PROGRAMA ORDENAMIENTO ECOLOGICO DE LA REGION CUENCA DE BURGOS
El ordenamiento regional de la Cuenca de Burgos es de enorme importancia
para el país, debido a que comprende 98 municipios de los estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas en una superficie del orden de los 208 mil 586 km2, y representa el 10% del territorio nacional. En la Región Cuenca de Burgos existen treinta y tres áreas naturales protegidas, nueve de ellas de carácter federal La Región Cuenca de Burgos es poseedora de enormes recursos naturales no renovables y renovables, como es el caso de las reservas de gas natural, una rica y variada vida silvestre y recursos pesqueros. En la región se localiza el 10% de la flora en peligro de extinción en México. El 75% de la superficie corresponde a tres tipos de vegetación: matorral desértico microfilo, matorral desértico rosetofilo y matorral espinoso tamaulipeco, este último único, impactado por la exploración de PEMEX, dañando el ecosistema y con deterioro colateral a las actividades de la región. Esta región presenta una gran problemática de contaminación y sobreexplotación del recurso agua, ocasionada por: Crecimiento demográfico Agricultura intensiva Desarrollo industrial Explotación petrolera Aun lado a esto, la actividad de perforación, exploración y explotación de gas natural viene acentuarla aún más. Por lo que, se hace necesario el Ordenamiento Ecológico de la Cuenca de Burgos. CONCLUSION
El Estudio para el ordenamiento ecológico de la Cuenca de Burgos establece
en sus conclusiones nueve aspectos sustantivos que habrán de modificar el comportamiento del crecimiento regional en el futuro.
1.- Agua, factor limitante.
2.- El aumento de la población incrementa la demanda para el consumo humano, uso ineficiente, principalmente para actividades agrícolas. 3.- Desaparición de muchos escurrimientos superficiales: Río Bravo antes de Ojinaga y la desembocadura del Río Bravo, Río Santa Catalina (consumo en Monterrey). 4.- Se desconoce el impacto que el cambio "Cambio Climático Global" tendrá en la región y seguimos propiciando el crecimiento urbano pensando que vivimos en la década de los 50's. 5.- Cambio en la cobertura y uso del suelo, degradación severa de los ecosistemas que dan soporte a las actividades humanas. 6.- Desconocemos el valor cuantitativo y cualitativo de lo que nos proporciona gratuitamente la naturaleza en forma de bienes y servicios ecológicos, y los seguimos derrochando. 7.- Pérdida de servicios ambientales, estamos derrochando nuestro capital natural. 8.- Necesidad de restauración de ecosistemas, control de erosión. 9.- Emisión a la atmósfera, la calidad del aire en las cuencas atmosféricas se está degradando, principalmente en las grandes ciudades.