Professional Documents
Culture Documents
Si informar fuera suficiente, las campañas informativas sobre drogas, estilo de vida saludable,
alimentación sana, etc… habrían erradicado ya muchos de los problemas de salud de la
población mundial. La persona que recibe la información debe sentirse capaz de llevar el cambio
adelante y, además, considerar que el cambio tiene algún sentido para él. Si no, informar es algo
así como predicar en el desierto.
Para entender porque unas personas consiguen tomar conciencia en un momento dado de
algún problema psicológico que tienen, y otras no, Prochaska y DiClemente nos ofrecieron un
fantástico modelo, llamado el Modelo de los Estadios de Cambio. Este modelo funciona como
una rueda e incluye las siguientes etapas:
la contemplación (tal vez tenga un problema, pero no me veo preparado para hacer
nada al respecto),
El papel del psicólogo en la entrevista motivacional es facilitar el avance desde un estadio hacia
el siguiente para una persona concreta, con sus características y problemáticas individuales.
Realiza pequeñas ayudas durante un periodo más o menos largo de tiempo, ayudando a la
persona a acercarse poco a poco a sus objetivos, sin recriminar por una recaída ni plantear un
modelo todo-nada, que resulta muy desmotivamente para una persona que quiere salir de un
problema de salud o adicción y que se encuentra con dificultades para hacerlo
Pero, no nos olvidemos, para motivarnos a cambiar, tenemos que tener un mínimo de confianza
en que podemos conseguirlo sino, nuestra motivación no se pondrá en marcha. Por último,
antes de ponerte en marcha, tal vez necesites resolver tu ambivalencia, pues a veces no sabemos
si realmente queremos cambiar o no queremos hacerlo. Para todas estas cuestiones puede
ayudar la entrevista motivacional.
Los psicólogos, nutricionistas, psiquiatras, médicos, etc… que realizan entrevista motivacional,
saben que el cambio para cada persona ha de diseñarse a medida: cada persona, en cada
momento preciso de su rueda de cambio, necesita una ayuda diferente. Por ello,
el psicólogo tiene la importante tarea de captar la esencia del paciente y de su momento, y de
proponerle indicaciones adaptadas. Pero, de nada sirven las más acertadas indicaciones si el
paciente y el psicólogo no han conectado de manera apropiada, por ello la principal tarea del
psicólogo es concienciar al paciente sin despertar su reactancia psicológica, es decir, sin que se
sienta juzgado o presionado al cambio.
Para evitar esta reacción defensiva, el psicólogo puede echar mano de su capacidad de empatía
(solidarizándose con al paciente sin por ello dar por válidas sus conductas), de su calidez
emocional y de su autenticidad.