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EMBEBIDO EN EL CONCRETO
REFORZADO
Escrito por Emma Paredes Camarillo | | |
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Reconocimiento y Diagnosis
Forjados Cemento Aluminoso: El Artículo Siguiente>> Consideraciones Recomendaciones Reconocimiento y
Edificio Diagnosis Forjados Cemento Aluminoso: La Vigueta
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Las transformaciones que a lo largo de su vida experimenta el cemento aluminoso que conforma un hormigón
repercuten, finalmente, en dos anomalías técnicas que afectan a su capacidad resistente :
Por ello, el primer paso en cualquier reconocimiento consiste en revisar todo el edificio para detectar los
síntomas que permiten detectar las anomalías.
Esta revisión general permite tanto observar los signos indicados como detectar otras disfunciones
estructurales (asentamientos, fisuras,etc .) que podrían enmascarar el diagnóstico sobre el estado de un forjado
e, incluso, los estados patológicos que pueden provocar o acelerar procesos de degradación (aislamiento
insuficiente, mala impermeabilización, etc.) .
Los balcones, generalmente con la losa en voladizo sin impermeabilizar, suelen ser la parte de los forjados
que se degrada en primer lugar. Todos los tipos de degradación : evolución del cemento aluminoso, corrosión
de los aceros armados, etc ., no son más que una reacción química y, como ocurre en la mayoría de
reacciones, se acelera con el aumento de la humedad y de la temperatura . En este sentido, la permanente
variación de estos parámetros es una de las características más sobresalientes de los malos tratos que soportan
las fachadas y las cubiertas .
Estos síntomas, evidenciados en la revisión general, señalarán, a lo largo de la prospección, los puntos más
problemáticos .
La situación de un elemento de hormigón conformado con cemento aluminoso es muy importante, ya que las
condiciones térmicas y de humedad son definitorias de la velocidad de todos los procesos que en ellos se
producen. En hormigones con las mismas condiciones iniciales de composición y de curado, la velocidad de
"conversión" de los cristales hexagonales en cúbicos aumenta rápidamente cuando coinciden altas
temperaturas (por encima de los 20°C) con humedades ambientales también elevadas.
El agua oxida. El riesgo de humedad en una viga puede resultar catastrófico si ya se hubiera producido la total
carbonatación del hormigón . La única esperanza de vida de un hormigón viejo, a menudo totalmente
carbonatado, se basa en que se lo proteja del contacto con el agua ; su armadura ha perdido toda la protección
que la cal le confería y, al oxidarse, disminuye la sección y pierde la adherencia, imprescindible en el esfuerzo
de tracción .
La humedad permanente causa efectos diferentes en cada tipo de forjado, e incluso un escape esporádico,
cuando se produce en una zona poco ventilada, suele transformarse en una acción permanente a causa de la
porosidad de los materiales de construcción.
De cerámica armada : Corrosión de los aceros de armarque provoca la rotura de la cerámica que los incluye .
En vigas de hormigón precomprimido : Corrosión del acero que provoca la aparición de fisuras
longitudinales, rotura de la aleta inferior eincluso desprendimiento de los aceros que pueden quedar colgando,
si la corrosión llega a seccionar los alambres . En cualquier caso, lo más grave es la pérdida de adherencia del
acero que pierde así su condición de tensión y deja al hormigón con las características propias de un hormigón
en masa, poco apto para soportar los esfuerzos cortantes y de tracción .
En vigas de hormigón armado : La rotura de la aleta inferior, por oxidación de la armadura, con
desprendimiento final del acero, pero más a largo plazo que en el caso anterior.
En vigas de hormigón precomprimido de cemento aluminoso : La rápida "conversión" del sistema cristalino
con pérdidas de agua : pérdida de densidad, disminución de las resistencias mecánicas y aumento de la
porosidad . La corrosión de las armaduras es más rápida que en los casos anteriores . Existe la posibilidad de
que se inicie un proceso de hidrólisis alcalina, con desmenuzamientos irreversibles . El color de la masa
evoluciona hacia tonos parduzcos
Cabe señalar que existen degradaciones de forjados que no dependen de la presenciade agua, como es el caso
del ataque de termitas a las maderas o el de la "conversión" del cemento aluminoso que, a partir de ciertas
temperaturas, se produce también en ambientes secos, con más lentitud, pero siempre inexorablemente.
Conviene efectuar la comprobación de la resistencia del forjado y tener presente que, a pesar de las normas de
1941 (Ministerio de Gobernación) y de 1961 (MW 101), no fue hasta los años 70 que los profesionales
empezaron a tener en cuenta el hecho normativo en la evaluación de las sobrecargas.
El análisis de las sobrecargas que un forjado ha soportado a lo largo del tiempo puede dar una idea de su
capacidaad resistente, al comparar las pruebas de carga soportadas y el estudio de los resultados apreciados .
Si no se detectan indicios de disminución de resistencia, es lógico esperar que se comportará correctamente
con cargas menores .
