Professional Documents
Culture Documents
(Humorista Involuntario)
POESIAS
PRÓLOGO DEL
LIC. LEOBINO ZAVALA
0ECIMANOVENA EDICIÓN
MEXICO
• 19 9 9
~ ,
,J
,¡1
MARGARITO LEDESMi\
(Humorista Involuntario)
~
POESIAS
PRÓLOGO DEL
0ECIMANOVENA EDICIÓN
MEXICO
• 1999
~
¡
.., .
l.
DECIMANOVENA EDICIÓN
POESIAS
Impreso en México.
Printed in Mexico.
~'w .f( '
~¡
,.. ~ '
'¡¡(""'''
.,¡ .....
8
MARGARITO LEDESMA
\
Jv:
.,
A/
10
-
MARGARITO LEDESMA
POESÍAS 11
ningún caso me hubiera ocupado siquiera en leerlas,
pues nunca tuve ]a intención de corregir ni, menos para el incomprendido cantor de su tierra natal, para
aú~, de publicar el libro de Ledesma. el "humi•l de poeta Margarito", como a sí mismo se
Pasaron así los aiíos; pero, en estos días, buscando titula en algunas de sus especialísimas producciones.
unes documentos, me encontré el famoso ori¡,Yinal olvi- He sido siempre un incurable admirador de los sen-
dado en un cajón de mi escritorio. timentales, de los soñadores, de aquellos que, en aras
Por mera curiosidad, o quizá por súbito· y tardío de un ideal que ellos estiman meritorio y noble, sacri-
remordimiento, comencé a hojear el legajo; mas, apenas fican sus energías, sus bienes y, en ocasiones, hasta
leídas las primeras hojas, se despertó mi interés por su la vida misma; he sentido siempre sincera estimación
contenido y, sin casi darme cuenta de ello, devoré y hondo respeto hacia aquellos elegidos que hacen un
hasta su última línea, conquistado definitivamente por verdadero culto de su amor a una mujer, de su cariño
el encanto que, como sutil perfume, se desprende de a un lugar, de su admiración por algún genio o de su
sus páginas y por el candor de ese in genuo poeta que, fanatismo por un héroe; y Margarito Ledesm.a, a su
encerrado siempre en los estrechos límites de "esa ben- modo, con su escasísima cultura y llegando a veces
dita tierra que lo vio nacer" y sin haber hecho en su hasta las lindes de lo grotesco y lo ridículo, es un
vida otros viajes que los dos que son asunto de igual sentimental, un soüador y, en consecuencia, es digno
número de sus composiciones, ve las cosas a través de para mi de admiración y de respeto.
un prisma enteramente desconocido y extraño para Su obra, si es que así puede llamarse al conjunto de
nosotros, y del motivo más trivial, menos poético y sus ingenuas e incorrectas prod ucciones, es un himno
de la menor importancia, hace una "he rmosa poesía" fervoroso y continuo a su tierra natal, a "esa bendita
o una "agradable composición", como él mismo las tierra que lo vio nacer y donde vio la luz primera" y a
llama candorosamente en su libro. la que, con todo el entusiasmo y todos los escasos re-
Es posible que los que lean esta obra me tengan cursos de su humildísimo acervo artístico, canta, admi-
por tan ingenuo, tan candoroso y -¿por qué no de- ra y venera en el amor y los desvíos de sus mujeres,
cirlo?- tan falto de seso como muchos han de tener en la dulzura de sus limas, en las quejas amarguísimas
a Margarito Lcdesma; pero no he podido resistir el que exhala por haber tenido que abandonarla durante
deseo de hacerla imprimir tan pronto como me sea una larga semana, en el cariño que profesa a sus com-
posible y de en cabezada, con este prólogo mío, menos padres de pila y de cascarón y hasta en las curiosas
adecuado quizá, para la índole de Ja obra, que el del alusiones que hace frecuentemente a los muchos en-
compadre Melitón Palomares que aparece en el origi- vidiosos y lenguas largas de su pueblo.
nal, pero igualmente sincero y rebosante de cariño No conozco personalmente a MARGARITO LEDESMA,
pero, según los informes que pude obtener de su en-
t
12
MARGARITO LEDESMA PoESÍAs 13
viado, es -o, por lo menos, era cuando tales infor-
que están a su alcance, que siquiera las reciten los ni-
mes me fueron dados- un hombre de avanzada edad.
Nació en Chamacuero de Comonfort, hoy Comonfort ños de las escuelas, y cuando él consigue hacerlo per-
a secas, y desde su nacimiento, ha vivido siempre ~n sonalmente, desempeña su cometido con tanto entu-
ese lugar; siendo su deseo más ardiente el de morir y siasmo y tal prosopopeya y con ademanes tan perento-
ser sepultado allí mismo, a la ori11a de su querido río rios y estrafalarios que suele causar hilaridad entre
de La Laja, si posible fuere. "los envidiosos y lenguas largas" que tanto preocupan
Durante su ya larga vida, no ha salido de Chama- a nuestro hombre.
cuero más que dos veces: una, a Cela ya, ''a un nego- Tiene muchas composiciones de esa especie, que de-
cio del Juzgado", según nos cuenta en su Dúo Poético, ben ser un primor y que desgraciadamente no insertó
y otra, a San Juan de los Lagos, a pagar una manda en este volumen, en el que sólo podemos saborear el
que prometió con motivo de haberse caído en un ex- simpático Himno Local, escrito allá por los años de
cusado. 1911 ó 1912, cuando comenzaba la revolución, y La
Aunque de talento natural, tiene muy poca instruc- Cuna de la Independencia, en la que lleva su exagerado
ción, y el confinamiento en su tierra natal a que, vo- provincialismo al grado de sugerir que Chamacuero
luntariamente y por exceso de cariño hacia ella, se ha debe ser considerada como tal, en virtud de que fue
condenado durante toda su existencia, le ha hecho allí donde el Cura Hidalgo, en ocasión de concurrir a
formarse un concepto tan raro y especial de la vida y una sabrosa tamalada y ver correr "LIBRE y sin mucha
una idea tan extraña de las cosas, que la lectura de resistencia la corriente del río de La Laja", concibió
sus versos llega a causar un indefinible sentimiento la grandiosa idea de nuestra emancipación política.
de asombro e incredulidad; resaltando su modo de ser Es lástima que Margarita haya permitido que sus
y su ignorancia en ciertos asuntos de sobra conocidos "hermosas composiciones" fueran "revisadas, corregi-
para la generalidad, en muchas de sus composiciones, das, recogidas y aumentadas" por "otros poetas de altos
especialmente en las tituladas A Juan Silveste, A,l Gran vuelos", como honradamente lo confiesa en el curso
Napoleón, a quien, según parece, considera oriundo de de su obra. Es cierto que, sin esas revisiones y correc-
los Estados Unidos o por lo menos, educado en ese ciones, tal vez no habría habido lugar para las jugosas
país, y en otras varias, en las que pone de manifiesto NOTAS que pone al pie Je cada composición corregida
su ingenuidad y su incultura. y que son quizás la parte más interesante de su libro;
Es un ferviente patriota; gusta mucho de tomar par- pero yo habría preferido sus poesías sin corrección
te en la celebración de las fi.estas patrias, recitando alguna, tales como salieron de la pluma de su autor,
sus composiciones o procurando, por todos los medios pues la "cojera" de muchos de sus versos, las faltas
gramaticales de toda especie en que continuamente
14
MARGARITO LEDESI\IA
"" 15
PoESÍAs
incurre y hasta la vaguedad y confusión en el senti-
do de algunas frases, ocasionadas por la dificultad del y acentos; pero respetando todo aquello que me pare-
consonante y del ritmo o por la falta de cultura ció un verdadero desacato modificar.
del autor, agregan un encanto más a tan atractiva pro- Al proceder así, creo tener la disculpa de que ello
ducción. facilitará la lectura de este libro y proporcionará a los
lectores mejores elementos para saborear las lucubra-
Bien es verdad que, en cuanto a cultura y conoci-
ciones de E L HUMILDE POET A 1\1 ARGARITO .
mientos gramaticales y literarios, el otro "pujante poe-
Está, pues justificado -a lo menos para mí y a mi
ta de altos vuelos que no quiere que miente su nom-
modo de pensar y sentir- el empeño que he puesto
bre" y "el poeta de la capital de la Repúblca que es
en la publicación de esta obra; viniendo aquí como
mucho su amigo", así como todas los demás correctores
de molde, para la situación en que con ese motivo me
que metieron Ia mano en los versos de Ledesma, deben
coloco y para las críticas que mi actitud pudiera pro-
andar, más o menos, a la misma altura que el autor;
vocar, los dos primeros versos de la P ORTADA de esta
pero, como quiera que sea, más valía que lo hubieran
dejado solo, como a los buenos matadores, sin meterse originalísima obra:
a componer lo que compuesto estaba. Me afirma en
esta idea el hecho, notorio a primera vista, de que las "No me importan las burlas de los necios,
composiciones no corregidas son más atractivas más in-
ui la envidia y habladas de algún tonto . . ."
genuas, más encantadoramente disparatadas -válga-
San Miguel de Allende, Gto., 28 de junio de 1920.
me las frases- ; mientras que las corregidas tienen cier-
ta afectación y tirantez, cierta falta de "soltura" y es-
Lic. Leobino Zavala.
pontaneidad que no se advierten en aquéllas, además
de que están menos mal medidas, lo que para mí dis-
minuye su mérito sui generis.
