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CAPÍTULO 8

Afectividad
R. Segarra Echebarría e I. Eguíluz Uruchurtu

✓ Síntesis conceptual
✓ Históricamente, la psicopatología de la afectividad humana —al igual que ha sucedido en otros dominios
psicopatológicos como la conciencia, la percepción o la inteligencia— parecía ubicarse más allá de los
dominios fenomenológicos e, incluso, de los límites de la capacidad explicativa de las neurociencias.
✓ Hallazgos recientes, como las neuronas espejo y el desarrollo de la teoría de la mente, y formulaciones
teóricas ingeniosas en torno a las bases neurobiológicas de la sinestesia (interferencia de sensaciones
de diferentes sentidos en un mismo acto perceptivo) o sobre la teoría del anidamiento, que entiende los
sentimientos como una representación mental de todos los demás niveles de regulación homeostásica
de la experiencia afectiva (incluyendo la respuesta inmunitaria, los reflejos básicos, la regulación me-
tabólica, el comportamiento, los instintos, las motivaciones y las emociones), dentro de una perspectiva
multidimensional del ser humano que integra en un solo marco teórico los ámbitos biológico, sociológico
y neuropsicológico, aportan una perspectiva más amplia y enriquecedora de la compleja tramoya del
«teatro de los afectos».
✓ A lo largo de las siguientes páginas, desfilarán los principales actores de dicho teatro (sentimientos,
emociones, deseos, pasiones, humores), que serán interpretados desde diferentes prismas (incluyendo
el género, la sociología, la lingüística, la neurobiología, la neuropsicología cognitiva y la psicodinamia,
entre otros).
✓ Igualmente, se analizará el papel que desempeña el universo afectivo como pilar básico en las nuevas
aproximaciones teóricas psicodinámicas al concepto de motivación.
✓ Por último, se dedicarán sendos apartados a la semiología psiquiátrica de los trastornos afectivos (in-
cluyendo una actualización de los principales instrumentos clínico-psicométricos en la evaluación de
los trastornos del humor), así como a las manifestaciones clínico-psicopatológicas más prevalentes en
ellos, y a su actual ordenamiento nosológico.

«Quieto, LA AFECTIVIDAD: HACIA UNA TEORÍA DEL TODO


como no moviéndose
para que la sangre no rebase En su última compilación aforística, Jorge Wagensberg
la boca». «pone el dedo en la llaga» sobre un aspecto crucial para el
Alba. Hugo Mújica avance del conocimiento en general y del conocimiento
científico en particular:1
«Si yo quiero la vida no es para repartirla. Ni para malgastarla. «Cambiar de respuesta es evolución, cambiar de
Es sólo para tener en orden los labios. Para no mirarme las manos pregunta es revolución. Toda respuesta tiene dere-
de cera, aunque irrumpa su caudal descifrable. Para dormirme a cho a cambiar de pregunta».
mi hora sobre una conciencia sin funda».
Seguidor de esta máxima, Brian Greene, profesor de Fí-
Víspera de mí. Vicente Aleixandre sica y Matemáticas en la Universidad de Columbia (Nueva
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York), destaca por su precocidad y fecundidad académica, de más de cuatro dimensiones. Comprende cinco teorías o
por su sobreexposición mediática (inusitada si atendemos a formulaciones alternativas de teorías de cuerdas combina-
su área de conocimiento), y por haber escrito reflexiones que das, en las que se han introducido requerimientos de su-
invitan a la revolución, como su ensayo El universo elegante.2 persimetría y, hoy en día, es la candidata principal a
En él, parte de los dos pilares fundamentales sobre los representar una teoría del todo.
que se apoya la física moderna: la teoría de la relatividad ge- La teoría del todo pretende, a su vez, desde la física teó-
neral de Albert Einstein, que proporciona un marco teórico rica, explicar y conectar en una sola hipótesis todos los fe-
para la comprensión del universo a escala máxima (estrellas, nómenos físicos conocidos. Inicialmente, el término fue
galaxias, agrupaciones galácticas y hasta la inmensa expan- utilizado con cierta connotación irónica para referirse a va-
sión del propio universo); y la mecánica cuántica (origina- rias teorías sobregeneralizadas. Después, se popularizó desde
riamente, atribuida al trabajo de Max Planck), que ofrece la física cuántica, al describir una teoría que podría unificar
un marco teórico para la comprensión del universo a escala o explicar, a través de un modelo simple, todas las interac-
mínima (moléculas, átomos y partículas subatómicas, como ciones fundamentales de la naturaleza.
los electrones y los quarks). El concepto de una teoría del todo está arraigado en una
Tras décadas de investigación, los físicos han confirma- vieja idea de causalidad, recogida en la célebre expresión de
do de forma experimental prácticamente la totalidad de las Laplace:3
predicciones de ambas teorías. Sin embargo, los mismos «Se podría concebir un intelecto que en cualquier
instrumentos teóricos empleados para su validación con- momento dado conociera todas las fuerzas que
ducen a una conclusión inquietante: las dos aproximaciones animan la naturaleza y las posiciones de los seres
son, en apariencia, mutuamente excluyentes. que la componen; si este intelecto fuera lo sufi-
Frente a esta paradoja, Greene se pregunta:2 cientemente vasto como para someter los datos a
«¿Puede ser realmente que el universo en su nivel análisis, podría condensar en una simple fórmula
más importante esté dividido, requiriendo un el movimiento de los grandes cuerpos del univer-
conjunto de leyes cuando las cosas son grandes, so y del átomo más ligero; para tal intelecto nada
y otro conjunto diferente e incompatible cuando podría ser incierto y el futuro así como el pasado
son pequeñas? La teoría de las supercuerdas, una estarían frente sus ojos».
advenediza en comparación con los venerables Llegados a este punto, hasta el lector más paciente se es-
edificios de la mecánica cuántica y la relatividad tará preguntando cuál es el sentido de este prefacio en un
general, responde con un rotundo no». capítulo sobre la psicopatología de la afectividad. Pues bien,
La intensa investigación llevada a cabo durante la última volvamos por un momento a las hipótesis elegantes, que
década por físicos y matemáticos de todo el mundo ha re- buscan una explicación del todo. En este caso, a las que bus-
velado que este nuevo planteamiento (la teoría de las su- can comprender qué son los sentimientos, cómo funcionan
percuerdas), encaminado a explicar la materia en su nivel y qué suponen en la vida de todas las personas, aspectos
más básico, resuelve la tensión existente entre la relatividad cruciales a la hora de formular una teoría holística más pre-
general y la mecánica cuántica: cisa sobre los seres humanos, teniendo en cuenta los avances
observados en las ciencias biológicas, cognitivas y sociales.
«Dentro de este nuevo marco, la relatividad ge-
De este modo, nos toparemos con la teoría del princi-
neral y la mecánica cuántica se necesitan. Según
pio de anidamiento, propuesta por Antonio Damasio,
la teoría de las supercuerdas, el matrimonio entre
equivalente simbólico de la teoría de las supercuerdas en
las leyes de lo grande y las de lo pequeño no sólo
el ámbito de los sentimientos. Damasio, neurólogo por-
es feliz, sino inevitable, y posee el potencial de
tugués de fama internacional, galardonado con el Premio
mostrar que todos los sorprendentes sucesos que
Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica
se producen en el universo son reflejos de un gran
en 2005 (obtenido ex aequo junto a su esposa, la también
principio físico, de una ecuación magistral».
neuróloga portuguesa Hanna Damasio), sostiene en su en-
Dado que las características de la teoría de las super- sayo En busca de Spinoza4 la hipótesis del principio de
cuerdas exigen que cambiemos drásticamente nuestra ma- anidamiento para explicar los sentimientos como una re-
nera de entender el espacio, el tiempo y la materia, llevará presentación mental de todos los demás niveles de regu-
cierto tiempo que nos adaptemos a ella hasta instalarnos en lación homeostásica, que incluyen las respuestas inmu-
un nivel en el que resulte cómodo manejarla. Esta teoría nitarias, los reflejos básicos, la regulación metabólica, cier-
aspira a aglutinar en un solo marco conceptual todas las tos comportamientos de dolor y placer, instintos, motiva-
partículas y fuerzas fundamentales de la naturaleza, las cua- ciones y emociones.
les se integran de acuerdo con vibraciones de delgadas cuer- Según el principio de anidamiento, parte de la maqui-
das «supersimétricas» que se mueven en un espacio-tiempo naria del mundo reflejo, del sistema inmunitario y de la re-
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gulación metabólica se incorpora a la maquinaria del com- e hipersimétrico que vibra en sintonía con la proclamada
portamiento (dolor, placer), el cual, a su vez, se incorpora música de Dios, capaz de armonizar la teoría general de la
a la maquinaria de los instintos y motivaciones, quienes, relatividad con la mecánica cuántica, en la búsqueda de una
nuevamente, se incorporan esta vez a la maquinaria de las hipotética teoría del todo.
emociones (representadas en el teatro del cuerpo), quienes, En otras disciplinas, encontramos avances equiparables:
finalmente, participan de la conformación de los sentimien-
▪ La cosmología nos muestra un universo en expan-
tos (representados en el teatro de la mente).
sión, plagado de materia oscura y miles de millones
Para Damasio:4
de galaxias vecinas y remotas.
«La imagen para el conjunto de estas reacciones ▪ La química halla soluciones a enigmas inmediatos a
no es la de una simple jerarquía lineal. Esta es la través de la configuración de la tabla periódica de
razón por la que la metáfora de un edificio alto los elementos, y el descubrimiento de nuevos mate-
con muchos pisos capta sólo algo de la realidad riales y supermateriales.
biológica. Una imagen mejor sería la de un árbol ▪ Las matemáticas conducen al desarrollo de la ciencia
alto y heterogéneo, con ramas cada vez más altas informática.
y complejas que salen del tronco principal, ya que ▪ La anatomía y la fisiología humanas entran en reso-
de esta manera mantiene una comunicación de nancia armónica hasta aclararnos claves de nuestro
doble dirección con sus raíces. La historia de la funcionamiento íntimo y del proceso evolutivo.
evolución está escrita sobre todo este árbol». ▪ Se producen auténticas revoluciones en la medicina,
Su analogía con la teoría de las supercuerdas se ve más la cirugía, la farmacología y la salud pública, con el
clara si atendemos a la siguiente afirmación: consiguiente avance en calidad de vida y longevidad
«Al ser la vida un espectáculo de funambulismo, de nuestros congéneres.
la mayoría de los sentimientos es la expresión de ▪ Por si fuera poco, en la década de 1950, se descifra
la lucha por el equilibrio, muestra de los ajustes el código genético, efeméride que bautiza el origen
y correcciones exquisitos sin los que, con un error de la biología moderna.
de más, todo el espectáculo se viene abajo. Si hay Pues bien, pese a todo ello, las ciencias de la mente (psi-
algo en nuestra existencia que pueda ser revelador quiatría, neurología, psicología) languidecen durante este lap-
de nuestra pequeñez y grandeza simultánea, son so de tiempo hasta el último cuarto del siglo XX, sin encontrar
los sentimientos». una teoría medianamente sólida que explique facultades como
Una vez más, surge el equilibrio entre lo pequeño y lo percepción, emoción, afectividad, cognición e inteligencia.
grande; en este caso, entre la biología y el ambiente. Es en la década de 1990 cuando las neurociencias co-
Más adelante, volveremos al principio de anidamiento mienzan a progresar de forma exponencial en la búsqueda
cuando hablemos específicamente de emociones y de sen- de una gran teoría unificada que aglutine epigenética, bio-
timientos, al igual que hablaremos de nuevos postulados, logía molecular, neurofisiología y cognición en una especie
como las neuronas espejo y su papel en el desarrollo de la de teoría de las supercuerdas psíquicas capaz de armonizar
empatía humana y de la teoría de la mente, así como de la si- biología y ambiente.
nestesia como modelo explicativo de la imbricaciones entre La historia de la psicopatología de la afectividad no es-
percepción y emoción. capa a esta perspectiva panorámica. En su análisis del tema,
Berrios5 concluye que, si bien en otras áreas como la me-
moria, los delirios o las alucinaciones la ciencia psicopato-
BREVE SEMBLANZA HISTÓRICA lógica ha encontrado el respaldo de la atención y la
dedicación de los clínicos, la afectividad no parece haberse
En los últimos dos siglos, hemos asistido a sorprenden- cobrado el mismo beneficio.
tes progresos en la mayoría de las disciplinas científicas. No parece faltarle razón, dado que muchos autores re-
Mientras los científicos del siglo XIX declaran que la teoría
dundan en esta idea:
física está casi completada, Einstein demuestra que espacio
y tiempo son inimaginablemente más desconocidos que ▪ Goleman:6 «durante muchos años, la investigación
ninguna otra materia filosófica considerada previamente, y ha soslayado el papel desempeñado por los senti-
Heisenberg apostilla mediante su principio de indetermina- mientos en la vida mental, dejando que las emocio-
ción que, en el nivel subatómico, pierden validez nuestras nes fueran convirtiéndose en el gran continente
nociones más básicas sobre el binomio causa-efecto. inexplorado de la psicología científica».
Sin recuperarnos aún del susto, nuevos hallazgos astro- ▪ Damasio:4 «de todos los fenómenos mentales que
nómicos sobre los agujeros negros y la física cuántica abo- podemos describir, los sentimientos y sus ingredien-
can hacia una teoría de las supercuerdas, cual verso suelto tes esenciales (el dolor y el placer) son los menos co-
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nocidos en términos biológicos y específicamente tad del siglo XIX, emergiendo de la transformación de los
neurobiológicos. Al igual que ocurría con la con- antiguos conceptos de manía y melancolía bajo la óptica
ciencia, los sentimientos se hallaban más allá de los de los alienistas franceses de la época (Esquirol, Baillarger,
límites de la ciencia». Falret). Para esta transformación, son necesarios ciertos
▪ Ramachandran:7 «en comparación con la física y la cambios ideológicos y culturales, entre los que destacan
química, la neurociencia es una advenediza». Sor- el creciente desarrollo de la psicología clínica y del modelo
prende ver cómo este autor, miembro del Century anatomoclínico de enfermedad, así como la inclusión de
Club de Newsweek, utiliza el mismo calificativo hacia las vivencias subjetivas del individuo como un aspecto pri-
la neurociencia que Greene respecto a la teoría de mordial en la descripción sintomatológica de las enferme-
las supercuerdas. dades mentales.
Una vez que las condiciones conceptuales son las ade-
Entre las causas que pueden haber contribuido a este
cuadas, ambos términos se aglutinan en una nueva forma
olvido, se encuentran:8
de enfermedad circular, alternante o periódica. Este proceso
▪ La consideración secundaria de los afectos respecto culmina con la descripción de Kraepelin de la enfermedad
de la razón, que, desde la Antigüedad Clásica (Pla- maníaco-depresiva, en el primer cuarto del siglo XX.5
tón y Aristóteles), se ha mantenido de forma inva- Durante el siglo XX, el panorama psicopatológico ha ve-
riable hasta bien entrado el siglo XVIII. nido conformado por la preponderancia, según la época
▪ La naturaleza subjetiva y, por lo tanto, de difícil ob- analizada, de diferentes corrientes psicologicistas parcelarias
jetivación de los afectos. y reduccionistas:
▪ La dispersión terminológica. ▪ El psicoanálisis, que, centrado en los aspectos moti-
▪ Y la concepción de los sentimientos en la periferia vacionales de la vida afectiva, descuida un tanto el
del método científico y, más específicamente, de la papel de la cognición y del aprendizaje.
neurobiología. ▪ El conductismo, que, por el contrario, parece más
Hasta el siglo XIX, los síntomas afectivos rara vez apare- centrado en el papel del aprendizaje, descuidando
cen en las descripciones clínicas de los trastornos mentales, tanto la motivación como la cognición.
permaneciendo este hecho inalterado, incluso, ante el em-
▪ La psicología de la Gestalt, que, dentro de su análisis
puje de las dos grandes revoluciones ideológicas de la época:
de la cognición, de la memoria y de la percepción,
la teoría de la evolución y el psicoanálisis.
se olvida en parte de la motivación.
Darwin, en su teoría evolucionista, destaca la expresión
▪ Y la psicología cognitiva, que, en su enfoque del mun-
externa de las emociones sobre su experiencia subjetiva y las
do de la cognición, deja en la sombra al resto de los
aproxima al mundo animal como parte de programas de con-
aspectos mencionados.
ducta estereotipados. Para el padre del evolucionismo, los mo-
vimientos corporales y las expresiones faciales cumplen un Marina afirma:10
papel de comunicación entre los miembros de una especie, «Parece que las teorías psicológicas construyen
transmitiendo información sobre el estado emocional del or- una casa demasiado pequeña, y algún miembro
ganismo. Las emociones y su expresión son, por lo tanto, in- de la familia tiene que dormir siempre al sereno».
natas, aunque admite la posibilidad de que los factores de
aprendizaje ejerzan algún tipo de influencia sobre la expresión. Más optimista, Aulestia sostiene que estas tendencias
Precisamente, esta influencia de los factores de aprendizaje psicológicas:12
permite que las emociones evolucionen a través del tiempo «observan el mismo río desde orillas opuestas, re-
para incrementar la posibilidad de que el sujeto y la especie sultando en cualquier caso complementarias».
se adapten a las características cambiantes del ambiente.9
Recientemente, las investigaciones se han centrado en
Freud, «ese genio descomunal que hizo sombra a todos
cuatro terrenos principales: el evolutivo, el psicofísico, el
sus colegas a fuerza de talento y de agresividad»10 o, como
psicodinámico y el constructivista. No obstante, los pro-
dice Onfray, el mitómano a quien «ya es hora de sacar de
blemas que se han de resolver siguen siendo los mismos:
la leyenda para introducirlo en la historia, donde será dis-
cutido, atacado y, por supuesto, defendido»,11 padre del ▪ ¿Son las emociones y los sentimientos fenómenos
movimiento psicoanalítico, se muestra más preocupado por puramente psicológicos, biológicos, sociales, o una
las funciones energéticas y estructurales de los afectos que mezcla de todo?
por sus manifestaciones externas. ▪ ¿Son innatos o aprendidos, genéticos o culturales,
Queda patente la escasa contribución de ambos autores particulares o universales?
en este ámbito del saber. ▪ ¿En qué medida nos ayudan a adaptarnos al medio
Desde la perspectiva epistemológica, la noción actual en que vivimos?
de los términos manía y depresión data de la segunda mi- ▪ Y por último, ¿pueden estudiarse científicamente?
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Nuestros conocimientos sobre la afectividad humana e integre con las técnicas de investigación más novedosas y
han gozado de un importante empuje en el terreno no sólo propias de cada época:13
de las neurociencias, sino también de la psiquiatría clínica,
«Las descripciones psicopatológicas no son de
en campos como la etiopatogenia y la terapéutica (psico-
modo alguno sub specie aeternitis. El lenguaje des-
terapias y terapias biológicas), debido al uso de métodos in-
criptivo de las conductas y estados mentales, y
trospectivos y de observación conductual y relacional, así
también la propia conceptualización parcelaria
como al registro de las diferentes variables fisiopatológicas
y fragmentada de la vida psíquica, están sujetos al
y somáticas objetivas.
cambio y a los avatares sociopolíticos, académi-
Pese a ello, la fenomenología afectiva ha seguido avan-
cos y científicos. La ciencia psicopatológica debe
zando con una lentitud exasperante, lo que puede compro-
considerarse una disciplina viva, y por tanto de-
barse revisando las escasas aportaciones en esta materia por
be someterse y adecuarse periódicamente a un
autores como Jaspers, Bleuler o Schneider.
reanálisis que la compatibilice e integre con las
A la espera de lo que depare el futuro, trataremos ahora
técnicas de investigación más novedosas de cada
otros aspectos relevantes del complejo universo emocional.
época. Tal es así que cada generación de psiquia-
tras debiera de participar en la formulación de las
CONSIDERACIONES GENERALES distintas narrativas de la locura».
No podemos estar más de acuerdo con esta afirmación,
En este apartado, se abordarán una serie de considera-
que debiera suponer el pistoletazo de salida hacia el desarrollo
ciones generales sobre el intrincado universo afectivo. Par-
timos del pensamiento de Marina:10 de una psicopatología del siglo XXI, la cual, sin perder la
perspectiva de las aportaciones fenomenológicas clásicas,
«A la gente le gusta sentir. Sea lo que sea. […] La sea capaz de sacudirse el yugo de los complejos académicos
realidad bruta nos es inhabitable. Sólo podemos y de integrar los nuevos paradigmas de traslación en el in-
vivir en una realidad interpretada, convertida en trincado proceso de la génesis sintomática.
casa, dotada de sentimientos, humanizada. […] Huyamos, como sugiere Gracia, del intelectual melan-
Somos insaciables consumidores de afectos, y sin cólico; aquél que remeda desde el ámbito académico a los
embargo el nombre con el que designamos a la «bo-bos» (bohemian-bourgeois) de Guilluy;14 aquél que vive
ciencia de las enfermedades (patología) proviene parapetado en un mundo de resentimiento académico y
del griego pathos que significa literalmente ciencia acomodo dogmático cortado a su medida:15
de los afectos. Según esta perspicaz lengua pade-
cemos nuestros propios sentimientos. Son fuerzas, «Los intelectuales melancólicos heredan del cris-
dioses, bestezuelas que desde fuera nos atacan». tianismo la propensión mesiánica y el redentoris-
mo retórico: hablan como enviados de los dioses
La aproximación conceptual al mundo de los senti- para salvarnos de la insalubridad de un tiempo
mientos ha de establecerse desde una doble vertiente bioló- domado por valores disminuidos, e incurren en
gica/psicológica, que remeda la dualidad biología/ambiente, algo todavía peor, que es lo que los hace verdade-
natura/nurtura. Los sentimientos, como se verá más adelan- ramente dañinos: su apocalipsis doméstico ciega
te, se dan en el campo de la acción. Surgen de los deseos, las vías de remedio práctico y racional para las ta-
producen deseos, reorganizan la vida mental e incitan a ras que las novedades, como las tradiciones, com-
obrar. Nuestro primer contacto con la realidad es sentimen-
portan. En lugar de cooperar, se apartan casi
tal y condiciona el desarrollo de la personalidad de cada in-
siempre envueltos en un aura de melancolía que
dividuo.
nos deja el muerto entre los trenos».
Para Marina:10
Como dice Woody Allen en una entrevista reciente
«Nuestra primera relación con el mundo es afec-
(mayo de 2011) durante la promoción de su última pelí-
tiva. Somos seres necesitados, a medio hacer.
cula, en torno al óxido romántico:
Tiempo habrá de buscar la objetividad, de enfriar
el conocimiento». «Siempre decimos que lo pasado fue mejor, que
nos gustaría vivir en otra época, pero sólo pensa-
La psicopatología descriptiva se muestra demasiado es-
mos en el lado bohemio, no en lo que sería ir al
tática a la hora de describir experiencias ejecutivas y emo-
dentista sin novocaína».
cionales (sentimientos, emociones, pasiones), fuertemente
interrelacionadas. Volviendo a la dialéctica natura/nurtura, existen consi-
Berrios sostiene que la ciencia psicopatológica ha de deraciones biológicas (como el sexo y la raza), así como an-
considerarse una disciplina viva, que debe someterse y ade- tropológicas y socioculturales (género, entorno cultural),
cuarse periódicamente a un reanálisis que la compatibilice cuyo análisis resulta crucial en el estudio de las experiencias
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afectivas. Los publicistas y los especialistas en neuromarke- desde la consideración de la variable género y todas sus de-
ting las tienen muy presentes. rivaciones socioculturales a la hora de analizar las vivencias
Un estudio reciente liderado por Li-Chen Ou, investi- psicopatológicas.18
gador de la National Taiwan University of Science and Tech- Un reciente metanálisis19 de 20 estudios de resonancia
nology, en Taipéi, quien, desde hace varios años, investiga funcional sobre el deseo sexual y el amor pretende com-
las emociones de la percepción cromática,16 desarrollado en prender mejor las diferentes activaciones cerebrales y las vías
ocho países (España, Francia, Alemania, Reino Unido, Sue- comunes que ambos comparten. Los autores encuentran
cia, Irán, Argentina y Taiwán) con 223 participantes de di- que el amor y el deseo tienen patrones diferentes en el ce-
ferentes edades y profesiones, tanto hombres como mujeres, rebro, pero coinciden significativamente en las estructuras
determina que la edad, el sexo, la formación académica y corticales y límbicas, como la ínsula y el núcleo estriado.
la nacionalidad del observador influyen a la hora de percibir Es así tanto para mujeres como para hombres; algo que en
y de combinar los colores. principio no se esperaba, ya que sí existen diferencias entre
Los investigadores plantearon tres ejercicios diferentes. géneros en relación al amor y al sexo.
En el primero, se presentaban 70 colores individuales; en El núcleo estriado se ve afectado de forma diferente
el segundo, combinaciones de dos colores; y, en el tercero, cuando se trata de amor o de deseo. Por otro lado, la parte
colecciones de dos colores en fotografías de ropa de mujer anterior de la ínsula sólo se activa con sentimientos de
de primavera, verano, otoño, e invierno. amor, mientras que la posterior de la ínsula izquierda se en-
Según esta investigación, las mujeres tienden a preferir ciende con el deseo sexual. Esto está en línea con la visión
los colores más claros y con menor croma (con menor pu- de que el amor es una construcción abstracta, lo que se basa
reza o saturación). También se sugiere que, a medida que en parte en la representación mental reiterada de momentos
envejecemos, cambia la forma en la que percibimos los co- emotivos del pasado. Los autores también encuentran que
lores. Las personas mayores suelen preferir la combinación el deseo sexual no sólo pone en marcha áreas cerebrales im-
de colores claros, aunque con croma alto. Con los años, se plicadas en la percepción de estímulos sensoriales y emo-
va perdiendo intensidad en la percepción del color, por lo cionales de la propia persona, sino también las estructuras
que parece lógico que se prefieran colores más intensos en relacionadas con la interpretación social de las emociones
croma y claridad. y deseos de los otros.
Igualmente, se observan diferencias en función de la Al comparar el amor con el deseo sexual, la actividad
profesión o de la formación académica de los participantes. en el estriado ventral, hipotálamo, amígdala, corteza soma-
Los individuos con formación en diseño (estudios en ar- tosensorial y lóbulo parietal inferior se reduce. Esta reduc-
quitectura, moda o diseño gráfico) mostraban preferencia ción está en consonancia con el deseo sexual como un
por los colores con menos saturación (tonos pastel) y por estado del ánimo con un objetivo muy específico, mientras
las combinaciones que tenían un tono parecido y eran más que el amor puede ser considerado como un comporta-
armoniosas. miento más abstracto, flexible y complejo, menos depen-
La percepción cromática también depende de la cultura. diente de la presencia física de otra persona. Además, el
Por ejemplo, en los países occidentales, el rojo se relaciona amor está asociado a unas zonas cerebrales (el área tegmen-
con la pasión y advierte del peligro (señales de tráfico). En taria ventral, la parte derecha del estriado y con regiones
China, simboliza la buena suerte. Los participantes espa- dopaminérgicas) que están relacionadas con la motivación,
ñoles y argentinos coincidieron en elegir mayoritariamente la expectación y la formación de hábitos.
las combinaciones de colores fríos, mientras que los de otros Aunque amor y deseo comparten un patrón de activa-
países optaron con más frecuencia por los colores cálidos. ción emocional, motivacional y cognitiva de las áreas cere-
Algo similar puede decirse de las emociones derivadas brales, este estudio también revela patrones específicos de
de la percepción musical, la cual puede verse modificada por activación de cada uno de estos fenómenos. Que el amor
las mismas variables arriba recogidas, dado que comparte se localice en una determinada área del estriado, asociada a
un sustrato neurobiológico (redes neuronales) con la per- las adicciones a las drogas, puede explicar que es realmente
cepción cromática y sus emociones derivadas, que incluye un hábito que está formado por un deseo sexual que se re-
estructuras límbicas y paralímbicas (amígdala, hipocampo, troalimenta a través de una recompensa, y funciona de la
giro parahipocámpico, ínsula, región ventral del núcleo es- misma manera en el cerebro en que lo hacen las drogas en
triado, lóbulos temporales, corteza orbitofrontal y corteza las personas adictas.
cingulada).17 Más adelante, se retomará la imbricación per- En cuanto a las consideraciones lingüísticas, toda apro-
cepción-emoción cuando se trate la sinestesia. ximación académica a la psicopatología afectiva debiera
Resulta llamativo lo poco que sabemos hoy en día acerca incluir un pormenorizado análisis de los vocablos vincu-
de la posible diferenciación sexual a la hora de experimentar lados a los diversos estados emocionales, considerando
los sentimientos, no sólo desde un punto de vista neuro- cada realidad histórica, regional y sociocultural de forma
biológico (dimorfismo, lateralidad, simetría cerebral), sino particular.5
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La experiencia sentimental humana fundamenta la exis- dad de aprender. Las neuronas cerebrales tienen la habilidad
tencia de un léxico propio, que surge dentro de cada idioma de establecer múltiples conexiones unas con otras dentro de
como patrimonio del pueblo al que pertenece, al estilo de una red curva. Cada una de las fibras que cruzan de polo a
un «hojaldre» cosmogónico:20 polo el cerebro son atravesadas por sus propias fibras neu-
ronales, que se conectan en las mismas direcciones —per-
«El léxico afectivo nos va a introducir en la his-
pendicular y paralela—, dando como resultado una retícula
toria personal y colectiva de nuestra especie, ca-
curva tridimensional.
paz esta de sentir y deseosa de expresar lo que
Gracias a los avances en neuroimagen —en resonancia
siente. El recorrido lingüístico, su deconstrucción
magnética (RM)—, se puede conocer cómo crece el cerebro
y procesamiento traza un camino similar al de
y que las conexiones del cerebro maduro parecen reflejar
una excavación arqueológica que nos va descu-
los tres principales ejes establecidos en el desarrollo embrio-
briendo las huellas estratificadas de la vida huma-
nario. Además, las fibras nerviosas no están aisladas, sino
na, de sus anhelos y fracasos».
que se relacionan entre sí. Esta estructura fibrilar se man-
La lingüística transciende los límites de lo puramente tiene entre las especies; es decir, los cerebros más simples y
semántico y entra de lleno en la experiencia emocional, de los más complicados conservan una estructura similar. Se
la cual resulta indisoluble. Los sentimientos no se producen trata de ver la conectividad del cerebro como un todo, no
ni se expresan de forma aislada. El complejo significado de como áreas aisladas.
cada palabra cobra valor y es resultado del papel que desem- Al estudiar esas vías de fibras, se ve una organización or-
peña en los individuos a la hora de articular todo el reper- togonal, que permite decir que la parte más compleja (corti-
torio de valores sociales, morales o culturales, que condi- cal) del cerebro sigue el mismo patrón de crecimiento que
cionan, a su vez, cada experiencia emocional particular an- cualquier otra parte del sistema nervioso. Hasta hace poco,
tes de ser transmitida a nuestros seres próximos. se pensaba que la corteza era una estructura desarrollada sú-
Todos los pueblos y culturas del mundo cuentan con bitamente en los mamíferos, siendo, inicialmente, homogé-
un vocabulario sentimental propio, que, a su vez, se en- nea. Se asumía que la corteza es la que nos hace humanos,
cuentra al servicio de complejos propósitos culturales, mo- ya que las facultades psíquicas emergen de su función. Este
rales y comunicativos tanto individuales como colectivos, estudio demuestra que la estructura de la corteza en primates
distintivos de cada sociedad. Todas las culturas han diseña- y el hombre no es tan homogénea, sino que está organizada
do un modelo afectivo propio, llegando a someter los sen- en módulos, cada uno con una pauta de conectividad espe-
timientos a una evaluación crítica en función de sus intereses cializada, y que es comparable con la de otras especies.
particulares, fomentando ciertos hábitos sentimentales y Un segundo trabajo publicado en la misma revista22 uti-
prohibiendo otros en base a juicios morales. liza un mapeo masivo de la información genética caracte-
Los sentimientos son, en el fondo, fenómenos históricos rística de distintas partes de la corteza cerebral, con datos
propios de cada cultura. De hecho, es esta afición a sentir obtenidos mediante una técnica de RM en 406 pares de ge-
la que nos lleva no sólo a la expresión lingüística, sino, más melos adultos (para reducir la variabilidad), completando
aún, a la artística. El arte en sus distintas manifestaciones un novedoso atlas génico de la corteza cerebral.
resulta todo un compendio de la psicopatología afectiva Al comparar gemelos monocigóticos con gemelos dici-
propia de cada época. Nuevamente, se abordará este tema góticos, los autores observan cómo la influencia genética se
al hablar de las vivencias sinestésicas. comparte separadamente en grupos de áreas que conforman
Esta forma de imbricación tiene especial sentido si vol- 12 regiones de la corteza. Estas 12 regiones coinciden a
vemos a los preceptos de la teoría del anidamiento, que re- grandes rasgos con áreas cuya función ya ha sido definida
corre bidireccionalmente el trayecto biología-ambiente, y, en estudios previos. Comprueban, por lo tanto, que la es-
sobre todo, si consideramos los nuevos paradigmas de neu- tructura regional funcionalmente especializada de la corteza
rogénesis y organización cerebral. cerebral está genéticamente controlada y se organiza de una
Un trabajo reciente publicado en Science21 concluye que manera jerárquica.
la organización del cerebro es más simple de lo que se creía Si podemos comprender la base genética del cerebro,
y que, más que una maraña de conexiones neuronales, el podemos tener una mejor idea de cómo se desarrolla y fun-
cerebro de los primates —entre ellos, el de los seres huma- ciona; información que, a la larga, podremos utilizar para
nos— se organiza en una sola red curva y tridimensional. mejorar los tratamientos de múltiples enfermedades.
Según los autores, el cerebro se construye a partir de fi- Este trabajo es la primera evidencia fidedigna de que
bras paralelas y perpendiculares que se cruzan de forma or- también, para construir la parte más compleja del cerebro,
denada. La aparente simpleza de la geometría que da forma se extrae información del genoma. Probablemente, estarán
al cerebro es la que permite su evolución y desarrollo, tam- implicados miles de genes y es interesante que haya un or-
bién denominada plasticidad cerebral, que posibilita en los den genético. Lo más sorprendente es hasta qué punto en-
primates —sobre todo, en los seres humanos— la capaci- caja bien este análisis con lo que ya se iba sabiendo de
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122 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

