You are on page 1of 10

II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica.

UNFV

LOS OCHO CONCEPTOSi


Murray Bowen
The Bowen Center for the Study of the Family

Triángulos
Un triángulo es un sistema de relación entre tres personas. Se le considera la piedra
angular o la “molécula” de todo sistema emocional mayor, porque el triángulo es el
sistema de relación estable más pequeño. Un sistema emocional de dos personas es
inestable en sí mismo, pues tolera poca tensión sin incorporar a una tercera persona.
Un triángulo puede contener mucha más tensión antes de involucrar a otra persona,
ya que la tensión se puede desplazar entre tres relaciones. Si la tensión se vuelve
demasiado alta para ser contenida dentro de un triángulo, esta se extiende a una serie
de triángulos “interconectados”. Repartir la tensión puede estabilizar un sistema, pero
nada se resuelve.

Las acciones de las personas dentro de un triángulo reflejan, por un lado, sus esfuerzos
por mantener los vínculos emocionales con otras personas que le son importantes y,
por el otro, las reacciones a la intensidad en esos vínculos. También reflejan la manera
en la que las personas toman partido en los conflictos de los demás. Paradójicamente,
un triángulo es más estable que una díada, pero un triángulo crea una posición en la
que una persona queda excluida. Esta es una posición muy difícil de tolerar. La
ansiedad generada por el anticipar estar, o en efecto estar, en la posición de quien
está excluido, es una fuerza de gran potencia en los triángulos.

Los patrones en un triángulo cambian cuando aumenta la tensión. En períodos de


calma, dos de las personas son cómodamente los “internos/cercanos”, y la tercera
persona es un “externo/excluido” incómodo y distante. Los internos excluyen
activamente al externo, y el externo intenta acercarse a uno de ellos. Siempre hay
alguien incómodo buscando el cambio dentro de un triángulo. Los internos consolidan
su vínculo al elegirse entre sí en lugar de elegir al externo, quien se siente menos
deseable. Cuando alguien elige a otra persona en lugar de a uno, surgen sentimientos
particularmente intensos de rechazo.

Al surgir una tensión de una intensidad de suave a moderada entre los internos, el más
incómodo de ellos se acercará al externo. Uno de los internos originales se convierte
ahora en el nuevo externo y el externo original es ahora uno de los internos. El nuevo
externo hará movimientos automáticos y reactivos predecibles para restaurar su
cercanía con uno de los internos. A niveles moderados de tensión, los triángulos
habitualmente tienen un lado en conflicto y dos lados en armonía. El conflicto no es

1
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

propio de la relación en la que existe, sino que refleja el funcionamiento general del
triángulo.

A un alto nivel de tensión, la posición del externo se vuelve la más deseable. Si se


desarrolla un conflicto importante entre los internos, uno de ellos se cambia a la
posición de externo al conseguir que el externo actual se pelee con el otro interno. Si
la maniobra del interno tiene éxito, obtiene la posición más cómoda de observar a los
otros dos pelearse. Cuando la tensión y el conflicto disminuyen, el externo intentará
volver a convertirse en interno.

Los triángulos contribuyen significativamente al desarrollo de problemas clínicos. Por


ejemplo, ser empujado desde una posición interna a una posición externa puede
desencadenar una depresión o incluso una enfermedad física, o dos padres que se
centran intensamente en lo que está mal en un hijo puede provocar una rebelión seria
en el hijo.

Ejemplo
Miguel y Marta fueron muy felices durante sus primeros dos años de matrimonio. A
Miguel le gustaba tomar las decisiones importantes, y Marta se sentía cómoda con la
“fortaleza” de Miguel. Después de algunas dificultades para embarazarse, Marta
concibió durante el tercer año del matrimonio, pero fue un embarazo difícil. Sufrió de
muchas nauseas durante el primer trimestre y tuvo problemas de presión arterial y
aumento de peso conforme avanzaba el embarazo. Con frecuencia le platicaba a
Miguel sobre sus inseguridades acerca de ser madre. Miguel era paciente y la
tranquilizaba, pero también comenzó a criticarla por ser “infantil”.

Análisis: El embarazo trae más presión a Marta y a la relación marital. Miguel


aparentemente apoya a Marta, pero se vuelve reactivo al escuchar de sus ansiedades.
La ve como teniendo un problema.

