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Fundamentos

cartográficos y
geodésicos
Trabajar con información georreferenciada requiere conocer una serie de conceptos
previos necesarios para poder realizar correctamente todo tipo de operaciones. Estos
conceptos no son exclusivos del ámbito de los SIG, sino que derivan de otras
disciplinas que tradicionalmente han trabajado con este tipo de información, como por
el ejemplo la cartografía.
Los datos georreferenciados tienen además una peculiaridad como datos espaciales,
pues son datos que se sitúan sobre la superficie de la Tierra. Por ello, es necesario
tener un conocimiento preciso de la forma de esta, para así tratar con exactitud y rigor
la información con que se trabaja en un SIG. La geodesia es la ciencia que se encarga
del estudio de la forma de la Tierra, y sus fundamentos se encuentran entre los
conceptos base de todo SIG, siendo por tanto necesario conocerlos para poder hacer
uso de estos.
En este capítulo veremos algunas ideas esenciales sobre cartografía y geodesia, que
serán de aplicación constante y fundamental en el uso de cualquier SIG.

Introducción
La característica principal de la información georreferenciada es que tiene una
localización en el espacio, particularmente en el espacio terrestre. Esta localización se
ha de dar por medio de unas coordenadas que la definan de forma adecuada, lo cual
implica la necesidad de establecer un sistema en base al cual expresar dichas
coordenadas.
Si medimos un dato de temperatura necesitamos un sistema de medición conocido, sin
el cual el dato de temperatura en sí carece de valor y significado. Así, no es lo mismo
decir que una temperatura es de 25 grados Celsius o que es de 25 grados Fahrenheit.
Del mismo modo, si a esa temperatura le queremos asociar algún tipo de información
espacial (por ejemplo, el punto exacto en el que fue medida), debemos establecer un
sistema que permita dar sentido a las mediciones que realicemos, y que posteriormente
nos sirva para interpretar los valores de las coordenadas y poder saber con
exactitud dónde está el punto al que estas hacen referencia.
El establecimiento de un sistema de referencia en el que expresar la situación de un
punto dado no es en absoluto una tarea sencilla, y requiere el conocimiento de
abundantes conceptos previos que van desde ideas físicas hasta complejos desarrollos
matemáticos y geométricos. Los avances en este campo han sido constantes desde la
antigüedad, y esta evolución es la que ha permitido que en la actualidad se puedan
obtener resultados altamente precisos en el trabajo con información georreferenciada.
Gran parte de lo que podemos hacer en un SIG carecería de sentido si no se dispusiera
de metodologías bien desarrolladas para el establecimiento de sistemas de referencia.
La geodesia es la ciencia encargada de proveer el marco teórico en el que fundamentar
todo lo anterior, y es una disciplina compleja con diversas ramas de estudio. Todas ellas
responden al objetivo básico de estudiar la forma de la Tierra, ya que debemos saber
cómo es la Tierra para poder localizar puntos sobre su superficie. La determinación de
la forma y dimensiones de la Tierra es tarea de la denominada geodesia esferoidal, cuyo
cometido coincide con el del concepto clásico de geodesia, esto es, la definición de la
figura terrestre. No obstante, en la actualidad encontramos otras ramas como
la geodesia física, encargada de analizar el campo gravitatorio terrestre y sus
variaciones, o la astronomía geodésica, que utiliza métodos astronómicos para la
determinación de ciertos elementos geodésicos muy importantes que veremos más
adelante. En conjunto, todas estas ramas dan forma a una serie de métodos y conceptos
que son los que van a permitir la utilización rigurosa de coordenadas.
La necesidad del estudio geodésico surge por el hecho de que la Tierra no es plana, y
cuando el territorio que pretendemos estudiar es lo suficientemente extenso, la
curvatura de la Tierra no puede ser ignorada. Este es el caso que vamos a encontrar
cuando trabajemos con un SIG, y es por ello que los SIG implementan los elementos
necesarios para poder efectuar un manejo de la información geográfica riguroso y
acorde con los conceptos de la geodesia.
Vimos en el primer capítulo de esta parte que existen otras aplicaciones que trabajan
con información georreferenciada, entre las cuales estaban los programas de diseño
asistido por ordenador (CAD). Decíamos entonces que una de las principales
limitaciones de estos era su mala disposición al trabajo con zonas extensas, ya que han
sido diseñados para operar con zonas de unas dimensiones reducidas.
Cuando un arquitecto diseña el plano de una casa con una aplicación CAD, no necesita
emplear los conceptos de la geodesia, puesto que a esa escala la forma de la Tierra no
tiene relevancia, y prescindiendo de ella puede expresar las coordenadas de los distintos
elementos (un muro, un pilar, etc.) con la suficiente precisión y corrección como para
que luego pueda construirse esa casa. Sin embargo, cuando un usuario de SIG estudia la
cuenca vertiente de un río o la distribución de población en las comunidades autónomas
de un país, o bien analiza las rutas migratorias de un ave entre dos continentes, los
conceptos de la geodesia resultan fundamentales.
En la actualidad, los SIG han hecho que la información geográfica tenga en muchos
casos carácter global y cubra grandes extensiones o incluso la totalidad del planeta. Esto
obliga más que nunca a hacer hincapié en los fundamentos geodésicos que resultan
básicos para que toda esa información pueda manejarse correctamente, siendo de interés
para cualquier usuario de SIG, con independencia de su escala de trabajo.
Otro aspecto básico a la hora de trabajar en un SIG son las denominadas proyecciones
cartográficas. Estas permiten transformar las coordenadas sobre la superficie curva de
la Tierra en coordenadas sobre una superficie plana. Esto es necesario para poder
representarlas en un soporte plano tal como puede ser un mapa o la pantalla del
ordenador, así como para poder analizarlas de forma más simple.
Con los elementos de la geodesia y las proyecciones cartográficas ya podemos elaborar
cartografía y estamos en condiciones de trabajar con la información georreferenciada.
No obstante, existen ciertos conceptos relativos a esa cartografía que resultan de suma
importancia y deben conocerse antes de abordar esas tareas. El más importante de ellos
es la escala, es decir, la relación entre el tamaño real de aquello que representamos y su
tamaño en la representación, la cual constituye un factor básico de toda información
cartográfica.
La escala condiciona a su vez la aparición de otra serie de ideas y de procesos
asociados, como por ejemplo la generalización cartográfica. Esta engloba los
procedimientos que permiten que a cada escala se represente la información de la forma
más adecuada posible, maximizando el valor de dichas representaciones. Aunque tanto
la escala como la generalización cartográfica son conceptos muy vinculados a las
propias representaciones visuales de la información geográfica, y este libro contiene
una parte dedicada específicamente a la visualización, se trata de conceptos
cartográficos fundamentales y por ello se incluyen en este capítulo, ya que resultan
necesarios incluso si se trabaja con datos georreferenciados sin visualización alguna de
estos.

Conceptos geodésicos básicos


A la hora de definir la forma y dimensiones de la Tierra, la geodesia plantea modelos
que puedan recoger la complejidad natural de la superficie terrestre y expresarla de una
forma más simple y fácil de manejar.
Con estos modelos, uno de los objetivos principales de la geodesia es establecer un
sistema de referencia y definir un conjunto de puntos (conocidos como vértices
geodésicos) cuyas coordenadas en dicho sistema sean conocidas con una precisión
elevada. Posteriormente, y en base a esos puntos, los cuales forman una red geodésica,
se pueden calcular las coordenadas de cualquier punto en el sistema de referencia
definido.
Los vértices geodésicos se establecen por triangulación a partir de un punto único
determinado por métodos astronómicos. En función de la longitud de los lados de los
triángulos empleados en dicha triangulación, tenemos redes de mayor o menor
precisión.
Veamos ahora cómo establecer los elementos necesarios para establecer ese sistema de
referencia base y definir esos modelos de partida citados. A la hora de buscar un
modelo al que asimilar la forma de la Tierra, existen dos conceptos básicos: el elipsoide
de referencia y elgeoide.

Elipsoide de referencia y geoide


El intento más básico de establecer un modelo de la forma de la Tierra es asimilar esta a
una figura geométrica simple, la cual pueda expresarse mediante una ecuación
matemática. Además de ser más sencilla de manejar, disponer de esta ecuación
matemática permite la aplicación de conceptos geométricos, estableciendo así una base
práctica para el trabajo con coordenadas y la definición de sistemas de referencia.
Desde la antigüedad, se han formulado numerosas hipótesis sobre la forma que la Tierra
tenía, las cuales van desde suponer la Tierra plana a admitir la evidencia de que esta ha
de tener forma esférica (o similar) si se atiende a diversos hechos como, por ejemplo, el
movimiento circular de las estrellas o la existencia de horizonte.
En realidad, la Tierra no es una esfera perfecta, ya que su propia rotación ha modificado
esa forma y ha provocado un achatamiento en los polos. Esta hipótesis fue ya planteada
por Newton, y corroborada posteriormente con numerosas experiencias. No obstante,
podemos seguir tratando de asimilar la forma de la Tierra a la de una superficie teórica,
aunque no ya la de una esfera sino la de lo que se denomina un elipsoide. Sobre un
elipsoide, el radio de la Tierra ya no es constante, sino que depende del emplazamiento.
Suponer que la Tierra es una esfera no es una aproximación tan mala como puede
parecer (las representaciones gráficas a las que estamos acostumbrados exageran
habitualmente mucho el achatamiento del planeta), aunque el elipsoide es más preciso y
necesario a la hora de elaborar cartografía de zonas no muy extensas. A gran escala, sin
embargo, y para determinadas tareas, es habitual suponer la Tierra con una forma
perfectamente esférica.
Como se muestra en la figura 22, un elipsoide viene definido por dos parámetros: el
semieje mayor y el semieje menor. En el caso de la Tierra estos se corresponderían con
el radio ecuatorial y el radio polar respectivamente. La relación existente entre estas dos
medidas define el grado de achatamiento del elipsoide. En particular, se establece un
factor de achatamiento según
f=r1−r2r1(1)(1)f=r1−r2r1
siendo r1r1 el semieje mayor y r2r2 el semieje menor.
Parámetros que definen el elipsoide
(2)(2)
El elipsoide es la forma geométrica que mejor se adapta a la forma real de la Tierra, y
por tanto la que mejor permite idealizar esta, logrando un mayor ajuste.
Una vez que se dispone de una expresión teórica para la forma de la Tierra, el siguiente
paso es la determinación de los parámetros que definen esta. En el caso de utilizar la
esfera, hay que calcular su radio. En el caso de asumir el elipsoide como forma de
referencia, deben determinarse las medidas de los semiejes menor y mayor.
Debido a la evolución histórica de la idea de elipsoide de referencia, las medidas de los
semiejes que lo definen no son únicas. Es decir, no en todos lugares y en todas las
circunstancias se emplea un mismo elipsoide caracterizado por unos
valores r1r1 y r2r2 idénticos. Esto es debido principalmente al hecho de que un
determinado elipsoide no se adapta de modo igualmente preciso a todas las regiones
terrestres, y el elipsoide que proporciona un mejor ajuste para un área dada (por
ejemplo, un continente o país) puede no ser el mejor en otra zona de la Tierra alejada de
la primera.
A esto debe sumarse que los esfuerzos iniciales por determinar la forma de la Tierra y
los parámetros del elipsoide de referencia fueron realizados en tiempos en los que la
comunicación entre distintos puntos de la superficie terrestre no era la misma que hoy
en día. Por ejemplo, los geodestas europeos de entonces realizaban un trabajo similar a
sus colegas americanos, pero los datos con los que contaban eran bien distintos, pues las
mediciones de cada grupo eran relativas a sus zonas de trabajo, ya que no resultaba
sencillo desplazarse a otras partes del planeta a realizar una labor similar.
De este modo, los geodestas de Europa tomaban sus datos y ajustaban a estos sus
elipsoides, mientras que los de América hacían un trabajo similar y obtenían sus propios
elipsoides. A la hora de establecer un elipsoide de referencia oficial, en cada zona (ya
sea administrativa o geográfica) se tomaba el más idóneo, que no era el mismo en todas
ellas.
Si añadimos las diferencias tecnológicas y metodológicas que también existían en el
proceso de recogida y procesado de datos, es fácil comprender que tengamos una larga
serie de elipsoides, cada uno de los cuales ha sido empleado de forma regular en un país
o grupo de países, o incluso a escala continental, pero no a nivel global.
La tabla 33 muestra algunos de los elipsoides de uso más extendido en diversas partes
del mundo, con sus correspondientes parámetros.
Semieje Semieje
Elipsoide 1f1f
mayor menor
Australian National 6378160.000 6356774.719 298.250000
Bessel 1841 6377397.155 6356078.963 299.152813
Clarke 1866 6378206.400 6356583.800 294.978698
Clarke 1880 6378249.145 6356514.870 293.465000
Everest 1956 6377301.243 6356100.228 300.801700
Fischer 1968 6378150.000 6356768.337 298.300000
GRS 1980 6378137.000 6356752.314 298.257222
International 1924
6378388.000 6356911.946 297.000000
(Hayford)
SGS 85 6378136.000 6356751.302 298.257000
South American
6378160.000 6356774.719 298.250000
1969
WGS 72 6378135.000 6356750.520 298.260000
WGS 84 6378137.000 6356752.314 298.257224
Algunos elipsoides y sus parámetros característicos
(3)(3)
La necesidad de trabajar con un elipsoide global para todo el planeta es más reciente,
pero ya desde hace casi un siglo se hace patente que debe realizarse un esfuerzo por
homogeneizar el uso de elipsoides, de tal modo que pueda trabajarse con una referencia
internacional que facilite el uso de cartografía en las distintas zonas del planeta. Como
consecuencia de esto, surgen los primeros elipsoides generales (en contraste con los
elipsoides locales), los cuales, además de buscar un ajuste óptimo, han de cumplir las
siguientes características:
 El centro de gravedad terrestre y el del elipsoide deben coincidir.

 El plano ecuatorial terrestre y el del elipsoide deben coincidir.

El elipsoide WGS--84 es muy empleado en la actualidad, pues es el utilizado por el


sistema GPS (apartado GPS).
El geoide es la otra superficie de referencia, definida como la superficie tridimensional
en cuyos puntos la atracción gravitatoria es constante. Se trata de una superficie
equipotencial que resulta de suponer los océanos en reposo y a un nivel medio (el nivel
es en realidad variable como consecuencia de las mareas, corrientes y otros fenómenos)
y prolongar estos por debajo de la superficie terrestre. La particularidad del geoide
reside en que en todos sus puntos la dirección de la gravedad es perpendicular a su
superficie.

