estar


emplazados en territorios que rodean a una ciudad, independientemente de que
alojen o no procesos de rurbanización, tienen estándares más flexibles. Por
ejemplo, pueden constituirse como comités o cooperativas; pedir un menor
caudal al momento de solicitar los derechos de uso del agua; las cañerías o
tubos de transporte de agua, potable o residual, son de menor diámetro, pues
los caudales a abastecer son menores que en los centros urbanos; y existe

2
La literatura consigna que las intervenciones que realiza el Estado en saneamiento rural
(alcantarillado y tratamiento de aguas residuales) son desarrolladas por el Programa de
Mejoramiento de Barrios de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (SUDERE); el Ministerio de
Vivienda y Urbanismos (MINVU), a través del finalizado Programa Chile Barrio y la política de
viviendas sociales; y el Ministerio de Planificación por medio del Fondo de Inversión Social
(FOSIS). Estas instituciones han impulsado, con mayor recurrencia durante las últimas
décadas, el equipamiento en agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas residuales
domésticas. Los municipios también han desarrollado algunas iniciativas de infraestructura,
financiadas por medio del Sistema Nacional de Inversiones, para procurar abastecimiento de
servicios sanitarios básicos a las localidades rurales concentradas o semi-concentradas.

11
flexibilidad en la frecuencia de la toma de muestra para los controles físico -
químicos y bacteriológicos, que realiza la autoridad sanitaria.

En los territorios periurbanos de la RMS, la operación del abastecimiento de los


servicios de agua potable y alcantarillado está dividida entre los municipios y los
APR. Al respecto la Unidad Técnica de Aguas Andinas (2008) informó la
existencia de 101 sistemas comunitarios de abastecimiento de agua potable y
14 sistemas de alcantarillado. De estos 101 APR - comités o cooperativas- de la
RMS, un sistema comunitario tiene integrada la operación de los servicios de
agua potable y alcantarillado, seis sistemas comunitarios de agua potable
comparten la operación de alcantarillado con el municipio por medio del cobro
de tarifa, y siete de estos sistemas de alcantarillado se encuentran bajo la
tuición y responsabilidad total de los respectivos municipios. Es en este
contexto desde donde surge la pregunta de investigación: ¿Cuáles son los
factores que subyacen en los niveles de desempeño de los APR y que se
encuentran en la base del crecimiento y desarrollo de estos sistemas
comunitarios para dar sustentabilidad al abastecimiento de las aguas
domiciliarias a la población del periurbano de la RMS?

Para responder a esta pregunta se optó por un estudio de caso, que desde una
mirada cualitativa apoyó la aproximación exploratoria del enfoque teórico
sociotécnico para comprender el crecimiento y desarrollo de los operadores
comunitarios.

La única pretensión del estudio es explorar desde los actores de los APR el
sentido que tiene para ellos -como parte de un sistema sociotécnico destinado
al abastecimiento de servicios sanitarios básicos- el crecimiento y desarrollo de
los sistemas, con el fin de establecer si “los factores que subyacen en los
niveles de desempeño y sustentabilidad de los sistemas comunitarios para
abastecer de agua potable están vinculados tanto al capital físico como al
capital financiero, humano y social de estos sistemas, y se encuentran en la

12
base de su crecimiento y desarrollo para dar sustentabilidad al abastecimiento
de aguas domiciliarias a la población del periurbano de la RMS”.

De este modo, las conclusiones que emanan del presente estudio están
referidas en exclusividad a las tendencias discursivas de los casos estudiados.
Sin perjuicio, y en consideración de lo señalado, es posible que estas
conclusiones puedan orientar el comportamiento discursivo de los sistemas de
agua potable rural ante situaciones semejantes a las caracterizadas en los
casos de estudio. Es decir, sistemas de abastecimiento de agua potable rural
con más de mil viviendas conectadas por medio de arranques a la red de agua
potable, localizados en el periurbano de una región y cuyos territorios de
operación se encuentren abastecidos con el servicio de alcantarillado.

13
2. Marco teórico
2.1. Antecedentes Históricos de los Servicios Sanitarios
Rurales en Chile
La historia de los servicios que abastecen de agua potable, recolección y
disposición de aguas servidas nace con la creación de la ciudad de Santiago,
como capital de Chile, el 12 de Febrero de 1541. El trazado de las primeras
calles de Santiago fue encargado al alarife don Pedro de Gamboa, a quien el
Cabildo le entregó la tarea de construir los canales de riego y acequias de
desagüe, motivo por el cual ha sido considerado el primer ingeniero sanitario
conocido en Chile (Superintendencia de Servicios Sanitarios, 2009)

Después de 37 años, en 1578, Santiago comienza a abastecerse de las aguas


cristalinas que provenían de manantiales y vertientes del sector alto de la
ciudad (lo que hoy se llama Tobalaba). Esta situación fue mejorada de manera
importante “cuando el año 1763 se construyeron obras para traer aguas de la
Quebrada de Rabón (hoy de Ramón) hasta la Plaza Baquedano. Sin embargo,
la mayor parte de los habitantes de Santiago consumió principalmente aguas
provenientes del Río Mapocho, durante el período de La Colonia y transcurrido
medio siglo de la República” (Superintendencia de Servicios Sanitarios, 2009).

En el período republicano, (mediados del siglo XIX), Chile se incorporó a los


tiempos modernos, construyendo “algunas importantes obras de ingeniería
sanitaria como la primera cañería surtidora de agua potable para la ciudad de
Valparaíso en 1850, la planta de suministro de agua en Concepción en 1860, la
construcción de estanques en la Reina-Santiago en 1865, la fundación de la
“Tarapacá Water Work” para abastecer a la ciudad de Iquique en 1888, los
drenes de captación de Vitacura-Santiago, los estanques de 20.000 m3 en
Antonio Varas-Santiago en 1894, y la puesta en servicio de la primera etapa del
alcantarillado de Santiago” (Superintendencia de Servicios Sanitarios, 2009).

14
El siglo XX estuvo marcado por trascendentes cambios en la política de
abastecimiento de agua potable y alcantarillado en Chile. En 1931 se creó la
Dirección General de Agua Potable y Alcantarillado dependiente del Ministerio
del Interior y el Departamento de Hidráulica dependiente del Ministerio de Obras
Públicas (MOP). Estos organismos marcaron los primeros pasos en el
desarrollo institucional del sector sanitario del país.

Durante la presidencia de don Carlos Ibáñez del Campo se unifican estos


organismos, con la intención de refundir en una sola institución las funciones
relativas al suministro de agua potable y servicios de alcantarillado, creándose
en 1953, en el MOP, la Dirección de Obras Sanitarias (D.O.S).

A la D.O.S se le dio las funciones de “estudiar, proyectar, construir, reparar,


conservar, explotar, mejorar, administrar y supervigilar los servicios de agua
potable, alcantarillado y desagüe que se ejecutan con fondos del Estado o con
su aporte” (Superintendencia de Servicios Sanitarios, 2009), principalmente, en
las áreas urbanas de Chile.

En 1959, se realiza la XII Asamblea Mundial de la Salud. En ésta, se aprueba


como acción prioritaria de los Estados el abastecimiento público de agua
potable y, en 1961, se promulga la Carta de Punta del Este, en la cual los
Ministros de Salud de Latinoamérica establecieron como meta para la región
abastecer al 50% de la población rural concentrada durante la década 1960-
1970 (Panel. Dirección de Presupuesto. 2007).

A inicios de la década de los sesentas, Chile presentaba una alta tasa de


morbilidad y mortalidad, principalmente en la población infantil, vinculada con la
ingesta de agua dulce no potabilizada. Enfermedades como la diarrea, cólera,
hepatitis y tifus, entre otras, impactaban a la población como pestes e inhibían
el bienestar social y desarrollo del país. “El Estado de Chile no contaba con
ningún organismo responsable del abastecimiento de agua potable en

15
comunidades rurales y los servicios que se habían construido fueron iniciativas
aisladas, de instituciones que contaron con aportes extranjeros” (Panel.
Dirección de Presupuesto. 2007: 54). La cobertura de abastecimiento en agua
potable en las zonas rurales no superaba el 6%, situación compartida con la
mayoría de los países latinoamericanos.

Con estos antecedentes como marco, durante la presidencia de Eduardo Frei


Montalva (1964-1970) se designó al Servicios Nacional de Salud (SNS) como
organismo ejecutor del Programa Nacional de Agua Potable Rural. El SNS, por
medio de la Oficina de Saneamiento Rural (OSR), dio inicio el año 1964 a la
primera etapa de saneamiento básico en los territorios rurales. Esta etapa duró
seis años y estuvo financiada por un préstamo que el Banco Interamericano del
Desarrollo (BID) le otorgó al Estado de Chile, en el marco de “La Alianza para el
Progreso” 3. Los contratos siguientes los firmó la Junta Militar de Gobierno, en
1977 y 1981 (Dirección de Presupuesto. 2007).

El Programa Nacional de Agua Potable Rural, en su primera etapa consistía en


la instalación de infraestructura para producir y distribuir agua potable, y
fomentar el desarrollo de la comunidad por medio de la creación y/o
fortalecimiento de organizaciones sociales destinadas a administrar y explotar
los sistemas de producción y distribución de agua potable (actividad que a la
fecha continúan realizando), y una fuerte campaña de educación social que
apuntaba a cambiar los hábitos de consumo de la población rural valorando el
agua potable por sobre el agua cruda, de vertiente o pozos, para el consumo
humano. Por medio del Programa, el Estado instalaba la infraestructura,

3
La Alianza para el Progreso fue un programa que apuntaba al desarrollo socioeconómico de
Latinoamérica. Preveía un plan de carácter decenal y fue aprobado por casi la totalidad de los
países participantes de la Organización de Estados Americanos (OEA), excepto Cuba, el 17 de
agosto de 1961 en la conferencia de Punta del Este (Uruguay), durante el gobierno del
presidente de Estados Unidos John Fitzgerald Kennedy.
http://es.wikipedia.org/wiki/Alianza_para_el_Progreso.

16
capacitaba a la comunidad para explotar y administrar estos sistemas y
reeducaba a la población en torno a sus hábitos de consumo.

Era un programa compuesto por tres componentes y distintos proyectos. Los


componentes del Programa eran: la infraestructura destinada a la producción de
agua potable, el fortalecimiento comunitario y la educación social. En el marco
de la Alianza para el Progreso, la integralidad del Programa apostaba al
desarrollo de las localidades rurales.

El producto de esta primera etapa fueron 199 localidades rurales concentradas


con abastecimiento de agua potable (Dirección de Presupuesto, 2007).

Entre los años 1970 a 1976 el Programa no contó con financiamiento para su
ejecución y en el marco de la privatización del Estado, en 1975 el Programa
cambia de organismo ejecutor quedando bajo la responsabilidad de la Dirección
de Obras Sanitarias (DOS). En 1977 obtiene el segundo financiamiento
crediticio del BID y el programa se estableció en la D.O.S, desde donde se
ejecutó la segunda etapa beneficiando con abastecimiento de agua potable a
142 localidades rurales concentradas (Dirección de Presupuesto, 2007).

A pesar de estos logros, en el sector rural la D.O.S no logró la intención de


unificar en un solo organismo las funciones relativas al suministro de agua
potable y el servicio de alcantarillado, pues en la práctica este organismo
compartía responsabilidades con otras instituciones (Pflieger, 2008).

En las áreas urbanas actuaba la D.O.S en conjunto con la División de Servicios


Sanitarios ,del Ministerio de Vivienda y Urbanismo que proyectaba, construía y
reparaba redes de agua potable y alcantarillado; la empresa de Agua Potable
de Santiago, de la Municipalidad de Santiago, que administraba el servicio de
agua potable del sector central de Santiago; y la empresa Municipal de
Desagüe de Valparaíso y Viña del Mar, de la Municipalidad de Valparaíso, que

17
administraba el servicio de alcantarillado de la provincia de Valparaíso
(Superintendencia de Servicios Sanitarios, 2009).

En las zonas rurales existía la Oficina de Saneamiento Rural del Ministerio de


Salud Pública a cargo de estudiar, proyectar, construir y asesorar a la
comunidad organizada en la operación y mantención de los servicios de
abastecimiento de agua para poblaciones rurales con menos de 1.000
habitantes; la Sección de Higiene Ambiental del mismo Ministerio, que
habilitaba o supervigilaba el abastecimiento de agua para la población rural
dispersa, así como el de alcantarillado o saneamiento básico para las zonas
rurales del país; y la Oficina de Ingeniería Sanitaria de la Corporación de la
Reforma Agraria del Ministerio de Agricultura, que habilitaba redes de agua
potable para los asentamientos campesinos, y para aquellos lugares donde no
existían proyectos de desarrollo rural integrados (Superintendencia de Servicios
Sanitarios, 2009).

Con el fin de resolver los problemas producidos por la incapacidad de la D.O.S


para aglutinar a todos los organismos públicos a cargo del sector sanitario, en
1977 se da inicio a la Gran Reforma del Sector Sanitario (Alfaro, 2008). Esta
reforma le entregó el patrocinio y centralización de los servicios del sector
sanitario, al Servicio Nacional de Obras Sanitarias (SENDOS), “bajo la tutela
reforzada del MOP” (Pflieger, 2008).

El SENDOS tenía como características ser una institución autónoma del


Estado, de derecho público, con personalidad jurídica y patrimonio propio,
otorgado por el Fisco, desconcentrada territorialmente y relacionada con el
Estado a través del Ministerio de Obras Públicas. Este servicio estaba
compuesto por una Dirección Nacional y once Direcciones Regionales (Pflieger,
2008). Las regiones de Santiago y Valparaíso permanecieron bajo la gestión de
empresas autónomas, Empresa Metropolitana de Obras Sanitarias (EMOS) y
Empresa Sanitaria de Valparaíso (ESVAL). En estos casos SENDOS actuaba

18
como “ente regulador, definiendo las estructuras tarifarias, estableciendo las
normas, controlando los presupuestos y los resultados” (Aguas Andinas, 2000
en Pflieger, 2008).

Esta modalidad de organización del sector sanitario, con SENDOS como base,
posibilitó un importante crecimiento, principalmente en lo relativo a la cobertura
de los servicios sanitarios urbanos.

En los territorios rurales SENDOS focalizó su accionar en el abastecimiento de


agua potable, en desmedro de los servicios de alcantarillado y tratamiento de
aguas residuales domésticas, ejecutando la tercera y cuarta etapa del
Programa de Agua Potable Rural.

Estas etapas fueron realizadas con financiamiento del BID, logrando una
cobertura de 473 localidades rurales concentradas. Al finalizar la cuarta etapa
(1991-1992), el Estado de Chile incorpora en el presupuesto de la Nación el
Programa de Abastecimiento de Agua Potable a los Sectores Rurales
concentrado (APR), sin considerar cobertura para saneamiento básico,
alcantarillado y tratamiento de aguas residuales domésticas (Dirección de
Presupuesto, 2007).

En 1988 se promulga la Ley General de Tarifas de Servicios Sanitarios que,


junto al Decreto Supremo N° 456 de 1989, establecen las bases de los
procedimientos y normas que hacen posible la fijación de tarifas para los
servicios sanitarios y el régimen de aportes reembolsables. El mismo año
(1988) se promulga la Ley General de Servicios Sanitarios4, que fijó la
normativa de operación de las empresas de servicios sanitarios, públicas y
privadas, las condiciones de servicio y el régimen de concesiones aplicables a
éstas (Alé, J en revista AIDIS Chile, 2009).

4
Decreto con fuerza de Ley N° 382 del Ministerio de Obras Públicas, publicado en el Diario
Oficial el 21 de Junio de 1989.

19
La modalidad de concesión les otorga la responsabilidad del abastecimiento del
agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas residuales a actores
privados.

Los territorios rurales quedaron exentos de la modalidad de concesiones que


regula la Ley General de Servicios Sanitarios, por lo que la planificación y el
abastecimiento de los servicios sanitarios básicos se ubicaron en un espacio
intermedio entre la política pública de salud, la de infraestructura y vivienda
rural, y la política medio ambiental. Su regulación jurídica está dada por un
conjunto de cuerpos legales que “solamente establecen disposiciones que
obligan a cumplir con las normas relativas a la prestación de servicios sanitarios
y las exceptúan en cuanto al cumplimiento de las normas relativas al régimen
de concesiones, que recae sobre todos los sistemas públicos sanitarios”
(Dirección de Presupuesto. 2007:48).

El año 1990 SENDOS dejó de tener existencia legal y la competencia de todo lo


relacionado con el agua potable y saneamiento rural fue traspasada a la Unidad
Ejecutora de Obras Sanitarias, posterior Departamento de Programas
Sanitarios (DPS) dependiente de la Dirección de Planeamiento (Dirplan) del
MOP. A partir del año 1991 el financiamiento del Programa de Agua Potable
Rural fue asumido por el Estado de Chile e incorporado al presupuesto de la
Nación por medio de una glosa presupuestaria independiente, destinada a la
ejecución de este programa.

Entre 1992 y 1993 participó en el financiamiento del Programa de Agua Potable


Rural la Corporación de Fomento (CORFO) siendo la Dirplan, por medio del
DPS, el organismo ejecutor.

A contar de 1994 el MOP es el organismo sectorial a cargo del Programa de


Agua Potable Rural, a través de la Dirplan entre 1994-2001, y desde el 2002 a
la fecha, la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH).

20
Cabe señalar que como consecuencia de los cambios experimentados, tanto en
la institucionalidad como en las fuentes de financiamiento, el Programa de Agua
Potable Rural ha vivido transformaciones en su orientación y componentes.

Actualmente el DPS se encuentra encargado de ejecutar el presupuesto


asignado por glosa presupuestaria al Programa. Sin embargo, la administración
del presupuesto la tiene la Dirección de Obras Hidráulicas, según se establece
en la ley de presupuesto presentada por el Ministerio de Hacienda y aprobada
anualmente por el Congreso Nacional.

La Dirección de Obras Hidráulicas está encargada por Misión, según se lee en


su página Web5, de “Proyectar, construir, conservar, operar y colaborar en la
planificación de Obras Hidráulicas que permitan el óptimo aprovechamiento y
control del agua, la protección del territorio y las personas, mediante la
participación de la ciudadanía en las distintas etapas del desarrollo de los
proyectos (de infraestructura), con el propósito de contribuir al desarrollo
sustentable del País”.

De este modo, el DPS ejecuta el presupuesto definiendo a la población objetivo


del Programa de Agua Potable Rural a partir de tres componentes:

1) Instalación de agua potable “en localidades rurales concentradas – entre


150 y 3.000 habitantes con 15 viviendas por Km calle (lineal) o de futura
red de agua potable - o semiconcentradas – con al menos 80 habitantes
y 8 viviendas por Km de calle o de futura red de agua potable” (Dirección
de Presupuesto, 2007:112).

2) Ampliación y Mejoramiento de la infraestructura instalada por el


Programa; y como tercer componente se encuentra

5
Actualizado el 4 de Julio de 2010 desde
http://www.doh.gov.cl/index.php?option=com_content&task=blogsection&id=4&Itemid=26

21
3) Asesoría y Supervisión a las organizaciones sociales encargadas de
explotar y administrar la infraestructura instalada por el Programa.

Las tareas de asesoría y supervisión las desarrolla una Unidad Técnica


contratada por el Programa para apoyar a los sistemas comunitarios. En todas
las regiones del País la Dirección de Obras Hidráulicas contrata, por medio de
convenios, los servicios de las empresas sanitarias para dar asesoría y
supervisión a los sistemas de APR6.

En síntesis, la reforma del sector sanitario no dio respuestas a las necesidades


del saneamiento rural y en la actualidad, al igual que ayer, las acciones
tendientes a dotar de saneamiento básico a la población rural no concesionadas
son diversas, y en ellas participan tanto instituciones del Estado7como privados.

Desde el Estado la inversión en abastecimiento de agua potable rural del


Programa de APR, entre los años 1994 y 2008, fue de $287.300 millones. Esta
inversión, focalizado en la población rural vulnerable, financia los tres
componentes del programa.

Las iniciativas desarrolladas fuera del Programa de APR no cuentan con el


componente de asesoría y supervisión a las organizaciones comunitarias, y -al
igual que el Programa- tampoco contemplan intervenciones destinadas a

6
Sólo en la región de Antofagasta la Unidad Técnica no corresponde a una empresa sanitaria.
Por este la dirección regional de Obras Hidráulicas otorga supervisión y asesoría de los APR de
la región.
7
La Sub Secretaría de Desarrollo Regional (SUBDERE) por medio del Programa de
Mejoramiento de Barrios, el Ministerio de Vivienda y Urbanismos (MINVU) a través de lo que fue
el Programa Chile Barrio y el Ministerio de Planificación por medio del Fondo de Inversión
Social (FOSIS), han impulsado, con mayor recurrencia durante las últimas décadas, el
equipamiento en agua potable, alcantarillado, y tratamiento de aguas residuales domésticas.
Los municipios también han desarrollado algunas iniciativas de infraestructura, financiado por
medio del Sistema Nacional de Inversiones, para procurar abastecimiento de servicios
sanitarios básicos a las localidades rurales concentradas o semi concentradas.

22
educar a la población para valorar y utilizar los servicios de agua potable y
alcantarillado.

Cabe señalar que en relación al componente Asesorías y Supervisión, la


Contraloría Nacional de la República se pronunció el 11 de Abril del 2008
señalando que el Programa de APR debía brindar apoyo a las organizaciones a
cargo de la explotación y administración de sistemas de agua potable,
independientemente del origen de su financiamiento. “…, la glosa 05 señala, en
lo que interesa, que el subtítulo 31, Iniciativas de Inversión, incluye recursos por
el monto que indica para gastos de administración y supervisión asociados
directamente con los sistemas de agua potable rural a nivel nacional……Al
efecto, se hace necesario consignar que las glosas aludidas no distinguen entre
los sistemas de agua potable rural construidos con recursos sectoriales y
aquellos ejecutados a través de otras fuentes de financiamiento. Lo que impide
discriminar entre ellos para los efectos de determinar el alcance de las
atribuciones que las leyes de presupuesto han asignado en esta materia de la
Dirección de Obras Hidráulicas”. A continuación señala que “ ….no resulta
procedente que la dirección de Obras Hidráulicas limite el ejercicio de las
atribuciones que se le otorga a través de las glosas referidas, en lo que
interesa, sólo a los sistemas de agua potable financiados con fondos
sectoriales, pues ello importaría establecer una diferencia arbitraria respecto de
los ejecutados con recursos provenientes de otros orígenes, lo que se
encuentra expresamente prohibido en el artículo 19, N°2, de la Constitución de
1980” (Contraloría General de la República, 2008).

Este mandato ha significado un aumento progresivo en lo otorgado por glosa


presupuestaria a este componente del Programa como se puede observar en la
Figura 2-1.

23
Figura 2-1: Inversión Estatal en Asesoría y Supervisión para Sistemas de Agua
Potable Rural.

Fuente: Elaboración propia basada en la Ley de Presupuesto años 2007, 2008, 2009 y
2010.

Entre los años 2007 al 2008 el presupuesto aumentó en M $ 252.737, entre los
años 2008-2009 (año 2) aumentó en M$111.000 y al año 2010 (año 3) aumentó
en M$ 340.270, acumulando un incremento de M$704.007 en el presupuesto
del Programa destinado a asesoría y supervisión en el período 2007 al 2010.

Las iniciativas de inversión destinadas a dotar de servicios de alcantarillado a la


población rural se encuentran fuera del Programa de Agua Potable Rural y por
lo tanto, no cuentan con el componente de asesoría y supervisión.

2.2. Sistemas de Agua Potable Rural (APR)


Se denominan sistemas de APR a los operadores de los servicios de agua
potable y alcantarillado que cumplen parcialmente la normativa contenida en el
DFL N° 382, de 1988 del MOP, Ley General de Servicios Sanitarios; “quedando

24
excluidos del régimen de explotación bajo concesión y del régimen tarifario
aplicado a los servicios públicos que entrega el servicio a través de las redes
exigidas por la urbanización” (MIDEPLAN, 2009:2).

Estos sistemas están compuestos por seis elementos que se interrelacionan


para abastecer de aguas domiciliarias a la población rural. Estos elementos
son:

1) Recursos naturales de agua y suelo

2) Las soluciones de ingeniería

3) Las organizaciones operadoras de los servicios de agua potable y


alcantarillado.

4) Los usuarios

5) La unidad técnica.

6) El marco regulatorio y la política pública del sector sanitario rural.

2.2.1 Los recursos naturales de agua y suelo.


El recurso hídrico utilizado para la producción de agua potable, es el mismo que
se utiliza para producir el servicio de alcantarillado y tratamiento de aguas
residuales, y es principalmente del tipo subterráneo meteórico8. Es decir, para
producir los servicios sanitarios básicos se capta desde bajo la superficie de la

8
Las fuentes de agua se puede dividir en cuanto a su contenido de sales en dulces y saladas.
Las fuentes de aguas salobres se utilizan en forma muy extraordinaria sólo cuando no se
detectan fuentes de aguas dulces (León, R.1982)

25
tierra las aguas que tienen su origen en la atmósfera y que forman parte del
ciclo hidrogeológico9, (León, R. 1982).

El agua nunca es químicamente pura y su calidad varía según las capas de


suelo que atraviese. “Las sustancias en disolución las obtiene de la
desintegración de rocas, de los gases del aire, de los gases volcánicos y de
fuentes orgánicas” (León, R. 1982:21). También, pueden presentar
contaminación bacteriana producto de sustancias producidas por los desechos
industriales o mineros así como salinidad al mezclarse con agua salada en los
territorios del borde costero.

La elección del tipo de fuente para los sistemas de producción de agua potable
considera, el respaldo que posee la fuente de agua meteórica para responder a
la explotación del recurso durante todo el año y por el período de previsión
definido10.

La captación de napas subterráneas a profundidad pueden ser de dos tipo:


horizontales, correspondientes a drenes o galerías; y verticales, equivalentes a
pozos.

En los terrenos donde se ubican las aguas subterráneas se pueden distinguir


dos zonas: la superior o de aireación y la zona de saturación. La zona superior
o de aireación corresponde a la parte donde el agua envuelve a los granos en

9
La característica de meteórico del recurso hídrico utilizado para los servicios de agua potable y
alcantarillado las circunscribe en la siguiente ecuación general LL= E+S+I. Donde LL es el agua
lluvia caída en un período, E equivale a la evaporación más la transpiración de los vegetales, S
es el agua superficial que escurre desde el área e I corresponde a la infiltración o incremento
del agua subterránea (León, R. 1982).

10
El plazo de previsión se fija teniendo en cuenta, entre otros aspectos, la economía, la vida
útil de los equipos e instalaciones, facilidad de ampliación de las obras y el funcionamiento
durante el primer período de puesta en marcha (León, R.1982).

26
forma de película y es retenida en algunos intersticios pero sin llenarlos
totalmente. El exceso de agua, que no puede ser retenida como agua pelicular
o en los intersticios, se mueve hacia abajo.

La zona de saturación es el área donde todos los huecos están llenos de agua y
esta puede escurrir como napa libre, en forma semejante a la de un canal o
bien a presión, semejando a la forma de escurrimiento que se presenta en una
cañería. La parte superior del la zona de saturación se denomina nivel freático.

Las características de escurrimiento y drenaje del suelo influyen en la


permeabilidad de éste y en la calidad de los acuíferos en virtud que las aguas
subterráneas se encuentran contenidas en algunos tipos de rocas.

2.2.2 Las soluciones de ingeniería destinadas a la producción de los


servicios de agua potable y alcantarillado.
Las soluciones de ingeniería destinadas a la producción del agua potable, como
se muestra en la Figura 2-2, están compuestas por un conjunto de subsistemas
de captación, tratamiento, regulación, distribución y suministro intradomiciliario
de agua potable.

A continuación, se describe cada uno de ellos

• Subsistema de Captación y Tratamiento de agua potable (ver Figura 2-2):


corresponde al modo de producción y consiste en captar agua cruda
desde las fuentes superficiales o subterráneas, para conducirla mediante
gravedad o impulsión hacia la planta de tratamiento, o directamente al
sistema de distribución (estanques de distribución) cuando el agua cruda
no requiere tratamiento.

En la planta de tratamiento se realiza el proceso de potabilización del


agua cruda. Este proceso de desinfección consiste en inyectar cloro

27
directamente a la conducción previa al ingreso del estanque de
regulación del agua e incluye un proceso de filtración en presión. Éste
permite abatir la eventual turbiedad, hasta un nivel que de cumplimiento
a la normativa. Cuando la fuente es subterránea es necesario chequear
la existencia de metales y sustancias como el hierro, manganeso u otros
considerando la posibilidad de introducir al diseño un componente que
mantenga la presencia de estos elementos dentro de los parámetros
aceptados por la Norma Chilena de Calidad del Agua. El más utilizado es
el de filtración en presión.

Cuando existe una elevación natural o cerro cercano a la población


usuaria del servicio de agua potable se recurre a colocar un estanque
con una altura mínima de 10 metros sobre la vivienda más alta en cota.
Si no se presentan elevaciones ni cerros se eleva en forma artificial el
estanque, mediante una torre que cuenta con una altura mínima de 8
metros sobre la vivienda más alta en cota a abastecer.

El estanque suele ser de plástico reforzado, acero u hormigón


dependiendo del volumen a regular, la estructura de la torre usualmente
es de madera, perfiles de acero u hormigón armado.

• Subsistema de Distribución de Agua Potable (Ver Figura 2-2). Consiste


en portear el agua potable desde la planta de tratamiento o estanques de
distribución, por medio de conducciones, y entregarla en la entrada de la
casa del usuario, (antes del medidor) mediante una red de tuberías. Este
sistema comprende conducciones, red de tuberías de distinto diámetro,
estanques y plantas de elevación, en caso de que requiera.

La condición de distribución del servicio de agua potable es por medio de


redes de cañería de PVC. En caso de que sea necesario colocar un

28
atravieso o reforzar la estructura de redes se emplean cañerías de acero
galvanizado.

• Subsistema intradomiciliario: Son obras destinadas a conducir el agua


potable desde la entrada de la casa o industria hasta los artefactos
sanitarios ubicados en su interior. Se compone del arranque y medidor
más todas las instalaciones interiores. Estas inversiones normalmente
son pagadas por el usuario directamente a la compañía de agua potable
y no a través de la tarifa” (MIDEPLAN 2009).

Figura 2-2: Esquema Servicio de Agua Potable Rural Fuente: Elaboración propia.

Por otra parte, las soluciones de ingeniería destinadas a la producción del


servicio de alcantarillado son “sistemas de recolección y tratamiento de las
aguas servidas provenientes de sistemas rurales de tipo centralizado

29
(densamente poblados), vale decir, que cuentan con redes de alcantarillado,
homologables a las pequeñas comunidades urbanas” (Subsecretaría de
Desarrollo Regional. 2007:115) y deben considerar técnicamente las siguiente
condiciones de borde: recolección de aguas residuales, tratamiento preliminar,
alternativas de tratamiento de aguas residuales, disposición o reutilización del
efluente tratado y manejo de lodos.
• Recolección de aguas residuales: se realiza por medio de un sistema de
redes de alcantarillado y son del tipo separatista. Es decir, recogen y
transportan exclusivamente las aguas residuales domésticas por medio
de una unión domiciliaria que conecta la vivienda a la red. cada 18,8
kilómetro, como se muestra en la Figura 2-2, se requiere de colector
(COL) una estación de bombeo o planta elevadora (PE) destinada a
elevar las aguas servidas a una cámara de inspección (CI) ubicada en la
línea de pendiente, definida en el diseño de ingeniería, para transportar
las aguas en forma gravitacional (Godoy, M.1985) Como se muestra en
la Figura 2-3 Esquema de trasporte y tratamiento de aguas residuales
domésticas.

• Tratamiento preliminar consiste en eliminar los constituyentes de las


aguas residuales cuya presencia puedan provocar problemas de
mantención y funcionamiento de los diferentes procesos, operaciones y
sistemas auxiliares11.

• Las alternativas de tratamientos de aguas residuales contemplan


tratamiento primario y secundario convencional. En el tratamiento
primario se elimina por medio de operaciones físicas, de tamizado y

11
Cabe señalar que en este punto existe una diferencia sustantiva con el pre tratamiento
industrial, en el que se tratan los constituyentes en sus fuentes de origen, antes de verterlos a la
red de alcantarillado. (Metcalf y Eddy.1996).

30
sedimentación, una fracción de los sólidos en suspensión y de la materia
orgánica del agua residual.

Como se muestra en la Figura 2-3, la línea de tratamiento del agua se


inicia con una cámara de rejas que separa los elementos sólidos del
agua, posteriormente hay un desarenador que retira las partículas de
arena para posteriormente ingresar al sedimentador primario.

El efluente de este tratamiento contiene materia orgánica que presenta


una alta demanda biológica de oxigeno, por lo que requiere un segundo
tratamiento. Sólo en comunidades pequeñas en las cuales se pueda
prescindir del tratamiento secundario se emplean los tratamientos
primarios como únicos métodos (Metcalf y Eddy. 1996).

• El tratamiento secundario de las aguas residuales está enfocado en


eliminar los sólidos en suspensión y los componentes orgánicos
biodegradables, y con frecuencia contempla la desinfección e incluye el
tratamiento biológico con fangos activados, reactores de lecho fijo, los
sistemas de lagunaje y la sedimentación” (Metcalf y Eddy. 1996).

En la Figura 2-3 se presenta esquemáticamente la línea de tratamiento


segundario del agua. Este está compuesto por un tanque de aireación
(TA) destinado a satisfacer la demanda de oxigeno que presenta la
materia orgánica para luego ingresar a un segundo sedimentador. La
Figura 2-3 muestra cómo al salir del sedimentador segundario (SS) el
agua se termina de separan de los lodos y es vertida en un cuerpo
receptor del agua. Los lodos por su parte ingresan a un sistema de
tratamiento y en forma posterior son depositados en un cuerpo receptor
de lodos

• Disposición o reutilización del efluente tratado: los métodos empleados


para evacuar los efluentes en pequeñas instalaciones, tienden a ser los

31
mismos empleados en sistemas de mayores dimensiones, como por
ejemplo sistemas subsuperficiales de absorción en terreno, aplicación
por goteo, vertido a aguas superficiales, vertido en terrenos pantanosos
artificiales, riego con rociadores, reutilización, o una combinación de
todos los anteriores (Metcalf y Eddy. 1996). En el esquema presentado
en le Figura 2-3 se señala como etapa final de la línea de tratamiento del
agua el momento en el cual esta es vertida en un cuerpo receptor

• Manejo de lodos: Los lodos o fangos obtenidos de las plantas de


tratamiento son manejados de distintas maneras y tiene un rol dentro de
las soluciones de ingenierías destinadas a ofrecer el servicio de
alcantarillado. La Figura 2-3 presenta el fin de la línea de tratamiento de
lodos y muestra el depósito de estos en un cuerpo receptor (LTL).

Nomenclatura:
UD = Uniones domiciliarias TA = Tanque de aireación
PE = Planta Elevadora SS = Sedimentador secundario
CI = Cámara de Inspección TC = Tanque de cloración
COL = Colectores LTA = Línea de tratamiento del agua
CR = Cámara de reja LTL = Línea de tratamiento de lodos
DES = Desarenador STL = Sistema de tratamiento de lodos
SP = Sedimentador primario

Figura N° 2-3. Esquema de trasporte y tratamiento de aguas residuales domésticas en


comunidades rurales. Fuente: Elaboración propia.

32
Para efectos de este estudio, se considerará la producción de los fangos y la
descarga de los efluentes tratados como parte del servicio de alcantarillado y
por lo tanto entregado y absorbido por el contexto o ambiente.

2.2.3. Las organizaciones sociales operadoras de los servicios de agua


potable y alcantarillado
Estas organizaciones son de dos tipos: organizaciones sociales comunitarias
como comités y cooperativas, y el municipio.

Los comités y las cooperativas están a cargo de operar principalmente sistemas


de producción y distribución de agua potable. El alcantarillado, entendido como
sistemas de recolección de las aguas residuales domiciliarias, al igual que el
tratamiento de éstas, se ha incorporado recientemente a la gestión comunitaria,
bajo una tutela compartida entre las organizaciones sociales y los municipios,
de las comunas de borde o territorios periurbanos de la Región Metropolitana
de Santiago

Los comités se rigen por la ley N° 19.418 de 1995 “Sobre juntas de vecinos y
demás organizaciones comunitarias”12. Esta ley reconoce a los comités como
organizaciones comunitarias funcionales, sin fines de lucro, de duración
indefinida, ilimitado número de socios y cuya personalidad jurídica se obtiene
por el mero hecho de constituirse conforme a lo establecido por esta ley.

Las cooperativas son empresas que, en concordancia con los principios de la


autoayuda, auto administración y auto responsabilidad, tienen como objetivo
mejorar las condiciones económicas de sus socios. Estas organizaciones
disponen de un marco regulatorio propio conformado por la ley de

12
La Ley de Junta de Vecinos y demás organizaciones sociales fue refundida, coordinada y
sistematizada por el Decreto Supremo N° 58 del 9 de enero de 1997.

33
Cooperativas13 y su reglamento, que junto con otras normas e instructivos de
tipo contable y administrativo son dictados por el Departamento de
Cooperativas del Ministerio de Economía.

2.2.4. Los usuarios del servicio de agua potable.


Son los destinatarios finales de los servicios de agua potable y alcantarillado.
Se caracterizan por asentarse en forma concentrada en localidades rurales de
las cuencas hidrográficas cercanas a centros urbanos y tener como actividades
productivas las de carácter agrícola extractivas, pecuniarias o pequeñas
empresas rudimentarias. “En general esta población dispone de escasos
medios económicos y frecuentemente la familia es la unidad de producción y
consumo a la vez” (MIDEPLAN, 2009).

2.2.5 La Unidad Técnica (UT).


La UT es una organización privada que actúa a nombre del Estado, y es
responsable de la ejecución, diseño y puesta en marcha de las soluciones de
ingeniería, junto con asistir técnica y administrativamente a las organizaciones
operadoras del servicio de agua potable (MIDEPLAN. 2009).

El servicio de alcantarillado cuenta como UT con los municipios. Estos


organismos actúan directa o indirectamente en el diseño, ejecución y puesta en
marcha del proyecto de ingeniería. La actuación es indirecta cuando contratan a
un ente privado para desarrollar estas funciones.

Cabe señalar que estas organizaciones asumen la responsabilidad de operar


los servicios de alcantarillado cuando los APR presentan resistencias para
incorporarlos en sus operaciones pues los municipios se encuentran a cargo de
la administración local del territorio.

13
Ley de Cooperativas es DFL N° 5 del Ministerio de Economía del 2004.

34
Como administradores locales tienen las funciones privativas de planificar y
regular la comuna, y confeccionar el plan regulador comunal. En el ámbito
territorial los municipios pueden desarrollar directamente o con otros órganos de
la administración del Estado, funciones relacionadas con la salud pública y la
protección del medio ambiente; e incluso pueden participar directamente en la
construcción de viviendas sociales e infraestructura sanitaria.