funciones diferenciadas en la corteza. Los grupos de áreas Sims24 pone el ejemplo de los términos angst, que no
cerebrales determinadas en este estudio se agrupan por fun- puede ser traducido del alemán al inglés o al español con
ciones que resultan predeterminadas por la estructura gé- una sola palabra equivalente, o depression que tampoco pue-
nica. Los estudios anatómicos y funcionales previos ya de ser traducido literalmente desde el inglés al alemán.
habían adelantado particiones similares, pero este enfoque Bleuler25 recoge lo equívoco que resulta el verbo sentir,
ha llegado a parecidos resultados desde un ángulo totalmen- que lo mismo se utiliza relacionado con los procesos afec-
te novedoso. Esto indica que diversos enfoques científicos tivos, como se emplea en relación con sensaciones (de calor,
están llegando a un consenso. frío, táctiles, etc.) y con percepciones vagas («siento que al-
Estos paradigmas más novedosos de la neurobiología de guien se aproxima»).
la afectividad, junto con otros clásicos que conforman el Es posible hablar de una universalidad sentimental en
corpus psicopatológico del cual se nutre el saber psiquiátri- el ser humano, de unos sentimientos básicos fundados en las
co, serán expuestos a continuación de forma resumida y, en necesidades y problemas que surgen de nuestra interacción
la medida de lo posible, integrada. con la realidad. Sin embargo, tales sentimientos sufren
inevitablemente variaciones cualitativas culturales y perso-
CONCEPTOS BÁSICOS nales, de modo que no se puede tomar ningún léxico de-
terminado como patrón de un sentimiento universal y
Ya se ha mencionado antes la dispersión terminológica generalizable.
que se observa en el léxico sentimental. Como ejemplo, nos Según Castilla del Pino:26
remitimos a la primera acepción de la última edición del «¿Disponemos de todos los sentimientos posibles
Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua23 para en la especie humana? La respuesta es negativa.
cada uno de los siguientes términos: En esto radica la singularidad de la vida afectiva
▪ Ánimo: «alma o espíritu en cuanto es principio de de cada sujeto, que el universo emocional de cada
la actividad humana». uno sea absolutamente propio. Toda vida es for-
▪ Afecto: «cada una de las pasiones del ánimo, como mación: formación intelectual y formación emo-
la ira, el amor, el odio, etc., y especialmente el amor cional. La cultura, el universo cultural al que nos
o el cariño». incorporamos, tiende a la homogeneización, a
hacer que todos los componentes dispongan de
▪ Emoción: «alteración del ánimo intensa y pasajera,
los mismos instrumentos intelectuales y hagan
agradable o penosa, que va acompañada de cierta
conmoción somática». luego un uso personal según las diferencias de ca-
pacidad. En el orden emocional el planteamiento
▪ Pasión: «perturbación o afecto desordenado del
es otro: ese ámbito cultural lo encontramos ya,
ánimo».
cuando nos agregamos a él, como el terreno en el
▪ Sentimiento: «acción y efecto de sentir o sentirse».
que sentimientos y valores se debaten, y a noso-
▪ Humor: «genio, índole, condición, especialmente
tros mismos como sujetos que han de optar, a fa-
cuando se manifiesta exteriormente».
vor, en contra o en una dirección absolutamente
Queda patente la ambigüedad académica a la hora de personal».
definir conceptos que todos utilizamos asiduamente y cree-
Otro aspecto que cabe considerar lo plantea Marina:10
mos dominar con propiedad. La psicopatología, como no
podía ser menos, no ha permanecido impasible ante este «Si bien el lenguaje es un medio imprescindible
fenómeno, observándose con demasiada frecuencia una fal- para conocer los sentimientos ajenos y compren-
ta de precisión y de criterio a la hora de delimitar los pilares derlos, el léxico sentimental forma parte de los
básicos de la fenomenología afectiva. Los términos utiliza- sentimientos mismos. Con frecuencia nuestras
dos para definir estos conceptos no están perfilados con cla- experiencias afectivas son confusas, precisamente
ridad e, incluso, muchos no son mutuamente excluyentes. por su complejidad, y nos sentimos inquietos y
Y pese a la evidencia de que el léxico sentimental es con- desorientados mientras no sabemos cómo nom-
fuso en todas las lenguas conocidas, el asunto no termina brar nuestro sentimiento. ¿Es que el hecho de
en el terreno puramente lingüístico. Si atendemos a los di- atribuirle un nombre aumenta el conocimiento
ferentes idiomas, vemos que existe una amplia variedad de de lo que sentimos? Puede que sí y puede que no.
descripciones del humor, hecho que induce a pensar que Al nombrar algo, lo que hacemos es relacionar
no es sólo la terminología lo que difiere en culturas dife- una experiencia con el saber acumulado bajo el
rentes, sino también la forma de experimentar las emocio- nombre que le hemos aplicado. Si a mis senti-
nes, distinta en función del medio cultural en el que nos mientos por una persona los llamo por ejemplo
movamos. amor, estoy introduciendo mi sentimiento en una
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CAPÍTULO 8 Afectividad 123

red semántica, que me va a permitir anticipar dida elude sin excluirlos los sentimientos complejos
ciertas cosas y dar otras por supuestas». (pasiones, sentimientos sociales) que constituyen lo
Pese a estos hechos, se tratará aquí de exponer de un que a veces se ha denominado la capa superior, ca-
modo lo más claro y sincrético posible las aportaciones fun- tatimia o afectividad catatímica, formada por la
damentales desde la fenomenología al terreno de los afectos afectividad elaborada en el sistema personal de ten-
y de su descripción psicopatológica. dencias afectivas complejas».
Para Bleuler,24 la división de la vida psíquica en procesos
afectivos y procesos intelectuales es artificial. De hecho, to- Sentimientos
do proceso intelectual evoca sentimientos y, por el contra- No resulta fácil encontrar en la literatura científica una
rio, los sentimientos despiertan recuerdos y rigen desde este definición clara de sentimiento. Autores como Jaspers pasan
punto de vista nuestro modo de pensar. de puntillas sobre el tema, dejando para la posteridad una
Sin embargo, tal división resulta imprescindible para la definición elusiva y nihilista:31
observación y descripción de la personalidad, ya que nues-
tros habituales conceptos psicológicos y psicopatológicos se «Con respecto a la palabra y al concepto sentimien-
basan en la creencia ficticia de que intelecto y afectividad to impera una falta de claridad sobre el sentido de
se pueden separar entre sí. En consecuencia, la afectividad, la palabra en los casos especiales. Ordinariamente
si bien es vivida de forma subjetiva, se manifiesta al mismo se llama sentimiento a todo lo psíquico que no se
tiempo en nuestro obrar, nuestro pensamiento y a través de puede poner en el mismo plano con los fenómenos
nuestros procesos vitales corporales: de la conciencia del objeto ni con los movimientos
instintivos y los actos de la voluntad. Todas las for-
▪ Störring:27 «los afectos influyen más sobre la con- maciones psíquicas no desarrolladas, obscuras, todo
ducta y las decisiones volitivas de un sujeto que su lo impalpable, lo que escapa al análisis, se llama sen-
misma inteligencia. La inteligencia acaba disculpan- timiento; en una palabra, sentimiento es todo lo
do, paliando, facilitando y racionalizando aquello que no se sabe llamar de otro modo».
hacia lo que tienden invenciblemente los sentimien-
tos e impulsos instintivos». Schneider32,33 delimita de forma esquemática los rasgos
▪ Ciompi:28 «las funciones afectivas y cognitivas van esenciales del sentimiento, entendiendo como tal las cuali-
unidas en el caso normal, y su separación es signo dades o situaciones del yo vivenciadas de un modo directo,
de psicopatología». es decir, pasivo, y caracterizadas por tener una tonalidad
agradable o desagradable. Quedan fuera de la definición
Al estudiar la vida afectiva, puede advertirse cómo la
schneideriana de sentimiento:
psique opera como un todo, y aquello que en ella se destaca
en forma de ideas, conceptos o afectos constituye algo ar- ▪ Los fenómenos de la conciencia de los objetos (per-
tificialmente separado. En realidad, nunca reaccionamos cepciones sensoriales, representaciones, conceptos).
con un determinado afecto a una vivencia aislada, a una so- ▪ Los estados activos del yo (impulsos, tendencias y
la representación, sino que el afecto corresponde al psiquis- voliciones).
mo actual (particular de cada momento) en su totalidad. ▪ Y los estados pasivos del yo en los que no se aplica
una connotación agradable o desagradable (sensa-
Afectividad ciones musculares y viscerales).
Se entiende por afectividad o vida afectiva el conjunto Fish34 habla del sentimiento como una reacción positiva
de experiencias evaluativas que definen y delimitan la vida o negativa ante alguna vivencia, o bien como la experiencia
emocional del individuo. subjetiva de una emoción.
La afectividad supone para Arnold una «tendencia sen- Sims24 entiende por sentimiento una reacción positiva
tida a la acción y basada en la apreciación»,29 que se apoya o negativa, intensa y transitoria, ante una determinada ex-
en unos pilares básicos que la conforman (sentimientos, de- periencia.
seos, emociones, pasiones, estados sentimentales). Castilla del Pino35, desde un posicionamiento más psi-
Según Ey:30 codinámico, prefiere hablar de actitudes en vez de senti-
«Podemos hablar de la existencia de una afectividad mientos, ya que, si bien ambos fenómenos (actitud y
de base u holotímica que engloba lo que conocemos sentimiento) obedecen a pulsiones del ello que emergen en
como afectos, que entran en la experiencia sensible la conciencia mediatizadas por otras instancias (yo y super-
en forma de lo que se denominan los sentimientos yó), al hablar de sentimientos, sólo hacemos referencia al
vitales (este autor sigue la división de Scheler de los sujeto aislado, a estados del sujeto sin objeto, mientras que,
sentimientos), el humor y las emociones. Esta no- al referirnos a actitudes, tenemos también en cuenta el mo-
ción de afectividad de base u holotímica así enten- do de relación del sujeto con un objeto determinado, pues
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124 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

el término actitud implica también conducta. Así, el objeto «No podemos sostener ya la existencia de tristezas
puede ser el propio sujeto —en cuyo caso actitud equival- inmotivadas sobre la base de alusiones totalmente
dría a sentimiento—, o bien, objetos externos. irreales a la capa vital (López Ibor) o al fondo en-
Coincide con algunos de los postulados de Jaspers,30 dotímico (Lersch)».
quien, en su categorización de los sentimientos, señala que
Más aún, la afirmación de que la actitud (sentimiento)
uno de los aspectos que cabe considerar es el objeto hacia
es una conducta y de que esta implica una relación de ob-
el que se dirige el sentimiento, pudiendo ser un objeto de-
jeto obliga de forma ineludible al psicopatólogo al escla-
terminado e, incluso, una falta de objeto.
recimiento de cuál es el objeto que la suscita. A un individuo
Y también con Freud,36 para quien «un sentimiento sólo
se le describe por su comportamiento con los distintos ob-
puede ser una fuente de energía, siendo esto a su vez la ex-
jetos de la realidad. Por lo tanto, las actitudes que cada
presión de una necesidad imperiosa (pulsión)».
uno de dichos objetos provoca es, precisamente, lo que
Marina10 considera los sentimientos como «bloques de
delimita el contorno de la persona de acuerdo con sus mo-
información integrada que incluyen valoraciones en las que
el sujeto está implicado, y al que proporcionan un balance tivaciones.
de la situación y una predisposición para actuar». De esta Además de poder existir estados disociativos unidos o
forma, modifican el pensamiento, la acción y el entorno, no a desplazamientos de las actitudes (sentimientos) con
los cuales, a su vez, también terminan por condicionar los respecto a los objetos que las provocan, como forma de auto-
propios sentimientos en justa reciprocidad. ocultación, la conducta actitudinal tiende a la escotomiza-
Castilla del Pino35 considera que las actitudes (senti- ción del objeto, es decir, a la existencia de puntos ciegos so-
mientos) presentan tres aspectos fundamentales: bre este.
Otra característica de dicha conducta es la ambivalencia,
▪ Contactan con los procesos cognoscitivos. Así, de- entendida como la coexistencia de sentimientos opuestos
penden de las percepciones e influyen sobre ellas, respecto del objeto por parte del mismo sujeto, siendo su
llegando, en ocasiones, a distorsionarlas (ilusiones, forma más frecuente de expresión la sucesión alternativa,
alucinaciones), al tiempo que también dependen del la cual se ve facilitada por el carácter bipolar de las actitudes
juicio de realidad connotativo e influyen en él, pu- (así, en ocasiones, una actitud volcada sobre un determina-
diendo llevar a la génesis de ideas sobrevaloradas e, do polo afectivo revela una férrea defensa ante la posibilidad
incluso, de delirios. de volcarse sobre el polo contrario).
▪ Son casi siempre bipolares (amor/odio, alegría/ Y, finalmente, nos encontramos con la proyección, ya que
tristeza). la actitud resulta ser, a veces, una transacción entre la pulsión
▪ Y, desde la lógica categorial, las actitudes (sentimien- del ello y el yo o el superyó, que impiden que la pulsión se
tos) representan valoraciones personales que hace- proyecte sobre el objeto a costa de un montante de frustra-
mos de los diferentes objetos (entre otros, de ción, que también se proyecta sobre el objeto, en virtud de
nosotros mismos, de nuestra conducta), por lo que la tendencia del sujeto a responsabilizar a dicho objeto de la
desde ese momento constituyen un criterio de clase relación finalmente establecida.35
superior al de los propios objetos evaluados, miem- Pese a todo, Castilla del Pino afirma:26
bros de un vasto conjunto. Frente a un número re-
lativamente infinito de posibles actos de conducta «No me arredra decir que no he encontrado una
(en virtud de un número infinito de objetos poten- teoría de los sentimientos que me satisfaga. He
ciales), el número de clases (esto es, de actitudes, de hallado descripciones perfectas de determinados
valoraciones personales que de tales objetos efectua- sentimientos, pero no una teoría que incluya de
mos aplicando el criterio de clase ya mencionado) manera coherente las cuestiones enumeradas. Si
es relativamente pequeño. Las actitudes estarían a la gente siente sin necesidad de un saber explícito
un nivel lógico superior respecto de los actos de con- acerca de lo que significa sentir y tener sentimien-
ducta a través de los cuales se expresan. tos, los psicólogos y psiquiatras necesitamos un
corpus teórico que sirva en nuestra investigación
Según Castilla del Pino,35 los psicopatólogos clásicos,
y en nuestra práctica profesional, como nos sirve
en la medida en que hacen referencia a los sentimientos co-
un mapa en un territorio poco o nada conocido».
mo estados del sujeto, pueden hablar de sentimientos pro-
vocados (cuando dependen de un objeto-vivencia) y de Marina considera los sentimientos como el producto fi-
sentimientos espontáneos. Hablar de actitudes como conduc- nal de una evaluación cognitiva automática de la realidad
ta significa, por el contrario, negar que el sentimiento pue- circundante. Por un lado, se evalúa la situación real ante la
da surgir sin referencia a un objeto, negar que sea una que nos encontramos, si es beneficiosa o perjudicial, agra-
conducta sin objeto con el cual relacionarse, negar la es- dable o desagradable. Por otra parte, el individuo, según su
pontaneidad en el sentido de la no-motivación: sistema interpretativo individual, decide si es o no capaz de
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CAPÍTULO 8 Afectividad 125

enfrentarse a dicha situación planteada y la mejor forma Para Marina, la memoria «lejos de ser un desván platónico
para hacerlo. en el que se acumulan conocimientos, es un aparato orgánico
Según este autor, el balance sentimental viene consti- con determinadas propensiones». Es una especie de biografía
tuido por cuatro ingredientes:10 privada, una «versión manejable de nuestra existencia».37 La
▪ La situación real a la que nos enfrentamos. memoria afectiva es la verdadera impulsora de las creencias y
de las opiniones individuales, según la óptica cognitivista,
▪ Los deseos, según el gradiente deseo-pulsión-moti-
y, en ella, se unen factores culturales e individuales, incluidos
vación.
aquellos derivados del propio funcionamiento fisiológico.
▪ Las creencias del individuo, condicionadas por el
Damasio, desde una perspectiva neurobiológica, consi-
medio cultural en que se desenvuelve.
dera que el sentimiento es la percepción de un determinado
▪ Y la autoimagen o idea que el sujeto tiene de sí mis-
estado del cuerpo junto con la percepción de un determi-
mo, que depende tanto de factores personales como
nado modo de pensar y de pensamientos con determinados
socioculturales. No hay que olvidar que el yo del in-
temas:4
dividuo se encuentra implicado en el origen de to-
dos los sentimientos a la hora de elaborar un balance «El contenido esencial de los sentimientos es la
de cómo le van las cosas. cartografía de un estado corporal determinado.
El sustrato de sentimientos es el conjunto de pa-
El balance sentimental configura tanto el estado de áni-
mo del individuo en un momento determinado, el cual de- trones neurales que cartografían el estado corpo-
pende de elementos coyunturales cambiantes y transitorios, ral y del que puede surgir una imagen mental del
como de otras estructuras más estables en el tiempo (el tem- estado del cuerpo. En esencia, un sentimiento es
peramento, el carácter, o estilo afectivo propio de cada in- una idea; una idea del cuerpo y, de manera toda-
dividuo, y la personalidad). Estas estructuras estables vía más concreta, una idea de un determinado as-
combinan todo un conjunto de esquemas interpretativos pecto del cuerpo, su interior, en determinadas
de la realidad, si se entiende por esquema aquella matriz circunstancias».
que, a la vez, asimila y produce una información resultante Históricamente, han existido diferentes intentos de cla-
del resumen de factores innatos y aprendidos, y cuyo fin sificar y categorizar los sentimientos atendiendo a diversos
último es la acción del individuo. aspectos de estos.
Los sentimientos derivan de mecanismos orientados a Kurt Schneider16 divide los sentimientos en sentimientos
la acción en forma de necesidades, deseos o proyectos indi- corporales y sentimientos psíquicos. Estos últimos incluyen
viduales. Los sentimientos afloran en el campo de la acción, los afectos y el humor o estado anímico, y se dividen, a su
surgen de los deseos, reorganizan la vida mental e incitan a vez, en sentimientos psíquicos de estado, autovalorativos y
obrar. La preparación para la acción es una de las caracte- alovalorativos.
rísticas esenciales del sentimiento. Los esquemas interpre- Max Scheler,38 en un esfuerzo por fundamentar la ética
tativos actúan como extractores de información, posibilitan sobre una fenomenología de los sentimientos, los divide en:
el reconocimiento de los hechos y pueden generar signifi-
cados y formas de actuación diversas. ▪ Sentimientos sensoriales: los más simples. Aparecen
Tales esquemas integran elementos innatos (de base ge- siempre localizados en un sector del organismo, in-
nética o temperamental) y otros adquiridos, que, unidos a mersos en el propio cuerpo del que nacen. Su tona-
los anteriores, constituyen lo que se denomina personalidad lidad afectiva puede ser placentera o displacentera
individual (actitud o conducta externa observable), que (p. ej., el dolor).
puede considerarse un sistema complejo integrado por es- ▪ Sentimientos vitales: derivan directamente de la exis-
quemas afectivos, cognitivos y motores, cuyo núcleo duro tencia individual. Su cometido es el de informarnos
es el carácter o su equivalente, la memoria personal (me- acerca de los ascensos y descensos del tono vital en
moria afectiva). circunstancias particulares de salud y de enferme-
Según este modelo, el temperamento y el carácter cons- dad. Sus raíces no se hunden en el cuerpo. Son ex-
tituyen el denominado yo ocurrente, que se articula con el perimentados por el sujeto de un modo difuso en el
yo ejecutivo o personalidad a través de un puente que hace conjunto de su yo corporal. Su origen es relativamen-
de intermediario, el self.37 Los sentimientos son pequeñas te autónomo, tanto de los sentimientos sensoriales
historias biográficas que forman entre sí múltiples alianzas como de los acontecimientos externos. Alonso Fer-
y, en cuyo origen, hay un esquema sentimental. El hecho nández38 incluye dentro de este grupo las sensacio-
de que, en una situación determinada, sintamos una emo- nes o sentimientos de vitalidad, de aplanamiento y
ción u otra —es decir, activemos un esquema sentimental de potencialidad.
u otro— depende de los ingredientes específicos del balance ▪ Sentimientos psíquicos: aparecen en el plano psíquico
sentimental antes detallados. o yo psíquico como reacción a impresiones y noticias
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126 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

