Professional Documents
Culture Documents
Índice
[ocultar]
Tramo de un conductor rectilíneo de longitud l, que transporta una intensidad i y colocado en un campo
magnético B
En la figura se muestra un tramo de alambre de longitud que lleva una corriente y
siendo el número de estos electrones por unidad de volumen del alambre. La magnitud
de la fuerza media que obra en uno de estos electrones está dada por;
Las cargas negativas que se mueven hacia la derecha en el conductor equivalen a cargas
positivas moviéndose hacia la izquierda, esto es, en la dirección de la flecha verde. Para una
conductor apunta hacia arriba saliendo del plano de la figura. Esta misma conclusión se
deduce si se consideran los portadores de carga negativos reales para los cuales apunta
hacia la derecha, pero tiene signo negativo. Así pues, midiendo la fuerza magnética
lateral que obra sobre un conductor con corriente y colocado en un campo magnético, no es
posible saber si los portadores de corriente son cargas negativas moviéndose en una
dirección o cargas positivas que se mueven en dirección opuesta.
Obsérvese que (no representado en la figura) apunta hacia la izquierda y que la fuerza
Considérese, por ejemplo, un alambre de la forma mostrada en la figura, que lleva una
corriente i y se encuentra en el seno de un campo magnético uniforme de inducción
magnética saliendo del plano de la figura tal como lo muestran los puntos. La magnitud
de la fuerza sobre cada tramo recto está dada por:
y apunta hacia abajo tal como lo muestran los vectores coloreados de verde. Un segmento de
y cuya dirección es radial hacia O, que es el centro del arco. Solamente la componente hacia
abajo de esa fuerza es efectiva, porque la componente horizontal es anulada por una
componente directamente opuesta proveniente del correspondiente segmento de arco a la
derecha de O. En consecuencia, la fuerza total sobre el semicírculo de alambre alrededor de
O apunta hacia abajo y es:
Entonces, la fuerza total será:
Es interesante notar que esta fuerza es la misma que obraría sobre un alambre recto de
longitud
(a)
Donde:
son las "masas magnéticas" o "cargas magnéticas" que dependerían del tamaño
de los imanes.
(b)
Donde:
, son los vectores directores sobre puntos del interior de cada uno de los dos
imanes.
, son los volúmenes ocupados por los dos imanes.
es la permeabilidad magnética.
Comparando (a) con (b) puede verse que los valores
(c)
Donde:
, son los momentos dipolares magnéticos de los imanes que son vectores
alineados con la línea que va desde el polo sur al polo norte del imán.
Referencia[editar]
Bibliografía[editar]
En esta forma, la fuerza está dada por medio del producto cruz entre dos
vectores. Podemos escribir la magnitud de la fuerza magnética al
desarrollar el producto cruz en términos del ángulo \thetaθtheta (<
180^\circ<180∘is less than, 180, degree) entre el vector de velocidad y
el vector de campo magnético:
F=qvBsinθ
Podemos encontrar la dirección de la fuerza con la regla de la palma
derecha. Esta regla describe la dirección de la fuerza como la dirección
de una "palmada" con la mano derecha. Como en la regla del agarre de la
mano derecha, los dedos apuntan en la dirección del campo magnético y
el pulgar apunta en la dirección en la que se mueve la carga positiva. Si
la carga es negativa (por ejemplo, un electrón), entonces necesitas
invertir la dirección de tu pulgar, pues la fuerza apunta en la dirección
opuesta. Alternativamente, puedes usar tu mano izquierda para una
carga negativa en movimiento.
[Explicación.]
Ejercicio 1a:
Ejercicio 1c:
Puesto que los electrones tienen carga, es posible provocar una deflexión
en su trayectoria ya sea con una fuerza eléctrica o con una fuerza
magnética. Controlar la deflexión nos permite mover el punto de impacto
sobre la pantalla. Los televisores viejos utilizan este principio para
formar imágenes al escanear rápidamente estos puntos.
Ejercicio 2a:
[Solución.]
Ejercicio 2b:
5 ejemplos de electromagnetismo en la
vida cotidiana
14 de junio de 2016
| Maria Jose Santana
0
El electromagnetismo es una categoría de la física que se refiere al
m agnetismo producido por una corriente eléctrica . Aunque parece difícil
de comprender como campo de estudio, este tipo de fenómenos se han
presentado en nuestra vida desde tiempos muy antiguos. Su uso es tan
normal en los objetos y en las actividades que realizamos todos los días,
que pasa desapercibido ante nuestros ojos.