Por lo tanto, el municipio tiene atribuciones suficientes para participar como


unidad técnica en el abastecimiento de los servicios sanitarios básicos. Sin
embargo, en escasa ocasiones los municipios cuentan con profesionales y
recursos destinados a oficiar como unidades técnicas en el sector sanitario rural

2.2.6 Marco Regulatorio y Política Pública del Sector Sanitario Rural.


Con el cambio de institucionalidad, después de la “Gran Reforma del Sector
Sanitario” (Alfaro, 2008), iniciada el año 1989, materializada con la
promulgación de la Ley General de Servicios Sanitarios (Ley N° 18.777) y el
DFL N° 382 del Ministerio de Obras Públicas14, y concretada con el traspaso de
las empresas del Estado al sector privado (Alfaro, 2008; Pflieger, 2008), se le
otorga la responsabilidad de planificar y desarrollar la urbanización de los
servicios sanitarios básicos a empresas. Estas asumen la figura de sociedades
anónimas y operan con un régimen de concesiones, que define las áreas o
territorios de operación de las empresas sanitarias.

Los territorios rurales, y algunos urbanos, quedaron fuera de las áreas de


operación de las empresas sanitarias y, por lo tanto, quedaron exentos de la
modalidad de concesiones “debido probablemente a que los servicios rurales no
tendrían capacidad de autofinanciamiento” (Subsecretaria de Desarrollo
Regional, 2007).

14
Publicado en el Diario Oficial el 21 de Junio de 1989. Para mayores antecedentes se sugiere
visitar www.bcn.cl

35
La regulación jurídica del abastecimiento de los servicios de saneamiento
básicos rurales quedó constituida por un conjunto de cuerpos legales que
“solamente establecen disposiciones que obligan a cumplir con las normas
relativas a la prestación de servicios sanitarios y las exceptúan en cuanto al
cumplimiento de las normas relativas al régimen de concesiones, que recae
sobre todos los sistemas públicos sanitarios” (Dirección de Presupuesto, 2007).

2.2.6.1 Normativa Legal para el sector sanitario

Los principales cuerpos legales que enmarcan y regulan el abastecimiento de


los servicios sanitarios rurales son:

Cuerpos legales del sector sanitario rural.

a) Ley N° 19.418 de 1995 de Junta de Vecinos y demás Organizaciones


Comunitarias15. Este cuerpo legal reconoce a los comités como
organizaciones comunitarias funcionales, sin fines de lucro, de duración
indefinida, ilimitado número de socios y cuya personalidad jurídica es
otorgada por los municipios al momento de constituirse conforme a esta
ley.

b) Ley 19.549 de 1998, en su artículo 2° transitorio- aún vigente- reconoce


para los APR (comités y cooperativas) un carácter de servicios no
públicos de abastecimiento, en razón de que el servicio es proporcionado
por redes distintas a las exigidas por la Ley General de Urbanismo y
Construcción. Cabe señalar que la vigencia de este artículo, se
encuentra condicionada a la dictación de una norma legal que regule la
institucionalidad y la gestión de los sistemas sociales comunitarios de
agua potable rural.

15
El D. S N° 58 del 9 de enero de 1997 modifica el texto legal; lo refunda, coordina y
sistematiza.

36
c) DFL N° 5 del 2004 Ley General de Cooperativas, del Ministerio de
Economía. Permite a las organizaciones sociales constituirse legalmente
como cooperativas de agua potable rural, cuyo objetivo específico es
dotar de los servicios de agua potable y alcantarillado a los asociados y a
terceros. Este cuerpo legal establece que estas organizaciones se
movilizan para realizar la producción y distribución de agua potable, y la
recolección y disposición de aguas servidas mediante la creación,
adquisición, organización y administración de tareas o funciones
destinadas a su cumplimiento.

Aparte de esta normativa, que rige explícitamente al sector sanitario rural, este
sector comparte con el urbano, el siguiente conjunto de cuerpos legales:

Cuerpos legales comunes al sector sanitario rural y urbano.

a) Decreto con Fuerza de Ley (DFL) 725 de 1968 Código Sanitario del
Ministerio de Salud Pública

b) NCH N° 1.333 de 1978 Norma Chilena de Calidad del Agua. Establece


los requisitos de calidad de agua para diferentes usos del Ministerio de
Salud

c) DFL N° 1122 de 1981. Código de Aguas del Ministerio de Justicia.


Regula el otorgamiento de los derechos de uso del recurso hídrico. La
modificación al Código realizada el año 2006 establece las bases para la
creación del mercado del agua, bajo el reconocimiento del valor
económico que tiene este recurso y como un mecanismo de control para
evitar el estrés hídrico.

37
d) DFL N° 382 de 1988 Ley General de Servicios Sanitarios del Ministerio
de Obras Públicas16. Establece en el artículo 1° Transitorio, que en “lo
referido a los sistemas rurales de agua potable en tanto no cumplan con
lo prescrito en el inciso segundo del artículo 5°, no les será aplicable esta
ley. Sin perjuicio de lo anterior, estarán obligados a dar cumplimiento a
las normas relativas a la prestación de servicios sanitarios”.

El articulo 5° en sus incisos segundo, tercero y cuarto define por


“servicio público de distribución de agua potable, aquel cuyo objeto es
prestar dicho servicio, a través de las redes públicas exigidas por la
urbanización conforme a la ley, a usuarios finales obligados a pagar un
precio por dicha prestación.

Es servicio público de recolección de aguas servidas, aquel cuyo objeto


es prestar dicho servicio, a través de las redes públicas exigidas por la
urbanización conforme a la ley, a usuarios finales obligados a pagar un
precio por dicha prestación.

Es Servicio público de disposición de aguas servidas, aquel cuyo objeto


es disponer las aguas servidas de un servicio público de recolección”
(DFL 382.1998:2).

Por lo tanto, los sistemas de APR están exentos de cumplir con la


normativa que rige el presente Decreto con Fuerza de Ley (DFL 382),
dado que las redes que contemplan los sistemas de agua potable y

16
Biblioteca del Congreso Nacional. Rescatado 17112010 a las 21:00 hrs. Desde:
http://www.leychile.cl/Consulta/Exportar?radioExportar=Normas&exportar_formato=pdf&nombre
archivo=DFL-382_21-JUN
1989&exportar_con_notas_bcn=True&exportar_con_notas_originales=True&exportar_con_nota
s_al_pie=True&hddResultadoExportar=5545.2008-12-18.0.0%23

38
alcantarillado no son concebidas como redes públicas pues no
responden a la ley de urbanismo. Esto, porque los territorios rurales se
encuentran fuera del plano regulador que define los territorios urbanos
sujetos a la normativa de urbanización.

Sin perjuicio de lo anterior el artículo 52 bis permite la existencia de


operadores comunitarios de servicios sanitarios básicos siempre y
cuando no se vea comprometida o afectada la calidad y continuidad del
servicio público sanitario. De este modo, se resguarda la prestación del
servicio por medio de redes públicas de abastecimiento y se permite la
operación de otros prestadores en ausencia de la prestación pública.

d) Por tanto, “estos sistemas se forman y constituyen como un servicio


particular, bajo la forma de un Comité o Cooperativa u otra figura jurídica
que acuerden los involucrados, obteniendo los permisos de
funcionamiento del Ministerio de Salud, a través del los respectivos
Servicios de Salud del Ambiente de la jurisdicción” (Superintendencia de
Servicios Sanitarios.2010)). No obstante, los sistemas rurales deben
cumplir con las normas sobre calidad de los servicios. Ley N° 18.777 de
1989 del Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción, que
Autoriza al Estado para Desarrollar Actividades Empresariales en Materia
de Agua Potable y Alcantarillado, disponiendo la constitución de
sociedades anónimas para este efecto.

e) Ley N° 18.778 del 1989 del Ministerio de Hacienda, que establece el


Subsidio al pago de Consumo de Agua Potable y Servicios de
Alcantarillado de Aguas Servidas.

f) Ley N° 19.338 de 1994, que modifica la Ley N° 19.778 de 1989, sobre


subsidio al consumo de agua potable y alcantarillado.

39
g) Decreto Supremo (DS) N° 195 del 19 de febrero de 1998, sobre subsidio
al pago de agua potable y servicio de alcantarillado de aguas servidas. El
objetivo de este subsidio es cubrir las diferencias entre los costos de
inversión y el monto financiable por los usuarios a partir de su capacidad
de pago. Este subsidio se le entrega al operador de los servicios de agua
potable y/o alcantarillado.

e) Las normas referidas a la calidad de los servicios se encuentran


contempladas en el Capitulo 1°: Normas Generales, artículo 35. este
señala que “el prestador deberá garantizar la continuidad y la calidad de
los servicios, las que sólo podrán ser afectadas por causa de fuerza
mayor.

Sin perjuicio de lo dispuesto en el inciso anterior, podrá afectarse la


continuidad del servicio, mediante interrupciones, restricciones y
racionamientos, programados e imprescindibles para la prestación de
éste, los que deberán ser comunicados previamente a los usuarios” (DFL
382.1998).

f) Ley N° 20.417. Crea El Ministerio, el Servicio de Evaluación Ambiental y


la Superintendencia del Medio Ambiente. Que en su artículo 61 señala:
“La presente ley no afectará las facultades y competencias que la ley Nº
18.902 entrega a la Superintendencia de Servicios Sanitarios en materia
de súper vigilancia, control, fiscalización y sanción del cumplimiento de
las normas relativas a la prestación de los servicios públicos de agua
potable y alcantarillado que realicen las concesionarias de servicios
sanitarios”.

Cabe señalas que este cuerpo jurídico indica en el artículo 62 que “en
todo lo no previsto en la presente ley, se aplicará supletoriamente la ley
Nº 19.880.

40
g) DS N° 90/00. Norma de emisión para la regulación de contaminantes
asociados a las descargas de residuos líquidos a aguas marinas y
continentales superficiales del Ministerio Secretaría General de la
Presidencia.

h) DS N° 50 de 2002 del Ministerio de Obras Públicas, que aprueba el


reglamento de instalaciones domiciliarias de agua potable y de
alcantarillado.

i) DS N° 609 de 1998 del Ministerio de Obras Públicas. Establece normas


de emisión para la regulación de contaminantes asociados a las
descargas de residuos industriales líquidos a sistemas de alcantarillados.

j) DS N° 46 de 2002 del Ministerio Secretaría General de la Presidencia.


Establece la norma de emisión de residuos líquidos a aguas
subterráneas.

k) NCH 409 de 1984 del Ministerio de Salud. Establece la norma chilena


sobre calidad del agua potable para el consumo humano.

l) Decreto N° 996 NCH 777 de 1971 del Ministerio de Obras Públicas y


Transporte. Define agua potable, fuentes de abastecimiento y obras de
captación, su terminología, clasificación y requisitos.

m) DS 735 de 1969 del Ministerio de salud. Establece los requisitos del agua
para el consumo humano.

n) Circular N° 27 del 1979 del Ministerio de Salud. Actualiza las normas


sobre el control del cloro residual en las redes de agua potable.

2.2.6.2 Política Pública de Saneamiento Rural.

El Estado asume, por intermedio del Ministerio de Obras Públicas, la


responsabilidad de posibilitar el acceso al agua potable a la población asentada

41
en los territorios rurales, como complemento a la política de salud que apunta a
disminuir las enfermedades derivadas del consumo hídrico (MIDEPLAN,
2009)17, y como fomento al desarrollo económico de los territorios desde la
política de infraestructura y vivienda rural, construyendo sistemas de
potabilización y distribución de agua domiciliarias. El tratamiento de las aguas
residuales domésticas18 se incorpora dando respuesta a necesidades de la
política medio ambiental19

Estos seis elementos interactúan entre sí como un todo integrado, lo que


permite definirlo como sistema de agua potable rural o APR.

17
Las enfermedades que frecuentemente se asocian al consumo del agua son: fiebre tifoidea,
disentería amebiana y bacilar, cólera, gastroenteritis y un tipo específico de hepatitis que es
trasmitida por medio de un virus que se aloja en el agua. Para mayor información visitar
www.oms.org
18
El Estado construye sistemas de abastecimiento de agua potable, alcantarillado y tratamiento
de aguas residuales a través del Programa de Agua Potable Rural de la Dirección de Obras
Hidráulicas del Ministerio de Obras Públicas, Programa Chile Barrio y los subsidios
habitacionales del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, y las municipalidades con apoyo de la
Subsecretaria de Desarrollo Regional del Ministerio del Interior, entre otros. Es decir, los fondos
provienen de presupuestos sectoriales y regionales.
19
La Ley de Bases de Medio Ambiente en su artículo 10 letra O y su reglamento en el articulo 2
letra O-define como proyectos de saneamiento ambiental a “sistemas de alcantarillado y agua
potable, plantas de tratamiento de agua o de residuos sólidos de origen domiciliario, rellenos
sanitarios, emisarios submarinos, sistemas de tratamiento y disposición de residuos industriales
líquidos o sólidos” Posteriormente el reglamento especifica que estos proyectos serán
entendidos de saneamiento ambiental cuando los proyectos de agua potable, alcantarillado y
tratamiento de aguas residuales domésticas apunten a abastecer con estos servicios a una
población igual o superior a los dos mil quinientos (2.500) habitantes (Art 2 Letra O número 2,3
y 4) y, por lo tanto, han de ser sometidos al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.
Rescatado 28 de Julio de 2010 desde http://www.asimet.cl/pdf/reglamento_SEIA_DS_95.pdf.

42
2.2.7. Interacción de los elementos constitutivos de los APR
La interacción de estos elementos, como se muestra en la Figura 2-4,
frecuentemente se inicia cuando los usuarios organizados en comités,
cooperativas o representados por las juntas de vecinos, solicitan del Estado la
instalación de los servicios de agua potable y/o alcantarillado, en sus
localidades rurales.

Para realizar su solicitud las organizaciones pueden relacionarse con el Estado


por medio de sus organismos ejecutores o con las municipalidades (Ver Figura
2-4). Esta forma directa para presentar la solicitud no cuenta con
procedimientos definidos y depende de cada organismo la modalidad que
asume. Por ejemplo, las solicitudes ingresadas al Estado por medio del MOP,
son acogidas en la Dirección del Obras Hidráulicas (DOH) y derivadas al
Programa de Agua Potable nacional o regional, para que el Departamento de
Programas Sanitarios (DPS) incorpore la solicitud a la cartera de proyectos del
Programa de Agua Potable Rural (PAPR).

Como se muestra en la figura 2-4 cuando la solicitud se incorpora a las carteras


de proyecto del Estado, éste en cumplimiento con la política pública y la
normativa vigente para el sector sanitario rural, por medio del DPS, contrata los
servicios de una Unidad Técnica (UT) para desarrollar los proyectos de
ingeniería destinados a producir el servicio de agua potable, financiar las obras
de infraestructura y apoyar con asesoría técnica y administrativa a los sistemas
de APR. Por lo general, la UT corresponde a una empresa sanitaria.

Con la puesta en marcha de las soluciones de ingeniería de los sistemas de


agua potable rural (APR), el Estado traspasa las instalaciones a la comunidad
organizada (ver Figura 2-4). Cabe señalar que uno de los requisitos que el

43
Estado le coloca a la comunidad, como requisito de pre factibilidad para realizar
la inversión, es la conformación legal en comité o cooperativa.

Los comités o cooperativas asumen la responsabilidad de operar las soluciones


de ingeniería y abastecer a la población rural del servicio de agua potable en
cantidad, calidad y continuidad, conforme a la NCH N° 409.

El municipio, frecuentemente, actúa como unidad técnica en los procesos de


preparación y gestión del proyecto de ingeniería y posteriormente actúa como
organización operadora del servicio, para dar respuesta a las necesidades de
alcantarillado y tratamiento de aguas residuales que presenta la población rural
como se puede observar el la Figura 2-4.

Cuando la responsabilidad del abastecimiento del alcantarillado es compartida


entre el municipio y la organización (comité o cooperativa) o es la organización
la encargada de operar en plenitud el servicio de alcantarillado el rol de UT se
desdibuja, por carecer de recursos destinados para la contratación de actores
privados que otorguen, a nombre del Estado, asesoría y supervisión en los
temas técnicos y administrativos propios de la operación del alcantarillado y sus
plantas de tratamiento.

La organización operadora se relaciona directamente con los usuarios. En el


caso de los comités y las cooperativas los usuarios por lo general son socios de
la organización, y participan en la toma de decisiones por medio de la
asamblea.

44
Figura 2-4: Interacción de Actores Sistemas de APR. Fuente: Elaboración propia

45
2.3 El Enfoque Sociotécnico para los sistemas de APR.

2.3.1 Enfoque teórico: sistemas sociotécnicos


El concepto de sistema sociotécnico tiene como base el aporte realizado por
dos importantes corrientes teóricas de la post-guerra. A saber, la Teoría de
Sistemas y la Teoría Constructivista o Constructivismo.

La teoría de sistemas aporta a la comprensión de las empresas productivas


como sistemas abiertos, complejos y dinámicos. En este sentido, cabe destacar
los aportes iniciales realizados por el Instituto Tavistock de Relaciones
Humanas en Londres y del psicólogo social Kurt Lewin (1947, 1951).

Estos aportes, por medio del estudio de los fenómenos sociales al interior de las
unidades productivas, proponen la existencia de un subsistema blando o social
en constante interrelación con un subsistema técnico o duro, al interior del
sistema organizacional o unidad productiva.

En forma posterior, los esfuerzos de Checkland (1975-1979), para definir a los


sistemas suaves u organizacionales, dan frutos en el libro Pensamiento y
Práctica Sistémica (1979). En este libro, Checkland describe y explica los
procesos que caracterizan a los sistemas sociales y define que sus trabajos
están vinculados a los estudios sobre sistemas apreciativos de Sir Geoffrey
Vickers (1965, 1967,1968, 1970 y 1983 en Albar E. 2000).

Estos estudios fueron cimentando cuestionamientos en torno a la


preponderancia del componente tecnológico y la manipulación de los
componentes de los sistemas productivos como objetos no humanos,
basándose -con frecuencia- en la regla de racionalidad económica, que excluye
la consideración de las dinámicas contextuales. Esto, sumado a la manipulación
del componente social para que se acople a la tecnología, restándole
potencialidad al componente técnico y subestimando el influjo del componente

46
social al interior de las organizaciones productivas, le otorga sentido a los
estudios de Vickers, considerados esenciales “para impulsar la consideración
del hombre y el grupo social, como sistemas plenos de propósitos” (citado en
Vázquez, H.; R. Estrada y G Monroy. 2004:11), y de este modo superar la
consideración Taylorista del trabajador como “homo economicus”.

Este enfoque teórico propone una concepción alternativa en la relación entre


sociedad y tecnología; e intenta superar la parcialidad observada en los análisis
de impacto económico, centrándose en el estudio de los factores, de diverso
orden, que configuran el desarrollo de los artefactos técnicos.

Se plantea que la influencia de la tecnología en la sociedad, no se produce


desde un ámbito exterior y que las características -económicas, políticas,
culturales, etc.- de una sociedad, ejercen un papel relevante en las decisiones
de distintas áreas jerárquicas para configurar una tecnología concreta. Es decir,
el contexto determina el diseño y la difusión que el artefacto tecnológico puede
llegar a tener.

Se presenta como hecho indiscutible que la tecnología -desde la escritura en


piedra a los computadores- puede tener efectos muy disímiles en distintos
contextos sociales e históricos.

Desde esta concepción, el desarrollo de las tecnologías es básicamente


contingente y “cualquier instancia de trayectoria “natural” o “necesaria” es el
logro (efecto), ciertamente costoso y complejo, de las estrategias de los actores
involucrados” (Albar E. 2000:147).

Por lo tanto, esta corriente teórica se ubica en un plano donde la dicotomía


entre neutralidad y determinismo tecnológico se desvanece al entender que la
tecnología ejerce una gran influencia social, no desde un ámbito externo, sino
en combinación con factores no tecnológicos.

47
De este modo, se presenta oposición a la dicotomía tradicional entre el
contenido técnico del sistema y su contexto social (organizativo, político,
administrativo etc.) y se plantea que aquellos factores que frecuentemente se
etiquetan como sociales u organizativos forman parte, en muchos casos, del
núcleo del sistema y constituyen componentes esenciales para su
funcionamiento. En consecuencia, el concepto de entorno se restringe a
aquellos elementos (tanto técnicos como sociales) que escapan al control
centralizado del sistema.

Para este enfoque, la idea de que la tecnología tiene efectos directos o


evidentes en la sociedad es demasiado simplista. La determinación de los
impactos o consecuencias secundarias de una tecnología, constituye un
proceso mucho más difícil y problemático que lo que el modelo estándar de
impacto propone. Para esta postura teórica, “no es casual que muchos de los
conflictos actuales en nuestra cultura tecnológica giren, precisamente, en torno
a controversias sobre la determinación de los efectos (ambientales, sociales,
económicos…) de tecnologías concretas” (Albar E. 2000:147).

De este modo, se enfatiza en los procesos de “configuración social” de la


tecnología, bajo la premisa de que la tecnología o los artefactos tecnológicos
constituyen un recurso, cuyo desarrollo, despliegue y utilización se hallan
dirigidos fundamentalmente por necesidades o intereses sociales de diverso
orden, como económicos, de clase, de raza, género, políticos, organizativos,
nacionalistas, entre otros.

Los sistemas sociotécnicos están constituidos por elementos, partes o


componentes de muy diversos tipos. Es decir, un sistema sociotécnico se
compone de artefactos físicos como generadores, motores, sistemas de
cloración del agua, líneas eléctricas, etc.; y por organizaciones, como
empresas, entidades financieras, etc. También se logran configurar por medio
de componentes intangibles, tales como conocimiento, artículos científicos,

48
programas de investigación, dispositivos legales como leyes o patentes; y por
recursos naturales como el agua, los peces, la biota, etc.

Estos componentes se encuentran conectados entre sí mediante una red o


estructura de interconexiones. Por lo tanto, el estado o actividad de un
componente influye en el estado o actividad de otros componentes del sistema
(Albar E. 2000).

El modelo de construcción social de la tecnología20 (su sigla en inglés es social


construction of technology -SCOT-), considera como punto de partida el
concepto de grupo social relevante (Pinch y Bijker. 1984). La identificación de
un grupo social como relevante está dada por el hecho de que los individuos
que conforman el grupo comparten un mismo significado para un determinado
artefacto técnico. En este sentido, se considera que las interacciones entre los
distintos grupos sociales, así como de los miembros de un mismo grupo,
construyen semánticamente los distintos artefactos.

En ocasiones, la construcción de ciertos artefactos queda encubierta bajo la


figura de un artefacto predominante. En estos casos, el análisis debe mostrar
flexibilidad interpretativa21 para reconstruir los significados, que los distintos
grupos sociales relevantes les asignan a cada artefacto. De este modo, SCOT
descarta la posibilidad de una descripción objetiva de la tecnología, ya que toda
descripción se contextualiza fruto de una práctica interpretativa previa.

20
El modelo “Social Construction of Teghnology” (SCOT), fue desarrollado inicialmente por
Wiebe Bijker y Trevor Pinch y vinculado por el sociólogo británico Harry Collins (1981; 1985), al
análisis de los artefactos técnicos (Albar E. 2000).
21
El concepto de Flexibilidad Interpretativa es central en el análisis constructivista, ya que por
un lado enfatiza el carácter contingente que tiene el cambio tecnológico y por otro es la llave
que abre la puerta para el análisis sociológico de la tecnología. (Albar E. 2000).

49
Conceptualizar la práctica interpretativa, expresada en el discurso de los grupos
sociales relevantes, requiere flexibilizar la interpretación. La metodología de
análisis propuesta por esta corriente teórica para flexibilizar la interpretación, se
fundamenta en el principio de simetría planteado por Bloor (1976), en el
contexto del análisis social de la ciencia. En términos simples y sintéticos, este
principio de simetría señala que, tanto para las afirmaciones científicas
consideradas como verdaderas, como aquéllas que se tienen por falsas, deben
explicarse recurriendo al mismo tipo de causas.

Pinch y Bijker (1984) incorporan este principio de simetría al análisis de la


tecnología, argumentando que tanto el buen funcionamiento – la eficacia –,
como el funcionamiento incorrecto – la ineficacia – de la máquina, deben
explicarse simétricamente; es decir, apelando a la misma fuente causal.

Para estos autores, no es posible que la eficacia se explique por su sentido


inherente de verdad basada en un buen funcionamiento, y que el
funcionamiento erróneo o ineficacia, se explique recurriendo a las
circunstancias sociales presentes en su producción. El principio de simetría
señala que cuando la ineficacia se explica por las circunstancias sociales, la
eficacia debe recurrir a estas mismas circunstancias para dar respuesta a su
éxito.

El buen funcionamiento de un artefacto debe considerarse como el resultado de


un proceso complejo de estabilización sistémica, en el cual la flexibilidad
interpretativa del artefacto decrece y da origen a un constructo discursivo
complejo, que debe analizarse principalmente como efecto u objetivo
estratégico de los actores, más que como causa.

El modelo teórico de SCOT señala que los sistemas sociotécnicos demuestran


distintos grados de estabilización y que nunca su estabilización es absoluta. Sin
embargo, existen casos en los cuales los sistemas se desestabilizan y no

50
consiguen estabilizarse, permaneciendo al margen de la historia y tendiendo a
su desaparición (Albar E. 2000).

Para mensurar las fluctuaciones en la flexibilidad interpretativa de un artefacto,


SCOT introduce el concepto de “grado de estabilización”. Éste establece que el
decrecimiento en la flexibilidad interpretativa de los actores, da cuenta de una
mayor estabilidad en el sistema sociotécnico.

Este modelo teórico combina el análisis teórico del desarrollo tecnológico con el
análisis de las condiciones estructurales. Señala que mediante cada proceso de
estabilización de los sistemas sociotécnicos se produce la emergencia de un
nuevo entorno estructural para el sucesivo desarrollo técnico.

En otras palabras, cuanto más homogéneos sean los significados atribuidos a


un artefacto, mayor es el grado de estabilidad del artefacto o sistema
sociotécnico y este mayor grado de estabilidad sistémica va acompañado por
cambios en el contexto estructural.

Por ende, la desestabilización de un sistema sociotécnico está acompañada de


cambios contextuales desestabilizadores para el sistema; y la estabilización de
un sistema se acompaña de un nuevo contexto estructural que facilita el
desarrollo tecnológico.

Por lo tanto, para este estudio los sistemas sociotécnicos son:


• Heterogéneos, pues no pertenecen exclusivamente al dominio de lo
cognitivo o técnico ni al de lo social, sino que son el resultado de la
interacción contingente entre lo cognitivo técnico y lo social. Esta
situación de heterogeneidad discursiva en la construcción y
estabilización de los sistemas sociotécnicos, los diferencia del paradigma

51
kuhniano, en relación a la homología de la estructura léxica (Kuhn.
1989)22
• Entidades dinámicas, ya que se construyen como parte del proceso de
estabilización de un artefacto y “no reside de forma interna en los
individuos, ni de forma externa en las instituciones” (Albar E. 2000:154).
En efecto, éstas son el resultado de la interacción entre los actores y
como tal, asumen las características de estas interacciones para
estabilizarse y mantenerse en el tiempo. Esta naturaleza interactiva de
los sistemas sociotécnicos, los transforma en un concepto teórico
intrínsecamente dinámico.

• Entidades con un doble carácter. Por un lado, potencia la acción de los


actores involucrados y por otro, la limita. Estos sistemas proporcionan
objetivos, ideas e instrumentos para la acción y al mismo tiempo, su
construcción limita los movimientos de los miembros de un grupo social
relevante, por cuanto, una vez creado el artefacto o estructura, éste
condiciona las interacciones futuras de los actores relevantes en busca
de la estabilización del sistema sociotécnico.

• Sistemas regidos por el principio de simetría, en el cual la explicación del


éxito y fracaso en el funcionamiento sistémico debe ser atribuida a las
mismas causas.

22
En términos simples, para Kuhn este paradigma señala que la inconmensuralidad surge
como problema de comunicación entre miembros de distintos paradigmas y la forma de evitarlo
es compartiendo la homología de la estructura léxica; ya que si esta estructura es diferente, el
mundo es distinto, el lenguaje es privado y cesa la comunicación, hasta que un grupo aprenda
el lenguaje del otro. Kuhn, T. (1989).

52
2.3.2 Los APR como sistemas sociotécnicos.
Las organizaciones sociales de APR, como sistemas distinguibles dentro de su
contexto sociocultural, son unidades adaptativas complejas capaces de cambiar
su estructura, si las condiciones ambientales o la relación entre lo elementos o
partes así lo requieren para asegurar su existencia (Rodríguez y Arnold. 2007,
Herrscger, E. 2005). Por lo tanto, la organización -aparte de ser concebida
como un sistema abierto- puede ser entendida como un sistema sociotécnico.

El fundamento del enfoque sociotécnico es que cualquier sistema de producción


requiere una organización tecnológica (equipos y distribución de procesos) y
una organización de trabajo (involucrando a aquellos que desempeñan las
tareas necesarias).

Los sistemas sociotécnicos, como se muestra en la Figura 2-5, se estructuran


sobre la base de dos subsistemas: el subsistema técnico y el subsistema social.

El subsistema técnico está compuesto por las tareas y sus exigencias, las
instalaciones y el equipamiento del ambiente físico, el equipo, instrumentos y
maquinarias utilizados en el proceso de producción, las utilidades financieras y
las técnicas operacionales, junto a la duración de la operación para desarrollar
la tarea de trasformación. Este subsistema es modelado por la especialización
de los conocimientos y las habilidades exigidas por el tipo de máquinas,
equipos, materias primas y la distribución física de las instalaciones. En
síntesis, el subsistema técnico incorpora tecnología, insumos, recursos
naturales o materia prima; y determina las características del recurso humano
que se incorpora al sistema para ofrecer eficiencia potencial al sistema
sociotécnico (Chiavenato.1999).

El subsistema social comprende a los individuos, sus características físicas y


psicológicas, las relaciones sociales entre los individuos encargados de la
ejecución de las tareas, como también las exigencias de su organización -tanto

53
formal como informal- en la situación de trabajo o transformación de los
recursos en productos o servicios. El subsistema social transforma la eficiencia
potencial en eficiencia real para el sistema.

Estos subsistemas mantienen una interacción mutua y recíproca, en la cual


cada uno determina y condiciona al otro (ver Figura 2-5).

De este modo, se puede señalar que la tarea aportada por el subsistema


técnico influencia (y no determina) la naturaleza de la organización, así como
las características psicosociales de las personas influencian (y no determinan)
la forma en que la tarea se lleva a cabo.

La forma que asume la organización es un medio para alcanzar el fin del


sistema. El fin del sistema sociotécnico es el desarrollo de su tarea primaria,
consistente en la producción de un bien o servicio. Esta tarea primaria es
perseguida por el sistema mediante la interacción entre los subsistemas
técnico y social, y el medio ambiente que los circunda.

Los sistemas de APR entendidos como sistemas de producción de servicios


sanitarios básicos tienen una organización tecnológica basada en las
soluciones de ingeniería y una organización de trabajo a cargo de un comité o
una cooperativa.

54
Figura 2-5 Los APR como sistemas sociotécnicos.
Fuente: Adaptación propia del modelo de Travoski.

Como se muestra en la Figura 2-5, estos dos subsistemas se observan en


relación al trabajo que desempeñan los APR con base al material a ser
transformado o alterado, más que centrarse en la interacción de los miembros
organizacionales (Perrow. 1967).

La transformación del recurso hídrico en los servicios de agua potable y


alcantarillado, puestos en un contexto espacial y temporal definido por la
situación presente del periurbano de la Región Metropolitana de Santiago, es la
base sobre la cual se observan estos sistemas. Sin embargo, se reconoce que
las interacciones de los miembros de la organización influyen en la estructura y
adaptación del sistema de APR.

55
Desde este punto de vista, los roles que tienen los elementos que componen el
sistema consideran, por una parte, la naturaleza de la tarea del subsistema
técnico, consistente en abastecer de servicios sanitarios básicos, y por otra, la
naturaleza de las personas para desarrollar la tarea como elementos del
subsistema social, es decir, sus características físicas, psicológicas y sociales,
junto con los valores, aspiraciones y normas que se encuentran presentes en el
contexto y que traspasan el sistema por medio del subsistema social,
reforzando su carácter comunitario rural (ver Figura 2-5).

La tarea primaria de los APR como sistemas sociotécnicos es lograr la


eficiencia en la producción de los servicios sanitarios básicos que colocan en el
medio ambiente, abasteciendo a la población rural de agua potable y
alcantarillado (ver Figura 2-5).

Este objetivo organizacional es el sentido que tienen los APR para integrarse y
constituir un sistema organizacional, donde el contexto territorial los condiciona
por medio de las características de los consumidores y las regulaciones del
sector sanitario, sus procesos adaptativos.

La eficiencia se relaciona con la necesidad de supervivencia del sistema y está


determinada por la combinación de la eficiencia potencial con la eficiencia real
del subsistema social, y su éxito para obtener incrementos a través de
soluciones técnicas, económicas y políticas.

Los sistemas de APR, en su crecimiento y expansión, han ido incorporando


nuevos elementos al proceso productivo, ofreciendo nuevos sistemas de
abastecimiento de agua para el consumo humano.

El sistema de alcantarillado como solución en redes para evacuar las aguas


residuales domésticas conlleva dos modalidades. En efecto, estas modalidades
pueden ser soluciones mecánicas, como plantas de tratamiento, o bien,
soluciones financieras, mediante las cuales se contratan los servicios de

56
terceros, públicos o privados, para que realicen las tareas de tratar y evacuar
las aguas residuales domésticas a cuerpos de aguas naturales o artificiales.

La adaptación con el entorno para los APR está referida a la capacidad de


responder a las situaciones que su contexto le impone, conservando los
recursos medioambientales que le son esenciales para la permanencia de su
carácter como operador de servicios sanitarios básicos y, por lo tanto, la
integración del alcantarillado y el tratamiento de aguas residuales es una
necesidad adaptativa de estos sistemas como operadores de aguas
domiciliarias.

La consecución de la tarea primaria involucra al conjunto de actores que


participan en los sistemas operadores de los servicios asociados a las aguas
domiciliarias en los territorios rurales. Estos actores tienen funciones adscritas a
partir de su participación en los distintos subsistemas y la relevancia que tengan
en los procesos productivos del sistema de APR.

Estas funciones originan la identificación de los actores con el sistema. La


identificación de los actores con el sistema de APR los lleva a desarrollar
características específicas, generadas a partir de la interrelación con la tarea de
producción y el compromiso de abastecer de aguas domiciliarias a la población
rural.

Sin embargo, los actores tienen metas particulares o individuales, que son
necesarias subordinar a las metas colectivas. Esta subordinación se logra por
medio de la interacción de las metas individuales con el trayecto de la tarea.
Esto, con el fin de que los productos obtenidos de esta interacción sean parte
de la cadena productiva que transforma el recurso hídrico en abastecimiento de
aguas domiciliarias en los territorios periurbanos e involucra conseguir el
objetivo sistémico en forma eficiente. Si esta identificación no se produce el

57
actor resistente a la identificación sistémica es retirado, voluntaria o
involuntariamente, del sistema

En efecto, conocimientos, información, destrezas relacionales, efectividad y


correspondencia con los objetivos y normas internas del sistema les son
requeridas a los actores para que el sistema maneje las tensiones producidas
por las interacciones entre éstos y el medio, con el fin de conservar el
abastecimiento y/o evitar el desabastecimiento por estrés hídrico.

Los sistemas de APR, para conservar su viabilidad en la consecución del


objetivo de abastecer de aguas domiciliarias, deben acumular el remanente de
los recursos naturales y/o la fuerza de trabajo que no es utilizada en los
procesos productivos y transformarlos en capital.

Este concepto de capital se puede visualizar como un conjunto de relaciones


sistémicas (técnicas y sociales), dinámicas de procesos (energía, materia,
información, tecnología), y escalas de valores, normas y aspiraciones
(Chiavenato. 1999 y Antequera, J. 2005), por medio de las cuales se van
acumulando recursos físicos, financieros, humanos y sociales.

Los APR consideran el capital o capital fijo, “como todo bien duradero, como
toda clase de riqueza social que no se consume o que sólo se consume a la
larga, o como toda utilidad limitada en cantidad que sobrevive al primer uso que
se hace de ella, en una palabra que sirve más de una vez y la renta o capital
circulante como todo bien fungible, toda riqueza social que se consume
inmediatamente, toda cosa escasa que no subsiste más, una vez ofrecido su
primer servicio, en suma que no sirve más de una vez” (Antequera. 2005. Cap.
IV, 6.4).

Otra definición de capital material o fijo para los APR es la que lo define como el
stock de recursos financieros, que período a período están disponibles para
fines de inversión (Boiser, 1997). Estos recursos son los que el sistema

58
sociotécnico acumula por medio de la negentropía sistémica en forma de
recursos patrimoniales o financieros para apoyar la expansión y crecimiento del
sistema social.

El capital físico o natural es el conjunto de bienes producidos y utilizados como


input o insumos en el proceso de producción y acoplamiento entre el
subsistema social organizacional y el subsistema técnico.

Este capital está compuesto por los recursos naturales de agua y suelo, y
sistemas mecánicos o tecnológicos, cuya interacción mediatizada por la fuerza
e intelecto del ser humano permite producir, vender o consumir otros bienes y
servicios. Se puede acumular físicamente y en valor, lo que genera economías
de escala, centralización y concentración de bienes de capital o capital material
(PNUD-Perú, 2005).

En los sistemas de APR este capital es el resultado de la interacción del


subsistema técnico con el recurso hídrico y la acumulación física de este capital
le otorga mayores niveles de eficiencia potencial para ampliar, centralizar o
concentrar su escala de abastecimiento.

El capital humano es el medio que tiene a disposición el ser humano para


transformar la naturaleza, potenciarla y generar a través de su inventiva un
conjunto de bienes y servicios que apuntan a su bienestar (Amartya, S.1998). El
capital humano de los APR está compuesto por el recurso humano del
subsistema técnico y del subsistema social.

Este capital humano consiste en los conocimientos, calificaciones,


competencias y características del elemento humano que facilitan la creación
de bienestar personal, social y económico y al mismo tiempo proporcionan la
adhesión del recurso humano a la trayectoria de la tarea para producir agua
potable y alcantarillado.

