You are on page 1of 28

ACTA GEOLOGICA HISPANICA, v. 30 (1995), no"-3, p. 21-48 (Pub.

1996)

Explotación racional de las aguas subterráneas

EMILIO CUSTODIO, DR. 1.1.


Dep. Ing. TerrenoICentro Intem. Hidrol. Subter. Universitat Politecnica de Catalunya. Barcelona.

RESUMEN ABSTRACT

La explotación racional de las aguas subterráneas tiene como ob- The rational exploitation of groundwater points to obtain from the
jetivo obtener de los acuíferos las cantidades de agua necesarias, con lo aquifers the quantity of water which is needed, with the due quality,
adecuada calidad, adaptadas a las circunstancias de espacio y tiempo, y adapted to the spatial and time circumstances, and respecting the envi-
respetando los condicionantes medioambientales. No se trata de un ob- ronmental restrictions. These are not isolated goals but integrated with
jetivo aislado sino integrado en la utilización del conjunto de recursos the full set of water resources, by taking advantage of the favourable
de agua, aprovechando las circunstancias favorables de cada uno y mi- aspects of each one and at the same time minimizing the drawbacks.
nimizando en lo posible los inconvenientes. Esta explotación racional This rational exploitation is based on dominantly technical considera-
tiene una base eminentemente técnica pero también influyen decisiva- tions but other economic, social, cultural and political considerations
mente consideraciones económicas, sociales, culturales y políticas, are also of decisive influence, moreover those related to preservation of
además de las medioambientales. La explotación racional requiere co- the environment. The rational exploitation needs a good knowledge of
nocer el funcionamiento de los sistemas acuíferos y los cambios cuan- the behaviour of the aquifer systems as well as of the quantity and qua-
titativos y cualitativos resultantes de las diferentes posibilidades de ex- lity changes resulting from the different exploitation alternatives, both
plotación, tanto a nivel general como del sistema particular que se con- at general leve1 and applied to the case under consideration. This re-
sidere. Esto necesita una buena base de información y medios de quires good information support and monitonng means, which have to
observación adecuados y adaptados a la situación real, que va cam- be adapted and suited to the real situation. This real situation is a con-
biando a lo largo del tiempo. La utilización racional se apoya, además tinuously changing one. The rational situation, besides the conventio-
de en las medidas técnicas convencionales o especiales de cada caso, nal and specific techniques needed to deal with a given case, relies on
en técnicas de gestión y en su desarrollo dentro de un marco de plani- management techniques and how they are implemented in the frarne-
ficación, tanto de los aspectos cuantitativos como de la calidad. En zo- work of a water plan, taking into account both water quantity and qua-
nas de recursos de agua escasos tienden a dominar los aspectos de can- lity aspects. In areas with scarce water resources, water quantity as-
tidad, pero los de calidad son igualmente importantes a menos de en- pects tend to be the main concern of managers, but water quality as-
trar en utilizaciones que acaban siendo no racionales. La falta de pects are equally important if irrational groundwater use is to be
racionalidad en la explotación de las aguas subterráneas en general es prevented in the near future. Lack of rationatity in aquifer water use is
fruto de desconocimiento, mala gestión, insolidaridad, falta de aplica- generally the result of poor knowledge, incorrect management, lack of
ción del principio de subsidiaridad y preferencia arrogante de alterna- solidarity, the subsidiarity principie being not applied and arrogant pre-
tivas preestablecidas. ference of pre--established alternatives.

Palabras Clave: Aguas subterráneas, utilización racional, acuíferos, Palabras Clave: Groundwater, rational use, aquifer, management,
gestión, planificación, sobreexplotación, salinización, vulnerabilidad. planning, over exploitacion, salinisation, vulnerability
cunstancias naturales o modificados por obras hidráuli-
cas, para asignar objetivos de puesta a disposición de
Las aguas subterráneas no son un aspecto del recurso agua en cantidad y calidad, en su lugar y tiempo, respe-
agua separado, sino que está íntimamente interrelaciona- tando restricciones técnicas, económicas y legales, y
do con los otros a través del ciclo hidrológico. No obs- también políticas y culturales, y salvaguardando el me-
tante posee características que hacen que esas aguas sub- dio ambiente. Es lo que se denomina "uso conjunto",
terráneas sean especialmente atractivas, asequibles, eva- que está muy relacionado con el "utilización racional" y
luables y merec~edorasde conservación, protección y la "gestión" de los recursos de agua, y con la adecuación
restauración. Por eso tienen y continuarán teniendo un de la demanda de agua.
importante papel en la satisfacción de las necesidades de
agua de la población humana y de sus actividades eco- Así, la explotación racional de las aguas subterráneas
nómicas, estéticas y recreativas. Además estan muy liga- es aquella explotación que trata de obtener los recursos
das a las etapas iniciales de desarrollo económico y so- de agua que se necesitan para satisfacer una determinada
cial de muchas regiones. Por otro lado su descarga man- demanda, que es variable en el espacio y en el tiempo, de
tiene los caudales de base de rios y humedales de interés la forma más económica y garantizada posible, tanto en
medioambiental. calidad como en calidad, de forma coordinada y conjun-
ta con los otros recursos de agua disponibles o desarro-
La utilización de las aguas subterráneas como fuente llables, y de forma que los efectos negativos y costes di-
de suministro, tanto para unos urbanos, industriales y ru- rectos, indirectos, sociales y ambientales se compensen
rales, como para fines agncolas de regadio, tiene numero- sobradamente con los beneficios particulares y generales
sos aspectos favorables, como se expondrá más adelante, derivados de la explotación, en el contexto inmediato, de
tanto técnicos, corno económicos, como de oportunidad. la generación actual y de las generaciones venideras.
No obstante, son también numerosas las circunstancias
desfavorables que se derivan de dicha explotación, aún El agua es en muchas áreas un bien económico esca-
cuando en buena parte no se trata efectos negativos pro- so -- en el sentido de limitado -- y por lo tanto objeto de
piamente dichos sino que son consecuencias conocidas y competencia, gestión y planificación, con sujeción a con-
previsibles asociadas a la naturaleza de los acuíferos y de siderando~económicos, respeto a principios sociales de
la propia exp1otació.n.Lo que con frecuencia se consideran solidaridad y humanitarismo, salvaguarda del patrimonio
inconvenientes o aspectos desfavorables en buena manera medioambiental y consecución de fines políticos lícitos.
son el resultado de expectativas, previsiones o evaluacio- El uso del término escasez para justificar actuaciones no
nes incorrectas y sesgadas denvadas del desconocimiento serían viables que sin el miedo que se puede infundir en
del comportamiento de las aguas subterráneas o de inde- una población mal informada, es una actuación inadmi-
bidas extrapolaciones de lo que se observa en los sistemas sible (Llamas, 1994b), y por supuesto fuera de lo que se
de aguas superficiales (Custodio, 1995b). puede considerar una utilización racional.