que llegan del exterior. Son sentimientos motivados. ción, sentimiento, afecto e instinto dentro de un to-
Se inicia en ellos la participación del yo activo, aun- do.
que sea indirecta, mediante la valoración de los mo- Marina10 entiende que los sentimientos pueden clasifi-
tivos que los originan. También se les conoce como carse por su intensidad, duración y profundidad; si bien,
sentimientos dirigidos. estas distinciones están hechas dentro de un continuo que
▪ Sentimientos espirituales: no son estados del yo psí- dificulta la tarea de establecer unos límites definidos. Para
quico, al no verse ligados a una motivación concreta. este autor, los fenómenos afectivos tienen una relación pe-
Se trata de estados absolutos o, más bien, del ansia culiar con su duración en el tiempo, y propone una división
de búsqueda de lo absoluto. Este grupo de senti- entre:
mientos nacen de la espiritualidad, como, por ejem-
plo, los sentimientos artísticos, metafísicos y religiosos. ▪ Estados sentimentales: sentimientos duraderos, que
Su interés psicopatológico no es tanto clínico, sino permanecen estables, mientras que otros sentimien-
el de posibilitar el establecimiento de una diferen- tos simultáneos más efímeros van cambiando. Den-
ciación, por ejemplo, entre la angustia neurótica o tro de los estados sentimentales, se distinguen los
psicótica (patológicas ambas) y la angustia existen- hábitos sentimentales o afectos (p. ej., el amor o el
cial, espiritual o religiosa, que puede considerarse odio) que tienen una permanencia configuradora de
normal y universalmente extendida. la personalidad, y los estados de ánimo o humor,
con una duración igualmente prolongada, pero con
Jaspers31 propone una categorización de los sentimien- menor consistencia a la hora de estructurar la per-
tos atendiendo a: sonalidad individual.
▪ Categorización fenomenológica: Los sentimientos pueden resultar ambivalentes res-
• Los sentimientos, por un lado, son parte de la pecto del objeto al que se dirigen, y pueden vincu-
conciencia de la personalidad individual y de los larse a determinadas proyecciones, desplazamientos
estados del yo y, por otro, crean una cierta tona- y a estados disociativos. Los afectos también pueden
lidad en la conciencia del objeto. irradiar a partir de una vivencia y representación a
• Los sentimientos se pueden ordenar en dimen- otras vivencias y representaciones. Esta transferencia
siones opuestas. afectiva puede alcanzar un punto tal que el afecto,
• Los sentimientos pueden ser anobjetales o diri- con toda su complejidad constitutiva, se desligue
gidos a objetos, clasificándose, en este caso, en por completo de su contenido representativo origi-
función de estos últimos. nal, mientras que una representación secundaria
▪ Según los objetos a los que se dirigen, los sentimientos puede ser vinculada a un afecto que, en principio,
pueden ser ilimitados (tantos como objetos; p. ej., no le correspondía (desplazamiento afectivo).
sentimientos fantásticos, patrióticos, religiosos, de Las transferencias y los desplazamientos afectivos
familia, etc.) y de tipo positivo o negativo. posibilitan, según Bleuler,25 el establecimiento de
▪ Según el origen en la sucesión de los estratos de la vida vínculos y de valoraciones sentimentales dentro del
psíquica, se pueden dividir en: sentimientos senso- mundo civilizado, que, en principio, tiende a difi-
riales, sentimientos vitales, sentimientos psíquicos y cultar las vivencias emocionales más originales y es-
sentimientos espirituales. pontáneas. Los síntomas neuróticos resultan, de este
▪ Según la importancia del sentimiento para la vida y modo, comprensibles a través de la transferencia y del
según los objetivos de la vida (sentimientos de pla- desplazamiento afectivo.
cer, sentimientos de disgusto). ▪ Emociones: sentimientos breves, de aparición nor-
▪ Según sean particulares o totales (estados sentimenta- malmente abrupta y manifestaciones físicas evidentes
les). (agitación, palpitaciones, palidez, rubor, etcétera).
▪ Según la intensidad y duración, se diferencian senti- ▪ Pasiones: sentimientos intensos, vehementes, ten-
mientos, afectos y estado de ánimo o temple. denciales, con un influjo poderoso sobre el compor-
▪ Por último, los sentimientos deben ser distinguidos tamiento.
de las sensaciones. Los sentimientos son estados del
yo (como el estar triste o alegre), y las sensaciones Emociones
son elementos de la percepción del ambiente y del Sentimientos intensos, de duración breve y de aparición
propio cuerpo; si bien, existe un tipo de sensaciones normalmente abrupta. Las emociones se diferencian de los
especiales, las sensaciones del sentimiento, que, al mis- sentimientos porque se acompañan de un cortejo psicoso-
mo tiempo, aun siendo objetivas, captan estados mático agudo, con amplia participación vegetativa y neuro-
vitales y forman parte de los instintos. Así, son sensa- endocrinológica. Su principal objetivo es el mantenimiento
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CAPÍTULO 8 Afectividad 127

del individuo alerta, con el fin de reaccionar de un modo lo to, y que son características de la denominada fantasía in-
más eficaz posible frente al estímulo causal de la emoción. consciente. Estos estados afectivos intensos se producen en
Para Fish,34 la emoción constituye la vertiente somática conexión con experiencias altamente deseables o indesea-
de manifestación de la experiencia psíquica subjetiva que bles, que motivan un deseo intenso de, respectivamente, re-
denominamos sentimiento, resultando la separación entre cobrar o evitar experiencias afectivas análogas. Los deseos,
ambos un artificio teórico. expresados como apetencias inconscientes concretas, cons-
En la literatura anglosajona, el término emoción se equi- tituyen el repertorio motivacional del ello.
para al de sentimiento, aun cuando ambos representan dos El deseo expresa un impulso motivacional más general
vertientes diferentes y complementarias, cuya separación que la apetencia. De hecho, el deseo o fantasía inconsciente
quizás obedezca a motivos académicos. se expresa de forma consciente en forma de apetencias, que
Damasio ofrece una definición para cada tipo de emo- expresan en términos concretos dicho deseo, y sus pulsiones
ción, considerando la hipótesis neurobiológica subyacente:4 subyacentes.
▪ Una emoción propiamente dicha —como felicidad, Para Chasseguet-Smirgel,39 existe una alianza indisolu-
tristeza, vergüenza o simpatía— es un conjunto ble entre los deseos, la satisfacción pulsional y el desarrollo
complejo de respuestas químicas y neuronales que del ideal del yo. La añoranza de un ideal de felicidad inal-
forman un patrón distintivo. canzable (enfermedad de la idealidad) es, para esta autora,
la base de los logros más excelsos del hombre, así como de
▪ Las respuestas son producidas por el cerebro normal
las formas más degradadas de la locura (las perversiones).
cuando este detecta un estímulo emocionalmente
El niño llega al mundo demasiado pronto, con ambiciones
competente, esto es, el objeto o acontecimiento cuya
que sus capacidades físicas no sustentan:
presencia, real o en rememoración mental, desenca-
dena la emoción. Las respuestas son automáticas. «La prematurez del ser humano, que se sitúa en
▪ El cerebro está preparado por la evolución para res- el origen de la formación de un ideal del Yo, pro-
ponder a determinados estímulos emocionalmente bablemente imprima ciertas características espe-
competentes con repertorios específicos de acción. Sin cíficas a nuestra vida pulsional».
embargo, la lista de estímulos emocionalmente com- Gobierna la transición de las necesidades corporales al
petentes no se halla confinada a los repertorios que registro del deseo. Convierte el placer en algo más que una
prescribe la evolución. Incluye muchos otros apren- simple descarga de tensión pulsional. De hecho, la satisfac-
didos en toda una vida de experiencia. ción pulsional tiende, al mismo tiempo, a reducir la distan-
▪ El resultado inmediato de estas respuestas es un cia entre el yo y el ideal del yo, pero su unión perfecta es
cambio temporal en el estado del cuerpo, y en el es- inalcanzable y, por eso, el deseo queda siempre insatisfecho.
tado de las estructuras cerebrales que cartografían Esta forma de pensar se solapa con el posicionamiento
dicho cuerpo y sostienen el pensamiento. de Sartre, para quien «el proyecto fundamental del insacia-
▪ El resultado último de las respuestas, directa o indi- ble ser humano es ser dios». Dios, según Sartre, es la for-
rectamente, es situar al organismo en circunstancias mulación positiva de la infinitud del deseo, de un deseo de
propicias para la supervivencia y el bienestar. omnipotencia y de autosuficiencia equiparable al narcisis-
Damasio propone una clasificación de las emociones en mo primario y a su heredero natural, el ideal del yo.39
tres categorías: emociones de fondo, emociones primarias y
emociones sociales. Todas ellas se desarrollan en el teatro del Pasiones
cuerpo, a diferencia de los sentimientos, que anidan en el Cuando un sentimiento monopoliza la vida afectiva de
teatro de la mente. una persona y la impulsa con gran determinación a actuar
de una forma concreta, se habla de una pasión. Luis Vives
Deseos denominaba a las pasiones alborotos anímicos,10 y como tales
Los deseos representan la conciencia de una necesidad, han de entenderse.
de una carencia o de una atracción. Normalmente, se acom- Las pasiones son movimientos afectivos de duración
pañan de sentimientos que los amplían y dan urgencia, y más prolongada en el tiempo que los sentimientos y las
suponen una parte fundamental del balance sentimental. emociones y, desde la holotimia o afectividad de base, al-
Desde un punto de vista psicodinámico,29 se puede afir- canzan proporciones catatímicas, impregnando buena parte
mar que de la integración del recuerdo afectivo primitivo de la actividad psicopatológica global del individuo.
en estadios precoces del desarrollo, aquél que vincula esta- Como ejemplo de esta repercusión catatímica, se pueden
dos afectivos intensos totalmente buenos o totalmente ma- citar las ideas sobrevaloradas y las formaciones deliroides, que
los, proviene el desarrollo de fantasías específicas impregnadas surgen de movimientos pasionales anímicos. Así, la sobredi-
de apetencias concretas que vinculan el sí-mismo y el obje- mensión de ciertas ideas y juicios de acuerdo con el sentido
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128 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

afectivo de una determinada pasión, eliminando de la con- tales internalizadas, o lo que es lo mismo, la ge-
ciencia los elementos afectivos contrapuestos, llega, en oca- neralización de un estado afectivo en la totalidad
siones, a provocar en el individuo la estructuración de ideas del sí-mismo y las representaciones objetales del
sobrevaloradas y, más aún, de ideas deliroides (que no deli- individuo, a las que colorea durante un lapso li-
rantes, ya que no son primarias, sino secundarias, al derivar mitado de tiempo».
de la esfera afectiva), una vez quedan estas aisladas de la po- La naturaleza, cualidad y dirección del tono afectivo en
sibilidad de ser refutadas por la lógica o por la experiencia.40 cada momento están directamente influidos por la perso-
El universo de las pasiones ha dominado el pensamien- nalidad y el carácter individual. Estamos hablando, más que
to acerca de la vida afectiva hasta el siglo XVIII, cuando del humor o estado anímico, de los diferentes hábitos sen-
aparece el concepto más refinado de sentimiento. El mun- timentales.10
do griego experimentó las pasiones como misterios ate- Existe un amplio margen de variabilidad entre lo que
rradores, una especie de enfermedad demoníaca que se se puede considerar humor normal y patológico, más aún,
imponía a la voluntad y que contaba siempre con una ex- si se consideran los diferentes grupos sociales o culturales.
plicación mitológica. La principal diferencia entre ambos viene determinada por-
Aristóteles escribió en su Retórica el primer tratado sis- que el humor patológico genera un sufrimiento vital en el
temático sobre las pasiones. Posteriormente, los neoplató- sujeto que lo padece o en aquellos que le rodean, lo cual
nicos, estoicos, cínicos y epicúreos anduvieron preocupados impide el correcto funcionamiento individual dentro de la
sin saber qué hacer con las pasiones, si erradicarlas, olvidar- colectividad.
las, atemperarlas o «arrojarse a sus brazos». Si se entiende el universo afectivo de un individuo como
Durante la Edad Media, las pasiones pierden su carácter una obra teatral, la afectividad (vida afectiva) vendría a re-
mitológico y demoníaco, pero quedan englobadas dentro presentar el escenario sobre el cual se desenvuelven ciertos
de la personalidad del individuo como una especie de «quis- actores (sentimientos, afectos, deseos, emociones y pasio-
te» enigmático y sobrecogedor. Curiosamente, los autores nes) siguiendo las indicaciones de un guión flexible (humor,
medievales tenían por costumbre, al referirse a las pasiones estado de ánimo o talante), escrito en forma de coproduc-
o a los sentimientos, elaborar su árbol genealógico, pensan- ción entre dos autores: la personalidad individual (hábitos
do, como San Gregorio, que las pasiones «están unidas con sentimentales) y el medio ambiente o realidad exterior.
tan estrecho parentesco que una sale de otra».10
En el siglo XVIII, las pasiones alcanzan una nueva di-
mensión al dejar de ser experiencias que se sienten y se im- LOS AFECTOS Y LA TEORÍA PSICODINÁMICA
ponen a un yo indefenso, pasando a ser autoanalizadas, DE LA MOTIVACIÓN
integradas en la conciencia del yo individual, y recogidas
en un mundo propio del individuo que constituye su ver- Nos vamos a detener un instante en las aportaciones
dadera intimidad. Hablamos ya de los sentimientos, que- más recientes que desde la teoría psicoanalítica se han pro-
dando sentadas las bases de un nuevo fenómeno cultural y ducido en un área teórica de sumo interés: el papel de las
artístico que se desarrollará en los primeros años del siglo XIX, diferentes manifestaciones afectivas en la metapsicología
el Romanticismo. Arte y afectividad discurren, una vez más, psicodinámica de la motivación.
cogidos de la mano. Conscientes de que en otro capítulo de este libro se tratan
en mayor profundidad las nuevas concepciones psicológicas,
Humor, estado de ánimo o talante neurobiológicas, sociológicas y legales de la voluntad, y de
que, ciertamente, ambos temas pueden solaparse, nos parece
Por último, queda por definir el humor, estado de ánimo relevante hacer un inventario sucinto de las principales
o talante, que se corresponde con un estado afectivo de du- aportaciones vertidas desde el psicoanálisis sobre esta área
ración más prolongada y no necesariamente de carácter re- del conocimiento.
activo, más estable y persistente que el resto de afectos Los afectos, que, sin duda, desempeñan un papel central
analizados. en el quehacer clínico de todo psicoanalista, han pasado
El humor es el tono hedónico dominante en un mo- sorprendentemente a un segundo plano distante y ambiguo
mento determinado,34 es decir, aquel estado emocional que en la conceptualización psicoanalítica clásica, hecho moti-
persiste durante algún tiempo coloreando la experiencia vi- vado, en parte, por los bandazos teóricos dados en este te-
tal del individuo. rreno por Freud.
Como dice Sims,24 el humor es el estado del self indivi- Freud diferencia las pulsiones de los instintos. Mientras
dual en relación con su entorno. que las primeras son los motivadores psicológicos de la con-
Jacobson29 define el estado de ánimo como: ducta humana, constantes y no intermitentes, a los instintos
«Una fijación y generalización temporal de los (en la línea de las nuevas concepciones neurobiológicas), los
afectos en el mundo total de las relaciones obje- ve como impulsos biológicos, heredados e intermitentes,
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CAPÍTULO 8 Afectividad 129

susceptibles de ser activados por factores fisiológicos o am- Los afectos son el sistema motivacional primario, al vin-
bientales. La libido es una pulsión y el hambre, un instinto. cular las series de representaciones precoces e indiferencia-
Hacia finales del siglo pasado, Freud pensaba que los das del objeto y del sí-mismo o self. Gradualmente, se
afectos eran, en gran medida, equivalentes a las pulsiones. construye un mundo complejo de relaciones objetales in-
Posteriormente, modificó su definición original de los afec- ternalizadas, algunas coloreadas por el placer y otras por el
tos, por lo menos, en dos oportunidades:29 displacer, que se articulan en dos series paralelas de expe-
riencias, gratificantes y frustrantes. De forma simultánea,
▪ En 1915, propuso que las pulsiones se manifestaban
se va produciendo una progresiva transformación de las re-
doblemente, por medio de representaciones psíqui-
laciones objetales buenas y malas internalizadas.
cas o ideas, expresión cognitiva de la pulsión, y por
El afecto predominante de amor u odio de cada una de
un afecto. Por aquel entonces, consideraba los afec-
las dos series opuestas se enriquece y se atempera, se vuelve
tos como productos de descarga de las pulsiones (en
cada vez más complejo, convirtiéndose en estructuras in-
particular, sus rasgos psicomotores y neurovegetati-
trapsíquicas estables, con coherencia interior, dinámica-
vos). Estos procesos de descarga podían llegar a la
mente determinadas, que organizan tanto la experiencia
conciencia sin sufrir represión alguna, al reprimirse
psíquica como el control conductual del individuo, de
sólo la representación mental de la pulsión junto con
acuerdo con la disposición genética, y a través de las diversas
el recuerdo del afecto correspondiente, o con la dis-
etapas del desarrollo.
posición a la activación de tal afecto.
De esta forma, la libido y la agresión se transforman en
▪ Finalmente, Freud (1926) describió los afectos como
sistemas motivacionales jerárquicamente superiores, las pul-
disposiciones innatas (umbrales y canales) del yo, y
siones, expresadas en forma de disposiciones afectivas dife-
subrayó su función de señal.
renciadas en función de las circunstancias. Los afectos se
En su teoría dual de las pulsiones, de la sexualidad y de la convierten en las señales o representaciones de las pulsiones,
agresión (1920),29 Freud presenta su clasificación final de estas así como en sus bloques constructivos. Por otra parte, las
entidades como fuentes últimas del conflicto psíquico incons- pulsiones son puestas de manifiesto no sólo por los afectos,
ciente, y de la formación de la estructura psíquica. Las pul- sino por la activación de las relaciones objetales específicas,
siones están presentes desde el nacimiento, pero también que incluyen un afecto y, en las cuales, la pulsión se repre-
maduran y se desarrollan. No obstante, algo similar ocurre senta por un deseo o apetencia específicos. En este caso, la
con los afectos. De hecho, la transformación de los afectos a apetencia, consciente y más precisa que el propio estado
lo largo del desarrollo, su integración con las relaciones obje- afectivo, deriva directamente de la pulsión.
tales internalizadas y su dicotomía evolutiva general en agra- Una vez que la organización de las pulsiones se ha con-
dables (que constituyen la serie libidinal) y penosos (que solidado como sistema motivacional jarárquico superior,
constituyen la serie agresiva) muestran la riqueza y compleji- cualquier activación particular de estas en el contexto del
dad de sus elementos cognitivos, tanto como de los afectivos. conflicto intrapsíquico es representada por la activación
¿Qué queda, por lo tanto, en el concepto más amplio del estado afectivo correspondiente. Este estado afectivo in-
de pulsión que no incluya el concepto de afecto? cluye una relación objetal internalizada o, lo que es lo mis-
Otto Kernberg41 aporta nuevas e interesantes respuestas mo, la interacción entre una representación particular del
a esta y otras preguntas dentro del marco de la teoría de las sí-mismo (self ) que se vincula a una representación parti-
relaciones objetales. Kernberg considera que debe mantener- cular del objeto, bajo la influencia de un afecto particular.
se la teoría de las pulsiones como fuente de organización La relación recíproca de roles del sí-mismo y el objeto, en-
motivacional que haga justicia a la integración compleja de marcada por el afecto específico, se expresa como una fan-
todos los desarrollos afectivos en relación con los objetos tasía o apetencia concreta orientada a la acción, más precisa
parentales. Esta concepción no difiere sustancialmente de que el propio afecto, y bajo el control directo de la pulsión.
la primera y tercera teorías del afecto de Freud, ni de las Es el equivalente a lo que Damasio denomina estímulo emo-
nuevas aportaciones de la neurobiología, incluyendo el cionalmente competente.4
principio de anidamiento. Desde el punto de vista estructural del aparato psíquico,
Para Kernberg, el desarrollo afectivo se basa en las rela- las relaciones objetales internalizadas en cada momento del
ciones objetales precoces, impregnadas de afecto, que quedan desarrollo y su correspondiente investidura afectiva consti-
recogidas en forma de memoria afectiva. Piensa que la acti- tuyen el núcleo duro de las subestructuras del yo, el ello y el
vación de diferentes estados afectivos con respecto al mismo superyó.
objeto se produce bajo la influencia de una variedad de ta- Las características estructurales del ello se basan en una
reas evolutivas (relacionales) y de pautas conductuales ins- combinación de varios factores derivados de su desarrollo
tintivas biológicamente activadas durante las diferentes precoz. Por un lado, la naturaleza primitiva difusa y abru-
etapas del desarrollo. Una vez más, ambiente y biología jun- madora del recuerdo afectivo temprano derivado de los
tos (natura/nurtura). afectos cumbre (estados afectivos intensos en las primeras
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130 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

fases del desarrollo), junto a las relaciones objetales inter- jetos parentales. Las defensas inconscientes vinculadas a las
nalizadas que reflejan la acción de un sí-mismo y de unos fantasías primitivas y las defensas ulteriores que refuerzan
objetos internos inmaduros. Por otro lado, la calidad indi- secundariamente la represión encapsulan finalmente la capa
ferenciada de la subjetividad y la conciencia tempranas, así más profunda e inconsciente de las relaciones objetales, in-
como la naturaleza rudimentaria de las funciones simbóli- vestidas agresiva y libidinalmente. El resultado final es la
cas en el proceso de condensación del pasado, presente y estructura psíquica conocida como el ello. Este constituye
futuro, evocado en la formación de las fantasías tempranas. una estructura intrapsíquica, un marco estable, dinámica-
Las experiencias afectivas cumbre facilitan la internaliza- mente determinado, internamente coherente, para la orga-
ción de las relaciones objetales primitivas a lo largo de dos nización de la experiencia psíquica y del control conductual
ejes de objetos recompensadores (totalmente buenos) o del individuo.
aversivos (totalmente malos). Las experiencias del sí-mismo Como dice Kureishi:42
y el objeto bajo la influencia de una activación afectiva ex-
«No es sorprendente que uno acabe acostum-
trema adquieren una intensidad que facilita el establecimiento
brándose a hacer lo que le dicen que haga, mien-
de estructuras mnésicas, afectivamente impregnadas, que son
tras se construye un escondrijo seguro en su
las estructuras intrapsíquicas más tempranas y que surgen en
interior y lleva una vida secreta. Tal vez por eso
la etapa simbiótica (precoz) del desarrollo. Ellas implican
las historias de espías y de dobles vidas nos resultan
el inicio de las relaciones objetales internalizadas y también
tan fascinantes».
la organización de las pulsiones libidinales y agresivas.
Por su parte, estados afectivos menos intensos contri- En el conflicto neurótico, asistimos a la pugna entre uno o
buyen directamente al desarrollo del yo. La interacción ma- más impulsos que tienden a su descarga, por una parte, y las
dre-infante, en paralelo con el aprendizaje en condiciones fuerzas psíquicas que se oponen a ella, por otra. Según Feni-
de estados afectivos leves o moderados, pueden establecer chel,43 «el conflicto neurótico tiene lugar entre el Yo y el Ello».
estructuras mnésicas que reflejarán relaciones más discri- La neurosis es una reacción particular del yo frente a
minativas y eficaces con el ambiente psicosocial inmediato. ciertas exigencias pulsionales. Bajo la influencia del super-
El aprendizaje se produce en condiciones en las que el in- yó, el yo intenta defenderse contra los impulsos prohibi-
dividuo se centra en la situación y en las tareas inmediatas, dos por aquél de una manera característica para cada tipo
con poca distorsión derivada de la excitación afectiva y sin de neurosis.
que interfiera en él mecanismo defensivo alguno. Kernberg,29 en resumen, define los afectos como estruc-
Según Tomkins, la personalidad afectivamente equili- turas instintivas, pautas conductuales psicofisiológicas que
brada aparece cuando el aprendizaje de los sentimientos se incluyen una apreciación cognitiva específica, una pauta fa-
hace mediante recompensas y no mediante castigos. La teo- cial comunicativa propia de cada afecto, una experiencia
ría de la urdimbre o apego afectivo proporciona una expli- subjetiva de naturaleza placiente y recompensadora, o do-
cación sobre cómo las relaciones entre los padres y los niños lorosa y aversiva, y un patrón determinado de descarga
afectan a los diversos patrones emocionales. El niño posee- muscular y neurovegetativa.
dor de una urdimbre segura a la edad de un año resultará Considera que los afectos son un puente entre los ins-
más sociable y comunicativo con los adultos, sin menospre- tintos (biológicos) y las pulsiones (psíquicas), que los inte-
cio de la influencia de las variables innatas como el tempera- gran como forma jerárquica superior.
mento. Lo más probable es que el estilo de urdimbre dependa Por último, divide los afectos en dos tipos:
del juego entre la conducta de los padres y el tempera-
▪ Afectos primitivos, de aparición en los primeros años
mento del niño, es decir, entre la biología y el ambiente.10
de vida, intensos y con un elemento cognitivo difu-
La experiencia subjetiva en los estados afectivos cumbre
so, no bien diferenciado.
inicia la construcción de un mundo interno que gradual-
▪ Afectos derivados, más complejos, fruto de la combi-
mente se separa en una capa profunda de imaginería fan-
nación de los anteriores, con un mayor grado de
tástica, vinculada a las relaciones objetales precoces e
elaboración cognitiva, que condiciona que el compo-
inmaduras adquiridas durante dichos estados cumbre, y
nente psíquico domine gradualmente los aspectos
una capa más superficial que infiltra las percepciones cog-
psicofisiológicos y de comunicación facial. Para estos
nitivamente objetivas de la realidad externa constituida du-
afectos complejos, reserva los términos sentimiento
rante estados afectivos de bajo nivel emocional, en los que
y emoción.
el infante explora atentamente sus alrededores y que cons-
tituye el pensamiento consciente o pensamiento secundario. El
inconsciente dinámico incluye originariamente estados in- NEUROBIOLOGÍA AFECTIVA
aceptables de autopercatación bajo la influencia de relacio-
nes investidas agresiva y placenteramente durante los La estructura y operatividad del sistema nervioso de
llamados estados afectivos cumbre, que involucran a los ob- un ser humano puede estudiarse a diferentes niveles or-
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CAPÍTULO 8 Afectividad 131

ganizativos, que van desde lo pequeño (proteínas, enzi- culados a emociones sociales en función de la expe-
mas, neurotransmisores) a lo grande (regiones cerebrales in- riencia emocional de cada individuo (simpatía, tris-
terconectadas). El objetivo de la neurociencia es relacionar la teza, culpa, desesperación). Cabe señalar el papel de
imbricación entre células, señales de transmisión química, la asimetría cerebral en este terreno. Las neuronas del
circuitos, rutas y los fenómenos mentales y sociales. área prefrontal ventromedial derecha responden es-
Ninguna de las funciones psíquicas (percepción, apren- pecíficamente a emociones desagradables, mientras
dizaje, memoria, emoción, sentimientos, lenguaje, cogni- que las del área izquierda lo hacen a emociones agra-
ción) surge en una única área cerebral. No obstante, existen dables (positivas).4
regiones cerebrales altamente especializadas en el desarrollo ▪ El área motriz suplementaria.
de determinadas dimensiones psicopatológicas. ▪ El área cingulada.
Dichas regiones no generan una actuación estereotipa-
La respuesta emocional da, sino que pueden resultar flexibles en función de la me-
La respuesta emocional es un fenómeno multidimen- diación de otras áreas cerebrales. Una emoción como el
sional. Las emociones suponen estados cognitivos (subjeti- miedo implica que, ante un EEC, se active la corteza sen-
vos), representan respuestas biológicas que preparan el sorial asociativa, la cual induce a la amígdala a enviar una
organismo para la acción y cubren una dimensión social, orden de ejecución al cerebro anterior basal, hipotálamo y
ya que comunican a los demás nuestras experiencias inter- tronco cerebral, que culmina con un estado emocional que
nas en un determinado momento. Proporcionan un medio implica cambios transitorios en el medio interno (vísceras,
natural para que el cerebro evalúe el ambiente interior y el sistema musculoesquelético) y en el comportamiento.
que rodea al organismo, para poder responder en conse- En relación con el estímulo inicial, la continuidad e in-
cuencia y de forma adaptativa. tensidad del estado emocional se encuentra a merced del
La mayor parte de los objetos que rodean nuestro cere- proceso cognitivo que lo desarrolla, el cual puede, a su vez,
bro pueden desencadenar una forma u otra de emoción. ampliar o extinguir la propia experiencia emocional en fun-
Algunos de estos disparadores los establece la evolución, pe- ción de las circunstancias. El procesamiento de las emo-
ro otros son producto de la selección cerebral individual de ciones es bidireccional: el flujo de contenidos mentales
objetos emocionalmente competentes en función de nues- desencadena las reacciones emocionales, y las mismas res-
tras experiencias particulares.
El proceso emocional implica una compleja cadena de
acontecimientos: un objeto emocionalmente competente
debe representarse en uno o más de los sistemas de proce- Evaluación y definición Corteza cerebral
samiento sensorial del cerebro, el cual, a su vez, activará di- del estímulo de asociación sensorial
versos lugares de ejecución de dichas emociones en otras emocionalmente y de orden superior
regiones cerebrales (Fig. 8-1). competente (EEC)