59
Esta definición de capital humano puede ser subdividida en sus componentes
para una mejor comprensión del concepto que se aborda, ya que este capital
involucra a los dos subsistemas que componen los APR.

a) El conocimiento entendido como la noción de los hechos que manejan


las personas. Según Ludvall y Johnson (1994). Este conocimiento se
puede clasificar en tres tipos de saberes

a.1) “El Saber qué”, referido al conocimiento respecto de las causalidades,


principios y leyes que rigen la naturaleza, la inteligencia humana y la
sociedad, dicho de otro modo es la capacidad de establecer relaciones.

a.2) “El saber por qué”, vinculado con el conocimiento causal, principios y
leyes de la naturaleza, la inteligencia humana y la sociedad; es decir, la
capacidad de establecer relaciones causales.

a.3) “El saber cómo" o capacidad efectiva de hacer; y

a.4) “El saber quién. Es decir, la capacidad para cooperar y comunicarse


con diferentes tipos de personas y especialistas.

b) Las competencias y destrezas se pueden definir de acuerdo a:

b.1) Competencias de comunicación, referidas a la capacidad del ser


humano para recibir y trasmitir, es decir, escuchar, hablar, leer y escribir.

b.2) Competencias de cálculo, que se relacionan con la capacidad de


realizar operaciones matemáticas, numéricas y lógicas.

b.3) Las competencias personales, que son los aspectos de la estructura de


personalidad como motivación, perseverancia, disposición a aprender. Es
decir, el desarrollo de hábitos y destrezas para realizar procesos de
aprendizaje, autodisciplina, capacidad de formar juicios fundados sobre un
conjunto pertinente de valores y objetivos vitales.

60
b.4) Las competencias relacionales, que son la capacidad de vincularse con
otros, asociadas al espíritu de equipo y al arte de dirigir.

La facilidad en el uso de tecnologías y aptitudes para resolver problemas, junto


con las características físicas y manuales de los seres humanos como edad y
género, también forman partes de las características del capital social de los
subsistemas humanos.

El capital social se caracteriza por desarrollar relaciones de confianza que


hacen predecible el comportamiento del sistema en forma endógena como
exógena. Es decir, al interior del sistema y con su entorno.

Existen diferentes enfoques y definiciones del capital social (Putnam.1994-


1995; Lechner, 2000; OCDE, 2001, Banco Mundial, 2002; entre otros). Todas
coinciden en señalar que este capital es menos tangible que el capital físico y
humano, y que puede manifestarse de distintas formas, ya que las reglas que
son válidas para un subsistema social, no necesariamente son válidas para
otro.

Putnam (1994 y 1995) define al capital social como las características de las
organizaciones sociales, entre la cuales se considera la confianza, las normas y
las redes, que pueden mejorar la eficiencia social mediante la facilitación de
acciones coordinadas para beneficio mutuo.

El capital social destaca la importancia de las asociaciones verticales y


horizontales, tanto en el ámbito personal como dentro y entre las
organizaciones sociales comunitarias o empresariales, y señala que los fuertes
lazos intracomunitarios otorgan a la familia y a la comunidad un sentido de
identidad común, permitiendo la integralidad y conservación de los APR como
sistemas comunitarios de abastecimiento de servicios sanitarios.

61
La capacidad de los APR para movilizarse por intereses colectivos dependerá
de la calidad de las instituciones formales con las cuales se relacionan y de la
institucionalidad que rige la vida de estos sistemas, como las leyes,
procedimientos, medios y canales de comunicación, forma de resolver
conflictos, liderazgo, controles y sanciones.

El capital social puede actuar a contrafilo de la estabilidad y crecimiento de los


sistemas, cuando le plantea al recurso humano altas exigencias a partir del
sentido de obligación y compromiso que genera el pertenecer al sistema de
APR y gozar de los servicios ofrecidos; y cuando las redes sociales presentan
pugnas internas que atentan contra la estabilidad del sistema.

Desde la perspectiva sociotécnica, estos capitales están interrelacionados y son


elementos esenciales en la interacción de los subsistemas social, técnico y de
medio ambiente.

El acoplamiento producido por esta interacción demanda del sistema


sociotécnico la consideración de los capitales físicos, materiales, humanos y
sociales, como prerrequisitos para su permanencia y subsistencia adaptativa.

2.4 Sustentabilidad y factores de sustentabilidad de los


sistemas comunitarios de agua potable
Tradicionalmente el enfoque utilizado por los gobiernos para el sector de agua
potable y saneamiento rural se centró en el diseño y construcción “de sistemas
basados en necesidades preconcebidas” (Sara y Katz, 1999: 2, traducción
propia), que frecuentemente se vinculaban con la salud y el bienestar de la
población, como principios de derechos humanos, soslayando la sustentabilidad
de los servicios, las características de la demanda de los usuarios y de las
organizaciones operadoras o administradoras de los servicios.

62
El estudio de Sara y Katz (1999)23 señala que los gobiernos focalizaban sus
inversiones en la construcción de nuevas instalaciones, en lugar de asegurar el
uso de las ya existentes. Las funciones de planificación de proyecto,
implementación, recuperación de costos, operación y mantención, y propiedad
de los activos se encontraban mal definidas y comunicadas.

Los autores sostienen que los gobiernos asumen que las comunidades van a
tomar la responsabilidad de gestionar la producción de los servicios a partir de
la explotación y administración de las instalaciones, pero no fomentan el
compromiso y la capacidad de éstas para hacerlo, como tampoco existe
claridad en “cómo se ha determinado el nivel de contribución y cómo esta
contribución se relaciona con la demanda de la comunidad” (Katz y Sara, 1999:
2, traducción propia).

Para este estudio la pérdida de servicios de agua potable y saneamiento son el


resultado de no contar con una comunidad involucrada, comprometida y
capacitada para realizar la gestión del abastecimiento de estos servicios.

Según Katz y Sara (1999) la consideración del recurso hídrico como bien
económico es un medio importante para favorecer la conservación y protección
del recurso, y conseguir un aprovechamiento eficaz y equitativo del agua
potable y el saneamiento por medio de un precio asequible. Esta consideración
del recurso hídrico contribuye a dar sustentabilidad a la gestión del recurso y al
abastecimiento del servicio de agua potable.

El estudio en comento (1999) definió la sostenibilidad24 de los servicios rurales


de agua como “La mantención de un nivel aceptable en el suministro del

23
Este estudio se realizó en localidades rurales de África y tuvo como objetivo general medir el
impacto de los proyectos de agua potable financiados por el Banco Mundial en estas
localidades.
24
Para efectos del presente estudio se considera sostenibilidad como sinónimo de
sustentabilidad, a pesar de que diferentes autores han señalado diferencias entre ambos

63
servicio de agua en toda la vida útil del sistema a un precio accesible para la
población beneficiaria”.

Esta definición está referida a la duración de las soluciones de ingeniería


implementadas en los proyectos y no considera, en forma explícita, la equidad
del abastecimiento ni la preservación del mismo para las generaciones futuras.
Por lo tanto, se puede señalar que esta definición apunta a la eficiencia real y la
permanencia en el tiempo de los sistemas mecánicos de abastecimiento de
aguas potable como elementos de la sustentabilidad (o sostenibilidad) de los
sistemas.

Este estudio concluye que existen tres factores críticos en la sustentabilidad de


los sistemas de potabilización de aguas domiciliarias en los territorios rurales.
Éstos son técnicos, institucionales y sociales.

• Factores técnicos
Los factores técnicos involucran cuestiones relativas al diseño y
construcción de un sistema de agua en zonas rurales y son
determinantes en la sostenibilidad del sistema, entendido como la
permanencia del abastecimiento de agua potable en el tiempo. La
deficiente calidad de la construcción o el uso de materiales de bajo nivel
pueden llevar al fracaso del sistema de agua antes de que finalice su
vida útil. Del mismo modo, fallas de diseño, incluyendo pozos poco
profundos o pozos de sondeo, y una sobreestimación de las fuentes de
agua pueden hacer que un sistema fracase desde el principio.

conceptos. La diferencia más recurrente dice relación con que sostenibilidad se vincula al
mantenimiento a través de un período de tiempo, es decir, prevalecer o sostenerse en el
tiempo, en tanto la sustentabilidad es un concepto más complejo, que incluye el crecimiento
económico, la equidad social y la preservación del medio ambiente.

64
• Factores Institucionales
Los sistemas requieren de algún tipo de estructura de gestión
comunitaria, como un comité u organización de agua. La mayoría de los
sistemas de agua rural son compartidos por varias familias y es
necesario supervisar la operación, el mantenimiento y recolectar el
dinero para cubrir los costos de estos servicios, además de realizar algún
tipo de prevención y mantenimiento, como por ejemplo, eliminar los
sedimentos de los tanques de almacenamiento o reparar los grifos que
gotean y agrietan tuberías, y mantener la fuente de agua fuera de
contaminación.
La existencia de un comité de agua u otra organización encargada de
operar el sistema fomenta la sostenibilidad, pues mejora la operación y
mantención, y genera una mayor disposición por parte de la comunidad a
mantener el sistema. En la mayoría de los casos el propósito de un
comité de agua es administrar y supervisar el sistema de operación, lo
que puede incluir la realización del mantenimiento preventivo, la
recaudación de aranceles o pagos de reparaciones, el mantenimiento de
registros de las transacciones financieras, los manuales y planos, y la
sanción de personas por falta de pago.

Cuando las comunidades no cuentan con comités de agua, a menudo


dependen de los líderes tradicionales para gestionar los sistemas de
agua. El estudio encontró que este sistema tradicional de gestión suele
ser poco eficaz.

• Factores Sociales.
La sostenibilidad de un sistema de agua depende de la voluntad de los
usuarios para proporcionar el tiempo necesario, dinero y trabajo para
mantener el funcionamiento del sistema. Esta voluntad puede verse
afectada por los factores económicos y sociales, tales como el nivel de

65
ingreso, la homogeneidad étnica, o la voluntad de los pobladores para
trabajar juntos. Cabe señalar, que la disposición a pagar dependerá de la
satisfacción del consumidor con el servicio, y generalmente esta
satisfacción estará influenciada por la comparación con la fuente de
abastecimiento de agua anterior. Por lo general, cuando las
comunidades perciben una mejora significativa en los servicios de agua
están más dispuestos a pagar por la operación y mantención del sistema.
La disposición a pagar también se ve afectada por las percepciones de la
comunidad de la propiedad o el sentido del derecho a servicios gratuitos
del gobierno.
La educación social dirigida a los hogares o familias juega un papel
importante en la sostenibilidad de los sistemas de agua y los temas más
comunes son la operatoria y mantenimiento de los sistemas, junto con la
higiene.

En los sistemas estudiados por Katz y Sara la educación social apuntaba


a ayudar a los miembros de la comunidad a asumir la responsabilidad de
mantener los sistemas, y no endosársela al proyecto o al gobierno.
Educar en cuidados de la higiene es un eslabón crucial en el aumento en
la voluntad de las personas para mantener el sistema. Si bien una fuente
de agua potable no elimina el riesgo de contaminación, educar a la gente
en los beneficios que conllevan la protección de la fuente de agua afecta
su valoración, aumentando los niveles de satisfacción y, por ende, su
disposición a mantener el sistema.

El estudio (1999) encontró que los proyectos que no contemplaban


capacitaciones o educación social tendían a presentar menor
sostenibilidad, a pesar de tener una buena construcción. En síntesis, la
educación y capacitación para los miembros del hogar y las
organizaciones de agua mejora la sostenibilidad mediante la

66
construcción de capacidades y compromiso para con el sistema de
abastecimiento de agua potable.

Junto con determinar estos aspectos de sustentabilidad para los sistemas de


agua potable, el estudio de Sara y Katz (1999) concluyó que la sostenibilidad es
mayor cuando los proyectos responden a las demandas de las comunidades.

En las comunidades donde los miembros del hogar se informaron sobre la


conveniencia de construir un sistema, el tipo de sistema y nivel de servicio
ofrecido, la sostenibilidad fue mayor que en las comunidades donde no se
informaron25.

Por otro lado, el estudio de Sara y Katz (1999) encontró que la relación entre la
demanda, su respuesta y la sostenibilidad es más fuerte cuando la solicitud
proviene directamente de parte de los miembros de los hogares, en lugar de
sus representantes como los líderes de los comités de agua, los líderes
tradicionales y los gobiernos locales. Se detectó que a menudo existen grandes
diferencias entre la demanda de las familias y las percepciones de ésta por
parte de los líderes comunitarios.

En Chile, un estudio realizado por el Departamento de Programas Sanitarios del


Ministerio de Obras Públicas de Chile (DPS), en conjunto con el Banco Mundial
(2004), definió la sustentabilidad de los sistemas de abastecimiento de agua
potable como “un proceso dinámico, complejo e integrador, que pretende que
estos servicios sean organismos financieramente autónomos, y que cuenten
con herramientas de gestión que le den viabilidad en el tiempo, proveyendo
servicios bajo los estándares de calidad, cantidad y continuidad establecidos en

25
Esta relación demostró ser estadísticamente representativa, incluso después de controlar los
efectos de factores independientes como nivel de pobreza y la distancia de una ciudad
importante; y factores relacionados con el proyecto como la formación, el tipo de tecnología y el
costo por habitante del sistema

67
la Ley y Normas Sectoriales vigentes en Chile, y que sean
medioambientalmente sustentables, para asegurar el suministro de agua
potable a las futuras generaciones” (DPS del Ministerio de Obras Públicas de
Chile y El Banco Mundial, 2004: 65).

Este concepto de sustentabilidad nos remite al crecimiento económico, el apego


a las normativas sectoriales y la preservación del medio ambiente de los
organismos operadores del servicio. Se soslaya la equidad intra e
intergeneracional en el acceso al abastecimiento de servicio de agua potable, y
apunta a la preservación del suministro, sin mencionar la conservación de los
recursos naturales que permiten la producción y el abastecimiento de este
servicio en las comunidades rurales.

Este estudio, al igual que el estudio de Sara y Katz (1999)26, encontró que
“Existen una serie de elementos, en especial de carácter jurídico,
organizacional y de política sectorial –esta última referida a las inversiones,
recuperación de costos y provisión de servicios de saneamiento-, que
desfavorecen la sustentabilidad de los servicios de APR en el mediano y largo
plazo” (Banco Mundial-Dirección de Obras Hidráulicas, 2003: 4), e identificó a
estos elementos como factores intervinientes e indicadores de la sustentabilidad
de los APR.

Estos factores son de diferentes tipos. Los de tipo técnicos consideran la


cantidad, calidad del agua y la continuidad del servicio; los factores jurídicos
consideran los derechos de aprovechamiento del agua, la propiedad de los
terrenos donde se emplazan las infraestructuras destinadas a la producción de
agua potable y la propiedad de los activos financieros de las organizaciones; los
factores financieros están establecidos por la relación entre los costos e

26
Cabe señalar que ambos estudios tuvieron como agencia patrocinante al Banco Mundial y
como principal instrumento de recolección de información el cuestionario.

68
ingresos de operación y definidos como el índice de operación y el índice de
recaudación.

Finalmente este estudio (2003), señala al factor de asistencia técnica como


elemento de sustentabilidad vinculado a la capacitación de los directivos,
operadores y administrativos de los servicios.

El año 2007, un Panel de Expertos de la Dirección de Presupuesto de Chile


(Panel Dipres) realizó una evaluación a los sistemas de abastecimiento de agua
potable y concluyó que la sustentabilidad de estos sistemas está condicionada
por la capacidad de generar cobros por concepto de tarifa, junto con la
capacidad de pago de los usuarios, dado que la escala de los servicios es “una
limitación relevante en la sustentabilidad, ya que el 74% tiene menos de 250
arranques, y sólo el 7% tiene 500 o más arranques. Esta situación determina a
futuro una fuerte dependencia de los sistemas de agua potable con el Programa
de APR (Estado) en materia de inversiones” (Dirección de Presupuesto, 2007:
125).

Otro aspecto señalado por el panel de expertos de la Dipres consiste en la


necesidad de un marco regulatorio que establezca “un sistema homogéneo de
tarificación de los sistemas de APR” (Panel Dipres, 2007: 125), que les otorgue
atribuciones para controlar las morosidades en el pago de los servicios de agua
potable y capacidades de gestión a las organizaciones administradoras. Estas
organizaciones constituyen el eje para planificar la autosustentabilidad de los
sistemas y mejorar la eficiencia en el abastecimiento del servicio de agua
potable.

Este estudio señala la necesidad de contar con una institucionalidad que les
otorgue a las organizaciones operadoras del servicio la posibilidad de optar a un
subsidio para la inversión, así como fondos concursables donde se consideren

69
y cuantifiquen los aportes de los usuarios de los sistemas como un estímulo o
incentivo positivo.

Del mismo modo, señala la conveniencia de las organizaciones operadoras de


constituirse como cooperativas “debido a su estructura empresarial y a la
legislación que recientemente entró en operación, otorgándoles un respaldo
jurídico a las actividades cooperativas” (Dirección de Presupuesto, 2007:126).

Por último, el referido estudio señala que en virtud de los efectos que el
abastecimiento de agua potable y la operación de estos sistemas tienen sobre
la salud de la población y el desarrollo de los territorios rurales, es
recomendable contar con una política pública que apoye la sustentabilidad y el
crecimiento de estos sistemas comunitarios.

Este estudio evalúa a la gestión comunitaria como exitosa, sin denotar


diferencias entre la gestión que realizan las organizaciones sociales definidas
como comités de las que cuentan con personalidad jurídica de cooperativas en
el cumplimiento del objetivo “abastecer de agua potable a la población rural,
concentrada y semiconcentrada”, reconociendo que “existen casos para los
cuales el desarrollo de una “gestión exitosa” conlleva una mayor inversión por
parte del Estado (Dirección de Presupuesto, 2007:130).

Con el fin de asir el concepto de sustentabilidad y llevarlo a la escala


comunitaria de los sistemas de APR y al contexto desde donde surge la
pregunta de investigación. Es decir, a los territorios periurbanos, se define para
este estudio como sustentabilidad de los sistemas sociotécnicos comunitarios
de agua potable rural al vínculo que los elementos del subsistema técnico y
social establecen con los capitales físico, humano y social y el impacto de este
vínculo en los procesos de crecimiento y desarrollo de los sistemas de APR
para preservar los servicios de agua potable y alcantarillado, otorgar acceso
equitativo a los servicios de agua potable y alcantarillado a la población rural

70
asentada en las localidades del periurbano abastecidas por estos sistemas
sociotécnicos, y crecer económicamente.

71
3. Pregunta, Hipótesis y Objetivos
Existe un vacío en torno a la relación de los factores de sustentabilidad
definidos en la literatura con los niveles de desempeño o eficiencia real de los
sistemas comunitarios de agua potable para sustentar el abastecimiento de
aguas domiciliarias e incorporar el alcantarillado y tratamiento de aguas
residuales domésticas, ante un aumento en el número de usuarios.

Este vacío toma sentido en los territorios rurales localizados en el borde del
límite urbano. La situación de borde de estos territorios ha permitido la
aceleración de los procesos de urbanización, como consecuencia de su
cercanía con la gran ciudad y el crecimiento demográfico que han
experimentando. Al respecto Carvajal (2007), Heinrichs, Nuissl y Rodríguez
(2009) señalan que, las comunas del borde del área metropolitana de Santiago
(AMS) tuvieron, desde los últimos veinte años, un importante aumento
demográfico y de superficie construida.

Por lo tanto, el presente estudio intenta responder a la pregunta ¿Cuáles son


los factores que subyacen en los niveles de desempeño y sustentabilidad de los
sistemas sociotécnicos de agua potable rural y que se encuentran en la base
del crecimiento y desarrollo de estos sistemas comunitarios para dar
sustentabilidad al abastecimiento de aguas domiciliarias en los asentamientos
humanos concentrados, localizados en el periurbano de la Región Metropolitana
de Santiago?

Como respuesta hipotética a la pregunta formulada se propone que los factores


que subyacen en los niveles de desempeño y sustentabilidad de los sistemas
comunitarios para abastecer de agua potable están vinculados tanto al capital
físico como al capital financiero, humano y social de estos sistemas, y se
encuentran en la base de su crecimiento y desarrollo para dar sustentabilidad al

72
abastecimiento de aguas domiciliarias a la población rural concentrada del
periurbano de la RMS.

Con el fin de responder a la pregunta de investigación y contrastar la respuesta


hipotética se definen los siguientes objetivos:

Objetivo General:

“Establecer el vínculo y el impacto del capital físico, financiero, social y humano


en el nivel de desempeño de los APR para dar sustentabilidad al
abastecimiento de aguas domiciliarias en los asentamientos humanos
concentrados, localizados en el periurbano de la Región Metropolitana de
Santiago, RMS”.

Objetivos Específicos:

1. “Realizar un diagnóstico cualitativo del contexto de los sistemas de APR


respecto de su sustentabilidad por medio de un estudio de caso en la
RMS”.

2. “Definir los factores asociados al capital físico y su vínculo con el nivel de


desempeño de los sistemas comunitarios de APR para enfrentar un
aumento en el número de usuarios e incorporar el servicio de
alcantarillado en el periurbano de la RMS”.

3. “Definir los factores asociados al capital financiero y su vínculo con el


nivel de desempeño de los sistemas comunitarios de APR para enfrentar
un aumento en el número de usuarios e incorporar el servicio de
alcantarillado en el periurbano de la RMS”.

4. “Definir los factores asociados al capital social y su vínculo con el nivel de


desempeño de los sistemas comunitarios de APR para enfrentar un

73
aumento en el número de usuarios e incorporar el servicio de
alcantarillado en el periurbano de la RMS”.

5. “Definir los factores asociados al capital humano de los sistemas


comunitarios de APR y su vínculo con el nivel de desempeño de los
sistemas comunitarios de APR para enfrentar un aumento en el número
de usuarios e incorporar el servicio de alcantarillado en el periurbano de
la en la RMS”.

6. “Identificar los factores o configuraciones que pueden fortalecer los


vínculos entre los diversos tipos de capital de un sistema sociotécnico de
APR, en pos de su mejor desempeño y sustentabilidad”.

74
4. Metodología
4.1. Tipo de estudio y enfoque metodológico.
Con el fin de responder a la pregunta del estudio, se optó por un estudio de
caso como método de indagación, que represente los factores de los sistemas
comunitarios como elementos basales en el nivel de desempeño de los APR
para enfrentar aumentos en el número de usuarios y servicios asociados a las
aguas domiciliarias, otorgando sustentabilidad al abastecimiento de servicios
sanitarios en el periurbano de la RMS.

Se definió esta metodología de indagación pues permite estudiar los sistemas


de APR dentro de su contexto y se reconoce que los límites entre éste y los
sistemas de APR no son evidentes, pues la distinción entre los subsistemas, el
sistema y el contexto, se presenta difusa producto de la variedad y cantidad de
interacciones que presentan.

Por otro lado, el método de caso permite tratar de manera efectiva con la
situación actual de los sistemas de APR, en la cual hay muchas más variables
de interés que datos observables. La variedad de interacciones que los APR
sostienen con otros sistemas complejos y abiertos requiere miradas minuciosas
que permitan identificar la forma (dato) del fondo (interacción), y el estudio de
caso ofrece la posibilidad de centrar el foco en pequeñas distinciones cuyo
aporte es contribuir en darle forma al dato.

Las características de apertura del enfoque cualitativo en lo referente a quienes


participan (muestra) así como el análisis e interpretación de los resultados, le
permitirán al estudio de caso explorar en el discurso social, que responde a la
pregunta de investigación planteada, y develar si los factores que subyacen en
los niveles de desempeño y sustentabilidad de los sistemas comunitarios para
abastecer de agua potable también se encuentran en la base de su crecimiento
y desarrollo para dar sustentabilidad al abastecimiento de aguas domiciliarias a

75
la población rural concentrada del periurbano de la RMS, determinando si estos
factores están vinculados tanto al capital físico y financiero, como al capital
humano y social de estos sistemas.

El enfoque cualitativo permite al estudio establecer el vínculo y el impacto que


los entrevistados le otorgan al capital físico, financiero, humano y social, por
medio de los factores asociados o elementos del campo semántico con el cual
discursivamente definen el nivel de desempeño de los APR para dar
sustentabilidad al abastecimiento de aguas domiciliarias a la población rural
concentrada del periurbano de la Región Metropolitana de Santiago, RMS.

Al identificar en el campo semántico de este discurso, los elementos y las


relaciones de reciprocidad que lo estructuran y componen (Canales, M. 2006),
se ofrece una descripción más allá de lo que la gente dice; se otorga una
interpretación de cómo el discurso social define los factores asociados al capital
físico, financiero, humano y social de los sistemas comunitarios de APR y su
vínculo con el nivel de desempeño de éstos para crecer y desarrollarse. Es
decir, enfrentar un aumento en el número de usuarios e incorporar el servicio de
alcantarillado, con acceso equitativo por parte de la población periurbana a las
aguas domiciliarias abastecidas, crecimiento económico de los APR, y
conservación de los servicios abastecidos para las generaciones futuras.

De este modo, se intenta complementar el conocimiento cuantitativo que se


tiene de estos sistemas otorgando una mirada cualitativa al comportamiento de
éstos, en sus procesos de expansión y desarrollo.

4.2. Definición y selección de los sistemas para el caso de


estudio.
Para seleccionar los casos de estudio se considera la personalidad jurídica de
las organizaciones de APR, junto con los criterios de aumento en el número de

76
usuarios y servicios abastecidos en las localidades rurales concentradas del
periurbano de la RMS.

En la RMS, según informa la Unidad Técnica de Aguas Andinas (2008) existen


101 sistemas comunitarios de abastecimiento de agua potable. Estos sistemas
abastecen a una población rural de 121.351 habitantes y una población urbana
de 77.643 habitantes. La población urbana que abastecen estos sistemas son
habitantes asentados en territorios que se encuentran fuera del radio de
concesión de la empresa sanitaria, dado que han devenido a urbano producto
de modificaciones a los planos reguladores comunales, sin que estén
contemplados en las áreas de operación de la empresa sanitaria. Para efectos
de este estudio estos sistemas se consideran periurbanos.

En estos territorios se localizan 14 sistemas de alcantarillado (Unidad Técnica


de Aguas Andinas. 2008); 7 de estos sistemas de alcantarillado se encuentran
bajo la tuición y responsabilidad total de los respectivos municipios, 6 sistemas
se vinculan con las organizaciones comunitarias (comités y cooperativas) por
medio de la mera gestión administrativa, específicamente por medio del cobro
de la tarifa, y sólo un sistema de la RMS se encuentra bajo la tutela y
responsabilidad total de una organización comunitaria con personalidad jurídica
de cooperativa.

Entonces, se puede señalar que en estos territorios periurbanos los sistemas


comunitarios de APR pueden gestionar las aguas domésticas de forma parcial,
es decir sólo agua potable, en forma semi-total, incluyendo en su gestión el
cobro de los servicios de eliminación y tratamiento de aguas residuales
domésticas, o bien en forma total, gestionando completamente estos servicios
en las localidades rurales.

Por lo tanto, los sistemas comunitarios de abastecimiento de aguas potable


rural (APR) seleccionados deben:

77
• Ser comités y cooperativas.

• Estar localizados en el periurbano de la RMS.

• Haber experimentado un aumento en el número de usuarios, por medio


de un proyecto de mejoramiento integral o un proyecto de ampliación de
redes.

• Contar con territorios abastecidos con el servicio de alcantarillado,


alcantarillado y planta de tratamiento.

• Dar cuenta de la gradualidad con la que se va incorporando el servicio de


alcantarillado a los sistemas comunitarios.

Por consiguiente, se definen los siguientes tipos de APR como parte del caso
de estudio:

1. Comités que gestionan las aguas domiciliarias en forma parcial,


explotando y administrando sólo sistemas de agua potable que hayan
experimentado un aumento en el número de usuarios (ampliación de
redes y/o mejoramiento integral) y donde éstos, en parte, cuenten con
alcantarillado y tratamiento de aguas residuales domésticas.

2. Cooperativas que gestionan en forma semi-total las aguas domiciliarias,


abasteciendo de agua potable y cobrando el servicio de alcantarillado,
que hayan experimentado un aumento en el número de usuarios
(ampliación de redes) y donde éstos pueden contar o no con
alcantarillado y tratamiento de aguas residuales.

3. Cooperativas que gestionan en forma total las aguas domiciliarias,


teniendo a su cargo el abastecimiento de los servicios de agua potable y
alcantarillado, que hayan experimentado un aumento en el número de
usuarios y que éstos, en parte, cuenten con alcantarillado.

78
Los sistemas de APR seleccionados son Batuco Santa Sara, El Bollenar y
Santa Margarita. Estos sistemas junto con responder a la tipología definida
manifestaron sus intenciones e interés de participar en el estudio, señalando
que tenían algo que decir en relación al crecimiento y desarrollo de los sistemas
de APR.

A continuación se presenta el mapa de localización de los tres sistemas, con el


fin de identificar su ubicación y visualizar el carácter periurbano de los APR
participantes del estudio.

Figura N° 4-1: Mapa de localización de los tres sistemas de APR. Fuente: Dirección de
Obras Hidráulicas, Departamento de Planificación. (2010).

79
4.3 Selección de los casos de estudio.
4.3.1 Comité “Batuco de Santa Sara”
Este sistema de abastecimiento de aguas domiciliarias se encuentra emplazado
en la localidad de Batuco, comuna de Lampa, a 32 kilómetros
aproximadamente, de la ciudad de Santiago. Ver Figuras 4-1 y 4-2.

La comuna de Lampa, según datos de la Secretaría Regional Metropolitana de


Planificación y Coordinación (SERPLAC), cuenta con alrededor de 32 personas
de cada 100 ocupadas en actividades productivas primarias como la agricultura,
lo que le otorga un índice de ruralidad de 31,81. Esta característica ubica a la
comuna de Lampa en el lugar número 12 del Ranking de ruralidad de la
SERPLAC Metropolitana del Ministerio de Planificación.

El comité Batuco Santa Sara se abastece de la sub-sub cuenca Estero Lampa,


comprendida entre el estero Tiltil y el estero Colina. La captación de este APR
se encuentra dentro de las áreas, declaradas por la Dirección General de
Aguas, de restricción para el otorgamiento de los derechos de uso del recurso
hídrico, desde el año 200527.

El sistema Batuco Santa Sara inicia su gestión bajo la figura jurídica de Comité-
rigiéndose por la Ley N° 19.418 de “Juntas de Vecinos y demás Organizaciones
Comunitarias”- el año 1991, con financiamiento CORFO. Actualmente abastece
a una población de 16.500 habitantes, por medio de una red de 2.750
arranques de agua potable.

El sistema de alcantarillado de Batuco se emplaza en el sector urbano de la


localidad, denominada Batuco II. Está compuesto por un sistema de redes con
una planta elevadora, y el tratamiento de aguas residuales domésticas se

27
Resolución DGA Nº 286/01-09-2005. Ver anexos en CD adjunto: Informe Técnico, página 204
y Mapa de las Áreas de Restricción y Zonas de Prohibición, al Septiembre de 2010, en la
Región Metropolitana de Santiago, página 203.

80
realiza por medio de lagunas de estabilización emplazadas en la laguna La
Cadellada. La responsabilidad de administrar y gestionar el servicio de
alcantarillado está a cargo de la Municipalidad de Lampa. Ésta firmó un contrato
de interconexión con la empresa Cascal by Water S.A el año 2008, para otorgar
los servicios de tratamiento y disposición de las aguas residuales domésticas.
Este contrato llegará a su fin entre los años 2013-2014.

Figura N° 4-2: Mapa Localización Sistema de APR Batuco Santa Sara. Fuente:
Dirección de Obras Hidráulicas, Departamento de Planificación. (2010).

81
4.3.2. Cooperativa “El Bollenar”.
Este sistema se emplaza en la localidad de El Bollenar, perteneciente a la
comuna de Melipilla. Esta comuna se encuentra a 60 kilómetros de la ciudad de
Santiago. Ver figuras 4-1 y 4-3.

Según los datos de la SERPLAC Metropolitana (2009), alrededor de 40


personas de cada 100 habitantes empleados, están dedicadas a actividades
productivas de tipo primarias como la agricultura, pesca o minería. Esta
característica de la comuna, le otorga un índice de ruralidad de 40,11 y la ubica
en la posición número 8 del ranking de ruralidad de la SERPLAC del Ministerio
de Planificación.

Este APR inicia sus operaciones el año 1969 y su última ampliación de redes de
agua potable se realizó el año 1999, por medio de un proyecto de mejoramiento
integral del sistema financiado por fondos sectoriales del programa de Agua
Potable Rural.

Este sistema se abastece de aguas subterráneas provenientes de la subcuenca


del estero Puangue, comprendida entre el estero Améstica y Bajo Junta estero
de Los Mayas. La captación de este sistema de APR se encuentra en el sector
acuífero La Higuera declarada área de restricción para el otorgamiento de los
derechos de uso del recurso hídrico por la DGA el año 2008 dentro de las áreas
de restricción desde el año 200828.

En la actualidad, abastece de agua potable a una población rural y urbana de


6.324 habitantes, por medio de 1.054 arranques, bajo la figura jurídica de
Cooperativa, rigiéndose por la Ley General de Cooperativas.

28
Resolución DGA Nº 241/31-07-2008. Ver anexo en CD adjunto Informe Técnico y Mapa de
las Áreas de Restricción y Zonas de Prohibición, al Septiembre de 2010, en la Región
Metropolitana de Santiago.

82
El sistema de eliminación de excretas se emplaza en la zona urbana de la
localidad y está compuesto por redes y cinco plantas elevadoras. El tratamiento
de aguas residuales se realiza por medio de lodos activados. Este sistema se
puso en marcha el 24 de octubre del año 2004, operando hasta la fecha. El
financiamiento provino del programa de Mejoramiento de Barrio (PMB) de la
SUBDERE y su gestión está a cargo de la municipalidad de Melipilla.

La cooperativa administra el sistema de agua potable rural y realiza el cobro del


sistema de alcantarillado y tratamiento de aguas residuales, entregando los
dineros recaudados al municipio.

Figura N° 4-3: Mapa Localización Sistema de APR El Bollenar. Fuente: Dirección


de Obras Hidráulicas, Departamento de Planificación. (2010).

83
4.3.3. Cooperativa “Santa Margarita”.
Este sistema se ubica en la localidad La Islita, perteneciente a la comuna de
Isla de Maipo ubicada, aproximadamente, a 40 kilómetros de la ciudad de
Santiago y 12 Km de la ciudad de Talagante. Ver Figuras 4-1 y 4-4.

Santa Margarita inicia sus actividades el año 1969. La última ampliación de


redes con fondos sectoriales del Programa de Agua Potable Rural se registra el
año 1989 e incluyó un mejoramiento integral del sistema (matrices, bombas y
redes).

Esta comuna cuenta con un índice de ruralidad de 37.95, lo que la ubica en el


lugar número 12 del ranking de ruralidad de la SERPLAC Metropolitana. Ver
Figuras 4-1 y 4-4.

El APR Santa Margarita se abastece de aguas subterráneas, provenientes de la


subcuenca del río Maipo, comprendida entre el estero Angostura y el río
Mapocho La captación del APR se encuentra en el sector acuífero El Monte
declarado por la DGA, el año 2010, dentro de las áreas de restricción para el
otorgamiento de los derechos de uso del recurso hídrico.29.

El sistema Santa Margarita abastece de agua potable a una población rural y


urbana de 10.374 habitantes, por medio de 1.937 arranques, bajo la figura
jurídica de cooperativa.

El 17 de mayo de 2010 la cooperativa Santa Margarita ingresó al sistema de


evaluación de impacto ambiental el proyecto Planta de Tratamiento de Aguas
Servidas La Islita, bajo la modalidad de Declaración de Impacto Ambiental
(DIA). El proyecto en la actualidad se encuentra en estado de calificación, y
consiste en “la construcción y operación de una planta de aguas servidas para

29
DGA Nº 277/24-09-2008 Modificatoria Res. DGA Nº 248/04 del 02-2010. Ver anexos en CD
adjunto: Informe Técnico y Mapa de las Áreas de Restricción y Zonas de Prohibición, al
Septiembre de 2010, en la Región Metropolitana de Santiago.

84
tratar los efluentes de la Población Cancha de Carrera (existente) y el proyecto
habitacional La Islita (en construcción), que en conjunto agrupan a una
población superior a los 8.500 habitante. La planta de tratamiento proyectada
corresponde a un sistema biológico de Lodos Activos y de Masa Fija, cuya
aireación se desarrolla mediante el uso de ruedas de disco sumergibles. Esta
tecnología ha sido utilizada exitosamente, tanto a nivel nacional como
internacional. Cabe agregar, que el agua tratada se descargará, a razón de
19,025 l/s (caudal medio de descarga), a un canal de riego que cruza por el
límite sur de la población Cancha de Carrera, aguas abajo del límite poniente de
esta población ya existente.

Figura N° 4.4: Mapa Localización Sistema de APR Santa Margarita. Fuente: Dirección
de Obras Hidráulicas, Departamento de Planificación. (2010).

85
Población
Nombre Fecha puesta en
abastecida y Gestión
y organización Localización Cuenca y sector acuífero marcha y última
número de alcantarillado
de APR ampliación
arranques
Sub-sub cuenca Estero Lampa, comprendida
Elaboración propia. 2010

entre el estero Tiltil y el estero Colina. Sector


Comuna de acuífero Lampa. Puesta en 16.500 habitantes,
Comité
Lampa La captación de APR se encuentra dentro de marcha 1991. por medio de 2.750 Sin gestión de
participantes de este estudio

Batuco Santa
Localidad de las áreas de restricción para el otorgamiento No registra arranques de agua alcantarillado
Sara
Batuco. de los derechos de uso del recurso hídrico, ampliaciones potable
desde el año 20054. .Res. DGA Nº 286/01-
09-2005
Subcuenca del estero Pangue, comprendida
entre el estero Améstica y Bajo Junta Estero
Comuna de los Mayas. Sector acuífero La Higuera Puesta en 6.324 habitantes,
Gestión
Cooperativa Melipilla. La captación del APR se encuentra dentro de marcha 1969. por medio de 1.054
parcial del
El Bollenar Localidad las áreas de restricción para el otorgamiento Ultima ampliación arranques de agua
alcantarillado
El Bollenar. de los derechos de uso del recurso hídrico el año 1999 potable
desde el año 2008.Res. DGA Nº 241/31-07-
2008
Subcuenca del río Maipo, comprendida entre
el estero Angostura y el río Mapocho
Comuna de La captación del APR se encuentra dentro de Puesta en 10.374 habitantes,
Gestión total
Cooperativa Isla de Maipo las áreas de restricción para el otorgamiento marcha 1969. por medio de 1.937
del
Santa Margarita Localidad de los derechos de uso del recurso hídrico. Ultima ampliación arranques de agua
alcantarillado.
La Islita Sector acuífero El Monte. Res. DGA Nº 1989. potable.
277/24-09-2008 Modificatoria Res. DGA Nº
248/04-02-2010

86
Figura N°4-5: Cuadro sinóptico de los sistemas de APR en estudio. Fuente:
A continuación se presenta un cuadro sinóptico (Figura 4-5) de los sistemas
4.4. Técnicas de recolección y muestra de participantes en la
investigación.
4.4.1. Técnicas de recolección de información
Las técnicas de levantamiento de información, como dispositivos auxiliares para
este estudio de caso, consisten en dos instrumentos cualitativos de
levantamiento de información: entrevistas individuales -semi-estructuradas y
abiertas-, y grupos focales.