El amplio uso de las aguas subterráneas contrasta con La utilización racional de las aguas subterráneas tra-
la frecuente propensión de los organismos públicos, en es- ta de obtener las mayores ventajas minimizando los in-
pecial los más dotadlos de recursos económicos, hacia las convenientes, mediante la adecuada gestión por personas
grandes obras hidrhulicas para poner a disposición las suficientemente preparadas utilizando los técnicos y he-
aguas superficiales. Aunque en ello existen claros aspec- rramientas idóneas, dentro de un suficiente marco eco-
tos positivos sobre todo para grandes áreas urbanas o in- nómico, social, político y moral, con sujeción a una pla-
dustriales, o para extensos desarrollos agncolas, no siem- nificación bien realizada, flexible y socialmente acepta-
pre son económicamiente ni a pnon ni a posteriori la solu- da y participada, con unos objetivos viables de
ción más idónea. También hay que reconocer que el uso protección del recurso agua y de la restauración de los
incontrolado y abusivo de las aguas subterráneas lleva a si- elementos del sistema, incluidos los acuíferos. Se nece-
tuaciones incómodas y a veces insostenibles (Volker y sita además un contexto de ordenación territorial que dé
Henry, 1988),a las que las denomina recientemente "de so- contenido real a los objetivos de la gestión y provea los
breexplotación", termino que será discutido más adelante. medios para que sea posible. Así la "utilización racio-
nal" va más allá de lo puramente técnico. Lo técnico da
Las mejores oporLunidades nacen de la consideración las pautas pero la racionalidad es el resultado de la con-
del conjunto de recursos de agua (superficiales, subterrá- sideración del conjunto de condicionantes, económicos,
neas, residuales tratadas, desalinizadas, ...), en sus cir- sociales y morales.
l
Todo lo anteriormente expuesto se centra en la consi- Desarrollo sostenible es aquel desarrollo que satisfa-
deración de los acuíferos como fuentes de agua de sumi- ce las necesidades presentes sin comprometer la capaci-
nistro, sin considerar otras funciones importantes. Tal es dad de que las generaciones futuras puedan satisfacer las
el caso de los aspectos medioambientales, principalmen- suyas (WCED, 1987), acompasando el desarrollo econó-
te en relación con los humedales y manifestaciones de mico con la preservación del medio ambiente (Haimes,
las aguas subterráneas. También es posible estudiar y 1992). Falta una definición precisa del término, lo cual
evaluar las aguas subterráneas bajo otros puntos de vista, es común cuando se trata de encerrar una elevada com-
como por su implicación en procesos geomorfológicos, plejidad bajo una simple denominación.
de meteorización, de mineralización, geotérmicos, sis-
mológicos, vulcanológicos, etc., que aquí no se conside- Con respecto al agua, como substancia necesaria a la
rarán, pero que son también relevantes, y modulan lo que vida sin otras alternativas, y como elemento esencial de
es utilización racional. buena parte de las actividades humanas, el uso sostenible
apunta a objetivos sociales y morales (Pérez Adan,
1992), y también técnicos y económicos. El desarrollo
2.- CAUDAL SEGURO, DESARROLLO SOSTENI- sostenible del recurso agua implica asegurar ahora y en
BLE Y UTILIZACI~NRACIONAL DE LAS AGUAS el futuro la disponibilidad en cantidad y calidad, y en el
SUBTERRÁNEAS momento y lugar apropiados, de los recursos de agua
existentes mediante la adecuada operación, manejo y re-
El concepto de caudal seguro de explotación del acuí- posición de las obras y captaciones. En su aplicación a
fero se desarrolló en el primer cuarto del presente siglo los acuíferos se trata de sostener una fuente segura de su-
en las zonas semiáridas de Nortearnérica para tratar de ministro normal y de emergencia, sobre todo para eco-
cuantificar la cantidad de agua extraible. Fue inicialmen- nomías débiles.
te usada por Meinzer (1920) y su desarrollo se recoge en
el manual de gestión de acuíferos de la ASCE (1972) y Este uso sostenible va ligado a la utilización racional
en Walton (1970). de los recursos de agua subterránea, aunque uno no im-
Se puede definir como caudal seguro (safe yield) de plique necesariamente el otro. La "racionalidad es tam-
explotación de un acuífero, aquel que se puede extraer bién algo que es difícil de definir con precisión ya que la
permanentemente sin producir resultados indeseables. "razón " que guia las actuaciones tiene muchos aspectos,
Este concepto se perfecciona con el de caudal perenne condicionantes y posibles sesgos, y por supuesto no solo
(perennial yield), que según Young (1970) y Todd (1976) es de naturaleza técnica. La racionalidad se puede acotar
es el caudal de agua que puede ser extraído perennemen- en cierto modo por oposición a explotación incontrolada,