Representación gráfica del


geoide (Fuente: Misión GRACE (NASA)).
(4)(4)
El geoide no es, sin embargo, una superficie regular como el elipsoide, y presenta
protuberancias y depresiones que lo diferencian, como puede observarse en la
figura 44. La densidad de la Tierra no es constante en todos sus puntos, y ello da lugar a
que el geoide sea una superficie irregular como consecuencia de las anomalías
gravimétricas que dichas variaciones de densidad ocasionan.
Lógicamente, el elipsoide, por su naturaleza más simple, no puede recoger toda la
variabilidad del geoide, por lo que estas dos superficies presentan diferencias, cuyo
máximo es generalmente del orden de ±100±100 metros. Estas diferencias se conocen
como alturas geoidales.
Al igual que en el caso de los elipsoides, existen diversos geoides de referencia, y estos
no son constantes en el tiempo sino que evolucionan para adaptarse a las
modificaciones que tienen lugar sobre la superficie terrestre.
La figura 55 muestra una comparación esquemática entre las tres superficies: superficie
real de la Tierra, geoide y elipsoide.

Tres superficies fundamentales: superficie real de la Tierra, geoide y elipsoide


(Adaptado de Wikipedia).
(5)(5)

El datum geodésico
Cuando se trabaja con un elipsoide general, este, como se ha dicho, se sitúa de tal modo
que tanto la posición de su centro de gravedad como su plano ecuatorial coincidan con
los terrestres. Por el contrario, cuando el elipsoide es local, estas propiedades no han de
cumplirse necesariamente, y el elipsoide a solas resulta insuficiente ya que carecemos
de información sobre su posicionamiento con respecto a la superficie terrestre.
Surge así el concepto de datum, que es el conjunto formado por una superficie de
referencia (el elipsoide) y un punto en el que «enlazar» este al geoide. Este punto se
denomina punto astronómico fundamental (para su cálculo se emplean métodos
astronómicos), o simplementepunto fundamental, y en él el elipsoide es tangente al
geoide. La altura geoidal en este punto es, como cabe esperar, igual a cero. La vertical
al geoide y al elipsoide son idénticas en el punto fundamental.
Para un mismo elipsoide pueden utilizarse distintos puntos fundamentales, que darán
lugar a distintos datum y a distintas coordenadas para un mismo punto.

Sistemas de coordenadas
Disponiendo de un modelo preciso para definir la forma de la Tierra, podemos
establecer ya un sistema de codificar cada una de las posiciones sobre su superficie y
asignar a estas las correspondientes coordenadas. Puesto que la superficie de referencia
que consideramos es un elipsoide, lo más lógico es recurrir a los elementos de la
geometría esférica y utilizar estos para definir el sistema de referencia. De ellos derivan
los conceptos de latitud y longitud, empleados para establecer las coordenadas
geográficas de un punto.
No obstante, la geometría plana resulta mucho más intuitiva y práctica que la geometría
esférica para realizar ciertas tareas, y a raíz de esto surgen las proyecciones
cartográficas, que tratan de situar los elementos de la superficie del elipsoide sobre una
superficie plana, y que son los que se emplean para la creación de cartografía. Al aplicar
una proyección cartográfica, las coordenadas resultantes son ya coordenadas
cartesianas.
Ambas formas de expresar la posición de un punto son utilizadas en la actualidad, y las
veremos con detalle en esta sección.

Coordenadas geográficas
El sistema de coordenadas geográficas es un sistema de coordenadas esféricas mediante
el cual un punto se localiza con dos valores angulares:
 la latitud ϕϕ es el ángulo entre la línea que une el centro de la esfera con un punto de
su superficie y el plano ecuatorial. Las lineas formadas por puntos de la misma latitud
se denominan paralelos y forman círculos concéntricos paralelos al ecuador. Por
definición la latitud es de 0° en el ecuador, que divide el globo en los hemisferios norte
y sur. La latitud puede expresarse especificando si el punto se sitúa al norte o al sur, por
ejemplo 24°, 21' 11'' N, o bien utilizando un signo, en cuyo caso los puntos al Sur del
ecuador tienen signo negativo.
 la longitud λλ es el angulo formado entre dos de los planos que contienen a la linea de
los Polos. El primero es un plano arbitrario que se toma como referencia y el segundo es
el que, ademas de contener a la linea de los polos, contiene al punto en cuestión. Las
líneas formadas por puntos de igual longitud se denominan meridianos y convergen en
los polos. Como meridiano de referencia internacional se toma aquel que pasa por el
observatorio de Greenwich, en el Reino Unido. Este divide a su vez el globo en dos
hemisferios: el Este y el Oeste. La longitud puede expresarse especificando si el punto
se sitúa al Este o al Oeste, por ejemplo 32°, 12' 43'' E, o bien utilizando un signo, en
cuyo caso los puntos al Oeste del meridiano de referencia tienen signo negativo.
En la figura 66 puede verse un esquema de los conceptos anteriores.
Esquema
de los elementos del sistema de coordenadas geográficas.
(6)(6)
La tabla 77 recoge las coordenadas geográficas de algunas ciudades importantes, a
modo de ejemplo.
Ciudad Latitud Longitud
Badajoz 38.53 N 6.58 O
Ciudad Latitud Longitud
Barcelona 41.23 N 2.11 E
Cadiz 36.32 N 6.18 O
Girona 41.59 N 2.49 E
Granada 37.11 N 3.35 O
Madrid 40.24 N 3.41 O
Segovia 40.57 N 4.07 O
Valencia 39.28 N 0.22 O
Zaragoza 41.39 N 0.52 O
Coordenadas geográficas de algunas ciudades
(7)(7)
Las coordenadas geográficas resultan de gran utilidad, especialmente cuando se trabaja
con grandes regiones. No obstante, no se trata de un sistema cartesiano, y tareas como
la medición de áreas o distancias es mucho más complicada. Si bien la distancia entre
dos paralelos es prácticamente constante (es decir, un grado de latitud equivale más o
menos a una misma distancia en todos los puntos), la distancia entre dos meridianos no
lo es, y varía entre unos 11,3 kilómetros en el Ecuador hasta los cero kilómetros en los
polos, donde los meridianos convergen.

Proyecciones cartográficas
A pesar de su innegable utilidad y la potencia que nos brindan para la localización de
cualquier punto sobre la superficie terrestre, un sistema de coordenadas esféricas tiene
inconvenientes que no pueden obviarse. Por una parte, estamos más acostumbrados a la
utilización de sistemas cartesianos en los cuales la posición de un punto se define
mediante un par de medidas de distancia xx e yy. Esta forma es mucho más sencilla e
intuitiva, y permite una mayor facilidad de operaciones.
Por otro lado, si necesitamos crear una representación visual de la información
cartográfica, lo habitual es hacerlo en una superficie plana, ya sea a la manera clásica en
un pliego de papel o, usando las tecnologías actuales, en un dispositivo tal como una
pantalla.
Por todo ello, se deduce que existe una necesidad de poder trasladar la información
geográfica (incluyendo, por supuesto, la referente a su localización) a un plano, con
objeto de poder crear cartografía y simplificar gran número de operaciones posteriores.
El proceso de asignar una coordenada plana a cada punto de la superficie de la Tierra
(que no es plana) se conoce comoproyección cartográfica.
Más exactamente, una \textit{proyección cartográfica} es la correspondencia
matemática biunívoca entre los puntos de una esfera o elipsoide y sus transformados en
un plano [Martin1983IGN]. Es decir, una aplicación ff que a cada par de coordenadas
geográficas (ϕ,λ)(ϕ,λ)le hace corresponder un par de coordenadas
cartesianas (x,y)(x,y), según
x=f(ϕ,λ);y=f(ϕ,λ)(8)(8)x=f(ϕ,λ);y=f(ϕ,λ)
De igual modo, las coordenadas geográficas puede obtenerse a partir de las cartesianas
según
ϕ=g(x,y);λ=g(x,y)(9)(9)ϕ=g(x,y);λ=g(x,y)
Se puede pensar que podemos obtener una representación plana de la superficie de una
esfera o un elipsoide si tomamos esta y la extendemos hasta dejarla plana. Esto, sin
embargo, no resulta posible, ya que dicha superficie no puede desarrollarse y quedar
plana. Por ello, hay que buscar una forma distinta de relacionar los puntos en la
superficie tridimensional con nuevos puntos en un plano.
La figura 1010 muestra un esquema del concepto de proyección, esbozando la idea de
cómo puede establecerse la correspondencia entre puntos de la esfera y del plano.
Esquema
del concepto de proyección. A los puntos A,BA,B y CC sobre la superficie del
elipsoide les asocian equivalentes a,ba,b y cc sobre un plano.
(10)(10)
En ella vemos cómo el concepto de proyección se asemeja a la generación de sombras,
ya que a partir de un foco se trazan las trayectorias de una serie de rayos que unen dicho
foco con los puntos a proyectar, y después se determina el punto de contacto de esos
rayos con la superficie plana. Aunque no todas las proyecciones siguen necesariamente
este esquema, una parte de ellas sí que se fundamentan en un razonamiento similar a
este, y el esquema mostrado sirve bien para entender el concepto y el paso de
coordenadas de una superficie tridimensional a una bidimensional.
Veremos en los siguientes puntos las diferentes modificaciones que pueden introducirse
sobre la forma anterior de proyectar, y que dan lugar a tipos distintos de proyecciones.
Puede apreciarse igualmente en la figura que se producen distorsiones al realizar la
proyección. Es decir, que ciertas propiedades no se reproducen con fidelidad al pasar
puntos desde la superficie curva al plano. Por ejemplo, la distancia entre los
puntos AA y BB no es igual a la existente entre los puntos aa y bb. Con independencia
de las características propias de la proyección, siempre existen distorsiones. Esto es así
debido a que la esfera, como se ha dicho, no es desarrollable, mientras que el plano sí lo
es, y por ello en el paso de coordenadas de uno a otra han de aparecen inevitablemente
alteraciones.

Tipos de proyecciones
Las proyecciones se clasifican según la superficie sobre la que se proyectan los puntos.
En el esquema de la figura 1010, el plano de proyección es ya de por sí bidimensional.
No obstante, puede realizarse la proyección sobre una superficie tridimensional,
siempre que esta, a diferencia de la esfera, sí sea desarrollable. Es decir, que pueda
«desenrollarse» y convertirse en un plano sin necesidad de doblarse o cortarse. Estas
otras superficies pueden emplearse también para definir una proyección, de la misma
forma que se hace con un plano.
Las superficies más habituales son el cono y el cilindro (junto con, por supuesto, el
plano), las cuales, situadas en una posición dada en relación con el objeto a proyectar
(esto es, la Tierra), definen un tipo dado de proyección. Distinguimos así los siguiente
tipos de proyecciones:
 Cónicas. La superficie desarrollable es un cono (Figura 1212), que se sitúa
generalmente tangente o secante en dos paralelos a la superficie del elipsoide. En este
último caso, la distorsión se minimiza en las áreas entre dichos paralelos, haciéndola
útil para representar franjas que no abarquen una gran distancia en latitud, pero poco
adecuada para representación de grandes áreas. Algunas de las proyecciones más
conocidas de este grupo son la proyección cónica equiárea de Albers y la proyección
conforme cónica de Lambert.
Esquema de una proyección
cilíndrica (tomado de Wikipedia)
(11)(11)
 Cilíndricas. La superficie desarrollable es un cilindro (Figura 1111). Al proyectar, los
meridianos se convierten en lineas paralelas, así como los paralelos, aunque la distancia
entre estos últimos no es constante.
En su concepción más simple, el cilindro se sitúa de forma tangente al ecuador
(proyección normal o simple), aunque puede situarse secante y hacerlo a los meridianos
(proyección transversa) o a otros puntos (proyección oblicua).
La proyección de Mercator, la transversa de Mercator, la cilíndrica de Miller o la
cilíndrica equiárea de Lambert son ejemplos relativamente comunes de este tipo de
proyecciones.
Esquema de una proyección
cónica (tomado de Wikipedia)
(12)(12)
 Planas o azimutales. La superficie desarrollable es directamente un plano. Según el
esquema de la figura 1010, tenemos distintos tipos en función de la posición del punto
de fuga.
o Gnómica o central. El punto de fuga se sitúa en el centro del elipsoide.

o Estereográfica. El plano es tangente y el punto de fuga se sitúa en las antípodas del


punto de tangencia. La proyección polar estereográfica es empleada habitualmente para
cartografiar las regiones polares.

o Ortográfica. El punto de fuga se sitúa en el infinito.

Existen proyecciones azimutales que no son de tipo perspectivo, es decir, que no se


basan en el esquema de la figura 1010. La proyección de Airy, por ejemplo, es una de
ellas.
 Algunas proyecciones no se ajustan exactamente al esquema planteado, y no utilizan
una superficie desarrollable como tal sino modificaciones a esta idea. Por ejemplo, las
proyecciones policónicas utilizan la misma filosofía que las cónicas, empleando conos,
pero en lugar de ser este único, se usan varios conos, cada uno de los cuales se aplica a
una franja concreta de la zona proyectada. La unión de todas esas franjas, cada una de
ellas proyectada de forma distinta (aunque siempre con una proyección cónica), forma
el resultado de la proyección.

Del mismo modo, encontramos proyecciones como la proyección sinusoidal, una


proyección de tipo pseudocilíndrico, o la proyección de Werner, cuya superficie
desarrollable tiene forma de corazón. Estas proyecciones son, no obstante, de uso
menos habitual, y surgen en algunos casos como respuesta a una necesidad cartográfica
concreta.
Otra forma distinta de clasificar las proyecciones es según las propiedades métricas que
conserven. Toda proyección implica alguna distorsión (denominada anamorfosis), y
según cómo sea esta y a qué propiedad métrica afecte o no, podemos definir los
siguientes tipos de proyecciones:
 Equiárea. En este tipo de proyecciones se mantiene una escala constante. Es decir, la
relación entre un área terrestre y el área proyectada es la misma independientemente de
la localización, con lo que la representación proyectada puede emplearse para comparar
superficies.

 Conformes. Estas proyecciones mantienen la forma de los objetos, ya que no provocan


distorsión de los ángulos. Los meridianos y los paralelos se cortan en la proyección en
ángulo recto, igual que sucede en la realidad. Su principal desventaja es que introducen
una gran distorsión en el tamaño, y objetos que aparecen proyectados con un tamaño
mucho mayor que otros pueden ser en la realidad mucho menores que estos.

 Equidistantes. En estas proyecciones se mantienen las distancias.

En los ejemplos de proyecciones que se han citado para los distintos tipos de
proyecciones (cónicas, cilíndricas, etc.) puede verse cómo resulta común especificar el
tipo en función de la propiedad métrica preservada, para así caracterizar completamente
la proyección.
La elección de una u otra proyección es función de las necesidades particulares. Como
ya se ha dicho, la proyección polar estereográfica es empleada cuando se trabaja las
regiones polares, ya que en este caso es la más adecuada. Proyecciones como la de
Mercator, empleadas habitualmente, no resultan tan adecuadas en esas zonas.
Asimismo, hay proyecciones que no pueden recoger todo el globo, sino solo una parte
de este, por lo que no son de aplicación para grandes escalas. La existencia de un gran
número de distintas proyecciones es precisamente fruto de las diferentes necesidades
que aparecen a la hora de trabajar con cartografía.