Antes de dar f i n a este ya largo prólogo, debo con-
fesar que inadvertidamente he incurrido en el mismo
error que vengo condenando, pues como viera que, a
pesar de la gran ayuda prestada al autor por "Pancho,
el Secretario del Juzgado Unico Municipal", la orto-
grafía andaba tan mal que hasta llegaba a dificultar
ia lectura del libro, me atreví a hacerle algunas co-
rrecciones, principalmente en lo relativo a puntuación
~
~ ;(.'liJA ·~
\ ¡' t
1\
PROLOGO
Su inútil y S. S.
MELITÓN PALOMARES.
Una rúbrica.
'" '\!
. ..
.•
DOS PALABRAS
este buen hombre hasta me ha ofrecido dinero para que lean mis versos y no me conocen que he estado
que las publique y que las publique. en algún colegio, pues los amigos y conocidos de aquí
y los vecinos ya me conocen bien y todos saben que
Hay otros muchos que también han terquiado mu-
nunca he estudiado en ningún colegio y ven que no es
cho que las publique, y no las había publicado; pero
por echármela, sino que deveras nunca he estudiado
me resolví a hacerlo porque hay en esta bendita tierra
que me vio nacer y donde vi la luz primera, otro pu- en ningún colegio.
jante poeta de altos vuelos, a quien ya ustedes conocen Al publicar este primer tomo de mis poesías, quiero
y que por eso no necesito mentado, que en vez de ser
que vean que no soy un malagradecido cualesquiera,
mi enemigo, como era de esperarse, ha sido siempre y quiero que tengan el honor de salir juntos con él en
muy campechanote conmigo y hasta me ha hecho eJ garantia de lo mucho que me ayudaron, y que todos
favor, que mucho le agradezco y por el que viviré eter- a la vez sepan que sé agradecer y que sepan el mu-
namente agradecido, de revisarme y corregirme algu- cho agradecimiento que tengo con el otro pujante poe-
nas de mis más variadas composiciones, como tendrán ta de altos vuelos de esta bendita tierra que me vio
ustedes el gusto de verlo en este , libro, pues eso sí en nacer y que no miento su nombre porque ya todos lo
cada poesía que me ha revisado y corregido este buen conocen y porque él me suplicó que no lo mentara y
amigo o alguno otro, siempre hago la advertencia, pa- yo me compromisé a no mentado, lo cual es una prue-
ra que nadie quede con- dudas ni con telas de juicio, ba de la humildad y buena alma de este grande hom-
pues este buen amigo y gran poeta me ha dado el con- bre, porque mucho me ha ayudado a revisar y corregir
sejo que publique mis poesías y por eso me he resuelto mis versos, y ahora habia modo de que se supiera y
a publicarlas; pero antes quiero advertirles que yo nun- saliera su nombre en letras de molde; y que también
ca he estudiado en ningún colegio ni he estudiado pára estoy muy agradecido con mi compadre Melitón Paloma-
hacer versos; sino que esto es una cosa natural y des- res, que me hizo fabor de hacer el Prólogo de este libro,
de muy chico comencé a ver que tenía mucha facilidad favor que no merezo y que le agradezco mucho y por
y mucha soltura para hacer versos, y así me lo decían el que le viviré eternamente agradecido, y que tam-
todos en mi casa, hasta el señor mi padre (Q.E.P.D. ) bién estoy muy agradecido con mi compadre Bardo-
y por eso me puse a estudiar y a escribirlos, y ahora, miano Muñoz, por lo que ya dije, así como con Pan-
viendo que me salen regulares y que mientras más cho el Secretario del Juzgado Unico Municipal, quien
hago me salen mejores y les hallo más el modo, pues también me ayudó mucho, diciéndome la puntuación
y acentos y diciéndome las letras con que se escriben
por eso me he resuelto a publicarlos y a seguir publi-
cando los que después vaya haciendo. algunas palabras escabrosas y un poco cnredijadas; y
también hago la advertencia que de algunos libros de
Hago esta advertencia para que no vayan a creer los
22
M ARGARlTO LEDESMA
VALE ·
L .
PORTADA
LA PARTIDA
Y al sentir el desencanto
de separarme de ti,
siento loco frenesi
y he llorado tanto ... tanto.
32 MARGARITO LEDESMA
33
PoESÍAS
REMEMBRANZAS
l ...,. r..,..·
~ :Jo
42 MARGARITO LEDESMA
,.. ~~N~·~
Y para hallar un poco de consuelo,
.
~...
me junté con don Luis y con Tamayo,
'•. y conseguí licencia para un gallo
y esa noche nos dimos harto vuelo.
' • 'j #
y se robó los cajones.
l t: ~ . ·w- ~r.:.r
ti:' t''{~ :. -:,:~· -~~- ~~~-
-¡:- o;;·ilt,.~·~·-·y. ,.:
~ ~t-:.} •<'F~-(¡ ..;~
·~-~ ~r-~ ·lr.,, ·>~~¡{1 ,,
.. -~ •
r
/·1:// l,):.;i;
MARGARITO LEDESMA
POESÍAS 49
rl'l
li
PoEsÍAs 53
Todititas me buscan,
pues mis versos ofuscan
y dan harto esplendor;
y yo, siempre altanero,
EL TROVADOR
sólo saco mi acero
por mi dama y mi honor.
Para mi buen amigo el simpátioo Así sigo el camino,
don Bruno, como recuerdo de nues- desafiando al Destino
tras paseadas. al són de mi laúd,
altanero y altivo,
pero vivo, muy vivo,
Soy trovador ardiente.
entre la multitud.
Siempre traigo en la frente
un síes noes de inquietud. NOTA.-Mi legalidad y, más que nada, el deseo de dar a cada
quien lo que es suyo, que es el escalafón sobre el que descansa
Soy trovador altivo nuestra justicia nacional y hasta la de algunas otras naciones
y siempre ando muy vivo civilizadas, me obligan a manifestar que esta hermosa composición
entre la multitud. que lleva el escogido título de El TrQ1Jador fue revisada, corregida
y aumentada, así como recogida en algunas partes, por otro pujante
poeta de altos vuelos de esta misma bendita tierra que me vio
Mis lánguidas canciones nacer y donde vi la luz primera, a quien le vivo muy agradecido,
ta.nto por ese favor como también por haberme ayudado a hacer
producen emociones esta nota, y cuyo famoso nombre no lo miento aquí por habér
y son como la miel, melo suplicado muchísimo el interesado; pero, de todos modos,
ya ustedes comprenderán quién es; y, por otra parte, yo quiero
y con mis dulces versos de todos modos que conste y figure esta declaración para que,
asusto a los perversos mañana O el pasado, no vaya a resultar algún envidioso malalma,
de esos leguas largas que nunca faltan y más en poblaciones
y les reclamo la hiel. chicas como esta bendita tierra que me vio nacer y donde vi la
lu z primera, que vaya a tener la bondad de decir que el que de
A las hermosas damas :~jeno se viste, ere., ere. Quiero, pues, que conste, por una y más
veces para los efectos y usos a que pudiera haber lugar más tarde.
les pregunto: "¿Me amas?", Y también quiero que conste, por ser de justicia y para los
y ellas responden: "¡Sí!"; efectos legales consiguientes, el trabajo que le dió corregirme
esta hermosa composición, pues duró como dos meses y ya hasta
y con amor ardiente, pena me daba , pues le quitó bastantes palabras y le puso otras,
me acarician la frente y ot ras se las cambió, y otras se las volvió a poner y, en fin ,
le dio mucho trabajo y mucho que trabajó, y por todo eso le
con mucho frenesí. estoy muy agradecido. Gracias.
. ·~
·f~'
e. ·~~~~ PoESÍAS 55
,/.·~r.·~r. ~~~;'~ •• 1
' 1 ~ ··~
1"'1;~;;~;·/
Y luego más enojado
tff~: f· ¡ y con voz medio platónica,
f¡ ~-..''
;· ~
! ~l·lJ,h~' gritaba desesperado:
,,
•,-j,' "¿Dónde estás, mujer felónica?"