Después de un largo trabajo de parto, nació una niña a quien llamaron Amy. Marta
estaba exhausta y no estaba preparada para abandonar el hospital cuando su doctor la
dio de alta. Durante los siguientes meses, comenzó a sentirse cada vez más abrumada
y extremadamente ansiosa por el bienestar de la pequeña bebé. Buscó apoyarse en
Miguel, pero él regresaba más tarde que antes de la oficina y Marta sentía que él la
criticaba mucho por sus problemas de adaptación y que no validaba sus
preocupaciones por la bebé. Había mucho menos tiempo para que ellos estuvieran
juntos, y cuando lo había, Miguel se quejaba de sus problemas de trabajo. Marta
comenzó a preocuparse más por asegurarse que Amy, al ir creciendo, no desarrollara
las mismas inseguridades que ella. Para lograr esto, le daba la mayor atención posible y
la premiaba constantemente por sus logros. Era más fácil para Marta enfocarse en
Amy que hablarle a Miguel. Reaccionaba intensamente a sus críticas, reales o

2
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

imaginarias. Miguel y Marta dedicaban cada vez más de su tiempo juntos a hablar
acerca de Amy en lugar de hablar acerca de su relación.

Análisis: Martha es la que está más incómoda con el aumento de la tensión en el


matrimonio. La creciente distancia emocional en el matrimonio es equilibrada al
sobreinvolucrarse Martha con Amy y Miguel con su trabajo. Miguel está en la posición
externa en el triángulo parental, Martha y Amy están en las posiciones internas.

A medida que Amy crecía, demandaba más del tiempo de su madre. Marta sentía que
no le podía dedicar suficiente tiempo y que Amy jamás estaría satisfecha. Miguel
estaba de acuerdo con Marta en que Amy era muy egoísta y le molestaban sus
berrinches cuando no se la complacía. Sin embargo, si Miguel se excedía al criticar a
Amy, Marta la defendía diciéndole a Miguel que estaba exagerando. Empero, cuando
aparecían tensiones entre Marta y Amy, Marta presionaba a Miguel para que pasara
más tiempo con Amy para reafirmarle que la amaban. Él accedía a sus presiones, pero
internamente pensaba que estaban siguiendo una política de aplacamiento que estaba
haciendo que Amy se volviera más exigente. Miguel pensaba que, si Marta tuviera la
madurez de él, Amy sería un problema menor, pero a pesar de eso, generalmente
seguía el ejemplo de Marta con relación a Amy.

Análisis: Cuando aumenta la tensión entre Marta y Amy, Miguel se pone del lado de
Marta estando de acuerdo en que el problema es Amy. El lado conflictivo del triángulo
cambia entonces de estar entre Marta y Amy a estar entre Miguel y Amy. Si el conflicto
se intensifica demasiado entre Miguel y Amy, Marta se pone del lado de Amy, el
conflicto pasa a estar entre el matrimonio, y Amy obtiene la posición más cómoda, la
externa.

Diferenciación del Self


Las familias y otros grupos sociales tienen un gran efecto en la manera de pensar,
sentir y actuar de las personas que las componen, pero los individuos varían en su
sensibilidad a la manera de pensar del grupo, y los grupos varían en la cantidad de
presión que ejercen para lograr la conformidad del resto de las personas. Estas
diferencias entre individuos y grupos reflejan las diferencias en los niveles de
la diferenciación del self. Entre menos desarrollado esté el self de una persona, mayor
será el impacto que los otros tengan en su funcionamiento, y la persona intentará
controlar más, activa o pasivamente, el funcionamiento de los otros. Los fundamentos
básicos de un self son innatos, pero las relaciones familiares del individuo durante su
infancia y adolescencia determinan fundamentalmente cuanto self desarrolla. Una vez
establecido, el nivel del self raramente cambia a menos que la persona haga un
esfuerzo, estructurado y a largo plazo, para cambiarlo.

3
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

Las personas con un self poco diferenciado dependen tanto de la aceptación y


aprobación de los demás que, o ajustan rápidamente lo que piensan, dicen y hacen
para complacer a los demás, o proclaman a manera de dogma cómo deben ser los
otros y los presionan a que se ajusten. Los “matones” dependen de la aprobación y la
aceptación tanto como los “camaleones”, pero los matones incitan a los demás a que
estén de acuerdo con ellos, en lugar de estar ellos de acuerdo con los demás. El estar
en desacuerdo amenaza tanto a un matón como a un camaleón. Un rebelde en
extremo es también una persona con un self poco diferenciado, pero pretende ser más
diferenciada oponiéndose con frecuencia a la posición de los demás.