El sistema UTM
De entre los cientos proyecciones de existen actualmente, algunas tienen un uso más
extendido, bien sea por su adopción de forma estandarizada o sus propias
características. Estas proyecciones, que se emplean con más frecuencia para la creación
de cartografía, son también las que más habitualmente vamos a encontrar en los datos
que empleemos con un SIG, y es por tanto de interés conocerlas un poco más en detalle.
En la actualidad, una de las proyecciones más extendidas en todos los ámbitos es la
proyección universal transversa de Mercator, la cual da lugar al sistema de coordenadas
UTM. Este sistema, desarrollado por el ejército de los Estados Unidos, no es
simplemente una proyección, sino que se trata de un sistema completo para cartografiar
la practica totalidad de la Tierra. Para ello, esta se divide en una serie de zonas
rectangulares mediante una cuadricula y se aplica una proyección y unos parámetros
geodésicos concretos a cada una de dichas zonas. Aunque en la actualidad se emplea un
único elipsoide (WGS--84), originalmente este no era único para todas las zonas.
Con el sistema UTM, las coordenadas de un punto no se expresan como coordenadas
terrestres absolutas, sino mediante la zona correspondiente y las coordenadas relativas a
la zona UTM en la que nos encontremos.
La cuadricula UTM tiene un total de 60 husos numerados entre 1 y 60, cada uno de los
cuales abarca una amplitud de 6° de longitud. El huso 1 se sitúa entre los 180° y 174°
O, y la numeración avanza hacia el Este.
En latitud, cada huso se divide en 20 zonas, que van desde los 80° S hasta los 84° N.
Estas se codifican con letras desde la C a la X, no utilizándose las letras I y O por su
similitud con los dígitos 1 y 0. Cada zona abarca 8 grados de longitud, excepto la X que
se prolonga unos 4 grados adicionales.
La figura 1313 muestra un esquema de la cuadrícula UTM.
Representación parcial de la cuadrícula UTM en Europa (tomado de Wikipedia)
(13)(13)
Una zona UTM se localiza, por tanto, con un número y una letra, y es en función de la
zona como posteriormente se dan las coordenadas que localizan un punto. Estas
coordenadas se expresan en metros y expresan la distancia entre el punto y el origen de
la zona UTM en concreto. El origen de la zona se sitúa en el punto de corte entre el
meridiano central de la zona y el ecuador. Por ejemplo, para las zonas UTM en el huso
31, el cual va desde los 0° hasta los 6°, el origen se sitúa en el punto de corte entre el
ecuador y el meridiano de 3° (Figura 1414).
Determinación del origen de una
zona UTM
(14)(14)
Para evitar la aparición de números negativos, se considera que el origen no tiene una
coordenada X de 0 metros, sino de 500000. Con ello se evita que las zonas al Este del
meridiano central tengan coordenadas negativas, ya que ninguna zona tiene un ancho
mayor de 1000000 metros (el ancho es máximo en las zonas cerca del ecuador, siendo
de alrededor de 668 kilómetros).
De igual modo, cuando se trabaja en el hemisferio sur (donde las coordenadas Y serían
siempre negativas), se considera que el origen tiene una coordenada Y de 10000000
metros, lo cual hace que todas las coordenadas referidas a él sean positivas.
Para las zonas polares no resulta adecuado emplear el sistema UTM, ya que las
distorsiones que produce son demasiado grandes. En su lugar, se utiliza el sistema UPS
(Universal Polar Stereographic).

Transformación y conversión de coordenadas


Una situación muy habitual en el trabajo con un SIG es disponer de cartografía en
varios sistemas de coordenadas en un mismo sistema pero con parámetros diferentes
(por ejemplo, diferente datum). Para poder emplear toda esa cartografía de forma
conjunta, resulta necesario trabajar en un sistema único y bien definido, lo cual hace
necesario convertir al menos una parte de ella.
Este cambio de coordenadas puede ser obligatorio a cualquier escala de trabajo, ya que
las diferencias en el sistema escogido pueden aparecer por circunstancias muy diversas,
incluso si todos los datos tienen un origen común. Así, al reunir información de varios
países para crear en un SIG un mapa de todo un continente, es probable que los datos de
cada país estén referidos a un sistema distinto, pero incluso trabajando en un área más
reducida podemos encontrar una situación similar. En España, por ejemplo, podemos
encontrar cartografía de algunas Comunidades Autónomas en dos husos UTM distintos,
ya que la frontera entre estos cruza y divide dichas Comunidades.
Distinguimos dos tipos de operaciones a realizar con coordenadas:
 Conversión de coordenadas. Los sistemas de origen y destino comparten el mismo
datum. Es una transformación exacta y se basa en la aplicación de formulas establecidas
que relacionan ambos sistemas.

 Transformación de coordenadas. El datum es distinto en los sistemas de origen y


destino.

Las proyecciones cartográficas, vistas en un punto anterior, son una forma particular de
conversión de coordenadas.
Un SIG ha de estar preparado para trabajar con cartografía en cualquiera de los sistemas
de referencia más habituales y, más aún, para facilitar al usuario la utilización de todo
tipo de información geográfica con independencia del sistema de coordenadas que se
emplee. Para ello, los SIG incorporan los procesos necesarios para efectuar cambios de
coordenadas, de forma que para unos datos de partida se genera un nuevo conjunto de
datos con la misma información pero expresada en un sistema de coordenadas distinto.
Otra forma en la que los SIG pueden implementar estas operaciones es mediante
capacidades de transformación y conversión «al vuelo», es decir, en tiempo real. De
este modo, pueden introducirse en un SIG datos en sistemas de coordenadas variados, y
el SIG se encarga de cambiar estos a un sistema de referencia base fijado de antemano.
Este proceso tiene lugar de forma transparente para el usuario, que tiene la sensación de
que todos los datos estaban originalmente en el sistema de trabajo escogido.
Esto exige, lógicamente, que todo dato geográfico se acompañe de información acerca
del sistema de coordenadas que se ha utilizado para crearlo, algo que no siempre
sucede. Veremos más acerca de la importancia de este tipo de información adicional en
el capítulo Metadatos.

Codificación de sistemas de referencia


Debido al elevado número de distintos sistemas de referencia existentes, resulta fácil
perderse en ellos a la hora de tener que trabajar con cartografía en distintos sistemas. Si
bien es cierto que existe un esfuerzo integrador para tratar de homogeneizar el uso de
sistemas de referencia, también existen esfuerzos para intentar facilitar la gestión de
estos y que no resulte tan complejo combinar cartografía producida utilizando sistemas
de coordenadas diferentes.
Uno de los intentos más exitosos en este sentido es el desarrollado por el consorcio
petrolífero European Petroleum Survey Group (EPSG), el cual, consciente de la
necesidad de disponer de información acerca de los distintos sistemas de coordenadas y
de que esta información fuera de fácil acceso y manejo, ha elaborado un esquema de
codificación específico.
Este esquema asocia a cada sistema de coordenadas un código (conocido como código
EPSG) que la identifica. Paralelamente, se han documentado en un formato común las
características principales de todos estos sistemas, así como las formulaciones que
permiten transformar coordenadas entre ellos.
Esta información constituye el EPSG geodetic parameter dataset [webEPSG], un
repositorio de los parámetros necesarios para
 identificar coordenadas de tal modo que estas describan la posición de un punto de
forma inequívoca y no ambigua.

 definir transformaciones y conversiones que permitan pasar de un sistema de referencia


a otro.

Información detallada sobre los códigos EPSG puede encontrarse en [webEPSG].

Escala
El concepto de escala es fundamental a la hora de trabajar con cartografía, y es uno de
los valores básicos que definen toda representación cartográfica. Esta representación ha
de tener un tamaño final manejable, con objeto de que pueda resultar de utilidad y
permitir un uso práctico, pero el objeto que se cartografía (un país, un continente o bien
la Tierra al completo) es un objeto de gran tamaño. Esto hace necesario que, para crear
un mapa, se deba reducir o bien el objeto original o bien el objeto ya proyectado, dando
lugar a una versión «reducida» que ya cumple con los requisitos de tamaño adecuado.
Es decir, imaginemos que aplicamos una proyección cónica sobre el elipsoide,
empleando para ello un cono que cubra dicho elipsoide, el cual tendrá que ser,
lógicamente de gran tamaño (¡hay que cubrir toda la Tierra!). Al desarrollarlo, el plano
que obtenemos tiene miles de kilómetros de lado. Debemos fabricar una versión «a
escala» de este, que será la que ya podamos utilizar.
En este contexto, la escala no es sino la relación de tamaño existente entre ese gran
mapa que se obtiene al desarrollar nuestro cono de proyección y el que finalmente
manejamos, de tamaño más reducido. Conociendo esta relación podemos ya conocer las
verdaderas magnitudes de los elementos que vemos en el mapa, ya que podemos
convertir las medidas hechas sobre el mapa en medidas reales. Es importante recordar
que esas medidas no son tan «reales», puesto que la propia proyección las ha
distorsionado —lo cual no debe olvidarse—, pero sí que son medidas en la escala
original del objeto cartografiado.
La escala se expresa habitualmente como un denominador que relaciona una distancia
medida en un mapa y la distancia que esta medida representa en la realidad. Por
ejemplo, una escala 1:50000 quiere decir que 1 centímetro en un mapa equivale a 50000
centímetros en la realidad, es decir a 500 metros. Conociendo este valor de la escala
podemos aplicar sencillas reglas de tres para calcular la distancia entre dos puntos o la
longitud de un elemento dado, sin más que medirlo sobre el mapa y después convertir el
resultado obtenido en una medida real.
Una vez más es preciso insistir que lo anterior es posible siempre bajo las limitaciones
que la propia proyección empleada para crear el mapa tenga al respecto, y que
dependerán del tipo de proyección que sea en función de las propiedades métricas que
conserva.
De hecho, e independientemente del tipo de proyección, la escala es completamente
cierta únicamente en determinadas partes del mapa. Cuando decimos que un mapa tiene
una escala 1:50000, este valor, denominado Escala Numérica, se cumple con exactitud
tan solo en algunos puntos o líneas. En otros puntos la escala varía. La relación entre la
escala en esos puntos y la Escala Numérica se conoce como Factor de Escala.
A pesar de que la escala es imprescindible para darle un uso práctico a todo mapa, y
cualquier usuario de este debe conocer y aplicar el concepto de escala de forma precisa,
los SIG pueden resultar engañosos al respecto. Aunque la escala como idea sigue siendo
igual de fundamental cuando trabajamos con información geográfica en un SIG, las
propias características de este y la forma en la que dicha información se incorpora en el
SIG pueden hacer que no se perciba la escala como un concepto tan relevante a la hora
de desarrollar actividad con él.
Esto es debido principalmente a que la escala tiene una relación directa con la
visualización, ya que se establece entre la realidad y una representación visual
particular, esto es, el mapa. Como ya se ha mencionado en el
capítulo Introduccion_fundamentos, los datos en un SIG tienen carácter numérico y no
visual, y la representación de estos se encarga de realizarla el subsistema
correspondiente a partir de dichos datos numéricos. Es decir, que en cierta medida en un
SIG no es estrictamente necesaria la visualización de los datos, y cuando esta se lleva a
cabo no tiene unas características fijas, ya que, como veremos, el usuario puede elegir el
tamaño con el que estos datos se representan en la pantalla.
Un mapa impreso puede ampliarse o reducirse mediante medios fotomecánicos. Sin
embargo, no es esta una operación «natural», y está claro que desde el punto de vista
del rigor cartográfico no es correcta si lo que se hace es aumentar el tamaño del mapa.
En un SIG, sin embargo, es una operación más el elegir la escala a la que se representan
los datos y modificar el tamaño de representación, y esta resulta por completo natural e
incluso trivial[Jenerette2000BESA].
Pese a ello, los datos tienen una escala inherente, ya que esta no está en función de la
representación, sino del detalle con que han sido tomados, y esta escala debe igualmente
conocerse para dar un uso adecuado a dichos datos. En este sentido es más conveniente
entender la escala como un elemento relacionado con la resolución de los datos, es
decir, con el tamaño mínimo cartografiado.
Esta concepción no es en absoluto propia de los SIG, ya que deriva de las
representaciones clásicas y los mapas impresos. Se sabe que el tamaño mínimo que el
ojo humano es capaz de diferenciar es del orden de 0,2 mm. Aplicando a este valor la
escala a la que queremos crear un mapa, tendremos la mínima distancia sobre el terreno
que debe medirse. Por ejemplo, para el caso de un mapa 1:50000, tenemos que la
mínima distancia es de 10 metros.
Si medimos puntos a una distancia menor que la anterior y después los representamos
en un mapa a escala 1:50000, esos puntos no serán distinguibles para el usuario de ese
mapa, y la información recogida se perderá. Estos razonamientos sirven para calcular la
intensidad del trabajo que ha de realizarse para tomar los datos con los que después
elaborar una determinada cartografía.
En realidad, el concepto de escala no es único, sino que tiene múltiples facetas. Por una
parte la escala cartográfica, que es la mera relación entre el tamaño en el mapa y la
realidad. Por otra, la escala de análisis u operacional[Lam1992PG], que es la que
define la utilidad de los datos y lo que podemos hacer con ellos, ya que indica las
limitaciones de estos. Cuando en un SIG aumentamos el tamaño en pantalla de una
cierta información geográfica, estamos variando la escala cartográfica, pero no estamos
modificando la escala de análisis. Por ello, por mucho que ampliemos no vamos a ver
más detalles, ya que para ello sería necesario tomar más datos.
Veremos más ideas sobre la escala de análisis y algunas implicaciones al respecto en el
capítuloIntroduccion_procesos, al inicio de la parte dedicada a los procesos, ya que
estos conceptos son fundamentales para realizar correctamente análisis y operaciones
como las descritas en esa parte del libro.
Un tipo de datos espaciales particulares con los que se trabaja en un SIG, los
datos ráster, tienen a su vez un parámetro de resolución, con una clara relación con el
concepto de escala. Veremos más al respecto en el capítulo Tipos_datos.