Emociones y sentimientos. Teoría del anidamiento Amígdala


Partimos de un estímulo emocionalmente competente
(EEC), real o fruto de un recuerdo, que puede ser modula- Inducción
do e, incluso, suprimido a través del aprendizaje por el yo
en función del contexto, pero que, por el mero hecho de Cerebro anterior basal
ser emocionalmente competente, produce una emoción, la Hipotálamo
cual sólo varía en cuanto a su intensidad. Tronco cerebral
El EEC se representa en forma de imágenes en uno o Ejecución
más de los sistemas de procesamiento sensorial del cerebro.
Este proceso puede reverberarse, amplificarse o extinguirse
en función de las circunstancias particulares.
Las regiones cerebrales involucradas en el desencadena- Cambios transitorios
y medio interno,
miento de emociones son: Estado vísceras, sistema
emocional
▪ La amígdala, crucial en el reconocimiento de EEC musculoesquelético
visuales y auditivos, y en el desencadenamiento del
miedo y la cólera.
▪ La corteza prefrontal ventromedial, capaz de detec- Figura 8-1. Esquema de la respuesta emocional
tar el significado de estímulos más complejos y vin- (adaptado de Damasio A, 2005).4
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132 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

puestas ejecutivas que constituyen las emociones conducen respuestas automáticas o deliberadas requiere imá-
eventualmente al desarrollo de sentimientos. genes. La anticipación y planificación de respuestas
Los sentimientos son tan mentales como los objetos o futuras precisan igualmente imágenes.
acontecimientos que desencadenan las emociones. Lo que ▪ La interfase crítica entre las actividades del cuerpo y
realmente distingue a los sentimientos como fenómenos los patrones mentales que denominamos imágenes
mentales es su origen y contenido particulares, el estado del consiste en regiones cerebrales específicas que em-
cuerpo del organismo, real o tal y como se cartografía en plean circuitos de neuronas para construir patrones
las regiones cerebrales que mapean el sensorio corporal. neurales continuos y dinámicos que corresponden a
Para Damasio:4 las diferentes actividades del cuerpo, y que cartogra-
fían dichas actividades a medida que tienen lugar.
«Los apetitos y las reacciones reguladoras más
▪ La cartografía no es necesariamente un proceso pa-
sencillas tienen lugar en el teatro del cuerpo bajo
sivo. Las estructuras en las que se forman los mapas
la guía de un cerebro que es congénitamente sa-
tienen su propia voz sobre la cartografía y están in-
bio, diseñado por la evolución para ayudar a ges-
fluidas por otras estructuras cerebrales.
tionarlo (conatus). […] Cuando las consecuencias
de esta sabiduría natural se cartografían nueva- Para terminar este apartado, unas palabras sobre la teo-
mente en el cerebro, el resultado son los senti- ría del anidamiento. Atendiendo a la figura 8-2, puede verse
mientos, los componentes funcionales de nuestra cómo los sentimientos son una expresión mental de todos
mente. […] Los sentimientos abren la puerta a los demás niveles de regulación homeostásica del individuo.
una cierta medida de control premeditado de las Existe una parte de las reacciones más sencillas incorporada
emociones automatizadas». como componente de otras reacciones más elaboradas, un
anidamiento de lo simple dentro de lo complejo. De esta for-
Primero, fue la maquinaria para producir reacciones ante ma, cada reacción de regulación del organismo no surge de la
un objeto o acontecimiento, dirigidas al objeto o a las cir- nada, sino que es fruto de un reordenamiento de parte de
cunstancias: la maquinaria de la emoción.
En segundo lugar, vino la maquinaria para producir un
mapa cerebral y después una imagen mental, una idea, para
las reacciones y para el estado resultante del organismo: la
Sentimientos
maquinaria del sentimiento.
Finalmente, en combinación con los recuerdos pasados,
la emoción y el razonamiento, los sentimientos condujeron
a la previsión y a la creación de respuestas nuevas, no estereo-
tipadas, adaptadas al ambiente y circunstancias particulares.
Emociones
Damasio sintetiza su concepto dual cuerpo-mente de la
siguiente forma:4
▪ El cuerpo y el cerebro forman un organismo inte-
grado, e interactúan completa y mutuamente a tra-
vés de rutas químicas y neurales. Instintos y motivaciones
Principio de
▪ La actividad cerebral está dirigida primariamente a anidamiento
ayudar a la regulación de los procesos vitales del or-
ganismo, coordinando operaciones internas del cuer-
po e interacciones entre el organismo en su conjunto
Comportamiento
y los aspectos físicos y sociales del ambiente.
▪ La actividad cerebral está dirigida primariamente a
la supervivencia con bienestar.
▪ En organismos complejos como el nuestro, las ope-
raciones reguladoras del cerebro dependen de la crea-
Respuesta inmunitaria
ción y manipulación de imágenes mentales (ideas y
Reflejos básicos
pensamientos) en el proceso que denominamos Regulación metabólica
mente.
▪ La capacidad de percibir objetos y acontecimientos,
externos o internos al organismo, requiere imágenes Figura 8-2. Niveles de regulación homeostática de la
externas (visuales, auditivas, táctiles, olfativas, gus- vida afectiva. Principio de anidamiento
tativas) o internas (dolor, náusea). La ejecución de (adaptado de Damasio A, 2005).4
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CAPÍTULO 8 Afectividad 133

procesos jerárquicamente más simples, todos ellos dirigidos cepción de los fenómenos de descarga musculares
al mismo objetivo general: la supervivencia con bienestar. y neurovegetativos o derivan de ella, y en contras-
Como ya se ha dicho, la imagen para el conjunto de es- te con la posición derivada de Tomkins de que
tas reacciones no es de una simple jerarquía lineal. Metafó- los aspectos cognitivos y sentidos de los afectos
ricamente, la imagen que mejor define el sistema es la de siguen a la percepción de su expresión facial o de-
un árbol alto y heterogéneo, con ramas cada vez más altas rivan de ella, yo pienso que la calidad subjetiva
y complejas que salen del tronco principal, ya que, de esta de la apreciación sentida es el núcleo característi-
manera, se mantiene una comunicación bidireccional con co de cada afecto».
las raíces. La historia de la evolución está escrita sobre este
Lo mismo puede decirse de Damasio, para quien:4
árbol, cual «hojaldre» cosmogónico.
«Los sentimientos no surgen necesariamente de
Sensaciones emocionales los estados corporales reales, aunque puedan ha-
cerlo, sino más bien de los mapas reales construi-
La teoría de James-Lange postula que las situaciones ge-
dos en cualquier momento dado en las regiones
neradoras de emociones provocan un conjunto de respues-
de sensación corporal».
tas fisiológicas (temblores, sudoración, taquicardia) y de
conductas predeterminadas (afrontamiento, lucha, huida)
Reconocimiento emocional
en las personas que las experimentan.
El cerebro, una vez afronta un estímulo emocionalmen- Muchas especies animales —y el ser humano no cons-
te competente, recibe una retroalimentación sensorial de tituye una excepción— muestran sus emociones a sus con-
los músculos y de los órganos generadores de emociones, géneres mediante diversos cambios posturales y de expre-
la cual es filtrada a través del tálamo y de la corteza sensorial sividad facial, cumpliendo la función social de comunicar
y conforma las sensaciones emocionales o sentimientos, que a los demás no sólo cómo nos sentimos en un determinado
son secundarios a los diferentes patrones de respuesta y de momento, sino cómo vamos a reaccionar a continuación.
expresión emocional. De este modo, se puede transmitir igualmente la presencia
La retroalimentación explica según Tomkins44 por qué de un peligro o la existencia de algún suceso interesante que
una emoción puede ser contagiosa para los que nos rodean. cautive nuestra atención.
Así, cuando vemos sonreír a alguien con placer, acabamos La comunicación eficaz debe ser bidireccional. La capa-
imitando su sonrisa y la retroalimentación indirecta genera cidad para manifestar el propio estado emocional mediante
en nosotros un sentimiento de felicidad. cambios expresivos sólo resulta útil si las demás personas
Bleuler sostiene:25 son capaces de reconocerlos.
«La afectividad anima nuestra motórica, la mími- Para Ekman,44 la expresión facial de una emoción hace
ca, las actitudes corporales y el modo de andar y uso de un repertorio innato de movimientos de la muscu-
de mover las manos, y a través de todo ello se ex- latura facial, propio de cada especie, que constituyen pa-
presa a los demás. Mas aparte de ello, todos los trones de conducta no aprendidos. Aún no ha podido
procesos somáticos se hallan bajo la influencia de establecerse si otros medios de comunicación emocional co-
las emociones: la circulación, la digestión, las ex- mo el tono de voz o los movimientos de las manos se apren-
creciones, el funcionalismo sexual, la secreción den o son (al menos, en parte) innatos.
endocrina, etc. Así como la vida emocional ejerce La región caudal del hemisferio cerebral derecho de-
sus efectos sobre las funciones corporales, tam- sempeña un papel crucial en la comprensión, el recono-
bién estas actúan sobre aquella». cimiento y la expresión de las emociones. El hemisferio
izquierdo destaca en cuanto al reconocimiento de palabras
Kernberg critica, sin embargo, el simplismo de la teoría o secuencias de letras (funciones verbales del lenguaje),
de James-Lange:29 mientras que el tono emocional de la voz es controlado
«Hoy en día, existe un acuerdo general en cuanto principalmente por el hemisferio derecho.
a que los afectos, desde su mismo origen, tienen Las lesiones en el hemisferio cerebral derecho se relacionan
un aspecto cognitivo, contienen por lo menos con la aprosodia, disfunción del lenguaje afectivo (prosodia y
una apreciación de la bondad o maldad de la modulación) con preservación de sus funciones verbales.
constelación perceptiva inmediata, y esta aprecia- Lo mismo sucede a nivel visual o cuando una persona
ción determina una motivación sentida para la muestra sus emociones a través de la musculatura facial. El
acción, de aproximación o alejamiento a cierto lado izquierdo de la cara muestra una expresividad más in-
estímulo o situación. En contraste con la antigua tensa que el derecho. Dado que el control motor es contra-
teoría de James-Lange, según la cual los aspectos lateral, parece ser que el hemisferio derecho es más expresivo
subjetivos y cognitivos del afecto siguen a la per- que el izquierdo. Además, si bien las expresiones faciales de
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134 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

la emoción parecen estar organizadas por el tronco del en- de otros, para desarrollar una teoría de la mente y, por ende,
céfalo y sus diferentes núcleos, el control jerárquico último para capacitarnos en la vida social. Suponen una disolución
y superior corresponde a la corteza frontal. en la barrera entre uno y los demás.
En la década de 1990, Giacomo Rizzolatti (galardonado
Neuronas espejo, empatía y teoría de la mente con el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Cien-
tífica y Técnica en 2011) y su equipo de la Universidad de
Las neuronas espejo son un tipo de neuronas que se ac-
Parma estudiaron un área premotora del cerebro del maca-
tivan cuando un animal o una persona ejecuta una acción,
co F5, implicada en la organización del comportamiento,
y cuando observa esa misma acción al ser ejecutada por otro
si bien, su actividad no se traduce directamente en órdenes
individuo, especialmente, un congénere.
motoras (esa acción es misión de la corteza motora). Mi-
Las neuronas espejo imitan, reflejando, la acción de
diendo la actividad eléctrica de las neuronas F5 con elec-
otro. Fueron descritas inicialmente en primates y, luego, se
trodos implantados en los cerebros de los macacos, vieron
encontraron en algunas aves y en los seres humanos, prin-
que la actividad en el área premotora se correlacionaba con
cipalmente, en la circunvolución frontal inferior y en el ló-
la acción del animal. Cuando el animal cogía un fruto, las
bulo parietal. Estas neuronas se activan cuando los simios
neuronas de F5 se activaban y mandaban una señal eléctrica
realizan alguna tarea y, además, cuando observan esa misma a otras neuronas.
tarea realizada por otro simio. Pero algunas neuronas de F5 se activaban no sólo cuan-
Las investigaciones desarrolladas empleando RM fun- do el mono realizaba una acción, sino también cuando veía
cional, estimulación magnética transcraneal y electroence- una acción. Esto es sorprendente, porque las neuronas de
falografía han encontrado evidencias de un sistema similar las áreas premotoras normalmente no reaccionan ante estí-
en el cerebro humano, en el cual, observación y actuación mulos visuales. Son, por lo tanto, neuronas visomotoras, a
también coinciden. las que Rizzolatti decidió bautizar con el sugerente nombre
Se postula para las neuronas espejo un rol básico dentro de neuronas espejo.47
de las capacidades cognitivas ligadas a la vida social, como Los investigadores cayeron en la cuenta de que algunas
la empatía y la imitación.45 Su función es objeto de elucu- neuronas espejo (un tercio aproximadamente) respondían
braciones científicas: a un tipo de acción muy concreta. Por ejemplo, la neurona
▪ Estas neuronas pueden ser importantes para com- se activaba cuando el mono cogía un fruto, y cuando veía
prender las acciones de otras personas y para apren- a un mono coger un fruto, y ninguna otra cosa conseguía
der nuevas habilidades por imitación. activarla. El grupo de Parma lanzó la hipótesis de que el
▪ El sistema espejo puede imitar las acciones observa- mono estaba repitiendo mentalmente el gesto que veía, de
das y, así, enriquecer la teoría de las habilidades de que estaba realizando una imitación encubierta.
la mente. El término neurona espejo es, por lo tanto, el nombre de
▪ Otros autores lo relacionan con las habilidades del una hipótesis. Nadie sabe a ciencia cierta si los monos están
lenguaje (incluyendo la capacidad de simbolización reflejando algo. Podría tratarse simplemente de una cate-
metafórica), la visión e, incluso, la memoria. gorización: «eso es una mano cogiendo un plátano».
Trabajando con macacos, se comprobó igualmente que
▪ También se ha propuesto que pueden subyacer dis-
las neuronas espejo también respondían al sonido de una
funciones del sistema espejo a la fisiopatología de
acción, por lo que se las llamó neuronas espejo audiovisuales.
trastornos cognitivos como el autismo.
Para ser exhaustivos, hay que decir que las neuronas no es-
Una onda electroencefalográfica (onda mu) se bloquea pejo, las normales (llamadas canónicas) se activan tanto
cuando una persona hace un movimiento muscular volun- cuando un mono coge un fruto como cuando ve un objeto
tario y cuando una persona ve a alguien realizar la misma que puede coger. A partir de este descubrimiento, empeza-
acción.46 Ramachandran señala que la supresión de la onda ron las especulaciones.
mu supone una prueba sencilla no invasiva para monitori- Se propone que F5 es el homólogo evolutivo de la cor-
zar la actividad de las neuronas espejo.7 En niños autistas, teza ventral premotora humana. Esta posibilidad provoca
se suprime la onda mu cuando realizan un movimiento vo- el entusiasmo de muchos investigadores, dado que la cor-
luntario, pero no cuando observan a alguien realizar la mis- teza premotora ventral izquierda es la que alberga el área de
ma acción, de lo cual, se deduce que el sistema motor está Broca, clave para el habla y el lenguaje. Algunos científicos
intacto, pero no el sistema de neuronas espejo, lo cual pue- habían avanzado la hipótesis de que el lenguaje podría ha-
de explicar la falta de habilidades sociales, ausencia de em- ber evolucionado a partir de algo que podría parecerse a las
patía, déficits del lenguaje, imitación pobre y la dificultad neuronas espejo, aunque nadie podía decir realmente qué.
para comprender las metáforas de estos pacientes. Sin embargo, estudios recientes ponen de manifiesto que
Por todo ello, cabe especular que las neuronas espejo las neuronas espejo no son necesarias para la percepción del
son el mecanismo esencial para comprender las intenciones habla.
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CAPÍTULO 8 Afectividad 135

En los últimos años, se está asistiendo a una inflación ra han permanecido misteriosas e inaccesibles a
en el número de comportamientos humanos que se atri- los experimentos».
buyen a las neuronas espejo. Sin embargo, el único ani-
Ramachandran llama a las neuronas espejo neuronas de
mal donde las neuronas espejo se han estudiado indi-
la empatía, por ser las implicadas en la comprensión de las
vidualmente es el macaco. La existencia de neuronas es-
emociones de los otros. De algún modo, si la observación
pejo en humanos es todavía una hipótesis —plausible,
de una acción llevada a cabo por otro individuo activa las
pero hipótesis—, ya que, por razones éticas, no se puede
neuronas que permiten al observador realizar la misma ac-
abrir el cráneo a una persona para implantarle electrodos
ción, estamos ante una suerte de lectura de la mente.7
en el cerebro que permitan medir la actividad de una
Un elemento esencial de todas estas hipótesis radica en
neurona en concreto.
la introducción de la intención en la comprensión de la ac-
Esto no ha sido impedimento para afirmar que la imi-
ción. Los primeros estudios planteaban la función de las
tación, la empatía, la comprensión social, la teoría de la
neuronas espejo para entender la acción (el qué de la ac-
mente, la capacidad humana para la cultura e, incluso, el
ción), sin embargo, lo más interesante está en la compren-
atractivo generalizado de la pornografía se basan en las neu-
sión de la intención de dicha acción (el porqué de esta), sin
ronas espejo.
la cual, no sería más que un mero reflejo.
Según Giacomo Rizzolatti:45
Determinar por qué se ejecuta una acción es básico para
«Somos criaturas sociales. Nuestra supervivencia su comprensión real e implica la detección de la meta u ob-
depende de entender las acciones, intenciones y jetivo de dicha acción. Para estudiar este tipo de cuestiones,
emociones de los demás. Las neuronas espejo se han llevado a cabo estudios con RM funcional, que
nos permiten entender la mente de los demás, muestran ciertos grupos de neuronas que sólo se activan
no sólo a través de un razonamiento conceptual cuando los actos motores acompañan a acciones que tien-
sino mediante la simulación directa. Sintiendo, den a una meta. La predicción de la acción y la adscripción
no pensando». de intenciones estarían, por lo tanto, relacionadas en un
Los estudios de neuroimagen sugieren un sistema neural mismo mecanismo funcional.
que sustenta la teoría de la mente, implicando el surco tem- Cada investigador utiliza terminología diferente, lo cual
poral superior (responsable de la detección del agente que complica un tanto la comprensión de estos estudios. Sin
actúa y de los estímulos provenientes del movimiento bio- embargo, hay un acuerdo generalizado en que la compren-
lógico de otra persona), los polos temporales (asociados a sión de las acciones humanas tiene que ver con la capacidad
procesos mnésicos, aportando un contexto semántico y epi- de simular las acciones observadas en otros (el observador
sódico a los estímulos que se están procesando) y la corteza representa los estados internos de otros individuos con su
prefrontal medial (analiza los estímulos y produce una re- propio sistema motor, cognitivo y emocional). Esta simu-
presentación de los estados mentales propios y ajenos). De lación posibilita una comprensión intersubjetiva de otros
forma menos relevante, se implican la amígdala y la corteza humanos, que permite percibirlos como semejantes, esto
orbitofrontal.45 es, permite atribuirles una mente.
La asunción de esta teoría conlleva dos consecuencias La atribución de pensamientos e intenciones a otros o teo-
relevantes: ría de la mente ha generado dos hipótesis contrapuestas:
▪ Obliga a revisar lo que hasta el momento se ha venido ▪ La teoría de la mente se desarrolla en los primeros
afirmando respecto a las regiones motoras del cerebro. años de vida probando reglas dadas y relativas a las
De hecho, el sistema motor no puede ser concebido funciones de los objetos y organismos con los que
ya como un mero ejecutor pasivo de órdenes emitidas se interactúa, generando cognitivamente una teoría
por otra región cerebral y aparece como un complejo acerca de lo que los otros piensan.
entramado de zonas corticales diferenciadas, capaces ▪ La teoría de la simulación, que propone que la teoría
de realizar las funciones sensoriomotoras propias de de la mente es un desarrollo de la capacidad de in-
un sistema cognitivo superior. terpretar las acciones de otros a través de la simula-
▪ Y supone un importante reto para nuestras convic- ción (o representación). Esta segunda hipótesis
ciones filosóficas acerca de la comprensión conscien- parece más sólida, en la medida en que los estudios
te de los actos humanos. van mostrando que las neuronas espejo están impli-
Para Ramachandran:7 cadas en esta comprensión de las intenciones, en la
imitación, en la empatía, y, por lo tanto, son la clave
«Las neuronas espejo harán por la psicología lo
del comportamiento social de los individuos.
que el ADN hizo por la biología: proporcionarán
un marco unificador y ayudarán a explicar una De momento, se puede afirmar con cierta solvencia que
multitud de capacidades mentales que hasta aho- las neuronas espejo participan en la preparación de las ac-
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136 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

ciones propias y en la anticipación de las acciones de otros, Desde un punto de vista neurobiológico, la sinestesia
pero no necesariamente en reflejarlas. Pero incluso este valor parece obedecer a una activación cruzada (transversal) de
anticipatorio debe relativizarse. áreas adyacentes del cerebro, que procesan diferentes infor-
De hecho, dado que es útil para la supervivencia la ca- maciones sensoriales (corteza somatosensorial primaria,
pacidad de predecir las acciones —no sólo de nuestros con- ínsula, amígdala, corteza orbitofrontal, circunvolución an-
géneres, sino también de las presas o de los depredadores, gular) y puede ocurrir, incluso, cuando uno de los sentidos
algunos de los cuales difieren de forma sustancial desde el está dañado (una persona que puede ver colores cuando oye
punto de vista motor—, no parece irracional afirmar que palabras puede seguir percibiendo estos colores, aunque
la predicción de los movimientos basada en el aprendizaje pierda la visión durante su vida).49
sensorial es más importante que las predicciones motoras Todos los bebés de menos de cuatro meses de edad pre-
que puedan aportar las neuronas espejo a la hora de evaluar sentan un cerebro sinestésico (fusión de los sentidos). A esa
el comportamiento futuro de los demás. Por ejemplo, a la edad, el cerebro aún no ha sufrido la especialización de las
hora de anticipar los movimientos del leopardo que intenta distintas áreas ante los estímulos sensoriales. Las conexiones
cazar un macaco, es más importante lo que este ha apren- sinápticas entre áreas permanecen funcionalmente unidas,
dido por observación de los leopardos que lo que sus neu- de forma que los bebés responden de un modo similar a es-
ronas espejo le puedan aportar. tímulos de diferentes clases (una nota musical, una luz bri-
En resumen, si bien las neuronas espejo son un descubri- llante).
miento interesante, las funciones que se les atribuyen son, en En el proceso de desarrollo, se produce una poda neu-
su inmensa mayoría, especulativas, sobre todo, en humanos, ronal (pruning) debido al alto crecimiento de conexiones
en los que su existencia es sólo fruto de una correlación. sinápticas, y cada conexión sináptica se va especializando
ante estímulos de distinta índole. Pues bien, en el cerebro
Sinestesia sinestésico, la poda sináptica es menor, o no se produce. Se
mantienen intactos los enlaces, dando lugar a este tipo de
Se dedicará un breve apartado a un fenómeno neurofi- activación simultánea ante distintos estímulos sensoriales.
siológico conocido como sinestesia, el cual proporciona un Los estudios genéticos indicarían para la sinestesia una
estimulante modelo teórico a la hora de comprender facul- herencia dominante ligada al sexo (cromosoma X), si bien,
tades psíquicas como el lenguaje, la creatividad, el estable- también ha sido implicado el gen HTR2a, situado en el cro-
cimiento de metáforas, el pensamiento abstracto y la mosoma 13q (y precursor del receptor 5-HT2a). Es más
conciencia. prevalente en mujeres, pudiendo llegar a presentarse en una
Consiste en la percepción involuntaria y conjunta de horquilla que oscila entre el 0,1 y el 1 % de la población
varios tipos de sensaciones derivadas de diferentes sentidos, general (esta última prevalencia se atribuye a personas que
todo ello en un mismo acto perceptivo. Es decir, una mezcla ven colores cuando oyen o leen letras o números.50
de sensaciones, percepciones y emociones. En general, los individuos sinestésicos pueden ser alta-
Se ha hablado anteriormente de las consideraciones bio- mente creativos. De hecho, hay estudios que refieren que
lógicas, antropológicas y socioculturales de la percepción, entre una tercera y una sexta parte de poetas, novelistas y
y de cómo publicistas y especialistas en neuromarketing se artistas afirman haber tenido experiencias sinestésicas de un
nutren de ellas. Y se ha puesto el ejemplo de la evocación tipo u otro. Un tipo de sinestesia, por ejemplo, sería el oído
emocional de la percepción cromática y musical en función absoluto.
de estas variables. Dejando a un lado que poetas y novelistas son espe-
Pues bien, los individuos sinestésicos experimentan el cialmente hábiles en el uso de metáforas, Ramachandran
mundo ordinario de un modo extraordinario: saborean co- sugiere:7
lores, ven sonidos, oyen formas o tocan emociones en un
amplio abanico de combinaciones. Además, no se limitan «Es mejor considerar la sinestesia como un ejem-
a asociar percepciones y a imaginarlas, sino que las sienten plo de percepciones subpatológicas intermodales
realmente. que podrían ser una firma o un indicador de crea-
La percepción sinestésica es: involuntaria, automática, tividad».
localizable en el espacio, consistente, duradera y con reper-
cusión emocional. Puede aparecer (no necesariamente) en Neurobiología de la depresión
estados tóxicos y también en la esquizofrenia, el autismo y La teoría clásica sobre el origen neurobiológico del tras-
la epilepsia. torno depresivo mayor asume una deficiencia en el tono
Se ha descrito que la fluoxetina puede revertir el efecto funcional del sistema monoaminérgico (dopamina, seroto-
sinestésico en algunos pacientes, hasta el punto de postu- nonina, noradrenalina), aunque sin menospreciar el papel
larse que el receptor 5-HT2a puede ser el receptor sinesté- del ácido gamma-aminobutírico (GABA), neurocininas, los
sico del cerebro.48 neuropéptidos y las hormonas del eje hipotálamo-hipófi-
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CAPÍTULO 8 Afectividad 137