Una persona con un self bien diferenciado reconoce de manera realista su


dependencia de los demás, pero es capaz de permanecer con suficiente calma y
lucidez frente al conflicto, la crítica y el rechazo, para poder distinguir entre el
pensamiento basado en una cuidadosa evaluación de los hechos, y el pensamiento
nublado por la emoción que surge reactivamente. Los principios adquiridos a
conciencia ayudan a guiar la toma de decisiones sobre cuestiones familiares y sociales
importantes, permitiendo que la persona sea menos susceptible a los sentimientos
pasajeros. Lo que decide y lo que dice, están de acuerdo con lo que hace. Puede actuar
de manera desinteresada, pero elige actuar teniendo el interés del grupo en mente,
haciendo una elección bien pensada, no reaccionando a las presiones de las relaciones.
Al tener confianza en su razonamiento, puede apoyar las ideas de los demás sin ser un
discípulo, o las puede rechazar sin polarizar las diferencias. Se define a sí mismo sin
imponerse y maneja la presión para ceder con decisión.

Toda sociedad humana tiene personas en muchos niveles de diferenciación entre los
extremos de muy baja y alta diferenciación. Consecuentemente, las familias y otros
grupos que conforman una sociedad difieren en la intensidad de su interdependencia
emocional, dependiendo de los niveles de diferenciación de sus miembros. Mientras
más intensa sea esa interdependencia, menor será la capacidad del grupo para
adaptarse a los eventos estresantes, sin sufrir de un aumento significativo de ansiedad
crónica. Todos estamos sujetos a problemas en el trabajo y en nuestra vida personal,
pero la mayor vulnerabilidad de las personas y las familias menos diferenciadas a los
períodos de aumento de ansiedad crónica, contribuyen a que sufran
considerablemente de síntomas físicos, emocionales o sociales.

Ejemplo
El ejemplo del triángulo Miguel-Marta-Amy refleja la manera en que se manifiesta, en
una unidad familiar, una falta de diferenciación del self; en su caso, una unidad con
diferenciación moderada. La siguiente descripción nos muestra cómo este triángulo se
comportaría si Miguel, Marta y Amy fueran personas más diferenciadas:

4
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

Miguel y Marta estaban bastante felices durante los primeros dos años de su
matrimonio. A él le gustaba tomar las decisiones importantes, pero nunca asumía que
siempre tenía la razón. Siempre decía a Marta lo que estaba pensando y prestaba
atención a las ideas que ella manifestaba. Sus conversaciones eran generalmente
inteligentes y los llevaban a tomar decisiones que respetaban los intereses vitales de
ambos. A Marta siempre le había atraído el sentido de responsabilidad y la disposición
a tomar decisiones de Miguel, pero ella también vivía con el principio de que ella era
responsable de pensar las cosas por sí misma, y de decirle a Miguel lo que pensaba. No
asumía que Miguel generalmente tenía la razón.

Análisis: Debido a que en un matrimonio el nivel de estrés a menudo es menor


durante los primeros años, particularmente antes del nacimiento de los hijos y la
adición de otras responsabilidades, un matrimonio moderadamente diferenciado
menos adaptable y un matrimonio bien diferenciado más adaptable, pueden parecer
similares cuando el nivel de tensión es bajo. Es necesario el estrés para desenmascarar
los límites de la capacidad de adaptabilidad de una familia.

Marta concibió durante el tercer año del matrimonio y tuvo un embarazo bastante
calmado. Tenía algunos problemas físicos, pero los enfrentó con serenidad. Estaba un
poco ansiosa de ser una madre adecuada, pero pensaba que podía manejar estos
temores. Cuando le habló a Miguel acerca de sus temores, no esperaba que él se los
resolviera, sino que pensaba con mayor claridad al conversarlos con él. Él la escuchaba,
sin ser complaciente ni conciliador. Reconocía sus propios temores por los cambios
que se avecinaban en sus vidas y se los hacía saber a Marta.

Análisis: El estrés asociado a los cambios reales y esperados del embarazo despierta
ansiedades tanto en Miguel como en Marta, pero su interacción no aumenta la
ansiedad para hacerla crónica. Marta tiene necesidades y expectativas un poco más
elevadas de Miguel, pero acepta la responsabilidad de manejar su ansiedad y tiene
expectativas realistas sobre lo que él puede hacer por ella. Miguel no se vuelve
reactivo a las expectativas de Marta y también reconoce su ansiedad. Cada uno
continúa siendo un recurso para el otro.

