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Universidad Nacional Autónoma de México 


Facultad de Estudios Superiores Iztacala 



Psicología 

Psicología Aplicada Laboratorio II 




Adquisición de habilidades para separación de residuos con téc-
nica de economía de fichas en niños que cursan preescolar



Arellano Ugalde Itzel Guadalupe 

Contreras Hernández Ángel 

Laguna Fernández de Lara Diana Mayra

Morales Vargas Javier Giovanni


Varela Veyna Carla Michelle


Grupo: 2201

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Adquisiciónn de habilidades para separación de residuos con técnica de economía de
fichas en niños que cursan preescolar
La modificación conductual se clasifica en mediacionales y no mediacionales. Los puntos
de vista no mediacionales se centran en conexiones directas entre los eventos ambientales,
situacionales y las conductas. Sus consecuencias principalmente hacen referencia a los
eventos en el ambiente, como reconocimiento o alabanza por parte de otros. Un enfoque
principal que se deriva de la modificación conductual no mediacional es el condicionamien-
to operante (Kazdin, 1996).
Condicionamiento Operante
El condicionamiento operante surge del enfoque conductista, y es resultado de la investiga-
ción sobre el aprendizaje. Se basa en la utilización de una metodología, así como también
en una tecnología de laboratorio bastante sofisticada. Aproximadamente dos décadas des-
pués de su nacimiento, en los años 30, el condicionamiento operante se aplicó a la conducta
humana en investigaciones de laboratorio programadas. A finales de los años 50, y princi-
pios de los 60, se realizaron los primeros intentos de aplicar las técnicas del condiciona-
miento operante al cambio de la conducta en poblaciones clínicas. En distintos estudios se
había visto que el comportamiento problemático o desviado podía modificarse manipulando
las consecuencias reforzarte y punitivas del ambiente (Kazdin, 1978).
Análisis Conductual Aplicado
El Análisis Conductual Aplicado es un método de modificación de conducta sistemático,
que se usa para la prevención y el mejoramiento de problemas conductuales y programas de
aprendizaje. Se basa en el rendimiento y se interesa por lo que la gente hace, es decir, la
manera en que responden a su ambiente. Además, utiliza los principios de la conducta, di-
señados para modificar el comportamiento en una de varias direcciones, ya sea: enseñar
conductas, mantenerlas, extenderlas, restringirlas o reducirlas (Sulzer y Mayer, 1990).
El Análisis Conductual Aplicado surge de la extrapolación de los métodos experimentales,
usados en el Análisis Conductual, a los escenarios aplicados; el Análisis Conductual es un
enfoque experimental que estudia la conducta en el laboratorio y evalúa la conducta de uno
o pocos individuos en el tiempo para registrar los cambios después de varias intervencio-
nes. El punto focal del Análisis Conductual Aplicado está en las conductas clínica o social-
mente relevantes en áreas como los trastornos psicológicos y psiquiátricos, educación,
rehabilitación, medicina, negocios e industria. En la mayoría de las aplicaciones de los
principios del condicionamiento operante, se hace énfasis en las consecuencias que siguen a
la conducta (Kazdin, 1996).
El Análisis Conductual Aplicado es objetivo y funcional. Siempre hace referencia a des-
cripciones de acontecimientos mensurables y cuantificables, procura relacionar una conduc-
ta con varios estímulos o viceversa y formula la relación en forma de función. En un análi-
sis funcional, se deben imponer controles necesarios para probar cuantas veces sea necesa-
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rio la existencia de una relación. A consistir siempre en una manipulación activa de los es-
tímulos y conductas comprendidas en dicha relación. El estímulo procedente adquiere con-
trol sobre la respuesta en tanto discrimina o distingue la ocasión en que esa respuesta va
seguida de una consecuencia determinada (estímulos discriminativos). La función de los
estímulos discriminativos es que la conducta en cuestión ocurra (Ribes. 1984).
Por tanto el Análisis Conductual Aplicado se basa en distintos principios del condiciona-
miento operante (reforzamiento positivos, reforzamiento negativo, extinción y castigo), se
refieren a las diferentes clases de relaciones entre la conducta y los eventos que la siguen.
Tales principios se muestran en consiguiente:
Reforzamiento:
El principio del Reforzamiento, es un aumento en la frecuencia de una respuesta, cuando
ciertas consecuencias la siguen inmediatamente. La consecuencia que sigue a la conducta
debe ser contingente a ésta. Un evento contingente que incrementa la frecuencia con la que
se realiza la conducta se conoce como reforzador (Kazdin, 1996).
Existen 2 tipos de reforzadores: Positivos, que son eventos presentes después de una res-
puesta hecha y que aumenta la frecuencia de la conducta a la que siguen; y Negativos, que
son eventos que se quitan después de haber hecho una conducta y que incrementan la fre-
cuencia de la respuesta que precede a su ausencia (Kazin, 1996).
Castigo:
Es la presentación de un evento aversivo o la eliminación de un evento positivo subsiguien-
te a una respuesta que disminuye la frecuencia de dicha respuesta (Kazdin, 1996).
Extinción:
En la extinción se deja de reforzar una respuesta que previamente fue reforzada; es el cese
de reforzamiento de una respuesta. La ausencia de las consecuencias reforzadoras reduce la
conducta. Se puede utilizar la extinción para reducir o eliminar una conducta. Sin embargo
deben identificarse los eventos que refuerzan la conducta, para impedirles la ocurrencia
después de la respuesta (Kazdin, 1996).
Los programas de modificación de conducta en los escenarios aplicados, se basan funda-
mentalmente en los principios del condicionamiento operante. Dichos principios describen
la relación entre los eventos conductuales y ambientales, que influyen en la conducta, esta
relación, a la que se conoce como contingencia, comprende tres componentes: Evento ante-
cedentes (A), conductas (B) y eventos consecuentes (C) (Kazdin, 1996). 


De tal manera que el objetivo principal del Análisis Conductual Aplicado es desarrollar una
conducta y, una vez que se encuentra establecida es necesario utilizar algunos procedimien-
tos para asegurar su conservación mediante el uso de un programa de contingencias. En es-
cenarios aplicados y en la vida diaria, las conductas pueden conceptuarse como operantes, o