Este fenómeno físico que combina el campo eléctrico y el
magnético, genera un campo que todos conocemos como:
electromagnético, aunque se pueden estudiar por separado para entenderlo.
Su funcionamiento va relacionado con las cargas eléctricas que se
encuentran en reposo y en movimiento durante la interacción con cargas
magnéticas. El uso de este fenómeno lo podemos apreciar en distintas
dimensiones y estados de los objetos: líquidos, sólidos y gaseosos.
Con base en diferentes pruebas y la realización de estudios, podemos tener
estos ejemplos de electromagnetismo aplicados a nuestra vida cotidiana:
La brújula
Guitarra eléctrica
Este instrumento puede no ser utilizado por todos, pero sí es conocido
por la mayoría de las personas. La diferencia entre una guitarra
eléctrica y una acústica es el principio utilizado para generar el sonido
de las cuerdas: la primera necesita electricidad a través de campos
magnéticos para así generar el timbre de las cuerdas.
Motor eléctrico
Su función es transformar energía en movimiento y la realiza gracias
a dos partes fundamentales dentro del motor: el rotor (constituido por
varias bobinas) y el estator (que es un imán que se encuentra en las
bobinas). La energía resulta de la fricción de ambas partes al girar el
rotor, esto a su vez genera una corriente alterna de energía.
Transformador
Es un dispositivo que aumenta o disminuye el flujo de energía. Su
funcionamiento se da también por bobinas en un marco de hierro por
donde circula la energía. Su desempeño es subir o bajar el voltaje de
esa energía para un trabajo.
Estos son sólo algunos ejemplos de la amplia gama de objetos que utilizan
electromagnetismo como principio de funcionamiento y que empleamos en
nuestra vida cotidiana. También podemos encontrar entre ellos: las
bocinas, linternas, alternadores e incluso trenes de levitación, donde
combinan la fuerza magnética para suspenderse en el aire paralelamente al
riel y la energía para transportarse sobre el eje magnético.
El magnetismo es un fenómeno físico por el que los objetos ejercen fuerzas
de atracción o repulsión sobre otros materiales. Hay materiales que presentan propiedades
magnéticas detectables fácilmente, como el níquel, el hierro o el cobalto, que pueden llegar a
convertirse en un imán.
Existe un mineral llamado magnetita que es conocido como elúnico imán natural. De hecho de
este mineral proviene el término de magnetismo.
Sin embargo, todos los materiales son influidos, de mayor o menor forma, por la presencia de
un campo magnético.
Aprende más
sobre el
magnetismo
¿Qué es un imán?
Los imanes son los materiales que presentan las propiedades del magnetismo. Hay que destacar
que estos pueden ser naturales o artificiales. El más común de los imanes naturales e sun mineral
llamado magnetita.
Los imanes pueden ser permanentes o temporales, según el material con el que se fabriquen y
según la intensidad de campo magnético al que le sometan.
Imán artificial temporal (a) y permanente (b)
Una de las propiedades fundamentales de la interacción entre imanes es que los polos iguales se
repelen, mientras que los polos opuestos se atraen.
El efecto de atracción y repulsión tiene que ver con las líneas de campo magnéticas. Las
líneas de campo magnéticas exteriores suelen ir del polo Norte al polo Sur. Por lo tanto, cuando se
acercan dos polos opuestos, estas líneas tienen a saltar de un polo a otro: tienden a pegarse. Y
según sea la distancia entre los dos imanes esta atracción será mayor o menor.
En cambio, cuando se acercan dos polos iguales, estas líneas de campos no tienden a saltar de un
polo a otro, si no que se empiezan a comprimir hacia su propio polo. Cuando esta compresión
es máxima, las líneas de campo tienden a expandirse, lo que provoca que los polos iguales de
dos imanes no puedan acercarse y se repelan.
Efecto de un imán al ser dividido en varias partes
Otra característica de los imanes es que los polos no se pueden separar. Si un imán se rompe
en dos partes no se obtienen un polo norte y un polo sur sino que se obtienen dos imanes, cada
uno de ellos con un polo norte y un polo sur.
Si tenemos un imán supendido por un hilo colocado en su centro de gravedad, observamos que
siempre queda orientado hacia una misma dirección. Uno de los polos se orienta hacia el norte y
otro hacia el sur, pues los polos del imán se alinean según los polos magnéticos de la
Tierra,que actúa como imán natural.
Sentido de los polos magnéticos de la tierra
El campo magnético, flujo magnético e intensidad de campo magnético
El campo magnético es la agitación que produce un imán a la región que lo envuelve.