Estos instrumentos indagan en relación a las mismas variables, indicadores y


ocasionalmente sub-indicadores. La diferencia entre uno y otro instrumento es
la forma de preguntar y el actor al cual está dirigida la consulta.

a) Entrevistas individuales: En el presente estudio se usó este dispositivo


con distintos niveles de intensidad. Con dirigentes y trabajadores de APR
se realizó una entrevista semi-estructurada y a los stakeholders,
relacionados con la toma de decisiones en torno al desarrollo y
crecimiento de los sistemas de abastecimiento de agua potable y
servicios sanitarios básicos, se les aplicó una entrevista abierta.

b) Grupo focal: Es una discusión diseñada para obtener las percepciones


de los usuarios en torno al crecimiento y desarrollo de los sistemas de
APR, con miras a otorgar sustentabilidad al abastecimiento de aguas
domiciliarias. Es un diálogo grupal orientado a identificar los elementos
relacionados con los capitales: físico, financiero, humano y social,
vinculados con el nivel de desempeño de los sistemas de APR para
otorgar sustentabilidad al abastecimiento de aguas domiciliarias desde
las percepciones de los usuarios.

Como perfil de los usuarios convocados a participar en los grupos


focales se definieron las siguientes características:

• Ser jefe de hogar (hombre o mujer)

87
• Habitar en los territorios de operación de los sistemas de APR
seleccionados como caso de estudio.

• Contar con una vivienda que se encuentre abastecida de agua


potable por el APR y que en algunos casos cuente con conexión a
la red de alcantarillado y en otros no.

• Que en algunos casos cuente con la condición de socio y en otros


sea solamente usuario del sistema de APR.

Dado que estos instrumentos indagaron en relación a las mismas variables,


dimensiones e indicadores de los sistemas sociotécnicos de APR, la
información que otorgan permite construir el discurso, por medio del cual el
grupo social relevante -compuesto por dirigentes, trabajadores, usuarios y
stakeholders- señala los problemas y las posibles soluciones presentes en el
crecimiento y desarrollo de los APR para sustentar el abastecimiento.

• Para las entrevistas individuales y abiertas la pauta contempló los


siguientes ítems:
1.- Capital físico.
2.- Capital humano
3.- Capital financiero
4.- Capital social.
5.- Contexto

• Las pautas de las entrevistas individuales y semi estructuradas se


enmarcan en los siguientes ítems y sub ítems:
1.-Capital físico.
1.1.- Cantidad y calidad del agua
1.2.- Textura y morfología del suelo.
1.3.- Infraestructura
2.- Capital humano
2.1.- Características socio-demográficas
2.2.- Asesoría y capacitación.
3.- Capital financiero.
3.1. Ingresos, egresos, ahorro e inversión.

88
3.2 Patrimonio
4.- Capital Social.
4.1 Personalidad jurídica de la organización social
4.2 Características del liderazgo
4.3. Normativa interna y canales de comunicación.
4.4.-Toma de decisión
5 Contexto de los sistemas de APR.
5.1. Regulaciones e inversión del Estado en el sector Sanitario y
los APR
5.2 Normativa e institucionalidad.
• La pauta para entrevistar a los grupos focales se estructuró bajo los
siguientes ítems y sub ítems:
1. Capital físico.
1.2. Cantidad y Calidad del agua
1.3 Morfología y textura del suelo
1.4 Infraestructura.
2.- Capital humano
2.1 Características socio-demográficas
3.- Capital financiero.
3.1.-Ingreso, ahorro, egresos e inversión.
3.2.- Patrimonio
4.- Capital social
4.1.- Liderazgo y toma de decisión
4.2.- Comunicación y normativa interna.
4.3.- Personalidad jurídica de la organización
5.- Contexto de los APR
5.1.- Regulaciones e inversión del Estado en el sector sanitario y
los APR30.

30
Para conocer las preguntas consultar Pautas en el anexo del estudio (páginas 2-16).

89
4.4.2. Muestra de participantes en la investigación.
Los actores que participan en esta investigación fueron definidos a partir del rol
que desempeñan en los sistemas de APR. Por lo tanto se escogieron a:
dirigentes y trabajadores de los sistemas de APR, usuarios jefes de hogar a
cargo de procurar los ingresos familiares para pagar los servicios de agua
potable, alcantarillado y tratamiento de aguas residuales domésticas, y
stakeholders relacionados con la toma de decisiones en torno al crecimiento y
desarrollo de los sistemas de APR y saneamiento básico.

Cabe precisar que se trata de una exploración en torno a los sistemas de APR,
por lo que no agota el amplio espectro de actores relevantes que pudieron ser
consultados en esta materia. En este contexto, se optó por excluir al Ministerio
de Vivienda y Urbanismo (MINVU) como actor de esta investigación. Esta
decisión metodológica se toma considerando que el MINVU, en virtud de la ley
N° 20.038, puede solicitar a la Superintendencia de Servicios Sanitarios31 licitar
los territorios que carezcan de concesiones sanitarias en áreas urbanizables,
solamente con el fin de desarrollar políticas, planes y programas relativos a
viviendas sociales o subsidiadas hasta 750 UF, de otro modo el MINVU no tiene
competencia en el tema de saneamiento rural y en el caso de las viviendas de
más de 750 UF el saneamiento queda bajo la tutela del urbanizador privado.

A continuación en el Cuadro 4-1 se presenta una síntesis de los participantes,


los instrumentos de recolección de información utilizados y el número de veces
en las cuales fueron utilizados estos instrumentos.

31
La Superintendencia de Servicios Sanitarios tiene como plazo perentorio seis meses para
realizar la licitación de los territorios, prorrogables por seis meses más como máximo.

90
Cuadro N°4-1: Participantes de la muestra e instrumentos de recolección de la
información. Fuente: Elaboración propia

Número de veces
Tipo de instrumento.
.Muestra de participantes utilizado.

Entrevista individual semi-


Dirigentes de organizaciones de APR 3
estructurada

Trabajadores (administrativos y Entrevista individual semi-


7
operarios) estructurada.

Stakeholders (Tomadores de
decisiones de las esferas pública y Entrevista abierta 7
privada)

Usuarios Grupos focales 3

Total de entrevistas y grupos focales 20.

4.5. Procesamiento y análisis de la información.


4.5.1. Procesamiento de la información
El procesamiento de la información se realiza sobre la base de fichas de
sistematización, en las cuales se identifican a los actores participantes del
estudio y el discurso que poseen en torno a los elementos basales en el
crecimiento y expansión de los sistemas de APR, para sustentarse el
abastecimiento de las aguas domiciliarias en el periurbano de la RMS.

Con el objetivo de resguardar la confidencialidad de los entrevistados y dado


que las citas son utilizadas como aporte para la construcción del discurso, se
codifican los datos de los actores. La codificación de los entrevistados utilizada
en el texto se presenta en los Cuadros 4-2, 4-3 y 4-4.

Por otra parte, por tratarse de un lenguaje oral, las citas ocasionalmente son
intervenidas para una mejor comprensión del texto, sin que ello afecte el
contenido del discurso y el sentido de las citas. Las anotaciones realizadas en
el texto se realizaron conforme a lo presentado en el Cuadro 4-5.

91
Cuadro N°4-2. Identificación y codificación de los dirigentes y trabajadores de la
muestra. Fuente: Elaboración propia
Dirigentes y Trabajadores Código
Comité Batuco Santa Sara Dirigente. CTBSSD

Cooperativa El Bollenar Dirigente. CPEBRD


Cooperativa Santa Margarita Dirigente. CPSMD
Comité Batuco Santa Sara Gerente. CTBSSG
Cooperativa El Bollenar Gerente. CPEBRG
Cooperativa Santa Margarita Gerente. CPSMG
Comité Batuco Santa Sara Operador de Agua Potable. CTBSSOAP.
Cooperativa El Bollenar Operador de Agua Potable. CPEBROAP.
Cooperativa Santa Margarita Operador de Agua Potable CPSM OAP.
Cooperativa Santa Margarita Operador de Aguas Residuales CSMOARD
Doméstica.

Cuadro N°4-3: Codificación de los stakeholders de la muestra.


Fuente: Elaboración propia.
Stakeholders Código

SECPLA Comuna Lampa SACL

SECPLA Comuna de Melipilla SACM


SECPLA Comuna de Isla de Maipo SACIM
Ministerio de Obras Públicas-Dirección de Obras Hidráulicas. JDPS
Jefe Dpto. Programas Sanitario (APR)
Aguas Andinas Jefe Unidad Técnica JUTAA
Gobierno Regional. Unidad de Planificación PGR
Subsecretaría de Desarrollo Regional. Jefe División de JDDR
Desarrollo Regional.

92
Cuadro N°4-4: Codificación de los usuarios de la muestra.
Fuente: Elaboración propia
Usuarios Código

Usuarios Localidad Batuco Santa Sara ULBSS

Usuarios Localidad El Bollenar ULEBR

Usuarios Localidad La Islita ULLI

Las anotaciones usadas en los textos corresponden a las presentadas en el


Cuadro 4-5:

Cuadro N°4-5: Anotaciones introducidas en el texto y sus significados.


Fuente: Elaboración propia.
Anotaciones Significado
….. Silencio en la conversación.
Se omite parte del discurso para dar mayor coherencia al
………………
texto
Palabra utilizada por el entrevistado y que se recomienda
(palabra)
omitir para una mejor comprensión del texto
Palabra sugerida en el análisis para una mejor
(palabra)
comprensión del sentido que se le quiere dar al discurso.

4.5.2. Análisis de la información.


El análisis se realiza sobre las transcripciones literales de las grabaciones
obtenidas de las entrevistas, individuales y grupales. Este material constituye el
guión que se analiza para explorar descriptivamente el discurso social en el cual
se establecen los factores que subyacen a los niveles de desempeño de los
sistemas comunitarios de APR, para dar sustentabilidad al abastecimiento de
aguas domiciliarias en el periurbano de la RMS.

El análisis consta de dos partes. En un primer momento se centra en construir


el discurso social a partir de los puntos de consenso y disenso de los discursos
individuales, que como guiones establecen el vínculo de los elementos con los

93
capitales físico, financiero, humano y social de los sistemas comunitarios de
APR, así como su impacto en el crecimiento y desarrollo de estos sistemas para
dar sustentabilidad al abastecimiento de las aguas domiciliarias en los
asentamientos humanos del periurbano de la RMS.

Luego, por medio de un análisis integrado del discurso construido, se examinan


las interrelaciones de los capitales y el impacto de estos vínculos en los
subsistemas técnico y social de los APR para propiciar en estos sistemas
niveles de desempeño que les permitan proporcionar sustentabilidad al
abastecimiento de aguas domiciliarias en el periurbano de la RMS, al enfrentar
un aumento en el número de usuarios e incorporar el servicio de alcantarillado y
tratamiento de aguas residuales domésticas.

De este modo, se alcanza el objetivo general de “Establecer el vínculo y el


impacto de los capitales físico, financiero, humano y social en el crecimiento y
desarrollo de los APR para dar sustentabilidad al abastecimiento de aguas
domiciliarias a la población rural concentrada del periurbano de la RMS”.

Para finalizar se desarrollan las conclusiones en torno al análisis integrado del


discurso, con el fin de aceptar o rechazar la respuesta hipotética formulada a la
pregunta de investigación.
Como se mencionó en el capítulo anterior, en este estudio se entiende a la
sustentabilidad de los sistemas de agua potable rural (APR) a partir del vínculo
que los elementos del subsistema técnico y social establecen con los capitales
físico, financiero, humano y social de los APR, y el impacto de este vínculo en
los procesos de crecimiento y desarrollo de los APR para preservar el
abastecimiento de los servicios de agua potable y alcantarillado con acceso
equitativo a la población rural asentada en localidades del periurbano y permitir
el crecimiento económico de los sistemas comunitarios operadores (APR).

94
5. Análisis de la información.
5.1 Construcción del discurso.
La construcción del discurso que a continuación se presenta está basada en el
habla de dirigentes, trabajadores, usuarios y stakeholders de los sistemas de
APR.

Éstos, al ser consultados sobre ¿Cuáles son los factores que subyacen en los
niveles de desempeño y sustentabilidad de los sistemas comunitarios; y que se
encuentran en la base del crecimiento y desarrollo de los sistemas de agua
potable rural (APR) para dar sustentabilidad al abastecimiento de aguas
domiciliarias en el peri urbano de la Región Metropolitana de Santiago? Van
entregando sus opiniones y experiencias, desde el rol y status que ocupan en
los APR.

El discurso se centran en identificar los puntos de consenso y disenso, de estas


opiniones y experiencias, en relación a los factores o elementos sistémicos; su
vínculo con los capitales físico, financiero, humano y social; y el impacto de
estos en los niveles de desempeño de los APR, para dar sustentabilidad al
abastecimiento de aguas domiciliarias en el periurbano de la RMS.

5.1.1 Capital Físico.


Se analiza el vínculo e impacto del capital físico en el crecimiento y desarrollo
de los APR para enfrentar un aumento en el número de usuarios y de servicios
abastecidos en el periurbano de la RMS.

5.1.1.1 Cantidad de recurso hídrico.

La cantidad del recurso hídrico es definida por los dirigentes y trabajadores de


los sistemas de APR como la cantidad de agua cruda disponible en los pozos
de captación para la producción de los servicios asociados a las aguas
domiciliarias "Nuestros pozos tienen cuarenta (40) años y la vida media de los
pozos son veinte (20) años, y contamos con agua en abundancia, ¡es una

95
bendición de Dios que nosotros tenemos y eso nos ha permitido seguir
creciendo!" (CPSMD). Para los usuarios la disponibilidad de agua para su
captación determina la existencia de estos sistemas de abastecimiento de
servicios sanitarios rurales: "Sin agua no hay nada, no hay comité de agua
potable tampoco podría haber alcantarillado, porque el alcantarillado también
necesita agua" (ULBSS).

Los entrevistados señalan que las situaciones de stress hídrico que han
experimentado los APR están relacionadas con prácticas abusivas de los
usuarios:”Es que ha crecido mucho el consumo y los pozos no dan abasto…
Esto se da generalmente después de la pascua, porque el viejo pascuero les
trae a los niños piscinas… ¡y Ud. sabe como consumen agua las piscinas! Lo
otro es el robo de agua, algunos sacan los medidores, otros colocan una T,
otros sacan las llaves de paso, perforan los medidores, los manipulan”
(CTBSSOAP) y plantean como desafío la necesidad de conservar el agua para
las generaciones futuras: "Pa’ mí que el tema del agua no es un problema hoy,
pero mañana puede que nuestros hijos tengan problemas o nuestros nietos, por
eso hay que cuidarla" (ULBSS). Del mismo modo consideran introducir el
concepto de eficiencia hídrica para capturar más recurso: “El agua es la que
hay y, por lo tanto, para poder capturar más agua es necesario manejarla
eficientemente" (PGR).

En consecuencia, la cantidad de recurso hídrico es un elemento determinante


para que el subsistema técnico de los APR tenga la potencialidad de producir
agua potable. La existencia del recurso en los territorios donde se emplazan los
APR es un mínimo necesario para estos sistemas.

La acumulación de recurso hídrico en los pozos de captación, se vincula con el


capital físico de los sistemas. Este capital impacta en el nivel de desempeño de
los APR para producir negentropía y enfrentar el crecimiento en el número de
usuarios y el desarrollo de servicios asociados a las aguas domiciliarias.

96
El recurso hídrico en abundancia en los pozos de captación, le otorga a los APR
niveles de desempeño que les permite conservar la producción del servicio de
agua potable en el presente y proyectar al futuro la incorporación del servicio de
alcantarillado, con acceso equitativo al abastecimiento de los servicios por parte
de la población rural asentada en el periurbano, y propiciar el crecimiento
económico de los sistemas sociotécnicos operadores de las aguas domiciliarias.

La escasez del recurso hídrico, le otorga a los APR niveles de desempeño para
producir en el presente el servicio de agua potable, condicionando la producción
futura de este servicio y la incorporación de nuevos usuarios a la obtención de
nuevas fuentes de agua y pozos alternativos.

5.1.1.2. Calidad del recurso hídrico

En este discurso la calidad del recurso hídrico se presenta en relación a la


conformidad que tenga el agua potable con la Norma Chilena de Calidad del
Agua:”El agua (potable) acá es buena, nunca hemos tenido problemas con
Salud (en referencia a la autoridad sanitaria), ente fiscalizador de la calidad del
agua para el consumo humano" (CTBSSG).

La existencia de contaminantes en las aguas captadas complejiza y encarece


los procesos de producción de agua potable. Esta situación obstaculiza los
niveles de desempeño para el crecimiento y desarrollo de estos sistemas:”El
problema con el agua no es la cantidad, sino que es la calidad. Nosotros
tenemos arsénico en el agua, así nos demostraron los profesionales que
vinieron acá".

Para los entrevistados la calidad del recurso ha disminuido con el transcurso del
tiempo, debido al crecimiento económico de la región: “El agua se ha ido
contaminando con el paso del tiempo y producto del desarrollo de la comuna...
Hace poco nos enteramos que algunas fuentes de agua dulce de la comuna
presentaban arsénico, y eso encarece los proyectos de agua potable” (SACL).

97
No obstante señalan, “(yo creo) que la calidad del agua del periurbano de
Santiago es buena en cantidad y calidad. Claro que cuando se iniciaron estos
sistemas la calidad del agua de Santiago era muy buena y no tenía presencia
de nitratos. Hoy sí tenemos nitratos y nitritos en nuestra agua, pero eso se debe
al desarrollo de las prácticas agrícolas y de la industria en la región. Entonces,
hubo que buscar una solución de ingeniería, que no es barata pero que existe y
por lo tanto nuestra agua es buena” (JDPS).

En relación a la calidad del agua vertida, después de ser usada intra


domiciliariamente, el discurso de los entrevistados resaltan la necesidad de que
los procesos de tratamiento y descarga de las aguas residuales se ajusten a la
norma medioambiental, y aseguren la calidad de las aguas superficiales y
subterráneas: “Vino hasta el Intendente Rosende y nosotros le mostramos lo
que estaban haciendo, y vio lo que estaban haciendo con el canal, porque
tiraban todas las aguas servidas que ya no trataban en la planta, al humedal”
(ULBSS).

La calidad del recurso hídrico en el periurbano de la RMS, si bien no es óptima,


es un elemento del capital físico del subsistema técnico de los APR, y permite a
éstos enfrentar el crecimiento en el número de usuarios por medio de sistemas
de ingeniería que, dependiendo de los contaminantes que tenga el recurso,
serán más o menos caros y complejos, en inversión y operación: “En todo caso
debemos estar bien con el manejo del arsénico, porque o si no tendríamos a la
gente de Salud acá... Ellos son muy rigurosos en el cumplimiento de la calidad
del agua... Ellos nos habrían cerrado el sistema, porque es muy peligroso para
la salud el tema del arsénico… Cuando detectaron el arsénico hubo que hacer
mejoras en el sistema para producir el agua potable, sin perjudicar a la gente de
acá” (CTBSSOAP). Al existir contaminantes en el recuso hídrico los niveles de
desempeño de los APR se ven enfrentados a implementar soluciones de
ingeniería que complejizan y encarecen la producción. Esta situación

98
obstaculiza el acceso equitativo al abastecimiento del servicio por parte de la
población asentada en el periurbano, porque disminuye la oferta y aumenta el
valor del servicio, producto de la complejidad en la operación y mantención de
las soluciones de ingeniería para reducir los contaminantes hasta niveles
aceptados por la norma.

En consecuencia, la calidad del recurso hídrico es un elemento condicionante


del subsistema técnico de los APR para que éstos tengan la potencialidad de
producir agua potable.

5.1.1.3. Morfología del suelo.

La morfología del suelo es definida por los entrevistados a partir de la


accidentalidad topográfica presente en los territorios. Sus características
establecen requisitos para los diseños de ingeniería, condicionando el nivel de
desempeño de los APR para producir los servicios de agua potable y
alcantarillado: “….es lógico que el suelo influye en la infraestructura, por la
pendiente… Una de las dificultades que yo veo, tiene que ver con las
características de tipo geográficas que condicionan la infraestructura y es que
es difícil poder instalar un pozo arriba de un cerro" (CTBSSD).

Los suelos nivelados o con escasas elevaciones implican un impacto positivo


de este capital en los niveles de desempeño de los APR, ya que otorgan al
subsistema técnico la posibilidad de crecimiento y desarrollo, por medio de la
incorporación de nuevos usuarios y/o alcantarillado en los territorios
periurbanos. Sin embargo, cuando los suelos presentan elevaciones naturales,
las soluciones de ingeniería se complejizan en operación y costos.

Cuando el valor del suelo expresa un aumento en el precio, la población


comienza a desplazarse y localizarse hacia áreas con mayor accidentalidad
geográfica y elevaciones naturales: “La gente no se coloca en lugares normales
cuando compran terrenos para hacer una población en el campo. Porque aquí

99
es donde están los problemas, en la ciudad no hay problemas de agua. Donde
se colocan en el campo normalmente son los terrenos más malos, los que están
más lejos del agua potable, donde no hay electricidad. ¿Por qué? porque son
más baratos los terrenos” (CPEBRD); "El problema físico es la dispersión física
de la población. Lo normal en las áreas rurales es que la gente esté muy
separada. Aquí hay desniveles de diez metros y para el alcantarillado
necesitamos unas bombas de impulsión para corregir esos desniveles
(CPEBRD); “Debido a la topografía de este lugar es muy caro mantener este
alcantarillado comparado con otros territorios... La forma del suelo influye en la
presión y en lo caro que sale el alcantarillado acá” (ULEBRU).

Los entrevistados, en concordancia con la literatura existente, señalan que la


especulación inmobiliaria del suelo es una variable de contexto que interviene
en los niveles de competencia del capital físico de estos sistemas sociotécnicos.

Estas prácticas especulativas encarecen el valor de los paños de suelo,


dificultando las posibilidades de obtener un terreno con las dimensiones
necesarias para emplazar una planta de tratamiento: “En relación a la obtención
de terrenos (para la instalación de sistemas de alcantarillado), hay otro tema
que tiene que ver con la especulación inmobiliaria y que de alguna manera eso
condiciona el crecimiento y el desarrollo de los sistemas de saneamiento en los
territorios periurbanos” (SACL) Esto, porque el código sanitario establece una
distancia mínima de localización entre las plantas de tratamiento y los
asentamientos humanos. Esta situación no siempre se respeta “Si no le digo
que pusieron la planta dentro de la población” (ULBSS).

5.1.1.4 Textura del suelo.

La textura del suelo es definida por los entrevistados como un factor importante
del capital físico de los sistemas de APR, pues al igual que la morfología
presenta características específicas en cada localidad, lo que condiciona la
operación y mantención de los sistemas: “La textura del suelo depende del

100
sector o la zona de la cual se hable… Hay zonas en las que se da que el suelo
es de muy buena calidad para hacer una planta de tratamiento… Los que están
cerca de Santiago tienen mucha grava, mucha piedra grande” (JDDR).

Esta situación le impone a los territorios periurbanos la necesidad de incorporar


el alcantarillado y tratamiento de aguas residuales domésticas: “Porque el suelo
es así como acuoso y eso hacía que la mugre saliera cuando esto estaba lleno
de pozos negros y fosas, y por eso pusieron el alcantarillado" (ULEBR).

Los suelos con alta infiltración le otorgan mayores niveles de desempeño al


capital físico de los sistemas, mientras que el suelo gredoso y de baja
infiltración complejizan y encarecen las soluciones de ingeniería, condicionando
los niveles de desempeño de estos sistemas para enfrentar un aumento en el
número de usuarios y servicios abastecidos: “La textura del suelo, en general,
acompaña los diseños de ingeniería que se han ido implementado” (JUTAA).

En este discurso, la textura junto a la acidez y la salinidad del suelo son


vinculadas al capital físico de los APR, presentando requerimientos operativos y
de mantención en el subsistema técnico: “El terreno para la parte operativa
presenta problemas, porque tiene demasiada sal y se come los pernos de los
collerines, los que van en la instalación de los arranques" (CTBSSOAP): “Lo
que sí tiene nuestro suelo es que es medio ácido, por lo tanto las cañerías de
PVC no nos duran mucho.... hay que estar constantemente reparando eso"
(CTBSSD).

Los entrevistados recomiendan cautelar que el emplazamiento de las plantas de


tratamientos de aguas residuales domésticas sea en suelos donde las napas de
agua subterráneas se encuentren a una cota suficiente para evitar el desborde
del alcantarillado domiciliario durante los períodos de lluvia, es decir que se
localicen sobre suelos que infiltre las aguas lluvias: “(Tenemos) Problemas con
las aguas lluvias por el tema de que las napas están muy superficiales y

101
entonces, el agua sale del suelo en vez de ser absorbida por la tierra”
(CPSMD).

Por lo tanto, la textura del suelo en el periurbano de la RMS es un elemento del


subsistema técnico que demanda de los sistemas de APR un nivel de
desempeño diferenciado del capital físico, dependiendo de la capacidad de
infiltración de la superficie. A mayor impermeabilidad, mayores requerimientos
de tipo técnico-operativos. Lo mismo sucede con la alcalinidad y salobridad del
suelo, a una menor escala.

5.1.1.5. Infraestructura de los sistemas de producción de agua potable y


alcantarillado.

En el discurso se observa conformidad con la infraestructura y sus estándares


rurales, distintos a los de las áreas urbanas concesionadas “Mire, a nosotros
nos sirve el sistema de redes de agua potable y alcantarillado” (CTBSSD). “Un
APR no está pensado para que responda a volúmenes de incendios, no tiene
grifos. Si pensamos que los estándares de las sanitarias los vamos a poner en
los territorios rurales, los costos de inversión y operación son más altos. Los
sistemas rurales se hacen con estándares rurales” (JDPS);”También tenemos
un generador propio para cada una de las plantas de tratamiento" (CPSMD).

Sin embargo, identifican como elementos críticos la localización, distribución y


crecimiento de la población, la antigüedad de los sistemas y el sistema de
transporte de las aguas residuales.

En relación a la localización de la población señalan que la ingeniería ofrece


diversos tipos de soluciones para abastecer de los servicios asociados a las
aguas domiciliarias, y que las dificultades emanan de los costos de construcción
y operación que se derivan de estas soluciones: “La solución de ingeniería
siempre es posible de implementar, lo que pasa es que se encarecen los
costos. Por ejemplo, si un grupo de personas compra un cerro para instalar sus

102
viviendas porque es más barato el suelo, debe saber que el saneamiento de
ese terreno va a salir más caro” (JDPS),“Hay sectores como Chirigüe, Carmen
Bajo, que sé yo, que tienen (y hay) mil a dos mil (1000-2000) personas juntas,
pero hay otros sectores que están separados, o sea, de repente hay sesenta,
setenta u ochenta (60-70 u 80) viviendas en una parte y setenta (70) en otra. En
estos casos el tema de la infraestructura es más difícil de conseguir, porque es
más caro, se requiere más extensión de cañerías para abastecer menos o el
mismo número de personas que en las localidades donde la gente está más
junta" (CPEBRD).

El aumento poblacional, hace necesario la incorporación del servicio de


alcantarillado al equipamiento del territorio: “Las soluciones de alguna manera
se visten de acuerdo al volumen de personas y sus necesidades, por lo tanto,
para cierto volumen uno tiene un cierto tipo de planta y para otro volumen hay
otro tipo de planta" (JUTAA).

Cuando el diseño del alcantarillado subestima la proyección en el número de


usuarios potenciales o futuros se generan dificultades en el abastecimiento del
servicio y externalidades indeseadas: “El olor era insoportable. Yo comía,
dormía y me despertaba con el olor y la única explicación que nos daban era
que estaban las bombas malas… Llegó un momento en el cual las aguas
servidas salían de la planta, como que se devolvían... Estaba superada la
capacidad de la planta" (ULBSS): “Resulta que cuando se hizo el alcantarillado,
era para una cierta cantidad de familias y al final estamos como sobrepoblados
y creo que se va a seguir construyendo otra población…. Para mí es un
problema estar conectada a la red de alcantarillado de mi vecino, porque a mí
me gusta respetar las leyes y si voy a pagar me gusta pagar lo que es mío y
estoy ocupando, y no como lo tenemos que hacer ahora, conectarnos a la red
del vecino y pagar a medias la cuenta" (ULEBR).

103
Esta situación hace que los usuarios presenten resistencia al momento de
cancelar las cuentas, por considerar que el valor de la cuota por consumo de
alcantarillado es muy superior y la calidad deficiente, en relación al servicio de
agua potable: “La calidad del sistema de alcantarillado no da cuenta del valor
que tenemos que pagar por él” (ULEBR).

Se plantea que cuando la infraestructura es antigua y el territorio aumenta su


población se requieren mejoras en los APR, y se hace necesario la
incorporación del servicio de alcantarillado al equipamiento del territorio: “Falta
un poco de acumulación… algo para almacenar agua y falta un poco más de…
¿cómo se llama?.. Renovar matrices, porque hay matrices muy antiguas que
fueron diseñadas hace, no sé… veinte o treinta (20 o 30) años atrás y era algo
básico para una que otra casa no más, y ahora que hay poblaciones....
Entonces, lo que hay que hacer es cambiar ese tipo de matrices, ése es el
problema más grande que hay" (CTBSSOAP), “Las soluciones (de
saneamiento) de alguna manera se visten de acuerdo al volumen de
necesidades de la población, por lo tanto, para cierto volumen uno tiene un
cierto tipo de planta y para otro volumen hay otro tipo de planta" (JUTAA).

En relación a los sistemas de alcantarillado como parte del equipamiento


periurbano el discurso señala que son obras de infraestructuras nuevas,
inferiores a quince años y que aun hay cierto desconocimiento sobre su
comportamiento en estos territorios: “Hoy día están funcionando algunas pero
ninguna de ellas tiene más de 15 años, no más de eso. Tampoco se tiene
mayor cantidad de años de conocimiento” (JUTAA).

Con todo, es posible identificar que las soluciones de ingeniería implementadas


para ofrecer el servicio de alcantarillado en los sistemas estudiados consiste en
redes de evacuación, piscinas de decantación y lodos estabilizados para el
tratamiento de las aguas residuales domésticas: “En los territorios periurbanos
la solución fosas-pozo deja de ser una solución, por lo que es necesario buscar

104
otra solución y la solución que la ingeniería hoy ofrece es la de sistemas de
redes de alcantarillado y lodos estabilizados para las plantas de tratamientos"
(JUTAA); "El sistema de eliminación de excretas por redes y el tratamiento de
aguas residuales por lodos, a mi juicio, son los más adecuados para las
comunidades periurbanas" (SACM).

Sin embargo, se refiere como necesario evaluar la complejidad en la operación


de esta infraestructura, ya que ésta definirá la viabilidad que tengan: “Yo creo
que en el diseño de los sistemas de APR hay que hacer un análisis más
profundo sobre qué es lo que se aplica y lo que no se aplica. Siento que el tema
operacional es un tema súper fuerte a analizar dentro del diseño de ingeniería...
Se puede evaluar qué es lo que significa operacionalmente, cuáles son las
soluciones operacionales más viables” (JUTAA).

Por ejemplo el transporte de las aguas residuales, presenta complejidades


técnicas y de uso que encarecen el servicio: "Aquí hay desniveles de diez
metros (10 m) y para el alcantarillado necesitamos unas bombas de impulsión
para corregir esos desniveles. Esta infraestructura es más complicada y por lo
mismo más cara… Pero acá ha funcionado bien, salvo algunos problemillas que
tienen que ver con que la gente no sabe utilizar este sistema, que es distinto al
pozo y la fosa que antes tenían" (CPEBRD); "Los problemas que se nos han
dado con las redes, los arranques o las matrices del agua potable han sido
todos solucionables y solucionados al tiro" (ULEBR).

En el discurso la infraestructura se presenta como adecuada para los territorios


periurbanos cuando los APR tienen a su cargo los subsistemas técnicos de
agua potable y alcantarillado: “Las soluciones de ingeniería con las que
contamos para agua potable y alcantarillado se ajustan completamente a
nuestras necesidades. Nuestras plantas de tratamiento son muy buenas sin
olor…, en realidad no tenemos de qué quejarnos en ese sentido" (CPSMD).

105
Cuando los APR tienen a cargo sólo el subsistema técnico de agua potable, y el
alcantarillado se encuentra a cargo de los municipios, la infraestructura
destinada a producir este servicio se presenta como poco adecuada para los
territorios donde se emplaza: “Yo sabía que iba a ser caro el alcantarillado por
la topografía de acá... Acá hay una enorme cantidad de plantas elevadoras que
ocupan solamente en electricidad un millón quinientos mil pesos ($1.500.000) y
sólo a veces, y con suerte, logramos juntar esa cantidad” (ULEBR).

5.1.2 Capital financiero.


Se analiza el vínculo e impacto del capital financiero en el crecimiento y
desarrollo de los APR para enfrentar un aumento en el número de usuarios y de
servicios abastecidos en el periurbano de la RMS.

El discurso define los recursos financieros en relación a la producción de agua


potable y alcantarillado; y están compuestos por los ingresos, egresos, ahorro,
patrimonio e inversión de los APR.

5.1.2.1. Ingresos

Los ingresos de los APR están constituidos por la recaudación de las cuotas de
incorporación y consumo.

La cuota de incorporación es a cargo de los usuarios y se cancela al momento


de unirse a la red de agua potable con un arranque. La organización o
subsistema social decide, si el monto de esta cuota considera ingresos para el
APR o sólo se utiliza para costear la conexión de los usuarios a la red: “La
cuota de incorporación de nuevos socios significa que ellos pagan el arranque,
que hoy significa ciento ochenta mil pesos ($180.000), ésa es la cuota de
incorporación, es decir, va incluida en el arranque" (CTBSSD); “Los ingresos de
esta cooperativa provienen de la venta de agua y también tenemos cuotas de
incorporación, porque obviamente cada vez que se incorpora alguien tiene que
pagar una cuota que se divide en la cuota de incorporación, más los gastos de

106
materiales para instalarles su medidor” (CPEBRD); “Los ingresos están
compuestos por las cuotas de incorporación y de consumo…. Pero la cuota por
consumo cubre los gastos" (CPSMD); “Las platitas que entran por la venta de
agua, hasta el momento nos alcanza para cubrir las necesidades que nosotros
tenemos” (CPEBRD).

La cuota por consumo de agua está compuesta por un cargo fijo y un monto
variable, medido en metros cúbicos de agua consumida. Un porcentaje
importante de los ingresos, obtenidos por la recaudación de la cuota por
consumo, tiene como destino cancelar los gastos de energía en combustible y
electricidad, derivados de la operación de estos sistemas.

La recaudación de las cuotas por consumo presenta morosidades inferiores al


treinta por ciento (30%): “Nosotros tenemos unas morosidades que están entre
el veinte y treinta por ciento (20%-30%)" (CPSMD); "Quiero destacar que acá
nosotros tenemos muy baja morosidad, tenemos un porcentaje de morosidad
de 13,8% y eso, más la buena administración, nos ha permitido enfrentar los
imprevistos y crecer" (CTBSSG). Los bajos porcentajes de morosidades
señalan que el valor de esta cuota refleja lo que los usuarios pueden cancelar
por consumo: “Las tarifas son adecuadas, se acomodan a lo que la gente
necesita acá" (ULEBR); "Acá, vale cien pesos el metro cúbico de agua potable"
(ULBSS) y "Yo diría que en promedio la cuota por consumo está de acuerdo
con las necesidades de estos sistemas y permite un nivel de ahorro para
enfrentar las pequeñas inversiones que (se) deben realizar" (JUTAA).

Esto, sumado a la existencia de modalidades de pago diferenciadas de acuerdo


a las posibilidades financieras de los usuarios, propicia la cancelación oportuna
de esta cuota por consumo de agua potable: “Esta cooperativa antes de cortar
el agua le da facilidades a las personas hasta aburrirse, le da facilidades. Las
personas vienen acá y hay muchas personas a las que se les solucionan los
problemas y los porcentajes de deudores de agua son bajos. Claro que no

107
hemos aumentado el valor de la cuota por consumo hace 5 años" (CPEBRD);
"Nuestras tarifas de agua potable no suben desde el año 2005, por eso este
año (el 2010) los chiquillos están al límite, con ganas de subirla" (ULEBR); “Con
esa tarifa de cien pesos ($100) nosotros hemos podido dar respuesta a las
demandas, hemos podido dar respuesta a hacer lo que nosotros tenimos que
hacer y hoy día hemos dado respuesta a la necesidad de un pozo que cuesta
una N cantidad de millones y hoy (día esta o sea) están los recursos para eso”
(CTBSSD).

Por otro lado, los usuarios plantean aprehensión ante las morosidades: “Yo
encuentro que acá deberían tener un poco más de mano dura con las personas
que no pagan, porque ponen en riesgo a todos los demás… Imagínese que la
cooperativa quebrara, qué haríamos nosotros… No se pueden aceptar
morosidades de más de dos (2) meses y acá hay gente que debe entre cinco
(5) y seis (6) meses y siguen con agua, así no se puede" (ULLI). Estas
situaciones dejan entrever el compromiso de los usuarios con los sistemas de
APR.

Cuando la gestión del alcantarillado se encuentra a cargo del municipio el


discurso refiere que las morosidades aumentan: “Acá la gente no paga el
alcantarillado y eso nos tiene con un desangre económico inmenso, porque el
Estado, el nivel central nos pasa atribuciones, a los municipios, sin
financiamiento al municipio para hacerse cargo de esta tarea” (SACM).

Las morosidades se deben a que los montos por consumo de este servicio
superan la capacidad de pago de los usuarios: “Se hicieron un montón de
reuniones con la comunidad antes de incorporar el alcantarillado y por supuesto
que estuvimos de acuerdo en incorporar el sistema de alcantarillado, era
necesario y urgente…..Con lo que no estuvimos de acuerdo fue con el cobro, el
cobro fue excesivo" (ULEBR).

108
Las altas morosidades disminuyen los ingresos del sistema para satisfacer las
necesidades de producción y distribución del servicio de alcantarillado,
impactando los niveles de competencia del municipio para conservar el
abastecimiento del alcantarillado en el presente, porque: “La gente no entiende
que están pagando un servicio distinto al agua potable y no tiene la conciencia
del costo que significa tener alcantarillado en un lugar como éste” y "En el
alcantarillado no se pueden abaratar costos y sube, por ejemplo, cada vez que
sube la luz" (CPEBRD).