Generalización cartográfica
Muy relacionado con el concepto de escala encontramos la denominada generalización
cartográfica. Generalizar implicar expresar alguna idea o información de forma más
resumida, de tal modo que esta sea comprensible y pueda aprovecharse de la mejor
manera posible. Cuando hablamos de cartografía, la generalización implica representar
un dato geográfico a una escala menor (es decir, un tamaño mayor) del que le
corresponde si se atiende al detalle que este posee.
Si resulta incorrecto como hemos visto ampliar el tamaño un mapa sin incorporar más
datos (esto es, sin variar consecuentemente la escala de análisis), puede resultar
igualmente erróneo «encoger» ese mapa y mostrar la información geográfica a una
escala muy distinta de la que corresponde a esos datos. Si la diferencia de escala es
pequeña, no existe dificultad, pero si esta diferencia es grande, la representación
resultante puede no ser adecuada y confusa. No solo habrá información que no se
perciba, sino que parte de la información que quede patente puede no estarlo en la
forma idónea y más intuitiva.
Para ver un ejemplo de lo anterior, y poniendo un ejemplo un tanto extremo, pensemos
en un mapa del mundo en el que se representen todas las calles y caminos existentes.
Esta información tiene una escala adecuada para ser mostrada en un callejero local cuya
escala nominal suele ser del orden de 1:5000, pero a la escala 1:1000000, adecuada para
un mapa mundial, representar todo su detalle resulta innecesario. La representación
resultante va a tener una densidad excesiva, y muchos de sus elementos no podrán
distinguirse debido a su cercanía.
En caso de que esta representación no se haga sobre papel sino sobre una pantalla y
trabajando con un SIG, la situación es similar y resulta incluso más necesario aplicar
alguna forma de generalización. A las limitaciones de la visión humana han de sumarse
las limitaciones de resolución que el propio dispositivo presenta. En la situación del
ejemplo anterior, muchos elementos del mapa (calles, edificios, etc.), ocuparían por su
tamaño un mismo y único punto en la pantalla (veremos más adelante que cada uno de
estos puntos se conoce como píxel), por lo que resultaría imposible distinguirlos o
detallarlos más allá de ese nivel de resolución.
A lo anterior debemos añadir el hecho de que producir esa representación, aunque sea
sobre un solo píxel, puede requerir gran cantidad de procesos y operaciones, ya que el
conjunto de calles que se contienen en él pueden presentar gran complejidad, tanto
mayor cuanto mayor sea el nivel de detalle con que han sido recogidas en los datos. Es
decir, que en el trabajo con un SIG la generalización no tiene importancia únicamente
para la visualización en sí, sino también para el rendimiento del propio SIG a la hora de
producir dicha visualización.
Aunque en las situaciones anteriores la generalización puede llevarse a cabo eligiendo
qué elementos representar y cuáles no, esta selección no recoge en sí toda la
complejidad de la generalización, ya que esta es un conjunto más complejo de procesos
y transformaciones gráficas [Robinson1978Wiley].
En ocasiones, el proceso de generalización es necesario por razones distintas a lo visto
en el ejemplo anterior, y requiere diferentes operaciones. Por ejemplo, podemos crear
un mapa del mundo que contenga vías de comunicación, pero no todas, sino solo las
principales autopistas de cada país. En este caso, no vamos a encontrar problemas con
distintas carreteras que se solapan en la representación, ni tampoco un volumen
excesivo de datos, pero debemos igualmente «adaptar» la representación a la escala, es
decir, efectuar algún tipo de generalización.
Si en ese mapa representamos una carretera con un ancho de 20 metros a escala
1:1000000, el tamaño que tendrá en el mapa será de tan solo 0,02 milímetros. Este
ancho es prácticamente nulo y no tiene sentido representar esa carretera de esta forma,
sino darle un ancho mayor. Aunque no se esté dibujando con exactitud la magnitud real
de ese elemento, el resultado es mucho mejor desde todos los puntos de vista. Esta es
otra forma de generalización que busca también mejorar la calidad de la representación
y la transmisión de la información que contiene.
La generalización, por tanto, es un proceso que tiene como objetivo la producción de
una imagen cartográfica legible y expresiva, reduciendo el contenido del mapa a aquello
que sea posible y necesario representar. Para ello, se enfatiza aquello que resulta de
importancia y se suprime lo que carece de ella [Anon2002EUITP].

Operaciones de generalización
Existen diversas operaciones que se emplean en el proceso de generalización. Algunas
de las más relevantes son las siguientes [McMaster1992AAG]:
 Simplificación. Se trata de crear elementos más sencillos que sean más fáciles y
rápidos de representar. Los elementos originales se sustituyen por estos más sencillos,
de tal modo que se mantienen las características visuales principales pero las
operaciones con los datos se optimizan.

 Suavizado. Se sustituyen formas angulosas por otras más suaves y de menor


complejidad.

 Agregación. Un conjunto de varios objetos se sustituye por uno nuevo con un menor
número. Por ejemplo, al representar una ciudad, no dibujar cada una de las casas, sino
solo el contorno de cada manzana. La figura 1515 muestra un ejemplo de esta técnica
aplicado a elementos lineales, en particular carreteras.
 Exageración. En ocasiones, mantener el objeto a la escala que le corresponde haría que
no se pudieran apreciar las características de este. En este caso, se exagera su tamaño
para que pueda interpretarse con mayor facilidad y no perder información en la
representación.

 Desplazamiento. Un objeto se representa en una posición distinta a la que le


corresponde, con el fin de garantizar su visibilidad y obtener un resultado más claro.
Un ejemplo de generalización por agregación. Dos carreteras prácticamente paralelas y
unidas se representan como dos elementos en el mapa, pero en el localizador de la parte
superior izquierda, a escala de menor detalle, se generalizan como una única (Tomado
de Yahoo Maps).
(15)(15)
Combinando operaciones como las anteriores de forma adecuada, se obtiene una
cartografía mucho más útil, en la cual la información que contiene resulta más accesible
y práctica, con un mayor potencial desde todos los puntos de vista. En el caso de
trabajar en un SIG, algunas de estas operaciones, como pueden ser la simplificación o la
agregación, tiene también un efecto beneficioso sobre el propio manejo de los datos
dentro del SIG.
Estas operaciones se enumeran aquí como ideas a aplicar para efectuar la generalización
de un documento geográfico, como corresponde a este capítulo de fundamentos y
conceptos cartográficos básicos. No obstante, estas mismas operaciones también las
veremos en otras partes del libro, ya que no son exclusivas de esta parte. Por su
importante papel en la representación visual de los datos, veremos más al respecto en la
parte dedicada a visualización. Algunos algoritmos para la simplificación y suavizado
de líneas los estudiaremos en la parte dedicada a procesos, particularmente en el
apartado Generalizacion_lineas.

Generalización en el contexto de un SIG


La generalización es importante en un SIG debido a la variedad de escalas posibles que
puede tener la información con que se trabaja, así como por la variedad de escalas de
representación que pueden definirse gracias a la flexibilidad que el propio SIG presenta
en sus capacidades de visualización. Existen diversas formas de enfocar inicialmente el
problema de obtener un juego de datos óptimo para ser representado en cada caso y una
representación óptima de este.
La mayor problemática se encuentra en el manejo de datos con gran precisión y gran
volumen —como, por ejemplo, esos datos de calles y vías de todo el mundo— al
representarlos a una escala de menor detalle, aunque el proceso de generalización no es
necesario exclusivamente en este caso, sino en muchos otros con independencia del
volumen y la escala original.
Una aproximación básica puede ser trabajar con todo el conjunto de datos y
generalizarlo a medida que sea necesario en función de la escala de trabajo en cada
momento. Es decir, si el usuario decide visualizar todo un continente, el SIG no traza
todas las calles de ese continente, sino que se seleccionan de forma automática los
objetos a ser visualizados y después se crea la representación. Las operaciones de
generalización se llevan a cabo en el momento mismo en que el usuario lo necesita.
Este tipo de generalización «al vuelo» no resulta, sin embargo, óptimo, y en la mayoría
de los casos es inviable o no proporciona los resultados esperados. Esto es así debido a
que se ha de trabajar con el gran volumen de datos original, y generalizar estos es una
tarea suficientemente compleja como para que los algoritmos encargados de hacerlo no
lo hagan de forma fluida. No ha de olvidarse que, mientras que la razón fundamental de
la generalización en el contexto de la cartografía clásica es la mera visualización y la
transmisión de la información, en el entorno de un SIG también existen razones
relacionadas con la eficiencia de los procesos, como ya se ha mencionado. Aplicando
esta metodología, la generalización no es ventajosa en términos de cómputo, sino que,
por el contrario, puede incluso suponer una carga adicional al proceso de visualización.
Aun en el caso de que el volumen de datos no fuera grande y no existieran problemas de
rendimiento, una generalización por completo automatizada no garantiza un resultado
óptimo. Aun existiendo algoritmos y formulaciones matemáticas que permiten
generalizar de forma relativamente adecuada (algunos de los cuales los veremos más
adelante en este libro), el proceso global de generalización combina varios
procedimientos distintos, y en conjunto conforma un proceso no exento de subjetividad.
La labor tradicional del cartógrafo no puede automatizarse de forma total, y se hace
necesario cierto trabajo manual para obtener un resultado de calidad o evaluar el
generado por un procedimiento automático.
Por todo lo anterior, la forma de incorporar la generalización dentro de un SIG suele
basarse en un enfoque multi--escalar, en el cual se maneja información de una misma
zona de estudio a diferentes escalas, y se usa en cada momento aquella que resulte más
conveniente. Si trabajara con cartografía en papel, sería equivalente a tener varios
mapas de una zona a diferentes escalas.
Por ejemplo, en un mapa con núcleos de población a escala 1:25000 se almacenará cada
ciudad como un polígono que delimite su contorno. Esa misma información a escala
1:1000000 se almacenará como un único punto cada ciudad, ya que el tamaño de esta es
demasiado pequeño en la representación, y no tiene sentido el empleo de tanto detalle.
Para convertir un mapa en otro se ha producido un proceso de simplificación,
convirtiendo polígonos en puntos.
En un SIG es habitual manejar información a diferentes escalas. En función de la escala
de representación, la información visualizada será una u otra.
(16)(16)
Si incorporamos ambos mapas dentro de un SIG, podemos utilizar el que corresponda
en función de la escala requerida. De este modo, la generalización no es una tarea que el
propio SIG desarrolle, sino que cuando esta es necesaria puede recurrir a una
información ya generalizada de antemano. El rendimiento del proceso es mayor, y
además el dato generalizado puede haber sido elaborado de la forma más conveniente.
El concepto de capa, que veremos en el capítulo Introduccion_datos y que es vital para
la idea actual de un SIG, permite este manejo simultáneo de información a distintas
escalas.
En la figura 1616 puede verse un esquema de lo anterior. A medida que variamos la
escala de representación, la información que vemos representada tiene una escala
distinta y podría también tener un distinto origen. Incluso el tipo de información que
vemos varía, ya que las representaciones más globales son de tipo gráfico, creadas a
partir de los propios datos almacenados como objetos (calles, carreteras, etc.), mientras
que la de mayor detalle es una fotografía aérea.
En el caso de imágenes tales como esa fotografía aérea, existen además en un SIG una
serie de procesos que también pueden considerarse como parte de la generalización, y
que atañen más al rendimiento que a la representación. Para entenderse esto piénsese
que las imágenes se componen de elementos denominados píxeles, que son pequeños
puntos, cada uno de los cuales tendrá un color asociado (esto lo veremos con mucho
más detalle en el capítuloTipos_datos). El numero de estos píxeles en una imagen
grande es muy superior al de una pantalla (una pantalla también se divide en puntos, si
te acercas a una lo podrás ver claramente).
El proceso de representación de la imagen en la pantalla consiste en calcular qué color
asignar a cada píxel de la pantalla en función de los de la imagen, pero este proceso, si
se utiliza la imagen completa, es muy costoso en términos de cómputo, ya que implica
procesar toda la información de la imagen, que puede ser del orden de centenares de
millones de píxeles. Si representamos una porción de esa imagen (una porción del
territorio que cubre), podemos solo trabajar con los píxeles en esa zona, pero la
representación de toda la imagen hace necesario procesar todos los valores que
contiene.
Este proceso en realidad puede verse como un tipo de generalización «al vuelo». Ya
dijimos que este tenía principalmente dos problemas: el rendimiento y la imposibilidad
de obtener resultados óptimos de forma automatizada. En el caso de imágenes, existe el
problema del rendimiento, pero es posible automatizar la creación de datos a diferente
escala de trabajo. Esto es así debido a que la representación de elementos tales como
carreteras o lagos se hace mediante una interpretación de esos objetos, y este proceso es
en cierta medida subjetivo, como vimos. En el caso de imágenes no hay que interpretar
objeto alguno, ya que esos objetos ya «están» representados en la imagen, y únicamente
es necesario disminuir la escala.

Pirámides de
representación con imágenes preparadas a distintas escalas (Fuente: OSGeo).
(17)(17)
Los algoritmos para llevar a cabo este proceso se conocen como de remuestreo, y los
veremos con detalle en el capítulo Algebra_de_mapas. Algunos SIG utilizan estos
algoritmos para hacer más fluido el manejo de grandes imágenes mediante la creación
de las denominadaspirámides. Cuando el usuario introduce en el SIG una imagen de
gran tamaño, este prepara varias versiones de esa imagen a distintas escalas de detalle,
de forma que posteriormente pueda recurrir a la que sea más conveniente en cada caso
en función de la escala de representación. Es decir, el SIG realiza la «generalización»
de esa imagen de forma automática, siendo necesario proporcionarle únicamente la
imagen de mayor detalle. La figura 1717 ilustra gráficamente esto.