Es decir, el espacio que envuelve el imán en donde son apreciables sus efectos magnéticos,
aunque sea imperceptible para nuestros sentidos.
Para poder representar un campo magnético utilizamos las llamadas líneas de campo. Estas
líneas son cerradas: parten (por convenio) del polo Norte al polo Sur, por el exterior del imán. Sin
embargo por el interior circulan a la inversa, de polo Sur a polo Norte.
Las líneas de campo no se cruzan, y se van separando, unas de las otras, en alejarse del imán
tangencialmente a la dirección del campo en cada punto.
El recorrido de las líneas de fuerza recibe el nombre de circuito magnético, y el número de líneas
de fuerza existentes en un circuito magnético se le conoce como flujo magnético.
Estas líneas nos dan una idea de:
Dirección que tendrá el campo magnético. Las líneas de campo van desde el
polo sur al polo norte en el interior del imán y desde el polo norte hasta el polo sur
por el exterior.
La intensidad del campo magnético,también conocida como intensidad de
campo magnético, es inversamente proporcional al espacio entre las líneas (a
menos espacio más intensidad).
En un campo magnético uniforme, la densidad de flujo de campo magnético que atraviesa
una superficie plana y perpendicular a las líneas de fuerza valdrá:
En el caso de que la superficie atravesada por el flujo magnético no sea perpendicular a la dirección
de este tendremos que:
Materiales ferromagnéticos
Cuando a un material ferromagnético se le somete a un campo magnético este se
magnetiza: se consigue unimán artificial. Este fenómeno se conoce como imantación. Una vez
se aleja el imán del material magnético y según la intensidad de campo magnético aplicada, este
puede quedarse imantado permanentemente o mantener sus propiedades magnéticas durante un
periodo determinado de tiempo (imán temporal).
El ferromagnetismo está presente en el cobalto, el hierro puro, en el níquel y en todas las
aleaciones de estos tres materiales.
Materiales paramagnéticos
Los materiales paramagnéticos son aquellas sustancias, como el magnesio, el aluminio, el
estaño o el hidrógeno, que al ser colocados dentro de un campo magnético se convierten en
imanes y se orientan en la dirección del campo. En cesar el campo magnético desaparece el
magnetismo inmediatamente y, por tanto, dejan de actuar como imanes.
Materiales diamagnéticos
Los materiales diamagnéticos son aquellas sustancias, como el cobre, el sodio, el hidrógeno, o
el nitrógeno, que en ser colocadas dentro de un campo magnético, se magnetizan en sentido
contrario al campo aplicado.
La permeabilidad relativa
El hecho de que los materiales ferromagnéticos, se queden imantados permanentemente, y que
tengan la propiedad de atraer y de ser atraídos con más intensidad que los paramagnéticos o
diamagnéticos, es debido a supermeabilidad relativa.
Le permeabilidad relativa es el resultado del producto entre la permeabilidad
magnética y la permeabilidad de vacío (constante magnética).
Para los materiales ferromagnéticos esta permeabilidad relativa tiene que ser muy superior a 1,
para los paramagnéticos es aproximadamente 1, y para los diamagnéticos es inferior a 1.
Histéresis magnética
El estudio de la histéresis tiene gran importancia en los materiales magnéticos ya que produce
pérdidas. Las pérdidas por histéresis representan una pérdida de energía que se manifiesta
en forma de calor en los núcleos magnéticos. El calor así generado reduce el rendimiento de
los dispositivos con circuitos magnéticos como transformadores, motores y/o generadores.
La histéresis es el fenómeno de inercia por el cual un material ofrece resistencia a un cambio, ya
que tiene tendencia a conservar sus propiedades. Esta resistencia se manifiesta haciendo que el
proceso de variación sea distinto en un sentido contrario.
Las pérdidas que se originan en los materiales ferromagneticos debido a la histéresis son
proporcionales al área del ciclo. Una medida de su amplitud la da el valor del campo coercitivo,
Hc.
Por lo tanto para construir aparatos que funcionan con corriente alterna se eligen materiales con un
campo coercitivo lo más pequeño posible. En cambio, si se desean fabricar imanes permanentes, se
buscan materiales con un campo coercitivo muy grande.
Campo magnético
Líneas mostrando el campo magnético de un imán de barra, producidas por limaduras de hierro sobre
papel.