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sea que las conductas operan sobre el ambiente y tienen consecuencias que influyen en la
probabilidad de que dicha conducta se realice en el futuro (Kazdin, 1996).
Aplicaciones del Análisis Conductual Aplicado en diferentes contextos
Por otra parte, el Análisis Conductual Aplicado está enfocado en conductas sociales rele-
vantes, como la educación, el retraso, las enfermedades mentales, la crianza de los niños y
la delincuencia. Las respuestas que se estudian están en función de la relación estrecha con
la vida cotidiana, es decir, con el ambiente en particular de las personas. Por tanto el Análi-
sis Conductual aplicado debe ser empleado en lugares donde se necesite cambiar conduc-
tas sociales o clínicamente importantes (Kazdin, 1983).
En el ámbito de la salud se suele utilizar con:
Pacientes psiquiátricos: En la mayoría se ha utilizado el método de economía de fichas. Se
suelen reforzar conductas relacionadas con el cumplimiento de las normas del hospital, el
aseo personal. Así, este tipo de conductas se han modificado con facilidad, llevando consi-
go la mejor adaptación de los pacientes y consecuentemente un mejor humor así como ma-
yores habilidades sociales. Además, con estos pacientes, las contingencias de reforzamiento
y castigo también se han concentrado en conductas como el comer en exceso, la cantidad de
pastillas ingeridas o la toma de decisiones, entre otras (Kazdin, 1983).
Deficientes mentales Así mismo, hay una gran variedad de programas operantes para todos
los clientes con distintos niveles de deficiencia mental; dichos programas se han llevado a
cabo en instituciones, centros de día y aulas especiales. Se ha intervenido principalmente
para la adquisición de conductas relacionadas con el cuidado personal, sin embargo tam-
bién se han llevado a cabo en la supresión de respuestas no adecuadas como verbalizacio-
nes altisonantes o episodios agresivos; consiguiendo varios éxitos (Kazdin, 1983).
En el ámbito educativo se trabaja con:
Estudiantes: Por otra parte, sabemos que, sin duda, las técnicas operantes han sido más
utilizadas con estudiantes en el aula debido a que en estos programas ha participado pobla-
ción muy diversa, desde niños <<normales>>, deficientes, delincuentes, así como diferen-
tes niveles educativos e instituciones en diversas situaciones. Antes, el objetivo se había
centrado en el cambio del comportamiento, aunque estos no necesariamente mejoraban el
rendimiento académico. De esta forma, la atención se ha dirigido a los problemas del pro-
pio rendimiento académico, tal como la lectura, la aritmética, la escritura o la ortografía,
entre otros; incorporando técnicas como moldeamiento, el reforzamiento inmediato y el re-
forzamiento de la tasa de respuesta; obteniendo resultados satisfactorios (Kazdin, 1983).
Niños institucionalizados: Además, la conducta gravemente trastornada ha sido tratada en
ambientes institucionales. Se han utilizado técnicas operantes en niños diagnosticados
como autistas o hiperactivos. Mostrando resultados favorables en la pérdida de conductas
auto estimulantes o destructivas, así como de las rabietas por medio de la técnica del casti-
go (Kazdin, 1983).
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Mientras que en el ámbito social encontramos:
Predelicuentes y delincuentes: Estos programas también se han llevado a cabo con prede-
licuentes y delincuentes. La mayoría se han aplicado en correccionales pero se ha intentado
modificar la conducta de los delincuentes mientras viven en situaciones parecidas al hogar.
Aunque normalmente los programas intentan eliminar conductas antisociales específicas, se
ha puesto una mayor atención en el reforzamiento de respuestas socialmente aceptadas. Los
programas varían según la edad del individuo y su situación (Kazdin, 1983).
Delincuentes adultos: De igual forma se han utilizado con delincuentes adultos. Los pro-
gramas son utilizados con reclusos y se centran en la adaptación a la institución. Otros
programas ayudan al desarrollo de conductas positivas, un ejemplo es que los internos reci-
ben consecuencias reforzantes, como dinero o actividades especiales, por sus hábitos de
estudio y por realizar las tareas académicas. La investigación con los reclusos demostró que
las conductas académicas son fácilmente modificables. Aun así, hay pocos datos de los
efectos a largo plazo de los programas operantes con delincuentes adultos que han salido de
la cárcel (Kazdin, 1983).
Alcohólicos y drogadictos: La mayoría de los casos con los alcohólicos y drogadictos se
han llevado en hospitales. Los programas suelen utilizar el método de economía de fichas
para adaptarse a su ambiente. Además, en algunos programas utilizan el beber en pequeñas
cantidades como reforzador, con el propósito de que aprender a no sobrepasarse en los ni-
veles. Se ha demostrado la eficacia de diversas técnicas de reforzamiento y castigo para
controlar el consumo de la bebida dentro del hospital (Kazdin, 1983).

Manejo de contingencias 

Es importante mencionar que el manejo de contingencias es un manejo o modificación de
las consecuencias de una respuesta o conducta, dependiendo al trabajo que se quiera obte-
ner. En un estudio, Sulzer y Mayer (1990) mencionan que una contingencia es una relación
entre la respuesta y el estímulo antecedente a la consecuencia. Así, si los estímulos depen-
den de la respuesta, en el Análisis Conductual Aplicado se identifican las contingencias y se
reacomodan en concordancia con los principios de la conducta, de modo que se pueda al-
canzar un cambio conductual. Por tanto existen técnicas y procedimientos empleados en el
manejo de contingencias.

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JProcedimientos empleados en el manejo de contingencias

Reforzamiento intermitente:
El reforzamiento intermitente se lleva a cabo cuando encontramos que la conducta se pre-
senta con la frecuencia suficiente como para decir que el sujeto la ha adquirido. Consiste
en presentar el reforzador de manera discontinua, puede programarse teniendo en cuenta el
número de respuestas o el tiempo que transcurre. La transición del reforzamiento continuo
de la conducta al reforzamiento intermitente debe ser gradual (Ribes, 1984).

El encadenamiento:
Se desarticula en varios segmentos más simples la conducta terminal o final que nos intere-
sa y se trabaja por separado en cada uno de aquellas. Hecho esto, se procede a unir los dis-
tintos componentes para re articular la conducta compleja especificada en un principio (Ri-
bes, 1984).

Técnicas empleadas en el manejo de contingencias

La saciedad:
Se basara en el manejo apropiado del reforzamiento. Para la supresión de la conducta se
utiliza el propio reforzador que la mantiene; se aplica de manera muy simple, se aumenta en
forma considerable la administración del reforzamiento, hasta que se sacia al sujeto de ma-
nera que el reforzador pierde su valor como tal (Ribes, 1984). 


El tiempo - fuera del reforzamiento:
Es de gran utilidad cuando, aun conociendo el reforzamiento que mantiene la conducta, no
podemos suspender su administración. Lo que se hace entonces es sacar al sujeto de la si-
tuación cuando emite la conducta que deseamos suprimir (Ribes, 1984).

Contrato de contingencias:
Se hace un acuerdo entre una persona que desea que cambie la conducta y la persona cuya
conducta se va a modificar. El contrato especifica la relación entre la conducta y sus conse-
cuencias.