te bajo condiciones específicas de operación sin producir aunque en actuaciones reguladas por la ley de la oferta y
un resultado que lleve a una situación adversa. Variando demanda acaba apareciendo una cierta racionalidad si las
esas condiciones es posible llegar a otro valor del caudal interferencias administrativas, políticas y culturales no la
perenne. Por lo tanto no se trata de un valor único. Entre desvia en exceso.
otras cosas es función de la distribución y profundidad
de los pozos, de las limitaciones legales y administrati- El uso racional del agua subterránea tiene una base
vas existentes, y del costo de obtención del agua. Tam- muy técnica y utiliza herramientas que se van sofistican-
bién es función de las limitaciones por interferencias, do a medida que la explotación se acerca a los recursos
afecciones arios y manantiales, salinización y otros efec- desarrollables. La herramienta base es la identificación y
tos de la explotación que se comentarán más adelante. La cuantificación detallada de los elementos del balance de
subjetividad de lo que es efecto indeseable - además va- agua (fig. 1).
ria según el punto de vista del propio usuario, de otros
usuarios, de la Administración del agua, del público y de Esta explotación racional no es un problema de solu-
los medioambientalistas (Custodio, 1993a) - deja indefi- ción única. Son múltiples las posibilidades, y no solo hay
nidos los conceptos de caudal seguro y de canal perenne, que elegir aquellas más adecuadas a las circunstancias de
y explica su progresiva caida en desuso. un cierto tiempo, según los conocimientos e información
de que se disponga en cada momento, sino que se re-
Recientemente ha hecho aparación el concepto de uso quiere adecuaciones progresivas a medida que evolucio-
sostenible - o sustentable - que se orienta a que el recurso nen las circunstancias, demandas, prioridades y com-
no solo sea para el disfrute y satisfacción de las necesida- prensión de la situación. Así la calificación de racional es
des de la generación actual, sino también de las futuras. más adecuada que la de óptima, aunque la racionalidad
tienda a optimizzr. La optimización no es sólo técnica e de la demanda de agua deberia ser parte de la utilización
hidrológica sino también económica, social, medioam- racional, gestión y planificación del agua subterránea.
biental y política. La dificultad para cuantificar estos ú1- Normalmente se propende a motivar y forzar el ahorro
timos aspectos hace que haya que conformarse con la ra- de agua. Esto, que normalmente es una política de ges-
cionalidad, es decir, mediante actuaciones conformes al tión correcta, suele ser un objetivo que se intenta univer-
mejor entender, con los mejores conocimientos al uso, salizar, a modo de principio. No obstante hay circunstan-
con la información disponible y bajo las restricciones de cias en que la racionalidad muestra que no siempre el
las circunstancias externas actuantes. Es importante des- ahorro es la solución, y a veces es el inicio de problemas
tacar que la racionalidad va muy ligada a la adecuada, en otro lado, como cuando los excedentes de riego con
actualizada y no sesgada información sobre el comporta- aguas de otro origen - a veces no utilizables - son una
miento del acuífero en cuanto a tal y en sus relaciones parte importante de la recarga de un acuífero.
con el exterior, y de las implicaciones económicas, so-
ciales y medioambientales. Esa racionalidad supone ade- La utilizaqj-ón racional de los recursos de agua, in-
cuación a la evolución y condiciones cambiantes. cluida el agua subterránea, con el debido respeto a los
derechos razonables existentes, al medio ambiente y'a las
Los aspectos ligados a la demanda de agua en gene- generaciones futuras, requiere una adecuada gestión, por
ral se consideran como un condicionante impuesto a las personas e instituciones suficientemente preparadas,
actuaciones para poner a disposición el agua, y el uso dentro de un marco económico, social, político y moral
sostenible suele admitir tácitamente como que esas de- suficiente, con sujeción a una planificación bien realiza-
mandas vienen dadas. En la realidad esas demandas de da, flexible y socialmente aceptada y participada, con
agua, además de rnal conocidas en el espacio y en el unos objetivos viables de protección del recurso agua y
tiempo - sobretodo en el mundo agrario, que en España de la restauración de los elementos del sistema, incluidos
supone la utilización del 80% de los recursos de agua los acuíferos. Se necesita además un contexto de ordena-
dulce - se pueden llegar a modificar sin cambiar subs- ción territorial que dé contenido real a los objetivos de la
tancialmente ni los niveles de vida ni las productividades gestión y provea los medios para que sea posible. Estos
agrícolas e industriales. La consideración y adecuación aspectos se desarrollarán más adelante.