Resumen
La cartografía y la geodesia son ciencias que aportan un importante conjunto de
conocimientos y elementos al mundo de los SIG, y su estudio es fundamental para
cualquier trabajo con un SIG.
La geodesia se encarga de estudiar la forma de la Tierra, con objeto de posteriormente
poder localizar de forma precisa los puntos sobre esta mediante un sistema de
coordenadas. Dos conceptos básicos en geodesia son el geoide y el elipsoide,
superficies de referencia que modelizan la forma de la Tierra. El primero es la
superficie formada por los puntos en los que el campo gravitatorio tiene una misma
intensidad, y se obtiene prolongando la superficie de los océanos en reposo bajo la
superficie terrestre. El segundo es un objeto definido por una ecuación y una serie de
parámetros, que permite asimilar la Tierra a una superficie matemática.
El conjunto de un elipsoide y un punto de tangencia con la superficie terrestre (Punto
Fundamental), forma un datum.
Para asignar coordenadas a un punto en función de los elementos anteriores es necesario
definir un sistema de referencia. Las coordenadas geográficas han sido utilizadas
tradicionalmente, y son de utilidad para grandes zonas. Otro tipo de coordenadas más
intuitivas son las cartesianas, y para su obtención se requiere el concurso de una
proyección cartográfica que convierta coordenadas espaciales en coordenadas planas.
Hay muchos tipos de proyecciones, siendo el sistema UTM uno de los más extendidos.
En el ámbito de la cartografía, hemos visto en este capítulo la importancia del concepto
de escala, que no pierde su papel fundamental al trabajar en un SIG en lugar de hacerlo
con cartografía impresa. Estrechamente relacionada con la escala encontramos
la generalización, que comprende una serie de procesos encaminados a la obtención de
una representación lo más clara posible de una serie de datos a una escala dada.
1. FUNDAMENTOS DE GEODESIA Y CARTOGRAFÍA.
1.1 PLANOS ACOTADOS Y PLANOS CON CURVAS DE NIVEL.
El sistema de planos acotados se utiliza para la representación en el plano de superficies
topográficas (aquellas que envuelven la parte sólida de la Tierra). En este sistema cada punto
de la superficie se representa por su proyección sobre un plano horizontal y por su altura o
cota.
Para dar una idea clara del relieve se utilizan las curvas de nivel, que son líneas que unen en
el plano los puntos de igual cota. En planos de terrenos de poca extensión puede prescindirse
de la esfericidad terrestre. Las curvas de nivel vendrán dadas por la proyección sobre el plano
de comparación, de las intersecciones de la superficie con planos paralelos. En los planos con
curvas de nivel se señala sobre cada curva, la cota que corresponde al plano secante.
Los desniveles de curva a curva deben ser una cantidad constante, dándose el nombre de
equidistancia de una superficie topográfica a la distancia vertical constante que separa dos
secciones horizontales consecutivas.
La superficie topográfica no coincide exactamente con la superficie real del terreno y se
aproximará más cuanto menor sea la equidistancia.
1.2. DISTANCIA NATURAL, GEOMÉTRICA, REDUCIDA Y DESNIVEL.
La distancia geométrica Dg es la distancia definida en el espacio por el segmento A-B.
Ladistancia reducida Dr es la distancia entre los dos puntos en la proyección horizontal a-b.
La relación entre ambas se expresa por el coseno del ángulo que forman, es decir, delángulo
de pendiente.
La distancia natural es el desarrollo de la sección del terreno por un plano vertical que pasa
por A y por B.
La diferencia de las cotas de los extremos del segmento A y B se llama desnivel.
1.3. SISTEMA DE REPRESENTACIÓN USADO EN TOPOGRAFÍA.
El problema que es necesario resolver es representar en el papel, que sólo tiene dos
dimensiones, el terreno con sus relieves que es de tres dimensiones, por lo que necesitamos
alguno de los sistemas representativos que estudia la Geometría Descriptiva.
De los cuatro sistemas fundamentales, cónico, isométrico, diédrico y acotado, se elige el de
planos acotados ya que el resto deforman las figuras al variar sus dimensiones en las distintas
direcciones.
En el sistema acotado se representan los diversos puntos del espacio tomando un plano
horizontal arbitrariamente elegido, que se le denomina plano de comparación. Sobre él se
proyectan ortogonalmente, los diversos puntos. De este modo se sustituye la figura del
espacio de tres dimensiones, por su proyección en el plano de dos dimensiones.
La representación, ha de cumplir otro objetivo fundamental y es que sea reversible, es decir,
que a partir de la proyección seamos capaces de deducir la forma en el espacio. Para ello se
precisa de un elemento más, que es la distancia c que existe entre cada punto y su
proyección, y que se denomina cota.
La cota puede ser positiva o negativa, según el punto A se encuentre por encima o por debajo
del plano de comparación. En la representación topográfica el plano de comparación ha de
tomarse lo suficientemente bajo para que todas las cotas sean positivas.
1.4. PARTES DE LAS QUE CONSTA UN LEVANTAMIENTO.
Como se ha visto en la proyección acotada, los puntos vienen determinados por su proyección
horizontal y por su cota. De ahí, que todos los levantamientos topográficos consten de dos
partes:
• Planimetría, que consiste en el conjunto de operaciones necesarias para llegar a obtener la
proyección horizontal.
• Altimetría, que consiste en determinar la cota de los puntos necesarios o las curvas de nivel.
A veces ambos trabajos se hacen por separado utilizando instrumentos diferentes, pero
generalmente suelen hacerse simultáneamente, empleando un mismo instrumento; este
método se denomina taquimetría y el trabajo así efectuado se le conoce con el nombre de
levantamiento taquimétrico.
La realización del levantamiento taquirnétrico se realiza en dos etapas bien diferenciadas:
• Trabajo de campo: consiste en tomar sobre el terreno los datos necesarios, de forma que
se sitúan los instrumentos en los puntos elegidos, lo que se denomina hacer estación, y se
anotan las observaciones en impresos especiales llamados libretas taquimétricas.
• Trabajo de gabinete: se calculan en las libretas las distancias reducidas, los desniveles y
las coordenadas de los puntos visados, realizando todas las operaciones precisas hasta dejar
dibujado el plano.
1.5. CONCEPTO DE GEODESIA.
La Geodesia es la ciencia que tiene por objeto el estudio de la forma y las dimensiones de la
Tierra.
El primero en admitir la esfericidad de la Tierra fue Pitágoras en el año 550 a.C. y más tarde
Erastótenes determinó por primera vez el radio de la Tierra en el año 250 a.C.
En 1687 Newton enunción el siguiente principio universal: “la forma de equilibrio de una masa
fluida homogénea sometida a las leyes de gravitación universal y girando alrededor de un eje,
es un elipsoide de revolución aplastado por los polos”. Sin embargo este principio no se
cumple en la Tierra, ya que las masas internas no son homogéneas.
Por ello se admite comm forma de la Tierra la superficie en equilibrio materializada por los
mares en calma, denominada geoide; es una superficie física real y sobre la cual la gravedad
en todos sus puntos es normal a ella.
Para los cálculos geodésicos se elige un punto fundamental o datum en el que la normal al
geoide coincide con la normal al elipsoide. En este punto las dos superficies, elipsoide y
geoide son tangentes.
1.6. LA APROXIMACIÓN A LA FORMA DE LA TIERRA.
Debido a la imposibilidad de materializar la superficie real de la Tierra por una expresión
matemática, su estudio se realiza adoptando distintas superficies de aproximación, como la
esfera y el elipsoide de revolución.
1.6.1. EL GEOIDE.
El geoide es la representación del nivel medio de los mares y océanos en calma prolongados
por debajo de los continentes. Esta superficie es en cada punto normal a la dirección de la
gravedad. Es una superficie real y equipotencial. La expresión matemática que lo define es
muy compleja para utilizarla en Cartografia como superficie de referencia, por ello y para
simplificar el problema se utilizan una figuras aproximadas al geoide.
1.6.2. LA APROXIMACIÓN ESFÉRICA.
Se utiliza para simplificar los cálculos, aunque por todos es sabido que la superficie terrestre
difiere mucho de una esfera.
1.6.3. EL ELIPSOIDE DE APROXIMACIÓN.
El elipsoide de referencia es una superficie arbitraria que sirve de fundamento para el cálculo
de la situación de los puntos geodésicos y para determinar con respecto a ella la configuración
del geoide.
Hasta 1924, venía utilizando cada Nación el elipsoide que mejor se adaptaba a su superficie, y
así la geodesia española se refirió al elipsoide de Struve. En 1924, se adoptó para todo el
mundo como superficie de referencia el elipsoide de Hayford.
En el elipsoide de referencia, se denominan meridianos las secciones producidas en ella por
cualquier plano que contenga al eje de revolución, y se denominan paralelos a las
circunferencias producidas por la intersección del elipsoide con pianos perpendiculares a su
eje. Al paralelo mayor, que contiene el centro del elipsoide, se le denomina Ecuador; los
extremos del eje constituyen los polos Norte y Sur.
1.7. ELEMENTOS GEOGRÁFICOS EN LA SUPERFICIE APROXIMADA.
Se toma como superficie aproximada la esfera, en ella se define:
• La línea de los Polos PP', que es la recta alrededor de la cual gira la Tierra, dando lugar a los
meridianos que son los círculos máximos que pasan por la línea de los Polos.
• El Ecuador QQ', que es el círculo máximo perpendicular a dicha recta, PP', y da lugar a los
paralelos que son los círculos menores paralelos al Ecuador.
Para situar sobre la superficie de la Tierra los distintos vértices o lugares, se tomó un sistema
de referencia constituido por el plano del Ecuador y por el meridiano de cierto lugar, que por
acuerdo internacional es el del Observatorio de Greenwich, G.
Con estos dos planos fundamentales, un cierto lugar M se define por dos números
(diferencia de longitud) y
(latitud geográfica), estableciendo una correspondencia entre
cada par de números y los distintos puntos en la esfera.
• La diferencia de longitud, : es el ángulo medido en el Ecuador entre el meridiano de
Greenwich y el meridiano del punto M, se mide entre 0 y 1800 al Este o al Oeste de
Greenwich, correspondiendo a la longitud positiva o negativa respectivamente.
• La latitud geográfica, : es el ángulo medido en el meridiano del punto M entre el punto y el
Ecuador.
1.8. LAS PROYECCIONES CARTOGRÁFICAS.
La Cartografia es la ciencia que estudia la representación plana de la esfera o del elipsoide,
tratando de obtener por el cálculo, las coordenadas de los puntos del plano correspondientes
a los situados en dichas superficies.
La dificultad que existe para la representación de estos puntos, es que la Tierra no puede
representarse sobre un plano sin que sufra deformaciones. A pesar de ello, se ha de intentar
que la representación conserve el mayor número de propiedades métricas, que al no poderse
dar todas simultáneamente, se elegirán en función de la utilidad que se vaya a dar a la carta o
al mapa.
Cuando una proyección conserva la distancia, se llama equidistante y a las líneas se las llama
automecoicas; por tanto esas direcciones conservan la escala. Las líneas que no conservan
esta propiedad tienen “anamorfosis lineal”. Las proyecciones que conservan los ángulos se las
denomina conformes y el no cumplimiento de esta regla por dos rectas que se cortan, se llama
“anamorfosis angular”. Por último, los sistemas que conservan la superficie, se les llama
equivalentes y las proyecciones que no cumplen esta regla tienen “anamorfosis superficial”.
Las ecuaciones de las dos superficies, esfera y elipsoide, nos indican que pueden ser
desarrolladas sobre un plano, por ello, la necesidad de la Cartografia. Según definición
internacionalmente adoptada, proyección es la correspondencia matemática biunívoca entre
los puntos de una esfera o elipsoide y sus transformados en un plano. Esta correspondencia
se expresa en función de las coordenadas geográficas (longitud y latitud), de cada punto del
elipsoide y se traducen en el plano en coordenadas cartesianas (X, Y). La correspondencia
será puntual y biunívoca entre los puntos del plano y del elipsoide.
1.8.1. PROYECCIONES PLANAS.
En los casos en que sólo se pretende representar a una parte muy limitada de la superficie
terrestre, la práctica general ha sido considerarla como plana y prescindir de las proyecciones.
Esto no es posible sin graves deformaciones más que dentro de superficies pequeñas, que en
todo caso se limitan por un contorno (rectángulo, cuadrado o trapecio) y cuyos vértices tienen
coordenadas de acuerdo con algún sistema de proyección.
Hay varios tipos de proyecciones planas dependiendo de la posición del vértice de proyección:
1. Estereográfica. El vértice de proyección es el punto diametralmente opuesto al de
tangencia del plano de proyección; es una proyección plana muy empleada en Cartografia.
Suponiendo la Tierra esférica puede elegirse arbitrariamente el vértice de proyección, pero
nos limitaremos a estudiar el caso de que éste sea uno de los Polos terrestres (estereográfica
polar). En esta proyección se cumple que los meridianos son rectas concurrentes y los
paralelos son circunferencias concéntricas. La escala aumenta hacia la periferia y no se puede
representar toda la Tierra.
Este sistema se emplea generalmente para erepresentar las regiones polares y para las cartas
de navegación aeronáuticas.
2. Gnomónica. El vértice de proyección se encuentra en el centro de la Tierra; se puede
representar menos de la mitad de la Tierra y la escala aumenta hacia periferia. Cualquier recta
de la proyección corresponde a un círculo máximo. Por tanto el camino más corto en la esfera
es una línea recta en el mapa (ortodrómica).
3. Ortográfica. El punto de vista se encuentra en el infinito; se puede representar justo la
mitad de la superficie terrestre y la escala disminuye hacia la periferia.
4. Escenográfica. El vértice de proyección está situado a una distancia mayor que el diámetro
de la esfera y diametralmente opuesto al punto de tangencia del plano de proyección. La
escala aumenta hacia la periferia.
1.8.2. DESARROLLOS CILÍNDRICOS.
En ellos elpaso de la esfera al plano se hace por medio de un cilindro. Dentro de este tipo de
proyecciones destacan dos muy utilizadas en Topografía.
1. Proyección de Mercator. Se utilizó en 1569 y el gran avance fue que conservaba los
ángulos, transformando los meridianos y paralelos en una red rectangular.
Se trata del desarrollo de un cilindro circunscrito al Ecuador terrestre, sobre el que se van
espaciando los paralelos al aumentar las latitudes. En est aproyección no son representables
los Polos.
2. Proyección U.T.M. (Universal Transversa Mercator). Se basa en la proyección de
Mercator en la que el cilindro es tangente a un meridiano, considerando la Tierra como un
elipsoide de revolución tangente interiormente a un cilindro y cuyo eje está situado en el plano
del Ecuador. El elipsoide de referencia elegido es el de Hayford.
Su universalidad se logra empleando distintos cilindros, correspondientes a varios meridianos
separados entre sí 6º; cada huso de 6º emplea un cilindro distinto. Estas fórmulas son válidas
para todo el mundo, representando la totalidad del globo en 60 husos iguales. El meridiano de
Geenwich separa los husos 30 y 31, estando España comprendida entre los husos 28,29,30 y
31. Las condiciones que se imponen en este proyección son:
• Debe conservar los ángulos, es decir, debe ser conforme.
• El meridiano central ha de ser automecoico, es decir, no puede tener deformación lineal.
• El Ecuador y el meridiano central de cada huso se representarán por líneas rectas.
• El origen de coordenadas en la proyección será el correspondiente a la intersección del
Ecuador y el meridiano central del huso.
Los casquetes polares no se suelen representar en U.T.M., quedando limitado su empleo a
latitudes menores de 80º.
A partir de la intersección del meridiano central del huso y el Ecuador, se construye una
cuadrícula cienkilométrica de forma que un punto en la superficie terrestre queda representado
en el mapa con unas coordenadas universales.
En todos los mapas con coordenadas U.T.M., se tienen tres referencias: Norte magnético,
Norte geográfico y Norte de la cuadrícula U.T.M. El ángulo entre el Norte de la cuadrícula y el
Norte geográfico se llama convergencia de meridianos. El ángulo entre el Norte magnético y el
Norte geográfico se llama declinación, que puede ser:
• Positiva si el Norte magnético está al Este del Norte geográfico.
• Negativa si el Norte magnético está al Oeste del Norte geográfico.
El Norte magnético es variable por lo que es importante indicar la fecha de realización del
mapa y su variación anual.
1.8.3. PROYECCIONES POLIÉDRICAS.
Cuando se emplean diversos planos tangentes según se van representando zonas próximas,
el conjunto forma una supeficie poliédrica y de ahí el nombre de esta proyección.
En esta proyección se realizó el Mapa Topográfico Nacional. Cada hoja del Mapa se
consideraba limitada por dos paralelos separados entre sí 10´ y las proyecciones se
realizaban sobre planos tangentes al elipsoide de Struve.
Este sistema de proyección, no siendo conforme ni equivalente, presenta sin embargo
anamorfosis insignificantes dentro de cada hoja y permite establecer un sistema de
coordenadas planas en cada una de ellas sin que se aprecien errores de distancias ni
angulares. El problema está en unir las hojas concurrentes, ya que no cubren todo el espacio
dejando un ángulo vacío.
1.8.4. PROYECCIONES CÓNICAS.
En este tipo de proyecciones la más importante en Topografía es la proyección Lambert. En
ella el paso de la esfera se efectúa a través de un cono circunscrito a lo largo de un paralelo.
Posteriormente este paralelo se desarrolla sobre un plano que es automecoico.
Esta proyección fur reglamentaria de los mapas militares a gran escala, eligiéndose en
principio el cono tangente a lo largo del paralelo de latitud 40º. La cartografia militar española
ha empleado durante mucho tiempo las coordenadas y la cuadrícula de este sistema. Como
ejes se eligieron el meridiano de Madrid como eje OY y la recta perpendicular en su
intersección con el paralelo 40º como eje OX.
Para evitar coordenadas negativas se traslada el eje X a 600 km. al Oeste y el eje Y a 600 km.
al Sur, es decir que la intersección de los ejes antes descritos tiene como coordenadas X=600
e Y=600.
1.9. REDES GEODÉSICAS: OBSERVACIÓN E IMPLANTACIÓN.
Para la realización del mapa topográfico son fundamentales las operaciones geodésicas, con
las que se logra determinar la posición de una serie de puntos, que deben situarse con la
mayor precisión posible porque van a servir de base para todos los trabajos posteriores. Estos
puntos primordiales forman una red que cubre la zona representada y reciben el nombre de
vértices geodésicos.
En estos triángulos, por los métodos de la Geodesia Clásica, se miden con el mayor rigor sus
ángulos utilizando instrumentos de gran precisión. Además ha de medirse directamente con
extraordinaria minuciosidad un sólo lado especialmente favorable, al que se le denomina base.
Los otros lados no medidos directamente se calculan trigonométricamente.
Naturalmente para que estas operaciones sean posibles, cada vértice debe ser visible desde
varios otros. Ésta es la única condición necesaria para la elección de estos puntos.
Los vértices de los triángulos, se marcan en el terreno construyendo hitos de grandes
dimensiones, pintados de blanco para hacerlos visibles desde mucha distancia.
Con estas triangulaciones se calculan las coordenadas planimétricas (x, y). La coordenada z
se denomina cota trigonométrica y tiene peor precisión que las cotas obtenidas mediante
nivelación geométrica, las cuales siguen un proceso independiente de la red geodésica.
1.10. PROCESO DE DENSIFICACION. ENLACE DE REDES.
En el cálculo de estas redes, para evitar la acumulación de errores, se forman tres mallas
cada vez más densas, que se denominan triangulación de primer, segundo y tercer orden.
La red de primer orden está constituida por grandes triángulos de lados comprendidos entre
los 30 y 70 Kilómetros, pudiendo llegar como excepción a más de 200 Kilómetros.
La triangulación de segundo orden forma una red uniformemente repartida y apoyada en la de
primer orden, con una longitud de los lados de los triángulos variable de 10 a 25 Kilómetros.
Queda distribuida de modo que todos los vértices de primer orden lo sean también de
segundo.
La red de tercer orden tiene lados de 5 a 10 Kilómetros, utilizándose también como vértices de
tercer orden todos los de primero y de segundo.
Forman parte de la red fundamental las cadenas del Archipiélago Balear con la Peninsula, los
grandes cuadriláteros que ligan nuestra costa sur con Argelia y Marruecos y la cadena
denominada del meridiano de Tetuan, que como prolongación de nuestra red, enlaza a través
del Estrecho con la red geodésica Marroquí. El archipiélago Canario posee una red
fundamental propia que liga las islas entre sí y con el Continente Africano.
1.11. LA RED ACTUAL.
Los trabajos geodésicos, cuyo objetivo fue la formación del mapa nacional en escala 1/50.000,
se iniciaron en 1858, finalizándose la observación de la red de primer orden fundamental y
complementaria, incluidos el enlace Balear y el cuadrilátero Hispano-Argelino, en los primeros
años del presente siglo hacia 1915. La cadena del meridiano de Tetuan fue observada en los
años 1928-1929 y la del Archipiélago Canario en 1925-1930.
El punto fundamental o datum de nuestra red, lo constituye el Observatorio Astronómico de
Madrid, cuyo meridiano fue utilizado también como origen de longitudes.
La escala fue proporcionada por la base central de Madrilejos (Toledo), medida en 1858 con la
regla bimetálica de Ibáñez de cuatro metros.
El cálculo de coordenadas geográficas de los vértices se efectuó partiendo del datum Madrid y
tomando como superficie de referencia el elipsoide de Struve. Posteriormente en 1950, se
llevó a cabo una compensación matemática de errores por el método de mínimos cuadrados,
conjuntamente con las restantes redes geodésicas de Europa Occidental y se adoptó como
nuevo datum el vértice Postdam (Alemania), el meridiano de Greenwich como origen de
longitudes, el elipsoide internacional de referencia Hayford, según el acuerdo de la asamblea
de la Asociación Geodésica Internacional celebrada en Madrid en 1924.
1.12. RESEÑAS DE LOS VÉRTICES GEODÉSICOS.
La reseña de un vértice geodésico es una ficha con toda la información de dicho punto, es
decir, nombre del vértice, Término Municipal al que pertenece, croquis de acceso, la
proyección en la que se han calculado sus coordenadas y el valor de dichas coordenadas.
Tan importante como estos datos es conseguir localizar el vértice. Para ello se realiza una
descripción escrita de su situación y de cómo llegar, junto con un croquis. Para que no haya
lugar a dudas se suele acompañar de una foto, en la que se vea además del vértice el entorno
del mismo. De este modo cuando se va a realizar un trabajo en el que se necesite apoyar en
alguno de los vértices conocidos se tiene su situación y sus coordenadas.
La red de nivelación tiene otro tipo de fichas con nombre y la situación de los clavos, nivel de
precisión de la red y su cota referida al Nivel Medio del Mar en Alicante
¿Qué es la Geodesia?