~
~·:
.
'
¡
. FANTASMAS
Y se hincaba de l'Pdillas
y, en su cólera traidora,
Como un inolvidable a la vez que
se golpeaba las costillas,
espantoso recuerdo de una visión
sonando como tambora.
que vi en el camino de N eutla.
una noche lóbrega y escueta.
Y echando un largo suspiro,
gritaba con voz platónica:
Por el camino desierto "¿Dónde estás, que no te miro?
y entre aquella noche escueta, ¿Dónde estás, mujer felónica?"
vi que traficaba un muerto,
que era la alma de algún poeta .
Era una visión horrible,
era una cosa tan fiera,
Dando panicosos gritos,
que se asustaba cualquiera
andaba a tontas y a locas
con ese espanto infalible.
y se azotaba en las rocas
como lo hacen los malditos.
Y yo también me asusté
Y agarrando mucho vuelo y allí me puse a temblar,
y haciendo mucha boruca, tanto que luego me hinqué,
se revolcaba en el suelo como queriendo rezar.
y se rascaba la nuca
~\'.~
·¡¡•
·~
·"··
l.·\..,
;· ;_
.,~'(".!;.
-
(.
-dk~-···F "·~/'r:
1' .. ;~:~1~
' . .Jt·· 1{ l
,,, , ..
~~;-)~''
.:~\,_hJ,.· Y,I
~~~\~.~·-\r. ~~,
~: 't•
. -
,l::f, .,:~-·; -~\- ~,
'1-
EL ABUSO POR EL TAB A CO
"'
~-' -~--~ ¡:~·-~t
-:'( ... , _(!¡•_ :.\',
,,, ., JtiJO¡"
¡;11,_
Los abusos son tan malos Don Piedá vende un tabaco
que en bastantes ocasiones que ya n i la disimula ,
dan lugar a muchos palos pues le cai al hombre flaco
y luego hasta mojicones. como patada ue mula.
,~;((,
que me vio nacer.
-._~t'l.~ 4'! 1'1
i~
:{' .
62 i\lARGARITO LEDESMA
Po~ÍAs 63
Y sin armar mucho mitote NOTA.-Esta hermosa poesía me ha dado muchos calentaderos
y voltian,do antes para arriba, de cabeza, pues no faltan envidiosos que nomás la critican y la
critican y dicen que no es cierto que Silvete se quitó la chaqueta
: le aventó un chorro de saliva y .se la aventó a don Santiago, que lo que le aventó fue el capote
entre los pelos del gogote. de pasearse, y que no es cierto que se le metió al tóro por las
:.:~.<-~.~ manos y le salió por las patas, que fue un cambio de rodillas,
y que no eran miuras, que eran toros del r~ncho de San Elías, y
que la oreja no se la dieron para que la alce de recuerdo, sino que
Y que le baila por enfrente, ese es el costumbre cuando quedan bien, y que yo no entiendo
y que le brinca por un lado, nada de toros, y que nunca he visto nada y que soy ratón de
y el animal, atarantado, un abujero, que nunca ha salido de aquí y que por eso no
entiendo nada ni he visto nunca nada y otras muchas cosas y
nomás voltiaba a ver la gente. criticas que no vienen al caso y que para qué se las digo, pues
ya todos las saben.
Es muy cierto que yo no sé nada de toros y que es la primera
Y se quedaba, lelo, Ido, corrida que veo y que nunca he salido de esta bendita tierra que
me vio nacer, ni tampoco pienso salir, aunque les pese a muchos,
como diciendo "Ya ni amuelas", pues ya saben que aquí pienso morirme de viejo ·o de algu na
al ver que Juan le hacía en el suelo otra enfermedad; pero yo digo las cosas como las vi, sin quitarles
malacanchunchas y memelas. ni ponerles nada, y yo vi clarito que Juan Silvete se le metió al
toro por las manos y le salió por las patas, hincado y como
gateando, y también vi que le aventó a don Santiago una cha·
queta grande que traía cobijada como sobretodo, y si vi mal
Y luego al fin, con mucha miga, porque estaba muy lejos o porque tengo mala vista, yo no tengo
al pobre toro dejó tieso la culpa y eso no quiere decir que eche mentiras; y tocante a las
demás críticas. pues era mejor callarme y no decir nada; pero
·de una estocada en el pescuezo no quise quedarme callado para que no vayan a .creer que soy
que le salió por la barriga. más tonto de lo que piensan y que me quedé callado por eso.
Y. Dor ot ra parte, ya no puedo cambiar el argumento de Mi
poesía porque así se la mand é regalar a. Si' vete y si se la pido
que me la devuelva de nuevo, dirá que si andamos jugando
Y entonces todos muy de acuerdo o qué, y además que ya les re.t-'ito que yo vi todo lo que. puse
con estocada tan pareja, rn el argumento de mi poesía y que no tengo la culoa si vi mal.
hasta le dieron una oreja, v que tam poco tengo la culpa que en muchos periódicos que
he visto les digan a los toros fieras, bestias. cornunetos, miuras,
para que la alce de recuerdo. furri eles y otros nombres que no me acuerdo horita, pero que
todos vien en a ser y qui eren decir !o mismo, y por eso vo en
mi poesÍ?. le rliie fiera. miura y cornupeto al toro que. toreó
Ya te tocaba, Chamacuero; Silvcte.
ya te quitaste de ese brete, Ento..,ces de qu é se ?dmiran .
ya conociste a Juan Silvete,
el que le dicen rey de acero.
PoEsÍAs 67
1.
Es bueno reclamar nuestros derechos se pensó que era cosa muy prudente
y no dejamos que nos hagan menos. dar el grito y clamar la Independencia.
¡Que se aclaren bien todos los hechos
y se deslinden bien todos los terrenos!
Y desde entonces siguió duro y dt1ro,
piense y piense nomás esos negocios,
Todos nomás se acuerdan de Dolores
y para andar en ellos más seguro,
y todos dicen que allá fue la cuna,
y se. quedan muy serios estos señores,
procuró agenciarse algunos socios.
cual si no hubiera diferiencia alguna.
Y cuando los tantió mús descuidados
Y entre si será o no será, y que estaba bonita la mañana,
no creo justo que a nadie se prive, se conchavó a los presos y soldados
pues la honra es del que la da y mandó que sonaran la campana.
y no del que la recibe.
Y luego se formó la bola.
Y para que con críticas no empiecen, Con hondas, con machetes y gorguces,
les diré unas palabras muy seguras: en montón, cual si fueran una ola,
¡La cuna es nomás donde las mecen, corrieron hasta el Monte de las Cruces.
pero no donde nacen las criaturas!
Pues fue aquí donde Hidalgo, cura serio ¡Oh!, río de La Laja
y hombre ya macizo y de experiencia, que ruidoso baja,
se pensó nos quitaran el Imperio trayendo en sus aguas
y nos pusieran ya la Independencia. troncones y naguas,
animales muertos,
Sería, pues, bueno, como ya les dije, indios medios yertos,
reclamar sin temor nuestros derechos, becerros bogados,
y pedirle al Gobierno que se fije cuerpos aventados
si al caso no son buenos esos hechos. y otros ec:¡uipajes
que hay en los parajes
NOTA.-Muchos me alegan que la Historia no dice nada . de por ti atravesados.
lo que yo pongo en esta histórica poesía, y por eso me la andan
criticando y diciendo que no es cierto y que no se crean; pero
no consideran estas gentes que tampoco dice nada de lo de Baja tu corriente
Valentín Mancera ni del ~cerro con tres cabezas que nació en muy dulce y sonriente,
la hacienda de la Nopalera ni de otras muchas cosas que han
sucedido por aquí cerca, y no por eso vamos a decir que son cuajada de lodo,
mentiras; y tampoco se fijan que no es fácil que la Historia llevándose todo
esté al pendiente de todo lo que pasa en todas partes.
Además que yo no sé a qué vienen tantas alegatas, como si lo que hay en la orilla,
no vieran las pruebas que presento en mi poesía. Lo que sucede y van en pandilla
es que no pueden ver ojos en otra cara y andan ardidos porque
yo fui el que sorprendí el negocio. tus aguas risueñas
A fe que si han sido ellos ... ¡Cómo anduvieran resplande· arrancando peñas,
ciendo y sacando convite con la noticia!
PoEsÍAs 71
l\lARGARITO LEDESMA
·~
-~· (~
:&'fl
r~~·:rr'
74 MARGARITO LEDESMA
'1!