Figura 1.- Identificación de los elementos del balance hidrico del sistema acuifero del Bajo Llobregat (Barcelona) según Iribar (1992), como la base
de la modelación del flujo :y de la contaminación marina. El sistema se encuadra en el de recursos de la cuenca del rio Llobregat y cuencas vecinas in-
terconectadas y esta influido por 108 canales de riego, transferencias de aguas, desagues y conductos de evacuación de salmueras, los que condicionan
para la racionalización de la utilización del sistema acuifero como fuente continua de suministro de reserva de emergencia.

Figure 1 .- Scheme to identify the water balance components of the Lower Llobregat (Barcelona) aquifer system, after lribar (1992). It is the basis for
modclling groundwater flow and marine intrusion. In order to rationalize its use as a water source for continuous supply and the more essential role of
emergency reserve, the system has jo be integrated into that of the Llobregat river basin and other interconnected basins, taking into account irrigation
canals, water transfers, outflows and pipes to take away the brines.
3.- CARACTERÍSTICAS BÁSICAS DE LAS AGUAS la recarga difusa originada por la precipitación supone
SUBTERRÁNEAS Y DE LOS ACUÍFEROS una concentración evaporativa de las sales atmosféricas,
que es tanto más acentuada cuanto más cerca se esté de
3.1.- Aspectos generales la costa, y sobretodo cuanto más árido sea el clima. Esta
recarga puede llegar a Ser agua salobre en condiciones li-
Acuífero es aquella formación geológica saturada de torales áridas. A estos efectos se añade la acción agresi-
agua de la que puede retirarse naturalmente (manantia- va del dióxido de carbono, que está enriquecido en el ai-
les, caudal de base de nos) o artificialmente (pozo, gale- re del suelo a causa de la descomposición bacteriana de
n a ~ caudales
) de agua de interés económico en las cir- la materia orgánica del suelo y de la respiración de la ve-
cunstancias locales. Se entiende por sistema acuífero a getación. Ese efecto agresivo supone la hidrólisis de los
un conjunto que contiene formaciones permeables satu- carbonatos y de los silicatos, con lo que el agua de re-
radas de agua (acuíferos), los medios de baja permeabi- carga aumenta su contenido en carbono inorgánico di-
lidad que los separan (acuitardos) y los elementos de co- suelto y en los cationes característicos de la roca que ha
nexión con la superficie, delimitados de tal forma que hi- dado origen al suelo. Además, la disponibilidad de oxí-
dráulicamente funcionen como razonablemente geno hace que minerales en estado reducido se oxiden.
separados de otros sistemas acuíferos. Aunque estos procesos son químicamente complejos,
son relativamente bien conocidos. El resultado es que la
Bajo el punto de vista hidráulico los sistemas acuífe- recarga al sistema acuífero lleva una marca climática y
ros contienen agua en los poros y fisuras de sus forma- una marca litológica, en general con una notable mayor
ciones, que se mueve lentamente desde los lugares en mineralización que la lluvia que la originó. Algo similar
que entra, donde se produce la recarga, hasta los lugares sucede con la recarga a través de excedentes de riego, en
en que sale, donde se produce la descarga. El cociente cuyo caso la composición del agua aplicada y la dosis de
entre el volumen de agua contenido en un dominio de- riego tienen un papel importante en el resultado final.
terminado y el flujo que penetra y sale por su contorno es
el tiempo medio de renovación del agua o tiempo medio Comunmente los terrenos naturales carecen de sales
de tránsito del agua. Puede variar desde meses para uni- altamente solubles pues el proceso continuado de lixi-
dades pequeñas muy permeables hasta miles de años pa- viado por la circulación de agua subterránea las ha eli-
ra grandes acuíferos y para acuitardos. minado previamente. Así, el flujo subterráneo de las
aguas subterráneas desde las áreas de recarga hasta las de
La recarga es el resultado de la penetración profunda descarga no modifica subtancialmente la composición
de parte de la precipitación atmosférica que penetra en el química del agua de recarga en sistemas de relativa rápi-
terreno lo suficiente para no ser evaporada ni transpira- da renovación. Hay excepciones notables cuando las for-
da, así como de la infiltración del agua de escorrentia su- maciones contienen sales evaporitas aún no disueltas, co-
perficial en los cauces y áreas de inundación cuando el mo yesos y anhidritas o sales halogenadas, como en ya-
nivel freático está a un nivel inferior. La recarga es tam- cimientos de sal o en terrenos formados en lagos
bién el resultado artifical de la infiltración profunda de terminales salinos, o como cuando como consecuencia
excedentes de aguas de riego y las fugas de los elemen- de situaciones naturales especiales o antrópicas (mineria)
tos y redes de abastecimiento de agua y saneamiento, el oxígeno penetra en terrenos ricos en sulfuros y produ-
además de acciones intencionadas de recarga artificial. ce sulfatos solubles. Otras situaciones especiales se pro-
La recarga suele ocurrir sobre una gran parte del aflora- ducen cuando a través del terreno se difunde dioxido de
miento de un sistema acuífero. carbono desde formaciones profundas, lo que comunica
a las aguas subterráneas una gran capacidad de alterar
La descarga se produce en los puntos topográfica- minerales y aumentar la mineralización.
mente bajos, bien sea de forma concentrada (manantiales
discretos, lagunas), de forma lineal a lo largo de valles Las porciones de mayor tiempo de renovación de los
fluviales y orillas de lagos y del mar, o de forma difusa sistemas acuíferos, que a veces es de decenas de miles de
en áreas de extensión variable (humedales), en las que la años, pueden contener aguas salinas, saladas y aún sal-
vegetación tiene acceso directo al nivel freático o donde mueras. El origen puede ser aguas marinas antiguas aún
se produce encharcamiento. no desplazadas, el resultado de tiempos de contacto muy
prolongados del agua con la roca en un medio casi esta-
Bajo el punto de vista de la salinidad y composición cionario y de alta temperatura, o la consecuencia de la in-
química del agua subterránea hay que tener presente que filtración de salmueras densas desde la superficie. El len-
to desplazamiento de esas aguas salinas, natural o acre- van a describir aquí y en lo que sigue solo se comentarán