En el discurso se plantea como explicación a las morosidades del servicio de


alcantarillado la comparación entre los grados de satisfacción de los usuarios
con el servicio de agua potable a cargo del APR versus el de alcantarillado
municipalizado: “Yo estoy satisfecha con el servicio de agua potable, mas no
con el de alcantarillado que está a cargo del municipio" (ULBSS); "Siempre este
servicio se ha destacado por eso, por ser un buen servicio de agua potable,
pero como dije, tengo mis reservas con el alcantarillado de la muni y si lo dan al
APR a lo mejor vamos a perder lo bueno que tenemos… Todavía a veces yo
siento malos olores, malos olores siento yo".

Por otro lado, en las localidades rurales, los usuarios están exentos del
cumplimiento de las normas relativas al régimen de concesiones que recae
sobre todos los sistemas públicos sanitarios. Es decir, están exentos de pagar
tarifa por este servicio: “Ahí hay un tema en el caso de Bollenar, porque tiene la
particularidad de que no están obligados a pagar el alcantarillado”
(SACM);”Entonces, obviamente, como no están obligados a pagar, la gente no
lo paga” (ULEBR).

Al no existir obligatoriedad legal que asegure el pago de la cuota por consumo,


al momento de asumir los gastos del alcantarillado las morosidades pueden
aumentar a niveles tal que pongan en jaque el abastecimiento de agua potable.

109
Ante esta situación financiera, el discurso plantea la importancia de que la
comunidad participe en la toma de decisión para incorporar el alcantarillado a
sus hogares y a los APR: “Esta decisión debiera ser tomada entre la
comunidad, los sistemas y la municipalidad" (SACL) porque “Se requiere plata
para construir las redes de alcantarillado y la planta de tratamiento y después
se necesita plata para conservar el sistema… Entonces, si los usuarios no
quieren pagar, Ud. dígame entonces, si la plata no es un tema. Porque le digo
yo, como dirigente, no puedo poner en riesgo la estabilidad financiera del
sistema de agua potable, porque la gente no quiere pagar el alcantarillado"
(CTBSSD).

5.1.2.2. Egresos

Con estos ingresos se financian los gastos de operación y mantención cotidiana


de los sistemas de agua potable y alcantarillado: “Con la tarifa, o sea la cuota
por consumo, nosotros financiamos todos nuestros gastos: sueldos, luz, pagar
las muestras del laboratorio, el cloro, los gastos de administración en fin, todos
los gastos que tienen que ver con el diario funcionamiento del sistema, todo lo
que tiene ver con el hecho de que esto tiene que funcionar todos los días”
(CTBSSD); “Los gastos que nosotros tenimos, son los mismos que tienen todos
los sistemas de agua, y tienen que ver con gastos administrativos, de operación
y explotación de los sistemas: materiales de oficinas, bencina, cuentas de luz,
agua, teléfono e internet, cloro...en fin todos esos gastos que permiten que
entreguemos el servicio diariamente en cantidad, calidad y continuidad de
acuerdo a la norma...No hay más gastos que esos” (CPEBRD); "Una gran
cantidad de nuestros gastos se nos van en electricidad, en energía eléctrica se
nos va un gran, gran gasto. Lo otro en insumos de la potabilización, cloro y
cosas así. Tercero, en la mantención de las plantas de tratamiento y cuarto el
gasto en personal. El orden creo que es el siguiente: El fuerte es en energía,
luego viene el gasto en personal y los insumos para potabilizar el agua y
mantener las plantas" (CPSMD); "Acá hay un punto importante que me parece

110
importante rescatar, resulta que estos sistemas funcionan con electricidad y con
combustible, es decir, necesitan energía para funcionar y la energía tiene un
valor económico que está en constante aumento, es un gasto fijo como el cloro”
(SACL); "Los ingresos de este comité provienen de los usuarios, de las
personas, de la cuota por consumo... Aquí hay un cuota por consumo que son
cien pesos el metro cúbico ($100/m3) de agua potable, fuera de eso tiene un
cargo fijo que son mil quinientos pesos ($1.500); éstas son las (dos) fuentes de
ingreso que nosotros tenimos” (CTBSSD); "Nosotros pagamos por el consumo
del agua potable una cuota y depende de cuánta agua uno use es lo que paga"
(ULBSS).

Cuando el alcantarillado está a cargo de los APR, los gastos derivados de la


operación del sistema de alcantarillado y tratamiento son incorporados a la
cuota por consumo de agua como un todo, lo que redunda en que el valor del
metro cúbico de agua consumida aumenta: “Si se asume el alcantarillado y
aumenta el número de usuarios habría que subir el valor de la cuota por
consumo para que las platas del agua no se vayan al alcantarillado"
(CTBSSOAP); “Si doblamos la tarifa, o sea dejemos en doscientos pesos el
metro cúbico ($200/m3), o sea nosotros deberíamos en cinco años (deberíamos
proyectar por ejemplo) poner el cincuenta por ciento (50%) para hacer una copa
que es lo más caro” (CTBSSD); “De los ingresos del sistema, lo único que le
puedo decir, que la boleta con alcantarillado y planta de tratamiento es más
cara que la que sólo lleva agua potable… La cuota que el comité manda a
cobro por la planta de tratamiento y el alcantarillado es de cuatro mil pesos
($4.000), mientras que el agua sin alcantarillado sale mil pesos ($1.000)”
(SACM).

En el discurso se señala que las morosidades son producto de los bajos


ingresos de los usuarios. Estos bajos ingresos son consecuencia del empleo
estacional que tiene la población rural: “Los ingresos de la gente acá son como

111
le digo de temporada… Los que trabajan en Santiago o en las empresas tienen
plata fija, pero los otros no”;”Entonces, a veces no alcanza y por eso no es
llegar y decir voy a pagar más por el agua. No po, no es llegar y aumentar los
gastos”, "Yo creo que en lo que más se gasta es en electricidad porque pucha
que es cara la luz acá y la planta de agua y la de tratamiento usan luz eléctrica
¡¡¡yo me he fijado!!! (ULBSS); "Un trabajador de acá no es muy bien
remunerado"; “Sabe que la gente acá es gente pobre, que a veces no tiene
para comer y va a poder pagar la tremenda cuenta del
alcantarillado…….¡¡¡Digamos las cosas como son, la gente no paga porque no
tiene, no porque no quiera!!” (ULEBR).

Ante esta situación el discurso refiere que el subsidio Estatal al consumo de


agua potable y alcantarillado cubre parcialmente las necesidades de los
usuarios rurales con vulnerabilidad económica: “Mucha gente acá, y yo diría
que la gran mayoría, pero no todos, tienen el subsidio al agua potable y
alcantarillado"; "Yo he escuchado eso del subsidio al agua potable sobre todo
para la gente de la tercera edad y aunque esto sea un comité, nosotros
¡tenemos derechos al subsidio! y se tramita por medio de la municipalidad, claro
que ellos no informan de subsidio, porque por ejemplo yo no tenía idea de que
existiera ese subsidio” (ULBSS).

Por lo tanto para este discurso, las necesidades de saneamiento rural son
transversales a la población rural y los recursos destinados por el Estado para
este fin son insuficientes: “Yo te digo que la plata del Estado en realidad nunca
es suficiente, porque hay mucha necesidad, por eso nosotros ponemos de
nuestros recursos para por lo menos financiar los proyectos de diseño de
ingeniería y pedir la complementación. O sea, nosotros ponemos una parte y el
Estado lo demás... Claro que el Papá Estado se tiene que poner con las más de
las lucas, pero nosotros también ponemos algo para no perjudicar a los más
pequeños que necesitan más de la platita que pone el Gobierno" (CTBSSD);

112
“Cuando partimos acá no había plata para nada. Ahora, te digo que desde hace
4 años atrás que hay plata y se ha empezado a construir APRs en diversos
sectores” (CPEBRD); y se reconoce que los montos requeridos para el
saneamiento rural, involucrando el crecimiento y desarrollo de los APR, son de
cuantías superiores a las capacidades de inversión del gestor comunitario de
estos sistemas: "En cuanto a los montos en infraestructura me parecen
fantásticos, porque yo creo que la comunidad nunca podría tener los dineros
para invertir en una ampliación de matrices, porque son millones de millones”
(CPEBRG).

5.1.2.3. Ahorros

La importancia de los ahorros para la sustentabilidad de los APR se manifiesta


en que es una práctica frecuente en los sistemas, para cubrir los eventos
inesperados que amenacen el abastecimiento. “El acto de ahorrar es una
constante en el sistema, incluso cuando tiene números rojos… Acá se intenta
dejar un dinero por concepto de ahorro todos los meses, incluso cuando
tenemos número rojos” (CPSMG):”A nosotros nos enseñaron que la cuota por
consumo debe alcanzar para todos los gastos y dejar un excedente que debe
ser de alrededor del 20%. Ese excedente había que ponerlo en una cuenta de
ahorro, pero nosotros los tenemos en fondos mutuos, para cualquier imprevisto
que no sea lo cotidiano, en este caso un tercer pozo" (CTBSSD); “Siempre
dejamos unos ahorritos en el banco para imprevistos. Eso lo aprendimos desde
el inicio y la verdad es que los ahorros nos han salvado en situaciones críticas
para emergencias que, póngase Ud. se rompe una matriz o se echa a perder
una bomba… Uno no puede esperar los tiempos de la DOH para solucionar
esos problemas, porque si bien no son una gran inversión, pueden significar
que unas familias se queden sin agua y eso es grave... Entonces, ahí tomamos
nuestros ahorros y salvamos la situación sin molestar a nadie… Nosotros
podemos hacer mejoras y muchas cosas con el capital existente en el
cooperativa, sin visualizar al Estado para pedírselo"(CPEBRD); “Es deseable

113
que todos los sistemas tengan a lo menos un fondo pequeño que les permita
enfrentar los imprevistos que nosotros como Estado no estamos en condiciones
de solucionar o que nuestros tiempos no están relacionados con las
necesidades que ellos tienen” (JDPS).

Sin embargo, estas organizaciones no siempre tienen la posibilidad de generar


ahorros: “Yo creo que no deben haber ahorros, porque creo que se chorean la
plata" (ULBSS); "Acá se intenta dejar un dinero por concepto de ahorro todos
los meses…, pero no siempre se puede” (CPSMG); “Los excedentes del pago
del agua potable no están alcanzando para cubrir los gastos del alcantarillado,
por lo que pienso que no hay dinero suficiente para ahorrar" (ULEBR).

Para estos entrevistados los sistemas grandes, con más de quinientos (500)
arranques, apoyados en una buena administración, pueden generar
excedentes: “Batuco está considerando una ampliación de su red y la
construcción de un nuevo pozo” (SACL); “Los sistemas que tienen más de 850
arranques debieran ser capaces de realizar sus propias inversiones”
(JDDR):”Todos los beneficios ellos los han invertido en el propio comité… ¿en
qué sentido? Para ampliar las redes, mejorar las redes, mejores bombas, mejor
personal…. Ellos han hecho una gestión empresarial fantástica, tienen oficinas
estupendas, tienen equipamiento, tienen camionetas, tienen operarios” (SACM).

5.1.2.4 Patrimonio.

Para el discurso, las inversiones realizadas con los ingresos de los APR son
elementos del patrimonio financieros, al igual que los derechos de uso del
recurso hídrico y la tenencia de los terrenos donde se emplazan los sistemas:
“Los derechos de uso de agua y los terrenos son parte del patrimonio de los
sistemas…. En términos de terrenos está bastante regularizado, pero en
términos de la inscripción de los derechos de agua, yo te diría que está más
débil" (JUTAA); "Todos los APR deberían tener ya todas sus escrituras de sus
terrenos y de los derechos de agua a su nombre…, porque son cosas básicas…

114
Aquí nosotros tenemos todos los terrenos saneados y los derechos de agua
saneados sólo para una copa y el otro está en solicitud” (CTBSSD); "Nosotros
tenemos otorgados los derechos de uso de agua de los dos pozos. Llevamos
esas cosas al detalle... y los terrenos también los tenemos saneados"
(CPEBRD).

El discurso devela que los derechos de agua, tenencia del suelo y la


infraestructura destinada a la producción de los servicios es propiedad de
terceros. Por lo tanto, los sistemas hacen uso de estos recursos como parte de
su patrimonio, sin que les pertenezca legalmente: “En realidad no es que sea de
uno, porque es del Estado, pero nosotros lo manejamos” (CTBSSOAP); "En la
regularización de los terrenos nosotros tenemos un nudo o problema, porque
hace más de cuarenta (40) años que el terreno fue donado, pero en ese tiempo
la gente donaba de palabra. Entonces no quedó nada por escrito, y nosotros
hemos estado por años haciendo todo lo posible para regularizar esa situación
y lo hemos logrado en parte, porque todavía nos queda el terreno de la
cooperativa misma y aún nos quedan algunos litigios menores para poder
adquirir los terrenos” (CPSMD); “Nosotros, por ejemplo, no hemos regularizado
los derechos de agua y yo creo que tener los derechos de agua le da mayor
riqueza al APR, al igual que contar con los terrenos donde tenemos los
sondajes, los estanques y nuestras oficinas, y acá no estoy seguro si tenemos a
nombre de nuestro APR todos los terrenos que ocupamos... Claro que somos
dueños de algunos (CTBSSOAP); “El principal patrimonio de este sistema son
las matrices y las redes…¡¡¡la verdad es que esa infraestructura es del Estado!!!
(CPEBRG).

Obtener los derechos de uso del recurso hídrico y la regularización de los


terrenos donde se emplaza el subsistema técnico como parte del patrimonio de
los APR conlleva procedimientos, gastos y trámites, y los resultados tardan en
llegar: “La obtención de los derechos de agua ha sido una larga lucha que,

115
afortunadamente, en el último tiempo ha dado sus frutos. Nos salieron
legalmente la regularización de nuestros pozos, de los dos pozos. Fuera de eso
tenemos un tercer pozo que aún está en trámite, pero nosotros no ocupamos el
agua de ese pozo" (CPSMD); “Entonces, el principal patrimonio serían los
terrenos, que los tenemos saneados, los derechos de uso de agua, un sondaje
nuevo y el dinero en efectivo, pero para todo esto hubo que realizar inversiones
financieras para trámites, abogados etc.” (CPEBRG).

Cabe señalar que las cuencas donde se emplazan los sistemas estudiados
tienen restringido el otorgamiento de los derechos de aprovechamiento del
agua: Esta situación condiciona el crecimiento y desarrollo de los sistemas de
APR, y afecta el abastecimiento del servicio de agua potable: “Éste es un gran
tema y es un tema, en el cual creo yo, los dirigentes han tenido que ceder,
sabiendo que no hay factibilidad (de agua) con un costo para los demás
usuarios, porque les comienzan a bajar las presiones (de agua)” (SACIM);
“Claro que los derechos de uso de agua es un tema, porque alrededor del 80%
de estos sistemas no tienen regularizados sus derechos de uso hídrico y en
última instancia van a tener que ir a comprar estos derechos al mercado del
agua, porque no sé si tú sabes, pero yo entiendo que esta cuenca está cerrada
(en relación a la cuenca de Lampa). Claro que al tener que (al) comprar o
arrendar los derechos en el mercado del agua ¡¡¡ahí aumenta el valor!!! La otra
alternativa es funcionar de facto, como lo han hecho hasta la fecha, porque el
Estado no les ha ofrecido una alternativa" (SACL); “Por lo menos en el caso de
Melipilla los permisos de pozos están cerrados, porque hay una sobre-
explotación…. Entonces, yo ahí también digo, perdón ¿Quiénes son los que
tienen los derechos aprobados? Yo te aseguro que empresas como Ariztía
tienen el 90% de los potenciales pozos para ellos”. (SACM).

Esta situación es crítica para los APR, pues la propiedad de los derechos de
uso de agua y los terrenos, como parte del patrimonio de estos sistemas, son

116
necesarios para ampliar y diversificar las redes: "Los derechos de agua y la
regularización de los terrenos son un punto crítico en estos sistemas, pues para
obtener los recursos -ya sea para ampliar las redes o incorporar el
alcantarillado- se requiere contar con los derechos de agua y los terrenos donde
se van a instalar las obras de infraestructura... para ubicar los estanques, y que
después también se repite en el tema del alcantarillado, tú necesitas un terreno”
(SACM).

5.1.2.5. Inversión.

Cuando los APR tienen la capacidad de generar excedentes y destinar recursos


de los ahorros a obras de adelanto, los entrevistados señalan que invierten en
mejoras para los sistemas de agua potable y alcantarillado, y en equipamiento
comunitario: “Muchos sistemas invierten en mejoras, no sólo para los sistemas,
sino que también para apoyo de la comunidad. Un ejemplo es el auditorio que
acaba de inagurar, abierto a la comunidad” (JDPS); “Cómo se te ocurre que se
van a robar el dinero, que a caso no ves lo que han hecho, la tremenda
inversión en el auditorio, donde estamos ahora ¡tú crees que si se robaran el
dinero tendríamos este lindo edificio para uso de todos nosotros!" (ULBSS); “Es
un avance para Batuco, para toda la comunidad, no sólo para el servicio... yo lo
veo así" (CTBSSOAP); "Gracias a Dios que la cooperativa tenía ahorros para
poder arrendar el equipo de luz el día después del terremoto, eso nos ayudó
mucho, por lo menos en mi caso, para superar el trauma del terremoto, porque
aunque no teníamos luz, teníamos agua en la casa"( ULLI); "Nosotros hicimos
una ampliación de red, 600 metros de extensión de red para 40 viviendas"
(CTBSSD); “Nosotros (al ser una cooperativa de alta competencia) tenimos los
recursos para hacer nuevos sondajes y hacer nuevos pozos, y comprar
terrenos” (CPEBRD); “El auditorio es una construcción sólida y está dirigida a la
comunidad" (CTBSSG); “Nosotros hace poco tiempo invertimos en un sondaje
que es nuestro… salió varios millones, pero contábamos con el dinero, también

117
tenemos camionetas, hemos saneado todos nuestros terrenos y tenemos los
derechos de uso del agua en nuestro poder” (CPEBRG).

En el discurso de los entrevistados se señalan diferencias en las capacidades


de inversión, por parte de los sistemas de APR, dependiendo del número de
arranques que componen la red de agua potable.

Los sistemas pequeños, hasta doscientos (200) arranques, escasamente logran


cubrir sus gastos operacionales. Los sistemas medianos, entre doscientos y
trescientos cincuenta (200 y 350) arranques, con una buena administración
pueden cubrir sus gastos de producción del o los servicios, ahorrar para
imprevistos y realizar inversiones menores:”Esto también es una cuestión de
escala, de economías de escala. Los sistemas pequeños tienen menos
recursos de la recaudación que los sistemas grandes”: “Imagínate, con 4000
arranques este APR, Santa Sara Batuco, o sea cualquier APR, se financia y le
quedan dineros para imprevisto y ahorro, plata fresca para hacer inversiones”
(SACL); “Los sistemas desarrollan las inversiones mínimas necesarias, como
cambios de bombas y pintura de estanques” (JUTAA).

No obstante, esta forma de crear y distribuir el capital financiero de los APR en


ocasiones soslaya la inversión en las condiciones laborales del recurso
humano. Es decir, el ahorro y la inversión de los excedentes que los APR
realizan no siempre se traduce en un bienestar para los trabajadores de los
subsistema técnico y organizacional: “Antiguamente habían dirigentes que lo
único que querían ellos era tener una buena cuenta, independiente de las
personas…. Uhmmm, de qué sirven esos millones acá, si no le llega agua a la
persona que lo necesita allá arriba, no les llegaba el agua… Ahora les llega el
agua… Pero sabe, acá nosotros los operarios salimos a tomar el estado del
medidor pa’ las cuentas y hacer las inspecciones, y ¡hasta reparaciones en
bicicletas!….. Aunque no lo crea, nosotros usamos pura bicicleta… Si hasta yo
me he accidentado y no hay seguro de salud, no hay” (CPSMOAP).

118
Por otra parte, el rol social de estas organizaciones les permite acceder a
distinto tipos de apoyos y subsidios con el fin de sustentar los sistemas de APR
ya que, los costos de construcción de las soluciones de ingeniería son
superiores a los recursos que los sistemas de APR pueden llegar a generar por
medio de sus ahorros y exceden los montos que las municipalidades pueden
destinar para apoyar el abastecimiento de las aguas domiciliarias en el
periurbano: “La inversión en un sistema, una ampliación o un mejoramiento, que
es lo que la gente ve como bonito, y que hace el gobierno por medio del MOP,
el municipio no la puede hacer, salvo con los proyectos que hace SUBDERE"
(JDDR); “Nosotros mantenemos un servicio más barato que en la ciudad,
porque nosotros no buscamos tanto el lucro, sino que queremos asegurar a la
gente el consumo de agua potable. Buscamos más garantías sociales y creo
que es una de las cosas que debemos conservar" (CPEBRG) y porque por
“Ahora, obviamente el valor que el beneficiario cancela está subsidiado por ellos
mismos, por la inversión que realiza el Estado en la infraestructura y el Subsidio
al Consumo de Agua Potable y Alcantarillado” (SACL).

Sin embargo, se señala que las necesidades de saneamiento rural son


transversales a la población rural y los recursos del Estado para este fin las
cubren parcialmente y excluyen inversiones en redes sociales y desarrollo
organizacional: “Cuando partimos acá no había plata para nada. Ahora, te digo
que desde hace 4 años atrás que hay plata y se ha empezado a construir APRs
en diversos sectores” (CPEBRD); y se reconoce que los montos requeridos
para el saneamiento rural, involucrando el crecimiento y desarrollo de los APR,
son de cuantías superiores a las capacidades de inversión del gestor
comunitario de estos sistemas: "En cuanto a los montos en infraestructura me
parecen fantásticos, porque yo creo que la comunidad nunca podría tener los
dineros para invertir en una ampliación de matrices, porque son millones de
millones” (CPEBRG); “En eso es fantástico, pero en cuanto (a los recursos

119
destinados) a la educación, yo creo que ahí estamos mal, porque no veo que
haya educación a nivel dirigencial ni hacia los socios” (CPEBRG).

Este discurso identifica tres fuentes de financiamiento otorgadas por el Estado


para apoyar la inversión en infraestructura, a modo de subsidio destinado al
saneamiento rural. Estas fuentes son sectoriales, regionales y locales:”El
principal fondo al cual nosotros estamos presentando proyectos de
saneamiento rural básico, es a través del Programa de Mejoramiento de Barrios
(PMB) de la SUBDERE. Este programa tiene financiamiento del Banco del
Desarrollo” (SACM); “Nosotros como municipio solicitamos financiamiento al
Fondo Nacional de Desarrollo Regional y de la SUBDERE, al PMB en caso que
califique” (SACIM); "Entre los fondos están los recursos sectoriales del MOP,
los fondos SUBDERE y los fondos Regionales” (JDPS).

Estas fuentes de financiamiento comparten procedimientos y requisitos para


liberar y disponer de los fondos. Las solicitudes de inversión para ocupar estos
fondos las gestionan los municipios, las organizaciones de APR y en caso de
los fondos sectoriales, las gestionan la Unidad Técnica: “El Fondo de Desarrollo
Regional funciona por solicitud de inversión que plantean los municipios y los
montos para las inversiones los definen los municipios” (PGR); Nosotros (como
unidad técnica) solamente aportamos con información para poder generar las
solicitudes de inversión de la DOH" (JUTAA).

A pesar de contar con subvención Estatal para invertir en la construcción de


infraestructura y el consumo de los servicios de agua potable y alcantarillado,
los ingresos de los sistemas comunitarios estudiados ocasionalmente cubren en
forma insuficiente las necesidades de operación del subsistema técnico. Esto
disminuye los niveles de desempeño de los APR para abastecer del servicio de
agua potable: “Muchas veces acá en la cooperativa no ha alcanzado la plata
para pagar la luz… Hemos tenido problemas para cubrir los gastos de
operación del sistema de agua potable... En ocasiones nos ha faltado para

120
pagar las cuentas y los salarios... Hace tiempo que no pasa eso, pero ha
sucedido" (ULEBR).

Con el objetivo de evitar la ocurrencia de estas situaciones, cuando los


sistemas tienen a cargo la gestión parcial de las aguas domiciliarias y la
operación del sistema de alcantarillado está en manos de los municipios, éstos
sistemas en su autopoiésis aseguran para sí los recursos físicos provenientes
del subsidio al consumo de agua potable y alcantarillado: “La cooperativa se
asegura con el subsidio para cubrir lo necesario para el agua potable y no
considera el alcantarillado como parte del subsidio”; ”Al subsidio se postula por
medio del municipio y yo pensaba que era sólo para el agua potable, porque
acá descuentan sólo para agua potable, el alcantarillado no aparece con
subsidio" (ULEBR).

5.1.3. Capital Humano


Se analiza el vínculo e impacto del capital humano en el crecimiento y
desarrollo de los APR para enfrentar un aumento en el número de usuarios y de
servicios abastecidos en el periurbano de la RMS, a partir de los atributos del
recurso humano del subsistema técnico.

5.1.3.1 Edad.

El discurso señala que la edad de los dirigentes y trabajadores es una


característica del recurso humano y no un requisito para ocupar los cargos: “La
edad para mí no es un tema, el tema es que estos dirigentes deben tener
tiempo para regalar a la comunidad, porque nadie les paga, no son
remunerados” (PGR).

Los requisitos para ocupar los cargos son definidos como atributos valóricos.
Estos atributos consisten en valores como el compromiso con la comunidad y
con la naturaleza de los sistemas: “A ver, yo no soy partidario de una edad….
No, yo creo que basta con que tenga vocación de servicio público y servir al

121
resto de la comunidad. Lo otro no me sirve en este caso” (CTBSSD); “El
(requisito) que sí se mantiene es el de que tiene que ver con la probidad, con
la justicia, que la persona no haya sido sometida a un juicio, que no esté en un
juicio y mucho menos condenado por distintas cosas” (CPEBRD).

Este discurso refiere que considerar la edad y/o la educación como requisito
para ocupar los cargos puede llegar a ser factor de discriminación negativa. Por
lo tanto, puede implicar la generación de un vínculo negativo entre estas
características del recurso humano y el capital humano de los sistemas: “No,
no, yo no discrimino por educación ni por edad, porque hay personas que tienen
edad y tienen mayor conocimiento eh, tienen la experiencia de ser dirigentes en
clubes deportivos o juntas de vecinos, que son más o menos similares…
entonces no" (CPSMOAP).

De este modo, el capital impactaría negativamente en el nivel de desempeño de


los APR para crecer y desarrollarse: “La edad, buena pregunta, porque yo creo
que un dirigente de la cooperativa tiene que ser una persona con experiencia,
pero que aún tenga vitalidad y ganas de hacer cosas… Por lo tanto, no creo
que haya una edad, sino que depende de la persona" (CPSMOARD).

Sin embargo, al vincular estas características del recurso humano con la


incorporación del alcantarillado y el aumento en el número de usuarios el
discurso señala que se requieren personas de edad media o mayores, que se
encuentren activos socialmente y pasivos laboralmente: “Mira, yo necesito
entenderme con la persona que esté de dirigente. Entonces, yo creo que debe
ser una persona que tenga capacidad de entendimiento y conocimiento en la
vida. Un hombre joven puede tener todas las ganas, pero le va a faltar el tiempo
y si tiene tiempo, le falta experiencia en la vida para poder abordar todos los
problemas que acá se ven, principalmente los que tienen relación con las
situaciones particulares de nuestros socios usuarios. Deben tener una visión
amplia, que sólo la experiencia en la vida entrega ¿me entiende?" (CTBSSG);

122
“No tan mayores que no se puedan ni los pies, ni tan menores que nadie los
respete, tiene que ser una persona de una edad media” (ULLI).

La actividad de dirigir los APR no es remunerada, por lo que se señala como


deseable una persona que se encuentre en situación de jubilación, para que
cuente con ingresos propios y tiempo para dedicarse a dirigir la organización de
APR: “Hay varios dirigentes que han sido jubilados y eso es bueno, porque
como acá no se les paga, ellos reciben su dinero de la jubilación y se pueden
dedicar a ser dirigentes” (CPEBU); "Suponemos nosotros que una persona
joven es una persona que está activa en lo laboral, o sea está trabajando, por lo
tanto, el tiempo es menor. Una persona de edad intermedia está en lo laboral
pleno y una persona mayor ya eh, que pueda estar jubilada, o qué se yo, ya
dispone de un poco más de tiempo. Generalmente, se constituyen los
directorios con gente de ese tipo, por esa condición” (CPEBG); “Porque se
necesita personas que entreguen un tiempo por esos dos años” (CPEBRD).

Estos requisitos inhiben la participación de los jóvenes de la comunidad, lo que


redunda en una escasa renovación y diversidad etaria en la composición de la
dirigencia de los sistemas de APR: “Los dirigentes acá son de edad y yo veo
que ahí está un poco el problema, porque tienen esa visión de que se quedaron
un poco atrás, ellos tienen otra mentalidad que ya no está con los tiempos de
ahora y el socio joven no participa. Lamentablemente, porque ellos tienen
mayor capacitación" (CPEBG).

Es por medio de los atributos de autofinanciamiento, redes personales, deseos


de trabajar voluntariamente y el compromiso con la comunidad, que el capital
humano permite a los APR enfrentar un aumento en el número de usuarios y
servicios abastecidos, conservando la producción de los servicios en el
presente y futuro, con equidad en el acceso de la población a los servicios
abastecidos, y crecimiento económico para los sistemas de APR: “No, no es un
tema de edad, yo creo que es un tema de compromiso, de experiencia y de

123
contactos también. Porque, por ejemplo en la Islita (en relación al sistema Santa
Margarita), el doctor Trujillo (presidente del sistema) es concejal, es una
persona del sector. Yo creo que él garantiza el hacer bien las cosas" (SACIM).

5.1.3.2. Escolaridad.

El discurso define a los sistemas de APR como un tipo específico de


organización social, semejante a una PYME sanitaria, que comparte con las
demás organizaciones sociales del sector rural la característica de contar con
un bajo recurso humano. “El gestor comunitario de estos sistemas es gente que,
en su mayoría, tiene baja escolaridad” (JDPS).

Ante esta carencia se observa una gradualidad que relaciona la escolaridad del
recurso humano del subsistema técnico con el tamaño de los sistemas de APR.
La gradualidad planteada en el discurso va de considerar discriminadora esta
característica, principalmente en los sistemas que tienen una gestión parcial de
las aguas domiciliarias, hasta quienes plantean la necesidad de incluir una
escolaridad mínima para los dirigentes en los cuerpos legales que les otorgan
personalidad jurídica a los sistemas: “A ver, yo no soy partidario de una edad, ni
que sean universitarios, ni que sean profesionales… No, yo creo que basta con
que tenga vocación de servicio público y servir al resto de la comunidad.... Le
pongo un ejemplo: Yo, mi persona, tiene séptimo básico y yo estoy al mando de
este buque hace 8 años" (CTBSSD); e incluso han sacado de los estatutos este
requisito por considerarlo discriminador, al igual que las características de edad
y género: “Este año han sido modificados los estatutos justamente porque en
los estatutos habían eh, una especie de discriminación por el tema de la
educación de los dirigentes… Nosotros sacamos ese requisito en el nuevo
estatuto, porque la ley tampoco lo menciona” (CPEBRD).

En contraposición a este planteamiento, se señala que dirigentes y trabajadores


de los sistemas a cargo de la gestión total de las aguas domiciliarias deben
contar con escolaridad completa: “Un dirigente o trabajador debe por lo menos,

124
como mínimo, saber leer y escribir, sino no se puede ser dirigente” (ULEBR);
"Tanto en los comités como en las cooperativas hay gente que yo no te diría
incapaz, pero que no tiene las capacidades para liderar estos sistemas.
Idealmente yo pediría enseñanza media completa" (CPSMD); "Estoy de
acuerdo con los requisitos legales que hoy existen para los dirigentes, pero a
los dirigentes de los APR yo le agregaría el requisito legal de tener cuarto medio
rendido, por lo menos cuarto medio" (CPSMG).

El punto medio entre estas posturas se encuentra en el planteamiento que


valora la escolaridad como un atributo de la dirigencia para conservar la
naturaleza y el carácter de estos sistemas: “La educación de los dirigentes es
súper importante en este tipo de organizaciones. Acá se produce agua para el
consumo humano y es importante que los dirigentes por lo menos sepan
matemáticas y comprender lo que leen para dirigir la organización y dar un buen
servicios a los socios" (CPSMG); “Pienso que en la educación va todo y por
eso es importante que para un sistema como el nuestro, que es una cooperativa
grande, tenga por lo menos cuarto medio aprobado” (CPSMU).

En este discurso se plantea como requisito mínimo para liderar los APR, el
manejo de lectoescritura y matemáticas básicas. Estos requisitos aumentan en
relación directa con la extensión y diversificación de las redes de aguas
domiciliarias. Es decir, mientras más crece y se desarrolla el sistema de APR
los niveles de escolaridad aumentan: “Como la función que cumplen estas
organizaciones es distinta a las de otras organizaciones sociales yo pienso que,
en virtud de la importancia y complejidad de estos sistemas, los dirigentes
deberían tener a lo menos una educación básica completa"(CTBSSG); "En este
caso de todos modos hay un requisito de educación mínimo necesario, porque
aquí nunca podría existir como dirigente una persona que no sepa leer y
escribir. O sea, como mínimo una persona debe saber leer y escribir, el
directorio sabe que no puede elegir a una persona que no sepa leer y escribir,

125
porque el dirigente es el representante legal, lo que significa que tiene que
firmar, que tiene que leer, que tiene que aprenderse la ley, como me ha tocado
a mí” (CPEBRD).

En otro nivel discursivo se encuentran los atributos para los dirigentes de los
sistemas. Estos atributos se basan en la naturaleza de los APR y se relacionan
con la capacidad de liderar los sistemas sociotécnicos, el trato con los
trabajadores, la relación con los usuarios y el entendimiento del funcionamiento
del subsistema técnico de los sistemas: “Los dirigentes tienen una debilidad. Es
que hoy se necesita que ellos tengan la capacidad de dirigir esto como una
empresa y no como una cooperativa o más bien como las dos cosas, haciendo
hincapié en el plano más empresarial, más comercial… A los dirigentes les falta
poder desarrollar un plan a largo plazo, eso les está faltando a los dirigentes,
ver más a futuro. Todos tienen una educación básica y media, pero falta lo
fundamental: que es enfocado hacía… este aspecto especifico de lo que es una
cooperativa, lo fundamental en lo que se desenvuelve una cooperativa, que es
lo contable, en ese aspecto” (CPEBRG); "La educación es importante, también
influye en el trato que tengan con uno, como trabajador, y aparte de la
educación, es importante que sepan cómo funciona esto" (CPSMOAP).

Entonces, los atributos de la dirigencia se relacionan con habilidades,


competencias y destrezas sociales o relacionales para administrar y gestionar
los sistemas de APR.

En este nivel del discurso se hace la separación entre tener educación ligada a
los estudios formales, el conocimiento o competencias concerniente a la
capacitación destinada a la operación y mantención de estos sistemas, y las
destrezas relacionales para tratar con los trabajadores y los usuarios de los
sistemas: “Eh, para mí el tema de educación es una cosa y conocimiento es
otra, porque hay algunos que siendo profesionales, de educación no tienen
na’… Yo creo que es necesario que tengan educación"(CTBSSOAP); “La

126
educación es bien importante, porque mire, el mismo dirigente que había antes,
yo siempre alegué con él porque andaba igual que las viejas del centro de
madres y me andaba pelando por allá, por acá y yo creo que un dirigente nunca
podría hacer esto, es importante que sean directos, que sepan decir las cosas"
(CPSMOARD).

Este nivel discursivo, establece un vínculo de valor que relaciona a la educación


con los buenos modales y el respeto que los dirigentes tienen hacia los
trabajadores: “La educación de los dirigentes es importante, porque ahí va el
trato que tienen con nosotros, los trabajadores” (CPEBU).

La complejidad operativa y de mantención de los sistemas de alcantarillado y


tratamiento de aguas residuales domésticas, requieren competencias y
habilidades difíciles de encontrar en el recurso humano de los sistemas: “Los
sistemas de alcantarillado rural o alcantarillado en general y de tratamiento
propiamente tal son complejos no son sencillos, son difíciles de manejar,
requieren un nivel de conocimiento que superan hoy día la capacidad de
conocimiento de la gente que está manejando los sistemas de agua potable”
(JDDR); a pesar de que “Naturalmente en el campo siempre son elegidos como
dirigentes de los APR, y de otras organizaciones, las personas que mejor
hablan o los que son más líderes o los que tienen cuarto medio… Es como una
selección natural. La persona que tiene mayor educación, generalmente sale
electa” (JDDR).

5.1.3.3. El género.

El discurso señala que el género del recurso humano es un elemento del


subsistema técnico de los APR. Como característica del recurso humano en el
discurso se observan dos miradas: Una referida al subsistema técnico y otra
relativa al sistema de APR.

127
Cuando el foco del discurso se centra en el subsistema técnico señala
implícitamente que el género como atributo del recurso humano puede ser un
elemento de discriminación al momento de elegir a la dirigencia: “Yo creo que
ahí no tengo discriminación, creo que una mujer o un hombre lo pueden hacer
tan bien como lo hace cualquiera" (CTBSSD).

Sin embargo, posteriormente se explicita como deseable que sea un hombre


quien lidere los sistemas, ya que para ocupar el cargo de dirigente el género
masculino produce respeto por presencia: “Pa’ qué le voy a mentir, yo creo que
para ser dirigente de una cooperativa como ésta debe ser hombre, porque de lo
contrario nadie respetaría, acá en el campo somos machistas… eso es lo que
creo yo" (CPSMOARD).

Esta situación da cuenta de la cultura machista, basada en la división sexual del


trabajo, que caracteriza al sector rural y que en este discurso señala que el
capital humano femenino carece de las competencias relacionales entendidas
como la capacidad de vincularse con otros, asociada al espíritu de equipo y al
arte de dirigir. Estas características son referidas en el discurso como
necesarias para liderar el crecimiento y desarrollo de estos sistemas: “Ahora,
sinceramente, a mi manera de pensar, yo creo que en este momento es mejor
que sea un dirigente hombre, porque lo respetan más y a una mujer no sé,
porque una mujer pienso que una mujer es más blanda y a un hombre lo
respetan mucho más los usuarios... En eso voy yo, pienso que una mujer no
sería capaz de acompañarnos cuando hay que cortar el agua a un usuario que
no paga” (CPEBOAP).

Desde la mirada del sistema de APR, el discurso valora positivamente y


destaca la importancia de las características femeninas para que los sistemas
de APR se desarrollen en el espacio local o comunitario: “En los lugares como
los rurales es muy buena la presencia de la mujer que conoce los problemas,
que conoce a los vecinos…. Las ideas prácticas de la mujeres son muy buenas,

128
hay ideas prácticas que tienen que ver con la economía del hogar, que tienen
que ver con ahorrar, que son importantes y que de repente uno no las mira"
(CPEBRD).