~f ol •
)i y que cada quien haga lo que quiera. abajo de mis poesías y pensando que esas natas pue-
den motivar que los turbe y que no lean a gusto mis
poesías y que se les vaya la idea y no las entiendan
bien por andar leyendo las notas, he pensado que es
mejor ya no poner más notas, sólo las que sean muy
necesarias, pero otra vez quedan ustedes advertidos y
bien sabidos que algunas poesías me las corrigieron
algunas personas de muy buena voluntad y muy ami-
gos del autor, y que no por no poner más notas vayan
a pensar que desconozco el favor y que me desdigo,
y que ya eso quiere decir que no me las corrigieron,
pues eso no es cierto y ya saben que les estoy muy
agradecido.
EL AUTOR
..
-t
'·
.
.,.,
.,,,''\~1~ OTRA ADVERTENCIA PRELIMINAR
·, SIGUEN LAS POESL\S
.. ,
Después de que puse la Adverteucia Preliminar,
pensé que las cosas no quedan bien así, pues puede
dar lugar a muchos enredos y equivocaciones y hasta
sentimientos y habladas.
Y por eso pensé poner esta Otra Advertencia Pre-
liminar para decirles que, en lugar de las notas, me-
jor voy a poner una señalita abajo de cada poesía co-
rregida, y ya con eso ustedes echan de ver que me
la corrigieron y todo queda aclarado y sin telas de
juicio.
Pero, pensándolo mejor, siempre no pongo nada de
señales, alcabo con las notas que llevo puestas les he
dado pruebas de que muchas poesías me las han co-
rregido, y así con eso ya quedan bien sazonados de
que algunas me las corrigieron, y no pueden decir que
ando resplandeciendo con lo ajeno.
Ya saben, pues, que siempre no pongo nada de se-
ílales; pero que eso no quiere decir que no me hayan
corregido algunas poesías, aunque no tengan señales
ahajo.
Su inútil servidor.
EL AUTOR
w V
"'
COMO JULIETA Y ROMERO
80 MARGARITO LEDESMA
..
""!!o..
~
1.
¡,.:.!' ¡;~r~·
:
,'
;
,
MEJORAS MATERIALES
IMPLORACION
~1.·...:
'Jt'l
84 MARGARITO LEDESMA PoEsÍAs 85
'J,
"\.¡ y si ni así se moderan Hay otras muchas mejoras
y obligarlos es preciso, que pide la población
'~
?;r,, ~;
entonces, ¿para qué hay cárcel? y que, por poca atención,
Yo creo que por algo se hizo. hasta hoy sólo han sido pioras,
y que, según he sabido,
Y si los presos se saltan aunque alguien haga espamentos,
•' por las bardas del corral, sólo por puro descuido
•;,~~
llevándose el nixtamal no hacen los Ayuntamientos.
y muchas cosas que faltan;
que al meterlos .al encierro,
en vez de darles petates,
los amarren con mecates
y les pongan allí un perro.
'll;r
PoEsÍAs 87
¿Por qué habrá gentes tan raras, Y cuando Juan vea mi lazo,
envidiosas y sin crianza le digo:-"No te retuerzas",
que no pueden ni de chanza y le aviento un buen balazo
ver ojos en otras caras? con todititas mis fuerzas.
.i
PoEsÍAS 91
·:. ¿~
Pues esto es tan perjudicial
y tan malo de por si,
que ya vieron lo fatal PASION
que me andaba yendo a mí.
Para M. S.
91 .
'· 1\IARGARITO I EDESl\lA
96 MARGARITO LEDESMA
POR LA ENFERMEDAD
ORILLEJOS
•• /
-,r;1, ~·t
: .r Con esa calor tan fuerte
,,,,· ·< 1'!~1· que hace por estas soledades, ¿Quién me llama la atención?
se han soltado muchas enfermedades -El Estación.
y anda muy entusiasmada la muerte. ¿Quién hay que mis pesares calme?
El Empalme.
Apenas se descuida uno tantito , ¿Y quién sofoca mis males?
como si no viniera al caso, -De González.
se arrima poco a poquito ...
¡y que le jinca el guadañazo! Por eso mi pobre corazón
tiene unas ganas fatales
Si no, ahí tienen a doña Juanita de pasiarse por el Estación
que, en menos que yo hablo, del Empalme de González.
nomás se quedó como una palomita ,
diciendo: ¡Ah, Diablo! ¡Ah, Diablo!
¿Qué como cuando hago rimas?
Y ahí está también don Ventu n, -Unas limas.
el que era Jefe del Estación: ¿Qué pueblo es el que más quiero?
¿Pues no se murió de una soltura -Chamacuero.
que le provino del esternón? ¿Y q:.~ién murió alrededor?
-Comonfort.
Así es que nadie se atenga,
ni se anden con sevasivas, Por eso con gran sabrosor
y que las gentes se pongan muy vivas seguiré haciendo mis rimas
y dispuestas a todo lo que venga. y gustando de las limas
de Chamacuero tk Comonfort.
'
,t-.A~Otlt-
'1''' J.f•
"-·~· 'r
100 .~·'"''"'
. ')¡,.~' .·z; • MARGARITO LElJ.BSMA
<'''""""'";·~·
..
•'
104 MARGARITO LEDESM A PonsíAs 105
'
PoEsÍAs 107
'l!
~~,J(
Y no andes con sevasivas
ni quieras sacarles tratos,
•;,~.1~
porque esos hombres ingratos
te sientan por mientras vivas.
POR LAS CONTRIBUCIONES
No empieces, pues, con idea
ni comiences a negarte,
Dedico esta triste poesía a tod'os los
pues pueden arcabuciarte
que tengan ¡1icos 11endientes cou la
y nada se negocea.
Duana, con el único fiu de avisarles
que se pongan listos y 110 vaymz a
Dicen que a los que se nieguen
verse en el penoso caso de que los
los tratan sin compasi<ín,
dejen en la calle de la noche a la
y avientan al aventón
mmíana, como le pasó a Nica nor
y péguenle al que le peguen.
O!vera.
Por eso yo te aconsejo
que tú te pongas muy chango,
Eso de las contribuciones
no sea que, como en Durango,
anda por aquí muy duro.
te quiten hasta el pellejo.
Si no pagas, te aseguro
que se adjudican tus posesiones.
Y si el caso se complica
y llega a cosas mayores,
los clcmontres de inspectores
te apean hasta la basinica.
.,.'\'
PoEsÍAs 109
r.··JI>,'
>'·¡
'"~· PoEsÍAs 111
'l.,
POR EL PAN
EN TODAS PARTES COSEN HABAS
PoESÍAs 115
PoEsÍAs
l·>i
'
'fJ .~ ~
'~; ~:.,
BECQUERIANA B A T A l. L A S D E A :\1 O R
( ;; ·}
Pnr iwa illgrata fuereiia.
~
'
l.l
Pasó tan estirada y tan gargosa
La vi y la amé. Con muchas precauciones
y con unos andados tan decentes,
la seguí por la orilla del mercado;
que voltiaban nomás todas las gentes
pero mctiose en un taguán cerrado . . .
. y desde entonces ya nunca más
la volví a ver jamás.
\' decían pensativas: --- ¡llaiga cosa!
~
128 MARGARITO LEDESMA PoEsÍAs 129
Pero era m6s mejor no haber llegado, Y entonces, como un último saludo,
pues a la luz incierta y meridiana, antes de fumigarme entre el arcano,
vislumbré que, pegado a su ventana, le pegué otras guantadas al cristiano,
estaba muy envuelto un embozado. y él también me arrimó las más que · pudo.
,;:···
:.~·
LAS COSAS A TlEMP ·o
LOS LABERINTOS
Y comiencen al momento
a decir que si estoy ido,
que cómo ando en ese ruido
ya tan viejo y medio airiento. •
CORO
Yo no sé si será cierto
o si serán puras levas;
pero, por viejas o nuevas,
vo ando con el ojo abierto.
NOTA.-Compuse este Himno p3r.l que lo canten todos los Y para que no me agarren
vecinos en unión cuando quieran caímos los revoltosos y amo· todo desaprevenido,
larnos, y así de ese modo les entre d valor. El Director de la
Banda de Neutla se comp·romisó muy formalmente a componer- voy a quitarme el vestido
le su música; pero, como se está tardando mucho y parece que y con manteca me embarren.
se anda haciendo del rogar, y el tiempo se está pasando y hasta
es fácil que sé acabe antes la revolución, les advierto que no
es necesario .esperarlo, pues este himno puede lantarse con la Así ya podré zafarme,
misma tonada del Himno Nacional, pues intencionalmente le pues, como puerco encebado.
husque el modo y lo compuse apegado a que se pudiera tantar
wn esa misma tonada. Y si no, ensáyenlo y verán. yo creo que a ningún soldado
Ya ven, pues. que hasta bien salió y que hasta parece que será fácil agarrarme.
adiyiné lo que iba a· suceder.