La Economía de Fichas: 

Es un sistema de reforzamiento en el cual se ganan fichas por una variedad de conductas y
se emplean para adquirir una diversidad de reforzadores sustitutos. Son reforzadores gene-
ralizados y que pueden intercambiarse por diversos eventos reforzaste conocidos como re-

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forzadores sustitutos. Estas funcionan de la misma manera que el dinero en los sistemas
económicos nacionales (Kazdin, 1996).
Soler, Herrera, Buitrago y Barón, 2009, aplicaron un programa de economía de fichas en un
niño de 7 años de edad, estudiante de 1er año de primaria, se buscaba un decremento en las
conductas disruptivas tales como contestar de manera inadecuada, hacer pataletas, y hacer
que siguiera instrucciones como tender la cama, recoger la ropa etc. Se utilizaron hojas de
control de las fichas por cada semana de tratamiento en los que se estableció el sistema de
precios y reforzadores disponibles. Como reforzadores se utilizaron juguetes, golosinas,
acceso a tv, ir al cine, entre otros. La aplicación del programa resultó lo suficientemente
exitosa que se garantizó un adecuado ajuste en el comportamiento del niño, así como en su
entorno escolar y familiar. Pues se logró que el niño pudiera seguir instrucciones sin hacer
caprichos, y el decremento de las conductas que presentaba en un inicio.
En un estudio exploratorio realizado por Montero, A., Saavedra, M., & Ezquerro, M. 2009.
Se utilizó un programa de economía de fichas en un club de baloncesto. Se empleó una
muestra de 192 sujetos jugadores de la categoría mini-basket e infantil, con edades de 7 y
14 años. Se pretendía conocer las diferencias entre los que utilizaban un programa de eco-
nomía de fichas (tratado) y los que no seguían ningún programa (control). Ésta técnica se
usó con el objetivo de la modificación conductas referidas a la actitud de los jugadores, a su
puntualidad y al desarrollo de hábitos higiénicos y saludables en el deporte. Obtuvieron re-
sultado favorable, concluyendo que la aplicación de un programa de economía de fichas,
modifica las preferencias de los jugadores por determinadas habilidades específicas en los
partidos y entrenamientos de baloncesto.
Por otro lado y otra técnica, Vite, S., Pérez, G. y Ruiz C. en un estudio exploratorio llevado
a cabo en el año 2008, realizaron un programa para el reflejo y la aprobación social para
promover la sensibilidad materna en madres de niñ@s con problemas de conducta. A tra-
vés de un diseño experimental de un solo sujeto, se llevó a cabo un programa de modela-
miento. Los participantes fueron nueve díadas madre-niño de clase media baja. Los niños
presentaban problemas de conducta (desobediencia). La muestra comprendió́ cinco niñas y
cuatro niños. Como resultado fue que la conducta de obedecer de los niños incrementó
cuando sus madres reaccionaron a su conducta de una manera apropiada y oportuna.

En un estudio realizado por Carrasco N. en 2008, se llevó a cabo en un hogar de acogida


de menores víctimas de maltrato, en la ciudad de Guatemala, se aplicó en menores de entre
7 y 12 años, las técnicas economía de fichas y moldeamiento, con el propósito de modificar
ciertas conductas disruptivas que poseían los menores (golpear, insultar, gritar, enfadarse,
entre otras). A los 7 sujetos que participaron en este estudio, se le reforzó con un estiquer
cada vez que estos permanecían sin presentar las conductas por un lapso de5 min y con la
acumulación de estos se les entregaba su reforzador (un dulce o juguete). Los resultados

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generales mostraron que se obtuvo una considerable mejora en la disminución de estas
conductas resaltando así la eficacia del esta técnica.

Cabezas H realizo un estudio en el 2004 el cual trabajo, para que tres niños con problemas
de autismo con edades de 3 y 6 años aumentaran sus capacidades de destreza en conductas
básicas ( permanecer sentado, hacer contacto visual, entre otras.) y de esta forma fueran
aumentando para llegar a tratar conductas intermedias (discriminar objetos, seguir instruc-
ciones, y comprender la funcionalidad de objetos) con lo cual, pretendía que al desarrollar
estas conductas en los niños, aumentaran sus capacidades de aprendizaje en un nivel educa-
tivo. Para generar y darle seguimiento a dicho proceso se utilizó la técnica de moldeamien-
to en la cual, cada vez que los niños se acercaban o realizaban la conducta esperada se les
entregaba un reforzador (galletas, yogur, cereal). Los resultados muestran que en las que
las denominadas conductas básicas y conductas intermedias tuvieron un considerable au-
mento al punto de que estas conductas formaran parte del repertorio de los niños ayudándo-
los así a una mejor integración y comprobando la eficacia de la técnica economía de fichas.

Planteamiento del problema

Pregunta de investigación: ¿La frecuencia en la correcta separación de residuos por medio


de economía de fichas puede modificarse en niños que cursan preescolar?
Objetivo: El objetivo del trabajo es describir el efecto de la técnica de economía de fichas
en la modificación de conducta, sobre conocimientos y manejo de residuos en niños de en-
tre 5 y 6 años de edad que cursan el preescolar.
Justificación
Las actitudes ambientales son los sentimientos favorables o desfavorables que se tiene ha-
cia alguna característica del ambiente físico o hacia un problema relacionado con él. Las
actitudes que el individuo asume con respecto al ambiente implican aspectos de la vida co-
tidiana; dichas actitudes ambientales son la base para que el individuo decida dónde quiere
vivir y si está satisfecho o no con el ambiente que lo rodea (Holahan, 1996).
Una forma en la que se pueden aprender actitudes ambientales es por medio del condicio-
namiento operante, el cual propone que las respuestas que son reforzadas se fortalecen y
mantienen; es decir, que es probable que se repitan los actos que van seguidos de conse-
cuencias favorables. Según el modelo del CO, el individuo influye u “opera” sobre el am-
biente (Holahan, 1996).
Recordemos que el Análisis Conductual Aplicado está enfocado en conductas sociales rele-
vantes, las respuestas que se estudian están en función de la relación estrecha con la vida
cotidiana, es decir, con el ambiente en particular de la persona; por tanto, el Análisis Con-
ductual Aplicado debe ser empleado en lugares donde se necesite cambiar conductas socia-
les (Kazdin, 1983). De esta forma, se considera el deterioro ambiental un problema social y
a continuación exponemos las razones. El modelo de vida que llevamos actualmente inclu-

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ye el gasto de recursos naturales y energéticos que cada vez se vuelve más grande e insos-
tenible; las formas industriales de producción y consumo masivo generan de forma progre-
siva la destrucción del planeta (Bernache, 2006).
Algunos de los efectos de la crisis ecológica que ya se viven actualmente y que son percep-
tibles son: el aumento de las temperaturas, agujero en la capa de ozono, desertificación,
acumulación de residuos radiactivos, extensión de enfermedades como el cáncer o la mala-
ria, insalubridad del agua dulce, inseguridad alimentaria, agotamiento de los recursos reno-
vables y no renovables, etc. (Bernache, 2006).
Los residuos sólidos urbanos son los generados en nuestras casas, trabajos y ciudades, y
que podemos clasificar en inorgánicos y orgánicos (Bernache, 2006).
Los residuos orgánicos son aquellos que se descomponen gracias a la acción de microorga-
nismos, y con ellos se puede elaborar composta; biodegradables (Bernache, 2006).
Así mismo, los residuos inorgánicos son elaborados con materiales que no puedes descom-
ponerse o que tardan largo tiempo en hacerlo. Muchos de ellos pueden ser reciclados, pero
ello requiere que los materiales estén muy bien separados (Bernache, 2006).
En las ciudades, la basura lleva siendo un problema casi desde el origen de éstas, debido a
la alta densidad de población y al hecho de arrojar la basura a las calles. Esto ha producido
la proliferación de insectos, roedores y microorganismos patógenos, trayendo como conse-
cuencia enfermedades catastróficas para el hombre como la peste (Bernache, 2006).
De esta forma recalcamos los beneficios de la separación adecuada de la basura, tales como
el incremento del acopio de desperdicios reciclables, al facilitar la tarea de selección de los
residuos inorgánicos, y con esto la utilización de mayores cantidades de materiales recicla-
dos que reduce la necesidad de extraer ambos tipos de recursos naturales y le da tiempo a la
Tierra para volver a generarlos.; abre la posibilidad de producir composta para fertilizar los
suelos de jardines y parques de la ciudad; dignifica el trabajo y disminuye el riesgo de salud
del personal que labora en las plantas de selección (Bernache, 2006).