El discurso plantea como deseable que el directorio o la directiva sea mixta:


“Acá es mirado el género masculino como más fuerte para llevar el desarrollo o
la cabeza de la cooperativa. Yo no comparto esa visión, porque yo conozco acá
dirigentes vecinales que son mujeres, la mayoría son mujeres, y lo hacen muy
bien. Entonces, así como dirigen una junta de vecinos, perfectamente pueden
dirigir una cooperativa" (CPEBG). Esta idea es reforzada al señalar que: “Es
muy bueno un directorio mixto, porque desde la presencia misma de la mujer en
un directorio, que en un momento determinado aunque sí la mujer puede ser
tan fiera y luchadora como un hombre, pero, pero también lleva a mantener el
orden, a ser más tolerantes” (CPELBD).

En el discurso se reconoce la participación femenina desde la diferenciación de


sus aportes, ya que le otorgan otra mirada a los problemas, sugieren distintas
soluciones y contribuyen al orden y la tolerancia en la discusión. Sin embargo,
su participación es esquiva: “La dirigencia de una cooperativa o comité debiera
ser mixta, porque las mujeres evidentemente, a veces tienen puntos de vista
distintos e importantes. Ahora no sé cómo se podría implementar aquello…,
pero debiera ser mixta" (CPSMD).

La participación femenina en las directivas es importante, porque le otorga


diversidad a la gestión dado que ante los mismos problemas aportan soluciones
diferentes a la del género masculino, contribuyendo a los niveles de desempeño
de los sistemas de APR: “Hay que tener más mujeres en la dirigencia para que
esto funcione cada vez mejor, nosotras vemos cosas que a veces los hombres
no ven y se nos ocurren cosas distintas para los mismos problemas" (ULEBR).

129
Sin embargo, para el cargo de presidente, director o líder consideran que el
género masculino cumple de mejor manera con los requisitos: “Para presidente
mejor que sea un hombre, para que se haga respetar por los trabajadores y por
los usuarios que no pagan y que se roban el agua adulterando el medidor”
(ULBSS). Este requisito de género se plantea como importante para obtener el
respeto de los trabajadores y usuarios, sobre todo en situación de conflicto.

El discurso vincula al género femenino con el capital humano de los sistemas


por medio de los atributos de bondad, generosidad y creatividad. Estos atributos
hacen del género femenino, un actor requerido en la dirigencia y en las tareas
administrativas del subsistema técnico para otorgar niveles de competencias a
los sistemas de APR, que les permita enfrentar el aumento en el número de
usuarios y la incorporación del servicio de alcantarillado: “Es bueno que se
sumen más mujeres para los cargos de secretaria y tesorera, porque nosotras
somos más ordenadas y cuidadosas con la plata” (ULEBR); “Acá las mujeres
trabajan en la administración como secretaria o contadoras, pero en la parte
operativa sólo tenemos hombres, porque este sistema es grande” (CPSMG);
“Yo misma acá trabajo como gerenta, pero no me atrevería a contratar a una
mujer como operadora, porque ese trabajo requiere de esfuerzo físico y las
mujeres no servimos para eso” (CPEBRG).

El discurso hace mención a la participación femenina en la dirigencia y los


puestos de trabajo de los sistemas de APR como parte de la gradualidad en el
desarrollo de éstos y plantea que esta participación es inversamente
proporcional al crecimiento y desarrollo de éstos: “Es curioso, porque los
dirigentes de los sistemas que abastecen sectores urbanos son hombres y los
sistemas que sólo abastecen sectores rurales tienden a tener más mujeres
dirigentas" (SACIM); “Lo que se puede observar es que en los sistemas chicos
las mujeres tienen una mayor participación en las directivas, pero en la medida
que el sistema crece la participación femenina disminuye" (JUTAA).

130
Se señala que el género de los trabajadores como atributo del recurso humano,
tiene un vínculo tangencial con el capital humano de los sistemas e impacta en
los niveles de desempeño de estos sistemas al momento de crecer y
desarrollarse: “El género de los dirigentes no influye en la gestión de los
sistemas, ni en la decisión para incorporar el alcantarillado" (JDPS); "...y sabes
que también es igual entre hombres y mujeres. No existe diferencia entre un
dirigente hombre y una mujer" (SACL); "Mira, en los comités de agua potable
rural no conozco dirigentes mujeres, pero en otro tipo de comités conozco
dirigentas y tienen como las mismas condiciones que los varones, pero te
insisto que en los APR no conozco mujeres dirigentas" (SACM).

A partir de este diagnóstico, se plantea que la participación femenina debería


ser incentivada por el Estado, a fin de que su permanencia en las directivas y
los puestos de trabajo les otorgue diversidad a la gestión y acompañe el
crecimiento y desarrollo de los APR: “(El Estado) (Se) debería fortalecer la
participación femenina en estas organizaciones, no sólo cuando son pequeñas,
sino que también cuando estas organizaciones han crecido" (PGR).

5.1.3.4. Capacitación y asesoría de la unidad técnica.

En el discurso se plantea que el bajo capital humano de la dirigencia y la


complejidad de los sistemas de alcantarillado, hacen de la capacitación
entregada por el Estado, un recurso de especial importancia para generar
capital humano a partir de las características del recurso humano del
subsistema técnico.

El discurso expresa disconformidad en torno a la asesoría y capacitación,


financiada por el Estado y otorgada por la Unidad Técnica (UT): “De ahí va mi
opinión en contra de los seminarios que se han hecho, porque de todos los
seminarios que fuimos no nos enseñaron lo que tenían que habernos
enseñado, sino que se fueron por otro lado y con la inspección que nos hizo el
Dpto. de Cooperativas nos dimos cuenta que no sabíamos absolutamente nada

131
en cuanto a los procedimientos estatutarios, contables y reglamentarios de la
cooperativa y nos hemos tenido que ir capacitando en forma independiente"
(CPEBG).

Para los entrevistados, las capacitaciones y asesorías que ofrece la UT, crea
capital humano cuando se enfoca en aspectos relacionados a la administración
de los servicios sanitarios y el manejo del negocio: “Yo creo que tiene que ver
con las habilidades en el sentido de entender que esto es un negocio, y tener
formación y capacitación en estas áreas a cargo del Estado…. O sea, que los
dirigentes tengan entrenamiento en temas de gestión, administración y manejo
de negocios de una PYME dedicada a los servicios sanitarios” (PGR); “Las
capacitaciones tienen que apuntar más al área empresarial, enfocada a la
administración de una empresa de agua potable y saneamiento... Ese tipo de
capacitaciones necesitamos” (CPSMG).

Las capacitaciones deben ser concebidas con formalidades y exigencias de


cursos con una duración mínima de dos a tres meses y evaluaciones formales.
Como jornadas o seminarios informativos de uno o dos días de permanencia no
logran el objetivo de crear el capital humano que los sistemas requieren para
poder crecer y expandirse: “Acá los cursos de capacitación deberían ser
extensos e intensos, es decir, de largos períodos. Un día de un fin de semana o
un fin de semana, yo creo que es muy poco o se abarcan muy grande y
realmente no vamos a la letra pequeña de la materia. Entonces, yo creo que
deberían ser unos cursos de capacitación de por lo menos unos tres meses
mínimo, con evaluación y seguimiento, porque no se trata solamente de ir a
cumplir con la asistencia, porque para eso mejor vamos un fin de semana y
listo. Hay que ver que los contenidos nosotros los hayamos incorporado y que
tengamos la capacidad de desarrollarlos después" (CPEBRD).

Estas capacitaciones deben ser impartidas por expertos que adecuen el


lenguaje técnico a la compresión cotidiana de los actores de los sistemas, con

132
una metodología de aprendizaje basada en la práctica. Es decir, aprender
aplicando los nuevos conocimientos en terreno (aprender haciendo): "Hacer
una capacitación con personas como ingenieros hidráulicos o expertos en riles
y esas personas deben hablarnos en un idioma que nosotros entendamos….,
porque si lo van a hacer con palabras ehhh, en un idioma tan… como le digo
técnico, porque la verdad es que nos van a hablar como técnicos, tampoco nos
va a servir… no lo vamos a entender…… Ojala, ojala fuera en terreno, porque
tampoco nos sirve en el escritorio, ¡¡¡¡no nos sirve!!! Porque muchas veces no
pescamos un libro para leer y yo me incluyo, yo no leo nunca, por lo tanto se
necesitan cosas en terreno…. por eso le digo yo, que las capacitaciones ojala
sean en terreno………Yo tenía clarito lo que había que hacer, porque lo vi ahí
mismo…, por eso le digo yo que las capacitaciones ojala sean en terreno con
los dirigentes y los operarios, con el personal explicando las cosas, porque así
uno las entiende mejor” (CTBSSD).

Los entrevistados coinciden en señalar que se requieren capacitaciones


diferenciadas de acuerdo al tamaño, naturaleza jurídica de las organizaciones y
las funciones que cumplen los distintos actores de estos sistemas. Esto, porque
las necesidades de los sistemas con más de 500 arranques son distintas a la de
las organizaciones más pequeñas: “Las características que para mí me parecen
súper relevantes es que primero separemos los grandes comités de los más
chicos. Demos capacitación de acuerdo a su estatus y necesidades… Eso es lo
que yo creo" (CTBSSD); así como las necesidades de un comité son distintas a
las de una cooperativa y “la capacitación que entrega Aguas Andinas (Unidad
Técnica)….es básica, es como para comités, no para cooperativas y la verdad
es que no se ve el tema del alcantarillado” (CPEBOAP).

Las capacitaciones orientadas a los dirigentes deben dar cuenta de temas de


gestión, liderazgo y comunicación de la organización; las capacitaciones
dirigidas a los administrativos/as o gerentes debe estar orientadas a la

133
elaboración de planes de trabajo, aspectos contables y legales de una empresa;
y la de los operarios deben enfocarse en el funcionamiento de los sistemas y su
mantención: “Los temas deben ser diversos, porque los sistemas tienen
situaciones distintas. Por ejemplo, todo lo que tiene que ver con administración
o contabilidad lo lleva la gerente, entonces ella debe ir a capacitarse en eso, los
dirigentes llevamos lo que es gestión y a esos cursos debemos ir nosotros, pero
los trabajadores operarios necesitan cursos de cómo funcionan los sistemas,
materiales... ¿Vio? Otro tipo de tema” (CPEBRD); "Necesitamos capacitaciones
para los operarios de las plantas en terreno, ahí donde las papas queman, y
para la parte administrativa, las capacitaciones tienen que apuntar más al área
empresarial, enfocado a la administración de una empresa de agua potable y
saneamiento..., ese tipo de capacitaciones necesitamos” (CPSMG); “Haría una
capacitación práctica, si han salido nuevos materiales los presentaría y en
forma práctica enseñaría para qué sirven" (CTBSSOAP).

En relación a las características de la asesoría, señalan que ésta debería


apuntar al crecimiento de los sistemas en el área sanitaria: “Asesoría en temas
sanitarios, tiene que ser en esa área" (CPEBRD); su planificación debiera
contemplar “para un sistema como el nuestro (se necesitan) visitas periódicas, y
visitas intempestivas, es decir sin dar fechas, para hacerse una idea real de
cómo está funcionando todo. En síntesis, pondría visitas planificadas y
acordadas, y visitas sorpresivas” (CTBSSG).

Estos entrevistados señalan que la asesoría y capacitación en el tema del


alcantarillado y tratamiento de aguas residuales ha sido soslayado por el Estado
y la UT: “La capacitación de la unidad técnica sirve, pero hasta ahí no más,
porque nosotros necesitamos capacitación para sistemas grandes. Además no
se habla de los sistemas de alcantarillado y ahí es donde acá tenemos más
necesidades" (CPSMOAP).

134
Este vacío establece diferencias en el apoyo que entrega el Estado en asesoría
para que los sistemas de APR asuman la responsabilidad de abastecer de agua
potable, versus la inexistencia de este apoyo para asumir la responsabilidad de
abastecer de alcantarillado a la población rural: “En el sector sanitario rural no
concesionado no existe un modelo de gestión como en el agua potable rural
que va en ayuda de las comunidades. Se podrá decir que la ayuda o asesoría
es poca, regular, mala… ése es un tema, pero en los alcantarillados no existe
apoyo a las organizaciones en estas materias…..Cuando se les entrega, hoy en
día, los sistemas de agua potable a las organizaciones, y después de la fase de
término de las obras, ellos tienen a quien recurrir si les falla algo..... Eso en el
tema de alcantarillado no está. De hecho hay algunas plantas que están
trabajando en condiciones no muy apropiadas..., pero no existe donde ellos
recurran, no existe una unidad que les dé asesoría y capacitación a las
organizaciones que se hacen cargo de los sistemas de alcantarillado y sus
plantas de tratamiento en los territorios rurales” (JDPS).

La incorporación de los servicios de agua potable y alcantarillado significa para


los usuarios un cambio de vida que requiere ir acompañado de nuevos
aprendizajes: “Aquí antes la gente vivía como pajarito, nadie pagaba nada. No
se pagaba el agua, porque se sacaba de una noria; no se pagaba alcantarillado,
porque teníamos pozos; y algunos pagaban luz, otros se colgaban. Entonces,
ahora que les están cobrando el agua y el alcantarillado, no faltan los que no
quieren pagar y que quieren seguir viviendo como vivíamos antes” (ULBSS).

Por lo tanto, la inversión del Estado en capacitación debe focalizarse en educar


a la población para usar y valorar los servicios con los que cuentan: “Debería
haber una educación o capacitación dirigida a la comunidad para que aprendan
a usar y cuidar los sistemas de agua potable y alcantarillado, y también para
generar conciencia de que todo tiene un costo y que hay que pagar los servicios
que se usan" (ULEBR); "...No hubo una preparación de la gente para usarlo,

135
porque acá teníamos pozo y fosa.. A mi modo de ver las cosas, se debió haber
comenzado por el colegio a educar a los niños cómo usar el alcantarillado, es
decir a los papás y los niños, y después haberlo inaugurado. Porque yo he
estado en la planta y sale ropa, salen botellas ehh, montones de cosas e
incluso una vez botaron a una guagüita... Entonces, encuentro que debieran
haber educado a la gente" (CTBSSOAP); "otro tema en el cual la capacitación...
Bueno en realidad no es capacitación es como educación... No sé cómo
llamarlo, pero hay que enseñar a la gente, a los usuarios para decirles: ¿saben?
hoy Uds. pagan tanto por agua, pero como necesitamos alcantarillado, mañana
van a tener que pagar más porque estos sistemas son más caros y eso hay que
explicárselo a la gente y educarla en cómo utilizar el alcantarillado, porque la
gente -no le digo- bota de todo a la alcantarilla y eso encarece los costos de
mantención" (CPEBRD).

La educación social ofrecida por el Estado a los usuarios rurales cambió a


través del tiempo. Inicialmente el Estado apoyó a la población rural para
aprender a valorar y utilizar el agua potable, y en la actualidad estas
intervenciones están ausentes del soporte que el Estado otorga a los sistemas
de APR, por medio de la UT: “Resulta que cuando pusieron el agua potable se
hizo todo un trabajo con la comunidad para que se aprendiera a cuidar el agua
potable… Ahora, hace tiempo que no se hace nada en ese sentido, y tampoco
se hizo nada cuando colocaron el alcantarillado y resultado es que la gente no
sabe cómo usarlo y tiran por el alcantarillado hasta los pañales que luego
aparecen en la planta…, por eso se echa a perder y salen malos olores de la
planta” (ULBSS). Por lo que, “Es urgente que se eduque a la gente para hacer
buen uso del alcantarillado, porque acá hay mucha ignorancia, ignorancia y
pobreza" (ULBSS).

El discurso apunta a crear una conciencia de usuarios por medio de la


educación social, que evite las morosidades y les permita enfrentar la amenaza

136
de que los territorios de operación asignados a los APR sean transformados en
áreas de concesión: “Yo propongo una campaña nacional para aprender a usar
y valorar el recurso hídrico. Cualquier instancia de masificación de normas y de
conductas va a ir en directo beneficio a todo el desarrollo personal que tenga la
población” (SACL); "Hay gente que dice: yo no voy a pagar el alcantarillado,
porque es de la municipalidad y ellos son los que tienen que pagarlo. Eso no
me parece justo, porque yo pago todas mis cuentas, pero hay gente que no lo
hace" (ULBSS); porque "Al comité se le paga sólo el consumo del agua potable
y en la muni se paga el alcantarillado, pero yo digo ¡preparémonos, porque
pronto se nos va a venir la sanitaria encima y ahí los quiero ver!” (ULBSS).

El discurso incorpora al soporte otorgado por el Estado a los municipios como


población objetivo: “La asesoría que nosotros deberíamos tener como
municipio, en estos temas, debiera ser más proactiva, estar más encima… Para
nosotros sería súper importante tener mayor asesoría de alguien del Ministerio
y de la DOH más específicamente, para evaluar ciertos temas, que no la hemos
tenido y hemos tenido que acudir a ciertos contactos, a ciertas personas,
contratar con presupuesto nuestro a algunas personas” (SACIM); porque según
refieren los APR acuden a los municipios: “(...acá) Solicitan asesoría técnica y
administrativa" (SACIM). Las municipalidades carecen de las competencias
técnicas y el personal necesario para asumir las demandas de los usuarios: “A
nosotros nos faltan competencias técnicas en el municipio para avanzar en
estos proyectos, por lo que necesitamos profesionales con esas competencias
para que nos asesoren en la formulación de estos proyectos. Incluiría el tema
de balances contables, herramientas bancarias. Porque el tema es delicado, el
tema de las lucas en todas partes es complejo y mientras más ordenado y
controlado se lleve, menos posibilidades de equivocarse hay y que a uno lo
puedan acusar de algo" (SACIM).

137
El fortalecimiento de las competencias de los dirigentes para que puedan
orientar la gestión de los sistemas hacia un horizonte empresarial se plantea
como una alternativa a largo plazo para superar el vacío que presenta el sector
sanitario rural en asesoría y supervisión: “Si se adiestra a los dirigentes de los
sistemas de agua potable para resolver sus problemas de abastecimiento, ellos
lo hacen. (Es necesario) Capacitar a los dirigentes de los servicios grandes
para generar las competencias necesarias que les permitan gestionar y
gerenciar estos sistemas grandes desde una mirada más empresarial" (JDPS);
”El Estado tiene que invertir en capacitación, es importantísima” (JDDR); porque
“no es un tema que pudiera manejar directamente la comunidad” (JUTAA); y
dada su complejidad, se necesita tener claridad de las necesidades específicas
de los sistemas:“La capacitación debiera apuntar a generar las fortalezas
necesarias para que los dirigentes puedan apoyar el proceso de crecimiento de
estos sistemas orientándolos a ser una empresa pequeña, mediana o grande,
dependiendo de las necesidades del territorio, de la comunidad, la localidad”
(PGR).

Los entrevistados esbozan una propuesta para la capacitación y asesoría que el


Estado ofrece a los sistemas de APR. Esta propuesta ofrece alternativas de
financiamiento e hitos de seguimiento a las intervenciones Estatales:”Se podría
diseñar un programa de capacitación que lo financie el FNDR… (Porque) yo
soy de la idea que el Estado debiera ser capaz de acompañar este tipo de
proceso hasta que los proyectos estén andando y estén dando los primeros
resultados. Una vez teniendo la certeza de que el Estado dejó las capacidades
instaladas, ahí yo creo que debería retirarse, antes no” (PGR); “Las platas que
se van a destinar para esas capacitaciones, esas platas quedan metidas dentro
del trabajo que hace la Unidad Técnica y, por lo tanto, es una plata que en
algunas regiones será más, en otras será menos y, por lo tanto, al Estado le es
indiferente. Por lo mismo es muy importante que en los convenios (que el
Estado firma) con las Unidades Técnicas, quede claramente especificado el

138
nivel de capacitación que van a requerir los sistemas y que van a realizar estas
unidades técnicas, y por lo cual les paga un determinado monto" (JDDR).

5.1.4. Capital Social.


Se analiza el vínculo e impacto del capital social en el crecimiento y desarrollo
de los APR para enfrentar un aumento en el número de usuarios y de servicios
abastecidos en el periurbano de la RMS.

5.1.4.1. Personalidad jurídica

El discurso de los entrevistados define a la personalidad jurídica de las


organizaciones operadoras del servicio de agua potable como un elemento del
subsistema social. Este elemento se vincula directamente con el capital social
de los sistemas e impacta en los niveles de desempeño de éstos para crecer y
desarrollarse: “(Este sistema) estuvo en el hoyo, estuvo mal, estuvo muy mal,
porque los dirigentes actuaban como si esto fuese un comité y no una empresa”
(CTBSSD).

Los entrevistados plantean una paradoja fundada en la condición de agentes


económicos de estas organizaciones con necesidades de autofinanciamiento, y
el tipo de personalidad jurídica que se les atribuye: “Cuando yo llegué aquí este
comité estaba quebrado, porque estaban con un chip de un comité social y
entonces tenían el 53% de morosidades y con esas morosidades cualquier
empresa quiebra. Un comité que tenga más de 500 arranques hacia arriba es
una empresa sanitaria, ése es el chip, no el de una organización social"
(CTBSSD); “Nosotros vemos a estos sistemas como empresas y no como
organizaciones sociales… Los sistemas más grandes se ven a sí mismos como
empresas, en los comités más pequeños a veces se produce confusión entre su
función de organización social y la gestión que deben desarrollar para crecer"
(SACM); "(La personalidad jurídica) la veo como una debilidad, porque está

139
apoyada principalmente en una ignorancia propia y natural sobre las reales
capacidades que pueda tener el comité o la cooperativa, los beneficios que
pueden darle a la comunidad…… Estas organizaciones están sometidas a una
especie de paradoja: por un lado, se les pide que sean autosustentable
financieramente (para) que les permita mantenerse, pero por otro lado la figura
jurídica que les da existencia es la de una organización sin fines de lucro.
Entonces, ¡¡¡ay una especie de tensión!!!” (SACL).

En este sentido, la personalidad jurídica de cooperativa se ajusta mejor que la


de comité a los requerimientos de operación que tienen estos sistemas para
abastecer de los servicios de agua potable y alcantarillado a la población rural.
“Las cooperativas se adecuan un poco mejor al servicio que ofrecemos porque
tiene mayores flexibilidades, mayor fiscalización y mayores posibilidades de
crecimiento, pero tiene un techo por la imposibilidad de cobrar una tarifa para
generar inversión (CPSMD).

La figura jurídica de comité genera, en el subsistema técnico de estas


organizaciones, obstáculos al recurso humano para acceder a nuevos bienes y
servicios: “A mí como trabajador me afecta que esto tenga la personalidad
jurídica de comité, porque yo le voy a contar que cuando me quise comprar mi
casa y fui al banco para el crédito, como comité no estaba reconocido en
ninguna parte……ni siquiera sabían que existían los comités de agua potable y
eso fue un problema, porque fui a varias instituciones: financieras, bancos, caja
de compensación y no, no los conocían, pero si hubiese sido Aguas Andinas el
crédito habría estado ahí…....; en la ciudad no saben que existen los comités de
agua potable……..Sabe, como comité tampoco creo que acá tenga mayores
proyecciones laborales, distinto sería si fuese cooperativa. Como cooperativa,
yo tengo la opinión que algún día yo podría ser supervisor de terreno o algo así,
pero comité no, no pasa na´"(CTBSSOAP); “A mi juicio nosotros deberíamos

140
ser una cooperativa, porque esa figura jurídica nos serviría más, pero los
dirigentes no lo entienden así”(CTBSSG).

Esta situación se refuerza al momento de plantearse ante un aumento en el


número de usuarios e incorporar el servicio de alcantarillado: “Yo exigiría que a
partir de un número determinado de arranques los comités deben pasar a ser
cooperativas. Siendo estricto, un comité no debería tener más de 500 arranques
y al 501 debería pasar a ser cooperativa, porque después de los 500 arranques
la gestión económica comienza a ser más importante y el uso del agua también
aumenta" (CPEBRD).

Para este discurso, la personalidad jurídica debe adecuarse a las necesidades


de crecimiento de los APR y de los territorios donde se emplazan: “…los
comités son el primer paso en el desarrollo de estos sistemas y, en la medida
que crecen, tienen que transformarse a cooperativas para poder incorporar el
alcantarillado y abastecer las áreas que, siendo rurales inicialmente, han
mutado a urbanas por cambios en la densidad poblacional y en el plano
regulador comunal, como el proceso que ha vivido Santa Margarita....... Si no se
da este proceso, la verdad es que esas organizaciones, pienso yo, van a
terminar muriendo... Se las va a comer la empresa sanitaria” (SACIM); “El
comité eso sí que tiene medio condicionada la capacidad de crecimiento,
porque no pueden aspirar a concesionar un territorio siendo comité" (JDPS);
"Cuando recién se crean las organizaciones de agua potable se debe formar
como comité, porque esta forma de organización es más libre y menos
exigente. Después viene un segundo paso, desde mi perspectiva que es el
transformarse como cooperativa. Lo que le significa a la organización ser una
entidad más legal y poder tener asesoría y apoyo del ministerio de economía y
otros entes del Estado y posteriormente, para mí, viene el tercer paso que es la
independencia total y absoluta que se puede llamar concesión, microempresa o
empresa social de servicios sanitarios rurales. Este último paso se puede dar en

141
la medida de que vayan entrando sistemas nuevos a la cartera del Estado y
vayan saliendo otros, los ya formados y que funcionan en forma independiente"
(JDDR); “No, no podríamos ser comité porque acá es grande” (ULLI); y “Un
comité es como el club deportivo y la cooperativa (de APR) es bien distinto a
eso o a una junta de vecinos” (ULEBR); "Además al comité no lo fiscaliza nadie.
De la muni nunca vienen” (ULBSS).

Sin embargo, este discurso señala que la personalidad jurídica de los sistemas
de APR se encuentra ausente cuando el Estado toma las decisiones de invertir
en infraestructura para el saneamiento rural: “(En el Gore) no se toca el tema de
las personalidades jurídicas de las organizaciones. (Porque) todavía están
mirando la obra y no ven el salto cualitativo que pueden tener este tipo de
iniciativas, como la transformación de estas organizaciones sociales en
empresa...es más, creo que ni siquiera saben qué tipo de personalidades
jurídicas son las que tienen los APR, para ellos son sólo APR” (PGR);"Tanto los
comités como las cooperativas pueden gestionar un sistema de alcantarillado.
Yo creo que el tipo de personalidad jurídica no les quita ni les pone” (JUTAA).

5.1.4.2. Liderazgo.

Este proceso es común a todos los sistemas de APR, sin diferenciar entre
comités y cooperativas, y cuentan con tres niveles de decisión al interior de las
organizaciones: “Las (grandes) decisiones se toman en forma democrática, por
medio de la asamblea" (CPEBRD); "La asamblea es el lugar donde nosotros los
usuarios podemos poner en conocimiento de los dirigentes las inquietudes,
problemas e ideas" (CTBSSOAP); "Acá hay distintos espacios de toma de
poder, dependiendo del tema. Hay temas que resuelvo yo con el gerente, hay
decisiones que tenemos que tomar en consulta con los otros dirigentes y hay
decisiones que se toman en asamblea" (CTBSSD); "yo creo que es igual en
todos los APR, las decisiones las toman los directivos o dirigentes en consulta
con la asamblea, dependiendo de lo que se trate. Por ejemplo, una alza en las

142
tarifas va de todos modos en consulta a la asamblea, pero decisiones como la
contratación de tal o cual trabajador lo deciden los dirigentes, al igual que los
despidos” (CPEBRG); "Los dirigentes toman la decisión de contratación de los
operarios. En la asamblea se deciden las cosas como el valor de la cuota por
consumo y la elección de los dirigentes. Las demás decisiones las toman los
dirigentes con el administrador" (CTBSSOAP); "Acá, los que toman las
decisiones son los dirigentes, no es el pueblo y suben o bajan los sueldos de
acuerdo a lo que ellos quieran" (CPSMOARD).

En el primer nivel jerárquico de toma de decisión se encuentra la asamblea. En


éste nivel se toman las decisiones estratégicas de la organización, como por
ejemplo la definición del valor de la cuota por consumo o tarifa, las modalidades
de elección y permanencia de los dirigentes, y el aumento en el número de
usuarios y servicios abastecidos: “Acá es la comunidad la que presenta a la
municipalidad la necesidad de ampliar las redes y nosotros acogemos esa
demanda y le damos forma…(y si) los socios del comité se niegan a ampliar la
red, porque fíjese que es un condominio privado de parcelas de agrado y
nosotros (dicen ellos) no estamos dispuestos a darles agua” (SACM).

Sin embargo, se observa que en la toma de decisión sobre inversiones mayores


en infraestructura, ya sea de mejoramiento integral para los APR y/o para
incorporar el servicio de alcantarillado en los territorios periurbanos, participan
otros actores como el municipio y el Estado, representado por la SUBDERE y/o
la DOH; y la asamblea de las organizaciones decide si los APR asumirán la
operación del servicio: “La decisión de ampliar la redes la toma el Programa de
Agua Potable Rural, que evalúa si es meritorio hacer un mejoramiento integral o
extender redes solamente (sin embargo), La cuota por consumo de agua se
fija en la asamblea" (JDPS);“Yo te diría que (en el caso de ampliación de
redes de agua potable) esta decisión la toma la comunidad e impulsa o motiva
al Estado para que realice la inversión. Al revés (es) el caso del alcantarillado,

143
donde la decisión la toma un ente del Estado y motiva a la comunidad y a los
sistemas de agua potable para que los acepten en sus gastos fijos y los
exploten" (JDDR); “(La decisión de poner al alcantarillado) la tomó el
municipio en conjunto con los dirigentes que son elegidos por los usuarios. Ellos
dijeron finalmente que sí, es importante. No es que ellos vinieran a nosotros a
decirnos saben que nosotros necesitamos que nos coloque alcantarillado, pero
finalmente por medio de las reuniones que sostuvimos, ellos comprendieron la
importancia de colocar alcantarillado (porque) la toma de decisión de estos
sistemas está en manos de los usuarios, los socios " (SACIM), “Las
organizaciones de APR son las que tienen la última palabra al momento de
otorgar la factibilidad de agua, (asesorados por la unidad técnica y por el
programa de APR). No se puede impedir que las organizaciones les den
factibilidad de agua a los parceleros de las parcelas de agrado, como tampoco
se les puede prohibir que posteriormente les entreguen agua” (JDDR).

El discurso refiere que en el segundo nivel de decisión están los dirigentes.


Éstos tienen un rol fundamental en el proceso de toma de decisión estratégica y
táctica, ya que lideran las asambleas y están a cargo de las decisiones
cotidianas de los sistemas. Por lo tanto, el rol y la validación de los éstos en la
tarea sistémica son resaltadas por los entrevistados como características del
liderazgo de los APR: “Una característica del liderazgo es que los dirigentes
viven ahí mismo, por lo tanto son conocidos por la población, son escogidos por
sus pares y eso le da una fortaleza y segundo, es que los comités en el fondo
funcionan bien, la gente, los socios se reúnen" (SACM).

A estos dirigentes el discurso le pide atributos valóricos y características de


líder: "El dirigente tiene que ser una persona honesta, que le diga la verdad a la
gente, con don de mando, que pueda ordenar la casa” (CPEBRD).

144
La complexión de las directivas presenta diferencias en número y forma de
constitución, entre los comités y las cooperativas32:"El procedimiento de
elección de dirigentes está incorporado dentro de los estatutos y está
incorporado dentro de la ley de junta de vecinos, también" (CTBSSD);
“Conforme lo dicen los estatutos y la ley de cooperativas, una vez elegido el
directorio, o sea perdón, los consejeros por la asamblea, el directorio reunido en
una sesión especial elige cómo se distribuyen los cargos dentro del directorio:
quién es el presidente, quién es el vicepresidente, secretario y dos directores”
(CPEBRD); "La elección de dirigentes se realiza como la ley de juntas de
vecinos lo establece, es decir, tenimos que votar en forma secreta y luego se
cuentan los votos" (CTBSSOAP); "El comité escoge, cierto, a través de una
votación popular con cooperación de las personas que son socias de este
comité, que son todas las personas que tiene arranques" (CTBSSD); "Los
procedimientos son los que establecen las leyes de Juntas de Vecinos y la de
cooperativas y a mí me parece que son los adecuados…Elección de dirigentes
por medio de el voto secreto e informado, el voto popular" (JDDR).

En el tercer nivel jerárquico se ubican los gerentes o administradores. Éstos


están a cargo de liderar la parte operativa de los sistemas. Planifican y
supervisan el trabajo de los operarios, y al mismo tiempo cumplen la función de
puente entre los trabajadores y los dirigentes: “Cuando yo llegué aquí, en esta
organización no habían órdenes claras y los operarios tomaban ellos las
decisiones, en realidad hacían un poco lo que querían. Hoy en día el trabajo se
planifica y los operadores salen con una cantidad de trabajo para el día que
tienen que cumplir, realizan un trabajo ordenado y especifico, un trabajo

32
Ver en el Reglamento de la Ley General de Cooperativa. Título Tercero. De la dirección,
administración y vigilancia de las cooperativas. Párrafo Tercero. De las Juntas Generales.
Artículo 46 que regula la forma de realizar las elecciones; y la Ley de Juntas de Vecinos y
demás organizaciones comunitarias. Título I. Disposiciones generales. Párrafo 5. Del directorio;
artículo 19.

145
planificado, a menos que se nos presente una situación inesperada que hay
que atender, porque pone en jaque el suministro de agua potable” (CTBSSG).

Para los entrevistados este proceso de liderazgo democrático presenta


desventajas, derivadas de lo difuso que se presentan los límites entre los
distintos niveles de toma de decisión: “Uno de repente dice ¿cuál es nuestro
límite como dirigente, hasta qué punto yo puedo tomar una determinación?
Supongamos que yo quiero arreglar este patio y eso me sale treinta millones
(30.000.000) de pesos ¿podré tomar esa decisión o tendré que esperar hasta la
próxima reunión de asamblea que es en un año más, o lo hago porque sé que
el beneficio va a ser bueno?" (CPEBRD); "Mira, sabes que hay un punto que no
es menor, acá los dirigentes se juntan una vez a la semana. En esa reunión yo
les doy una amplia información, pero la verdad es que antes se juntaban una
vez al mes y eso era muy poco y se paralizaban muchas decisiones. Ahora es
más frecuente, pero igual yo necesito encontrarme con el dirigente diariamente
para informar y tomar decisiones en el momento, siempre que se puedan,
porque cuando son decisiones más grandes hay que esperar al directorio y aun
más, a veces hay que esperar a que se realice una asamblea... sabes cuánto
retrasa la toma de decisión esta modalidad de funcionamiento ¡MUUUCHO!"
(CTBSSG).

Otro aspecto crítico en los proceso de liderazgo señalado en el discurso es la


escasa participación de los usuarios. Este aspecto crítico tiene dos
representaciones; por un lado está la situación de los usuarios que no son
socios y que resienten esta condición “Nosotros llevamos muchos años acá y
querimos que nos hagan socios para tener arte y parte en las decisiones….
Eso, eso es un problema, porque… es bueno poder elegir al Jefe de la
cooperativa ve que de la asamblea y el Jefe depende el valor del agua” (ULLI);
“Nosotros somos toitos socios, no hay naiden que tenga arranque y que no sea
socio, lo malo que sólo es socio un integrante por casa y en mi caso es mi

146
marido. Entonces, yo no tengo derecho a voto, sólo vota él” (ULBSS); "Nosotros
no tenemos mucho derecho al pataleo, las decisiones las toma la cooperativa y
algunos temas los consulta a la asamblea, pero el problema es que hay reunión
de asamblea una vez al año y extraordinariamente dos, entonces son pocas las
decisiones que están en manos de nosotros, la gran mayoría las toma la
directiva y el gerente" (ULLI).

Por otro lado, está la escasa participación de los socios en las elecciones de
dirigentes. “Yo creo que uno de los problemas es la falta de interés de los
socios para postular y posteriormente desarrollar los cargos de directiva. Es
muy poca la gente que se inscribe (y) yo veo en los socios una cosa como que
no están ni ahí, yo veo cada vez menos interés por parte de los socios en
cuanto para ocupar un puesto de liderazgo en este sistema" (CPEBRG); "No se
respetaron los requisitos legales, porque no se escogió una comisión de
elecciones ni se llamó a votación, o por lo menos, a mí no me llamaron"; "Acá
pagan la cuota tres mil (3.000) familias y sólo mil quinientas (1.500) escogen a
los dirigentes, y ni eso, porque muchas personas no quieren participar y otras
están marginadas por los dirigentes, porque son muy desordenadas” (ULBSS);
“Yo no conozco mucho del sistema para elegir al presidente, el de elecciones,
porque nosotros no somos socios, somos sólo usuarios de la cooperativa y no
tenemos derecho a participar” (ULLI); “En una oportunidad una presidenta, que
ya no está, compró los votos de una población completa, porque ella era la
directora del colegio y entonces, los procedimientos están medios viciados,
como le dijimos antes, siempre salen los mismos dirigentes electos" (ULBSS).

La escasa participación de los socios en las candidaturas y procesos


eleccionarios se relaciona en el discurso con las exigencias, obligaciones y
compromiso que demanda el ser dirigente de estas organizaciones: “Los
requisitos son casi los mismos que se usan en todo tipo de elecciones. No
haber estado procesado…eh, si es extranjero haber estado avecindado por más

147
de dos años en el país y tener ganas de ser dirigente. Porque es difícil de serlo,
porque la verdad es que nosotros no ganamos plata...., porque como le digo
para ser presidente primero hay que tener cuero de chancho, segundo hay que
tener vocación y si no tenemos vocación, es preferible que nos quedemos en la
casa tranquilitos y no hagamos ruido" (CTBSSD); "Para mí, antes que los
requisitos legales que existen, un buen dirigente de una sistema de APR debe
saber cómo funciona esto, de qué se trata” (CTBSSOAP); "Para ser dirigente de
un APR, cooperativa o comité, yo creo que debe ser una persona honrada y
comprometida, pero sobre todo honrada, porque acá se maneja dinero.
Entonces tiene que ser una persona honrada, sin papeles manchados"
(CPSMOAP); “Los intereses personales priman, pero priman cuando están en
elecciones, pero una vez electos comienzan a aflorar otros sentimientos, otras
necesidades y otros requerimientos…… Más de colaboración, más de
solidaridad, porque se ven insertos en el tema y saben que lo que tienen que
hacer, lo tienen que hacer bien, porque hay veinte mil (20.000) ojos mirándolos
y todos están esperando que alguien se caiga. Porque es una instancia de
poder, aunque sea elegido por sus pares, automáticamente el que era amigo
llega a un cargo ya pierde amigos, ahora tiene rivales y es propio de nuestra
idiosincrasia" (SACL); “Los dirigentes son como los bomberos, porque la ley no
les permite recibir remuneración por su trabajo social, pero sin este trabajo
nosotros no tendríamos el nivel de abastecimiento de agua potable que
tenemos” (SACIM).

