Es lados Unidos y la revolución bolchevique, 1917-1933
longitud, y su producción de mineral de hierro en un 73 por 100, así como su
hincapié en que los bolcheviques eran, en última instancia, más peligrosos que provisión de carbón en un 89 por 100. los alemanes para la seguridad de Estados Unidos, toda vez que negaban tan- La firma del tratado de paz por los bolcheviques no puso fin a la humi- to el derecho a la nacionalidad como el derecho a la propiedad y amenazaban llación de Rusia, sin embargo, porque los alemanes continuaron su ofensiva con propagar la revolución por todo el mundo. militar, durante la cual engulleron más territorios que antes pertenecieron al Pese a ello, Raymond Robins, que no estaba informado de la decisión de imperio ruso. Después de tomar Kiev el 1 de marzo, continuaron avanzando Wilson, continuó presionando a los bolcheviques para que cooperasen con los a través de Ucrania, tomaron Crimea a finales de abril y llegaron al río Don, aliados. A finales de febrero de 1918 pareció que sus esfuerzos iban a dar fru- cerca de Rostov, a comienzos de mayo. La conquista de Ucrania por los ale- to. El 22 de febrero el comité central bolchevique decidió aceptar una oferta manes dejó expuesto todo el flanco meridional de la gran Rusia, y dejó a la de ayuda militar de Francia y Gran Bretaña por 6 votos a favor y 5 en contra ciudad de Moscú, que los bolcheviques convirtieron en la nueva capital el (el voto decisivo fue de Lenin). Al parecer, el líder soviético no tenía ninguna 6 de marzo, vulnerable al ataque alemán. En el norte, las tropas alemanas de- duda de que Alemania estaba decidida a aplastar a Rusia y destruir la revolu- sembarcaron en Finlandia el 3 de abril y ayudaron a los finlandeses a limpiar ción, y, si bien no se fiaba de Occidente, pensaba que los aliados probable- su país de fuerzas bolcheviques. Debido a ello, el frente septentrional ruso mente ayudarían a Rusia aunque sólo fuese para reactivar el frente oriental. pasó a ser tan vulnerable al ataque alemán como su flanco meridional. Por tanto, el 2 de marzo, la víspera de la firma del tratado de Brest-Litovsk, Lenin se preparó para la posibilidad de reanudar la guerra con Alemania. Dio orden de que se retrasara la desmovilización del ejécito ruso y se intensifica- LA ÚLTIMA O P O R T U N I D A D DE C O L A B O R A C I Ó N ran los preparativos para volar ferrocarriles, puentes y carreteras que pudieran E N T R E LOS A L I A D O S Y LOS SOVIÉTICOS utilizar los alemanes. Ni tan sólo la firma del tratado por los bolcheviques al día siguiente ex- Durante las semanas que precedieron a la vuelta de los bolcheviques a Brest- cluyó la posibilidad de que Rusia volviera a luchar en la guerra, toda vez que Litovsk, los representantes aliados en Rusia continuaron recibiendo indica- faltaba aún su ratificación por el comité central del partido bolchevique y por ciones de que los bolcheviques tal vez reanudarían la lucha contra las poten- el congreso de los soviets. Los bolcheviques aprovecharon la pausa para redo- cias centrales si podían contar con apoyo militar importante de los aliados. El blar sus intentos de obtener ayuda de los aliados. El 4 de marzo Trotski en- 28 de enero de 1918, el capitán E. Francis Riggs, ayudante del agregado mi- vió un mensaje a Francis, el embajador, en el cual declaraba que, aunque se ra- litar norteamericano en Petrogrado, envió un telegrama en el que decía que, tificara el tratado de paz, las hostilidades entre Rusia y las potencias centrales al parecer, los líderes bolcheviques opinaban que «había que tolerar a las tres se reanudarían en abril o mayo. Trotski quería saber con qué ayuda de los alia- potencias —Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia— con el fin de utilizar- dos podía contar Rusia. Francis respondió autorizando al coronel James las contra Alemania».9 El 18 de febrero, tras reanudar los alemanes su ofen- A. Ruggles, el agregado militar norteamericano, a ir a Petrogrado, junto con siva en Rusia, el agregado militar francés, Jacques Sadoul, logró persuadir a su el capitán Riggs, para hablar de la posibilidad de que Estados Unidos presta- gobierno a que abandonase —aunque fuese sólo temporalmente— su políti- ra ayuda militar a Rusia. Dos días más tarde, el 8 de marzo, Ruggles y Riggs ca hostil para con los bolcheviques y aceptase su argumento en el sentido de informaron a Francis de que «todos los líderes bolcheviques opinaban que de- que la cooperación aliada con ellos ofrecía la única posibilidad realista de bían hacer la guerra contra Alemania ... las únicas diferencias de opinión eran mantener un frente oriental contra Alemania. Sadoul fue autorizado a hablar si debía ser hoy o mañana. El asunto de la ratificación de la paz realmente ca- con los bolcheviques para determinar si, de hecho, había alguna razón para recía de importancia».11 Aquel mismo día, el comité central decidió aceptar el hacer que Rusia volviera a combatir en la guerra. tratado de paz con las potencias centrales, por 30 votos a favor, 12 en contra El gobierno francés también preguntó a Estados Unidos si seguiría el y cuatro abstenciones. ejemplo de Francia y colaboraría con Lenin y Trotski. Lansing llevó perso- El 5 de marzo Robins se entrevistó también con Trotski. El dirigente bol- nalmente la petición francesa al presidente Wilson. La breve nota que Lan- chevique le entregó un dócilmente sin firmar que preguntaba cuánto apoyo sing escribió con lápiz en el documento revelaba la mutua repugnancia que podía esperar el gobierno soviético de los aliados «en particular y especial- inspiró en ellos: «Ni pensar en ello. Presentado al [presidente] que dice lo mente de Estados Unidos» para luchar contra Alemania. Horas después Ro- mismo».10 Aunque es obvio que ambos querían restablecer el frente oriental, bins se entrevistó con Lenin y éste le dijo que aprobaba el documento de no estaban dispuestos a apoyar a los bolcheviques con tal fin. Lansing hizo Trotski. Con todo, si bien Robins estaba seguro de que pensaban combatir al