Método
Sujetos: 8 niños con edad de entre 5 y 6 años, cursando preescolar en una escuela particu-
lar.
Situación Experimental: El lugar donde se realizará el estudio será en una escuela particu-
lar, en un salón de clases de 6x6x2 metros, con ventanas transparentes de 50x60 cm ubica-
das en la pared izquierda y derecha y una puerta de 180x60 cm de color verde que conecta-
rá con el exterior, dicho salón es de color anaranjado, iluminado por lámparas de luz blanca
con 2 mesas, un estante, 2 colchonetas de color azul y un librero.
Materiales y aparatos: 2 hojas de papel bond; 1 cartulina blanca, tijeras, 10 metros de es-
tambre morado, 1 caja de gises de colores marca Bic; 5 Lápices y 5 plumas de marca Bic; 2
plumones de agua (azul, negro) y 2 plumones aceite (azul, negro) de marca Azor; 10 figuras

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de plástico en forma de plátano, papa, cebolla, sandía, mango, pepino, manzana, aguacate,
lechuga y naranja; 1 sello con forma de carita feliz; 2 botellas vacías de refrescos, 2 empa-
ques de galletas, 2 envolturas de frituras marca Chettos torciditos; 3 envolturas de paletas; 1
envoltura de pasitas de chocolate, 1 envase de jugo marca Boing, 10 impresiones a color
con imágenes de cáscara de plátano, naranja, hueso de pollo, huesos de pescado; 2 metros
de papel kraft; 1 cinta adhesiva; 30 paletas “pollito asado”; 30 paletas “pinta azúl”; 50 chi-
cles “Bubbaloo”; 20 paletas “paletones”; 30 paletas “sevillana” sabor piña; 20 chocolates
“Bocadín” y, principalmente, 4 botes de basura, 2 forrados de color verde para la basura
orgánica y 2 forrados de color gris para la inorgánica.
Instrumentos: Se utilizarán dos diferentes tipos de registros, el primero es el anecdótico el
cual consiste en hacer una descripciónn del fenómeno que se está observando, específica-
mente centrado en el comportamiento de un sólo individuo y su relación con el ambiente.
El cual permite la categorización del comportamiento e identificación de ciertos anteceden-
tes y consecuentes del mismo (Cepeda, López, Plancarte, Moreno & Alvarado, 2002). (Ver
anexo 2)
El segundo registro que se utilizará es el de frecuencia, el cual tiene como objetivo conocer
el número de respuestas que se emiten, en un formato especial se anota el número de veces
que ocurre una conducta definida (Cepeda et al., 2002). (Ver anexo 3)
Variable Independiente: Técnica de economía de fichas
Es un sistema de reforzamiento en el cual se ganan fichas por una variedad de conductas y
se emplean para adquirir una diversidad de reforzadores sustitutos. Las fichas van contin-
gentes a la conducta deseada, lo que incrementa la probabilidad de que tal conducta se repi-
ta (Kazdin, 1996).
Variable Dependiente: Número de conductas correctas de separación los residuos.
Hipótesis: La técnica de economía de fichas modificará la frecuencia de la conducta de co-
rrecta separación de residuos en niños de entre 5 y 6 años de edad, implementando capaci-
dades de discriminación y la separación adecuada de la basura.
Definición de respuestas:
• Operacionalmente
Respuestas correctas: 

-Discriminación de los dos diferentes residuos: Las/los sujetos dirigen su mirada hacia la
figura de plástico o envoltura, articulan con la boca emitiendo un sonido entendido como
palabra, diciendo “orgánico” u “inorgánico”, según sea el caso.
-Depositar los residuos en los botes respectivos: Las/los sujetos caminan en dirección hacia
alguno de los botes (verde o gris), sosteniendo con sus manos la figura de plástico o envol-
tura hasta llegar al bote (verde o gris) y dejarla caer dentro de alguno.

Respuestas incorrectas: 

-Depositar de forma incorrecta los 2 tipos de residuos: Las/los sujetos caminan en dirección
hacia el bote (verde o gris) sosteniendo con las manos la figura de plástico y dejándola caer
dentro de él. 


- Contestación inexacta de los diferentes residuos: Las/los sujetos dirigen su mirada hacia la

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figura de plástico, articulan con la boca emitiendo un sonido entendido como palabra, di-
ciendo “orgánico” u “inorgánico” cuando la figura de plástico o envoltura indicaba lo con-
trario.

• Conceptualmente
Respuestas correctas: 

-Discriminación de los dos diferentes residuos: Las/los sujetos mencionan qué tipo de resi-
duo es la figura de plástico que se les presenten o se les pregunte, ya sea orgánico o inorgá-
nico.
-Depositar los residuos en los botes respectivos: Las/los sujetos colocan los residuos orgá-
nicos en el bote verde y los desechos inorgánicos en el bote gris.

Respuestas incorrectas: 

-Depositar de forma incorrecta de los 2 tipos de residuos: Las/los sujetos colocan los resi-
duo orgánicos en el contenedor gris, los inorgánicos en el contenedor verde. 


- Contestación inexacta de los diferentes residuos: Las/los sujetos responden inadecuada-
mente cuando se les pregunte qué tipo de residuo es el juguete que se les ha presentado.

En caso de que el sujeto presente una respuesta incorrecta, el experimentador se mostrara


indiferente, absteniendo el reforzador y ofreciendo retroalimentación de la respuesta correc-
ta deseada para la obtención del reforzador ya sea material o social.

Diseño de investigación:
Diseños de series de tiempo o N=1:
Los diseños de series de tiempo o N=1 son denominados de esta manera porque N es igual
a 1, es decir, el experimento se realiza con un solo sujeto. Dichos diseños surgen como una
estrategia alternativa a los diseños de grupos, y son dos las consideraciones que no deben
perderse de vista: Esta estrategia enfatiza el tomar medidas repetidas, a través del tiempo de
un mismo sujeto.
Los diseños N=1 tienen como características las siguientes:
a) Realización de una serie de observaciones controladas, a lo largo de un periodo de tiem-
po, el cual es denominado línea base.
b) Cuando se observa estabilidad en la línea base, se introduce la variable independiente o
intervención, y se continúa registrando la variable dependiente.
c) Se trabaja con un solo sujeto o grupo de sujetos, funcionando cada uno como su propio
control. Si se trata con más de un sujeto, el estudio es considerado de replicación, aspec-
to que ayuda a corroborar la consistencia de los hallazgos.