Para el discurso, la escasa participación de los socios condiciona la postulación


y elección de dirigentes en cuanto a cantidad y diversidad de candidatos "En
estas localidades, por la experiencia que yo tengo, las directivas se mantienen
por mucho tiempo, los mismo en los cargos, a lo más hay una transferencia del
cargo de presidente, pero generalmente se mantienen por mucho tiempo las
mismas personas en los cargos. Lo cual se debe a que no hay voluntad de la
gente para asumir cargos de responsabilidad o por el desconocimiento de qué

148
es lo que hay detrás de la cooperativa, puertas adentro de la organización"
(CPEBRD); "Hace catorce (14) años que están los mismos en la directiva, y no
es chiste. Se supone que se tiene que llamar a elecciones cada dos años, pero
no sé si no hay más interesados en postularse o qué pasa, pero siempre salen
electos los mismos, sólo se cambian de cargos, pero son las mismas personas”
(ULBSS); “El problema no es la frecuencia de las elecciones, sino que no hay
candidatos, la gente no se postula y generalmente salen los mismos" (ULEBR).

Ésta situación deriva en la flexibilización de los atributos y características


deseadas para los dirigentes porque “no necesariamente son elegidos porque
sea (el presidente) el gallo más capaz, sino que es porque es el más
representativo…es por voto popular" (JUTAA);

Con el objetivo de corregir esta situación e incentivar la participación de un


mayor número de socios en las postulación y elección del cargo de dirigente,
algunas organizaciones han modificado sus estatutos flexibilizando los
requisitos para postular al cargo y han implementado el pago de un viático para
los dirigentes a modo de estimulo económico: “Este año han sido modificados
los estatutos justamente porque en los estatutos habían eh, una especie de
discriminación por el tema de la educación de los dirigentes……Mire no estoy
seguro si era tan así que aparecía el 8 básico como mínimo pero nosotros
sacamos ese requisito en el nuevo estatuto porque la ley tampoco lo menciona.
El que si se mantiene es el de que tiene que ver con la probidad, con la justicia,
que la persona no hay sido sometida a un juicio, que no esté en un juicio y
mucho menos condenado por distintas cosas. Eso, eso se mantiene pero
hemos sacado DICOM por ejemplo, porque aquí los dirigentes no manejan
fondos “(CPEBRD); “Nosotros hace poco tiempo atrás hicimos una
modernización de los estatutos de la cooperativa, basado en el marco que nos
impone la ley de cooperativa, entre las cuales se modernizó el derecho a viático
de los dirigentes. Porque antes los dirigentes iban a Santiago o iban a alguna

149
otra parte y no tenían derecho a nada, a diferencia de los trabajadores que
ganan su dinero, en cambio los dirigentes cero… Entonces tiempo atrás se
cambiaron los estatutos y se permitió que los dirigentes tuvieran acceso a los
viáticos para salir, para alguna reunión o las citaciones..., como que se liberó un
poco. Otro aspecto es que se liberalizó un poco la cantidad de reunión, se
permitió que pudieran existir un mayor número de reuniones en caso de que
fuera necesario” (CPSMD).

5.1.4.3 Estatutos.

Los estatutos de los sistemas de APR, como normativa interna, no presentan


diferencias entre comités y cooperativas, y a pesar de que “(la verdad) no tienen
ningún peso jurídico, ningún peso legal” (CTBSSD), regulan el accionar de los
dirigentes, estableciendo los derechos y deberes de los socios: “…Consisten en
reglamentar el tema, el sistema y castigar a las personas, si le podimos llamar
castigar, porque aquí enfrentamos problemas serios como es el hurto, el robo
del agua, entonces los estatutos de alguna manera regulan que es lo que yo
tengo que hacer como presidente cuando yo encuentro una situación así...
Regulan los abusos, que en realidad -aunque no tengan ningún peso jurídico-
nosotros los hacemos valer y la comunidad legitima este accionar” (CTBSSD);
“...los tenemos en la lista negra (risas). Porque nosotros tenemos definido cómo
actuar ante estas personas (que se roban el agua) en los estatutos del Comité"
(CTBSSOAP); “Hace un tiempo se modificaron los estatutos para poder
aumentar el número de reuniones de la directiva y con la asamblea, porque se
necesitaba ajustar los reglamentos internos a las necesidades que tenía la
cooperativa" (CPSMG); “Lo que sí sé es que es en los estatutos donde se
señalan las formas de control hacia quienes no pagan la cuota de consumo”
(SACM).

Los estatutos están referidos a las normas de confianza, solidaridad y


reciprocidad presentes en las organizaciones de APR: “En los estatutos dice

150
que no hay socios privilegiados”; "En el reglamento de la cooperativa, la
cooperativa dice que somos todos socios iguales" (ULEBR); y dado “que los
estatutos de estas organizaciones no tienen ningún valor legal, (que) es un
acuerdo de buenas voluntades que se toma entre los socios de las
organizaciones, pero validez legal... no la tienen" (SACM); sólo puede castigar
el consumo excesivo, no las morosidades: “Estas organizaciones no pueden
incorporar castigos por morosidad de sus usuarios, como una empresa
sanitaria, porque son organizaciones sociales sin fines de lucro. Lo que sí
pueden y de hecho lo hacen, es sancionar el consumo abusivo de agua y el
robo” (SACL); “Todos los APR tienen un rol social y ocurre que de repente
comienzan a poner normas que castigan a los más pobres, porque sancionan
las morosidades. Las normas internas que se tienen que poner los APR, para
regularse internamente, tienen que ser ni tan estrictas ni tan light. Tienen que
cumplir primero que nada con lo básico para lo que son creados estos sistemas,
que es proteger a la gente más pobre. Que es para donde debe enfocarse los
estatutos de estos sistemas. Porque, si le ponen en los estatutos que cuando
un usuario se atrasa un mes o dos en el pago de la cuota, poco menos que le
cortamos el agua y le sacamos el medidor. Entonces, no se cumple con el rol
que tiene este tema" (JUTAA).

La fortaleza de los estatutos de los APR se basa en el control social que


pueden realizar los miembros del subsistema social para que los usuarios
reconozcan el valor económico del agua potable y cancelen oportunamente su
consumo:“Lamentablemente los estatutos de estos sistemas no tienen peso
jurídico, pero tienen el peso del control de la comunidad" (SACIM); "Se deberían
corregir los estatutos y ser más rígidos en el pago de las cuotas, no aceptar
tanto atraso en el pago" (ULLI), porque "Hay personas que deben seis (6) o
más cuotas y eso afecta los ingresos del comité" (ULEBR).

151
5.1.4.4. Sentido de pertenencia al sistema

Para el discurso el sentido de pertenencia de los trabajadores y dirigentes de


los APR le otorga valor a los sistemas y a los territorios donde éstos se
emplazan: “En una comunidad donde uno sabe que de alguna manera la cosa
funciona. Es decir, que los tipos tienen ordenado el sistema, no hay deudas,
cada vez que se rompe algo ellos son capaces de repararlo rápidamente
porque tienen los elementos. No hay duda que económicamente esos terrenos
valen más que los territorios donde los sistemas no funcionan bien y eso es un
valor agregado de la organización, de la comunidad” (JUTAA); “La gente acá
tiene una voluntad de oro, si uno le dice que hay que trabajar un domingo acá
están. Ésa es la diferencia de los lugares rurales" (CPEBRD).

El sentido de pertenencia de los dirigentes y trabajadores, junto con la


organización administrativa y la incorporación de la tecnología son elementos
de soporte al momento de ampliar y diversificar las redes “Lo administrativo es
nuestro principal patrimonio para enfrentar las ampliaciones de redes y
eventualmente la incorporación del alcantarillado a nuestra gestión. Tener un
buen sistema computacional, porque es lo que nos permite trabajar con una
gran cantidad de arranques sin mayores dificultades y tener toda la información
y tener un personal que están con uno al 100% , o sea, yo no necesito estar
encima de ellos, yo sé que los trabajos me los cumplen a la cabalidad...eso es
fantástico con los operadores y las secretarias que trabajan conmigo… los
trabajadores que son nuestro capital humano, porque ellos -al igual que yo- se
han ido formando, entonces tienen el conocimiento de cuando esto era pequeño
y hasta ahora que Ud. ve cómo es un gran sistema, y tienen la camiseta puesta
y siempre han tenido el sentido de la camiseta... Así funcionamos los cuatro
nosotros, si tenemos que barrer, barrimos y si tenemos que representar en una
ceremonia a la cooperativa, vamos nosotros, estamos en todas y no nos
importa que tú soy la secretaria, tú soy el operario. No, eso no nos importa en
ese sentido, es fantástico el equipo" (CPEBRG).

152
En contraposición al fuerte sentido de pertenencia que manifiestan dirigentes,
trabajadores y parte de los socios, los usuarios (fundamentalmente no socios)
se plantean distantes y apáticos ante estos sistemas, y sólo demandan de ellos
los servicios que abastecen: “Los dirigentes tampoco tienen muchas
colaboración de los vecinos, porque los vecinos sólo se acercan a los sistemas
y sus dirigentes cuando les pasan multas por sobre-consumo" (SACIM); "Cómo
lo hayas, que de casi 3.200 socios te lleguen 50 a una asamblea"; "Yo creo que
hay una desidia completa, que se produce porque la gente no se siente parte de
esto, lo único que le importa es que le salga agua por la llave” (CTDSSG); "La
misma gente echa a perder la planta de tratamiento de Los Maitenes, porque la
gente es muy cochina… Llega todo eso, llegan cosas que matan las bacterias,
ahora está llegando aceite quemado y eso mata las bacterias… Lo que pasa es
que en El Maitén son 680 casas, pero de las 680 casas acaso hay 300 que son
los dueños. Las casas van todos los meses a renta, a renta; y ésa es la gente
que está haciendo esto. No son los propietarios, sino que son los "turistas" los
que llegan y arriendan nomás, son esos los que dejan la embarrada"
(CPSMOARD); "yo veo en los usuarios una cosa como que no están ni ahí, yo
veo cada vez menos interés por parte de los usuarios” (CPEBRG).

El desapego y la apatía de los usuarios con estos sistemas se explica, desde el


discurso, porque en estos territorios de borde el crecimiento poblacional
motivado por el desarrollo de viviendas sociales ha hecho que habitantes
rurales cohabiten con habitantes urbanos pobres: “Yo diría que en Batuco 1,
que es más antiguo y rural, hay un fuerte sentido de pertenencia a la comuna
de Lampa y de propiedad del sistema de APR, pero en Batuco 2, que es urbano
y donde llegó gente nueva a vivir, gente que no necesariamente es de la
comuna, el sentido de pertenencia es menor y las personas se interesan menos
por lo que sucede con su sistema de abastecimiento de agua potable" (SACL);
"En los sistemas más chicos se nota más el sentido de pertenencia a los
sistemas y al territorio, pero en los sistemas grandes se comienza a perder”

153
(JDPS); “Pienso que las comunidades se sienten identificadas y pertenecientes
a estos sistemas. Claro que en la medida que va creciendo (el sistema) las
personas se vuelven más distantes y el trato es más impersonal. Pero en las
localidades pequeñas, los sistemas (de APR) son como el corazón de la
comunidad” (JDDR).

El discurso plantea que el sentido de pertenencia, creado a partir de las redes


familiares y los vínculos personales de los usuarios, socios, dirigentes y
trabajadores, potencian el crecimiento y desarrollo de los sistemas de APR. “La
gente le dice a uno: éste es mi medidor, ésta es mi agua y yo tengo derecho a
saber cuánto gastan y en qué...Eso es una fortaleza" (SACIM); “Yo conozco al
chico que hace de gerente acá desde que tenía como doce (12) o catorce (14)
años, los conozco a todos desde niños, se educaron junto con mis hijos…Yo,
por lo menos, me siento orgullosa de cómo ha prosperado esto en todo sentido”
(ULLI).

Para el discurso, el sentido de pertenencia de los usuarios y la participación de


los socios es relevante pues los define como actores claves en la fiscalización
de la calidad de los servicios abastecidos: “El control de nuestros socios, que yo
diría que es el más severo. Nosotros tenemos más de mil (1.000) socios de las
cooperativas, además de nuestros usuarios, y que día a día ellos nos están
controlando que la presión, la cantidad, el precio… una serie de cosas"
(CPSMD); “Ellos se sienten parte (del sistema), por lo tanto, demandan su
derecho a la participación y la información… Eso es una gran fortaleza”
(SACIM).

5.1.4.5. Asociaciones y relaciones.

Para el discurso, las relaciones y asociaciones de los APR se inician con la


conformación de estos legalmente y por lo tanto “Los sistemas de APR se
vinculan donde obtiene la personalidad jurídica, y las cooperativas (la obtienen)

154
con el Departamento de Cooperativas del Ministerio de Economía y los comités
la obtiene en los municipios” (JDPS).

Después de iniciadas las operaciones los APR desarrollan relaciones basadas


en la comunicación, entre dirigentes, trabajadores; y con los usuarios, el
municipio y el Estado, representado por la UT de la DOH: “En general, la
comunicación de los sistemas entre su dirigencia, con los trabajadores y con los
usuarios socios es buena…. Por lo que yo diría que bien, incluso mejor que los
pequeños. Yo creo que por ser más grandes tienen muchas más
responsabilidades que cumplir y por tanto están mucho más profesionalizados,
más responsables en lo que ellos definen (como su rol)" (JUTAA).

A medida que los sistemas van incorporando el alcantarillado a su operación el


discurso va presentando aumento y diversificación en las asociaciones y
relaciones de estos APR.

Cuando el APR tiene a cargo la operación del abastecimiento de agua potable,


para este discurso la relación de los sistemas y los usuarios con la
municipalidad está referida a la solución de problemas: “Los sistemas de APR
se vinculan con las municipalidades, porque es donde los comités obtienen la
personalidad jurídica” (SACIM); "Con la municipalidad nosotros no tenemos casi
contacto ni coordinación porque no tenimos problemas” (CTBSSG). Al mismo
tiempo el discurso señala al APR como una organización activa al interior de la
comunidad que contribuye al desarrollo de estas localidades: “teñimos una junta
de vecinos que es nula, (mientras que) el agua potable siempre ha hecho
cosas” (ULBSS); “La muni tiene a cargo el alcantarillado, y hemos tenido hartos
problemas…siempre hay que estar yendo a reclamar” (ULBSS).

La relación de estos APR con organizaciones de su misma naturaleza se


presenta como fallida cuando los objetivos gremiales se perciben como

155
incumplidos; “Pero yo me retiré de la asociación33, como vicepresidente
renuncié, porque no cumplió para el fin que se hizo la asociación, que era
defender los derechos de los comités y los derechos de los dirigentes”
(CTBSSD).

En las cooperativas a cargo de la gestión parcial de las aguas domiciliarias el


discurso identifica relaciones con usuarios, organizaciones comunitarias,
actores políticos, locales y regionales, y con la administración del Estado,
representado por la UT de la DOH y el Ministerio de Economía: “Saber que esta
cooperativa es nuestra, pertenece a todos….Yo, llevando muy poco tiempo acá,
las dos secretarias ¡que fue un gusto!, me llamaron por mi nombre y no hay
nada más rico que a uno lo traten por el nombre, es como estar en la casa…..
Nosotros participamos con la comunidad y nos relacionamos con el municipio
por el tema del alcantarillado y a veces cuesta que la relación sea buena…
Porque acá hay un poquito de desconocimiento de lo que hay detrás de la
cooperativa, o sea, lo que hay puertas adentro de la organización, por eso yo
creo que la gente no participa. Ellos no se enteran, no preguntan, pero a
nosotros también nos cuesta comunicarnos con ellos... Por la dispersión, la
gente está muy apartada y para citarlos a reunión es un tema, por que se
requiere personal y combustible para recorrer todas las viviendas. Entonces
decidimos citarlos por medio de la correspondencia, es decir, cuando
repartimos las cuentas" (CPEBRD); “Nosotros acá tenemos contactos con todas
las autoridades de la zona. Yo personalmente he conversado con el
gobernador, con el intendente, con el actual alcalde, con los diputados de la
zona, que son de dos coaliciones diferentes y ningún problema. Porque yo no
he ido a pedir para mí, sino que para mi comunidad, para nuestro sistema… Yo
creo que la relación con el Estado debe ser bastante positiva, de colaboración
mutua. Nosotros tenemos que poder entendernos con el Estado, por medio de

33
En relación a la Asociación Nacional de Productores de Agua Potable (FENAPRU).

156
la UT de la DOH, en las buenas y en las malas, poder estar en contacto
siempre… Las municipalidades, ellos estando tan cerca de nosotros, no saben
de nuestro vivir como lo saben en el mismo Ministerio, como Obras Hidráulicas,
como el Departamento de Cooperativas" (CPEBRD).

Este discurso presenta como débil la relación del APR, a cargo de la operación
parcial de las aguas domiciliarias, con el municipio y de éste con los usuarios:
“Tampoco dan una solución, nosotros hemos hecho no sé cuántas reuniones
con las autoridades y todas las autoridades han hecho oídos sordos.
Reclamamos que las tarifas eran muy caras, que nos dieran una solución. Se
fue el alcalde que había, que supuestamente él tendría que haber dado una
solución, nunca la dio. Subió este otro alcalde y yo no veo ninguna solución,
estamos igual que la otra vez" (ULEBR).

Esta situación es producida, según este discurso, porque al incorporar el


alcantarillado en el cobro de la tarifa por agua potable, que realiza la
cooperativa, el valor de esta tarifa aumenta sustantivamente: "Con el servicio de
alcantarillado hay problemas, porque nosotros estamos pagando el noventa por
ciento (90%) del valor del agua que se gasta en alcantarillado…Yo no gasto el
noventa por ciento (90%) del agua en alcantarillado…. El consumo del
alcantarillado es exagerado, muy elevado" (ULEBR).

El discurso refiere que los APR a cargo de la operación total de las aguas
domiciliarias mantienen relaciones con organizaciones sociales -locales y
gremiales-, la UT, el Estado; y han incorporado canales formales de
comunicación a la relación con los usuarios: “Nosotros, como la cooperativa
Santa Margarita, nos reunimos mensualmente con todos nuestros congéneres,
tanto comunal como regional. Nosotros tenemos una institución, que es la
Metropolitana Sur, que aglutina a todos los comités y cooperativas del sector
metropolitano sur y con ellos nosotros hemos hecho asesorías y capacitación a
diversos sistemas y en distintas situaciones con el apoyo del nivel central (del

157
MOP), pero también naciendo de esta agrupación… La cooperativa tiene un
buzón de reclamo para los usuarios” (CPSMD).

La relación de estos APR con el municipio y el Estado es definida, en el


discurso, como buena: “Hasta donde sé, acá en la cooperativa tenemos buenas
relaciones con el municipio, con la DOH, con el Departamento de Cooperativas
e incluso con la Superintendencia de Servicios Sanitarios” (CPSMG); "Yo me
junto permanentemente con ellos (representando al municipio), porque como
estamos con cartera de proyectos vamos avanzando, les solicitamos
información y les vamos contando en qué estamos" (SACIM).

Sin embargo, la relación con la UT a pesar de contar con eficientes canales de


comunicación está condicionada a la exclusión de los aspectos financieros: “Yo
diría que los canales de comunicación son buenos y efectivos, claro que con los
sistemas grandes no se puede hablar de los recursos financieros, porque ellos
son muy celosos con ese tema, y como más que mal nosotros representamos a
la empresa (en relación a Aguas Andinas), algunos piensan que somos
competencia y nos cierran esos temas… Por lo demás la relación es buena…
Hay una relación de prestación de servicios desde hace muchos años”
(JUTAA).

Cabe señalar que el discurso presenta a las asociaciones entre los APR,
independiente de su nivel de operación del servicio de alcantarillado, con los
municipios y el Estado como alianzas estratégicas ante situaciones que
amenacen el abastecimiento de los servicios de las aguas domiciliarias: “Son
los dirigentes de estos comités, los que están constantemente solicitándonos
apoyo y reuniones para ver cómo pueden ir mejorando y solucionando ciertos
problemas… Una de las formas de evitar la combustión social (en un
escenario de escasez del recurso hídrico) es que se vea trabajo compartido,
que se vea un municipio presente y anticipándose a los hechos, por medio de
una relación de colaboración, en base a un plan de trabajo con los APR"

158
(SACL); “el Ministerio de Obras Públicas por intermedio de Obras Hidráulicas,
que ellos tienen un catastro nacional y saben en qué lugares existe gran
cantidad de agua, en qué lugares está disminuyendo mucho, dónde van los
caudales, por su área técnica que tienen. Por lo tanto, ellos son una, ¡¡la
principal ayuda y orientación que tenimos nosotros!! O sea, en un momento
determinado ellos, ellos son la voz que va a decir acá no hay más agua”.
(CPEBRD).

Por otro lado, el discurso plantea que las dificultades que les imponen las
regulaciones y procedimientos del Estado a los APR para crecer y
desarrollarse, demanda del subsistema social de estos el establecimiento de
asociaciones y complementariedades con el Estado "Los montos, para
incorporar alcantarillado, son altísimos para cualquier localidad. Es decir, que
no son sustentables de realizar por las propias comunidades. Tiene que ser una
inversión compartida entre el Estado y la comunidad" (JUTAA); "La ley coloca
muchas dificultades… Entonces, es ahí donde se llega al diálogo con las
personas y se hace un trabajo compartido, como los pavimentos participativos,
y se le dice si Uds. quieren agua y la ley dice que nosotros le podemos poner
desde la matriz 12 metros para allá, ahí queda su medidor, y Ud. vive 500
metros más allá, entonces hágase responsable Ud. Hágalo Ud." (CPEBRD).

Cuando las situaciones de sustentabilidad para el abastecimiento de las aguas


domiciliarias amenazan las condiciones de vida y salud de los usuarios, éstos
tienen la capacidad de organizarse y desarrollar acciones en conjunto,
movilizando recursos personales y colectivos, en pos de un objetivo común:
“Nuestros niños, nuestros bebés, pasaban enfermos por los zancudos, las
moscas, los ratones y los olores, que salían de la planta de tratamiento";
"Nosotros nos tuvimos que poner en las coloradas y no dejábamos que los
camiones descargarán en la planta, nos poníamos delante del camión y no lo
dejábamos pasar" (ULBSS).

159
5.1.4.6. Institucionalidad y normativa del sector sanitario rural.

Este discurso presenta al saneamiento rural como “un tema que está
demasiado segmentado. Por un lado, están Uds. como Obras Públicas34 viendo
el agua potable rural, por el otro lado, el FNDR financiando plantas de
tratamiento por cualquier lado… No se les ocurre que las plantas de tratamiento
deben ser vinculantes con los sistemas de APR…. En el GORE se ha detectado
el problema de la sectorialidad de estos proyectos, pero como no han hecho
crisis, no se han tomado las medidas atingentes para trabajar más
intersectorialmente entre el GORE, FNDR, El MOP y el MINVU…” (PGR).

Este sectorialismo genera un número significativo de procedimientos


administrativos, en y entre los organismos del Estado, para ejecutar las
inversiones destinadas a la infraestructura sanitaria rural. Esta situación propicia
descoordinaciones y duplicidad de funciones: “¿Cómo es posible que no se
pongan de acuerdo entre dos direcciones de un mismo Ministerio? No entiendo
lo que sucede, pero eso nos perjudica… Es una burocracia tremenda"
(ULEBR); “Es por la clásica forma que tiene el Estado de ser más reactivo que
proactivo. Falta una voluntad política que convoque a los entes que trabajan en
agua potable y saneamiento básico rural, desde lo sectorial, a mirar el territorio
de una manera más holística e integrada” (PGR); "Por otro lado, estos
sistemas son desconocidos por la gente, no se nos conoce, creen que somos
unas empresas; por eso yo le digo que hace mucha falta el contacto en terreno.
Por ejemplo los horarios, los dirigentes trabajamos en horario de oficina, nos
ganamos los porotos, porque Ud. sabe que este trabajo de dirigente no es
remunerado, entonces que se nos reconozcan los tiempos y las reuniones se
realicen los fines de semana o después de nuestros horarios de trabajo"(
CPEBRD); "Mira, en primer lugar, la verdad es que yo no veo con claridad que
exista una política pública dirigida a este sector, el sector del agua potable y

34
Se identifica a la tesista en su calidad de funcionaria del Ministerio de Obras Públicas.

160
saneamiento rural, y se echa de menos" (CPSMD); "Lo que yo veo es que hay
una especie de desidia o desinterés en lo que a nosotros nos pasa por parte de
organismos (del Estado)…. Eso es preocupante, porque lo que nosotros
hacemos es administrar bienes del Estado y ¡otorgamos un beneficio que el
Estado debe asegurar a todos los chilenos! … A mi juicio, hay una especie de
apatía en (la DOH, entre otros) (los) organismos del Estado con los cuales
nosotros nos relacionamos, para entender lo que son los APR y cómo
funcionan. Te pongo un ejemplo: a la DOH sólo le interesa la inversión y los
proyectos de infraestructura, a salud le interesa que les entreguemos las
muestras de agua de acuerdo a la Norma Chilena de Calidad del Agua, pero a
ninguno le interesa realmente los problemas de gestión y la integralidad de
estos sistemas... Todos miran su parte, que es sólo una fracción de lo que
nosotros hacemos y nadie nos mira como un todo y nos asume como tal"
(CTBSSG).

Los tiempos destinados por el Estado a los procedimientos para transferir el


financiamiento orientado a la inversión en infraestructura de crecimiento y/o
desarrollo de los sistemas de APR, superan los tiempos requeridos por estos
sistemas para dar respuesta a los desafíos de abastecimiento que les plantean
los territorios periurbanos de la RMS: “Los tiempos de los procesos del Estado
para obtener la infraestructura no se relaciona con nuestras necesidades"
(CTBSSD); “A nosotros nos jode, si me disculpas el chilenismo, los tiempos de
inversión y la cantidad de procedimientos que tiene el Estado para realizar una
inversión en estos sistemas. Afortunadamente, nosotros podemos acortar estos
tiempos en la medida que contamos con los recursos físicos para, por ejemplo,
pagar los diseños de ingeniería o contratar profesionales que nos hagan los
estudios hidrogeológicos"(CTBSSG); “Es un problema la burocracia que existe
para solucionar algunos problemas que tiene la cooperativa, y uno se encuentra
con algunas trabas burocráticas en el mismo Ministerio de Obras Públicas para
solucionar algunos problemas a la gente. Eso es lo que complica, esa es la

161
parte que complica” (ULEBR); “A mi parecer el procedimiento es lento, (nada
más que eso) porque aquí se postuló a un estanque nuevo y se demoró como 4
años, entonces yo creo que es muy lento el poder acceder a los recursos y por
eso pienso yo que las personas, desde donde salen las platas o alguien que
tenga que ver con eso, visiten el terreno para decidir si lo que se necesita es de
carácter urgente y hacer más expedito todo el trámite para que salga... Los
tiempos son a destiempo con las necesidades que nosotros tenimos"
(CTBSSOAP); "Aparte de los tiempos que demoran en el Estado para dar los
recursos y desarrollar los proyectos de ingeniería en las localidades, (que es) a
todas luces muy extenso. O sea larguísimo, y me parece que por distintas
formas deberíamos ser capaces de acortar los plazos en su décima parte a
nivel ministerial…. Hay que pensar que no porque toda su vida la gente que no
haya tenido agua potable o no porque en toda su vida no haya contado con
alcantarillado va a poder esperar cinco, diez o quince (5, 10 o 15) años o
más…. Aunque en promedio son 5 años” (SACL).

El discurso señala que la focalización de los recursos realizada por el Estado


excluye a las parcelas de agrado o los predios definidos como tal (de 5.000 m2
o más) “se debería modificar la ley y poder dar agua a las parcelas de agrado,
porque hay personas que viven en una rancha sobre un terreno de no sé, de
cinco mil metros cuadrados y…” (CTBSSD); “no se les puede dar agua, porque
tienen una "parcela de agrado"... Eso también es algo injusto que está en la ley
actualmente y que se debe revisar, porque a veces (a) las personas (porque)
son dueñas de una cantidad de hectáreas y entonces se considera que tienen
una parcela de agrado, pero resulta que viven en una ranchita y son igual de
pobres que todos nosotros” (CPEBRD); "Lo que yo cambiaría a la actual ley es
eso de que tenemos que dejar fuera a las parcelas de agrado… Eso no me
gusta, porque entonces acá mismo hay gente que tiene agua y al lado hay
gente que, porque no es tan pobre o porque no es pobre, nosotros no podemos
darles agua. Yo cambiaría eso y a las parcelas de agrado les pondría una tarifa

162
diferenciada, porque ahí puede estar una fuente de financiamiento de los
sistemas y también puede ir en beneficio de la misma gente de menor recurso,
abaratando un poco el costo a ellos y subirle el costo a los que sí pueden
pagar” (CPEBRG).

Al mismo tiempo el discurso refiere que el sector de saneamiento rural se


encuentra carente de normativa específica: “Tenemos distintas leyes y normas
a las que debemos dar respuestas, pero estas leyes abordan aspectos distintos
de los sistemas, por ejemplo, sobre la calidad del agua tenemos la Norma
Chilena de Calidad del Agua, para los trabajadores nos regimos por el Código
del Trabajo, pero no somos considerados una empresa, aunque tributariamente
también tenemos que rendir cuentas... Somos considerados una organización
social...es medio esquizofrénico... A mí me costó entender la situación tan
particular de estos sistemas" (CTBSSG); “No está legalizado ni reglamentado
nada en el tema de agua potable rural hasta el día de hoy, se hace lo que se
quiere… Lamentablemente la ley actualmente no les permite cobrar tarifa y
tampoco les permite abastecer a las parcelas de agrado..., aunque de facto se
haga” (JDDR).

Esta normativa protege los territorios de operación de los APR “Cualquier


empresa privada o privados quieren meterse acá, aquí o en cualquier parte.
¿Entiende? No tan solo aquí en Batuco, sino que también en la Islita, en El
Bollenar, en todos los sistemas que tienen de 500 arranques para arriba,
porque de 500 para arriba ya es plata para un privado, ¿entiende? y los comités
no estamos protegidos, porque no hay ninguna ley que nos respalde. Entonces,
si viene un privado a meterse aquí ahora, como están las cosas ahora, nosotros
casi no podríamos hacer nada" (CTBSSD).

Cabe señalar que la normativa que rige a las cooperativas abastecedoras de los
servicios de agua potable y/o alcantarillado, acota la capacidad de inversión de
estos sistemas por medio de directrices y requerimientos administrativos y

163
legales: “En este momento estamos con una especie de camisa de fuerza que
no nos permite actuar. Porque la ley es muy específica, es muy rígida y no
permite que algunas cooperativas, las que podrían hacerlo, levanten cabeza”
(CPSMD).

A pesar de que la legislación vigente le otorga a los sistemas de APR la


posibilidad de concesionar los territorios abastecidos por ellos como primera
opción, este discurso señala que las regulaciones que el Estado les impone a
los sistemas de APR obstaculizan la creación y acumulación de capital físico y
humano en el subsistema técnico para otorgar sustentabilidad a los sistemas y
al abastecimiento de las aguas domiciliarias: “Yo digo aquí, el Estado no ha
hecho lo que tiene que hacer. Porque el Estado debería de haber ya entregado
esos derechos de agua a todos los APR que estamos esperando desde el 2005
cuando se modificó el código de agua... ahí el Estado debió asegurarnos los
derechos de usos, ¿me entiende? Prioridad número uno y que ya debieran
habérselos entregado a todos los comités… Porque el artículo 6 transitorio, yo
lo entendí que era para los APR y resulta que metieron a todo el mundo, a
nosotros y la empresa privada, y eso no corresponde. Yo no estoy de acuerdo”
(CTBSSD); “El código de agua no protege a los sistemas de APR y
saneamiento como tampoco los prioriza en el otorgamiento de los derechos de
uso del recurso hídrico y creo que ahí hay una deuda del Estado para con estas
organizaciones y localidades” (PGR); "Cuando se modificó el código de aguas,
no se resguardaron los sistemas comunitarios y ésa pudo haber sido una gran
ocasión para incorporar a estos sistemas con sus debilidades a la modificación
de los derechos de uso en el aprovechamiento del recurso hídrico"; "Lo otro
también son los derechos de agua, que también debieran darse, porque es un
trámite muy lento, el de los derechos de agua y eso que es un bien necesario
para todos" (CTBSSOAP).

164
La regulación vigente sólo les concede a los sistemas comunitarios de agua
potable la posibilidad de operar los servicios sanitarios básicos, en cuanto
organizaciones sociales y “Al exigirnos esta camisa de fuerza, por decirlo así,
de que no podemos tener ganancias, no podemos tener fines de lucro, nos
impide crecer y estamos muy rígidos cobrando poco, no teniendo ganancias y si
hubiera alguna ganancia, ésa tendría que ser gastada en alguna mejora muy
específica" (CPSMD).

El discurso señala que la normativa actual establece diferencias entre los


sistemas por la personalidad jurídica al momento de fiscalizar su accionar: “A
los comités los rige la ley de juntas de vecinos y a nosotros la de Cooperativas,
que es mucho más estricta en la fiscalización, y debiera haber una ley que nos
rija a todos de la misma manera, porque no puede ser posible que el Estado
fiscalice sólo un lado de la torta, o que fiscalice más a unas organizaciones que
a otras, cuando ambas otorgan el mismo servicio… Quisiera que fuera más
equitativa" (CPEBRD); “La gran cantidad de los APR son los comités, y ellos sí
que están huérfanos de todo control legal y al no tener un marco legal, se tienen
que ajustar a la ley de Junta de Vecinos. Eso es negativo para ellos mismos”
(CPSMD).

Por otro lado, la institucionalidad y normativa vigente permite que el


abastecimiento de las aguas se encuentre bajo la operación de dos
organizaciones distintas, sistemas de APR y municipalidades, en los territorios
rurales y en las zonas urbanas libres del sistema de concesión: “El tema es que
no hay una norma que diga, los comités de agua tienen que asumir la
explotación y administración del alcantarillado y la planta de tratamiento. Hoy en
día no la hay…Entonces nosotros los municipios debemos hacernos cargo del
saneamiento rural como parte del rol social que tenemos" (SACM); y en caso de
producirse una concesión en los territorios abastecidos de agua potable por un
APR y de alcantarillado por un Municipio, la ley establece que el operador que

165
haya permanecido más tiempo en el territorio será el primer convocado a
concesionarlo: “La ley nos da esa facultad y hasta donde entiendo, nos da la
preferencia como cooperativa, porque hemos estado abasteciendo esta zona
durante muchos años" (ULEBR). Por lo tanto, las actuales regulaciones
tampoco le conceden a los municipios la primera prioridad para actuar como
agentes económicos en el caso del abastecimiento de las aguas domiciliarias.

Estas regulaciones del Estado, les concede a los usuarios de los sistemas de
APR la posibilidad de no cancelar el pago del impuesto al valor agregado (IVA).
Esta excepción tributaria, por un lado les ayuda a los APR a incrementar sus
ingresos y disminuir las morosidades, pero al mismo tiempo les inhibe la
posibilidad de diversificar el tipo de beneficiarios y acota las fuentes de ingreso
de estos sistemas a usuarios que presentan vulnerabilidad económica: “Los
sistemas de APR no pagan IVA, sus usuarios no pagan IVA en la cuota por
consumo, y existe el subsidio de agua potable y alcantarillado para los que no
pueden pagar. Eso hace que estos sistemas no quieran o no puedan abastecer
a las parcelas de agrado… Ojo, que digo “que quieran”, porque yo sé que hay
lugares donde los APR abastecen de agua potable a las parcelas de agrado,
¡de hecho lo hacen!” (JUTAA); "Qué te decían siempre, que el tema era la
rentabilidad social, porque aquí hay mucha dispersión, dispersión de la gente.
Entonces, es muy baja la rentabilidad social, porque es muy baja la densidad
poblacional" (CPEBRD). Cabe señalar, que la dispersión en la localización de
los asentamientos humanos en los territorios rurales es una característica de su
condición de ruralidad, por lo tanto, sus densidades poblacionales siempre
serán inferiores a la de la ciudad, y la obtención de rentabilidades económicas y
sociales debe medirse considerando esta característica.

Ante esta situación, el discurso identifica un conjunto de medidas que -a juicio


de los entrevistados- revierten esta tendencia: “Se necesita un marco e
institucionalidad propia para el sector…. Una nueva ley (que) debiera uniformar

166
a todos los que nos estamos dedicando al agua potable rural, es decir, realizar
el mismo control y las mismas exigencias a todos los que estamos en esto,
llámense comités o cooperativas. Por otro lado debiera permitir, este nuevo
marco legal, el funcionamiento del APR con un marco más moderno..., que nos
permitiera darnos vueltas, invertir..., tener libertad para invertir y poder crecer
como una organización empresarial. Sería bueno que esta nueva
institucionalidad tuviera fondos específicos para el sector de agua potable y
saneamiento rural…” (CPSMD); “Debería haber una superintendencia,
exactamente igual que la superintendencia actual que hay para las empresas
sanitarias, incluso debería ser dentro de la Superintendencia actual, crear un
organismo que se encargue de regular todo el tema rural. Como un área dentro
de la Superintendencia que se haga cargo de todas las zonas rurales" (JDDR);
“Si se creara una institucionalidad dirigida a estas organizaciones que
potenciara y /o generara micro-emprendimientos, en la lógica de empresa
sanitaria, y que esta lógica genere ingresos y beneficios a la misma comunidad,
se estaría generando un círculo virtuoso. Un marco jurídico destinado a estos
sistemas de abastecimiento de agua potable y alcantarillado en el periurbano
debiera abrirse a entregar este servicio a las parcelas de agrado. Tal vez no
incorporando los beneficios tributarios que tienen los usuarios más vulnerables
económicamente, pero sí otorgándoles el servicio de agua potable y
alcantarillado. Puede ser con diferenciación de tarifas o como se organicen
ellos. De este modo estarías equiparando el tipo de infraestructura que se
coloca en estos territorios. Sería interesante tener un marco jurídico para estos
sistemas, que les otorgue flexibilidad, pero que al mismo tiempo se haga cargo
del territorio" (PGR); "Hoy día la ley de agua35 lo tiene como un punto específico
el corte de agua, o sea, viene por ley y ahí viene... Alguien decía, de repente el
agua no se le puede cortar a nadie. Bueno y como digo yo, si yo pago y el otro

35
En relación al Proyecto de Ley de Servicios Sanitarios Rurales que se encuentran sin
urgencia para su tramitación en el congreso. Ver http://sil.congreso.cl/pags/index.html.

167
no paga, ahí hay un tema de justicia, pero ahora viene por ley. La ley también
nos obliga a asumir la gestión del alcantarillado" (CPEBRD).