Índice
[ocultar]
1Fuerza de Lorentz
2Historia
3Nombre
o 3.1Uso
4Fuentes del campo magnético
o 4.1Campo magnético producido por una carga puntual
o 4.2Campo magnético producido por una distribución de cargas
o 4.3Inexistencia de cargas magnéticas aisladas
o 4.4Energía almacenada en campos magnéticos
5Determinación del campo de inducción magnética B
6Campo magnético en relatividad
o 6.1Campo medido por dos observadores
o 6.2Campo creado por una carga en movimiento
7Unidades y magnitudes típicas
8Véase también
9Referencias
10Enlaces externos
Fuerza de Lorentz[editar]
Artículo principal: Fuerza de Lorentz
Entre las definiciones de campo magnético se encuentra la dada por la fuerza de Lorentz.
Esto sería el efecto generado por una corriente eléctrica o un imán, sobre una región del
espacio en la que una carga eléctrica puntual de valor (q), que se desplaza a
una velocidad , experimenta los efectos de una fuerza que es secante y proporcional
tanto a la velocidad (v) como al campo (B). Así, dicha carga percibirá una fuerza descrita con
la siguiente ecuación.
Historia[editar]
Si bien algunos materiales magnéticos han sido conocidos desde la antigüedad, como por
ejemplo el poder de atracción que la magnetita ejerce sobre el hierro, no fue sino hasta el siglo
XIX cuando la relación entre la electricidad y el magnetismo quedó plasmada, pasando ambos
campos de ser diferenciados a formar el cuerpo de lo que se conoce como
electromagnetismo.
Hans Christian Ørsted, Der Geist in der Natur, 1854
Antes de 1820, el único magnetismo conocido era el del hierro. Esto cambió con un profesor
de ciencias poco conocido de la Universidad de Copenhague, Dinamarca, Hans Christian
Oersted. En 1820 Oersted preparó en su casa una demostración científica a sus amigos y
estudiantes. Planeó demostrar el calentamiento de un hilo por una corriente eléctrica y
también llevar a cabo demostraciones sobre el magnetismo, para lo cual dispuso de una aguja
de brújula montada sobre una peana de madera.
Mientras llevaba a cabo su demostración eléctrica, Oersted notó para su sorpresa que cada
vez que se conectaba la corriente eléctrica, se movía la aguja de la brújula. Se calló y finalizó
las demostraciones, pero en los meses sucesivos trabajó duro intentando explicarse el nuevo
fenómeno.¡Pero no pudo! La aguja no era ni atraída ni repelida por la corriente. En vez de eso
tendía a quedarse en ángulo recto. Hoy sabemos que esto es una prueba fehaciente de la
relación intrínseca entre el campo magnético y el campo eléctrico plasmada en las ecuaciones
de Maxwell.
Como ejemplo para ver la naturaleza un poco distinta del campo magnético basta considerar
el intento de separar el polo de un imán. Aunque rompamos un imán por la mitad éste
"reproduce" sus dos polos. Si ahora volvemos a partir otra vez en dos, nuevamente tendremos
cada trozo con dos polos norte y sur diferenciados. En magnetismo no se han observado
los monopolos magnéticos.
Nombre[editar]
El nombre de campo magnético o intensidad del campo magnético se aplica a dos
magnitudes:
En electrotecnia no es raro que se conserve este punto de vista porque resulta práctico.
Con la llegada de las teorías del electrón de Lorentz y Poincaré, y de la relatividad de Einstein,
quedó claro que estos paralelismos no se corresponden con la realidad física de los
fenómenos, por lo que hoy es frecuente, sobre todo en física, que el nombre de campo
magnético se aplique a B (por ejemplo, en los textos de Alonso-Finn y de Feynman).1 En la
formulación relativista del electromagnetismo, E no se agrupa con H para el tensor de
intensidades, sino con B.
En 1944, F. Rasetti preparó un experimento para dilucidar cuál de los dos campos era el
fundamental, es decir, aquel que actúa sobre una carga en movimiento, y el resultado fue que
el campo magnético real era B y no H.2
Para caracterizar H y B se ha recurrido a varias distinciones. Así, H describe cuan intenso es
el campo magnético en la región que afecta, mientras que B es la cantidad de flujo magnético
por unidad de área que aparece en esa misma región. Otra distinción que se hace en
ocasiones es que H se refiere al campo en función de sus fuentes (las corrientes eléctricas)
y B al campo en función de sus efectos (fuerzas sobre las cargas).