La geodesia es la ciencia que estudia la forma y dimensiones de la Tierra. Esto incluye la determinación del
campo gravitatorio externo de la tierra y la superficie del fondo oceánico. Dentro de esta definición, se incluye
también la orientación y posición de la tierra en el espacio.

Una parte fundamental de la geodesia es la determinación de la posición de puntos sobre la superficie terrestre
mediante coordenadas (latitud, longitud, altura). La materialización de estos puntos sobre el terreno constituyen
las redes geodésicas, conformadas por una serie de puntos (vértices geodésicos o también señales de
nivelación), con coordenadas que configuran la base de la cartografía de un país, por lo que también se dice
que es "la infraestructura de las infraestructuras".

Los fundamentos físicos y matemáticos necesarios para su obtención, sitúan a la geodesia como una ciencia
básica para otras disciplinas, como la topografía, fotogrametría, cartografía, ingeniería civil, navegación,
sistemas de información geográfica, sin olvidar otros tipos de fines como los militares.

Desde el punto de vista del objetivo de estudio, se puede establecer una división de la geodesia en diferentes
especialidades, aunque cualquier trabajo geodésico requiere la intervención de varias de estas subdivisiones:

 Geodesia geométrica: determinación de la forma y dimensiones de la Tierra en su aspecto geométrico,


lo cual incluye fundamentalmente la determinación de coordenadas de puntos en su superficie.

 Geodesia física: estudio del campo gravitatorio de la Tierra y sus variaciones, mareas (oceánicas y
terrestres) y su relación con el concepto de altitud.

 Astronomía geodésica: determinación de coordenadas en la superficie terrestre a partir de mediciones


a los astros.

 Geodesia espacial: determinación de coordenadas a partir de mediciones efectuadas a satélites


artificiales (GNSS, VLBI, SLR, DORIS) y relación con la definición de sistemas de referencia.

 Microgeodesia: medida de deformaciones en estructuras de obra civil o pequeñas extensiones de


terreno mediante técnicas geodésicas de alta precisión.

Geodesia
Modelo digital del terreno del Cantón del Valais.

El término geodesia, del griego γη ("tierra") y δαιζω ("dividir") lo usó


inicialmente Aristóteles (384-322 a. C.), y puede significar tanto "divisiones geográficas de la
tierra" como también el acto de "dividir la tierra", por ejemplo, entre propietarios.
La geodesia es, al mismo tiempo, una de las Ciencias de la Tierra y una Ingeniería. Trata
del levantamiento y de larepresentación de la forma y de la superficie de la Tierra, global y
parcial, con sus formas naturales y artificiales.
La geodesia también se emplea en matemáticas para la medición y el cálculo en superficies
curvas. Se usan métodos semejantes a los utilizados en la superficie curva de la Tierra.

Índice
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 1El objetivo de la geodesia


o 1.1Geodesia teórica
o 1.2Geodesia física
o 1.3Geodesia cartográfica
 2Organizaciones científicas
 3Historia
o 3.1Época Antigua y Edad Media
o 3.2Época moderna
o 3.3La Geodesia en el Siglo XX
o 3.4América del Sur
 4Arqueogeodesia
 5Geodestas importantes
 6Sistemas de referencia geodésica
 7Métodos y actividades geodésicas
 8Instrumentos geodésicos
 9Véase también
 10Bibliografía
 11Enlaces externos

El objetivo de la geodesia[editar]
La geodesia suministra, con sus teorías y los resultados de mediciones y cálculos, la
referencia geométrica para las demás geociencias como también para la geomática,
losSistemas de Información Geográfica, el catastro, la planificación, la ingeniería,
la construcción, el urbanismo, la navegación aérea, marítima y terrestre, entre otros, e incluso
para aplicaciones militares y programas espaciales.
La geodesia superior o geodesia teórica, dividida entre la geodesia física y la geodesia
matemática, trata de determinar y representar la figura de la Tierra en términos globales; la
geodesia inferior, también llamada geodesia práctica o topografía, levanta y representa partes
menores de la Tierra donde la superficie puede considerarse plana. Para este fin podemos
considerar algunas ciencias auxiliares, como es el caso de la cartografía, de la fotogrametría,
del cálculo de compensación y de la Teoría de Errores de observación, cada una con diversas
subáreas.
Además de las disciplinas de la geodesia científica, existe una serie de disciplinas técnicas
que tratan problemas de la organización, administración pública o aplicación de mediciones
geodésicas, p.e. la cartografía sistemática, el catastro inmobiliario, el Saneamiento rural, las
mediciones de ingeniería y el geoprocesamiento.
Geodesia teórica[editar]

La observación y descripción del campo de gravedad y su variación temporal, es considerada


el problema de mayor interés en la Geodesia teórica. La dirección de la fuerza de gravedad en
un punto, producido por la rotación de la Tierra y por la masa terrestre, como también de la
masa del Sol, de la Luna y de los otros planetas, y el mismo como la dirección de la vertical (o
de la plomada) en algún punto. La dirección del campo de gravedad y la dirección vertical no
son idénticas. Cualquier superficie perpendicular a esta dirección es llamada superficie
equipotencial. Una de estas superficies equipotenciales (la Geoide) es aquella superficie que
más se aproxima al nivel medio del mar. El problema de la determinación de la figura terrestre
es resuelto para un determinado momento si es conocido el campo de gravedad dentro de un
sistema espacial de coordenadas. Este campo de gravedad también sufre alteraciones
causadas por la rotación de la Tierra y también por los movimientos de los planetas (mareas).
Conforme el ritmo de las mareas marítimas, también la corteza terrestre, a causa de las
mismas fuerzas, sufre deformaciones elásticas: las mareas terrestres. Para una determinación
del geoide, libre de hipótesis, se necesita en primer lugar de mediciones gravimétricas -
además de mediciones astronómicas, triangulaciones, nivelaciones geométricas
y trigonométricas, además de observaciones por satélite (Geodesia por Satélite).
Geodesia física[editar]
Esquema mostrando: (1) la superficie de los océanos, (2) elelipsoide, (3) la dirección de la plomada, (4)
los continentes, (5) elgeoide.

La mayor parte de las mediciones geodésicas se aplica en la superficie terrestre, donde, para
fines de determinaciones planimétricas, son marcados puntos de una red de triangulación.
Con los métodos exactos de la Geodesia matemática se proyectan estos puntos en una
superficie geométrica, que matemáticamente debe ser bien definida. Para este fin se suele
definir un Elipsoide de rotación o Elipsoide de referencia. Existe una serie de elipsoides que
antes fueron definidos para las necesidades de apenas un país, después para los continentes,
hoy para el Globo entero, en primer lugar definidos en proyectos geodésicos internacionales y
la aplicación de los métodos de la Geodesia de satélites. Además del sistema de referencia
planimétrica (red de triangulación y el elipsoide de rotación), existe un segundo sistema de
referencia: el sistema de superficies equipotenciales y líneas verticales para las mediciones
altimétricas. Según la definición geodésica, la altura de un punto es la longitud de la línea de
las verticales (curva) entre un punto P y el geoide (altura geodésica). También se puede
describir la altura del punto P como la diferencia de potencial entre el geoide y aquella
superficie equipotencial que contiene el punto P. Esta altura es llamada de Cota Geopotencial.
Las cotas geopotenciales tienen la ventaja, comparándolas con alturas métricas u
ortométricas, de poder ser determinadas con alta precisión sin conocimientos de la forma del
geoide (Nivelación). Por esta razón, en los proyectos de nivelación de grandes áreas, como
continentes, se suelen usar cotas geopotenciales, como en el caso de la compensación de la
'Red única de Altimétria de Europa'. En el caso de tener una cantidad suficiente, tanto de
puntos planimétricos, como también altimétricos, se puede determinar el geoide local de
aquella área.
El área de la Geodesia que trata de la definición local o global de la figura terrestre
generalmente es llamada de Geodesia Física, para aquella área, o para sus sub-áreas.
También se usan términos como Geodesia dinámica, Geodesia por satélite, Gravimetría,
Geodesia astronómica, Geodesia clásica, Geodesia tri-dimensional..
Geodesia cartográfica[editar]
Diversas proyecciones.
En la Geodesia matemática se formulan los métodos y las técnicas para la construcción y el
cálculo de las coordenadas de redes de puntos de referencia para el levantamiento de
un país o de una región. Estas redes pueden ser referenciadas para nuevas redes de orden
inferior y para mediciones topográficas y registrales. Para los cálculos planimétricos modernos
se usan tres diferentes sistemas de coordenadas, definidos como 'proyecciones conformes' de
la red geográfica de coordenadas: la proyección estereográfica (para áreas de pequeña
extensión), la proyección 'Lambert' (para países con grandes extensiones en la dirección
oeste-este) y la proyección Mercator transversal o proyección transversal de Gauss(p.e. UTM),
para áreas con mayores extensiones meridionales.
Según la resolución de la IUGG (Roma, 1954) cada país puede definir su propio sistema de
referencia altimétrica. Estos sistemas también son llamados 'sistemas altimétricos de uso'.
Tales sistemas de uso son, p.e., las alturas ortométricas, que son la longitud de la línea
vertical entre un punto P y el punto P', que es la intersección de aquella línea de las verticales
con el geoide. Se determina tal altura como la cota Geopotencial c a través de la relación,
donde es la media de las aceleraciones de gravedad acompañando la línea PP', un valor que
no es conmensurable directamente, y para determinarlo se necesita de más informaciones
sobre la variación de las masas en el interior de la Tierra. Las alturas ortométricas son
exactamente definidas, su valor numérico se determina apenas aproximadamente. Para esa
aproximación se usa también la relación (fórmula) donde la constante es la media de las
aceleraciones de gravedad.
La geodesia se aplica bastante en lo que se refiere a áreas de mapeos y en términos de
mediciones de terrenos (catastro).