POESÍAS 145
Y a Dios haciendo votos muy seguidos Y predicó muy largo de ese asunto,
por el favor de mi asno, que es canelo, diciendo que cada año, llueva o no llueva,
pues había peregrinos más fundidos se pega casi siempre algún difunto
que sin burros andaban por el suelo. que va a pagar la manda que tal vez deba.
Fue un viaje algo pesado pero contento Y nos dijo: "No le hablen, déjenlo quieto,
por montones de sierras y serranías, y váyanse callados, como si nada;
y andábamos tan recio como el viento,
no vaya a desarmársele el esqueleto
caminando de noche y hasta de días. y nos pase una cosa medio pesada".
Nos dormíamos en medio de los arroyos,
de carrera voltiábamos las esquinas Y también otra cosa se me olvidaba.
y en los ranchos y casas que había gallinas Un peregrino quiso pasar el rato
nos comíamos las ·yemas y hasta los pollos. y aventó un pistolazo sobre de un pato
y a una · mujer ya mero se lo pegaba.
Pero no se me olvida de un asunto
que en medio nos pasó dé unos caminos, Y entonces, enojados los celadores,
y fue que nos hallamos un difunto viendo que están prohibidos los pistolazos,
revuelto con los otros peregrinos; le dieron una zurra de garrotazos,
y de la garrotiza pasó a mejores.
y muy serio y callado, como si nada,
iba muy misterioso, muy calladito, Y en medio de un arroyo lo sepultamos,
y nomás eche y eche un ulfatito y ya libres de aquella contrariedad,
meramente de tierra medio mojada. no hubo nuevos disgustos y continuamos
sin quebrantar las reglas de la amistad.
Y al vernos asustados el sacerdote
y mirar lo malmente que la cosa anda, Y al fin llegamos todos hasta San Juan
nos dijo algo . disgusto : -No hagan mitote; y pagamos la manda, que era secreta,
es un muerto que debe también su manda, y luego unos se fueron a la roleta
y que viene a pagarla muy calladito y otros a los albures y al carcamán.
y revuelto entre todos, como si nada;
pues ¿qué no ven ustedes el ulfatito Y como a mí me dieron recio y tupido
que le sa~e, de tierra medio mojada? y casi me dejaron a ra·iz y en pelo,
152 MARGARITO LEDESMA PoEsÍAs 153
jugué ya de enfadado mi asno canelo Y aseguraban todos que no le hacía,
y me quedé tan sólo con lo vestido. que era muy amigote del Presidente,
que siempre le ayudaba toda la gente
Y tuve que volverme para mis llanos y que a los más planchados se los comía.
a pie y algo cansado de las andadas,
con la cara ,y la nuca llenas de granos Y que nomás ya junto con su pandilla,
y un sies noes de dolores en las quijadas. hacía cera y pabilo la población,
y no era cosa fácil ir a prisión
Pero en volver de nuevo otra vez pienso, ni quitarle el destino cosa sencilla.
pues vi las cosas muy buenas y muy curiosas,
pues había un gentilismo bastante extenso Y comenzaron a ayudarle todos,
y vendimias y bailes y hartas cosas. echando gritos y hartas maldiciones
Y me acuerdo que andaba de brigilante y hasta diciendo que con esos modos
un charro muy decente y hasta ladino ni lo corrían ni entraba en las prisiones.
que era como a manera de Comandante
y todos lo nombraban señor Paulino. Y, después de que mucho le ayudaron,
no salió tan raspado don Paulino,
Y se agarró a balazos y armó mitote porque, si le quitaron el destino,
y bailó sobre un puesto de tacos fri-tos, la cárcel siempre no se la quitaron.
y les dió de guantadas a dos inditos
porque no le percharon un guajolote.
POESÍAS 157
Si no tienes volúntad
siquiera de contestarme,
yo creo que no hay necesidad
ni menos de avergonzarme.
NOMBRES Y APELATIVOS
Para ml alújadito
Macario Cázares
Y si en la tarde o mañana
siente frio algunas veces,
agarra la sorbetana,
le saca filo a su macana
y todo el dia casa reses.
1
1
La música recorrió
todo el centro de las calles,
y hubo chistosos detalles
de una vieja que se bogó.
• Regían el cuerpo.
168 MARGARITO LEDESMA PoEsÍAs 169
Dicen que a don Evaristo
Después se siguió la misa,
se le perdió la frezada
quemaron enchorizados,
y que no ha encontrado nada,
y a los que estaban hincados
por más que se ha puesto listo ~
les ardieron la camisa.
Y a la mujer de El Sabroso
el que vende nieve y aguas, En ]a plaza era un mitote
le sollamaron las naguas que ya nadie le acertaba,
pues el que no se peleaba
y le ardieron el rebozo.
andaba tras de un garrote.
1
172 MARGARITO LEDESMA POESÍAS 173
Después, al anochecer, La tienda de don Piedá
hasta dolía la conciencia, se la bebieron entera,
pues era una pestilencia y hubo tanta borrachera
que no hallábamos qué hacer. que hasta parecía humedá.
1
LOS MALORAS MALCRIADEZ
1
-'1
1
PoEsÍAs 183
182 MARGARITO LEDESMA
EL AUTOR,
EL CANTAR DE LOS PERROS 1
Dedico esta merecida poesía a todos los perros que MI PERRO CANELO
he tenido y a los que siga teniendo después; pero no'
al que tengo ahora, porque yo he sabido de muy buena Yo tenía un perro canelo,
tinta que nunca se le pone a una calle, a una plaza, a un perro muy entendido;
un mercado, a una escuela, a un jardín, a un teatro, nomás le echaba un chiflido,
a un salón, a una calzada, a un pueblo, a una viiJ.la, a y hasta botaba en el suelo,
una ciudad o a cualquier otro edificio semejante, el
nombre de una persona viva, sino hasta después de que Le decía "vete", y se iba;
se muere, y hasta he sabido también, no me acuerdo "quédate aquí", y se quedaba;
ni cómo ni cuándo, que allá en la antigüedad, man- ·-~ "bájate de ahi", se bajaba;
daron matar antes de tiempo a un señor que querían "sube", y subía para arriba.
mucho en una población, para poderle poner su nom-
bre a esa misma población o a algún edificio o caBe Le decía ''dame la mano",
de la localidad. luego luego me la daba;
Por eso no le dedico esta poesía al COLIFLOR, que le decía "baila'~, y bailaba
es el perrito que me acompaña últimamente y que, la como si fuera un cristianÓ.
verdad, me ha salido muy vivo, muy cariñoso y muy
buena gente; pero no quiero que se me vaya a echar Le decía "ven acá, perro",
a perder dedicándole esta poesía. y luego luego venía;
sólo cuando no quería,
Su inútil servidor, iba a esconderse en el cerro.
1
188 MARGARITO LEDESMA
y si nada le decía,
él tampoco no hada nada.
1
MARGARITO LEDESMA
'PoEsÍAs
191
!f., <'
Pues él se daba sus tretas Yo lo tenía en mucha estima
y, andando así, de puntillas, y en muy grande estimación.
se sacaba las tortillas ¡Lástima que un carretón
y luego hasta las chuletas. me le pasó por encima!
1
PoEsÍAs 193
1
194 MARGARITO LEDESMA
i
196 MARGARITO LEDESMA
Estaba en el Estación
esperando a Leandro Pérez,
cuando vi que unas mujeres
venían en un carretón.
1
198 MARGARITO LEDESMA
Y todos, muy pensativos, Seguramente que la receta que pongo allí para hacer
nomás pensando, pensando, esa sabrosa bebida me la dieron ya con mala intención
nos fuimos desbalagando, de hacerme quedar mal con las personas de buena fe
sin dar causas ni motivos. que quieran hacer uso de dicha receta con fines
meramente personales; pero después, una persona de
conciencia me dijo que no se hace con la cáscara,
pues eso se queda para los barrios y para la gente
NOTA.-Hasta hoy, después de tantos años de conocerlo, y
que no le gusta gastar; sino con toda la piña, ya
eso por una mera casualidad, vine a saber que ese señor que madura y de buena clase, y que, además, se le muele
siempre he conocido como DON PACO se llama FRANCISCO. Yo canela, lo que se alc-ance a coger con una moneda
no sé de dónde saca la gente esos modos y esas mañas de andar
cambiando los nombres nomás a ojo. ¡Don Paco! ¡Don Paco! de a veinte, y se pone la olla a hervir en la lumbre.