so-suprarrenal, entre otros, así como de una alteración en En la depresión mayor, habitualmente, se observa una
la regulación génica que condiciona la expresión receptorial hipoactividad de dicha vía de neurotransmisión.
(up-regulation de receptores postsinápticos en procesos de- ▪ Ideación suicida: aparece en relación con una hipo-
presivos), y la síntesis de factores neurotróficos como el actividad de las proyecciones serotoninérgicas sobre
BDNF (factor neurotrófico derivado del cerebro). la amígdala, la corteza ventromedial prefrontal, y la
Analizando individualmente los principales síntomas corteza orbitofrontal.
involucrados en el diagnóstico de un trastorno depresivo ▪ Ideas de culpa o minusvalía: la aparición de estos sín-
mayor, se comprenderá mejor el papel terapéutico de los tomas comparte cierta base fisiopatológica con la
fármacos antidepresivos en este cuadro:51 ideación suicida, observándose en estos pacientes
▪ Humor depresivo: procesamiento inadecuado de la una hipoactividad de las proyecciones serotoninér-
información en la amígdala, corteza ventromedial gicas sobre la amígdala y la corteza ventromedial
prefrontal y área subgeniana de la corteza cigulada prefrontal.
anterior. Los tres sistemas monoaminérgicos inervan
prolijamente dichas regiones, con el consiguiente Neurobiología de la manía
efecto terapéutico sobre el humor de los fármacos Se analizan ahora los principales síntomas involucrados
antidepresivos, que modifican la biodisponibilidad en el diagnóstico de un episodio maníaco. Como se puede
de dopamina, serotonina o noradrenalina. ver, existe un gran solapamiento entre algunos de los sín-
▪ Apatía: si bien es un síntoma tradicionalmente liga- tomas maníacos y depresivos. De hecho, ambos síntomas
do al anterior, involucra de forma difusa circuitos pueden coexistir en el trastorno bipolar, preferentemente,
diferenciados como la corteza ventromedial prefron- en los episodios mixtos:51
tal, la corteza prefrontal dorsolateral, así como el
▪ Humor elevado, expansivo o irritable: obedece a un
hipotálamo y el núcleo accumbens, regiones catali-
procesamiento de información ineficiente, secunda-
zadoras de la experiencia placentera. Los antidepresi-
rio a hiperactividad de las proyecciones noradrenér-
vos que incrementen la disponibilidad de dopamina
gicas, dopaminérgicas y serotoninérgicas a nivel de
(en la corteza prefrontal, el hipotálamo y el núcleo
la amígdala, de la corteza prefrontal ventromedial y
accumbens) o noradrenalina (corteza prefrontal e hi-
de la corteza orbitofrontal.
potálamo) pueden mejorar este síntoma, mientras
▪ Grandiosidad, taquipsiquia, fuga de ideas: guardan
que un incremento serotoninérgico lo empeora a tra-
relación con la hiperactivación de regiones cere-
vés de un feedback negativo (serotonina/dopamina).
brales implicadas en el desarrollo de los síntomas
▪ Alteración del sueño: involucra de forma difusa varias
psicóticos positivos, como el núcleo accumbens
regiones cerebrales (hipotálamo, tálamo, regiones
(proyecciones serotoninérgicas, dopaminérgicas y
basales del lóbulo frontal, corteza prefrontal), con
noradrenérgicas).
un papel regulador de las monoaminas. La fatiga
▪ Pobre control de impulsos, presión del habla: hiper-
mental se asocia a una disfunción noradrenérgica y
activación de regiones cerebrales que incluyen la cor-
dopaminérgica en la corteza prefrontal, mientras
teza orbitofrontal, la corteza prefrontal dorsolateral
que la fatiga física se vincula a un déficit de noradre-
y la corteza prefrontal ventromedial (proyecciones se-
nalina en la corteza prefrontal y el tronco del encé-
rotoninérgicas, dopaminérgicas y noradrenérgicas).
falo, así como de dopamina en el estriado, el núcleo
accumbens, el hipotálamo y el tronco del encéfalo. ▪ Insomnio: hiperactivación de regiones talámicas, hi-
potalámicas y de la base del lóbulo frontal, mediada
▪ Alteración de tareas ejecutivas: reguladas por la acti-
a través de proyecciones dopaminérgicas, serotoni-
vidad noradrenérgica y dopaminérgica en la corteza
nérgicas y noradrenérgicas.
dorsolateral prefrontal, que, en el caso de la depre-
sión, se encuentra hipoactiva. ▪ Distracción, dificultades de concentración: hiperactiva-
ción de la corteza prefrontal dorsolateral, que recibe
▪ Síntomas psicomotores: en forma de retraso motor o
proyecciones noradrenérgicas y dopaminérgicas.
de agitación psicomotriz, ambos controlados por
circuitos motores que incluyen el estriado y el nú- ▪ Agitación: hiperactivación de proyecciones dopami-
cleo accumbens (proyecciones dopaminérgicas y se- nérgicas y serotoninérgicas en el estriado.
rotoninérgicas), la corteza prefrontal (proyecciones
de los tres sistemas) y el cerebelo (proyecciones se- Genética, neuroimagen y trastornos afectivos
rotoninérgicas y noradrenérgicas). La mayor parte de las anomalías genéticas asociadas a
▪ Cambios en el apetito y en el peso: el peso y el apetito la esquizofrenia son aplicables a los trastornos afectivos, en es-
son mediados, principalmente, por estructuras hipo- pecial, al trastorno bipolar (volvemos al eterno debate en tor-
talámicas, que reciben proyecciones serotoninérgicas. no a la psicosis única).52
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138 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

En la tabla 8-1, se recogen algunos de los genes candi- ▪ Temor, miedo: este sentimiento parece condicionado
datos para la regulación del humor en el trastorno bipolar. por una hiperactivación de las conexiones recíprocas
Algunos de ellos son compartidos con la esquizofrenia. Có- entre la amígdala y las regiones prefrontales que re-
mo dichos genes influyen sobre el neurodesarrollo, la plas- gulan la cognición: la corteza orbitofrontal y la cin-
ticidad sináptica, la conectividad neuronal y el adecuado gulada anterior.
procesamiento de la información neural en los trastornos ▪ Evitación: mecanismo motor característico de las fo-
afectivos pertenece al ámbito de la investigación.53 bias, a veces, presente en forma de su reverso (afron-
En cuanto a los aspectos de neuroimagen, ya se ha co- tamiento por la vía de la lucha o huida ante las ame-
mentado cómo en el trastorno depresivo se encuentra una nazas del entorno). Este mecanismo viene regulado
hipoactividad en la corteza dorsolateral prefrontal, vincu- por conexiones recíprocas entre la amígdala y la sus-
lada al procesamiento cognitivo, mientras que, a nivel de tancia gris periacueductal del tronco del encéfalo.
la amígdala y la corteza prefrontal ventromedial, relaciona- ▪ Manifestaciones neuroendocrinas del miedo: la expe-
das con síntomas emocionales como el humor depresivo, rimentación del temor o miedo condiciona una ac-
se encuentra una hiperfunción. tivación de las conexiones entre la amígdala y el eje
Existen estudios de neuroimagen funcional que indican, hipotálamo-hipófiso-suprarrenal, con el consiguien-
en pacientes depresivos, una hiperreactividad ante estímulos
te incremento de la liberación del cortisol.
generadores de tristeza en la amígdala y la corteza prefrontal
Esta reacción es conocida como reacción de estrés, o
ventromedial, con arreactividad ante estímulos alegres;
conjunto de reacciones fisiológicas que se producen
mientras que, en pacientes maníacos, sucede lo contrario:
ante la percepción de situaciones adversas o amena-
la corteza orbitofrontal fracasa a la hora de frenar una res-
zantes. Originalmente, estas reacciones son útiles y
puesta inducida, lo cual puede redundar clínicamente en la
adaptativas, si bien, están diseñadas para afrontar su-
impulsividad observada en estos pacientes.54
cesos a corto plazo (lucha, huida). De hecho, un es-
trés leve o moderado sostenido puede llegar a generar
Neurobiología de la ansiedad
una desensibilización de los propios circuitos del es-
La amígdala, anatómica y funcionalmente vecina del hi- trés, produciendo en el individuo una especie de re-
pocampo, presenta importantes conexiones que permiten sistencia basada en el propio estrés.
integrar información sensorial y cognitiva, y condicionar, No obstante, si los estímulos amenazantes son más
por lo tanto, la respuesta del miedo o temor, básica en el continuos e intensos, se puede producir una respues-
desarrollo de las fobias y el pánico, así como la génesis de ta de estrés sostenido, que puede llegar a ser alta-
otros síntomas como la ansiedad flotante, la aprensión y las mente perjudicial para la salud del individuo,
obsesiones. debido a su componente catabólico a expensas del
El sentimiento de miedo o temor viene regulado por sistema nervioso simpático y de las glándulas supra-
conexiones recíprocas entre la amígdala y las regiones pre- rrenales, con liberación masiva de adrenalina, nor-
frontales que regulan la cognición: la corteza orbitofrontal adrenalina, cortisol, CRF (factor liberador de
y la corteza cingulada anterior. Por su parte, la amígdala corticotropina) y corticotropina (ACTH) sobre el
también cuenta con conexiones recíprocas con el tálamo, sistema nervioso central y periférico.
el hipotálamo, el hipocampo y el tronco del encéfalo (nú- El estrés también tiene su repercusión en el sistema
cleos del rafe, locus cerúleo, sustancia gris periacueductal, inmunitario. El estado anímico determina una ma-
núcleo parabraquial):51 yor o menor liberación de inmunoglobulina A en
las mucosas (primera barrera defensiva frente a las
TABLA 8-1. Genes reguladores de las mood networks.53 infecciones). Además, la inmunomodulación no re-
Principales genes reguladores de las redes neurales del humor
lacionada directamente con el cortisol o con el CRF
está bajo control neural directo. El estrés aumenta
▪ DISC1 (disrupted in schizophrenia 1) la actividad del núcleo central de la amígdala y del
▪ DAOA (D-amino acid oxidase activator; G72/G30) núcleo paraventricular hipotalámico, quienes envían
▪ COMT (catechol-O-methyltransferase)
estímulos neurales directos a la médula ósea, el timo
▪ BDNF (brain-derived neurotrophic factor)
y los ganglios linfáticos, incidiendo, de algún modo
▪ MAO-A (monoamine oxidase A)
▪ TOH (tyrosine hydroxylase) aún desconocido, en la función inmunitaria.44
▪ GSK-3 (glycogen synthase kinase-3) Múltiples estresores pueden incrementar la suscepti-
▪ SERT (serotonin transporter) bilidad de una persona frente a infecciones, enferme-
▪ CREB (cAMP response element-binding) dades autoinmunitarias, alergias e, incluso, el cáncer.55
▪ 5HT2A (5-hydroxytryptamine 2A receptor) ▪ Taquipnea: los cambios en la frecuencia respiratoria
▪ TRY-OH son frecuentes durante una reacción de miedo o te-
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CAPÍTULO 8 Afectividad 139

mor. Obedecen a una hiperactivación desde la amíg- investigaciones en esta área han aportado datos relevantes
dala del núcleo parabraquial del tronco del encéfalo. acerca de la fisiología del aprendizaje y de la memoria.
▪ Respuesta vegetativa o autonómica (noradrenérgica): Por su parte, cuando el hipocampo y la corteza prefron-
incluye el incremento de la presión arterial y de la tal ventromedial asumen que el recuerdo condicionado no
frecuencia cardíaca, fruto de la hiperactivación desde presenta consecuencias graves para el individuo, se activan
la amígdala de las conexiones con el locus cerúleo neuronas glutamatérgicas en el núcleo basolateral de la
(acúmulo de neuronas noradrenérgicas), y la consi- amígdala, que, a su vez, hacen sinapsis con interneuronas
guiente respuesta vegetativa. Una respuesta exagera- gabaérgicas inhibitorias, que desencadenarán el proceso de
da en el tiempo, ya sea a través de estímulos externos extinción de la respuesta ansiosa.
o internos (recuerdos almacenados en el hipocampo Esta vía de actuación presenta importantes implicacio-
y activados por estímulos de la amígdala), puede nes terapéuticas en cuadros como el trastorno por estrés
conducir a un incremento del riesgo vascular, arte- postraumático a través de la utilización de agonistas
riosclerosis, hipertensión, hipertrofia miocárdica, in- NMDA como la D-cicloserina.56
farto y muerte súbita. Por lo que respecta a la preocupación, la ansiedad flotante
Entre los principales mediadores humorales que regulan o preocupación excesiva objetivable en los trastornos de an-
las reacciones de ansiedad/miedo y que participan en las siedad deriva de la activación de un circuito córtico-estria-
múltiples conexiones de la amígdala con otros circuitos y tal-talámico-cortical prefrontal mediado por los mismos
regiones cerebrales, se encuentran: neurotransmisores antes referidos.

▪ Serotonina y noradrenalina (su hiperactividad im- Genética, neuroimagen y trastornos de ansiedad


plica la activación de la amígdala sobre sus proyec-
Atendiendo al tipo de transportador de serotonina
ciones y a través de los receptores adrenérgicos a1 y
(SERT) predominante en cada persona, los estudios gené-
b1 y puede participar en procesos como la ansiedad,
ticos demuestran que el genotipo SERT 1 condiciona una
el pánico, el temblor, la sudoración, la taquicardia,
mayor eficiencia en la información afectiva procesada por
la hiperactivación y las pesadillas). Queda clara la
la amígdala, hasta el punto de que las personas con este ge-
conexión fisiopatológica entre los trastornos de an-
notipo muestran menor riesgo de desarrollo de trastornos
siedad y los depresivos, dado que comparten circui-
afectivos o de ansiedad, incluso, tras ser sometidos a múl-
tos comunes.
tiples estresores sostenidos.57
▪ Glutamato y receptor NMDA (N-metil-D-aspartato).
Diferentes estudios señalan que el estrés sostenido pue-
▪ GABA, con sus receptores GABA A y C, ligados a
de conllevar una atrofia cerebral en distintas regiones (hi-
canales iónicos, y GABA B, ligados a la proteína G.
pocampo, tálamo), relacionada con el bloqueo de genes
▪ CRF, cortisol y ACTH. vinculados a la síntesis del BDNF. Dicho bloqueo resulta
▪ Canales iónicos dependientes del voltaje (calcio in- reversible con el tratamiento adecuado del proceso mórbi-
traneuronal). do, el cual, a su vez, puede vincularse al genotipo específico
▪ Citocinas (colecistoquinina) y neuropéptido Y. del receptor serotoninérgico, como se ha comentado ante-
Todos ellos suponen dianas terapéuticas de primer or- riormente.
den a la hora del abordaje farmacológico de los trastornos Los individuos portadores del genotipo SERT 1 quizá
de ansiedad. muestren una menor vulnerabilidad a la atrofia hipocám-
La amígdala está involucrada en la activación ansiosa pica derivada del estrés, y una mayor respuesta terapéutica
tras el recuerdo de diferentes estímulos vinculados a una a los fármacos inhibidores selectivos de la recaptación de la
sensación de temor o miedo (recuerdo condicionado), a tra- serotonina. Todo lo contrario puede decirse de las personas
vés del incremento de la neurotransmisión glutamatérgica, que presentan el genotipo SERT s.58
una vez dichos recuerdos reverberan desde el tálamo o la Las consecuencias deletéreas de la liberación sostenida
corteza sensorial. de cortisol y su efecto neurotóxico sobre el hipocampo se
La amígdala actúa como interruptor a este nivel, y se producen a través de la modificación de la expresión génica
sirve de las vías glutamatérgicas y del receptor NMDA. Las local y condicionan la incapacidad de regulación del eje hi-
principales aferencias estimulantes llegan al núcleo central potálamo-hipófiso-suprarrenal por inhibición del feedback
de la amígdala desde la corteza prefrontal ventromedial y negativo derivado de la liberación de hormonas del estrés.
el hipocampo. De hecho, a este nivel, se están ensayando nuevos trata-
El núcleo central de la amígdala resulta especialmente mientos farmacológicos antiestrés como los antagonistas
importante para el aprendizaje emocional adverso del que del receptor de glucocorticoides, los antagonistas del factor
se derivará una respuesta emocional condicionada (condi- de liberación de corticotropina (CRF1) y los antagonistas
cionamiento clásico) y una respuesta de afrontamiento. Las del receptor de vasopresina 1B.59
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140 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

Por su parte, los diferentes genotipos de la enzima cate- SEMIOLOGÍA AFECTIVA


col-Orto-metiltransferasa (COMT) condicionan la capacidad
de adaptación del individuo a la exposición ante situaciones La semiología afectiva o exploración clínica de la afecti-
estresantes. Aquellos que presentan el genotipo Met (menor vidad no es tarea fácil, dada la doble vertiente (subjetiva
actividad COMT, mayor biodisponibilidad de dopamina) y objetiva) de los afectos, experimentados internamente y,
presentan una peor adaptación al estrés y mayor riesgo de posteriormente, expresados al mundo exterior.
desarrollar trastornos de ansiedad que los del genotipo Val.60 Para Freud:36
«En manera alguna es grato someter los senti-
Neuroética mientos al análisis científico. Es cierto que se pue-
Un último y breve apunte acerca de un área de actuali- de intentar la descripción de sus manifestaciones
dad multidisciplinaria: el papel de los sentimientos y de las fisiológicas, pero cuando esto no es posible, no
emociones en el desarrollo de la neuroética. queda sino atenerse al contenido ideacional que
Los sentimientos incluyen una función natural de su- más fácilmente se asocie con dicho sentimiento».
pervisión de la vida. Desde que estos se desarrollaron, dicho
La mayoría de las veces, no se trabaja con datos objeti-
papel hubo de tener en cuenta la condición de la propia vi-
vos, sino con datos recogidos e inferidos por el examinador,
da, y hacer que tal condición contara en la organización del
a partir de los cuales se elaboran descripciones e interpre-
comportamiento. Por ello, los sentimientos desempeñan,
taciones clínicas, algoritmos de intervención clínica y esti-
sin lugar a dudas, un papel fundamental en la evaluación,
maciones pronósticas.
el desarrollo y la aplicación actuales de los instrumentos
La exploración clínica de la afectividad obliga, como en
culturales propios de toda sociedad.
cualquier otra parcela de la psiquiatría, a realizar una valo-
La neuroética debe atender a cómo las emociones afec-
ración semiológica global de las diferentes áreas de funcio-
tan nuestras decisiones morales y a la relación entre respon-
namiento psíquico del individuo, centrándose no sólo en
sabilidad, libertad individual y determinismo cerebral.
los afectos (afectividad de base u holotímica), sino también
Puede subdividirse en dos áreas con intereses específicos:
en su repercusión en otras esferas psicopatológicas (reper-
▪ La ética de la neurociencia, centrada en la práctica cusión catatímica).
y las implicaciones de la comprensión cerebral en la Habrán de evaluarse aspectos tan diversos como la apa-
sociedad. riencia física y la conducta del paciente durante la entrevis-
▪ La neurociencia de la ética, centrada en los funda- ta, el tipo de relación médico-paciente, la expresividad facial
mentos neurológicos del conocimiento moral. y corporal, la psicomotricidad, el curso y el contenido del
pensamiento, el lenguaje, la actividad sensorial y perceptiva,
Con la emergencia de nuevos modelos del cerebro, la
el estado cognoscitivo, etcétera.
conciencia se ha convertido en un objeto de estudio para
Además, teniendo en cuenta la afirmación de Doone24
las neurociencias, que consideran sus propiedades plásticas,
de que «ningún hombre es una isla encerrado en sí mismo»,
creativas y emocionales, así como sus características cultu-
se ha de considerar la importancia de la comunicación verbal
ralmente inducidas. En consecuencia, las neurociencias se
y no verbal, ya que, más allá del lenguaje, las emociones son
vuelven cada día más pertinentes para comprender la fuerte
expresadas de forma no verbal a través de diferentes partes
inclinación que tienen los humanos a construir sistemas
del cuerpo, mediante, por ejemplo, la mímica facial, los ges-
normativos, esencialmente afectivos (sistemas morales, so-
tos y posturas adoptadas, el aspecto físico o el tono de voz.
ciales, legales).
Por último, nuestros estados emocionales no son sólo
Según la teoría de la epigénesis neuronal, las estructuras
observados y comprendidos por los que nos rodean, sino
socioculturales y las estructuras neuronales se desarrollan
también, y en buena medida, modificados por ellos. El
en simbiosis y recíprocamente. La arquitectura de nuestros
transmisor evalúa la respuesta afectiva del receptor (la cual
cerebros determina nuestro comportamiento social y nues-
depende, a su vez, del mensaje transmitido) y, en parte, la
tra disposición moral, lo que influye en el tipo de sociedad
reproduce él mismo, cerrando el círculo del proceso comu-
que creamos. Y viceversa: nuestra estructura sociocultural
nicativo.
influye en el desarrollo de nuestro cerebro.
Estos aspectos son de vital importancia a la hora de la
La neuroética tiene la responsabilidad de descifrar la red
evaluación clínica a través del método empático. Ya se ha
de conexiones causales entre dimensiones neurobiológicas,
hablado de la empatía al mencionar las neuronas espejo. Des-
socioculturales e histórico-contingentes, para evaluar entre
de otro punto de vista, Kohut define este concepto como:61
ellas cuáles tienen un carácter universal, especificado de an-
temano en nuestro genoma y compartido por la especie hu- «La capacidad de penetrar con el pensamiento y
mana, y cuáles son relativas a una cultura o a un sistema el sentimiento en la vida interior de otra persona.
simbólico determinados. Es nuestra capacidad de vivenciar en todo mo-
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CAPÍTULO 8 Afectividad 141

mento de la vida lo que otra persona vivencia, sociales, cambios en la temperatura corporal, cambios en la
aunque por lo común en un grado atenuado». liberación hormonal (melatonina, cortisol, es GRH o factor
liberador de la hormona del crecimiento), cambios en la li-
La relación empática se establece frecuentemente entre
beración de neurotransmisores, cambios en la tensión arte-
el médico y el paciente de forma espontánea y sin el pre-
rial y en la frecuencia cardíaca, y cambios en la cognición,
rrequisito de una amplia formación clínica, y es básica en
atención y humor—, íntimamente relacionados con regio-
el desarrollo de la teoría de la mente.
nes profundas cerebrales como el núcleo supraquiasmático
Dando un enfoque esquemático a este apartado, pueden
hipotalámico (Fig. 8-3).
destacarse algunos puntos de particular interés y utilidad clí-
Por último, hay que recoger en la historia los cambios
nica durante la exploración afectiva. En primer lugar, se ha
comportamentales que se derivan de un determinado esta-
de recoger la presencia o ausencia evidenciable de un estímulo
do afectivo, antes, durante y después de este, así como su
causal (uno o varios) psicológico u orgánico del estado afecti-
correlación o no con las diferentes manifestaciones somá-
vo, que, si bien no siempre es detectable, en muchas ocasiones,
ticas que puedan concurrir, y su grado de interferencia en
puede ser referido por el propio paciente, por sus familiares
la actividad cotidiana del individuo.
más próximos, o bien, deducido sin más de la entrevista.
En la tabla 8-2, se compilan los principales instrumen-
Los datos recogidos pueden estar cargados de subjetivi-
tos clínico-psicométricos de que se dispone para la evalua-
dad, por lo que se han de barajar todas las pruebas dispo-
ción normalizada de los trastornos del humor.62
nibles, las atribuciones y su origen de la forma más objetiva
Una vez recopilados estos apuntes semiológicos, hay que
posible, y elaborar de manera independiente la interpreta-
procesar los síntomas recogidos y agruparlos adecuadamen-
ción más adecuada en cada caso.
te dentro de cada uno de los principales síndromes afectivos
Resulta de suma importancia detallar el mayor número
que se detallan seguidamente.
posible de características de los afectos que se vayan a tratar,
incluyendo los posibles antecedentes de trastornos afectivos
previos (psicobiografía), la forma y el orden de aparición de SINTOMATOLOGÍA AFECTIVA
estos, si son reactivos a un estímulo concreto, su patrón cir-
cadiano y estacional, el contexto situacional en el que se pro- Dentro de este apartado, se pretende realizar una apro-
ducen, su duración, su intensidad y si varían en cuanto a la ximación a las distintas manifestaciones clínicas y nosoló-
forma de presentarse o se mantienen estables en el tiempo. gicas de los procesos afectivos.
Otro aspecto que cabe considerar es su grado de ade- Se parte de las manifestaciones psíquicas morbosas que
cuación a las circunstancias desencadenantes y la propor- tienen un origen afectivo, es decir, aquellas que surgen de la
cionalidad frente a las mismas. holotimia o actividad afectiva de base. Cuando sea necesario,
La entrevista clínica es el marco ideal para delimitar as- este punto de vista se extenderá al resto de las esferas psicopa-
pectos como la reactividad emocional del sujeto examinado tológicas que pueden verse coloreadas por dicha holotimia.
o sintonía afectiva, es decir, su capacidad de responder afec- Este fenómeno se conoce como repercusión catatímica
tivamente ante diferentes vivencias internas o externas, así o catatimia, y es definido por Henry Ey30 como «toda acti-
como su irradiación afectiva, entendiendo por tal la capa- vidad psíquica cuyo contenido se vea transformado por un
cidad del sujeto de transmitir al examinador y a su entorno sentimiento».
más próximo su estado afectivo.
Otro dato de vital importancia en la semiología de la Humor maníaco-depresivo
afectividad y que, además, en ocasiones, añade una nota Desde que Kraepelin5 categorizara la psicosis manía-
más de objetividad a esta es la determinación de la sinto- co-depresiva, los estados anímicos de depresión y de manía
matología somática que puede acompañar al estado afectivo. —aparentemente, contrapuestos— han sido agrupados
Aspectos como el sueño (calidad, cantidad, ritmo), el ape- dentro de la misma categoría diagnóstica conocida como
tito, la sed, las variaciones ponderales, la libido o las diversas trastorno bipolar o, más exactamente, como espectro de tras-
quejas somáticas que el paciente pueda referir no deben des- tornos bipolares.
cuidarse. Interesa detallar sus características de manifesta- No obstante, cabe señalar que ambos cuadros afectivos,
ción externa, recogiéndolas en la entrevista, y someter al aunque suelen presentarse de forma aislada, pueden apare-
paciente a un examen físico y de pruebas complementarias cer conjuntamente en los llamados estados mixtos.63
pertinentes. También interesa determinar su relación tem- Si bien se ha hablado de un patrón de polaridad afectiva,
poral con el estado afectivo, señalando si le preceden, acom- manía y depresión no son estados anímicos opuestos sensu
pañan o, incluso, sobrepasan en el tiempo. stricto. Pueden considerarse independientemente como pa-
Resulta crucial la evaluación de los diferentes ritmos cir- tológicos, en contraposición a la situación de normalidad
cadianos —variación diurna y estacional del humor, ritmo afectiva o eutimia, por la cual, nos vemos libres de las ma-
vigilia-sueño, cambios en el apetito, cambios en los ritmos nifestaciones mórbidas de ambos.24
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142 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

Principales ritmos circadianos

W S W
37.5
37.0
Característica Temperatura corporal 36.5
36.0
fundamental
20
de los seres vivos
Cortisol 10

0
3
Homeostasis predictiva
Volumen de orina 2

1
5
Las funciones fisológicas TSH
4
3
2
y mentales 1
0
de los humanos
Hormona paratiroidea 25
varían según 15
32
el momento del día
Actividad motora 16
0
16 24 8 16 Horas

Figura 8-3. Características y evolución diaria de los principales ritmos circadianos humanos. TSH: tirotropina.