Diseños A-B-A:

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Con este tipo de arreglo se fortalece el análisis del control de los efectos ocasionados por el
retiro de la intervención, posibilitado con mucha certeza responsabilizar a la variable inde-
pendiente del cambio. Existen dos tipos de retiro de la intervención, uno denominado “re-
versión terapéutica”, que consiste en aplicar la intervención a una variable dependiente dis-
tinta a la de interés, mientras que ésta se deja sin intervención; esto se hace con la finalidad
de tener mayor certeza de los efectos de la variable independiente. El otro caso se llama
“reversión”, que consiste en dejar de aplicar de aplicar la variable independiente a la varia-
ble dependiente seleccionada, es decir, volver a las condiciones iniciales de línea base.
La aplicación de este diseño con varios sujetos fortalece las conclusiones acerca de los
efectos de la intervención; su mayor desventaja es que termina en una fase de línea base,
pudiéndose generar problemas prácticos y éticos, por lo que no se recomienda su uso n si-
tuaciones en las cuales sea primordial la solución de un problema (Arnau, 1986).

Procedimiento:

La línea base (A) consistió en tres sesiones, de 3 ensayos con una duración de 5 minutos
cada uno dentro de cada sesión. Los experimentadores 1, 2 y 3 se presentaron ante el grupo
y, posteriormente, teniendo dos botes al frente (gris y verde), dieron la indicación de que
pasara un sujeto a la vez a depositar los residuos que le serán dados (3) al bote considerara
correcto. Mientras, los experimentadores 4 y 5 observaron la conducta de los 8 sujetos al
depositar los desperdicios en los botes; ambos experimentadores realizaban un registro de
frecuencia por cada sujeto.
Fase experimental (B) se llevó a cabo durante 3 sesiones y en ésta se hizo una interven-
ción por parte de los experimentadores. Los experimentadores 1 y 2 fueron los encargados
de dar las pláticas y hacer las actividades; el experimentador 3 puso los sellos cuando los
sujetos dieron respuestas correctas; los experimentadores 4 y 5 hicieron un registro de fre-
cuencia continua por sesión, en el que anotaron el número de respuestas correctas que emi-
tió cada sujeto.
La primera sesión de la segunda fase tuvo una duración de 40 minutos en la que los expe-
rimentadores dichos empezaron dando una plática de 20 minutos a los 8 sujetos acerca de la
importancia y las ventajas que conlleva tirar la basura en el bote correspondiente, para lo
que se contó con el apoyo de un cartel hecho con papel kraft y con dibujos; se fomentó la
participación por medio de preguntas de acuerdo a la plática. Al finalizar, se comentó con
los niños que habría actividades en las que podrían ganar dulces de acuerdo al número de
sellos que lograran obtener, y se les preguntó qué dulces les gustarían que fueran; se les
mostró un papel bond donde estaba escrita la economía de ese día (ver tabla 1). Posterior-
mente, se hizo una actividad de 20 minutos llamada “Círculos de basura” que consistió en
que los experimentadores 1 y 2 se acercaron a cada uno de los sujetos para entregarles un
residuo al azar, ya sea orgánico o inorgánico, y con cinta adhesiva se delimitaron dos círcu-
los en el suelo, uno representó al bote de basura orgánica y el otro al bote de basura inorgá-
nica. Se les dio la instrucción a los sujetos de pensar en dónde se depositan los residuos da-
dos y que, cuando se les indique, entren al círculo marcado que les corresponde. La activi-
dad se llevó a cabo en tres ensayos y al finalizar cada ensayo, se les puso un sello en la

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mano a los sujetos que emitieron una respuesta correcta, así como se llevó el conteo de se-
llos en un papel bond donde previamente se hizo una tabla entre sujetos y sesiones. Al fina-
lizar la sesión, se mostró el papel bond a los sujetos, y los experimentadores los fueron
nombrando uno por uno junto con el número de sellos que obtuvieron para entregarles la
economía correspondiente.
Tabla 1. Economía de fichas correspondiente a la primera sesión.
Número de sellos Economía
1 1 Chicle “Bubbaloo”
2 1 Chicle “Bubbaloo” y 1 paleta “sevillana”
3 1 Chicle “Bubbaloo”, 1 paleta “sevillana” y 1
chocolate “Bocadín”

En la segunda sesión, que tuvo una duración de 40 minutos, se dio a los sujetos una plática
de 10 minutos, donde se fomentó la participación, acerca de la importancia y las ventajas
que conlleva tirar la basura en el bote correspondiente, para lo que se contó con el apoyo de
un cartel con dibujos. Además, se explicó a los sujetos la economía correspondiente a esa
sesión (Ver tabla 2), y se hizo una actividad de 15 minutos llamada “Simón dice que sepa-
remos” que consistió en que uno de los experimentadores fungía como líder “simón” y daba
órdenes. En el primer ensayo, el experimentador 2 daba un residuo al azar a cada uno de los
niños, y el experimentador 1 decía “Simón dice que los niños y las niñas que tengan un re-
siduo orgánico, vayan a la pared de enfrente brincando como rana”; en el segundo ensayo,
se les repartió a los sujetos un residuo diferente y el experimentador 1 dijo “Simón dice que
los niños y las niñas que tengan un residuo inorgánico, se agachen”; en el tercer ensayo, se
les repartió un nuevo residuo a cada sujeto y el experimentador 1 dijo “Simón dice que los
niños y las niñas que tengan un residuo orgánico, hagan una rueda”. Al final de cada ensa-
yo, el experimentador 3 ponía 1 sello a los sujetos que emitieron la respuesta correcta y
anotaba en la tabla del papel bond las mismas. Al finalizar la sesión, se mostró el papel
bond a los sujetos, y los experimentadores los fueron nombrando uno por uno junto con el
número de sellos que obtuvieron para entregarles la economía correspondiente.
N ú m e r o d e Economía
sellos
1 1 Paleta de “pollito asado”
2 1 Paleta de “pollito asado” y 1 paleta “pinta azul”
3 1 Paleta de “pollito asado” , 1 paleta “pinta azul” y
1 paleta “paletón”

Tabla 2. Economía de fichas correspondiente a la segunda sesión.

