Comentario #1 Filosofía, Santo Tomás de Aquino.

Natalia Parra
En la Edad Media la cultura tuvo un sello netamente cristiano, es decir, los
discursos filosóficos de esta época tenían como base principal las ideas de la
religión revelada. Santo Tomás de Aquino nace en este contexto, en el siglo XII,
tiempo en el cual aparecen las universidades. Tomás entra en la vida eclesiástica
porque su familia la elige para él. Además mientras realiza sus estudios
universitarios es influenciado por sus maestros de tendencia aristotélica, de allí
que su teoría metafísica utilice elementos aristotélicos. Esta teoría, en la cual se
centrará este comentario, consiste en una teología natural, ciencia en la cual se
expone la doctrina sobre Dios a través de la razón, estableciendo su existencia y
lo que es (No como la teología que solo se basa en la revelación).
En primera instancia Tomás plantea que Dios no es evidente para los hombre, ya
que los primeros conocimientos humanos parten de los sentidos y para estos no
es evidente la existencia de Dios. Por eso no es suficiente el decir su nombre o
decir que existe por ser verdad absoluta, se necesita una demostración que se
hace a través de aquello que es más evidente para nosotros, es decir los seres
creados, desde ellos hasta su “Creador”. En segundo lugar acerca de si la
existencia de Dios es o no demostrable, Tomás afirma que es demostrable ya que
en la naturaleza hay efectos, los cuales se originan a partir de una serie de
causas, pero para que existan estas causas debe haber una causa incausada, a
partir de la cual surgieron las demás, ese sería Dios. Esta existencia se demuestra
a partir de los efectos pues toma el efecto como definición de la causa; entonces
demostrado el efecto podemos saber el significado de Dios. En tercer lugar acerca
de si existe o no existe Dios, afirma que si existe. Pues, citando a Agustín, Tomás
pone: “Dios, por ser el bien sumo, de ninguna manera permitiría que hubiera
algún tipo de mal en sus obras, a no ser que, por ser omnipotente y bueno, del mal
sacara un bien”, entonces la existencia del mal no significa la inexistencia de Dios.
Así para cerrar esto plantea las cinco vías del conocimiento de Dios. La primera en
la cual lo que llamamos Dios (Que eso sea Dios no lo sabe) es el primer motor,
ese ser en acto que nadie mueve y que es el responsable del movimiento de la
naturaleza. La segunda en la cual Él es causa eficiente primera, responsable de
las causas de la naturaleza y por consiguiente hace posible los efectos. La tercera
donde los hombres son seres posibles (pueden existir o no) y eso que llamamos
Dios es el ser necesario pues no procede de ningún ser y es la causa de la
necesidad de los hombres. La cuarta afirma que Él es el grado máximo de los
valores y que los hombres más bondadosos o más nobles se acercaran más al
grado máximo. Por último la quinta vía afirma que lo que llamamos Dios dirige a
seres de la naturaleza sin conocimiento a su fin, pues es en Él donde encuentra su
razón de ser.
Así se concluye que Dios realmente existe ya que no solo es ser sino también
principio y fin de las cosas. En cuanto a su ser, es ser en acto, ser en plenitud, ser
sin mezcla, sin deficiencia alguna, es decir máxima perfección. Abarca todas las
perfecciones y es fuente y origen de todo bien. En cuanto a principio y fin de las
cosas, es causa de la naturaleza ya sea eficiente o de su movimiento y además la
dirige a su fin. A partir de esto se puede decir que Santo Tomás acierta en el
hecho de que debe haber una causa incausada, ya que todo debe existir gracias a
que un ser inicial lo creo pues algo no puede generarse de la nada. También
acierta en que para comprender a Dios se debe seguir un proceso de fe y razón
pues es un ser supremo que nuestra inteligencia no alcanzará a captar totalmente,
de allí la necesidad de definirlo a partir de los efectos. Además el hecho de que la
maldad exista para generar un bien, podría llegar a ser cierto si los hombres
aprendieran de sus errores y buscaran evitar las mismas consecuencias,
lastimosamente eso no ocurre a menudo. Por otra parte el hecho de encontrar la
razón de ser en Dios, no es necesaria para el hombre, ya que puede vivir sin ella,
aunque no alcance una verdadera felicidad.
Finalmente la obra de Tomás es influencia en los siglos posteriores para diferentes
doctrinas como el escotismo, que pone como primaria a la voluntad y no al
entendimiento como Tomás. Además su obra tuvo una muy buena acogida de
parte de la Iglesia, y fue modelo e inspiración para otros teólogos, de allí que sea
considerado como el autor más importante de la escolástica cristiana.

Bibliografía

BASALDUA, J de Echano, Paradigma 2 Historia de la filosofía. Barcelona, Vincens

Vives, 2006, Paginas 132,133,134.

AQUINO, Santo Tomás, Suma de teología, Madrid: Biblioteca de autores

Cristianos, 1988.