168
5.2 Análisis integrado del discurso
A continuación se presenta un análisis del vínculo de los elementos del capital
físico, financiero, humano y social- definidos y descritos en la construcción del
discurso- con los subsistemas técnico y social; así como el impacto de este
vínculo en el nivel de desempeño de los sistemas de APR, participantes del
estudio, para crecer y desarrollarse, sustentando el abastecimiento de las
aguas domiciliarias en el periurbano de la RMS.

En el discurso se observa que el capital físico integra, a través de las soluciones


de ingeniería, los requerimientos hidrogeológicos y de población que los
territorios les presentan a los sistemas de APR.

Estas soluciones establecen las bases para definir el trazado de la tarea


sistémica, destinada al abastecimiento de las aguas domiciliarias por medio de
la producción y distribución de los servicios de agua potable y alcantarillado a la
población del periurbano de la RMS.

Cabe señalar, que las soluciones de ingeniería destinadas a abastecer de agua


potable son distintas a las destinadas al alcantarillado en infraestructura,
insumos, procedimiento, y tecnologías de operación y mantención. Por lo tanto,
las bases para definir las tareas sistémicas relacionadas con los procesos de
producción y abastecimiento son distintas entre un servicio y el otro; y se
integran en la medida que un mismo operador asume el abastecimiento de los
dos servicios.

Por lo tanto, las relaciones al interior del subsistema técnico se caracterizan por
las interrelaciones sistémicas de los elementos del capital físico- agua, suelo y
soluciones de ingeniería- con los elementos del capital financiero y humano de
los APR. Estas interrelaciones variarán en el número de flujos, dependiendo si
el APR tiene a su cargo la operación del servicio de agua potable, la operación
parcial de las aguas domiciliarias o la operación total de estas aguas.

169
Sin embargo, es en función de las soluciones de ingeniería que se definen los
costos de operación y mantención de los servicios; las tecnologías de
producción, y se establecen las características del recurso humano como bases
de la tarea sistémica. Por lo tanto, a mayor número de servicios operados por
los APR, mayores serán los costos de operación y mantención, más complejas
serán las tecnologías de producción y mayores serán los requerimientos de
capital humano.

Estas características hacen de las soluciones de ingeniería un elemento crítico


del sistema, ya que perteneciendo al capital físico se vinculan con los capitales
financiero y humano del subsistema técnico e impacta en los niveles de
desempeño potenciales de los APR para crecer y expandirse, estableciendo
requerimientos a los elementos que constituyen estos capitales.

Por otra parte, el capital físico se vincula con el capital financiero a través de la
tenencia de los elementos de agua, suelo y soluciones de ingeniería. La
propiedad de los derechos de uso del recurso hídrico y la tenencia del suelo
donde se emplazan las soluciones de infraestructura son puntos críticos en la
negentropía patrimonial del subsistema técnico, para crear y acumular capital
financiero.

La propiedad legal de estos elementos del capital físico le otorga al capital


financiero de los APR eficiencia potencial para ampliar y diversificar las redes,
mientras que la propiedad de facto, de uno o más de estos elementos, le resta
niveles de desempeño a la eficiencia potencial del subsistema técnico.

Esto, porque se dificulta el incremento del capital financiero por carecer de las
bases que sostienen el patrimonio de los APR, para sustentar de hecho y
derecho la ampliación y diversificación de redes en los sistemas de APR, y
otorgar al capital físico, humano y social, desde lo legal-institucional de estos

170
sistemas, niveles de desempeño que les permitan sustentar el abastecimiento
de las aguas domiciliarias, en el periurbano de la RMS

El discurso señala que a mayor número de arranques, mayores posibilidades de


autofinanciamiento por parte de los sistemas de APR. Por lo tanto, el capital
financiero de los sistemas se vincula con el tamaño de las soluciones de
ingeniería, destinadas al abastecimiento del agua potable, y este vínculo
impacta directamente en los niveles de desempeño de los sistemas para poder
financiar su expansión y desarrollo. A mayor número de arranques y servicios
operados por los APR, mayor capital financiero en forma de recaudación de
recursos, pero también mayores egresos en insumos y personal.

Dicho de otro modo, el capital financiero le otorga niveles de desempeño a los


APR para sustentar el abastecimiento de aguas domiciliarias, cuando en su
interacción con el capital físico cubre los gastos de operación, y genera
excedentes para acumular recursos en forma de ahorros.

Los ahorros les permiten al vínculo del capital financiero con el capital físico
impactar en los niveles de desempeño de los APR para enfrentar eventos
inesperados e incluso invertir en mejoramientos del sistema y/o equipamiento
comunitario.

El trazado de la tarea sistémica de los APR -consistente en abastecer de aguas


domiciliarias a la población periurbana- define, por medio de las soluciones de
ingeniería, las características socio-demográficas del recurso humano. De este
modo, las características del capital humano se van adecuando a los requisitos
de la tarea sistémica y por lo tanto, a mayor crecimiento y desarrollo de los
sistemas, se observan dirigentes y trabajadores con mayores niveles en
escolaridad, menor participación del género femenino y mayor experiencia en la
vida.

171
Es decir, las características de edad y escolaridad del capital humano se
vinculan con el capital físico e impactan en forma directa en los niveles de
desempeño de los sistemas para crecer y desarrollarse. Mientras que, el género
femenino del recurso humano tiene una vinculación inversa con el capital físico
e impacta en forma tangencial el crecimiento y desarrollo de los APR.

La incorporación de atributos al capital humano de los sistemas de APR como


la honradez, la vocación de servicio, la solidaridad, el compromiso con las
organizaciones, la disponibilidad de tiempo, el autofinanciamiento, las redes
personales, los deseos de trabajar voluntariamente y el compromiso con la
comunidad, dan cuenta de la interrelación entre el subsistema técnico y el
subsistema social de los APR por medio de este capital, presentando las
normas, valores y aspiraciones del subsistema social. Esta interrelación impacta
en los niveles de eficiencia real y hace del capital humano un factor crítico en el
crecimiento y desarrollo de los sistemas de APR.

En efecto, en el discurso se señala que las soluciones de infraestructura son un


elemento crítico del capital físico, ya que condicionan las características de los
capitales financiero y humano del subsistema técnico, al definir el trazado de la
tarea operacional. Sin embargo, el capital humano integra elementos del
subsistema social al técnico, y de este modo propicia la materialización de la
eficiencia potencial que proponen las soluciones de ingeniería.

El rol de bisagra del capital humano entre el subsistema técnico y el subsistema


social se observa en el discurso a partir de la singular forma de organización
que tienen los sistemas de APR, la cual se basa en sistemas organizacionales y
de liderazgo comunitarios para abastecer con el servicio de agua potable y
alcantarillado a los territorios rurales.

La organización y el liderazgo comunitario de estos sistemas se presentan


como procesos democráticos y representativos, con tres niveles de toma de

172
decisión, caracterizados de una manera distinta a los observados en las
empresas sanitarias.

La peculiaridad y distinción en la forma de organización y liderazgo está dada


porque en el nivel estratégico de decisiones se encuentran los usuarios socios
de los sistemas, quienes definen el valor de la cuota por consumo, la
incorporación de nuevos usuarios y de servicios operados por los sistemas de
APR. En el segundo nivel están los dirigentes a cargo de las decisiones tácticas
y de dirigir las decisiones estratégicas; y en el último nivel de decisiones
operativas se ubican los gerentes o administradores de los APR.

El discurso presenta dos debilidades en esta forma de organización. Primero,


que no todos los usuarios son socios de los sistemas y, por lo tanto, hay un
porcentaje de personas que son excluidas y que resienten las decisiones que la
asamblea toma; y en segundo lugar, el organigrama presenta límites difusos, lo
que redunda en conflictos entre los distintos niveles jerárquicos, al momento de
definir una ampliación de redes o la incorporación del alcantarillado.

El discurso señala que la incorporación del alcantarillado en los territorios de


operación de los APR conlleva un aumento en las densidades poblacionales, lo
que agudiza la necesidad de estos territorios por ampliar el equipamiento e
incluir al servicio de agua potable el abastecimiento del alcantarillado, y unificar
la operación de los servicios de las aguas domiciliarias.

Sin embargo, la inexperiencia en relación al comportamiento del alcantarillado


en los territorios periurbanos de la RMS, ha generado resistencia en el
subsistema organizacional de los APR para incorporar la operación de este
servicio a su funcionamiento. Esto, porque los APR reconocen que las
características del capital humano y financiero para operar el servicio de agua
potable son distintas a las necesitadas para integrar verticalmente el servicio de
alcantarillado a su operación.

173
En este sentido, el discurso resalta la importancia que tiene para los APR el
apoyo del Estado en capacitación y asesoría -como elementos del capital
humano- y en fiscalización -como elemento del capital social- para los sistemas,
al momento de plantearse un aumento en el número de usuarios y,
principalmente, al momento de definir la incorporación del alcantarillado a su
operación.

Los APR aspiran a generar capital humano y social con el apoyo del Estado en
capacitación, asesoría y fiscalización. Pues según el discurso, con este apoyo
se puede especializar el recurso humano de acuerdo a las funciones que
desarrolla dentro del trazado de la tarea sistémica, así como impulsar procesos
de mejora continua de los servicios abastecidos, que permitan incorporar a
usuarios distintos a los socios de los sistemas, sin afectar negativamente el
capital financiero de los mismos.

De este modo, cuando el Estado otorga apoyo en capacitación, asesoría y


fiscalización a los APR para abastecer de agua potable y soslaya el apoyo para
los servicios de alcantarillado, le permite a los APR desarrollar niveles de
desempeño reales en torno al abastecimiento del servicio de agua potable e
inhibe el desarrollo de estos niveles para abastecer el servicio de alcantarillado.
En efecto, la negentropía sistémica de los APR carece de estos inputs para
incorporar el alcantarillado y demanda del capital financiero de los sistemas de
APR recursos para acumular capital humano por medio de la contratación
directa de capacitación y asesoría en temas de alcantarillado y plantas de
tratamiento de aguas residuales domésticas, sin poder fiscalizar su quehacer.

La vinculación entre el capital físico, financiero y humano del subsistema


técnico impacta en la eficiencia potencial de los APR, para conservar el
abastecimiento del servicio de agua potable en el presente y futuro. Sin
embargo, el discurso señala que la carencia de apoyo por parte del Estado para
generar capital humano destinado a la operación del servicio de alcantarillado,

174
junto a la normativa e institucionalidad del sector sanitario rural, impacta
negativamente en los niveles de desempeño del sistema, pues genera
resistencias en el subsistema organizacional de los APR para incorporar la
operación de este servicio.

Ante esta situación, el discurso reconoce que el abastecimiento del servicio de


alcantarillado presenta mejoras sustantivas en la calidad de vida de los
habitantes de los territorios de operación de los APR estudiados, y señala que
los municipios, que por ley están mandatados a abastecer de los servicios
sanitarios básicos, carecen de capital humano y financiero para proyectar la
operación de este servicio a través del tiempo, por lo que esperan que sean los
APR quienes asuman esta operación.

Por lo tanto, las posibilidades de acceso a los servicios de agua potable y


alcantarillado por parte de la población periurbana dependen del vínculo del
capital social con los capitales financiero y humano de los APR. Este vínculo
permite generar negentropía sistémica, cuyo impacto en los niveles de
desempeño de los sistemas de APR favorece el crecimiento y desarrollo, junto
con proyectar en el tiempo la operación de los servicios abastecidos en los
territorios periurbanos, cuando se encuentran apoyados y fiscalizados por el
Estado.

Los subsidios estatales a la inversión y consumo, las normas que definen los
estándares de construcción, operación y mantención de las soluciones de
ingeniería para el saneamiento rural, sumados al trabajo voluntario de los
dirigentes, como elementos del capital humano vinculados al capital financiero y
social de los sistemas, impactan en los niveles de desempeño de los APR para
abastecer de agua potable a la población del periurbano, por medio del valor de
la cuota de consumo. Este impacto permite que el valor de la tarifa por consumo
de agua potable sea inferior que el de las áreas urbanas sujetas a concesión,

175
posibilitando el acceso al abastecimiento a la población económicamente más
vulnerable del periurbano.

Esta situación, añadida a la implementación de modalidades de pago


diferenciadas, definidas por el subsistema social, según las características
financieras de los usuarios, les permite a los APR mantener bajas morosidades
e incrementar su capital financiero.

En el caso de los sistemas estudiados, que cuentan con más de 1000


arranques, los ingresos por concepto de cuota por consumo les permiten
generar ahorros e inversiones menores en infraestructura y operación del
sistema, junto con apoyar el desarrollo en equipamiento comunitario a las
localidades donde se emplazan estos sistemas.

Cabe señalar, que el bajo valor comparativo de la cuota por consumo es una de
las razones por las cuales el discurso señala que los usuarios desarrollan
sentido de pertenencia a los APR y presentan resistencias a que el
abastecimiento de las aguas domiciliarias se realice bajo la modalidad de
organizaciones públicas de derecho privado, es decir, empresas sanitarias de
sociedad anónima.

Entonces, se puede señalar que el vínculo que establece el capital físico con el
valor de la cuota por consumo del capital financiero, impacta en los niveles de
desempeño de los APR, legitimando su operación y, de este modo, creando
capital social, pues apoya el desarrollo del sentido de pertenencia al objetivo
sistémico en dirigentes, trabajadores y usuarios.

Un ejemplo de esto es que ante la posibilidad de que los territorios sean


concesionados por las empresas sanitarias, a partir del crecimiento poblacional
y/o cambios en los planos reguladores de las comunas, los dirigentes de los
APR están dispuestos a incorporar la operación del alcantarillado al subsistema
técnico y social, aunque esto redunde en bajas del capital humano y financiero

176
de los sistemas; asimismo, los usuarios se presentan proclives para asumir el
necesario aumento en el valor de la cuota por consumo de agua, con el fin de
mantener los territorios bajo la operación de estos sistemas comunitarios de
abastecimiento de aguas domiciliarias.

Por otro lado, el subsidio a la inversión y la exención tributaria que otorga el


Estado para equipar de los servicios sanitarios básicos a la población rural, y
que en el discurso se presentan como elementos del capital financiero de los
APR, se encuentran focalizados en la población económicamente vulnerable.
Esta situación restringe las oportunidades de acceso a los servicios abastecidos
y operados por los APR, pues se excluye a los habitantes de las parcelas de
agrado y de segundas residencias, por considerar que incumplen con las
características de vulnerabilidad económica en las cuales está focalizada la
intervención del Estado. Por otro lado, restringe las capacidades de
acumulación de capital financiero de los APR, al acotar sus usuarios a la
población periurbana carenciada económicamente.

Estas restricciones en el acceso a los servicios abastecidos, impuestas por las


regulaciones e institucionalidad del sector sanitario rural, ingresan a los
sistemas de APR como normas del capital social.

Estas normas o reglamentaciones se anclan en el subsistema social por medio


de los estatutos de los APR, y actúan al momento de decidir la inclusión de
nuevos usuarios a las redes de agua potable y la incorporación del
alcantarillado a la operación de los sistemas. Cabe señalar, que la normativa e
institucionalidad del sector sanitario rural no se pronuncia ante la incorporación
del servicio de alcantarillado a la operación de los APR y que los estatutos de
los sistemas de APR carecen de validez legal. En consecuencia, su fortaleza
como instrumentos de control social está dada por los consensos normativos y
valóricos que representan sus miembros, dirigentes, trabajadores y usuarios.

177
Por ende, la incorporación del servicio de alcantarillado a los sistemas de APR
está sujeta a la discrecionalidad de la asamblea y el liderazgo de los dirigentes.

Cuando el crecimiento de los APR es incluyente, el impacto del capital social en


los niveles de desempeño de los APR les permite un crecimiento de facto, ya
que hace beneficiarios de las inversiones en infraestructura y exenciones
tributarias que el Estado focaliza en los usuarios con vulnerabilidad económica,
a personas que carecen de esta característica, principalmente a los dueños de
parcelas de agrado y de segundas viviendas.

Por lo tanto, los subsidios, directos e indirectos, otorgados por el Estado para el
saneamiento rural, operan como elementos del capital social que se vinculan
con el capital financiero e impactan los niveles de eficiencia real de los sistemas
para mantener el abastecimiento del servicio de agua potable, pero funcionan
como elementos excluyentes e inhibidores del crecimiento y expansión de los
APR.

No obstante, este discurso plantea que el impacto del capital social en los
niveles de desempeño de los APR les permite sustentar el abastecimiento del
servicio de agua potable y de alcantarillado a una población en crecimiento,
cuando desarrolla procesos de planificación que involucran a las organizaciones
de APR, los usuarios, el municipio y el Estado.

Para este discurso, los procesos de planificación deben basar la proyección del
crecimiento poblacional en el impulso del desarrollo inmobiliario y la política de
localización de viviendas sociales, más que en el crecimiento vegetativo
proyectado por el INE para los territorios rurales.

Por otra parte, en el discurso se observa que el crecimiento y el desarrollo de


los APR son procesos progresivos, a través de los cuales estos sistemas van
experimentando transformaciones adaptativas a partir de los requerimientos
poblacionales y de equipamiento que tienen sus territorios de operación, y en

178
concordancia con la normativa e institucionalidad vigente incorporada en los
estatutos.

En resumen, el discurso plantea que cuando los APR tienen una red de agua
potable con quinientos (500) o menos arranques, las organizaciones pueden
contar con personalidad jurídica de comité, pues esta calidad jurídica les otorga
mayores posibilidades de adecuación y movimiento. No obstante, cuando se
plantea una integración horizontal de usuarios, aumentando el número de los
arranques de agua potable y otra vertical, aumentando los servicios
abastecidos, la carencia de herramientas de gestión y de entes fiscalizadores
que presentan los comités, hacen de esta personalidad jurídica una
característica poco deseada en el subsistema social, ya que al interactuar el
subsistema técnico con el subsistema social tienden a disminuir los niveles de
desempeño del sistema para sustentar el abastecimiento de aguas
domiciliarias.

Ejemplo de esto es que los APR constituidos como comités vinculan el capital
social de los sistemas con el capital humano y le permite al recurso humano del
subsistema técnico acceder a una fuente laboral y regirse normativamente por
el código del trabajo. Sin embargo, esta condición jurídica les inhibe la
participación en redes que superen a las de sus comunidades y dificultan su
accionar como agentes económicos corporativos, a cargo del abastecimiento de
los servicios sanitarios en los territorios periurbanos de la RMS.

Las organizaciones constituidas como cooperativas le otorgan a los APR


herramientas y espacios para realizar la operación financiera y económica de
los servicios, junto con ofrecer a sus trabajadores mejores condiciones
laborales, y el acceso a nuevas y distintas redes sociales.

Con todo, el rol social que la naturaleza jurídica les impone a estas
organizaciones, les resta capacidad de movimiento como agentes económicos.

179
Por lo tanto, no pueden actuar como organizaciones empresariales ante las
morosidades de los usuarios, independientemente de si son comités o
cooperativas, por carecer de fines de lucro.

En este sentido, el discurso señala que la asamblea y los dirigentes tienen un


rol preponderante en la creación de capital social para controlar las
morosidades. Sin embargo, la escasa participación de los socios en la
asamblea, sumado a los requisitos que el subsistema social establece para los
dirigentes de los APR y la escasa valoración social del rol de líder como agente
económico, debilita el liderazgo de los APR para actuar como un todo sistémico
al momento de controlar y sancionar las morosidades. Asimismo, esta situación
debilita el impacto del vínculo del capital social en los niveles de desempeño de
los APR, pues dificulta que el liderazgo conlleve desarrollo económico al
sistema y maximice las oportunidades individuales de los miembros de estos
sistemas sociotécnicos.

Cabe señalar que en ocasiones, producto de la naturaleza de las relaciones


horizontales que se establecen entre los miembros de estos sistemas, el capital
social de los sistemas de APR deja de ser productivo. Esta situación se observa
en el discurso, cuando éste presenta pugnas internas que atentan contra la
sustentabilidad en el abastecimiento de las aguas domiciliarias, a partir de
concepciones distintas sobre el valor económico del recurso hídrico, y los
servicios de agua potable y alcantarillado.

Como ejemplo, el discurso refiere que mientras los trabajadores y dirigentes de


los sistemas denuncian los robos de agua potable realizados por los usuarios a
través de adulteraciones en los medidores o colgándose a las cañerías, éstos
no corroboran las denuncias. Esta situación se explica en el discurso porque los
vínculos familiares, consanguíneos y/o legales, inhiben la ratificación por parte
de los socios y usuarios de las denuncias realizadas por dirigentes y
trabajadores.

180
Por otro lado, las modalidades de pago diferenciadas para cancelar el consumo
de los servicios abastecidos, al vincularse con el capital social, impactan
generando tensiones en los niveles de desempeño reales de los APR, ya que
mientras los usuarios se plantean disconformes con las morosidades, los
dirigentes llegan a acuerdos privados con los deudores.

Las dificultades que las regulaciones y procedimientos del Estado les imponen
a los APR para crecer y desarrollarse, demanda del subsistema social de éstos
el establecimiento de asociaciones y complementariedades con el Estado; y por
otro lado movilizan al Estado, en cuanto proveedor de bienes públicos, para
actuar y potenciar las condiciones de alianza con los APR, con el fin de que las
interacciones al interior de estas organizaciones y con el Estado le otorguen
sustentabilidad a las aguas domiciliarias, al excluir a la población que carece de
vulnerabilidad económica.

Las asociaciones y complementariedades entre el Estado y los sistemas de


APR se materializan por medio del establecimiento de relaciones estratégicas,
de alianza y colaboración. Estas alianzas de complementación entre los APR y
el Estado están sujetas al impacto del vínculo entre el capital financiero y el
capital social, en los niveles de desempeño de los APR, para compartir con el
Estado los costos de inversión que involucran el crecimiento y desarrollo de
estos sistemas.

Cabe señalar, que el capital financiero de los APR se acumula y crece en


directa relación con el crecimiento y acumulación de su capital físico. Cuando el
vínculo entre los capitales físico y financiero de los sistemas de APR genera
negentropía sistémica, impacta en los niveles de desempeño potencial del
subsistema técnico y moviliza al capital social de los APR para desarrollar
relaciones de alianza y complementariedad con el Estado, que le otorguen
eficiencia real para crecer y expandirse.

181
Por el contrario, cuando el vínculo de estos capitales genera escasa o nula
negentropía sistémica, el impacto de estos capitales en los niveles de
desempeño moviliza al capital social de los sistemas de APR para generar
relaciones verticales de dependencia y demanda respecto del Estado.

Esta situación de dependencia de los APR retrasa el crecimiento y la expansión


de los sistemas, porque los procedimientos definidos por el Estado para liberar
los recursos destinados al abastecimiento de servicios sanitarios en los
territorios rurales, sumados a la falta de políticas públicas dirigidas
específicamente al saneamiento rural y la invisibilidad que el Estado hace de las
características de estos sistemas, al momento de relacionarse con ellos
verticalmente -por medio del Ministerio de Obras Públicas y la SUBDERE-,
propicia un vínculo entre los capitales financieros y sociales que impacta
disminuyendo los niveles de desempeño de los APR y condiciona el
abastecimiento de las aguas domiciliarias al suministro de agua potable y deja
el abastecimiento del alcantarillado en manos de los municipios.

Las directrices y requerimientos de la normativa vigente, junto a la carencia de


una institucionalidad específica para el abastecimiento de los servicios
sanitarios rurales, dificultan la vinculación del capital social con el capital físico,
financiero y humano del subsistema técnico, lo que le resta niveles de
desempeño a los APR para sustentar el aumento y diversidad de usuarios, e
integrar el servicio de alcantarillado o las áreas urbanas fuera de concesión, a
su operación.

Dicho en otros términos, la normativa e institucionalidad vigente facilita la


negentropía sistémica de los APR para que el vínculo del capital social con el
capital físico, financiero y humano mantenga los estándares rurales, y dificulta
la acumulación de capitales para enfrentar los estándares urbanos.

182
Esto se observa en el discurso cuando se señala que, a pesar de que la
legislación vigente le otorga a los sistemas de APR la posibilidad de
concesionar los territorios abastecidos por ellos, como primera opción al
momento de modificar los planos reguladores comunales y cambiar los
territorios de rural a urbanos, las regulaciones que el Estado impone a los
sistemas de APR obstaculizan la creación y acumulación de capital físico,
financiero y humano en el subsistema técnico y capital social en el subsistema
social, para alcanzar niveles de desempeño que les permita concesionar los
territorios con estándares urbanos y otorgar sustentabilidad al abastecimiento
de las aguas domiciliarias en los territorios periurbanos.

El crecimiento y desarrollo de los sistemas de APR, en especial la


transformación formal a empresa operadora de servicios sanitarios básicos con
capacidad de lucro, demanda un marco jurídico e institucional que incorpore las
especificidades de los sistemas de APR, para que el vínculo entre los capitales
físico, financiero, humano y social impacte en los niveles de desempeño de los
APR, y les permita otorgar sustentabilidad al abastecimiento de las aguas
domiciliarias en territorios rurales y áreas urbanas no concesionadas,
rompiendo de este modo con la paradoja de ser agentes económicos en cuanto
operadores de aguas domiciliarias, pero con personalidad jurídica de
organizaciones sociales.

De lo contrario, la tendencia a operar de facto seguirá desarrollándose y la


incorporación del alcantarillado a los territorios periurbanos continuará en
manos de dos operadores distintos, municipio y APR, fragmentando los
territorios y excluyendo a parte de la población periurbana de la modalidad
comunitaria de operación de las aguas domiciliarias.

183
6. Conclusiones.
A continuación se presenta la Figura 6-1. Esta figura sintetiza el análisis
integrado, realizado anteriormente, del cual emergen las conclusiones.

Figura N° 6-1: Esquema de interacción de los capitales de los APR.


Fuente: Elaboración propia.

A partir del análisis integrado y sintetizado en la Figura N° 6-1, Esquema de


interacción de los capitales de los APR, se puede concluir que las
características adaptativas de los sistemas de APR dependen del vínculo que
establecen los capitales físico, financiero, humano y social, y del impacto de

184
este vínculo, a través de sus elementos, en los niveles de desempeño y de
sustentabilidad de los sistemas comunitarios.

Para el análisis, y como se observa en la figura N° 6-1, los elementos críticos en


el nivel de desempeño de los APR son:

• La cantidad y calidad del recurso hídrico, la morfología y textura del suelo


y las soluciones de ingeniería, como elementos críticos del capital físico;

• Los elementos patrimoniales, el valor de la cuota por consumo, los


egresos, ahorros e inversiones, como factores críticos en la formación
del capital financiero;

• La diversidad etaria, de género y de niveles de instrucción, junto a la


capacitación, como elemento crítico para formar capital humano.

• La existencia de un marco jurídico e institucional que incorpore las


especificidades de los sistemas de APR, como los atributos valóricos y
normativos, la personalidad jurídica, los estatutos, la modalidad de
liderazgo comunitario, el sentido de pertenencia y las relaciones
asociativas que los APR establecen, como factores críticos del capital
social.

Para el discurso, los capitales son los factores subyacentes, en tanto la


interacción sistémica de los elementos críticos que los conforman se encuentra
en la base de los niveles de desempeño de los APR, para enfrentar un aumento
en el número de usuarios e incorporar el alcantarillado, sustentando al
abastecimiento de las aguas domiciliarias en el periurbano.

185
En este sentido, se observa en la Figura 6-2 Interacción de Capitales, que el
capital físico se interrelaciona directamente con el capital financiero y humano e
indirectamente con el capital social.

Figura N° 6-2. Interacción de Capitales. Fuente: Elaboración propia

Las interrelaciones del capital financiero presentadas en la Figura N° 6-2, ya


sean directas o mediatizadas por los elementos del capital financiero y humano,
le otorgan a las características de las soluciones de ingeniería un rol
preponderante en la eficiencia potencial del sistema.

En efecto, las características de la infraestructura determinan los tipos y


calidades de los insumos, las tecnologías, las maquinarias, los recursos
financieros y la mano de obra que requiere el sistema para producir los
servicios de agua potable y alcantarillado.

Es decir, la infraestructura destinada a la producción de las aguas domiciliarias


condiciona las características de los elementos del capital financiero y humano,

186
por medio del establecimiento de los costos de producción y las características
del recurso humano.

Las vinculaciones de los capitales físico, financiero y humano del subsistema


técnico, al aportar con la eficiencia potencial del sistema, definen una situación
de latencia en torno a los niveles de desempeño de los APR para conservar el
abastecimiento de los servicios, otorgar acceso igualitario para los habitantes
del periurbano a los servicios abastecidos y apoyar el crecimiento económico de
los APR (ver Figura 6-2).

La materialización de esta latencia, para el análisis, se encuentra en la


interacción de los capitales, que vinculan el subsistema técnico con el
subsistema social de los APR. Como se observa en la Figura 6-2, el análisis del
capital financiero presenta interrelaciones entre el subsistema técnico y el
subsistema social. Estas interrelaciones se realizan por medio de los elementos
patrimoniales -definidos como la tenencia de los recursos de agua, suelo e
infraestructura- y los recursos financieros -como los ingresos, egresos, ahorros
e inversiones del capital financiero- con las características y atributos del
recurso humano de los sistemas.

Estos elementos se vinculan con el capital físico en forma directa. Es decir, a


mayor tamaño de la solución de ingeniería, mayor capital financiero requiere el
sistema para sustentar el abastecimiento de las aguas domiciliarias.

Cuando la propiedad de los elementos que forman el capital físico se encuentra


en conformidad con la legislación y normativa vigente, la vinculación del capital
financiero con el capital social impacta en los niveles de desempeño y le otorga
al subsistema técnico patrimonio legal para apoyar el crecimiento y expansión
de los APR.

Dicho de otro modo, el patrimonio legal de los elementos del capital físico, al
vincularse con el subsistema social de los APR, les permite crecer en forma

187
horizontal y vertical, aumentando el número de arranques e incluyendo las
redes de alcantarillado y las plantas de tratamientos a la infraestructura de los
APR.

Esta situación impacta en los niveles de desempeño real de los APR y potencia
que la adaptación sistémica tienda a preservar los servicios abastecidos, a
brindar acceso equitativo a la población del periurbano a estos servicios, y se
vea como necesidad la autosuficiencia económica de los operadores de los
servicios.

Cuando estos recursos son propiedad de terceros, el patrimonio que generan


los APR se define en el análisis como de facto. Este patrimonio de facto,
dificulta el crecimiento y expansión de los sistemas, e inhibe la preservación de
los servicios abastecidos, ya que la tenencia de los recursos de agua y suelo
son indispensable para acceder a fuentes de financiamiento que apoyen el
crecimiento y la expansión de los sistemas, y a la vez, estanca el crecimiento
económico de los sistemas de APR, pues no les permite operar como agentes
económicos con patrimonio propio.

El capital humano, como nexo entre el subsistema técnico y el subsistema


social (ver Figura 6-2), aporta con las características del recurso humano
definidas por el subsistema técnico y los atributos normativos y valóricos
establecidos por el subsistema organizacional.

Este capital, al igual que el capital financiero, es directamente proporcional al


tamaño del capital físico de los APR. Es decir, a mayor capital físico, el sistema
requiere mayor capital humano para adaptarse a su crecimiento y expansión,
sustentando el abastecimiento de las aguas domiciliarias en el periurbano.

Por ejemplo, la incorporación del alcantarillado a la operación de los APR


demanda del capital humano de estos sistemas conocimientos, competencias y
destrezas distintas a las requeridas para operar el servicio de agua potable, ya

188
que son establecidas por el vínculo entre el capital humano y la tecnología del
capital físico destinada a producir el servicio de alcantarillado.

El análisis del discurso señala que el recurso humano del subsistema técnico se
vincula con el capital social por medio de la modalidad de liderazgo; a través de
esta modalidad, los APR incorporan los atributos valóricos y normativos al
recurso humano del subsistema técnico (ver Figuras 6-1 y 6-2).

Estos atributos son claves en los procesos que vinculan al capital humano con
el capital financiero de los APR. Por medio de estos atributos, dirigentes y
trabajadores pueden basar la operación en el trabajo voluntario, en la
disminución de costos en personal y en el desarrollo de sentido de pertenencia
y de adhesión a la tarea comunitaria de abastecer de agua potable y
alcantarillado a la población del periurbano de la RMS.

Cuando la complejidad de la operación productiva se acompaña de un recurso


humano y una dirigencia calificada, honrada y comprometida con la tarea
sistémica, se aporta con negentropía sistémica para crear o acumular capital
físico, financiero y social.

Esta situación en los APR estudiados potencia una adaptabilidad sistémica,


tendiente a conservar la producción de los servicios de agua potable y
alcantarillado, a abrir posibilidades de acceso a nuevos y distintos usuarios,
como también a minimizar los costos de producción, favoreciendo el
crecimiento económico de los APR (ver Figura 6-2).

Las normativas del sector sanitario rural ingresan a los APR por medio de la
personalidad jurídica de las organizaciones operadoras y la modalidad de
liderazgo comunitario; y se expresan en los estatutos, en el sentido de
pertenencia de dirigentes, trabajadores y usuarios, así como en las relaciones
asociativas que los APR establecen (ver Figura 6-1).

189
Estos elementos del capital social de los APR son el reflejo de las interacciones
que estos sistemas desarrollan con el entorno o contexto temporal y espacial.
Por lo tanto, el discurso señala que la conformidad de estos sistemas con la
normativa e institucionalidad del sector sanitario rural vigente, establece las
características de los estatutos, las modalidades de liderazgo, el sentido de
pertenencia y las relaciones asociativas de los APR.

Por medio de estos elementos, el capital social se vincula con los capitales
físico, financiero y humanos del subsistema técnico. El impacto de este vínculo,
según el análisis, otorga niveles diferenciados de eficiencia real en los APR
para sustentar el abastecimiento de las aguas domiciliarias al momento de
experimentar un aumento en el número de usuarios y/o incorporar el servicio de
alcantarillado.

De este modo, es posible observar en los territorios de los APR estudiados, la


combinación de operadores y soluciones de ingeniería para abastecer de aguas
domiciliarias a la población del periurbano de la RMS.

La operación de las aguas domiciliarias es compartida entre los APR y los


municipios, cuando la personalidad jurídica del sistema operador corresponde a
la de un comité. La operación del alcantarillado es compartida entre el municipio
y la cooperativa, cuando las modalidades de liderazgo tienen límites difusos, el
sentido de pertenencia genera escasa adhesión a la tarea sistémica, y las
vinculaciones asociativas acumulan capital social con escaso control social ante
las morosidades y la calidad de los servicios abastecidos; es decir, capital social
poco productivo.

La operación integral del abastecimiento de las aguas domiciliarias es asumida


por los APR cuando: las cooperativas presentan modalidades de liderazgo con
límites claros y canales de comunicación formales; el sentido de pertenencia de
dirigentes, trabajadores y usuarios presenta una alta adhesión a la tarea

190
sistémica; y cuando las vinculaciones asociativas de los APR generan capital
social, capaz de desarrollar procesos de control social ante la morosidades y la
calidad de los servicios abastecidos.

Por lo tanto, se observa que el capital social se encuentra en la base del


crecimiento y desarrollo de los sistemas de APR, y que las características de
los elementos que se vinculan a este capital, impactan en los niveles de
desempeño de los APR para sustentar el abastecimiento de las aguas
domiciliarias.

Cabe señalar, que cuando los APR tienen la operación parcial de las aguas
domiciliarias, se observa que el impacto del capital social en los niveles de
desempeño de los APR desincentivan la incorporación del servicio de
alcantarillado a su operación. Esta situación debilita la sustentabilidad del
abastecimiento de las aguas domiciliarias, pues limita el crecimiento y
expansión del sistema sociotécnico al abastecimiento del servicio de agua
potable, y tensiona la adaptabilidad de estos sistemas en los territorios
periurbanos, al rechazar la incorporación del alcantarillado.

Por lo tanto, se concluye que los factores subyacentes en los niveles de


desempeño y sustentabilidad de los sistemas sociotécnicos de agua potable
rural están vinculados al capital físico, financiero, humano y social, y estos
capitales se encuentran en la base del crecimiento y desarrollo de los sistemas
comunitarios para dar sustentabilidad al abastecimiento de aguas domiciliarias
en el periurbano de la RMS.

De este modo se acepta la hipótesis, pues en la base del crecimiento y


desarrollo de los sistemas de APR, el capital físico actúa a modo potencial o de
latencia en el nivel operacional, mientras que los capitales financiero, humano y
social le otorgan realidad y gestión a la potencialidad del sistema operacional.

191
Por lo tanto, como muestra la Figura N° 6-2, el vínculo e impacto de los
capitales físico, financiero, humano y social le otorgan a los APR niveles de
desempeño diferenciados, que potencian o debilitan sus capacidades
adaptativas para sustentar el abastecimiento de las aguas domiciliarias.

Con el fin de potenciar las capacidades adaptativas de los APR para sustentar
el abastecimiento de las aguas domiciliarias se sugiere:

• Incorporar, desde el Estado, procesos de planificación participativos para


demarcar el crecimiento y desarrollo que están viviendo los sistemas
estudiados, con el fin de intencionar un proceso gradual, que a medida
que se desarrolle y madure, le permita a los APR tener autonomía
financiera, y ofrecer a la población del periurbano de la RMS, un acceso
integral y equitativo a los servicios abastecidos.

• En forma paralela, se debe definir -en conjunto con los APR- un marco
regulatorio e institucional que le otorgue cuerpo a la política pública de
saneamiento rural, protagonismos a los operadores sociotécnicos de
aguas domiciliarias y financiamiento a los municipios rurales para que
puedan constituirse como unidades técnicas de los APR.

• Incorporar en los procesos de inversión del Estado, recursos para


capacitación y asesoría, destinados a apoyar a los APR en la operación
del servicio de alcantarillado.

• Evaluar, desde el Municipio, la pertinencia y factibilidad legal, social,


económica y política para asumir el desafío de actuar como unidades
técnicas de los APR. Desarrollar estrategias planificadas y participativas
para negociar el traspaso de la operación del servicio de alcantarillado,
pues la falta de integralidad en la operación debilita la sustentabilidad del
abastecimiento de las aguas domiciliarias en el periurbano de la RMS.

192
• Establecer, entre municipios y APR, asociaciones de colaboración y
apoyo mutuo, que potencien la sustentabilidad en el abastecimiento de
las aguas domiciliarias, ante los procesos de crecimiento y expansión de
los APR y de urbanización de los territorios.

Para finalizar, es preciso reiterar que las conclusiones de este estudio están
acotadas a las tendencias discursivas de los casos estudiados. Sin perjuicio de
aquello, y en consideración a las limitaciones que establece el estudio de caso,
estas conclusiones pueden orientar el comportamiento discursivo de los
sistemas de agua potable rural ante situaciones semejantes a las
caracterizadas en los casos presentados. Es decir, sistemas de abastecimiento
de agua potable rural con más de mil arranques, localizados en el periurbano de
una región o ciudad y cuyos territorios de operación se encuentren abastecidos
con el servicio de alcantarillado.

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