Organizaciones científicas[editar]
Aunque en el siglo XIX Europa, apenas contaba con organizaciones científicas o técnicas de
Geodesia, hoy ellas existen en casi todos los países del mundo. Muchos tienen
organizaciones independientes para sub-disciplinas como la Cartografía, laFotogrametría,
la Topografía, la Geodesia minera, el Catastro inmobiliario, etc. A nivel global, en primer lugar,
es laFédération Internationale des Géomètres (FIG), que coordina proyectos continentales o
globales y que organiza el intercambio de informaciones y opiniones. La FIG también es
miembro de la IUGG (International Union of Geodesy and Geophysics) para coordinar
proyectos comunes con la participación de las disciplinas vecinas, como la Geofísica.
Las sub-disciplinas de la Geodesia también cuentan con organizaciones globales. En el caso
de la Fotogrametría, laInternational Society of Photogrammetry and Remote Sensing (ISPRS);
en el área de la Cartografía, la International Cartographic Association (ICA), que coordina
proyectos internacionales de mapeamiento continental o global.

Historia[editar]
Época Antigua y Edad Media[editar]
Esquema sobre cómo calculó Eratóstenes la circunferencia terrestre.

La Geodesia, que tiene el mismo origen de la geometría, fue desarrollada en las altas culturas
del oriente medio, con el objetivo de levantar y dividir las propiedades en parcelas. Las
fórmulas usadas para calcular áreas, generalmente empíricas, fueron usadas por los
agrimensores romanos y se encuentran también en los libros griegos, p.e. de Herón de
Alejandría, que inventó la dioptra, el primer instrumento geodésico de precisión, que también
permitía la nivelación que aumentaba la serie de instrumentos de la Geodesia (groma,
gnómon, mira, trena). Perfeccionó aún el instrumento deCtesibio para medir grandes
distancias. Alejandro Magno aún llevó bematistas para levantar los territorios conquistados.
Después de descubrir la forma esférica de la Tierra, Eratóstenes determinó por primera vez el
diámetro del globo terráqueo. Hiparco, Herón y Ptolomeo determinaban la longitud geográfica
observando eclipses lunares, en el mismo instante, en dos puntos cuya distancia ya era
conocida por mediciones.
Estos métodos fueron transferidos para la Edad Media a través de los libros de los
Agrimensores romanos y por los árabes, que también usaban el astrolabio, el cuadrante y el
'Bastón de Jacobo' para tareas geodésicas. Entre los instrumentos de la Geodesia, desde
el siglo XIII, se encuentra también la brújula. En elsiglo XVI, S. Münster y R. Gemma Frisius,
desarrollaron los métodos de la intersección que permitía el levantamiento de grandes áreas.
El nivel hidrostático de Heron, hace varios siglos olvidado, fue reinventado en el siglo XVII.
Época moderna[editar]
Una nueva era de la Geodesia comenzó en el año 1617, cuando
el holandés W. Snellius inventó la triangulación para el levantamiento de áreas grandes como
regiones o países. La primera aplicación de la triangulación fue el levantamiento
de Württemberg por Wilhelm Schickard. En esta época, la Geodesia fue redefinida como "la
ciencia y tecnología de la medición y de la determinación de la figura terrestre". Jean
Picard realizó la primera medición de arco en el sur de París, cuyos resultados iniciaron una
disputa científica sobre la geometría de la figura terrestre.
El elipsoide de rotación, achatado en los polos, fue definido por Isaac Newton en 1687, con su
hipótesis de gravitación, y de Christiaan Huygens en 1690, con base en la teoríacartesiana del
remolino. La forma de un elipsoide combinó también con algunas observaciones antes
inexplicables, p.e. el atraso de un reloj pendular en Cayena, calibrado en París, observado por
J. Richter en 1672, o el hecho del péndulo del segundo cuya longitud aumenta,
aproximándose a la línea del ecuador.

Mapa del Mundo realizado por Fra Mauro, año 1459.

La Académie des sciences de París mandó realizar mediciones de arcos meridianos en dos
diferentes altitudes del globo, una (1735-45 1751) por Pierre Bouguer y Charles Marie de La
Condamine en el Ecuador, y otra 1736/37 en Finlandia, porPierre Louis Maupertuis, Alexis-
Claude Clairaut y Anders Celsius. Estas mediciones tenían como único objetivo la
confirmación de la tesis de Newton y Huygens, aplicando los últimos conocimientos de la
astronomía y los métodos más modernos de medición y rectificación de la época, como
constantes astronómicas perfeccionadas (precesión, aberración de la luz, refracción
atmosférica), nutación del eje terrestre, medición de la constante de gravitación con péndulos
y la corrección del desvío de la vertical, 1738 observado por la primera vez por P. Bouguer en
las mediciones en el Chimborazo(Ecuador).
Juntamente con la re-medición del arco de París por César-François Cassini de
Thury y Nicolas Louis de Lacaille, la rectificación de las observaciones confirmó el
achatamiento del globo terráqueo y, con eso, el elipsoide de rotación como figura matemática
y primera aproximación en la geometría de la Tierra. En 1743, Clairaut publicó los resultados
en su obra clásica sobre la Geodesia. En los años siguientes, la base teórica de la Geodesia
fue perfeccionada, en primer lugar pord'Alembert ("Determinación del Achatamiento de la
Tierra a través de la precesión y nutación") y también por Laplace, que determinó el
achatamiento únicamente a través de observaciones del movimiento de la Luna, tomando en
cuenta la variación de la densidad de la Tierra.
El desarrollo del Cálculo de Probabilidades (Laplace, 1818) y del Método de los Mínimos
Cuadrados (C. F. Gauss, 1809) perfeccionaron la rectificación de observaciones y mejoraron
los resultados de las triangulaciones. El siglo XIX comenzó con el descubrimiento de Laplace,
que la figura física de la tierra es diferente del elipsoide de rotación, comprobado por la
observación de desvíos de la vertical como diferencias entre latitudes astronómicas y
geodésicas. En 1873 J. B. Listings usó, por primera vez, el nombre geoide para la figura física
de la Tierra. El final del siglo fue marcado por los grandes trabajos de mediciones de arcos
meridianos de los geodesistas junto con los astrónomos, para determinar los parámetros de
aquel elipsoide que tiene la mejor aproximación con la Tierra física. Los elipsoides más
importantes eran los de Friedrich Bessel (1841) y de Clarke (1886 1880).
La Geodesia en el Siglo XX[editar]

La Geodesia moderna comienza con los trabajos de Helmert, que usó el método de
superficies en lugar del método de 'medición de arcos' y extendió el teorema de Claireau para
elipsoides de rotación introduciendo el 'Esferoide Normal'. En 1909 Hayford aplicó este
método para el territorio entero de Estados Unidos.
En el siglo XX se formaron asociaciones para realizar proyectos de dimensión global como
la Association géodésique internationale (1886- 1917, Central en Potzdam) o la L'Union
géodésique et géophysique internationale (1919). La Geodesia recibió nuevos empujes a
través del vínculo con la computación, que facilitó el ajuste de redes continentales de
triangulación, y de los satélites artificiales para la medición de redes globales de triangulación
y para mejorar el conocimiento sobre el geoide. Helmut Wolf describió la base teórica para un
modelo libre de hipótesis de una Geodesia tri-dimensional que, en forma del WGS84, facilitó la
definición de posiciones, midiendo las distancias espaciales entre varios puntos vía a GPS, y
vino el fin de la triangulación, y la fusión entre la Geodesia Superior y la Geodesia Inferior (la
topografía).
En la discusión de las tareas para el porvenir próximo de la Geodesia se encuentra la
determinación del geoide como superficie equipotencial arriba y abajo de la superficie física de
la tierra (W=0) y la Geodesia dinámica para determinar la variación de la figura terrestre con el
tiempo para fines teóricos (datos de observación para la comprobación de la teoría
de Wegener) y prácticos (determinación de terremotos, etc.).
América del Sur[editar]
En América del Sur existen facultades de Geodesia en varios países. En Bolivia está el
Instituto Geográfico Militar (IGM). En Perú, la Geodesia está representada en los cursos de la
Carrera de Ingeniería Geográfica de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.En Brasil,
la Geodesia está representada en los cursos de Ingeniería Cartográfica en las universidades
públicas de Curitiba (UFPR), Presidente Prudente (UNESP), Recife (UFPE), Río de
Janeiro (UERJ y IME / Instituto Militar de Ingeniería), Porto Alegre(UFRGS); en los cursos de
la Ingeniería de Agrimensura en Araraquara (SP), Belo Horizonte (MG), Campo Grande
(MS), Criciúma (SC), Maceió (Al), Piracinunga (SP), Río de
Janeiro (RJ), Salvador (BA), Terezina (PI), Lozana (MG), también en los cursos de maestría
en São Paulo (Usp) y Florianópolis (UFSC - Catastro Multifinalitário). En los otros países del
sub-continente en la Argentina (Buenos Aires, La Plata, Córdoba, Rosario, Santa
Fe, Corrientes, Tucumán, San Juan), en Venezuela (Escuela de Ingeniería Civil de
laUniversidad Central de Venezuela en Caracas), Escuela de Ingeniería Geodésica (Facultad
de Ingeniería de la Universidad del Zulia en Maracaibo), en Perú (Ingeniería Geográfica en la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Lima), Ingeniería Geográfica en la Universidad
Nacional Federico Villareal (Lima), Ingeniería Topográfica y Agrimensura en la Universidad
Nacional del Altiplano Puno)), en Colombia (Ingeniería Catastral y Geodesia en la Universidad
Distrital "Francisco José de Caldas", en Bogotá), en Ecuador en el departamento de Ciencias
de la Tierra y la Construcción con la Carrera de Ingeniería Geográfica y del Medio Ambiente
de la Escuela Politécnica del Ejército (Sangolquí-Prov. de Pichincha), en
el Uruguay (Montevideo). En Chile, el título del profesional en Geodesia es Geomensor o
Geomático, que puede ser obtenido en las universidades Tecnológica Metropolitana de Chile,
de Santiago, Antofagasta y Universidad de Concepción.

Arqueogeodesia[editar]
Arqueogeodesia es un campo de estudio propuesto en 1990 por James Q. Jacobs.
En 1992 Jacobs publicó Archaeogeodesy, A Key to Prehistory, con conceptos básicos y
presentando resultados de sus estudios. De este modo fue definido el estudio:
La arqueogeodesia se define como el área de estudio que incluye la determinación de la posición de
lugares y puntos, la navegación, la astronomía y la medición y representación de la Tierra; en tiempos
prehistóricos o antiguos. Combinando astronomía fundamental, geodesia, matemáticas aplicadas,
datos precisos de posicionamientos y arqueología; la arqueogeodesia presenta una metodología para
investigar los lugares, interrelaciones, propiedades espaciales, distribuciones y arquitectura de lugares y
monumentos prehistóricos. Como nueva área de estudio la arqueogeodesia presenta formas únicas
para la comprensión de la geografía, la Tierra y el universo como los describen las evidencias
arqueológicas

Cartografía
Para otros usos de este término, véase Cartografía (desambiguación).

Mapa de España y Portugalperteneciente a la Enciclopedia La Torre (1885-90).

La cartografía (del griego χάρτις, chartis = mapa y γραφειν, graphein = escrito) es la ciencia
que se encarga de reunir y analizar medidas y datos de regiones de la Tierra, para
representarlas gráficamente a diferentes dimensiones lineales —escala reducida—.1 Por
extensión, también se denomina cartografía a un conjunto de documentos territoriales
referidos a un ámbito concreto de estudio.2

Índice
[ocultar]

 1Fundamentos
 2Historia
o 2.1Cartografía precolombina
 3Cambios tecnológicos
o 3.1Las cartas planas
o 3.2Evolución posterior
 4Tipos de mapas
o 4.1General y cartografía temática
o 4.2Topográfico y topológico
 5Véase también
 6Referencias
 7Bibliografía
 8Enlaces externos

Fundamentos[editar]
Al ser la Tierra esférica, o más bien geoide, lo cual es una derivación del término "esférico", ha
de valerse de un sistema de proyecciones para pasar de la esfera al plano. El problema es
aún mayor, pues en realidad la forma de la Tierra no es exactamente esférica, su forma es
más achatada en los polos, que en la zona ecuatorial. A esta figura se le denomina Elipsoide.
Pero además de representar los contornos de las cosas, las superficies y los ángulos, se
ocupa también de representar la información que aparece sobre el mapa, según se considere
qué es relevante y qué no. Esto, normalmente, depende de lo que se quiera representar en el
mapa y de la escala.
Actualmente estas representaciones cartográficas se pueden realizar con programas de
informática llamados SIG, en los que tiene georreferencia desde un árbol y su ubicación, hasta
una ciudad entera incluyendo sus edificios, calles, plazas, puentes, jurisdicciones, etc.
Amberes fue el centro de la cartografía en la segunda mitad del siglo XVI, cuando la ciudad
era el principal puerto del imperio español con acceso al Mar del Norte; con el declive del
imperio español durante el reinado de Felipe III, y la política ejercida por los gobernadores
españoles sobre los flamencos protestantes, gran parte de éstos dejaron los Países Bajos
españoles (la actual Bélgica) y pasaron a trabajar en los Países Bajos rebeldes: la "República
de las Provincias Unidas de los Países Bajos", determinando así que en la primera mitad
del siglo XVII fuese Ámsterdam la principal fuente de cartografía moderna, luego el impulso
pasaría a Francia, hasta mediados del siglo XVIII, y de allí en adelante a Gran Bretaña, así
como a los Estados Unidos a partir del siglo XIX.
La cartografía en la época de la Web 2.0 se ha extendido hasta Internet, propiciando el
surgimiento del contenido creado por el usuario. Este término implica que existan mapas
creados de la manera tradicional - mediante contribuciones de varios cartógrafos individuales -
o con información aportada por el público. En la actualidad, son numerosos los portales que
permiten visualizar y consultar mapas de casi todo el mundo.