En el caso del cemento aluminoso completamente "convertido" y sin otras patologías, se puede estimar una
cierta capacidad portante del forjado contando con las resistencias residuales del hormigón "convertido" .
El cuadro de la ficha intenta recoger los datos de sobrecargas de uso no de una forma cuantitativa, muy difícil
de evaluar, sino cualitativa, a partir del uso a qué se destina el forjado objeto de reconocimiento . Así, un
forjado previsto para vivienda, tiene una sobrecarga "mayor" que la "normal de cálculo" si se utiliza como
escuela o almacén, y "menor" en el caso contrario.
La falta de planeidad del pavimento y su eventual fisuración puede indicar anomalías importantes en el estado
del forjado . La corrosión de la aleta superior de los perfiles de acero suele causar ondulaciones de las
baldosas del pavimento; es frecuente observar esta anomalía en el suelo de los balcones . Lo mismo ocurre
con los redondos superiores de los elementos de hormigón armado o precomprimido que, al oxidarse, pueden
provocar efectos semejantes .
La grietas en los pavimentos o las juntas abiertas entre las baldosas pueden indicar que el forjado ha
soportado flechas excesivas (exceso de carga) o diferenciales (diferencias de luz en vigas contiguas) . Este
hecho puede hacer temer una falta de resistencia del forjado a causa de las cargas que ha tenido que soportar.
Los tabiques rotos, con fisuras o grietas, horizontales en el centro de la luz de las vigas o inclinadas cerca de
las entregas, ponen de manifiesto también excesos de flecha del forjado .
Si estas anomalías aparecen muchos años después determinada la construcción, significan que han cambiado
las condiciones iniciales de los forjados. Pueden existir nuevas sobrecargas superiores a las iniciales o puede
haber cambiado la capacidad resistente del forjado a causa de la degradación de alguno de los componentes
estructurales .
La observación de los forjados por su parte inferior, aunque estén ocultos por cielos rasos, puede ayudar a
encontrar indicios interesantes, como por ejemplo :
Las observaciones más recientes demuestran que uno de los lugares en donde suelen producirse unas
degradaciones más acusadas y más peligrosas es en los forjados sanitarios (que cubren las llamadas cámaras
sanitarias), porque están fuera del circuito normal de utilización y observación del edificio : generalmente no
tienen ventilación, sufren condensaciones permanentes en las vigas, el forjado carece de cualquier clase de
revestimiento o protección ; a menudo están inundadas, tanto por las pérdidas de la red de desagüe como por
el mal funcionamiento endémico del sistema de alcantarillado . Además de esto, el forjado sanitario
generalmente soporta el vestíbulo y las tiendas, con las sobrecargas más incontroladas y variables de todo el
edificio .
Es importante detectar las posibles modificaciones realizadas en los áticos. Es corriente que aparezcan
construcciones incontroladas en la zona inicialmente construida como azotea, con los cerramientos apoyados
sobre el forjado inferior que no ha recibido ninguna clase de refuerzo .
Las zonas de balcones y lavaderos se convierten en focos de humedad: por estar situadas al exterior ; porque
no suelen recibir ningún tipo de mantenimiento ; porque las pérdidas del sistema de desagüe acostumbran a
ser habituales y no se reparan nunca. En tales circunstancias, las degradaciones pueden ser tan importantes
que lleguen a provocar, inclusive, la caída del elemento .
Otro ingrediente para la buena calidad del concreto es el aire incorporado. Es necesario
proteger al concreto de los daños por ciclos de hielo y deshielo. El aire incorporado reduce
también la exudación (sangrado) y el incremento de la permeabilidad debido a los canales
del agua de exudación. El descascaramiento de la superficie del concreto puede acelerar los
daños por corrosión de las barras de refuerzo embebidas.
Una planificación apropiada de las operaciones de acabado es necesaria para asegurar que
el concreto no se descascare, o se fisure excesivamente.
Una correcta cantidad de acero ayudará a mantener una fisuración escasa. El manual de
ACI 224 ayuda al ingeniero diseñador a minimizar la formación de grietas que podrían ser
dañinas para el acero embebido. En general, el ancho máximo de fisura permisible es de 0.2
mm en un ambiente con sales de deshielo y de 0.15 mm en un ambiente marino.
Un adecuado recubrimiento del acero de refuerzo es también un factor importante. La
penetración de cloruros y la carbonatación ocurrirán, inclusive, en la superficie exterior de
los concretos de baja permeabilidad. Si se incrementa el recubrimiento se demorará el
comienzo de la corrosión. Por ejemplo, el tiempo necesario para que los iones cloruro
alcancen una barra de acero a 5 cm (2 pulgadas) de la superficie es 4 veces el tiempo
necesario para un recubrimiento de 2.54 cm. (1 pulgada). El manual ACI 318 recomienda
un mínimo de 1 ½ pulgadas (aprox. 4 cm) de recubrimiento para la mayoría de las
estructuras y lo incrementa a 2 pulgadas (aprox. 5 cm) de recubrimiento para la protección
contra las sales de deshielo.