solenoidal lo que lleva a que localmente puede ser derivado de un potencial vector ,
es decir:
A su vez este potencial vector puede ser relacionado con el vector densidad de
corriente mediante la relación:
casos o bien y )
eléctrica de prueba en un punto P de una región del espacio moviéndose a una cierta
velocidad arbitraria v respecto a un cierto observador que no detecte campo eléctrico. Si el
observador detecta una deflexión de la trayectoria de la partícula entonces en esa región
existe un campo magnético. El valor o intensidad de dicho campo magnético puede medirse
mediante el llamado vector de inducción magnética B, a veces llamado simplemente "campo
magnético", que estará relacionado con la fuerza F y la velocidad v medida por dicho
observador en el punto P: Si se varía la dirección de v por P, sin cambiar su magnitud, se
encuentra, en general, que la magnitud de F varía, si bien se conserva perpendicular a v . A
partir de la observación de una pequeña carga eléctrica de prueba puede determinarse la
dirección y módulo de dicho vector del siguiente modo:
La dirección del "campo magnético" se define operacionalmente del siguiente modo. Para
una cierta dirección de v, la fuerza F se anula. Se define esta dirección como la de B.
Una vez encontrada esta dirección el módulo del "campo magnético" puede encontrarse
fácilmente ya que es posible orientar a v de tal manera que la carga de prueba se
desplace perpendicularmente a B. Se encuentra, entonces, que la F es máxima y se
define la magnitud de B determinando el valor de esa fuerza máxima:
En consecuencia: Si una carga de prueba positiva se dispara con una velocidad v por un
punto P y si obra una fuerza lateral Fsobre la carga que se mueve, hay una inducción
magnética B en el punto P siendo B el vector que satisface la relación:
La magnitud de F, de acuerdo a las reglas del producto vectorial, está dada por la expresión:
cero por ser y perpendiculares. Así pues, un campo magnético estático no puede
cambiar la energía cinética de una carga en movimiento.
Si una partícula cargada se mueve a través de una región en la que coexisten un campo
eléctrico y uno magnético la fuerza resultante está dada por:
Nótese que en particular un observador en reposo respecto a una carga eléctrica detectará
sólo campo eléctrico, mientras que los observadores que se mueven respecto a las cargas
detectarán una parte eléctrica y magnética.
Campo creado por una carga en movimiento[editar]
El campo magnético creado por una carga en movimiento puede probarse por la relación
general:
que es válida tanto en mecánica newtoniana como en mecánica relativista. Esto lleva a que
una carga puntual moviéndose a una velocidad v proporciona un campo magnético dado por:
Véase también[editar]
Campo (física)
Referencias[editar]
1. Volver arriba↑ El manual estándar sobre electrodinámica de Jackson sigue ese uso. Edward
Purcell, in Electricity and Magnetism, McGraw-Hill, 1963, writes, Even some modern writers
who treat B as the primary field feel obliged to call it the magnetic induction because the name
magnetic field was historically preempted by H. This seems clumsy and pedantic. If you go into
the laboratory and ask a physicist what causes the pion trajectories in his bubble chamber to
curve, he'll probably answer "magnetic field," not "magnetic induction." You will seldom hear a
geophysicist refer to the earth's magnetic induction, or an astrophysicist talk about the magnetic
induction of the galaxy. We propose to keep on calling B the magnetic field. As for H, although
other names have been invented for it, we shall call it "the field H" or even "the magnetic field
H".
2. Volver arriba↑ W. K. H. Panofski y M. Philips, Classical electricity and magnetism, New York,
Dover, 2005, p. 143.
3. Volver arriba↑ Patrick Fazekas. «Chapter 1.2:Sources of magnetic fields». Lecture notes on
electron correlation and magnetism. pp. 5-7. ISBN 978-981-02-2474-5.
Enlaces externos[editar]
El coche eléctrico
1.
2. Compartir por email
3.
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
Un coche eléctrico es aquel que se impulsa con la fuerza que produce unmotor alimentado por
electricidad.
Un motor eléctrico transforma la energía eléctrica en energía mecánica por medio de interacciones
electromagnéticas. El elemento conductor que tienen en su interior tiende a moverse cuando está
dentro de un campo magnético y recibe corriente eléctrica.
Hay motores eléctricos de todos los tamaños, que impulsan desde un coche de radiocontrol a una
locomotora. Los motores eléctricos ofrecen mu chas ventajas frente a los de combustión,
empezando por un menor tamaño y peso, además de una mayor sencillez técnica.
Su utilización presenta ventajas desde el punto de vista medioambiental, ya que permite disminuir
el nivel de emisiones de CO 2 a la atmósfera.
Endesa dedica una página web exclusivamente al coche eléctrico. Clicka aquí para visitarla.
Aprende más
sobre el coche
eléctrico
Entre 1832 y 1839, el hombre de negocios escocés Robert Anderson inventó el primer
vehículo eléctrico puro. El profesor Sibrandus Stratingh de Groninga, en los Países Bajos, diseñó
y construyó con la ayuda de su asistente Christopher Becker vehículos eléctricos a escala reducida
en 1835.