¿Quién iba a adivinar que se llama Francisco? Santo y muy
bueno que a las que se llaman Jesús les digan Chuchas o
Chutas; a las Refugios, Cucas; a las Josefinas, Pepitas; a las Hago esta aclaración para que no vayan a creer que
Mercedes, Meches; a las Manuelas, Memes; a las Cármenes, Mi· intencionalmente di mal la receta, con el malvado fin
mís; a los Enriques, Totos; a los Josemarías, Chemas, y así por
el estilo, porque todo eso está muy clarito; pero, ¿en qué cabeza de que no le salga al que la quiera aprovechar.
cabe decirle Paco a uno que se llama Francisco? ¡La verdad que
se necesita estar dejado de la mano de Dios para hacer eso! Les suplico que no vayan a pensarse esto pues yo
En fin, más vale · callarse y no decir nada.
OTRA NOTA.-Y a ver si ahora adivinan quién me corrigió no soy capaz de hacerles una jugada de esa clase, ni
esta poesía, pues no crean que voy a decírselos; pero fíjense menos de hacerlos gastar su dinero en una cosa que
qué modos de corregir. ¡Hasta parece que · andamos en otro
pueblo! A ver qué dicen ahora: Ni siquiera se afiguran quién fue. desde antes sé que no les va a salir bien.
1
200 MARGARITO LEDESMA
1
202 MARGARITO LEDESMA PoESÍAS 203
1
204 MARGARITO LEDESMA
11
1
1
206 MARGARITO LEDESMA PoESÍAs 207
Pero por más luchas que hizo, Pero, al fin y al cabo, no supo esa gente
ya no le fue posible hablar, lo que el grande hombre les quería decir,
y así, quiso que no quiso, pues no es lo mismo pensar y sentir
se murió sin poder explicar. que explicar lo que se piensa y se siente.
1
"'
PoEsÍAs 209
1
PoEsÍAs 211
1
212 MARGARITO LEDESMA
1
214
MARGARITO LEDESMA
,"j
1
216
MARGARITO LEDESMA
PoEsÍAs 217
Y luego un corredero de borrachos,
que hasta se les quitó la borrachera, Pero trataba de saber por qué
pues iban corre y corre a la carrera, había tanto mitote y tantos ruidos:
si querían asaltarnos los bandidos
y echándoles pedradas Jos muchachos.
o había timulto o zafarrancho o qué.
1
218 MARGARITO LEDESMA
1
220 MARGARITO LBDESMA
1
222 MARGARITO LEDESMA
¡Ojalá que el Gobierno les exija OTRA NOTA.-Pancho el Secretario del Juzgado fue el que
me aconsejó que en la nota anterior pusiera eso de taparse o
tejer unas frezadas competentes, cobijarse '•por cuerda separada", pues dijo que eso se usa mu-
que tapen bien a 1~ dormidas gentes cho en los Juzgados y que así se entiende bien lo que quiere
decir en dicha NOTA.
y eviten esos pleitos de cobijas.
1
228 MARGARITO LEDESMA
Carmelita, no se apene
con lo que le ha sucedido.
Bastante que nos ha podido
y muy disgustados nos tiene.
Casualmente lo leí
en ''La Voz de Guanajuato",
y, la verdad, un mal rato
pasé con lo que dice allí.
1
234 MARGARITO LEDESMA
POESÍAS 235
Y para que en forma impropia
y muy contenta, y hasta convidó una noche al señor Cura y al
no sigan con esa urdimbre, Presidente y a todas sus amistades para que fueran a verla ves·
que en la Oficina del Timbre tida de Reina en case su tía Pilar, pues trajo el vestido y se lo
puso para que la vieran todos y hasta dio una vuelta con él en
también le den otra copia. el jardín, y no dijo nada. A mí me dio pena decirle algo; pero,
como veo que ella no da trazas de decir nada y que ya se fue
y que nada dijo, le hice esta comprometedora poesía para man-
Y luego ya con todo eso dársela y para que vea que nada bien esruvo lo que le hicieron
y ya con tanta constancia, los tres supradichos señores y que está bueno que ella o alguno
de su familia diga algo; bien entendidos de que si, con todo y
se va usté a la Comandancia mi poesía, ni ella ni sus parientes o amigos dicen nada y se
a levantar un proceso. quedan otra vez callados, entonces veremos si yo digo algo o si
también me quedo callado como ellos, que yo creo que será
lo mejor, pues quien me manda andarme metiendo en lo que
Y si con tantos detalles no me va ni me viene, pues a poco hasta dicen que qué' me
se ve que ni así obedecen, interesa.
¡Para que vean, eso sí que había de salir muy feo, puede
que luego luego los presen que hasta peor de lo que le hicieron a Carmelita!
y salgan a barrer calles.
1
PoEsÍAs 237
1
238 MARGARITO LEDESMA PoEsÍAs 239
Pero al día siguiente me fui al rancho, -¡Buenas noches!, le dije,
donde duré dos noches y tres días,
-¡Buenas noches!
y bebí pulque y hice más poesías
-¿Y por qué no salías?, le pregunté,
y me comí un chivito que asó Pancho. y le tosí y el cinto me apreté,
porque pensaba echarle unos reproches.
Pero siempre yo estaba algo violento,
extrañando las pláticas con Chale; Pero no pude, porque la cristiana
así que rluego de comerme un mole, me contestó con voz media quedita:
me vine zas y zas en mi jumento. -Pues ya lo ves; hay una fiestecita
y no puedo salir a la ventana.
Y a las siete ya estaba yo, muy tieso,
esperándOla en frente de su casa, -Entonces ya me voy, le dije yo.
y, al no verla salir, decía: "¿Qué pasa? Mañana volveré, por si se puede.
¿Estará enfermo o estará en el rezo?"'. Ya veremos, a ver si no sucede
la misma cosa que hoy me sucedió.
Pero empecé a notar mucho revuelo
Después le pregunté con voz más recia:
y mucho luz y música y boruca,
-¿Y por qué es ese baile de candil?
y entonces me empezó a sudar la nuca
-Pues porque hoy me casé por lo civil,
y comencé a sentir cierto recelo.
y mañana me caso por la Iglesia.
1
240 MARGARITa LEDESMA
1
h
1
246 MARGARITO LEDESMA PoEsÍAs 247
De todos modos, apenado me hallo, muy agusto y vayan con ellas a presumir y hasta a reírse con
otras muchachas, aprovechando y utilizando para esas risas los
pues remo que la gente que no piensa dientes postizos de sus propias esposas, que se sacaron a escon·
vaya a pensar que, siendo su tocayo, didas y sin consentimiento de las interesadas, pues eso no es justo.
yo soy como él de falto de vergüenza. Si quieren reírse con dichas personas, que les cueste su dinero
o que se rían con las puras encías o con unos dientes de chicle o
de parafina o de cera de vela, como los que se ponen algunos
para disimular. Yo creo que ese es el mejor remedio.
NOTA.-Esta poesía me ha causado tantas envidias y tantas
críticas que ya no hallo ni qué pensar. Dicen que no son dientes
de hule y que no está bien dicho así porque no son de hule. Y
yo muy bien sé también que no los hacen de hule ni son de
hule, pues para ser de hule están muy duros y sería necesario
que estuvieran más blanditos; pero así se les dice a todas esas
cosas postizas, pues las piernas que les ponen a los que se las
cortan o se les caen, como al General Santa Ana, y los brazos
y manos que también les ponen a las personas, como a un señor
don Homobono que ha sido Jefe Político de muchas poblaciones
del Estado, son de palo o de cuero o de cuáquil o de otras cosas,
y todos dicen que traen una pierna de hule o una mano .de hule,
aunque sean de otra cosa. Entonces, ¿por qué se admiran de que
digan que esas personas traen dientes y muelas de hule? Además,
bien saben todos, porque todos los días se oye por dondequiera,
que cuando a alguna persona la hacen menos en algo, dice luego
luego muy enojada: ¡Bueno, ¿y yo seré de hule? Ni modo que
vaya uno a pensar que esa persona es de hule, pues clarito
estamos viendo que es de carne y hueso; y, sin embargo, así se
dice y nadie reclama ni exige nada. Y también he oído que a
los músicos que vienen a tocar en las fiestas de aquí y que duran
tocando tres días y tres noches sin descansar, les dicen trompas
de hule, y no creo que nadie vaya a creer que deveras tienen la
boca de esa sustancia, y nadie dice nada ni reclama nada ni hace
escándalo por esa causa. Lo que sucede es que a mí me han
agarrado por la orilla de la cerca y que basta que yo diga una
cosa para que, por bien dicha que esté, luego luego comiencen
a busca11le contras.