Después de un trabajo de parto sin contratiempos, nació una niña a quien llamaron
Amy. Marta resistió el parto bastante bien y estaba preparada para ir a casa cuando su
médico la dio de alta. El cuidado de la niña durante los primeros meses fue físicamente
extenuante para Marta, pero no estaba agobiada por las ansiedades acerca del bebé o
de su capacidad para ser madre. Seguía hablando con Miguel acerca de sus
pensamientos y sentimientos, y aún no sentía que él tenía que hacer algo para hacerla
sentir mejor. Miguel tenía presiones que iban en aumento en el trabajo y ella lo
entendía. Seguía estando ahí emocionalmente disponible para ella, aunque en
ocasiones sólo fuera por teléfono. Se preocupaba por los problemas de su trabajo,

5
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

pero no se quejaba de ellos con Marta. Cuando ella le preguntaba cómo iba todo, él le
respondía con la verdad y agradecía su interés. De vez en cuando, deseaba que Marta
no se pusiera tan ansiosa, pero se daba cuenta que ella podía manejarlo. No sentía la
necesidad de “arreglar” las cosas para ella.

Análisis: Estando segura de sí misma como persona, Marta se puede relacionar con
Amy sin sentirse abrumada por responsabilidades y exigencias, y sin temores
infundados por el bienestar de la niña. Estando seguro de sí mismo, Miguel puede
enfrentar las necesidades reales de su trabajo sin sentirse culpable por descuidar a
Marta. Cada cónyuge reconoce la presión bajo la cual opera el otro y ninguno se queja
de estar desatendido. Cada uno de ellos está tan confiado de la lealtad y compromiso
del otro, que ninguno de ellos necesita estarlo reafirmando. Al estar los padres
cómodamente relacionados entre ellos, a Amy no se le triangula dentro de tensiones
maritales. Ella no tiene un vacío que llenar en la vida de su madre creado por la
distancia entre sus padres.

Tras algunos meses, Miguel y Marta pudieron darse el tiempo para ellos. Marta
descubrió que sus ansiedades acerca de ser madre disminuían y no se preocupaba
tanto por Amy. A medida que Amy crecía, Marta la percibía como una niña segura que
no necesitaba de atención especial. Siempre se mostraba positiva con Amy, sin
halagarla constantemente con el afán de hacerla sentir mejor acerca de sí misma.
Miguel y Marta platicaban sobre sus pensamientos y sentimientos acerca de Amy, pero
no estaban preocupados por ella. Estaban contentos de tenerla y se complacían en
verla crecer.

Amy se convirtió en una niña responsable. Percibía los límites de lo que era posible
esperar de sus padres y los respetaba. Casi nunca exigía ni hacía berrinches. Miguel
criticaba a Amy de vez en cuando y Marta no la defendía cuando lo hacía. Marta
pensaba que Miguel y Amy podían manejar su propia relación. Amy se sentía igual de
cómoda con ambos padres y disfrutaba explorando su entorno.

Análisis: Miguel y Marta pueden ver a Amy como una persona separada y distinta. La
diferenciación que comienza entre Amy y sus padres es evidente desde que Amy es
una niña pequeña. Se han adaptado con bastante éxito a las ansiedades que cada uno
experimentaba asociadas a la llegada de un hijo y al aumento de exigencias en la vida
profesional de Miguel. Sus altos niveles de diferenciación les permiten un contacto
cercano a los tres, con poca triangulación.

Sistema Emocional de la Familia Nuclear


El concepto del sistema emocional de la familia nuclear describe cuatro patrones
básicos de relación que determinan dónde se desarrollan los problemas en una familia.
Las actitudes y creencias de las personas acerca de las relaciones juegan un rol en los

6
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

patrones, pero las fuerzas que los impulsan son parte del sistema emocional. Los
patrones operan en configuraciones familiares intactas, de padre o madre soltera, de
padrastro o madrastra, y otras configuraciones de familia nuclear.

Los problemas o síntomas clínicos suelen desarrollarse durante períodos en que la


tensión familiar es elevada y prolongada. El nivel de tensión depende del estrés al que
se enfrenta una familia, de cómo se adapta una familia al estrés, y de la conexión de
una familia con su familia extendida y redes sociales. La tensión incrementa la
actividad de uno o más de los cuatro patrones de relación. El lugar en que se
desarrollan los síntomas depende de cuales patrones son más activos. Mientras más
elevada la tensión, mayor es la probabilidad de que los síntomas sean severos y que
varias personas presenten síntomas.