Camille Jenatzy y
En 1897 se utilizó el primer taxi eléctrico en Nueva York, con más de 100 ejemplares. Justo antes
de 1900, los automóviles eléctricos realizaron registros de velocidad y distancia notables, entre los
que destaca la ruptura de la barrera de los 100 km/h por Camille Jenatzy el 29 de abril de 1899
(105,88 km/h), en 1906 la marca suiza Tribelhornlanza lanzó buses de turismo con autonomía de
60 a 100 km y una velocidad de 25 km/h.
La introducción del arranque eléctrico del Cadillac en 1913 simplificó la tarea de arrancar el motor
de combustión interna, que antes de esta mejora resultaba difícil y a veces peligroso. Esta
innovación, junto con el sistema de producción en cadenas de montaje de forma masiva y
relativamente barata implantado por Ford desde 1908 contribuyó a la caída del vehículo eléctrico.
Además, las mejoras se sucedieron a mayor velocidad en los vehículos de combustión interna que
en los vehículos eléctricos.
A finales de 1920 la industria del automóvil eléctrico desapareció por completo, quedando
relegada a algunas aplicaciones industriales muy concretas, como montacargas (introducidos en
1923 por Yale), toros elevadores de batería eléctrica, o carros de golf eléctricos, con los primeros
modelos de Lektra en 1954.
En 1996 el coche eléctrico volvió a surgir de nuevo, empezando así una goteo continuo de
lanzamientos de nuevos coches eléctricos por las marcas de automóviles más importantes.
A continuación puedes ver una línea del tiempo con algunos de los hitos históricos relacionados con
el coche eléctrico:
Historia del coche eléctrico on Dipity.
Componentes principales de un coche eléctrico
Un coche eléctrico se compone básicamente de los siguientes elementos:
Cargador
Esquema general sobre los componentes de un vehículo eléctrico con motor en corriente continua
(DC)
Batería
Las baterías de Litio-ion almacenan la energía que le cede el cargador en forma de corriente
continua (DC). Esta batería principal es el medio por el que se alimenta todo el coche
eléctrico. En los coches que tienen un motor eléctrico de corriente continua, esta batería iría
directamente conectada al motor. En cambio, en los coches eléctricos que tienen un motor eléctrico
de corriente alterna, la batería va conectada a un inversor.
Conversor
El conversor transforma la alta tensión de corriente continua, que aporta la batería principal, en
baja tensión de corriente continua. Este tipo de corriente es el que se utiliza para alimentar las
baterías auxiliares de 12 V, que son las que alimentan los componentes auxiliares eléctricos del
coche.
Inversores
Los inversores o onduladores son los encargados de transformar la corriente continua que cede la
batería principal, en corriente alterna. De esa manera se puede alimentar el motor en corriente
alterna del coche eléctrico.
Esquema general sobre los componentes de un vehículo eléctrico con motor en corriente alterna (AC)
Motor eléctrico
El motor de un coche eléctrico puede ser un motor de corriente alterna o de corriente
continua. La diferencia entre estos los dos tipos, principalmente, es la forma de alimentación. El
de corriente continua se alimenta directamente desde la batería principal, y el de corriente alterna
se alimenta a través de la energía que emite la batería previamente transformada en corriente
alterna a través del inversor.
Modelos de vehículos híbrido eléctrico
En la actualidad hay otros tipos de coches eléctricos, a parte del eléctrico puro, que son los híbridos
eléctricos. Los vehículos híbridos eléctricos combinan un motor eléctrico con uno de
combustión para su funcionamiento.
Existen dos tipos o modelos de híbridos eléctricos :
Los diferentes modelos de vehículo híbrido
eléctrico
Dependiendo del modelo de coche eléctrico, los tiempos de carga oscilan entre 3 y 10 horas,
dependiendo del tipo de recarga. Algunos modelos disponen de aplicaciones informáticas que
pueden gestionar la recarga a distancia (programarla y aprovechar tarifas eléctricas más
ventajosas, por ejemplo).
Otro sistema para tener las baterías cargadas es la sustitución de las mismas en el momento que se
agotan. Con éste método, sustituimos en un centro especializado las baterías gastadas por unas a
tope de carga, operación que tarda menos que una recarga.
Recarga convencional
La recarga eléctrica convencional aplica niveles de potencia que implican una carga con una
duración de unas 8 horas aproximadamente.