Humor maníaco deterioro social o laboral importante, o como para provocar


la hospitalización del individuo. Los episodios hipomaníacos
Se considera la alegría como un fenómeno normal que
surge de la interfase individuo-medio externo, y es mediada son característicos del trastorno bipolar de tipo II (hipomanía
tanto por aspectos psicológicos individuales como por fac- con o sin depresión mayor) y de la ciclotimia.64
tores biológicos relacionados con los ritmos circadianos. Entre los cambios propuestos por el grupo de trabajo
Para poder evaluar la patología de la alegría, es impor- del futuro DSM-V, se incluyen:66
tante delimitar las circunstancias relacionales en las que sur- ▪ Poder diagnosticar la hipomanía sólo de acuerdo
ge dicho estado afectivo, sus posibles causas endógenas en con un incremento de la energía y actividad, sin ne-
contraposición a un origen exógeno, sus variables psicoló- cesidad de un incremento en el ánimo ni en la irri-
gicas y biológicas, y su vinculación en mayor o menor me- tabilidad.
dida a la personalidad del individuo. ▪ Reducir el criterio temporal (establecido en 4 días
El humor maníaco o hipertímico consiste en una variante por el DSM-IV-TR) para el diagnóstico de un epi-
patológica del humor caracterizada clínicamente por una sodio hipomaníaco.
elevación del estado de ánimo o euforia, aceleración del cur-
so del pensamiento (taquipsiquia) e hiperactividad psicomo- El objetivo de tales cambios es evitar falsos negativos
triz. La manía categoriza el trastorno bipolar de tipo I (manía diagnósticos, si bien, se corre el riesgo de sobrediagnosticar
con o sin depresión mayor). el trastorno bipolar de tipo II, con las consecuencias tera-
El DSM-IV-TR64 establece un epígrafe para la ciclación péuticas derivadas (sobreprescripción de eutimizantes).67
rápida si el cambio de polaridad afectiva se produce, cuanto Para Sims,24 el término hipomanía es desafortunado;
menos, cuatro veces al año. tiende a trivializar la magnitud y relevancia de la realidad
En un grado menor, se entiende por hipomanía (al margen clínica y a equivocar el diagnóstico, con las consiguientes
de los criterios diagnósticos del DSM-IV-TR64 y la CIE-10)65 implicaciones terapéutico-pronósticas. Según este autor, al
aquellos episodios de características maniformes que no al- igual que no se utiliza el término hipodepresión, se debe
canzan la suficiente gravedad clínica como para provocar un abandonar esta terminología generadora de confusión.
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CAPÍTULO 8 Afectividad 143

TABLA 8-2. Principales instrumentos clínico-psicométricos en la evaluación de los trastornos del humor

Cuestionario Características
Escala de Depresión de Hamilton (HDRS) Evalúa la gravedad del cuadro depresivo
Heteroaplicada
Versiones de 6, 17, 21 y 24 ítems
Escala de Depresión de Montgomery-Asberg (MADRS) Evalúa la gravedad del cuadro depresivo
Heteroaplicada
10 ítems
Inventario de Depresión de Beck (BDI) Evalúa la gravedad del cuadro depresivo
Autoaplicada
Versiones de 13 y 21 ítems
Escala de Depresión de Bech-Rafaelsen (MES) Evalúa la gravedad del cuadro depresivo
Heteroaplicada
11 ítems
Escala de Depresión de Zung y Code Evalúa la gravedad del cuadro depresivo
Autoaplicada
20 ítems
Cuestionario sobre la Salud del Paciente-9 (PHQ-9) Se emeplea para el cribado y la evaluación de la gravedad de la depresión
Autoaplicada
9 ítems
Escala de Evaluación de la Distimia de Cornell (CDRS) Evalúa la gravedad de la distimia
Heteroaplicada
20 ítems
Escala de Depresión de Calgary (CDS) Evalúa la depresión en la esquizofrenia
Heteroaplicada
9 ítems
Escala de Depresión Posnatal de Edimburgo (EPDS) Evalúa la depresión posnatal
Autoaplicada
10 ítems
Escala de Depresión Geriátrica (GDS) Se emplea para el cribado de la depresión en ancianos
Autoaplicada
30 ítems
Escala de Cornell para la Depresión en la Demencia Evalúa la depresión en pacientes con demencia
(CSDD) Heteroaplicada
19 ítems
Escala Hospitalaria de Ansiedad y Depresión (HADS) Evalúa la depresión-ansiedad en el hospital
Autoaplicada
14 ítems
Escala de Anhedonia Física (PAS) Evalúa la anhedonia física
Autoaplicada
61 ítems
Cuestionario de Evaluación del Perfil Estacional (SPAQ) Evalúa los cambios de humor estacionales
Autoaplicada
324 ítems
Inventario de Depresión y Trastorno Afectivo Estacional Evalúa la depresión y la estacionalidad
(PIDS) Autoaplicada
38 ítems
Cuestionario de Trastornos del Humor (MDQ) Evalúa el trastorno bipolar
Autoplicada
13 ítems
Escala de Young para la Evaluación de la Manía (YMRS) Evalúa la intensidad de la manía
Heteroaplicada
11 ítems
Escala de Valoración de la Manía por Clínicos (CARS-M) Evalúa la intensidad de la manía y de la psicosis
Heteroaplicada
15 ítems
Escala de Manía de Bech-Rafaelsen (MAS) Evalúa la intensidad de la manía
Heteroaplicada
11 ítems
Escala Autoaplicada de Manía de Altman (ASRM) Evalúa la intensidad subjetiva de la manía
Autoaplicada
5 ítems
Listado de Síntomas de Hipomanía-32 (HCL-32) Evalúa la hipomanía en la depresión mayor
Autoaplicada
32 ítems

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144 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

Subjetivamente, el individuo maníaco se encuentra alucinatoria franca (predominantemente, auditiva), indis-


cargado de optimismo, energía vital y autoestima. Pese a tinguible de la observada en la esquizofrenia.
ello, si bien se siente diferente, mejor, más alerta, más sa- Desde un punto de vista psicodinámico, se interpreta
no y pletórico que nunca, su capacidad introspectiva está la manía como un estado de exaltación yoica, en el cual, el
disminuida, y no le permite ver la naturaleza morbosa de yo ha perdido el contrapeso del contacto con la realidad
su estado. ambiental inmediata. En la manía, reverso y, en ocasiones,
Consecuentemente, suele reaccionar con irritabilidad consecución de la melancolía, es el yo el que domina la pér-
maníaca cada vez que se trata de poner límites externos a dida del objeto. Mientras que, en la melancolía, el yo queda
su actividad sin freno, pasando rápidamente de la hilaridad sojuzgado y derrotado por el superyó, en la manía, el con-
al enfado y a la agresividad (labilidad afectiva). Si esto ocu- flicto queda negado y apartado por el yo.
rre, no son infrecuentes las ideas de tipo paranoide cuando El maníaco evidencia su emancipación del objeto que
el paciente se siente coartado en su libertad, ya que lo in- le hizo sufrir, emprendiendo con hambre voraz nuevas car-
terpreta como envidia u obstruccionismo. La irritabilidad gas libidinales sobre otros objetos. La manía es la victoria
así como la disforia son características de los llamados epi- del yo sobre el objeto, siendo el principal mecanismo de-
sodios mixtos. fensivo empleado el de negación, lo cual, a su vez, dificulta
A nivel externo, la tendencia es a la expansividad, con considerablemente el establecimiento de una adecuada con-
un curso del pensamiento acelerado (taquipsiquia), marcada ciencia de enfermedad en estos pacientes.
rapidez asociativa conocida como pensamiento tangencial o, Castilla del Pino afirma:35
incluso, ideofugitivo, incesante verborrea junto a la necesi-
«En la euforia los dos aspectos fundamentales son
dad de expresar sus ideas (presión del lenguaje), tendencia a
la hiperconciencia del Self (valorización de la per-
la distraibilidad reflejada en una alteración en la memoria
sona) y la desinhibición mediante la disminución
de fijación y cambios comportamentales que le llevan a
de las actitudes superyoicas. Como en la alegría,
mantener una actividad sin descanso, asociada a proyectos
el sujeto, poseído ahora del objeto, que es el sí-
grandiosos e infundados, gastos excesivos, escasa necesidad
mismo hipervalorado, está en plena fase de grati-
de sueño y desinhibición alejada de su carácter normal
ficación narcisista, mayor de la que fuera en los
(p. ej., una marcada hipersexualidad).
mejores momentos de sus fantasías. Ahora tales
Los déficits cognitivos son frecuentes en los pacientes
gratificaciones aparecen con categoría de reales,
afectados por un trastorno bipolar, dentro de un espectro
merced a la carencia del juicio correcto de reali-
dimensional cuyo polo extremo lo marcan las psicosis es-
dad acerca de la actividad fantástica que verifica.
quizofrénicas.68 Pese a ello, el borrador de trabajo del
La omnipotencia fantástica se vive como real y la
DSM-V no incluye la dimensión cognitiva dentro de los
actividad del sujeto entre los objetos es constante.
síntomas característicos de la manía, cosa que sí ocurre para
[...] Mediante la actividad extrema todos los ob-
la esquizofrenia.66
jetos son introyectados, nuevas relaciones se es-
Es característico que la hiperactividad y derroche de
tablecen para premiar a los otros de este gran
energía del maníaco envuelvan a otras personas, que se pue-
triunfo del Yo que es la lograda, por fin, concien-
den ver inmersas en sus proyectos megalómanos (irradia-
cia de la enorme potencia de su Self».
ción afectiva), al menos, en las primeras fases del cuadro,
antes de sucumbir al desengaño y al cansancio ante las ex- Para este autor, y del mismo modo que sucede con la de-
travagancias del paciente. presión, existen personas que ostentan la actitud eufórica más
En los cuadros maníacos, es frecuente la aparición de allá de las fases maníacas del trastorno afectivo bipolar, esto
ideas delirantes, generalmente, congruentes con el estado es, como forma de presentación estabilizada del propio self.
anímico, aunque esto no es necesario. En el primer caso, Para el psicoanálisis (como para el resto de las escuelas
los delirios suelen ser de tipo expansivo o megalomaníaco, psicológicas), la manía ha sido objeto de una menor aten-
coincidiendo la convicción delirante del individuo con un ción que la depresión. Ello se debe a que, desde el punto
estado de exaltación yoica. No obstante, sería más propio de vista de esta teoría, la manía constituye una reacción se-
que, en este caso, se hablara de formaciones deliroides y no cundaria de defensa frente a la melancolía, y es a esta última
de auténticos delirios, máxime si se entiende que las ideas a la que se han dedicado la mayor parte de los esfuerzos teó-
delirantes sí derivan de otras manifestaciones psicopatoló- ricos e interpretativos.
gicas en el momento de su presentación.27 Sin embargo, a lo largo de la historia del psicoanálisis,
En la esfera sensoperceptiva, se observa una hiperestesia, determinados autores han considerado la manía como la
o aumento de la intensidad de las percepciones, que se ha- organización psíquica más primitiva que conocemos: la po-
cen más vivas e intensas. Es como si en estos pacientes todas sición del psiquismo fetal, anterior, por lo tanto, a cualquier
las funciones psíquicas se encontraran desbocadas. De he- esfuerzo que deba realizar el yo del individuo para adaptarse
cho, en el paciente maníaco, puede aparecer una actividad a la realidad después del nacimiento.
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CAPÍTULO 8 Afectividad 145

La equiparación de los mecanismos que rigen el psiquis- propio de estos pacientes exhibir una euforia vacía de con-
mo fetal con los de la condición maníaca (omnipotencia, tenido, con alteración de los registros mnésicos e, incluso,
idealización, negación de la realidad) permite concluir que desorientación temporoespacial, fluctuación del nivel de
la manía consiste en una regresión a patrones arcaicos ante la conciencia, pobreza asociativa, perseveraciones verbales y
imposibilidad de elaborar los impactos de la realidad. motoras, y tendencia a la pasividad.
De los mecanismos citados en la manía, es la negación El humor mórico o moria es característico de las lesiones
de la realidad el más primitivo y patológico, puesto que im- del lóbulo frontal (tumores, traumatismos, accidentes ce-
pide la elaboración de las ansiedades propias de la primera rebrovasculares). Se presenta como una euforia insulsa, va-
posición tras el nacimiento (esquizoparanoide), por recha- cía y superficial, con escasa irradiación afectiva, que puede
zar los aspectos persecutorios y primar la relación con los llegar a la apatía, contacto viscoso, pegajoso, discurso per-
objetos idealizados, lo cual incrementa, además, la omni- severante y tendencia al chiste fácil y a la desinhibición
potencia. sexual, dentro de un cambio global de la personalidad y
Todo ello hace inviable un saludable pasaje a la siguiente conducta del individuo.
posición (depresiva), dando como resultado la citada regre- Ciertos trastornos de la personalidad cursan con sínto-
sión a la posición más arcaica (maníaca) o, a lo sumo, al mas que, en ocasiones, remedan cuadros hipomaníacos o,
polo opuesto, es decir, al estado melancólico en la enferme- incluso, maníacos. Este tipo de manifestaciones se pueden
dad circular o trastorno bipolar, si la realidad irrumpe abru- ver en los pacientes con un trastorno histriónico, antisocial
madoramente por el fallo de los mecanismos referidos más o límite de la personalidad (fenotipo impulsivo), concurrien-
arriba.69 do, por ejemplo, en este último, un escaso control de los
A nivel biológico, se puede encontrar en la manía una impulsos con una marcada inestabilidad emocional (pasan
alteración del patrón circadiano de origen endógeno o exó- rápidamente de la idealización de sí mismos y de quienes
geno (tóxico, infeccioso, traumático), causante de un cam- les rodean a la más absoluta desvalorización),63 que se ve
bio secundario de la disposición del individuo frente al potenciada por el consumo de sustancias tóxicas.
medio que le rodea. Akiskal70 señala que los cuadros de tipo afectivo res-
Si bien los cuadros maníacos o hipomaníacos son ca- ponden a una cierta predisposición caracterial —o, más
racterísticos de las psicosis maníaco-depresivas, pueden apa- bien, temperamental— de base genética, y apunta una
recer en otras circunstancias clínicas como en el trastorno clasificación de los diferentes temperamentos, en la que
ciclotímico, en el cual, se entremezclan elementos tempera- se incluyen el temperamento hipertímico, el distímico, el
mentales y de personalidad con una predisposición a la irritable y el ciclotímico, cada uno de los cuales predispone,
bipolaridad, alternándose característicamente episodios hi- a su vez, al desarrollo de un determinado trastorno afec-
pomaníacos junto con fases depresivas que no cumplen cri- tivo de tipo bipolar.
terios de depresión mayor. Este autor va más lejos aún al dudar de la existencia de
En la esquizofrenia, pueden aparecer síntomas de tipo los denominados pacientes límite (borderline), enmarcán-
maniforme, si bien, como datos potencialmente diferencia- dolos dentro de los trastornos del temperamento antes
les, destacan la falta de resonancia afectiva, con escasa irra- señalados, con las consiguientes implicaciones a nivel pro-
diación del afecto, menor riqueza asociativa y un curso del nóstico y terapéutico. También propone el denominado es-
pensamiento en el que, en vez de la fuga de ideas, se observa pectro bipolar, cuyas diferentes formas clínicas —que se
una auténtica disgregación de este. También suelen aparecer recogen en la tabla 8-3— suponen el 33 % de todos los
manifestaciones psicóticas no congruentes con el estado trastornos afectivos (el 50 %: trastorno depresivo mayor; el
anímico, así como actividad alucinatoria, preferentemente, 2 %: trastorno bipolar de tipo I; y el 15 %: trastorno bipo-
auditiva. lar de tipo II).71
Sin embargo, conviene destacar que, hasta en un 75 % Detractores no le faltan y, como muestra, se recomienda
de los pacientes maníacos, pueden aparecer síntomas psi- la lectura de las opiniones vertidas en el siguiente blog:
cóticos de cualquier tipo,69 incluidos los considerados sín- http://neurocritic.blogspot.com.es/2011/06/akiskal-and-
tomas schneiderianos de primer rango de la esquizofrenia,34 bipolar-spectrum.html.
como delirios no congruentes con el estado anímico y alu- Mención aparte merece el paciente psicopático, anti-
cinaciones sensoriales. Esto hace que el diagnóstico de estos social o sociópata. Este tipo de caracteriopatía, de inicio en la
pacientes sea, en principio, confuso, y deba posponerse has- adolescencia o a principios de la edad adulta, se caracteriza
ta contar con una perspectiva longitudinal y evolutiva del por alteraciones tanto en el funcionamiento emocional como
cuadro. en las relaciones interpersonales (mezclando una locuacidad
En los trastornos orgánicos cerebrales, también pueden y encanto superficiales con un marcado egocentrismo; emo-
aparecer síntomas maniformes. Diversos procesos neuroló- cionalidad vacua; pobreza en cuanto a la calidad y enten-
gicos, degenerativos, metabólicos, farmacológicos o infec- dimiento de las emociones experimentadas, como si no
ciosos pueden producir este tipo de síntomas, aunque es supieran, en realidad, el significado último de aquellas; falta
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146 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

de empatía; falta de remordimientos o de sentimientos de pañados de un humor irritable y disfórico, en niños y ado-
culpa; y tendencia a la mentira constante y, en ocasiones, lescentes.
descarada, así como a la manipulación de quienes les ro- Falta por resolver la vinculación intrínseca entre tem-
dean), con un patrón conductual en el que predominan la peramento, personalidad y trastornos afectivos, así como el
impulsividad, un deficiente control de los impulsos con concepto heterogéneo y ambiguo de depresión crónica. Por
accesos frecuentes de heteroagresividad física y verbal, ne- último, cabe la posibilidad de que existan subtipos clínicos
cesidad constante de experimentar sensaciones novedosas y subclínicos de enfermedades no incluidos en las clasifica-
y excitantes (lo cual se puede complicar con el consumo de ciones actuales, pero relevantes desde un punto de vista
tóxicos), actitudes irresponsables y centradas en la conse- epidemiológico, destacando, entre otros, la melancolía in-
cución de placeres inmediatos sin pensar en las consecuen- volutiva, la depresión atípica, la distimia subclínica, o los sub-
cias, y frecuentes actividades criminales al margen de la ley. tipos del trastorno afectivo bipolar más allá del de tipo II
Son estas conductas impulsivas —en ocasiones, llevadas al establecido por el DSM-IV-TR (Tabla 8-3).
límite— las que suelen plantear problemas de diagnóstico Dejando a un lado la nosología y volviendo al tema
diferencial con los episodios maníacos del trastorno afectivo que nos ocupa —la psicopatología—, el humor de tipo
bipolar.72 depresivo puede ser considerado como el reverso del hu-
Para concluir este apartado de diagnóstico diferencial, mor maníaco. Como él, empapa todas las esferas del fun-
se incluirá el denominado trastorno esquizoafectivo, que será cionamiento somático y psicológico, aunque, en este caso,
tratado más adelante y en el que también se pueden encon- los síntomas predominantes son los sentimientos de tris-
trar síntomas de tipo maniforme. teza, desesperanza e infelicidad, junto a una disminución
de la energía vital y un desentendimiento, en mayor o me-
Humor depresivo nor medida, del entorno.
Entre sus principales manifestaciones psicopatológicas,
Queda por delimitar la frontera real entre depresión y se encuentra la astenia o fatiga vital, con mejoría vespertina
normalidad, más aún, atendiendo a las diferencias trans- en los cuadros endógenos, fruto de una variabilidad circa-
culturales del fenómeno depresivo. Planean dudas sobre la diana no apreciable en los cuadros reactivos. La astenia se
posibilidad de encontrarnos ante un modelo dimensional presenta como una lasitud generalizada en el plano físico y
o de continuum de enfermedad, frente a un modelo cate- como una disminución de la productividad y del interés vi-
gorial. Nos enfrentamos a la dicotomía bipolaridad frente tal hacia el entorno en el plano psicológico (indiferencia
unipolaridad, así como al concepto de depresiones soma- afectiva).
tógenas, endógenas o reactivas. A este nivel, es sinónimo de la apatía o desinterés gene-
Vallejo46 enfatiza la confusión existente tanto en el ralizado. Apatía deriva del griego apatheia y, junto con la
DSM-IV-TR64 como en la CIE-1065 (no resuelta en el bo-
rrador de trabajo del DSM-V) a la hora de delimitar los
conceptos de depresión mayor y distimia, atendiendo a su TABLA 8-3. Espectro bipolar más allá del trastorno
solapamiento clínico, evolutivo y de respuesta al tratamien- bipolar de tipo II según Akiskal71
to, así como a su inestabilidad diagnóstica en seguimientos Modalidad
Características clínicas
a medio y largo plazo. De hecho, no es infrecuente que pa- bipolar
cientes con un trastorno depresivo mayor no consigan una Bipolar ¼ Episodios depresivos con rápida respuesta a antide-
adecuada remisión clínica interepisódica, entrando en el te- presivos, no sostenida

rreno de la distimia, como antesala de un nuevo episodio Bipolar ½ Trastorno esquizobipolar: síntomas positivos de psi-
depresivo mayor. Esta forma de depresión se conoce como cosis con episodios maníacos, hipomaníacos y de-
depresión doble. presivos

Para este autor, existe suficiente evidencia clínica para Bipolar I ½ Episodios hipomaníacos sin episodios depresivos
mantener la melancolía (depresión endógena) como eje de
los trastornos depresivos, frente a otras categorías que in- Bipolar II ½ Episodios depresivos con temperamento ciclotímico

cluyen la distimia y el trastorno depresivo mayor no me- Bipolar III Episodios depresivos con hipomanía inducida por
lancólico (depresión reactiva, neurótica o caracteriopática). antidepresivos
Por su parte, el grupo de trabajo del DSM-V66 propone
Bipolar III ½ Episodios depresivos con hipomanía inducida por el
la inclusión de una especificación si el trastorno depresivo consumo de tóxicos
mayor obedece a una reacción de duelo o a otras reaccio-
nes ante una pérdida. También propone la inclusión de Bipolar IV Episodios depresivos con temperamento hipertímico

un nuevo trastorno de desregulación disruptiva del humor, Bipolar V Depresión con hipomanía mixta
diagnosticable entre los 6 y los 18 años, que vendría a dar
una cobertura nosológica a los raptus de agresividad acom- Bipolar VI Bipolaridad en el contexto de una demencia