Pues, con todo y eso, yo les recomiendo mucho a las esposas
que usan dientes o dentaduras de hule y que tienen maridos que
no tengan dientes propios o naturales y tampoco tengan denta·
dura de hule, que todas las noches, cuando ya se vayan a acostar,
guarden sus dentaduras bajo llave y no vayan a dejarlas en un
vaso de agua, como se acostumbra, o enterradas en las macetas,
como doña Carmen la de La Palanca, pues no es justo que los
susodichos maridos se las saquen a escondidas y se las canquen
1
PoESÍAs 249
que en las noches había en la población,
pues tocaban guitarras, bandolinas
y pianos y bandurrias y ocarinas
O TEMPORA! O MORES! y a veces hasta un dulce bandolón;
sólo se oyen los gritos destemplados
de esos roncos fonógrafos rayados
También este letrero es consejo
que gritan cual furiosos condenados,
de don Nacho el de la Botica.
sin parar.
No sé por qué será, pero estoy viendo
que las novias se están despercudiendo Tampoco hallo el motivo de otras cosas
y no platican ya por el balcón; muy emañas, muy raras y curiosas
sino que, sin decir ni agua va, que veo, que noto y oigo en el lugar,
ni tampoco avisarle a la mamá, que me hacen ver que todo está cambiando,
se van con el novio al Estación que poco a poco vamos caminando
y allí platican sin interrupción sin saber dónde iremos a parar,
hasta que oyen que suena la oración si en la orilla de algún profundo mar
de la noche. o en algún apestoso muladar
o dónde.
Tampoco sé por qué, pero he notado
que las viejas y jóvenes han dad()
en andar chupe y chupe sin parar, NOTA.-Mucho les recomiendo se fijen en los estrangoteS.
y que traen el cigarro entre los dedos ÜTRA.-La verdad, ya no me están cuadrando muchote los
y, al estar platicando sus enredos, consejos y las ayudas de don Nacho el de la Botica, pues,
además de que es muy mandón, como si el libro fuera suyo,
no dejan ni un momento de chupar, mucho me estoy recelando que los letreros que me aconseja no
ni tampoco dejan de munnurar; estén bien, pues el otro día unos muchachos me gritaron desde
detrás de un esquina: '•¡Adiós, Becleriano!" "¿Dónde dejaste el
sino que todo es hablar y hablar Gloria Munde?"
de la gente.
NOTA DEL EDITOR.-Me permito recordar a los lectores que,
entre las composiciones de esta obra, hay una que lleva el título
Tampoco hallo por qué, pero yo he oído de BECQUERIANA y otra el de SIC TRANSIT GLORIA MUN·
que en vez de aquel tan agradable ruido DI, sugeridos ambos por don Nacho. Seguramente que a ellas se
refiere el señor Ledesma en la nota anterior.
_,,
PoEsÍAs 251
1
PoESÍAs 253
1
254 MARGARITo LEDESMA
1
260 MARGARITO LEDESMA
1
262 MARGARITO LEDESM A
PoEsÍAs 263
Y, según me dio a entender
con palabras provechosas, Y que era un hombre tan probo,
lo de arriba es para cosas, tan vivo y de tantas ganas,
lo de abajo para ler. que anduvo cinco semanas
trepado arriba de un globo.
Mas, sea el que serse, no cuela, me se desapareda se volvía a aparecer otra vez. Se los digo por-
y aunque .sean buenas sus miras, que es fácil que algunos no sepan lo que quise decir y hasta
vayan a pensarse que quién sabe qué seria lo que quise decir.
ese montón de mentiras
no se las cree ni su abuela. NOTA DEL BDITOR.-Yo creo que a don Margarita le pasó
en este caso lo mismo que cuando asistió a la corrida de Silve-
ti, o sea, que no vio ni oyó bien de que se trataba, y a eso se
NOTA.-La verdad es que, por pura pena y por ser un hombre debe que haya confundido a Julio Verne, de quien seguramente
tan raro y tan chocoso, no me arresgué a preguntarle quién es estuvo hablando el "preceptor", con su compadre Berna; trocan·
ese m en tao Berna del que nos contó tan grandes mentiras. Y o do así los conceptos e interpretándolos a su modo.
tanteo que se trata de mi compadre. Bernabé Contreras, al que
todos le decimos Berna o don Berna por puro cariño y por
que es un amigo muy cabal y muy parejo y que hace como
unos cinco años que se fue para Cholula, donde espero en Dios
que viva todavía, pues no ha sido bueno para mandarnos un re·
cadito o siquiera unas saludes con alguien. Y creo que pueda
ser él porque no hay por aquí otra persona a quien le digamos
don Berna y porque, además, mi susodicho compadre era muy
ingenioso y le gustaba mucho hacer inventos, pues no se me
olvida que una vez nos enseñó a agarrar ratones con una ca·
zuela bocabaryo y un tejamanil con carne en la yunta y, además,
porque muchas veces llegó a decirme que tenía muchas ganas
de conocer el mar y de andar mar adentro (fíjense, mar aden·
tro) , y una vez que unos cirqueros echaron aquí un globo,
hasta pagaba porque lo dejaran subir, aunque fuera amarrado
del trapecio, y siempre andaba diciendo que qué bonito se sen·
tiría poder volar como los zopilotes y que qué bonito conocer
todo el mundo. Voy a ver si puedo indagar su dirección para
escribirle y darle a saber lo que ese hombre nos vino a contar
aquí, para que nos diga si es cierto y si no, para que no lo
ande descreditando con esas mentiras que ni que fuéramos chi·
quitos y que hasta puede pensar la gente que él es el que le dice
que las cuente pata hacerlo quedar bien. Pero, pensándolo bien,
mejor no le escribo porque, como ni más hemos vuelto a tener
razón de él desde que se fue para Cholula, a poco ya se murió
y hasta la estampilla pierdo. No, mejor no le escribo.
OTRA NOTA.-Oriundo es la persona que le gusta andar mu·
cho y que nomás anda para allá y para acá y que no le gusta
estar en su casa, sino ande y ande por todas partes. Esto lo su-
pe por el Padre Olguín porque una vez, platicando de un señor
que estuvo aquí una temporadita y luego se fue y después vol·
vió a venir y luego volvió a irse y de nuevó volvió a
venir y otra vez se fue de nuevo, me dijo que ese señor pareda
oriundo de aquí, pues nomás andaba yendo y viniendo y confor·
1
PoESÍAs 267
1
PoESÍAs
271
fue siempre al fin del cuento el que la llevó,
porque todo el flama¡zo de la escopeta
le atinó al mero centro de la maceta,
y sin más requisitos allí quedó.
EL JUMENTO ASESINO
¡Pobre de mi compadre, qué mal le ha ido!
Vieran nomás lo mucho que lo he ·sentido.
Como un triste recuerdo a
la memoria de mi inolvidable NOTA.-Hasta parece cosa de mentiras lo que le aconteció
compadre don Odilón Macías, a mi compadre don Odilón; ,pero es la pura verdá que un día
se le antojó salir a matar conejos con una escopeta que le aca·
a quien le tocó la demalas baba de componer Gabriel el herrero y que dicen que le quedó
una vez que salió a matar co- muy bien apuntada; pero, como pasó mucho rato y nada de
nejos. coneljos y como mi compadre estaba bien desvelado por los pre·
parativos de la víspera, fue y recargó la escopeta en el tronco de
un árbol y allí, por un ladito, dejó maniado a un diablo de bu·
rro rejego en el que había ido a la matazón, por no fatigarse
mucho. Y a con esto él se acostó en el suelo a descansar un rati·
¡Pobre de mi compadre, qué mal le ha ido! to, pero el demontre de jumento comenzó a bullir la cola y
Estaba atrás de un árbol, bien escondido, en una de esas bullidas tocó la demalas de que tumbó la esco·
pera con la susodicha cola. El arma, el cairse, se disparó sola y
esperando el momento de disparar; el flamazo fue derechito a pegarle al pobre de mi compadre en
mas, después de tres horas que no hubo nada, el mero centro de la cabeza dejándolo allí mismo súpito y tieso
para todos los días de su vida.
dijo muy apurado: "¡Ah, que tantiada; Sin embargo, con todo y que le tocó la demalas al pobrecito
yo creo que ya es muy justo de descansar!" de mi compadre y de que mucho lamenté su desgracia, no dejé
de alegrarme que se le ocurriera llevar escopeta al negocio de
los conejos, pues si, en vez de llevar esa arma que tanto me ha
Recargó la escopeta contra de un tronco, servido para que esta poesía me salga bien, ·se le ocurre llevar
y también su jumento, que era algo bronco, un Rémiro, una charpa de esas de a doce tiros, un 30·30 de los
que tanto les gustaban a los maderistas o un Máuser de esos
muy cerquita del arma fue y lo manió. que ranto se andan usando ahora, figúrense los trabajos que ha·
El se acostó en el suelo, todo hecho bola, bría paSl!do yo para casar los versos con esos nombres de ar-
mas tan escabrosos. ¡Ni lo quiera Dios!
pero el diablo de burro bulló la cola Es cierro que también habría sido bueno que hubiera llevado
y tumbó la escopeta, y se disparó. una lanza, que casa muy bien con panza; pero al momento
reflexioné que la herida fue en la cabeza, no en el estómago, y,
además, que ni modo que mi señor compadre hubiera salido
Y mi pobre compadre, bien acostado, a matar conejos a lanzazos, como si fueran gentes, que, por cier·
to, no mató ninguno y el burro fue el que lo mató a él. ¡Que
y hasta medio modorro y atarantado, Dios Nuestro Señor lo haya perdonado!