La carga convencional emplea la intensidad y voltaje eléctricos del mismo nivel que la propia
vivienda (16 A y 230 V). Esto implica que la potencia eléctrica que puede entregar el punto para
este tipo de cargas es de aproximadamente 3,7 kW.
Con este nivel de potencia, el proceso de carga de la batería tarda unas 8 horas. Esta solución es
óptima, fundamentalmente, para recargar el vehículo eléctrico durante la noche en un garaje.
Recargar el coche eléctrico durante el período nocturno es más eficaz energéticamente, ya que es
cuando menos demanda energética existe.
Recarga semi-rápida
La recarga semi-rápida aplica niveles de potencia que implican una carga con una duración de
unas 4 horas aproximadamente.
La carga semi-rápida emplea 32 A de intensidad y 230 V de voltaje eléctrico. Esto implica que la
potencia eléctrica que puede entregar el punto para este tipo de cargas es de aproximadamente
7,3 kW.
Esta solución es óptima, como en el caso de la recarga convencional, para recargar el vehículo
eléctrico durante la noche en un garaje.
Recarga rápida
La carga rápida emplea una mayor intensidad eléctrica y, además, entrega la energía en corriente
continua, obteniéndose una potencia de salida del orden de 50kW. Así, utilizando la recarga
rápida, en 15 minutos se puede cargar el 65% de la batería.
Esta solución es la que, desde el punto de vista del cliente, se asemeja a sus hábitos actuales de
repostaje con un vehículo de combustión. Aún así, la recarga rápida debe ser concebida como
extensión de autonomía o cargas de conveniencia.
Las exigencias a nivel eléctrico son mayores que en la recarga convencional. Por poner una
referencia, la potencia requerida para este tipo de instalaciones es comparable a la de un edificio
de 15 viviendas. Así, la recarga rápida puede implicar la adecuación de la red eléctrica
existente.
Ventajas del motor eléctrico en automóviles
Un motor eléctrico no quema combustibles durante su uso, por lo que no emite
gases a la atmósfera.
Un motor eléctrico producido en serie es más compacto, más barato y mucho más
simple que un motor de combustión interna. No necesita circuito de refrigeración,
ni aceite, ni demasiado mantenimiento.
Prácticamente no hace ruido al funcionar y sus vibraciones son imperceptibles.
Funciona a pleno rendimiento sin necesidad de variar su temperatura. Al no tener
elementos oscilantes, no necesita volantes de inercia ni sujeciones espaciales que
lo aíslen del resto del coche. Al generar poco calor y no sufrir vibraciones su
duración puede ser muy elevada.
Un motor eléctrico no necesita cambio de marchas, exceptuando un mecanismo
para distinguir avance o retroceso, que bien puede ser la inversión de polaridad del
propio motor.
Teóricamente un motor eléctrico puede desarrollar un par máximo desde 0 rpm,
por lo que hace posible arrancar desde cero con una velocidad máxima.
Una vez que se elimina la caja de cambios y la refrigeración, se abre
la posibilidad de descentralizar la generación de movimiento, situando un
pequeño motor en cada rueda en lugar de uno “central” acoplado a una
transmisión. Lo que puede suponer una nueva distribución del espacio del coche.
En cuanto a la eficiencia del motor eléctrico, ésta se sitúa alrededor del 90%.
Por limitaciones termodinámicas un motor diesel se situaría en eficiencias de hasta
un 40%, siendo éste superior a la eficiencia de un motor de gasolina.
Resulta sencillo recuperar la energía de las frenadas (o parte de ella) para recargar
las baterías, porque un motor eléctrico puede ser también un generador eléctrico.
Otra gran ventaja del coche eléctrico es su proceso reversible. Esto quiere decir
que de igual manera que carga su batería a través de la red eléctrica, el coche
puede aportar también energía a la red eléctrica, de manera reversible. Este
hecho se conoce como Vehicle 2 Grid .
Desventajas del motor eléctrico en automóviles
La principal desventaja y la más importante es la autonomía que tiene el coche
eléctrico sin conectarlo a la red. El hecho de que a los 100 o 120 kilómetros de
viaje se tenga que recargar las baterías limita mucho a los usuarios. En cambio,
con los motores de combustión el tiempo entre repostaje y repostaje es mucho
más elevado. Aún así las marcas de coches trabajan para aumentar la autonomía
de sus modelos y cada vez nos encontramos modelos con más autonomía.
Otro inconveniente relacionado con la autonomía del vehículo es el tiempo de
repostaje, ya que se requieren de horas para realizar una carga completa.
Además, las baterías eléctricas tienen fecha de caducidad, ya que se degeneran
con el uso y empiezan a tener menor capacidad de carga.