!13
La tercera sesión tuvo una duración de 30 minutos. Se les explicó a los sujetos la econo-
mía correspondiente (Tabla 3) y se realizó la actividad “relevando basurillas” que tuvo una
duración de 20 minutos y que consistió en agrupar a los niños en equipos de 4 personas
cada uno. Cada equipo se formó en una fila esperando que sonara la señal “en sus marcas
¿listos? fuera” para que el primer niño de cada fila tomara uno de los juguetes en forma de
basura (orgánica o inorgánica), y corriera a depositar el juguete en el respectivo bote perte-
neciente a su equipo, tomando de ahí otro residuo y así pues regresara para darle la mano al
siguiente compañero y éste debiera repetir la conducta. A cada sujeto del equipo ganador se
le puso un sello que se registró en la tabla. Esta actividad se hizo en 2 ensayos.
Además, se hizo otra actividad, llamada “Equipos basureros” con una duración de 10 minu-
tos y consistió en formar dos equipos de 4 integrantes cada uno, se les dio a cada equipo 10
residuos en los que hubo orgánicos e inorgánicos, además un bote verde y otro gris; los
sujetos tuvieron un tiempo de 5 minutos para separar los residuos en los botes correctos, en
cuanto terminó el tiempo determinado se contó cuántos residuos fueron depositados en el
bote correcto para saber qué equipo obtuvo mayor número respuestas correctas. A los inte-
grantes del equipo ganador se les puso un sello en la mano que se registró en la tabla. Al
finalizar la tercera sesión, se mostró el papel bond a los sujetos, y los experimentadores los
fueron nombrando uno por uno junto con el número de sellos que obtuvieron para entregar-
les la economía correspondiente.
Tabla 3. Economía de fichas correspondiente a la tercera sesión.
Número de sellos Economía

1 1 paleta “pinta azúl”

2 1 paleta “pinta azul” y 1 paleta


“pollito asado”

3 1 paleta “pinta azul”, 1 paleta


“pollito asado” y 1 paleta
“sevillana”

La tercera fase (A) consistió en tres sesiones, de 3 ensayos con una duración de 5 minutos
cada uno dentro de cada sesión. Los experimentadores 1, 2 y 3, teniendo dos botes al frente
(gris y verde), dieron la indicación de que pasara un sujeto a la vez a depositar un residuo
que le fue dado al bote que considerara correcto. Mientras, los experimentadores 4 y 5 ob-
servarán la conducta de los 8 sujetos al depositar los desperdicios en los botes; ambos expe-
rimentadores realizaban un registro de frecuencia por cada sujeto.
Resultados

!14
Los datos del presente estudio se analizaron por fase, comparando la frecuencia de las res-
puestas correctas (entendidas como depositar los residuos en el bote indicado, inorgánicos
en el bote gris y orgánicos en el bote verde) obtenidas por cada sujeto en cada una de las
sesiones; posteriormente se compararon las medias de las respuestas correctas obtenidas
por todos los sujetos en cada sesión de cada fase.
Cada fase (línea base, fase experimental y observación) fue dividida a su vez en tres sesio-
nes cada una, y cada sesión contenía 3 ensayos que recababan las respuestas correctas, ig-
norando las incorrectas.
En la primera sesión de la línea base (A) se puede observar que tanto el sujeto 1, como el 4
y el 8 obtuvieron 2 respuestas correctas, mientras que los sujeto 2, 3, 5, 6 y 7, obtuvieron
las 3 respuestas correctas; para la sesión número dos esto cambió, ya que ninguno de los
sujetos obtuvo todas las respuestas correctas, sin embargo, los sujetos 2, 3, 4, 6, 7 y 8 obtu-
vieron una frecuencia de 2, y los sujetos 2 y 5 obtuvieron 0; en cuanto a la tercera sesión,
tampoco hubo frecuencias de 3, pero sí de 2, es el caso de los sujetos 1, 4 y 6, mientras que
los sujetos 3 y 7 obtuvieron 1 respuesta correcta, por último el sujeto 2 y 5, obtuvieron 0
(Ver figura 1).

3
Número de depósitos correctos

2
de residuos

0
Sujeto 1 Sujeto 2 Sujeto 3 Sujeto 4 Sujeto 5 Sujeto 6 Sujeto 7 Sujeto 8
Sujetos

! Sesión 1 Sesión 2 Sesión 3

Figura 1. Número de depósitos correctos de los residuos obtenidos por cada sujeto en cada
sesión de línea base.

En la fase experimental (B) hubo un aumento notable en la frecuencia de las respuestas co-
rrectas emitidas por los sujetos. En la primera sesión de esta fase, los sujetos 2, 3, 6 y 8 ob-
tuvieron 3 respuestas correctas, mientras que los sujetos 1, 4, 5 y 7, emitieron 2; en la se-

!15
gunda sesión, todos los sujetos obtuvieron las 3 respuestas correctas, con excepción al suje-
to 5 y 8 que obtuvieron 2; en la tercera sesión, la frecuencia de todos los sujetos fue de 3,
con excepción del sujeto 2, el cual obtuvo 2 respuestas correctas (Ver figura 2).
3
Número de depósitos correctos

2
de residuos

0
Sujeto 1 Sujeto 2 Sujeto 3 Sujeto 4 Sujeto 5 Sujeto 6 Sujeto 7 Sujeto 8
Sujetos

! Sesión 1 Sesión 2 Sesión 3

Figura 2. Número de depósitos correctos de los residuos obtenidos por cada sujeto en cada
sesión de la fase experimental.

Por último, en cuanto a la fase de observación (A), se observa que todos los sujetos emitie-
ron las 3 respuestas correctas en todas las sesiones (Ver figura 3).
3
Número de depósitos correctos

2
de residuos

0
Sujeto 1 Sujeto 2 Sujeto 3 Sujeto 4 Sujeto 5 Sujeto 6 Sujeto 7 Sujeto 8
Sujetos

! Sesión 1 Sesión 2 Sesión 3

Figura 3. Número de depósitos correctos de los residuos obtenidos por cada sujeto en cada
sesión de la fase de observación.

!16
Así que, como comparación entre las fases, el promedio de respuestas correctas obtenidas
en la primera sesión de la línea base, fue de 2.6, en la segunda sesión fue de 1.5 y en la ter-
cera sesión fue de 1; Al llevarse a cabo la fase experimental se obtuvo un incremento en los
promedios de respuestas en comparación con los promedios de línea base, teniendo en la
primera sesión de fase experimental un promedio de respuestas de 2.7, en la segunda se-
sión el promedio fue de 2.75 presentando un mayor número de respuestas por la actividad
realizada, en la última sesión el promedio fue de 2.8; Por último se implementó la fase de
observación, en donde fueron ejecutadas 3 sesiones para comprobar la efectividad de la
economía de fichas en el manejo de residuos en los niños de 5 y 6 años. Los resultados ava-
lan que los niños aprendieron la discriminación y la correcta separación de los residuos or-
gánicos e inorgánicos, puesto que en las 3 sesiones llevadas a cabo, los sujetos obtuvieron
el total de aciertos correctos, en la primera sesión se obtuvo un promedio de 3, al igual que
en las 2 sesiones restantes (Ver figura 4).
3
Número de depósitos correctos

2.3
de residuos

1.5

0.8

0
Sesión1 Sesión2 Sesión3
Sesiones

! Línea base Fase experimental Observación

Figura 4. Promedio de respuestas obtenidas por los sujetos en cada sesión de cada fase.