centado artificialmente, puede dar origen a salinización aspectos de interés para tratar de alcanzar una utilización
de partes del sistema acuífero y a manantiales por los que racional de los recursos de agua subterránea.
mana agua de alta mineralización.
La consideración de los recursos de agua de los acuí-
En el medio silibterráneo existe cierta actividad bioló- feros, que tienen carácter difuso, con la de otras fuentes,
gica, incluso en condiciones extremas de salinidad, tem- que son puntuales o lineales, supone que los acuíferos
peratura y presión. Así se producen acciones catalíticas deben integrarse discretizados en el espacio y en el tiem-
sobre reacciones químicas que de otro modo serían muy po según las técnicas habituales de modelación (ver la
lentas. Esta actividad biológica es intensa en el suelo, revisión de modelos en Quercia, 1993) o con solo la dis-
donde las transformaciones son más importantes, pero cretización espacial mediante el método de los autovalo-
también se producen significativamente en el resto del res (Sahuquillo, 1990; Sahuquillo y Andreu, 1987; Sahu-
medio no saturado y en el propio acuífero si el desarro- quillo et al., 1989). Estos aspectos y las técnicas corres-
llo de microorganiismos es suficiente, es decir, si hay nu- pondientes se desarrollan en Andreu (1993).
trientes, las condiiciones ambientales son las adecuadas,
se eliminan los productos del metabolismo y no existen
inhibidores. La movilidad de estos microorganismos es 3.2.- Los acuíferos costeros
pequeña, en general mucho menor que la de la propia
agua subterránea. El hecho de que el agua marina sea algo más densa
que el agua dulce hace que el agua salada tienda a ocu-
El medio subterráneo es inhóspito para los gérmenes par una posición inferior dentro del acuífero (cuña de
patógenos y no ciontiene organismos que sustenten la agua salada), sobre la que desliza el agua dulce hacia el
multiplicación de ],os virus. Así existe una tasa realtiva- lugar de su descarga al mar, bien sea en la costa o a cier-
mente rápida de desaparición de gérmenes y virus. Solo ta profundidad. Esta circunstancia limita la penetración
perviven y se reproducen donde hay circunstancias espe- de la cuña de agua marina, fija la profundidad del agua
ciales, como en el entorno de pozos contaminados. salada y mantiene el espesor de la zona de tránsito entre
el agua dulce y el agua marina (zona de mezcla). Estos
La pequeñez de. los canalículos por los que circula el son los papeles de la descarga subterránea de agua dulce
agua hace que el itransporte de masa se reduzca a las al mar. Ubicando las captaciones suficientemente retira-
substancias disueltas y ciertos coloides, y así el agua ca- das de la costa o limitando su penetración en el medio es
rece de turbidez, excepto por defecto de funcionamiento posible captar agua dulce o sólo ligeramente salinizada.
de las captaciones cuando existen conductos grandes en
el caso de rocas solubles (karst) o con amplias fracturas. Los principios que regulan las relaciones agua dulce-
agua salada en los acuíferos costeros se derivan del prin-
El conocimiento de todos estos aspectos, su modela- cipo de Ghijben-Herzberg. Su aplicación no puede ha-
ción conceptual, la cuantificación y en su caso la mode- cerse de forma simplista (Bear, 1979; Custodio y Brug-
lación numérica del flujo del agua subterránea y del geman, 1987; Falkland y Custodio, 1992; Custodio y
transporte de solutos considerando su interacción con el Llamas, 1983, Secc. 13), sino considerando las circuns-
medio, forman la base de la utilización racional de las tancias de cada caso, tales como las características regio-
aguas subterráneas. nales y locales del acuífero, el flujo de agua dulce, las
fluctuaciones potenciométricas debidas a la marea, re-
Los métodos es,tan descritos en numerosos textos carga y explotación, el régimen e intensidad de la explo-
(Todd, 1976; Davis y de Wiest, 1965; Custodio y Lla- tación, la distribución y localización y características de
mas, 1983; Freeze aind Cherry, 1979; de Marsily, 1986; los pozos, y la existencia de formaciones y porciones
Domenico, 1972, entre otros muchos), en textos especia- ocupadas por agua salina y salobre.
lizados y en artículos de síntesis y revisión, que no se van
a enumerar aquí. Estos métodos incluyen numerosos as- El flujo de agua dulce continental que descarga en la
pectos hidrodinámicos, geohidroquímicos, isotópicos costa juega el doble papel de determinar la posición de
ambientales y numéricos, además de los económicos, le- la zona de mezcla y de mantener su espesor ante las ac-
gislativos, sociales y políticos. Unos son de valor uni- ciones que favorecen la dispersión. Estos aspectos son
versal y sólo deben aplicarse a las circunstancias de cada esenciales para la utilización racional de los acuíferos
problema y otros tienen una base local importante. No se costeros.
3.3.- La calidad de las aguas subterráneas: polución y dación a la que se la puede llamar contaminación natural.
contaminación La contaminación de acuíferos muy frecuentemente se
origina fuera de los mismos, en el suelo y en el medio no
Se denomina polución a las acciones antrópicas que saturado, por lo que su consideración es esencial para la
introducen en el medio - en este caso el medio subterrá- utilización racional de las aguas subterráneas.
neo - variaciones y substancias que pueden suponer una
degradación de la calidad física, organoléptica, química, Los posibles contaminantes son muy diversos y tie-
radioactiva o biológica del agua. La contaminación es el nen distintos comportamientos. También las posibles
resultado de la polución. La contaminación por causas an- fuentes de cdntaminación son muy diversas. Una posible
trópicas puede ser artificial - consecuencia de la introduc- relación de importancia para considerar la utilización ra-
ción de substancias o de calor - o inducida - consecuencia cional de las aguas subterráneas es:
de los cambios potenciométricos que posibilitan la incor-
poración de aguas salinas o contaminadas o la solubiliza- - del medio geológico (sales, aguas salinas, cambios
ción de substancias del terreno. El paso natural del agua redox)
por formaciones capaces de liberar sales rápidamente o el - por desplazamiento de fluidos naturales, incluyendo
lavado de interfaces con masas de agua salina, por ejem- la intrusión marina
plo en los acuíferos costeros, produce también una degra- - por vía aérea (aerosoles, compuestos volátiles)