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CAPÍTULO 8 Afectividad 147

ataraxia (desinterés), ayudaba a los sabios griegos a ponerse sintomatología somática (disminución de la libido, ameno-
a salvo de la tiranía de las cosas:10 rrea, alteración del sueño, sequedad de boca, estreñimien-
to), en general, trasluce un estado de abatimiento vital
«Si el deseo te esclaviza, es mejor no desear. Es
generalizado.
mejor no verse perturbado ni por la posesión ni
En casos de extrema ansiedad, el individuo puede llegar
por la carencia».
a experimentar fenómenos que afecten a la propia concien-
La apatía es uno de los síntomas habituales de los pro- cia del yo, expresados en forma de despersonalización y de
cesos depresivos,73 como lo es la anhedonia,27 que puede desrealización.
aparecer tanto en los trastornos depresivos como en las Conviene considerar la presencia o ausencia de factores
formas negativas de la esquizofrenia, aunque con ciertas orgánicos asociados a dicha ansiedad, así como analizar la
diferencias cualitativas. Se manifiesta en forma de incapa- sintomatología somática concomitante, incluyendo la rela-
cidad de experimentar placer en circunstancias que con ción del cuadro con los llamados relojes biológicos o ritmos
anterioridad sí lo procuraban y, desde una óptica cogniti- circadianos, que orientarían hacia un origen endógeno de
vista, refleja un bloqueo de la capacidad de recompensa este. También deben tenerse en cuenta la situación psico-
ante estímulos habitualmente positivos y reforzantes, de social del individuo, buscando posibles estresores externos,
modo que la incapacidad de conseguir placer priva del y la personalidad premórbida.
deseo de realizar las actividades que son recompensadas Se habrán de considerar las alteraciones de tipo neuro-
socialmente, llevando al sujeto al aislamiento o a la im- vegetativo, incluyendo el apetito y el estado ponderal, el
productividad. sueño, la variación diurna o estacional de los síntomas y
A nivel social, el individuo se presenta aislado, menos el funcionamiento en la esfera sexual. Es frecuente la hiporexia
comunicativo y, generalmente, más irritable. Sus propias asociada a un aplanamiento de la capacidad discriminatoria
vivencias le llevan a aislarse de forma progresiva de los que olfativa y gustativa, a un menor disfrute de la comida y a
le rodean.74 un adelgazamiento significativo.
El paciente depresivo, más allá de su ánimo triste y de En el lado opuesto, se encuentran los pacientes que ma-
su astenia, apatía y anhedonia, suele presentar una destaca- nifiestan una hiperorexia con ganancia ponderal, reflejo de
da tendencia al llanto, tanto espontáneo como inducido, al un incremento de la ansiedad asociada a manifestaciones
tiempo que la reactividad emocional se encuentra habitual- atípicas del cuadro depresivo.
mente disminuida, llegando, en casos extremos, a la inhi- El insomnio suele ser de tercera y cuarta fases con des-
bición emocional completa o anestesia afectiva. pertar precoz, excepción hecha de aquellos cuadros en los
En el terreno psicomotor, es frecuente la inhibición, que cuales predomina la hipersomnia diurna asociada a insom-
aparece tanto en la expresividad facial (facies hipomímica) nio de conciliación a expensas de un incremento en la ac-
como en el lenguaje (bradifasia) y en los movimientos, y tividad ansiosa.
que ayuda a reforzar el sentimiento de incapacidad y de des- También se encuentran alteraciones en el patrón elec-
valimiento del paciente. En ocasiones extremas, el indivi- troencefalográfico del sueño, la regulación de la tempera-
duo puede aparecer perplejo, manifestando alteraciones tura corporal y los ritmos de liberación del cortisol (Fig. 8-3).
parciales de la conciencia al margen del cuadro motor. El trastorno depresivo mayor predomina en otoño e in-
Existen, sin embargo, formas agitadas de depresión en vierno en relación con las variaciones fotolumínicas, con
las cuales destaca, además del cuadro de intensa agitación fases hipomaníacas en primavera en aquellos casos de ten-
psicomotriz, un estado anímico de tipo disfórico, caracte- dencia a la bipolaridad. También existe un patrón de tipo
rizado por irritabilidad y predisposición al enfado, con fre- depresivo característico de la estación estival, en el cual, el
cuentes accesos de tipo colérico. Se suelen ver en pacientes factor precipitante es la elevación de la temperatura.
ancianos (depresión involutiva), en ocasiones, con un com- Por último, estos pacientes manifiestan una disminu-
ponente estacional asociado, y en el trastorno del control ción del deseo sexual, además de ciertos períodos de ame-
de impulsos, pacientes epilépticos, trastorno orgánico ce- norrea en la mujer y de disfunción sexual eréctil en el
rebral y pacientes con un trastorno antisocial de la perso- hombre, siendo excepcionales los casos de hipersexualidad
nalidad y consumo de tóxicos. También pueden presentarse compulsiva en pacientes con otros síntomas atípicos de
estas formas agitadas en la manía mixta (manía disfórica) depresión, o bien en pacientes bipolares.
asociadas a un componente bipolar, y en la depresión psicó- En el paciente deprimido, la capacidad de atención es
tica, donde se alternan momentos de intenso enlenteci- escasa y, generalmente, dirigida hacia uno mismo, motivo
miento psicomotor con otros de extrema agitación. por el cual se observan alteraciones mnésicas (principalmen-
A través de la angustia somática y de su cortejo neuro- te, en la memoria de fijación), que dificultan considerable-
vegetativo (monoaminérgico) acompañante, determina la mente la toma de decisiones prácticas y el funcionamiento
aparición de diferentes molestias físicas (dolor precordial, social del individuo. Si, a ello, se une la escasa colaboración
dificultad respiratoria, cefalea tensional, etc.). El resto de la del paciente en las pruebas de evaluación cognitiva, puede
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148 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

dar lugar a un cuadro conocido como seudodemencia depre- Castilla del Pino76 destaca cómo la vivencia de culpa del
siva. individuo deprimido modifica su experiencia del tiempo:
El curso del pensamiento se enlentece (bradipsiquia), «Cuando estamos apesadumbrados el peso de los
predominando un lenguaje parco y, en ocasiones, monosi- contenidos que nos preocupan lentifica la con-
lábico, que refleja un empobrecimiento en la capacidad aso- ciencia del tiempo. El tiempo tiene entonces un
ciativa y una tendencia a la perseveración en sus cogniciones transcurrir despacioso. En la vivencia de culpa el
negativas. presente se dilata por la reiteración de los idénti-
Aproximadamente el 15 % de los trastornos depresivos cos contenidos. Si la preocupación es más inten-
mayores graves o melancólicos presentan síntomas de tipo sa, no es ya el presente el que se dilata, sino el
psicótico. La falta de especificidad en cuanto a los hallazgos pasado. El culpable vive entonces para el pasado,
de tipo neurobiológico, cognitivo, familiar y de respuesta no preocupándole entonces sino lo que hubiera
al tratamiento ha llevado a considerar los síntomas psicóti- podido ser si hubiera hecho lo debido. Pesadum-
cos dentro del trastorno depresivo mayor como un dato de bre, angustia, preocupación, conciencia falsa o real
intensidad o de gravedad, y no como un subtipo específico de la culpa, lentificación de la experiencia del tiem-
de depresión. Además, pueden encontrarse en un mismo po, son componentes de la vivencia de culpa».
paciente combinaciones de diferentes temáticas deliroides.
De acuerdo con Schneider,32,33 la ideación delirante (de- Para Minkowski:77
liroide) en la depresión puede resultar congruente con el «El vacío nuclear o humor desvitalizado propio
estado anímico decaído, afectando de tal forma a las cuatro de la melancolía no se debe a la tristeza sino a una
inseguridades básicas del ser humano (finanzas, salud, va- alteración en la vivencia del tiempo, a una desin-
lores morales y relaciones interpersonales), o bien pueden cronización con el tiempo exterior».
aparecer síntomas psicóticos incongruentes con el estado
anímico o síntomas schneiderianos de primer rango (como las De este modo, existiría una relación entre la inhibición
ideas delirantes de tipo persecutorio) indistinguibles de los del pensamiento, la inhibición motora y la vivencia retar-
observados en otros procesos como la esquizofrenia y que, dada del tiempo.
sin embargo, no deben desorientarnos del cuadro depresivo La hipocondría es el temor con insuficiente fundamento
al cual nos enfrentamos. objetivo, la sospecha, la suposición de estar o de ir a estar
Son frecuentes los autorreproches y los sentimientos de enfermo (nosofobia). La hipocondría expresada en forma de
culpabilidad y de indignidad, que, en ocasiones, alcanzan temor a padecer diversas enfermedades deriva de un estado
proporciones deliroides. También son frecuentes las ideas de autobservación y de preocupación por las funciones cor-
deliroides de ruina, de impotencia o de incapacidad, los te- porales normales, a las que se sobredimensiona hasta el
mores hipocondríacos y el sentimiento de falta de senti- punto de alcanzar proporciones deliroides.
mientos, que, para algunos autores, es un síntoma nuclear El delirio hipocondríaco es típico de las depresiones psi-
de las depresiones, y del que Jaspers31 refiere: cóticas y de la esquizofrenia, aunque formas menores de hi-
pocondría son características de los estados de ansiedad y
«Es la vivencia de no tener sentimientos, de pre- de angustia (en los cuales, las funciones corporales de alerta
sentación en depresivos y en el comienzo de todos y defensivas se encuentran exacerbadas por la activación
los procesos». neurovegetativa), así como de los síndromes depresivos. En
No se trata de una apatía, sino de un torturante sentir ocasiones, la hipocondría puede aparecer en pacientes neu-
un no sentir. Los enfermos sufren enormemente bajo ese róticos con características telefrénicas, esto es, orientada ha-
vacío del sentimiento subjetivamente sentido. Para Jaspers, cia una finalidad, hacia un beneficio secundario, o con el
este sentimiento no es privativo de los cuadros depresivos, objetivo de despertar compasión hacia el propio sufrimien-
sino que también puede aparecer en las formas de inicio de to y de captar la atención de los que nos rodean.28
la esquizofrenia. En casos extremos, se pueden ver síntomas deliroides
A propósito de las ideas de culpa, Grinberg75 apunta: compatibles con el delirio de negación de Cotard (delirio ni-
hilista), en el cual, se observan ideas referentes al propio
«Los sentimientos de culpa constituyen la expre- cuerpo o mente, por las que el individuo llega a pensar, bien
sión final de la eterna lucha entre las tendencias que no existe, bien que se encuentra vacío por dentro, sin
de vida (Eros) y algunas de las expresiones del ins- vísceras. Este delirio es característico de las depresiones psi-
tinto de muerte (Tánatos)». cóticas, de la melancolía involutiva y de la esquizofrenia.
Este autor postula la existencia de dos tipos fundamen- Atendiendo a la percepción, para el paciente deprimido,
tales de sentimientos culposos: los de culpa persecutoria, re- todo aparece gris, marchito, falto de vida. Como se ha se-
lacionados con el instinto de muerte, y los de culpa ñalado con anterioridad, el propio enfermo se siente desvi-
depresiva, que él relaciona con el instinto de vida. talizado e irreal (despersonalizado), y lo que le rodea puede
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CAPÍTULO 8 Afectividad 149

aparecérsele del mismo modo (desrealización) debido a la Si bien el decaimiento anímico o la tristeza son fenó-
ansiedad acompañante. menos frecuentes en la vida de un individuo, y de caracte-
Esta alteración de las vivencias perceptivas puede afectar rísticas reactivas a situaciones externas, su intensidad,
a todas las esferas sensoriales. Así, no es raro que en la me- proporcionalidad respecto al supuesto factor causal, persis-
lancolía grave existan seudoalucinaciones o ilusiones ópticas tencia y repercusión en el comportamiento para consigo y
(p. ej., se ven) sombras representando la figura de la muerte, para con los demás pueden determinar que se las considere
del diablo, etc.) y, menos frecuentemente, alucinaciones vi- patológicas y, como tales, constituyentes de una enfermedad
suales verdaderas. También pueden aparecer alucinaciones más o menos grave (depresión menor, reactiva o neurótica
olfativas (p. ej., olor a putrefacción) o auditivas (hasta en frente a depresión mayor, endógena, vital o melancólica).
un 50 % de las depresiones psicóticas), que, en general, van Alonso Fernández38 diferencia las depresiones reactivas
unidas a ideas deliroides de culpa.28 (en contraposición a las endógenas) como aquellos senti-
La autoestima del paciente depresivo suele aparecer dis- mientos psíquicos en los que faltan las notas propias de la
minuida de forma casi invariable y catastrófica, lo cual, unido tristeza vital (inhibición, anestesia afectiva, ideas de culpa),
a todo lo anterior, suele llevar al individuo con frecuencia a y aparecen criterios compatibles con una reacción vivencial
presentar ideas, rumiaciones e impulsos suicidas que condu- anormal, como son engarce y curso paralelo a una vivencia
cen a gestos suicidas o, incluso, al suicidio consumado. Entre desencadenante, y un contenido correspondiente a ella.
un 10 y un 15 % de los pacientes con una depresión mayor Para Alonso Fernández, las depresiones endógenas (depre-
cometen suicidio y aproximadamente dos tercios del total sión vital) se caracterizarían por ser un sentimiento doble,
presentan una franca ideación suicida.78 vital y sensorial, asociado a la inhibición vital, anestesia
Algunos autores prefieren utilizar el término melancolía afectiva e ideas de culpa, que aparecen de forma autónoma
(etimológicamente, «bilis negra»)5 al de depresión mayor, re- y no obedecen, por lo tanto, a los requisitos que rigen la
servando este último para el diagnóstico clínico de aquel reacción vivencial. Cabe señalar que este autor utiliza la di-
proceso afectivo caracterizado por un estado anímico de to- visión que hace Scheler de los sentimientos (sensoriales, psí-
nalidad triste o sombría, asumiendo que, en algunas de- quicos, vitales y espirituales).
presiones, el paciente puede aparecer irritable y con Son varios autores los que hablan de una cristalización
sintomatología somática dominante, sin llegar a verbalizar (López Ibor), o bien, de una vitalización (Stahelin) de los
clínica depresiva propiamente dicha (depressio sine depres- cuadros depresivos reactivos (neurotiformes) cada vez más
sione, depresión enmascarada o depresión sonriente). hacia lo endógeno si se les da el tiempo suficiente para ver
Sin embargo, el DSM-IV-TR64 prefiere reservar el tér- su evolución.
mino melancolía (íntimamente relacionado con las ideas de En palabras de Alonso Fernández:38
culpa, anhedonia, disfunción neurovegetativa y de los bio- «Toda tristeza psíquica de cierta intensidad y per-
rritmos, alteraciones de tipo psicomotriz) para describir uno sistencia se vitaliza, inexorablemente».
de los criterios de gravedad del trastorno depresivo mayor,
Lo que, en principio, se origina como una reacción ante
postergando cada vez más la melancolía como entidad clí-
un suceso traumatizante, poco a poco, se va separando de
nica independiente.
este en cuanto a su contenido, curso y finalización, evolu-
La American Psychiatric Association (APA) equipara los
cionando de forma independiente.27
términos melancolía y endogeneidad, en contraposición a la
Bulbena8 destaca que la escasez de estudios y de atención
depresión reactiva o neurótica. La Organización Mundial
dedicados a la alegría normal y patológica contrasta con el
de la Salud (OMS) establece su propia equivalencia al iden-
amplio abanico de datos y de teorías disponibles en referencia
tificar la melancolía (depresión endógena) con el síndrome
a la tristeza. Así, desde el punto de vista psicológico, diversas
somático que puede acompañar a los episodios depresivos,
escuelas han aportado su punto de vista sobre la depresión.
y que incluye una mezcla de anhedonia, falta de reactividad
El psicoanálisis, por ejemplo, se centra en los conceptos
emocional, insomnio con despertar precoz, mejoría vesper-
de pérdida (real o simbólica) y de duelo para explicar la clí-
tina del humor depresivo, inhibición o agitación psicomotriz,
nica depresiva. En el duelo no complicado y tras dicha pér-
hiporexia con pérdida significativa de peso y disminución de
dida, aparece un estado de shock y de confusión, de sensación
la libido.
de vacío cercana al sentimiento de despersonalización. Pos-
Conviene recordar la opinión de Freud:79
teriormente, hay una tendencia a la negación de lo ocurri-
«La melancolía, cuyo concepto no ha sido aún fi- do, para continuar con un sentimiento de rabia y de
jamente determinado, ni siquiera en la psiquiatría búsqueda ansiosa del objeto perdido o de un sustituto de
descriptiva, muestra diversas formas clínicas, a las este. Cuando finalmente se acepta la pérdida como una
que no se ha logrado reducir todavía a una unidad, realidad irreparable, aparece la depresión como afecto fi-
y entre las cuales hay algunas que recuerdan más a nal vinculado a ella. El paciente depresivo hace propios
las afecciones somáticas que a las psicógenas». los sucesos de la pérdida ocurridos en el exterior y los in-
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150 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

terioriza con importante dolor psíquico y con un senti- las mismas deriva de que son fijaciones preedípi-
miento de infelicidad. cas y edípicas, y ellas son las que determinan el
La disforia o malestar psíquico asociada a la experiencia tipo de relaciones pulsionales (relaciones objeta-
de pérdida se exacerba si hay un sentimiento de culpa o les). Ahora bien, la conciencia de Sí-mismo, el
autorreproche vinculado a las circunstancias de tal aconte- grado de valoración del Self de cada cuál está en
cimiento. función de estas relaciones objetales iniciales: a
Para Freud:79 mayor gratificación de las mismas, obviamente el
«El melancólico muestra una extraordinaria dismi- Self infantil se exalta y se autoaprecia, puesto que
nución de su amor propio, o sea, un considerable posee un objeto asimismo valioso (hipervalorado,
empobrecimiento de su Yo. En el duelo, el mundo además). Cuando a través del decurso de la exis-
aparece desierto y empobrecido ante los ojos del su- tencia el sujeto adquiere la conciencia de su in-
jeto. En la melancolía es el Yo el que ofrece estos capacidad para reiterar nuevas relaciones de
rasgos a la consideración del paciente. Este nos des- objeto de idéntico tipo, o para continuar con las
cribe su Yo como indigno de toda estimación, in- mismas, sobreviene una crisis del Self, a través de
capaz de rendimiento valioso alguno y moralmente la cual el sujeto es profundamente herido en su
condenable. Se dirige amargos reproches, se insulta narcisismo, se rechaza, se inacepta, se desprecia,
y espera la repulsa y el castigo. [...] El cuadro de este y automáticamente considera que los demás de-
delirio de empequeñecimiento (principalmente ben de hacer lo propio con él. El objeto perdido
moral) se completa con insomnio, rechazo a ali- es pues él mismo y de este modo las posibilidades
mentarse y un sojuzgamiento del instinto que fuer- de autoaniquilación son inmediatas».
za a todo lo animado a mantenerse en vida». En todo melancólico, hay un comportamiento agresivo
Desde el punto de vista descriptivo, Freud sólo encontró que se pone de manifiesto no sólo en la consideración de
diferencias entre la pena y la melancolía en la depreciación las instancias suicidas, sino también en su relación con los
del yo propia del sujeto melancólico. Para los psiquiatras y demás. Muchos melancólicos agreden a quienes les rodean
psicopatólogos clásicos, la tristeza del melancólico arranca mediante su misma actitud, encontrando en ellos una res-
de un plano más profundo que la del afligido por la pér- puesta en forma de irritación y de repulsa. Esto, a su vez,
dida de un ser amado (duelo) y la inhibición característica confirma en el melancólico la sensación de rechazo y de in-
de los denominados sentimientos vitales. capacidad para ser amado, anticipada mediante la previa
Sin embargo, para Castilla del Pino:35 depreciación de su self, cerrándose, de este modo, el círculo
«Todo esto procede de que el propio paciente no profético que confirma la consecución de los más negros
encuentra motivo alguno para su melancolía, y augurios.
cuando lo refiere es de tal modo impropio que Según Castilla del Pino, la melancolía presenta dos for-
no parece procedente concederle veracidad en es- mas de resolución:35
te extremo. Se trata de distorsiones, cuando me- ▪ La aceptación resignada del nuevo estatus del self
nos en la apariencia, de la realidad tanto externa mediante la coartación del horizonte de expectati-
como de sí mismo». vas, dejando de aspirar a mucho de cuanto se anhe-
Freud llegó a la conclusión de que, en el melancólico, laba, contentándose con los logros obtenidos, y
al igual que en el duelo, también existe una pérdida del ob- recortando las aspiraciones narcisistas iniciales (evi-
jeto amado, pero, en lugar de retraerse de momento la fija- tando, con ello, el riesgo de nuevas frustraciones).
ción afectivo-libidinal y proyectarse luego sobre otro objeto ▪ O bien, negando la falta de aceptación del self que
como en la pena, en la melancolía, el sujeto se identifica se le procura. El sujeto niega la realidad de la depre-
con el objeto perdido y, entonces, resulta que la pérdida del ciación del self y la sustituye por la imagen inversa:
objeto deviene en una pérdida del propio yo. En Freud, no el self es hipervalorado y el sujeto se encuentra «su-
existe una distinción entre el yo y el sí-mismo. La conse- persatisfecho» de sí mismo, fantásticamente omni-
cuencia de ello es que, unas veces, yo representa una parte potente y, por lo tanto, eufórico. Entramos en el
del aparato psíquico, la que contacta con la realidad, y otras, territorio de la manía.
la totalidad del mismo, concebida como sujeto funcionan- Desde la óptica cognitivo-conductual, se apunta el valor
te, lo que se denomina self.35 de la impotencia o del reconocimiento por parte del indi-
Siguiendo esta línea de argumentación de Castilla del viduo de que, haga lo que haga, no podrá cambiar su situa-
Pino: ción actual negativa, con lo cual, pierde toda convicción de
«Desde mi punto de vista el melancólico ha teni- eficacia personal frente al medio, así como ante la capacidad
do intensas fijaciones afectivas. La intensidad de de ser recompensado en el futuro. Esto se ve apuntalado
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CAPÍTULO 8 Afectividad 151

por un refuerzo insuficiente e inapropiado de los compor- terapéuticos, es importante reparar en que síntomas de todos
tamientos considerados positivos. ellos pueden aparecer conjuntamente en los llamados estados
Beck80 presupone que el afecto depresivo deriva de la mixtos del trastorno afectivo bipolar, manía mixta o manía dis-
valoración negativa que el individuo hace de su experiencia fórica, donde concurren criterios diagnósticos tanto para un
actual (generalmente, una pérdida en el ámbito personal), episodio maníaco como para un episodio depresivo mayor.
lo cual determina secundariamente sus sentimientos y for- En los estados mixtos, que suponen un 10-20 % del to-
mas de actuación futuras. En la tristeza patológica o depre- tal de los episodios maníacos, el paciente aparece afectado
sión, existe de forma latente una configuración cognitiva por un cuadro de inquietud psicomotriz, tendencia a la hi-
anormal llamada tríada cognitiva negativa. peractividad, verborrea, taquipsiquia y taquifasia, insomnio
Así, como consecuencia de sus abrumadoras interpre- de todas las fases, disforia (etimológicamente, malestar, que
taciones negativas de los hechos acaecidos y basándose en incluye un componente psicológico y otro somático en for-
modelos de experiencia previos de tipo depresógeno (esta- ma de angustia e inquietud psicomotriz), ansiedad con o
blecidos en las primeras etapas de la vida), el individuo ex- sin episodios de pánico, suspicacia, irritabilidad, aires de
perimenta desánimo y tristeza, y se instala en una conducta frustración y reproche (manía iracunda), labilidad afectiva,
desadaptativa que caracteriza la depresión. rumiaciones obsesivoides de culpa y de ruina, así como
En el ámbito clínico, el humor depresivo, tal y como ideas de muerte y de suicidio asociadas a un incremento de
se ha descrito en este apartado, es característico de dos en- la impulsividad.63
tidades nosológicas: el trastorno depresivo unipolar y la fase Todos estos síntomas pueden presentarse combinados
depresiva de los trastornos bipolares (depresión bipolar). de forma diversa, tanto en el desarrollo de un episodio ma-
En ambos cuadros, el origen del proceso depresivo es en- níaco como en la depresión ansiosa o depresión agitada, mo-
dógeno, aunque también pueden aparecer precipitantes tivo por el cual el diagnóstico diferencial entre ambos
externos. cuadros resulta difícil.
En cuanto al diagnóstico diferencial, hay que considerar Al margen de su interés psicopatológico, los cuadros
los trastornos cerebrales orgánicos, que suelen cursar carac- mixtos, al igual que las denominadas psicosis esquizoafec-
terísticamente con alteración del nivel de conciencia y de tivas, generan un acalorado debate en la literatura psiquiá-
la orientación, así como con escasa resonancia e irradiación trica, al tiempo que suponen un reto de futuro desde el
afectiva por parte del paciente. punto de vista nosológico (estabilidad diagnóstica), tera-
En los trastornos de la personalidad (histriónico, border- péutico y pronóstico.
line, antisocial), suelen aparecer desencadenantes externos
que orientan hacia una base reactiva del cuadro, siendo poco Psicosis esquizoafectivas
frecuentes (al menos, de inicio) los síntomas melancólicos.
Desde la introducción del término psicosis esquizoafec-
Conviene tener presente que la histeria, en el fondo, es
tiva81 por Kasanin para englobar aquellos trastornos clínicos
una forma más o menos adaptativa de relación, y esto mis-
ubicados a medio camino entre la esquizofrenia y los tras-
mo es aplicable para el resto de trastornos de la personali-
tornos bipolares, mucho se ha debatido en torno a la exis-
dad, de modo que, cuanto mayor sea el choque entre las
tencia o no de una tercera vía de las psicosis funcionales.
expectativas del paciente (derivadas de su propia estructura
Se ha especulado con la posibilidad de una mayor fre-
caracterial y de personalidad) y la realidad circundante, ma-
cuencia de aparición de síntomas psicóticos no congruentes
yor será la probabilidad de encontrar complicaciones psi-
con el estado anímico en el trastorno esquizoafectivo. En
copatológicas del tipo ansiedad o depresión.
la actualidad, se acepta que dichos síntomas, junto con un
Cabe señalar en este apartado el mal uso que a nuestro
inicio precoz, insidioso y sin desencadenante aparente del
entender hacen las clasificaciones diagnósticas actuales del
cuadro, una historia de desajuste social premórbido, la apa-
término distimia (v. más adelante), al referirse a formas de-
rición de síntomas psicóticos negativos y antecedentes fa-
presivas cronificadas, de larga evolución y que inciden sobre
miliares de esquizofrenia, son datos de peor pronóstico
bases de personalidad neurotiformes.
clínico, sin poder afirmar que ninguno de ellos sea especí-
Por último, conviene no descuidarse, ya que comporta-
fico de este proceso.81
mientos marcadamente histriónicos o desadaptativos pueden
Para otros autores,24 la existencia de un diagnóstico clí-
enmascarar síntomas verdaderamente depresivos, dificultando
nico cuidadoso contrastado con una perspectiva tanto
y retardando su adecuado diagnóstico y tratamiento.
transversal como longitudinal del paciente decantaría el
diagnóstico hacia uno de los dos cuadros principales antes
Estados mixtos mencionados.
Aunque los trastornos bipolares y los trastornos depre- Sin embargo, y pese a todo, se observan a veces casos
sivos unipolares se categorizan y estudian de forma separada, de difícil categorización, que incluirían alguna de las si-
atendiendo a criterios clínicos, biológicos, epidemiológicos y guientes posibilidades:
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152 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

