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mis ojos
Andrea Katherine Rey Salazar
Capítulo 1: “Nunca lo has hecho en realidad”
En este capítulo aprendí que si nosotros verdaderamente amamos a Jesús, tenemos
el deseo de agradarle en todo especialmente en nuestra sexualidad, la lucha por la
pureza sexual es una de las batallas más grandes en nuestra vida cristiana, es muy
difícil no dejarnos llevarnos por el momento y los ojos es por donde entra todo las
demás emociones y partes del cuerpo también son importantes pero por los ojos
encontramos deseo y por ello tenemos que hacer un pacto con nuestros ojos a Dios,
esto es como hacer un voto delante de él, me sentí identificada cuando el autor dice
que muchas veces tratamos y fracasamos, así sucesivamente, siempre me sucede
eso a mí, trato de salir de la batalla y digo si ya salgo y vuelvo y caigo. Me gustaría
hacer un pacto con Dios para que no me vuelva a ocurrir eso y pueda decirle a Dios al
igual que el autor “Mis ojos son tuyos. Mi corazón es tuyo” El espíritu santo siempre
me invita, pero siempre lo evado, de verdad quiero guardar todo, mis ojos, mi espíritu;
Es verdad que si vemos al pacto como un don eso nos ayudara a apartar la vista de la
tentación, en realidad no sabía que el primer paso para la sabiduría era el temor al
señor.
El propósito de un voto es sellar nuestros corazones en obediencia en momentos de
vulnerabilidad, esto es muy cierto, ya que, existen unos momentos de mi vida donde
soy muy vulnerable a todo, donde tengo curiosidad de muchas cosas y por eso es que
me gustaría crear un pacto con Dios y lo que se necesita para esto es crear una
promesa en la presencia de Dios, este pacto que haga eliminara toda curiosidad y
después de que ocurra todo este proceso de dificultad vendrá una victoria a mi vida.