1
272 MARGARITO LEDESMA
1
276 MARGARITO LEDESMA
1
280 MARGARITO LEDESMA PoESÍAs 281
Mas, como Wlo y otro tren y de subirse en el mío,
iban muy espaciamente, por seguirme algún perjuicio,
pensé que era conveniente o hacerme algún estropicio
aprovechar el vaivén. o meterme en algún lío.
1
PoEsÍAs 283
1
,.,
herreros de oficio, que sólo tenían un ojo, los poetas no les di·
cen ruertos, como sería lo narural, sino ciropes o ciclones, si mal
no recuerdo, pues eso lo leía en un librito que me prestó don
Filogonio Hernández y que apenas lo comenzaba a leer, luego
luego empezó con recados que se lo mandara y que se lo man·
clara, hasta que yo de aburrido, se lo mandé y no ruve tiempo
de leerlo muy a fondo y de sazonarme bien de lo que decía;
DIIABLO DE HOMBRE pero ya con lo que les dejo dicho ven ustedes que es muy cierto
Jo de la licencia que tenemos Jos poetas para acomodar y hasta
cambiar p~!abras, sin que se tome a mal.
Anda como león rugiente, NOTA DBL EDITOR.-Supongo que en la nota anterior el
señor Ledesma quiere referirse a los cíclopes cuando habla
nomá espantando gente, de Jos dropes o ciclones, cosa que es muy disculpable por la
lleno de mucho coraje. poca disposición de don Filogonio para dejarle el libro por el
tiempo necesario para que se "sazonara" bien de su contenido.
Hasta parece un salvaje
que tuviera algún pendiente. $
1¡
PoESÍAS 291
PARA UN PAISANO .
..u~ ~
'-~
'-
Don Secundino Ceballos
es hombre de mucho empuje.
Es como un par de caballos
o como viento que ruge.
Yo le muestro admiración
y lo trato con respeto,
no sea ·que de un apretón
me descuente el esqueleto.
He creído pertinente cerrar esta décima edición con ' Leída en el homenaje que se tri-
los versos que escribí para el inolvidable Mario Tala- butó al inolvidable MARIO en el
vera y que leí en el homenaje que se le tributó en el 1 Teatro Angela Peralta de San
Teatro Angela Peralta de esta noble ciudad de San Miguel de Allende, la noche del
Miguel de Allende, la noche del 31 de octubre de 31 de octubre de 1 9 53 .
1953; homenaje al que Mario no pudo asistir perso-
nalmente por encontrarse ya muy enfermo.
A este gran homenaje, que es acopio
de lo más noble que nuestra alma encierra,
Resolví proceder así porque en esos versos están in- traigo un doble cantar: mi canto propio
tercalados otros de Margarito Ledes:ma que, además y el de un humilde bardo de otra tierra.
de manifestar su admiración y cariño por el briUante El mío, ya vacrlante y desgarbado,
compositor a quien se tributaba el homenaje, vienen de corte antiguo y frases sin aliño,
indudablemente a formar parte del acervo literario del viene a cumplir con un deber sagrado
humilde poeta. de fe, de grati,tud y de cariño,
El otro, con su rústico atavío,
¡Lástima que no 'hayan podido cumplirse los deseos oro fino, en paupérrima envoltura,
manifestados por Margarito en esos versos, de hacer podrá suplir lo que le falta al mío
él las poesías o letra de las canciones, para que Mario en gracia, inspiración y donosura.
"les compusiera la tonada". Ese otro es del humilde Margarito,
deil poeta genial de Chamacuero:
¡Ello habría sido la consagración definitiva del "hu- Me llegó en un modesto manuscrito,
inilde" poeta Margarito! y así se expresa el popular trovero:
1
PoESÍAs 299
'
el hoyo aventó un chisguete. por el boquete. Lo que sí yo creo que el agua ya andaba abajo,
buscando el modo de potar- para arriba, y, cuando sintió la va·
Y ya pasado .buen rato, rilla, dijo "ora es cuando", y aprovechó el abujero para salirse.
después de algo anochecido. Ora que cómo le hicieron para ver que abajo de la tierra anda·
ba esa agua queriendo potar, eso sí quién sabe
SOSPECHA.
' RECLAMACION.
NOTA.-Yo creo que con lo que aquí le digo a Cholita o me NOTA.-Ya me han de estar criticando porque puse lo de
hace caso o acabo con el negocio, aunque creo que con eso que las fuerzas tan fuertes; pero ni caso que les hago porque es muy
le digo que mi amor es como Torre de Babel a la mejor se da cierto que algunos tienen las fuerzas más fuertes que otros. Si
bien cuenta de que empecé a quererla y no me acabalo, igualito no, pos nadie ganada jugando a las vencidas.
que la dicha Torre que ya hace vario tiempo empezaron a hacer OTRA NOTA.-Se me ha metido en la cabeza que el señor
unos señores de la antigüedad, y creo nomás le echaban los puros Doctor debe de ser pueque tataranieto de algunos de los de las
cimientos y la tenían que empezar de nueva cuenta porque no Guerras Médicas que mientan en algunos libros. O a la mejor
se entendían. Yo creo que para pegar piedras, o algún otro ma· ni es pariente y nomás es de esos espamenteros; pero como nadie
terial, no tenían esos señores para que estar hable y hable, y sabe de dónde apareció ni qué camino agarró, por eso siem-
hasta estoy por decir que si no acabalaron la torre fue por pu- pre da lugar a que se sospeche.
ritita flojera.
.....-:-.-----
~"'
,..i{;
304 MARGARITO LEDESMA
POESIAS
Dúo Poético . . . .. 31
Remembranzas .. .. . . . . . . . . . .. . . . . . 35
Horas de pasión ... . . 38
Sic transit gloria mundi 40
El Charro Bardomian& /¡ ]
Las elecciones 45
Dulce cantar 47
Pág.
Los maloras . . . . . . . . . . . . . . . ... . 176 La reina del carnaval . . . . . . . . .... . ...... . . . 229
l\ialcriadez •••• o o ••••• • • • • • • •• o o • •• • •• • •
177 236
Historia triste .. . ..... . . . . . . . ... . . . .. . . ... .
Eso no está bueno .. .. ...... .. . . . .. . . . .. . . 178 .E. 241
El picobajo y e1 andantr
Sobre esta segunda edición . . . . . . . . . . .. . 179 244
"> Los dientes de hule .. . .. .. .. .
Advertencia preparatoria •• ••• • •• o •• • •• • • • ••
185 248
(). tempora! O mores! . . . .. . .. . . . ... .. . . . .
El cantar ele los perros • • • • o • • • • • • •
186
- Ptíg.
Desherejamien to 250
Lo atrasaron . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 252
No hubo remedio 255
Nada de perdón 257
¡Qué lástima! . . 259
Puras mentiras . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 261
El bable misterioso . . . . ... . .... .' . . . . . . . . . . 266
El jumento asesino 270
Poesías por Margarito Ledesma en su
Juan el desn&rizado ... . . . ... . . . . . ....... . . 273 decimanovena edición de 2,000 ejemplares
se terminó de imprimir··el día 29 de abril
¡Ardezón! ... . .. .. . .. . ...... . .. . .... . . ... . . 277 de 1999, en Impresiones Offset Caya,
¡Adiós pelón! .... .. ... . . . .. .. ... . . . .... . . 2í' 9 Zacahuizco Mz., "B" Lote 22 Biz, Col. San
Lorenzo Tezonco, C.P. 09900 Delegación
El pastel unitario . . . ... . ... .. . . . . . . . . . . . .. . 282 Ixtapalapa, México, D.F. Tel. 58-63-28-18.
¡Maldito gusano! 285
Diablo ele hombre 288 La Edición estuvo al cuidado del
Sr. Josémanuel Zavalazavala
Para un paisano 490 R .A.S.A .
A Mario Talavera 292
A Mario Talavera • o • • • • •• •• o • • • ' ; • • • . •• •• • 293
Un reparto justo . .... . . . . . . . . .. . . · .. . · · · · · 297 ·f. ·
Agua potable . . . ... . . ......... . .... .. . . . ~ . .
1
298
Reclamación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 300
Sospecha • o • ••• •• •• •• •••• • • •• •• • • • • ••• • • • •
301
Dedicatoria final . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 302
Post Scriptum . 303