▪ Pacientes con un primer episodio psicótico diagnos- a la conciencia (peligro simbólico). Esta ansiedad es
ticado de psicosis esquizofrénica que, en segunda la que pone en marcha los mecanismos de defensa
instancia, padecen un episodio catalogado de psico- del yo.
sis afectiva. ▪ Ansiedad primaria: automática; aparece frente a una
▪ Pacientes diagnosticados de psicosis maníaco-depre- situación de amenaza o de peligro exterior (peligro
siva que, posteriormente, desarrollan un cuadro de real).
características esquizofrénicas. La teoría conductista habla de conductas inapropiadas
▪ Pacientes que simultáneamente presentan síntomas aprendidas que motivan respuestas de tipo ensayo-error, y
que pueden ser catalogados de esquizofrenia y de de cómo modificar dichos comportamientos para disminuir
psicosis maníaco-depresiva. la ansiedad. El interés de esta teoría es más terapéutico que
▪ Y pacientes en los cuales no es posible establecer de psicogenético, especialmente, en el terreno de las fobias o
forma nítida los límites entre síntomas esquizofré- conductas de evitación; más aún, si se añaden elementos de
nicos y síntomas afectivos de tipo bipolar. la teoría cognitiva que incluyen la utilización de diferentes
Con los datos recogidos hasta la fecha, lo que sí parece técnicas como los autorregistros y la desensibilización sis-
claro es que los trastornos esquizoafectivos, bien sean de ti- temática.
po bipolar, bien de tipo depresivo, no son fruto de la con- El paciente ansioso se presenta en la clínica tenso, ex-
currencia en un mismo paciente de una esquizofrenia y de pectante, inseguro, un individuo con la sensación de que
un trastorno bipolar.81 algo malo va a ocurrir, con temor a morir, a enloquecer o,
El diagnóstico se debe establecer tras un exhaustivo aná- en muchos casos, invadido por un temor sin contenido, un
lisis fenomenológico de los síntomas presentes durante las temor ante la nada. Su capacidad de atención, de concen-
crisis (perspectiva transversal), así como un seguimiento tración y la memoria de fijación se encuentran disminuidas,
al igual que la actividad sensoperceptiva (estrechamiento sen-
longitudinal y biográfico del paciente, al tiempo que espe-
sorial). La atención aparece centrada en esta tensa espera
ramos a que futuras áreas de investigación arrojen nueva
ansiosa, y el paciente es incapaz de depositarla en otros as-
luz sobre este controvertido asunto.
pectos de la realidad interna y externa.
Como manifestaciones físicas, se observa una sensación
Humor ansioso
de «nudo en el estómago y en la garganta», taquicardia,
La ansiedad alude al componente psicológico de una opresión torácica supraesternal, dificultad respiratoria, sen-
emoción, mientras que la angustia hace referencia al com- sación de estar como «flotando», debilidad en las piernas y
ponente somático de esta, a su componente visceral. síntomas vegetativos: sequedad de boca, temblor, sudora-
La ansiedad puede ser considerada en una doble ver- ción, taquicardia, polaquiuria, defecación involuntaria y,
tiente: en casos extremos (ataques de pánico), sentimientos de des-
personalización y desrealización.
▪ La ansiedad-estado es la cualidad de encontrarse ansio-
Cabe diferenciar tres fuentes de ansiedad:
so en un momento concreto, definido, en respuesta a
circunstancias estimulantes y determinantes que, en ▪ Ansiedad normal: el organismo se defiende ante un
principio, la justifican (aunque no necesariamente). estímulo amenazante real. Es adaptativa, siempre y
▪ La ansiedad-rasgo (personalidad ansiosa) alude a una cuando el nivel de angustia no sea desproporcionado
tendencia sostenida en el tiempo de enfrentarnos a y no disminuya la capacidad de respuesta del indi-
las vicisitudes existenciales con un excesivo grado de viduo.
ansiedad, lo cual tiene que ver con variables predis- Incluye la angustia existencial, fuente creativa para
ponentes vinculadas al carácter y al temperamento. autores de la talla de Unamuno,82 Zubiri,83 Hei-
En estos pacientes, la ansiedad no suele relacionarse degger84 o Pessoa,85 entre otros.
con desencadenantes específicos, es anobjetal desde ▪ Ansiedad neurótica: la fuente ansiosa es un peligro
el punto de vista consciente, y recibe el apelativo de psíquico inconsciente, desconocido para el yo, que
ansiedad libre o flotante. moviliza una serie de mecanismos defensivos que fue-
ron útiles en etapas iniciales del desarrollo, pero que,
Desde el punto de vista psicoanalítico, Freud vinculó la
en la vida adulta, se encuentran desfasados y pueden
ansiedad, inicialmente, con la represión libidinal; luego, con
generar síntomas neuróticos.
el trauma del nacimiento; y, finalmente, con la respuesta del
El rasgo nuclear de la personalidad neurótica es la in-
yo ante incrementos de la tensión instintiva. Esta última pro-
seguridad respecto de la propia identidad del indi-
puesta, reconoce la existencia de dos tipos de ansiedad:
viduo, su self. La ansiedad encarna el pánico del
▪ Ansiedad señal: movilización defensiva del yo ante sujeto ante la posibilidad de dejar de existir, y alcan-
las pulsiones inconscientes y su presión por aflorar za su máxima expresión en la ansiedad psicótica.
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CAPÍTULO 8 Afectividad 153

Castilla del Pino35 define la crisis del self como: ñas), la eritrofobia (temor a la sangre) y, en casos extre-
«Un derrumbe en la identidad tras el cual mos, la pantofobia o temor fóbico indiscriminado.
sobreviene una etapa de vacío y la escalada
El DSM-V incluye una propuesta de revisión del crite-
hacia una nueva forma de identidad en oca-
rio temporal para el diagnóstico de las fobias, actualmente,
siones; otras, la marginación en sus diferen-
establecido en seis meses.66
tes aspectos. La privación de relaciones
Cuando una persona sufre una fobia, esta puede llegar
eróticas, el aislamiento de relaciones de amis-
a imponerse sobre la mayoría de sus actividades. Al igual
tad y sociales, fenómenos todos ellos de pri-
que las obsesiones, con las que a menudo se relacionan, las
vación afectiva».
fobias son repetitivas, siendo extremadamente difícil resis-
La crisis del self depara una frustración existencial
tirse a ellas con éxito. Si bien son percibidas como irracio-
reflejada en todas las áreas de funcionamiento del
nales, surgen del interior de la propia persona y se imponen
individuo. El temor a la crisis del self produce an-
a su voluntad.
gustia, sobre todo, ante la posibilidad de que sobre-
Algunos autores las denominan temores obsesivos y, con
venga la privación de relaciones en las que hemos
frecuencia, se pueden encontrar conductas evitativas de tipo
fundamentado nuestra propia identidad.
compulsivo asociadas a ellas. Debido al mecanismo defen-
▪ Por último, encontramos la ansiedad psicótica: el te-
sivo involucrado en el origen de las fobias, el desplazamien-
mor es más primitivo y se centra en el miedo a la di-
to, es típico que, con el paso del tiempo, puedan extenderse
solución del yo, de su cohesión e identidad.
a otros objetos o circunstancias fobógenas.
Clínicamente, los cuadros de ansiedad vienen recogidos Se diferencian del trastorno obsesivo-compulsivo, al
en las clasificaciones como crisis de ansiedad o de pánico, si- margen de la clínica, en que, en este último, predomina el
tuación de descontrol emocional en la cual la eclosión sin- mecanismo defensivo conocido como formación reactiva, al
tomatológica es brusca y florida, y trastorno por ansiedad tiempo que su estructura fisiopatológica involucra:86
generalizada, más prolongado en el tiempo y con una sin-
tomatología más larvada (ansiedad-rasgo). ▪ El sistema serotoninérgico y dopaminérgico, la re-
También se incluyen en este apartado el trastorno obse- lación arginina-vasopresina-oxitocina y una proba-
sivo compulsivo y las fobias. Los cuatro cuadros aparecen con ble disfunción hipotálamo-hipófiso-suprarrenal
frecuencia interrelacionados con rasgos neurotiformes de primaria, que podría estar en el origen de los com-
personalidad que completan el escenario clínico. portamientos perseverantes obsesivos y compulsivos.
Las fobias —o miedo patológico e irracional ante de- ▪ Y una hiperactivación de regiones frontoorbitales
terminados objetos o situaciones, que se alivia temporal- asociada a una hipoactivación en los ganglios de la
mente evitando la exposición al fenómeno causal— suelen base, que orienta a una disfunción de regiones sub-
relacionarse con los ataques de pánico y se clasifican según corticales del hemisferio dominante (giro cingulado
el DSM-IV-TR64 como: anterior, núcleo caudado).
▪ Agorafobia: descrita originalmente por Westphal27 Los pensamientos obsesivos son ideas, imágenes o im-
como el temor a los espacios abiertos. La agorafobia pulsos mentales que irrumpen una y otra vez en la activi-
no es sensu stricto una fobia, sino un complejo poli- dad mental del individuo de una forma estereotipada. Su
sintomático que afecta a diferentes dimensiones psi- tonalidad afectiva suele ser desagradable y quien los pa-
copatológicas. El término engloba diferentes fobias dece suele intentar, con poco éxito, resistirse a ellos. Son
relacionadas entre sí. Subyace el miedo a la indefen- percibidos como pensamientos propios, a pesar de ser in-
sión, más que el temor a la situación fobógena en sí voluntarios y, a menudo, repulsivos. Versan sobre diferen-
misma. Con frecuencia, los pacientes pueden pre- tes temas, siendo los más frecuentes los pensamientos de
sentar síntomas depresivos, preocupaciones hipo- duda y contaminación.
condríacas, conductas histeroides e, incluso, abuso Los actos o rituales compulsivos suponen formas de
del alcohol y de otros tóxicos. También es posible conducta estereotipada que se repiten una y otra vez. No
observar el síndrome de despersonalización ansioso-fó- son placenteros ni generan actividades útiles. Para el en-
bico descrito por Roth, asociado a una disfunción fermo, tienen la función de prevenir que ocurra algún he-
del lóbulo temporal y de regiones límbicas.8 cho objetivamente improbable. Suele tratarse de rituales
▪ Fobia social: temor a la exposición a otras personas para conjurar que uno mismo reciba daño de alguien o se
y a situaciones sociales. lo pueda producir a otros. A menudo, son reconocidos
▪ Fobias simples o fobias específicas. Existen tantas como por el enfermo como carentes de sentido o de eficacia, y
objetos o situaciones podamos imaginar o, más exac- quien los padece hace reiterados intentos para resistirse a
tamente, evitar. Incluyen la claustrofobia (miedo a los ellos. El acto compulsivo se traduce, generalmente, en un
espacios cerrados), la aracnofobia (temor a las ara- descenso transitorio del nivel de ansiedad. El intento de
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154 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

resistirse a la compulsión suele acompañarse de un aumento a él, y que suele generar serias dificultades de convivencia y
de la tensión, que, a su vez, se alivia tras un nuevo acto de adaptación social. Según Snaith:24
compulsivo. En casos de larga evolución, la resistencia «El estado de irritabilidad es primariamente un
puede reducirse al mínimo. La actividad compulsiva obe- estado anímico que posteriormente puede ser tra-
dece a reglas bien establecidas (momento, orden, duración ducido en una conducta más o menos violenta
y número de actos), siendo las compulsiones más frecuen- derivada del mismo».
tes las de lavado y los rituales de comprobación, tocar y
contar. Para Kernberg, la irritación es un afecto agresivo leve,
La ansiedad del paciente esquizofrénico suele ligarse a que indica el potencial para las reacciones de cólera e ira y,
las vivencias propias de las fases productivas del tipo aluci- en su forma crónica, se presenta como irritabilidad. La ira
naciones o delirios. En el comienzo del cuadro esquizofré- es un afecto más intenso que la irritación, más diferenciado
nico, existe un humor característico, el temple delirante, en su contenido cognitivo y en la naturaleza de la relación
humor delirante o trema. En el trema, según Conrad,87 «se objetal activada. Una reacción intensa de ira, su naturaleza
produce un aumento de la tensión psíquica y, finalmente, abrumadora, su carácter difuso, su desdibujamiento respec-
la vivencia de la inminencia de algo». to de los contenidos cognitivos específicos y de las corres-
Conrad toma el nombre trema del teatro, ya que los pondientes relaciones objetales, puede transmitir la idea de
actores llaman así al estado de tensión por el que pasan que se trata de un afecto primitivo puro. Sin embargo, tras
inmediatamente antes de salir a escena. El trema repre- ella, se revela una fantasía subyacente consciente o incons-
senta el estado previo a la eclosión del delirio o fase apo- ciente que incluye una relación específica entre un aspecto
fánica. del sí-mismo y un aspecto de un otro significativo.29
En el cribado de los cuadros de ansiedad, hay que incluir La ira como afecto, en estadios primitivos del desarrollo,
tiene como función eliminar una fuente de dolor o de irri-
los cuadros depresivos y los estados mixtos ansioso-depresi-
tación insoportable para quien la sufre. En épocas poste-
vos, quedando estos últimos englobados en el DSM-IV-TR64
riores, evoluciona con el fin último de barrer los obstáculos
dentro del proceloso mundo de las distimias.
que dificultan la gratificación pulsional. En la clínica, la in-
Por último, hay que descartar procesos de origen somá-
tensidad de los afectos agresivos (irritación, cólera, ira) se
tico de tipo hormonal y metabólico (hipertiroidismo, feocro-
correlaciona con su función psicológica de afirmar la auto-
mocitoma, hipoglucemias, porfirias, síndrome carcinoide),
nomía del individuo, de deshacer cualquier barrera que se
farmacológico (anfetaminas, glucocorticoides, acatisia por
oponga al grado deseado de satisfacción, y de eliminar o
neurolépticos, L-dopa, insulina, hipoglucemiantes orales,
destruir una fuente de dolor o de frustración profundos.
hormona tiroidea, etc.), tóxico (cafeína, cocaína) y cuadros
No obstante, estos tres afectos detallados se distinguen por
de abstinencia a sustancias (heroína, alcohol, benzodiace-
su carácter agudo y por la relativa facilidad de variación de
pinas, etcétera).
sus componentes cognitivos.
No sucede lo mismo con otro afecto de composición
Humor irritable más compleja y de mayor fijeza en cuanto a su componente
Si bien la irritabilidad aparece asociada a la mayor parte cognitivo: el odio. La psicopatología de la agresividad no se
de los trastornos afectivos (manía, depresión, ansiedad, es- limita a la intensidad y frecuencia de los ataques de ira, sino
tados mixtos) como síntoma acompañante, algunos autores a uno de los afectos más complejos y dominantes en la
piensan que el humor irritable debe ser considerado como constitución de la agresión como pulsión: el odio.
un trastorno anímico con entidad propia. Es frecuente que, durante el tratamiento de pacientes
Snaith y Taylor24 definen la irritabilidad como: con organizaciones límite de la personalidad —en particu-
lar, aquellos que padecen una patología narcisista grave y
«Estado afectivo primario caracterizado por una
rasgos antisociales acusados—, el terapeuta se enfrente tan-
disminución del control volitivo sobre el propio
to a sus accesos transferenciales de ira como a su odio, a
temperamento, que deriva en una conducta ver-
ciertas formas de manifestación caracterial secundarias a di-
bal irascible o en estallidos de agresividad física
cho afecto, así como a sus defensas inconscientes.
durante los cuales el humor o estado de ánimo
El odio presenta un mayor anclaje caracterial que la ira
no tiene por qué presentar alteraciones signifi-
o la irritabilidad, e incluye racionalizaciones poderosas con
cativas».
las correspondientes distorsiones del funcionamiento del
De hecho, en estos pacientes, es frecuente que se en- yo y del superyó. La meta primaria de alguien consumido
cuentre otra sintomatología psiquiátrica acompañante, lo por el odio es destruir un objeto específico de su fantasía
cual dificulta su diagnóstico y su ubicación nosológica. inconsciente, y también sus derivados conscientes. Es fre-
Conviene diferenciar el sentimiento subjetivo de irrita- cuente que el odio se encuentre penetrado por motivaciones
bilidad del comportamiento violento que suele ir asociado inconscientes como la búsqueda de venganza, aunque pa-
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CAPÍTULO 8 Afectividad 155

radójicamente el objeto es necesitado y deseado, al igual la mera temporalidad y, en ningún caso, implica necesaria-
que lo es su destrucción violenta. mente una atenuación en la gravedad de la sintomatología
La experiencia irritable es vivida por el paciente de for- depresiva presente. La cronicidad (duración superior a los
ma desagradable, disfórica, y carece del efecto catártico que dos años) no alude de forma exclusiva a un subtipo depresivo
se evidencia en las descargas agresivas producidas en los ac- concreto. Puede englobar aspectos particulares de todos ellos,
cesos de rabia o de ira reactivos a un objeto o situación des- incluyendo aquellos cuadros de base biológica o endógena,
encadenante. La irritabilidad puede aparecer de forma así como posibles enfermedades concomitantes sobreañadidas
episódica (irritabilidad-estado) como accesos de breve du- (trastornos de ansiedad, trastorno obsesivo-compulsivo, tras-
ración, no necesariamente relacionados con desencadenantes tornos psicóticos).88
externos o de un modo más prolongado (irritabilidad-rasgo), Castilla del Pino despacha las clasificaciones diagnósti-
más próxima a los trastornos de la personalidad, en los cua- cas de forma cuasi pogrómica:89
les, aparece de forma primaria (personalidad antisocial o
«Son vulgares, poco rigurosas, y, pese a su intento
psicopática). También es característica del trastorno orgá-
de simplificación que las haga accesibles a perso-
nico de la personalidad y de algunas formas de epilepsia.
nas de ínfimo nivel intelectual, son inútiles».
Distimias Sin llegar a tanto, sí parece, cuando menos, que la uti-
lización terminológica del concepto de distimia resulta in-
Se entiende por distimia toda desviación del estado apropiada, generadora de confusión, y debiera revisarse en
anímico considerado normal (eutimia). Las distimias son futuras clasificaciones, pese a que el borrador del futuro
acentuaciones del ánimo en una dirección determinada, DSM-V no invita al optimismo en este aspecto.66
generalmente, transitorias, que destacan por su intensidad
anormal y que engloban a la personalidad de forma cata-
Indiferencia afectiva
tímica. Se trata, por lo tanto, de un concepto vago e im-
preciso. El individuo afectado por una indiferencia afectiva, sub-
El término distimia ha perdido en los últimos años su jetivamente, se muestra incapaz de experimentar sentimien-
origen psicopatológico para aplicarse, en términos de la tos (sentimiento de falta de sentimientos), mientras que, a
CIE-1065 o del DSM-IV-TR,64 a un cuadro depresivo cró- nivel manifiesto, presenta un cuadro de arreactividad emo-
nico, que engloba a las antiguas depresiones neuróticas, con- cional que le incapacita a la hora de expresar sus emociones
trapuestas al trastorno depresivo mayor, de acuerdo con una hacia los que le rodean.
serie de características clínicas presentes en un grupo hete- Para Jaspers:31
rogéneo de pacientes: «No se trata de apatía, sino de un torturante sentir
▪ Menor grado de incapacitación a nivel psicosocial, un no sentir. Los enfermos sufren enormemente ba-
con ausencia de síntomas psicóticos y de otros datos jo ese vacío de sentimiento subjetivamente sentido.
de endogeneidad (síntomas neurovegetativos, inclui- Pero la misma angustia, que dicen no sentir, es re-
dos el patrón estacional y las alteraciones cognitivas conocible como existente realmente en síntomas fí-
y psicomotrices graves). sicos. Se trata de un fenómeno notable que aparece
▪ Presencia de rasgos caracteriales y de personalidad en los psicópatas periódicos, en los depresivos, pero
desadaptativos. también en el comienzo de todos los procesos».
▪ Ausencia de ruptura biográfica nítida (a diferencia Esta manifestación psicopatológica es característica de
de lo que sucede con el trastorno depresivo mayor). la esquizofrenia, y llega a su extremo en el autismo, en el
▪ Patrón de reactividad emocional frente a aconteci- cual, existe una pérdida absoluta del contacto afectivo del
mientos vitales adversos. paciente con el medio externo.
▪ Cronicidad. Tanto el DSM-IV-TR64 como la Colodrón90 defiende que esta terminología sólo debe
CIE-1065 exigen, cuando menos, una duración de usarse cuando se haga referencia a la esquizofrenia residual
los síntomas no inferior a dos años. o defecto esquizofrénico. Este autor también señala el ca-
El concepto de distimia es ambiguo y, para algunos rácter primordial de este síntoma como eje nuclear de la
autores, no quedan claras desde el punto de vista clínico las esquizofrenia:
diferencias entre este trastorno, la depresión mayor no me- «Kraepelin hizo del embotamiento afectivo y de
lancólica y la depresión crónica. Con los datos actuales, se la indiferencia el eje del trastorno de la persona-
puede cifrar el número de pacientes depresivos crónicos en lidad esquizofrénica, un deterioro emocional que
torno al 15-20 % del total y, según nuestra opinión, el con- mantiene con Bleuler su lugar de privilegio. No
cepto de cronicidad aplicado a la patología depresiva es obstante, Bleuler advirtió que al comienzo del
complejo, atiende a criterios diversos que van más allá de cuadro se observa a menudo una hipersensibili-
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156 SECCIÓN I Trastornos de las funciones psíquicas

dad, de modo que los pacientes se aíslan cons- ni cualitativa ni cuantitativamente.28 En palabras de
ciente y deliberadamente para evitar todo lo que Alonso Fernández,38 «el enfermo experimenta sentimientos
pueda suscitarles emociones, pese a que pueden inadecuados para la situación en que vive o para las ideas
tener todavía algún interés por la vida. Además que actualiza».
hay muchos esquizofrénicos que, al menos en La paratimia, según Bleuler,25 se observa en procesos co-
ciertos aspectos, exhiben vivas emociones en opi- mo la esquizofrenia, las psicosis afectivas y los trastornos
nión de este autor. De hecho, sólo en los estados orgánico-cerebrales.
de defecto muy pronunciados puede hablarse de Dentro de las paratimias, se encuentra la labilidad afec-
embotamiento emocional. Fuera de ellos la afec- tiva, forma de expresión emocional cambiante y, en general,
tividad de los esquizofrénicos es, como la esqui- independiente de estímulos causales externos. Suele aso-
zofrenia misma, ininteligible». ciarse a una incontinencia afectiva, que hace que la expresión
Se pueden encontrar formas atenuadas de indiferencia externa de los afectos sea desproporcionada respecto a la vi-
afectiva en los cuadros depresivos, en ciertos trastornos de vencia subjetiva de estos.
la personalidad (personalidad histriónica y antisocial) y en Ambas son típicas de ciertos trastornos orgánico-cere-
afecciones orgánicas cerebrales que involucran los lóbulos brales como la epilepsia, síndromes demenciales o afeccio-
frontal y temporal (demencias, traumatismos, tumores, al- nes seudobulbares,8 en las cuales el individuo pasa de forma
teraciones vasculares). exageradamente rápida de la risa al llanto espasmódico, al-
En la histeria, se ha descrito una situación clínica cono- canzando ambos una intensidad desproporcionada que es-
cida como belle indifférence, en la que el individuo aparece capa al control voluntario.
indiferente ante todo lo que le rodea. En este caso, la indife- Otra forma de paratimia es la ambivalencia afectiva o
rencia, lejos de representar el angustioso sentimiento psicó- ambitimia,25 que consiste en la presencia simultánea de sen-
tico de vacío emocional, personaliza un mecanismo defensivo timientos, estados de ánimo o aspiraciones positivos y ne-
del yo conocido como disociación.91 La persona exhibe una gativos a la vez. La ambitimia se puede dividir en:
escisión y parcelación en el sentido global y unitario de su ▪ Ambivalencia de sentimientos: coexistencia de senti-
self, que se manifiesta en forma de estados particulares de la mientos contradictorios con respecto a un mismo
conciencia, memoria, identidad o percepción, durante los objeto, contenido vivencial o representación.
que se muestra confundida acerca de su identidad, sentimien- ▪ Ambivalencia intencional o ambitendencia: coexis-
tos, control sobre sus acciones e impulsos, o sobre sus regis- tencia de tendencias y actitudes contrapuestas.
tros mnésicos. ▪ Ambivalencia intelectual: coexisten una idea o repre-
La disociación aparece como un mecanismo de defensa sentación ideativa y su contraria.
frente a un trauma psíquico inaceptable para el sujeto que
La ambitimia puede aparecer en cuadros clínicos como
la experimenta. Mediante la creación de estos estados diso-
la esquizofrenia, los trastornos obsesivos, las fobias y los epi-
ciativos o estados segundos consigue distanciarse del trauma
sodios depresivos.
en el momento en que este ocurre, al tiempo que retrasa la
elaboración psíquica necesaria para que dicho trauma se in-
tegre en su vida mental. Alexitimia
A diferencia de la represión, en la que se crea una ruptura Término psicodinámico introducido por Sifneos8 que
horizontal y el material rechazado es transferido al incons- describe una incapacidad por parte del individuo para en-
ciente dinámico, la disociación crea una ruptura vertical, contrar palabras o representaciones cognitivas que definan
de forma que los contenidos mentales rechazados coexisten sus sentimientos. Este concepto, muy utilizado en los dife-
con otros aceptables y conscientes, en una existencia para- rentes estudios sobre la personalidad y la patología psico-
lela. Como ejemplos disociativos más frecuentes, están la somática, guarda cierta similitud con el concepto de
amnesia disociativa, la fuga disociativa, el trastorno de iden- pensamiento operatorio de Marty.92
tidad disociada (personalidad múltiple) y el trastorno de Joyce MacDougall93 denomina a los pacientes alexití-
despersonalización. micos sordomudos del afecto, en los cuales, una situación
de estrés psíquico, lejos de experimentarse a nivel senti-
Inadecuación afectiva (paratimia) mental, se manifiesta de forma somática, permaneciendo
La respuesta afectiva del individuo no parece apropiada el individuo indiferente (afectivamente hablando) a los
al contexto situacional en el cual se desarrolla, viniendo a efectos de esta:
representar este síntoma una expresión más general de lo «La crisis psicosomática es una consecuencia de
manifestado en el apartado anterior. un desbordamiento del funcionamiento alexití-
Las emociones del enfermo paratímico no se ajustan mico, cuya función defensiva consiste en exorci-
de un modo natural al contenido de su vivencia actual, zar angustias arcaicas de tipo psicótico».
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CAPÍTULO 8 Afectividad 157

Esta autora continúa diciendo: ficación de Scheler.38


Por lo general, la mente está ocupada por un senti-
«En las afecciones psicosomáticas el daño físico
miento de comunión con Dios, los santos o el infinito.
es real, y su descripción durante un análisis no re-
Pueden presentarse alucinaciones visuales de temas reli-
vela a primera vista un conflicto neurótico o psi-
giosos y alucinaciones auditivas de contenido místico-es-
cótico. El “sentido” es de orden presimbólico e
piritual. Este cuadro puede aparecer en los trastornos
interfiere en la representación de la palabra».
orgánicos o de intoxicación por diferentes sustancias, en
McDougall compara igualmente la forma en la que los cuadros psicóticos como la esquizofrenia, o en pacientes
pacientes alexitímicos y los pacientes psicóticos tratan el epilépticos.
lenguaje:93 López Ibor27 refiere que el éxtasis de los psicóticos se ca-
«El pensamiento del psicótico puede concebirse racteriza por dos vivencias existenciales especiales:
como una “inflación delirante” del uso de la pa- ▪ La vivencia de detención del tiempo.
labra, cuya meta es llenar espacios de un vacío ate- ▪ La vivencia de salida del yo, quien se funde con una
rrador, mientras que los procesos de pensamiento nueva instancia diferente a él.
de las somatizaciones intentan vaciar la palabra de
Ambas pueden llegar a expresar la dramática distorsión
su significado afectivo. En los estados psicosomá-
que sufren en todas sus vivencias psíquicas los pacientes es-
ticos es el cuerpo quien se comporta de forma “de-
quizofrénicos.
lirante”, ya sea “superfuncionando”, ya sea inhi-
Scharfetter28 clasifica estos estados como estados afectivos
biendo funciones somáticas normales, y esto de
de excepción, o bien, reacciones afectivas suprapersonales, ya
un modo insensato en el plano fisiológico».
que la carga afectiva es de tal intensidad que apenas se llega
a una configuración individual de la reacción a través de la
Neotimias
personalidad. Incluye, además del éxtasis ya mencionado,
Este término hace referencia a sentimientos de nueva ciertos estados crepusculares, así como reacciones explosivas
aparición, entre los cuales, Fish incluye34 la experiencia ex- de furor (raptus furioso) con manifestaciones somáticas (mo-
tática o éxtasis, estado de exaltación, de bienestar extremo toras y vegetativas) concomitantes, y el estupor emocional,
asociado a un sentimiento de gozo y de gracia espiritual. o lo que es lo mismo, un desconectarse que se produce bajo
Encajan dentro de los sentimientos espirituales de la clasi- emociones muy intensas como ira, tristeza o ciertas reac-

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