La necesidad de carga de los coches eléctricos hace que exista más demanda de
electricidad proveniente de microgeneradores o centrales eléctricas. A más
demanda, más generación y más consumo de los recursos naturales.
¿Conoces los paneles solares? ¿Sabes qué tipo de energía generan? Se trata de
la Energía solar fotovoltaica, un tipo de energía renovable utilizada para generar
electricidad. Funciona transformando de forma directa la radiación solar en
electricidad gracias a unos Paneles fotovoltaicos, formados de Celdas fotovoltaicas.
CELDAS FOTOVOLTAICAS
Las celdas fotovoltaicas son dispositivos formados por metales sensibles a la luz
que desprenden electrones cuando los rayos de luz inciden sobre ellos, generando
energía eléctrica. Están formados por celdas hechas a base de silicio puro con
adición de impurezas de ciertos elementos químicos, siendo capaces de generar
cada una de 2 a 4 Amperios, a un voltaje de 0.46 a 0.48 Voltios. Estas celdas se
colocan en serie sobre paneles o módulos solares para conseguir un voltaje
adecuado a las aplicaciones eléctricas; los paneles captan la energía solar
transformándola directamente en eléctrica en forma de corriente continua, que se
almacena en acumuladores, para que pueda ser utilizada fuera de las horas de luz.
Los módulos fotovoltaicos admiten tanto radiación directa como difusa, pudiendo
generar energía eléctrica incluso en días nublados.
Una de las ventajas de esta tecnología es porque es modular, lo que permite fabricar
desde pequeños paneles, útiles para los techos de las casas o hasta grandes
plantas fotovoltaicas que pueden generar gran cantidad de energía. Pero también
es una tecnología limpia ya que es renovable e inagotable y no contamina, no emite
CO2 y los gastos de mantenimiento son mínimos.
Los elementos principales de un panel solar son: Generador Solar, un conjunto de
paneles fotovoltaicos que captan energía luminosa y la transforman en corriente
continua a baja tensión; Acumulador: Almacena la energía producida por el
generador y transforma a través de un inversor la corriente continua en corriente
alterna; Regulador de carga, su función es evitar sobrecargas o descargas
excesivas al acumulador, puesto que los daños podrían ser irreversibles; Inversor
(opcional), se encarga de transformar la corriente continua producida por el campo
fotovoltaico en corriente alterna, la cual alimentará directamente a los usuarios.
APLICACIONES
Tradicionalmente este tipo de energía se utilizaba para el suministro de energía
eléctrica en lugares donde no era rentable la instalación de líneas eléctricas. Con el
tiempo su uso se ha ido diversificando hasta el punto que actualmente resultan de
gran interés las instalaciones solares en conexión con la red eléctrica.
La energía fotovoltaica tiene muchísimas aplicaciones, podemos disponer de
electricidad en lugares alejados de la red de distribución eléctrica. De esta manera,
podemos suministrar electricidad a casas de campo, refugios de montaña, bombeos
de agua, instalaciones ganaderas, sistemas de iluminación o balizamiento y
sistemas de comunicaciones.
España es uno de los primeros países con más potencia fotovoltaica del mundo,
con una potencia acumulada instalada de 3,523 Megawatts (MW). Tan solo en 2008
la potencia instalada en España fue de unos 2,500 MW. Alemania es en la
actualidad el segundo fabricante mundial de paneles solares fotovoltaicos tras
Japón, con cerca de 5 millones de metros cuadrados de paneles solares, aunque
sólo representan el 0.03% de su producción energética total. La venta de paneles
fotovoltaicos ha crecido en el mundo al ritmo anual del 20% en la década de los
noventa. En la UE el crecimiento medio anual es del 30%.
En México el uso de energía solar fotovoltaica es aún incipiente, los costos y la falta
de programas de gobierno con subsidios para la producción de energía fotovoltaica,
hacen que estas inversiones aún presenten tiempos prolongados de recuperación.
Para sistemas interconectados, el acceso a la red eléctrica en México requiere una
serie de permisos y contratos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE). La
CFE dará punto de conexión a la red eléctrica, pero en la práctica no existen aún
gran número de sistemas interconectados.
La demanda de este tipo de instalaciones ha sido tal que en los últimos años se han
saturado las líneas eléctricas de muchas zonas rurales, a la vez que se ha
aumentado el precio de parcelas rústicas y se han disparado las solicitudes de punto
de conexión.
http://www.mexicosolar.com/efotovoltaica.html
VIDEO:
http://www.sostenibilidad.com/energia-solar-fotovoltaica/
{jcomments on}