Los cuatro patrones de relación básicos son:


Conflicto marital – Se produce cuando al aumentar la tensión familiar los cónyuges se
vuelven más ansiosos, y ambos expresan su ansiedad en la relación marital,
centrándose en lo que está mal en el otro, intentando controlarlo y ambos resistiendo
al control.

Disfunción en un cónyuge – Ocurre cuando un cónyuge presiona al otro para pensar y


actuar de ciertas maneras y el otro cede a la presión. Ambos cónyuges se ajustan para
conservar la armonía, pero uno lo hace en mayor medida. En cierto nivel de ansiedad,
la interacción es cómoda para ambas personas, pero si la tensión familiar se eleva, el
cónyuge subordinado puede ceder tanto autocontrol que su ansiedad se incrementa
significativamente. Si otros factores necesarios están presentes, la ansiedad favorece
el desarrollo de una disfunción psiquiátrica, médica o social.

Deterioro en uno o más hijos – Se produce cuando los cónyuges enfocan sus
ansiedades en uno o más de sus hijos. Se preocupan excesivamente por este hijo y por
lo general tienen una imagen idealizada o negativa de él/ella. Mientras más se
enfoquen los padres en el hijo, más se enfoca el hijo en ellos. Se comporta más
reactivamente que sus hermanos a las actitudes, necesidades y expectativas de los
padres. El proceso socava la diferenciación del niño con respecto a la familia y lo hace
vulnerable a actuar o interiorizar las tensiones familiares. La ansiedad del hijo puede
ser un impedimento para su desempeño en la escuela, para sus relaciones sociales, e
incluso para su salud.

Distancia emocional – Este patrón está comúnmente asociado con los otros. Las
personas se alejan entre sí para reducir la intensidad de la relación, pero se corre el
riesgo de aislarse demasiado.

7
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

Los patrones básicos de relación dan como resultado que las tensiones de la familia
recaigan en algunas partes de ella. Cuanta más ansiedad absorbe una persona o una
relación, menos tendrán que absorber las demás personas. Esto significa que algunos
miembros de la familia mantienen su funcionamiento a expensas de otros. Las
personas no tienen la intención de dañarse entre sí, pero cuando la ansiedad incide
sobre el comportamiento de manera crónica, generalmente alguien sufre por ello.

Ejemplo
Retomando el ejemplo del triángulo parental de Miguel, Marta y Amy para ilustrar el
concepto del sistema emocional de la familia nuclear, las tensiones generadas por las
interacciones de Miguel y Marta conllevan a una distancia emocional entre ellos y a un
foco ansioso sobre Amy. Amy reacciona al sobre involucramiento emocional de sus
padres con ella, haciendo demandas inmaduras hacia ellos, particularmente sobre su
madre.

Análisis: El sobreinvolucramiento emocional de un padre/madre con un hijo programa


al hijo a estar tan enfocado emocionalmente en el padre como lo está el padre en el
hijo, y a reaccionar intensamente a las señales reales o imaginarias de alejamiento del
padre.

Cuando Amy tenía cuatro años, Marta quedó embarazada otra vez. Ella quería otro
hijo, pero pronto comenzó a preocuparse de su capacidad de satisfacer las
necesidades emocionales de dos hijos. ¿Se le haría daño a Amy por sentirse excluida?
A Marta le preocupaba decirle a Amy que pronto tendría un hermanito o hermanita,
queriendo postergar el mayor tiempo posible tener que enfrentarse a su reacción
anticipada. Miguel pensaba que eso era tonto, pero se mostraba de acuerdo con
Marta. En apariencia, él apoyaba el embarazo, también quería otro hijo, pero le
preocupaban las habilidades de Marta para hacerse cargo de dos hijos.

Análisis: Marta externaliza su ansiedad hacia Amy en lugar de hacia su esposo o en


lugar de internalizarla. Miguel evita el conflicto con Marta apoyando el foco sobre
Amy, y evita enfrentar sus propias ansiedades enfocándose en las habilidades de
enfrentamiento de Marta.