i- d

. . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
.__)< . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
/ / / / / / / / / / / / / / / / / / / / / / / / / /
impermeable

Figura 2.- Contaminación puntual de un acuífeo freático, con paso por la zona no saturada y formación de un penacho local interestratificado en el me-
dio saturado.

Figure 2.- Point contamination of a water table aquifer showing the penetration through the unsaturated zone and the formation of a local, stratified
plume in the saturated zone.
actividades agrarias (retornos de riego, lixiviado de (interconexiones)
agroquímicos) - asociada a subsidencia y colapsamientos (más fácil
por actividades agropecuarias acceso de otras aguas)
de infiltración de aguas de ríos, canales o drenes - por inyección
por lixiviado de acumulaciones, escombreras, basu-
reros y vertedaros La polución, y la contaminación que origina, es pun-
por vertidos líquidos y fugas de tuberías, depósitos y tual cuando la fuente está concentrada sobre una peque-
alcantarillados ña superficie o se trata de una perforación o pozo (fig. 2),
asociadas al transporte (derrames en accidente, en o bien difusa (fig. 3) cuando el contaminante se extiende
manipulación) - aunque sea a pequeña concentración - sobre una gran

por cambios en el uso del territorio (en la recarga y superficie, como es el caso de áreas extensas de regadío
del potencial redox) o urbanas, o es transportado por vía atmosférica. Los
a causa de la captación de agua subterránea (cambios efectos de las contaminaciones puntuales y de las difusas
potenciométricos) pueden ser muy diferentes, así como las acciones de con-
por perforaciones, excavaciones y reconocimientos trol, rehabilitación y protección. En general las contami-

Figura 3.- Contaminación difusa por aporte de polucionante agrícola distribuido sobre la superficie del terreno. El contaminante penetra lentamente
por la zona no saturada (no indicado) y luego va ocupando progresivamente la parte superior del medio saturado (punteado más intenso), afectando por
mezcla a pozos y manantiales. Los gráficos indican cualitativamente la evolución temporal de las concenhaciones de contaminante.

