UNIVERSIDAD MICHOACANA DE SAN NICOLÁS DE HIDALGO

DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO DE LA FACULTAD DE

DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES

Antropología Jurídica, 3er. Semestre de la Maestría en Humanidades.

Luis, Villoro, “La asociación para el orden”, en “El poder y el valor”, 1ª edición, Fondo
de Cultura Económica, México, 1997, pp. 269-286.
Reporte 4: La paradoja del poder y la ética para el orden.
L. en D. José Mundo Zenón

A lo largo de la historia se ha discutido la idea del bien común, sin encontrar una
respuesta racional que sirva de guía para el progreso de una comunidad, además
de discutirse diversos conceptos valorativos que deben cumplirse en una asociación
política, tales como la seguridad, paz, orden, libertad, igualdad, solidaridad, entre
otros, para efectos de que exista una plataforma sólida para el orden y avance de
un Estado sin opresión social.

Las apuestas y anuncios de la igualdad, la libertad y sobre todo del sueño de

la emancipación colonial de una ideología dominante son los principios revoluciona-
rios que eligen los seres humanos cuando se enfrentan ante un contexto de disgre-
gación que impacta sus intereses particulares, pero, mientras lo anterior no ocurra,
entonces se mantendrá ausente, sorda y ciega la conciencia colectiva, la asociación
política liberal seguirá por el mismo camino, sin más ni menos, en un estado de
confort en el que se siente cómodo y basado en la ideología del enriquecimiento
individual cultural dominante.

Una sociedad está siempre dividida en intereses diferentes en el que muchas

veces chocan entre sí, entonces el modelo que propone Villoro ser refrescante y
posible, ya que, plantear una comunidad mediante la construcción del dialogo y
plasmada en un convenio que permita salvaguardar los intereses particulares en un
todo, además, procurar proteger los bienes básicos fundamentales como: vestido,
alimento, protección, relación sexual y proponer una ética para el orden que obligue
al Estado garantizar y el cumplimiento de éstos valores.
 A pesar de que Villoro señala que el poder tiene como fin asegurar los valores
básicos fundamentales y bienes necesarios de una asociación política basada en la
ética para el orden, sin embargo, ejerce la violencia y dominación fundado en una
ideología política desigual, donde los intereses particulares del grupo dominante se
presentan como bienes benéficos generales para todo el conjunto de la población
mediante la artimaña y que resulta sorprendentemente ser la clase dominante el
más beneficiado.

Finalmente, la paradoja de la ética para el orden da como resultado la pre-

tensión de justificar el poder coactivo en la medida que sea un instrumento para
realizar los valores del Holon, pero tal situación rebasa una forma de ética del orden
superior, ya que, se necesita un poder para cumplir cabalmente los valores básicos
del orden prioritarios, entonces, éste tipo de asociación política no está libre de una
situación de sometimiento, dado que, tiene como fin fundamental la armonía, la paz
y el orden a como dé lugar, ya que es el valor más alto y prioritario (un sentido de
justicia), entonces, por ello implica necesariamente un sistema más o menos rígido
de dominación justificada sin exceso de violencia.