Aparte de sus ansiedades moderadamente intensas sobre Amy, el segundo embarazo


de Marta fue más fácil que el primero. Nació sin complicaciones otra niña, Marie. Esta
vez Miguel se tomó más tiempo fuera del trabajo para ayudar en el hogar, sintiendo y
viendo que Marta parecía estar “en el límite”. Comenzó a encargarse de muchos
quehaceres de la casa, incluso era más directivo con Marta. Marta estaba obsesionada
con que Amy se sintiera desplazada por Marie, y cedía aún más a sus exigencias de
atención. Marta y Amy comenzaron a tener conflictos por la disponibilidad de Marta
para ella. Cuando Miguel llegaba a casa por la noche, separaba a Amy de su madre y la

8
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

entretenía. También comenzó a sentirse descuidado y bastante decepcionado por la


falta de habilidades de adaptación de Marta.

Marta había sido algo bebedora antes de casarse con Miguel y después de que nació
Amy, pero lo había dejado por completo durante el embarazo de Marie. Sin embargo,
cuando Marie tenía algunos meses de edad, Marta comenzó a beber nuevamente, en
su mayoría vino, durante las tardes y mucho más que antes. Intentaba disimular de
alguna manera las cantidades que bebía, temiendo la crítica de Miguel. Él lo hacía. La
acusaba de no intentar, de no importarle, y de ser egoísta. Marta encontraba que tel
tenía razón. Se sentía cada vez menos capaz de tomar decisiones y cada vez más
dependiente de Miguel. Pensaba que él merecía algo mejor, pero también se sentía
ofendida por sus críticas y actitudes paternalistas. Comenzó a beber más, incluso
durante el día. Miguel comenzó a llamarla alcohólica.

Análisis: Ha surgido el patrón de enfermedad en un cónyuge con Marta como quien


hace la mayor cantidad de ajustes en su funcionamiento para conservar la armonía en
el matrimonio. Es más fácil para Marta ser el problema, que enfrentarse a Miguel
cuando la diagnostica; además, Marta siente que verdaderamente el problema es ella.
A medida que se despliega el patrón, Miguel sobrefunciona cada vez más y Marta
subfunciona cada vez más. Miguel es tan alérgico al conflicto como lo es Marta,
prefiriendo funcionar por ella en lugar de arriesgar la falta de armonía que
desencadenaría esperar que ella funcione más responsablemente.

Cuando Amy y Marie estaban en edad escolar, Marta llegó a un punto muy bajo. Se
sentía inútil y fuera de control. Sentía que Miguel lo hacía todo, pero que no podía
hablar con él. A su médico le preocupaba su salud física. Finalmente, Marta le confió la
cantidad que bebía. Miguel la había estado presionando para que buscara ayuda, pero
Marta había llegado al punto de resistir casi todas las instrucciones de Miguel. Sin
embargo, el médico la asustó y decidió ir a Alcohólicos Anónimos.

Marta se sintió completamente aceptada por el grupo de AA y enormemente liberada


al contar su historia. Dejó la bebida casi inmediatamente y desarrolló una conexión
muy cercana con su guía, una mujer de mayor edad. Sentía que podía ser ella misma
con la gente de AA, de una manera en que no podía hacerlo con Miguel. Comenzó a
funcionar mucho mejor en la casa, consiguió un empleo de medio tiempo, también iba
frecuentemente a las reuniones de AA. Miguel, quien se había quejado amargamente
sobre su manera de beber, ahora se quejaba de lo que él veía como una obsesión por
sus nuevos amigos de AA. Marta obtenía cierta fortaleza de aquellos nuevos amigos y
se sentía impulsada por ellos para “enfrentar” a Miguel. Lo hizo. Comenzaron a
pelearse con frecuencia. Marta se sentía nuevamente más como ella misma. Miguel se
sentía amargado.

9
II Especialidad en Psicoterapia Familiar Sistémica. UNFV

Análisis: Para Marta, el involucrarse con AA le ayudó a dejar la bebida, pero no


solucionó el problema familiar. No ha cambiado el nivel de tensión familiar ni la
distancia emocional en el matrimonio. A raíz del “préstamo de fortaleza” de su grupo
de AA, Marta está más propensa a pelearse con Miguel, en lugar de complacerle e
interiorizar la ansiedad. Esto significa que el patrón marital ha cambiado un poco, de
disfunción en un cónyuge a conflicto marital, pero el funcionamiento básico de la
familia no ha cambiado. En otras palabras, el nivel de diferenciación del self de Marta
no ha cambiado por involucrarse con AA, pero su funcionamiento ha mejorado.

i
http://thebowencenter.org/espanol/historia-del-centro/
http://thebowencenter.org/espanol/teoria/los-ocho-conceptos/

10

You might also like