Figure 3.- Diffusive contam,ination by an agricultural pollutant distributed on the land surface. The contaminant slowly penetrates through the unsatu-
rated zone (not shown) and aftenvards progressivelly occupies the upper part of the saturated zone (darker points), thus affecting by mixing the wells
and springs. The inset plots show the time evolution of contaminant concentration.
naciones puntuales dan origen a concentraciones eleva- el movimiento y un paso con una larga cola de restitución.
das localizadas en penachos, y las difusas tienden a cre- Ese efecto puede medirse elementalmente mediante el co-
ar una estratificación regionalizada, de modo que los ma- eficiente de retardo, que es función de como se reparte el
nantiales y pozos suficientemente penetrantes producen soluto entre el sólido y el líquido. Es algo muy variable de
una mezcla de agua contaminada y no contaminada, en una substancia a otra y de un medio a otro. Para muchas
proporciones crecientes en el tiempo. substancias orgánicas, virus y bacterias es proporcional a
la superficie específica (superficielunidad de volumen)
El contaminante puede acceder al acuífero (medio sa- del medio, y en el suelo edáfico el efecto de sorción do-
turado) a través del medio no saturado, o bien directa- minante lo produce la materia orgánica sólida presente.
mente (donde el nivel freático aflora, en una excavación,
mediante un pozo) o a consecuencia de la existencia de La descripción matemática del transporte de conta-
pozos y sondeos (a lo largo de la separación entubación- minante se puede hacer mediante la ecuación del flujo y
perforación; por cortocircuito entre zonas filtrantes; por la ecuación del transporte de masa en el acuífero (Freeze
tramos corroídos, no estancos o mal soldados). El paso and Cherry, 1979; Custodio y Llamas, 1983).
por el medio no saturado es el que ofrece las mayores po-
sibilidades de fenómenos de interación que diluyen y re- La situación del foco polucionante, forma de polu-
trasan a los contaminantes, sobre todo cuando existe sue- ción y naturaleza de la contaminación, junto a las hete-
lo. La eliminación del suelo o su alteración puede ser una rogeneidades del terreno, hacen que cada caso real tenga
importante pérdida de protección. sus peculiaridades en cuanto a la propagación de la con-
taminación intensidad de contaminación y resultados de
En su movimiento por el terreno, desde el momento la observación.
de la infiltración, los contaminantes sufren una serie pro-
cesos físicos (difusión hacia poros semicerrados y por- Una fuente de contaminación temporal o accidental
ciones de baja permeabilidad, dispersión hidrodinámica produce un pulso de aporte de corta duración, que llega
y filtración mecánica), procesos químicos (formación de con tanto más retraso cuanto mayor sea la interacción
complejos iónicos, quelatación de metales con materia con el terreno. Tras la desaparición de la misma la con-
orgánica, reacciones de adsorción y de cambio iónico, taminación persiste en el acuífero un cierto tiempo, por
precipitación y coprecipitación, quimisorción y reaccio- lo menos igual al de renovación del agua de la porción
nes redox) y procesos biológicos (síntesis celular, degra- afectada, en general mayor a causa de la dispersión del
dación aerobia y anaerobia e inactivación de virus y flujo y difusión a zonas semiestancadas, y aún mayor si
muerte de bacterias). hay retraso en el movimiento. En el caso de substancias
degradables o desintegrables este mayor tiempo de resi-
Para un contaminante conservativo en el agua, el dencia es un factor favorable a la descontaminación. En
tiempo de llegada de un contaminante que penetra más o el caso de que el contaminante sea un fluido distinto del
menos puntualmente por la superficie del terreno hasta agua y no miscible con ella, como hidrocarburos o disol-
un pozo es la suma del tiempo de tránsito por el medio no ventes orgánicos, se forma una fase separada que se in-
saturado más el de circulación por el medio saturado, cu- filtra y circula dejando un penacho con fase inmóvil re-
ya estimación elemental es relativamente sencilla (Cus- tenida por fuerzas capilares (saturación irreductible).
todio, 1994).
Contaminación salina es la situación por la que un
En un acuífero sometido a contaminación difusa so- agua dulce incorpora sales hasta concentraciones que su-
bre toda su superficie, que recibe una recarga que iguala peran determinados límites. Pero un agua salina extraida
a la descarga (régimen permanente), la contaminación de un acuífero no es necesariamente un agua inicialmen-
del acuífero se iniciará cuando llegue el contaminante al te dulce a la que se ha añadido sales por disolución o por
nivel freático. La contaminación de un manantial o pozo mezcla con otra agua más salina, sino que puede serlo
se realizará progresivamente, a medida que el estrato su- originariamente, como ciertos retornos de riego o la re-
perior contaminado aumente de potencia, con una evolu- carga natural en áreas áridas y próximas a la costa (Cus-
ción de tipo exponencial decreciente (Custodio, 1994). todio; 1993~).