Análisis de resultados

Los resultados obtenidos en la línea base muestran que los sujetos no tenían conocimientos
previos sobre la separación de residuos, puesto que se obtuvieron bajas tasas de respuesta
como se puede ver en la figura 1, teniendo un promedio de 1.7 en frecuencia de los sujetos,
notoriamente baja en comparación al promedio de frecuencia de los sujetos emitidas en la
fase experimental que fue de 2.75, donde la tasa de respuestas aumentó, debido a que en
esta fase existió una intervención donde se realizaron diversas actividades a lo largo de tres
sesiones para implementar la conducta deseada en los sujetos. En dicha fase se considera-

!17
ron algunas variables que pudieron afectar el desempeño de los sujetos a lo largo del mis-
mo, ejemplo de ello es "La historia", factor que afecta la validez interna y es definido, se-
gún Moreno, López, Cepeda, Alvarado y Plancarte (2005), como "aquellos eventos extra-
ños a la variable independiente que ocurren de forma concurrente a esta, y que pueden pro-
ducir cambios en la variable dependiente, por lo cual los efectos de la intervención pueden
ser confundidos por los generados por la historia" (p.2); que en nuestro estudio se presentó
en el caso del sujeto 6 quien en medio de la sesión 2 de la fase experimental, realizando la
actividad "Simón dice que separemos", salió del juego y comenzó a llorar por razón externa
al trabajo, lo que provocó que los sujetos perdieran la atención en la actividad durante unos
minutos, consecuentemente uno de los experimentadores se apartó para tratar de tranquili-
zarlo y así reintegrarlo a la actividad.
Otra de los factores a los que se les atribuye la eficacia del estudio son “Las intervenciones
reactivas” que según Moreno, López, Cepeda, Alvarado y Plancarte (2005), “son las carac-
terísticas del investigador, el sexo, la edad, la personalidad, características físicas, color, etc.
las que pueden facilitar o impedir, en algunos casos, la obtención de resultados observados
en la variable dependiente, confundiéndose con los efectos de la intervención” (p. 6), en el
caso del presente estudio la intervención se realizó por experimentadores del sexo feme-
nino, por lo que se supone la atención se conservó por parte de los sujetos puesto que los
docentes de la institución son del mismo sexo.
En cuanto a la fase de observación, fue notable el aprendizaje de los sujetos ya que, como
se muestra en la figura 4, el promedio de respuestas correctas emitidas fue de 3, mayor a las
fases anteriores.

Discusión

Los resultados de este estudio de manejo de residuos orgánicos e inorgánicos en 8 niños de


preescolar con edades de 5 y 6 años arrojaron que la técnica de economía de fichas funcio-
nó eficientemente para la enseñanza de discriminación y separación adecuada de los resi-
duos. Estos resultados coinciden con los obtenidos por otros autores como Soler, Herrera,
Buitrago y Barón (2009), así como Montero, Saavedra, & Ezquerro, (2009) en experimen-
tos aplicados similares utilizando la técnica de economía de fichas. La coincidencia, se da
en relación al uso de la economía de fichas en niños y el uso de grupos medianos de estos
para mayor facilidad en la aplicación en el trabajo, pues para algunos de esos autores resul-
ta ser significativo el uso de reforzadores potentes.
Otros autores como Vite, Pérez y Ruiz (2008) y Carrasco (2008) optaron por utilizar técni-
cas para el manejo de contingencias, en este caso el moldeamiento; respecto a esto, Kazdin
(1996), dice que el moldeamiento es un reforzamiento sistemático y contingente a las apro-
ximaciones sucesivas a la conducta blanco hasta que ésta se instituye. Para el presente estu-
!18
dio se utilizó la técnica de economía de fichas, para el manejo de contingencias; según lo
echo en el experimento, de nuevo Kazdin (1996) nos dice que la economía de fichas es un
sistema de reforzamiento en el cual se ganan fichas por una variedad de conductas y se em-
plean para adquirir una diversidad de reforzadores sustitutos, son reforzadores generaliza-
dos y pueden intercambiarse por diversos eventos reforzaste conocidos como reforzadores
sustitutos, lo cual funcionó para el cumplimiento del objetivo de este trabajo.
Como se dijo anteriormente, lo que Sulzer y Mayer (1990) dicen acerca del Análisis Con-
ductual Aplicado, es que se usa para la prevención y el mejoramiento de problemas conduc-
tuales y programas de aprendizaje, se basa en el rendimiento y se interesa por lo que la gen-
te hace, es decir, la manera en que responden a su ambiente. Lo anterior se corrobora en
nuestra investigación sobre la modificación de conductas. Dando también paso en el proce-
so del experimento lo dicho por Kazdin (1996), sobre el reforzamiento utilizado, que nos
dice que es un aumento en la frecuencia de una respuesta, cuando ciertas consecuencias la
siguen inmediatamente.
Además, se puede corroborar que el reforzamiento fue contingente ya según Sulzer y Ma-
yer (1990), una contingencia es una relación entre la respuesta y el estímulo antecedente a
la consecuencia. Y gracias a esto, los participantes tuvieron avances prometedores en cada
una de las sesiones haciendo la economía de fichas un método eficaz para la modificación o
inducción de una conducta en específica.
La observación realizada por los investigadores hacia los sujetos, sobre cómo se ven afec-
tados por la técnica, es correcta con respecto al objetivo planteado en un inicio, ya que ellos
cambiaron su perspectiva respecto a la separación de residuos y el impacto que esta con-
ducta causa en su entorno. Es probable que esta investigación modificó completamente su
conducta hacia ello.

Conclusión

Como conclusión podemos afirmar que la técnica de Economía de fichas es eficiente para
generar la conducta de separación correcta de los residuos (orgánicos en el bote verde e
inorgánicos en el bote gris). Además, se se logró que los niños y niñas obtuvieran conoci-
miento y conciencia para la conservación del medio ambiente, ya que en las pláticas que se
dieron durante la fase de intervención, se les habló a los sujetos sobre las repercusiones que
hay al no separar la basura correctamente y los resultados positivos de sí hacerlo. Las pláti-
cas eran nutridas por comentarios de los mismos sujetos quienes aportaban ideas y ejem-
plos sobre el tema.
La relevancia de haber aplicado el presente trabajo, reside en el problema social que repre-
senta la contaminación hoy en día y en la posibilidad de contribuir para su disminución o
control de su aumento desmedido. Como se dijo anteriormente, hay efectos de la crisis eco-
lógica actual que traen resultados desfavorables para vida humana y del planeta. La separa-

!19
ción adecuada de la basura resulta una conducta significativa para el problema planteado,
ya que, con ésta, la tarea de selección de los residuos inorgánicos para reciclaje, significa
menos materia generada y mayor tiempo para que la tierra pueda volver a generarlos.
Por otra parte, como en todo trabajo experimental donde no se tiene un control total de la
situación, hubo complicaciones en cuanto a las fechas que la escuela nos asignaba para la
aplicación del estudio, ya que hubo días que resultaban inhábiles por cruzarse con días fes-
tivos o por actividades que ya estaban programadas en la escuela, lo que hacía que el lapso
entre una sesión y otra, a veces fuera grande. Además, el tiempo de realización de cada se-
sión a veces era reducido, aunque se lograba completar, igualmente por motivos de los ad-
ministrativos de la escuela.