Historia[editar]

El más antiguo artefacto cartográfico en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos: una carta náutica
delmar Mediterráneo. Siglo XIV.

Artículo principal: Historia de la Cartografía


El mapa conocido más antiguo es una cuestión polémica, porque la definición de mapa no es
unívoca y porque para la creación de mapas se utilizaron diversos materiales. Existe una
pintura mural, que puede representar la antigua ciudad de Çatalhöyük, en Anatolia(conocida
previamente como Huyuk o Çatal Hüyük), datada en el VII milenio a. C.3 4 Otros mapas
conocidos del mundo antiguo incluyen a la civilización minoica: la «Casa del almirante» es una
pintura mural datada en 1.600 a. C., en la que se observa una comunidad costera
en perspectiva oblicua. También hay un mapa grabado de la Sagrada Ciudad
de Babilonia de Nippur, del período Kassita, (Siglo XIV a. C. - Siglo XII a. C.)5
En la antigua Grecia y el Imperio romano se crearon mapas, como el de Anaximandro en el
Siglo VI a. C.6 o el mapamundi de Claudio Ptolomeo, que es un mapa del mundo
conocido (Ecúmene) por la sociedad occidental en el Siglo II d. C. En el siglo VIII, los eruditos
árabes tradujeron los trabajos de los geógrafos griegos al árabe.7
En la antigua China, los códigos geográficos datan del siglo V. Los mapas chinos más viejos
son del Estado de Qin y se datan en el siglo IV, durante los Reinos Combatientes. En el libro
del Xin Yi Xiang Fa Yao, publicado en 1092 por el científico chino Su Song, hay una carta
astronómica con una proyección cilíndrica similar a la actual y, al parecer, inventado por
separado, a la Proyección de Mercator.8 9 Aunque este método de cálculo parece haber
existido en China incluso antes de esta publicación y, científicamente, el significado más
grande de las Cartas astronómicas de Su Song, es que representan los mapas impresos
existentes más antiguos conocidos.
Los primeros signos de la cartografía india incluyen pinturas legendarias; mapas de
localizaciones descritas en epopeyas hindúes como el Rāmāyana.10 Las tradiciones
cartográficas hindúes también situaron la localización de la Estrella Polar, así como otras
constelaciones.11
Mapamundi es el término general usado para describir a los mapas europeos del Mundo
Medieval. Aproximadamente 1.100 mapamundis sobrevivieron a la Edad Media. De éstos, 900
son ilustraciones manuscritas y el resto existe como documentos independientes (Woodward,
P. 286).

Tabula Rogeriana, mapa dibujado por Muhammad al-Idrisi para Roger II de Sicilia en 1154.

El geógrafo árabe, Muhammad al-Idrisi, elaboró su mapa, la Tabula Rogeriana, en 1154,


incorporando el África conocida, el océano Índico y el Extremo Oriente conocido, compilando
la información de los comerciantes y exploradores árabes y la heredada de los geógrafos
clásicos para crear el mapa más exacto del mundo en su tiempo y durante los siguientes tres
siglos.12
En la Era de los descubrimientos, del siglo XV al XVII, los cartógrafos europeos copiaron
mapas antiguos (algunos datados muchos siglos atrás) y dibujaron sus propios mapas
basados en las observaciones de los exploradores aunque con nuevas técnicas. La invención
de labrújula, el telescopio y el desarrollo de la agrimensura les dieron mayor exactitud. En
1492, Martin Behaim, un cartógrafo alemán, hizo el primer globo terráqueo, el Erdapfel.13
Johannes Werner estudió y perfeccionó los sistemas de proyección de los mapas,
desarrollando la proyección cordiforme. En 1507,Martin Waldseemüller elaboró un globo del
mundo y un gran mapamundi mural distribuido en 12 hojas (Universalis Cosmographia),
siendo el primer mapa en aplicar el nombre de «América» a las tierras recién descubiertas por
los europeos y el primero en presentar este continente separado del asiático. El cartógrafo
portugués, Diego Ribero, fue el autor del primer planisferio conocido con un Ecuador
terrestre graduado (1527). El cartógrafo italiano Bautista Agnese elaboró por lo menos 71 atlas
manuscritos de las cartas marinas.
Debido a las dificultades inherentes en la cartografía, fabricantes de mapas copiaron con
frecuencia el material de trabajos anteriores sin mencionar al cartógrafo original. Por ejemplo,
uno de los mapas antiguos más famosos de Norteamérica, vulgarmente conocido como el
“Mapa Castor”, publicado en 1715 cerca Herman Moll, es una reproducción exacta de un
trabajo en 1698 de Nicolás De Fer. De Fer había copiado a su vez las imágenes impresas en
libros de Louis Hennepin, publicados en 1697, y François Du Creux, en 1664. Por los años
1700, los fabricantes de mapas comenzaron a darle crédito al autor original imprimiendo la
frase “Según [el cartógrafo original]”.14
Cartografía precolombina[editar]
En México, la cartografía tiene sus propias características. Si bien se inscribe en el contexto
del pensamiento cartográfico de occidente su origen se encuentra en las formas de expresión
empleadas por los antiguos pobladores de Mesoamérica para representar el conocimiento
geográfico.[cita requerida]

Cambios tecnológicos[editar]

Una carta náutica -tipo carta planapre-Mercator (1571)- del cartógrafo portugués Fernão Vaz
Dourado (c. 1520-c.1580). Archivo Nacional de Torre do Tombo, (Lisboa)

Mapa de América del Sur de 1750.

Las cartas planas[editar]


Los cambios en la producción de mapas corren paralelos a los cambios producidos en la
tecnología. El salto más grande se produjo a partir de la Edad Media cuando se inventan
instrumentos como el cuadrante y la brújula, que permiten medir los ángulos respecto a
laestrella polar y el Sol. Estos instrumentos, permitieron determinar la posición de un punto en
el globo, su latitud y su longitud para finalmente plasmarlas en los mapas.
En las llamadas cartas planas, las latitudes observadas y las direcciones magnéticas se
representan directamente en el mapa, con una escala constante, como si la Tierra fuese
plana.
Evolución posterior[editar]
En la cartografía, la tecnología ha cambiado continuamente para resolver las demandas de
nuevas generaciones de fabricantes de mapas y de lectores de mapas. Los primeros mapas
fueron elaborados manualmente con plumas sobre pergaminos; por lo tanto, variaban en
calidad y su distribución fue muy limitada. La introducción de dispositivos magnéticos, tales
como la brújula permitían la creación de mapas de diferentes escalas más exactos y más
fáciles de almacenar y manipular.
Los avances en dispositivos mecánicos tales como la imprenta, el cuadrante y el nonio,
utilizados para que la producción en masa de mapas y la capacidad de hacer reproducciones
más exactas de datos. La tecnología óptica, como el telescopio, el sextante y otros
dispositivos, permitían examinar de forma más exacta la tierra y aumentaron la capacidad de
los creadores de mapas y navegantes para encontrar su latitud midiendo ángulos con
la Estrella Polar de noche o al mediodía.
Avances en tecnología fotoquímica, tales como la litógráficos y la procesos fotomecánicos,
han tenido en cuenta la creación de mapas que tienen detalles finos, no se tuercen en su
forma y resistentes a la humedad y el desgaste. Esto también eliminó la necesidad del
grabado, que en un futuro acortó el tiempo que toma para hacer y para reproducir mapas.
Avances en tecnología electrónica en el Siglo XX condujeron a otra revolución en la
cartografía. Disponiendo de una lista decomputadores y sus avances por ejemplo monitores,
los trazadores, las impresoras, los escáneres (remotos y de documentos) y los trazadores
estéreos analíticos, junto con los programas de computadora para la visualización, el proceso
de imagen, el análisis espacial, y la gerencia de la base de datos, lo hicieron accesible al
pueblo y han ampliado grandemente la fabricación de mapas. La capacidad espaciales
localizar variables sobre mapas existentes y se crearon nuevas aplicaciones para los mapas y
nuevas industrias de exploración y para explotar estos potenciales.
Actualmente la mayoría de los mapas de calidad comercial se hacen usando software que
figuran tres tipos principales: Diseño asistido por ordenador (DAO), Sistema de Información
Geográfica (SIG) y software de ilustración especializada. La información espacial se puede
almacenar en la base de datos, de que puede ser extraída en demanda. Estas herramientas
conducen cada vez a mapas más dinámicos e interactivos pudiendo ser manipulados
digitalmente.

Tipos de mapas[editar]
General y cartografía temática[editar]

Sección pequeña de un mapa deldeporte de orientación.


Mapa topográfico de Isla de Pascua.

De acuerdo a mapas básicos, el campo de la cartografía, se puede dividir o separar en dos


categorías generales: la Cartografía general y la Cartografía temática. La Cartografía general
implica esos mapas que se construyen para una audiencia general y contengan así una
variedad de características. Los mapas generales exhiben muchos referencia y los sistemas
de localización se producen a menudo en series. Por ejemplo, los mapas topográficos de
escala 1:24,000 de la United States Geological Survey (USGS) es un estándar con respecto a
los mapas canadienses de escala de 1:50,000. El gobierno de Reino Unido produce los
clásicos "Ordnance Survey" mapas de 1:63,360 (1 pulgada por milla) del Reino Unido entero
junto con una gama de mapas más grandes y escala muy pequeña correlacionados a gran
detalle.
La Cartografía temática implica los mapas de temas geográficos específicos, orientados hacia
las audiencias específicas. Un par de ejemplos puede ser el mapa del punto demostrar la
producción del maíz en Indiana o un mapa sombreado del área de los condados de Ohio,
dividido en clases numéricas. Mientras que el volumen de datos geográficos han evolucionado
enormemente durante el siglo pasado, la cartografía temática ha llegado a ser cada vez más
útil y necesaria para interpretar datos espaciales, culturales y sociales. Por ejemplo las redes
sociales se mapean georeferencialmente, también se hacen mapas que muestren distancia
entre personas (en número de vínculos o pasos que los separan. La línea del tiempo también
puede considerarse un mapa o carta. A partir de su uso en la navegación se han
perfeccionado técnicas que son recuperadas para guiar la navegación web. En sociología y
comunicación, el oficio del cartógrafo también es citado como estrategia para sostener el
rumbo en un mundo fluido.
El mapa del deporte de orientación combina la cartografía general y temática, diseñada para
una comunidad de usuario muy específica. El elemento temático más prominente está
sombreado, eso indica grados de dificultad del recorrido debido a la vegetación. La vegetación
en sí mismo no es identificada, clasificándose simplemente por la dificultad (“lucha”) que él
presenta.
Topográfico y topológico[editar]

Mapa ilustrado.
El mapa topográfico se trata sobre todo de la descripción topográfica de un lugar, incluyendo
(especialmente en el Siglo XX) el uso de líneas de isolíneas para demostrar la elevación.
El relieve terrestre o relevación se puede demostrar en una variedad de maneras.
El mapa topológico es un tipo muy general de mapa o plano, como es un forrado de una
servilleta. Desatiende a menudo la escala y el detalle en el interés de la claridad de la
información emparentada. El mapa del Metro de Caracas es un ejemplo. Sin embargo el mapa
utilizado preserva poco de realidad. Varía la escala constantemente y precipitadamente, y las
direcciones de los contornos casuales. Los únicos rasgos importantes del mapa son la
ubicación fácil de las estaciones y travesías a lo largo de pistas y si una estación o una
travesía está del norte o sur del Río Guaire. Satisfacen todos los deseos típicos que un
pasajero quiere saber, así que el mapa satisface su propósito.15

Véase también[editar]
 Agencia cartográfica nacional
 Geodesia
 Proyección cartográfica
 Mapamundis antiguos

Referencias[editar]
1. Volver arriba↑ Raisz, 1985, p. 5.
2. Volver arriba↑ Real Academia Española (2014). «catografía». Diccionario de la lengua
española (23.ª edición). Madrid: Espasa. Consultado el 13 de marzo de 2015.
3. Volver arriba↑ [1] "A Tale of two obsessed archeologists, one ancient city, and nagging doubts
about whether science can ever hope to reveal the past" by Robert Kunzig. Discover Magazine,
May 1999.
4. Volver arriba↑ [2] "A bird’s eye view - of a leopard’s spots. The Çatalhöyük ‘map’ and the
development of cartographic representation in prehistory" by Stephanie Meece. Anatolian
Studies, 56:1-16, 2006.
5. Volver arriba↑ The Nippur Expedition
6. Volver arriba↑ History of Cartography
7. Volver arriba↑ Geography
8. Volver arriba↑ Needham, Volumen 3, 227.
9. Volver arriba↑ Needham, Volumen 4, Part 3, 569.
10. Volver arriba↑ Sircar 327
11. Volver arriba↑ Sircar 330
12. Volver arriba↑ S. P. Scott (1904), History of the Moorish Empire, pp. 461-2.
13. Volver arriba↑ Globes and Terrain Models - Geography and Maps: An Illustrated Guide, Library
of Congress.
14. Volver arriba↑ "Map Imitation" in Detecting the Truth: Fakes, Forgeries and Trickery, a virtual
museum exhibition at Library and Archives Canada
15. Volver arriba↑ Devlin, Keith.The Millennium Problems. New York, New York: Basic Books,
2002. Pages 162-163.

Bibliografía[editar]
 Raisz, Erwin (1985). Cartografía general (séptima edición). Barcelona: Omega. ISBN 84-282-
0007-6.

Enlaces externos[editar]
 Wikimedia Commons alberga contenido multimedia sobre Mapas históricos.
 Wikimedia Commons alberga contenido multimedia sobre Cartografía.
 Wikcionario tiene definiciones y otra información sobre cartografía.
 Cartesia Artículos, noticias y recursos del campo de la Geomática y la Cartografía.
Categoría:
 Cartografía

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