Sugerencias

Como experimentadores, sugerimos que, en las próximas investigaciones, se intente que


las sesiones sean continuas, ya que en este estudio fue incapaz que las actividades se reali-
zarán en días seguidos, debido a las actividades y fechas festivas que ocasionaron extender
el tiempo prolongado entre las sesiones. Además, el tiempo otorgado por la institución se
redujo al que se había planeado por sesión, puesto que los sujetos llegaban de 5 a 10 minu-
tos tarde en algunas sesiones.
Otra sugerencia propuesta, es que la institución a elegir resulte cercana a la facultad, pues
una institución alejada implica mayor tiempo de traslado, así como mayor dificultad para
transportar los materiales. Sobre todo se menciona que el horario establecido en las institu-
ciones para la realización del estudio, sea a la mitad de la jornada laboral, ya que en la in-
vestigación que se llevó a cabo el horario otorgado fue media hora antes de la finalidad de
los labores escolares de los niños, lo que ocasionaba que los sujetos experimentales que
fueron los niños de 5 y 6 años de edad, se mantenían inquietos y no prestaban la atención
requerida a las actividades diseñadas, cuando se les avisaba que debían irse. 

En lo que converge al espacio delimitado por un salón, es recomendable que para nuevas
investigaciones, el estudio se plante en un espacio más extenso, en donde los niños de corta
edad puedan realizar los pasos establecidos en las actividades, como por ejemplo, el correr
o saltar, debido a que en el estudio se planteó actividades en donde implicaban acciones
donde los niños tenían que correr una distancia más larga, pero de cierta manera no pudo
realizarse con éxito por la situación de que el espacio era muy reducido y corría el riesgo de
que los menores llegaran a caerse.

!20
Referencias
▪ Arnau, G. (1986). Diseños experimentales en Psicología y Educación. México:
Trillas. 35.
▪ Bernache, G. (2006). Cuando la basura nos alcance. La degradación ambiental.
Ciesas: México. Pp. 490-500.
▪ Cabezas, H. (2004). Efectos de la aplicación de técnicas conductual en la adqui-
sición de destrezas básicas para el aprendizaje, en tres niños. Revista Educación
28(1): 133-143
▪ Carrasco, N. (2008).Aplicación de un programa de economía de fichas en un
hogar de acogida de menores víctimas de maltrato, Revista electrónica de inter-
vención psicosocial y psicología comunitaria,3 (1) pp, 11-15

▪ Cepeda, M., López, M., Plancarte, P., Moreno, D., Alvarado, I. (2002). Medición
y observación. México: Facultad de Estudios Superiores Iztacala. Pp. 6-8.

▪ Durán, M.; Alzate, M. y Sabucedo, J. M. (2009) “La Influencia de la Norma


Personal y la Teoría de la Conducta Planificada en la Separación de Residuos”
en línea. Manual Moderno. pp. 357.
▪ Kazdin, A. (1983). Historia de la modificación de conducta. Bilbao: Desclée de
Brouwer. Pp. 251-275.
▪ Kazdin, A. (1996). Modificación de la conducta y sus aplicaciones prácticas.
México, D.F.: Manual moderno.
▪ Montero, A., Saavedra, M., &Ezquerro, M. (2009). Aplicación de un programa
de economía de fichas y preferencias de los jugadores de baloncesto. Cuadernos
de Psicología del deporte. 34
▪ Moreno, A, López, M., Cepeda, M., Alvarado, I. & Plancarte, P. (2005). Diseños
de investigación. México: Facultad de Estudios Superiores Iztacala. Pp. 2-20.
▪ Holahan, C. (1996). Psicología ambiental. Limusa: México. Pp: 113, 115, 132.
▪ Ribes, E. (1984). Técnicas de modificación de conducta. México, D.F.: Trillas.
▪ Soler, F; Herrera, J; Buitrago, S; Barón, L. (2009). Programa de economía de
fichas en el hogar. Diversitas: Perspectivas en psicología5, 2, 373-390.
▪ Sulzer, B. & Mayer, G. (1990). Procedimientos del análisis conductual aplicado
en niños y jóvenes. México: Trillas. Pp. 119-120
▪ Vite, S. A., Pérez, G. I., & Ruiz, M. C. (2008). El Impacto de la sensibilidad ma-
terna y el entrenamiento a padres en niños con problemas de conducta. Revista
mexicana de análisis de la conducta, 34 (2), 163 – 175

!21
Anexo 1.
Alumnos de la carrera de Psicología.
Facultad de Estudios Superiores Iztacala.
23 de febrero de 2016
A quien corresponda:
Los alumnos de la carrera de Psicología de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala
buscan proteger a los participantes en sus investigaciones realizadas y están a favor de con-
seguir el consentimiento informado. La información proporcionada a continuación es con el
fin de que usted decida si otorga el consentimiento para que sus alumnos participen en la
investigación. Cabe mencionar que está en libertad de retirarlos en el momento que usted
considere pertinente.
Durante tresdías se realizará una observación por 10 minutos del comportamiento de sus
alumnos al tirar basura; los 3 días posteriores se les dará una plática acerca de la importan-
cia de separar los residuos orgánicos e inorgánicos, así como actividades en la que se les
reforzará el aprendizaje; los últimos tres días se volverán a realizar observaciones por 10
minutos, del comportamiento de los niños al tirar basura.
!22
Nos interesa fomentar en los niños la consciencia acerca de algunos de los problemas am-
bientales que se viven actualmente, así como mostrarles una forma en la que ellos pueden
contribuir a que estos problemas no crezcan de la forma tan alarmante en la que lo están
haciendo. Consideramos que la separación de residuos es algo que se debe empezar a en-
señar desde edad temprana con el fin de formar un hábito.
El nombre de los alumnos no se escribirá en dicho estudio, en cambio se utilizará un código
numérico.
Si tiene alguna duda, puede ponerse en contacto con nosotros por medio de correo electró-
nico o por teléfono, con gusto le responderemos.
Atentamente
Arellano UgaldeItzel Guadalupe (55-34913566)

Contreras Hernández Ángel (55-27644348)

Laguna Fernández de Lara Diana Mayra (55-36461504)

MoralesVargas Javier Giovanni (55-40 45 82 27)

VarelaVeyna Carla Michelle (55-21901781)

.
Firma del Padre o Tutor
Anexo 2. Registro de frecuencias.

!23
Tabla de Procedimiento
Observación Primer día 1.-Presentación. 

2.-Cada niño pasará al frente a
depositar un residuo en el bote que
considere correcto. 


Segundo día 1.-Cada niño pasará al frente a


depositar un residuo en el bote que
considere correcto. 

2.- Se les hablará brevemente sobre
los residuos.


Intervención Tercer día 1.- Plática sobre residuos para los


niños de preescolar. 

2.- Actividad “Círculo de Reciclaje”.
Cuarto día. 1.- Repaso sobre plática de residuos
para los niños de preescolar. 

2.- Actividad “Simón dice que
separemos”.
Quinto día 1.- Actividad “Relevando basurillas”.

2.- Actividad “Equipos basureors”.


Observación Sexto día Cada niño pasará al frente a


depositar un residuo en el bote que
considere correcto. 


Séptimo día Cada niño pasará al frente a


depositar un residuo en el bote que
considere correcto. 


!24
Agradecimient Octavo día. Se realizará una actividad con los
o niños como agradecimiento a su
participación, ya sea un juego al aire
libre, ver una película, etc. 


Anexo 3.

!25

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