La interacción del contaminante con el terreno (ad- Los orígenes de la salinidad son muy diversos, y va-
sorción, cambio iónico, difusión a espacios semicerrados, rios de ellos pueden estar simultáneamente presentes
retención capilar en fase separada) supone u n retraso en (Custodio, 1994a,c):
- Penetración de agua marina moderna. mo consecuencia de acciones exteriores. No implica que
- Existencia de agua marina antigua no expulsada por se produzca realmente perjuicio ni expresa la cantidad de
flujo muy lento o falta de gradiente hidráulico en for- daño sufrible, ni dice que se esté en el momento presen-
maciones poco permeables. te en tal o cual condición. Esto último es la descripción o
- Aspersión marina en franjas ventosas próximas al li- medida del estado actual, que es el objeto del concepto de
toral. riesgo. Sin embargo, los conceptos de vulnerabilidad y
- Concentración del agua de lluvia por evaporación en riesgo no siempre están netamente diferenciados. Estos
la superficie del terreno o en la parte superior del sue- conceptos expresan propiedades estables del sistema, no
lo, cuando el cllima es árido. temporales (en tanto que el sistema no cambie), y deben
- Evaporación del agua subterránea en zonas de des- por tanto expresarse en función de variables de estado o
carga encharcadizas (humedales) sometidas a intensa características del sistema. Por otro lado, el riesgo adi-
, evaporación. ciona a estas propiedades del sistema las de acciones ex-
- Disolución de sales evaporitas existentes en las for- teriores (variables de decisión), que son temporales y
maciones acuíferas, que más comúnmente son yesos cambian de un momento a otro. La vulnerabilidad se re-
y las sales asociadas. fiere a una cierta acción o forma de acción, aunque no a
- Desplazamiento de agua subterránea salina existente su intensidad, oportunidad y aplicación, las cuales con-
en ciertas formaciones profundas, naturalmente o in- forman el riesgo.
ducida por la explotación.
- Infiltración de excedentes de riego en clima árido o Estos conceptos son aplicables a un sistema de recur-
cuando se utilizan aguas con elevada salinidad. sos hídricos y a los recursos de agua subterránea. Con
- Procesos industriales, mineros y de deshielo que pro- respecto a estos últimos se puede hablar de la vulnerabi-
ducen salinidad. lidad y del riesgo asociados a la sequía, a la extracción in-
tensiva de agua y a la degración de la calidad del agua por
La contaminación marina se refiere a aquellos proce- cambios en la temperatura, salinidad o introducción de
sos de salinización en los que las sales proceden directa- ciertos componentes, entre otros. Este último aspecto es
mente las contenidas en el agua del mar. el más frecuentemente aludido, y con frecuencia se so-
breentiende cuando se habla de vulnerabilidad. Frecuen-
La contaminación inducida por la explotación no só- temente la degradación de la calidad es a consecuencia de
lo hace referencia a las consecuencias de la explotación la introducción en el medio subterráneo de substancias o
en sí sino también a las que se derivan de la existencia de propiedades resultantes de la actividad humana, y por
captaciones, se usen o no. Un aspecto especial de esta ello se habla de vulnerabilidad a la polución y por exten-
contaminación es la que se deriva de las captaciones que sión a la contaminación. No depende de cual sea el esta-
por diversas causas resultan abandonadas. Son un acceso do real de calidad y contaminación del acuífero.
fácil y directo desde la superficie al acuífero y una inter-
conexión de formaciones en el terreno. Otro tanto cabe Comienza a hablarse de vulnerabilidad de los acuífe-
decir de los sondeos de observación. La utilización ra- ros hacia 1970 (Albinet y Margat, 1970), aunque su uso
cional de las aguas subterráneas debe considerar la obtu- no adquiere cierta difusión hasta principios de la década
ración de esas vias de acceso y la provisión de aisla- de 1980. En general se sobreentiende que vulnerabilidad
mientos. hace referencia a la calidad del agua y concretamente a la
incorporación al agua subterránea de substancias nocivas
La fuente puede ser también continuada, como el ca- para la salud (vulnerabilidad a la polución), cuando esos
so de una fuga persistente o el vertido en un campo de in- polucionantes se depositan sobre la superficie del terreno
filtración o un pozo, o intermitente. La agricultura es una sobre un territorio extenso (polución difusa). Por lo tanto
fuente intermitente, aunque el retraso y amortiguación de no hace referencia a sucesos puntuales. En otros casos ca-
paso por el medio no saturado la suele convertir en una be considerar con igual importancia la vulnerabilidad a la
fuente continuada para el acuífero. merma en la cantidad, por ejemplo a la pérdida de recur-
sos ante una sequía o una explotación intensiva, o a la sa-
linización.
3.4.- Vulnerabilidad (delos acuíferos
No existe aún ninguna definición satisfactoria y uni-
El concepto de vu1:nerabilidadhace referencia a la po- versalmente admitida de vulnerabilidad de los acuíferos
sibilidad de que un sistema sufra efectos indeseable co- (Vrba, 1991; Duijvenbooden y Waegeningh, 1967), lo
cual no ha impedido la vulgarización del término, aun- La evaluación de la vulnerabilidad a la polución refe-
que con una indefinición manifiesta y un frecuente uso rida a una substancia conservativa es poco realista para
incorrecto. Se trata de definir algo que sea una propiedad muchas otros tipos de substancias. Si se considera una
del acuífero y sus circunstancias e independiente del po- substancia de degradabilidad media, si es que se puede
lucionante concreto y de su cantidad y concentración. La definir, el resultado no vale para polucionantes conser-
vulnerabilidad a la salinización y contaminación puede vativos. De ahí que se hable de vulnerabilidad específica
asociarse a la susceptibilidad de que la calidad del agua a la polución, agrupando los posibles polucionantes en
subterránea puede ser alterada negativamente como con- grandes grupos con una amplia base en común (conser-
secuencia de actividades humanas, tanto para su uso ac- vativos, orgánicos degradables, orgánicos poco degrada-
tual como futuro previsible. Mide en cierta forma la in- bles, microbiológicos, metales pesados, ...), ya que en
capacidad del medio para hacer frente, espacial y tempo- general no es posible considerar cada substancia polu-
ralmente, a las consecuencias indeseables de esas cionante presente, dado el muy elevado número de ellas.
actividades, y para restaurar la situación primitiva, natu- Según la naturaleza del medio, un polucionante determi-
ralmente o con ayuda de medios artificiales. La conside- nado puede estar en un grupo o otro. Carbonell et al.
ración de cada polucionante individualmente, su canti- (1993) aclaran esta situación anterior llamado vulnerabi-
dad, modo de aplicación y toxicidad conforma el riesgo lidad específica a la que hace referencia a un contami-
a la contaminación (de que se alcancen ciertas concen- nante, clase de contaminante o actividad específica, y
traciones). De todos modos es un concepto útil para con- vulnerabiliad intrínseca a aquella en cuya definición no
dicionar la utilización racional de las aguas subterráneas se considera ni los atributos ni el comportamiento de
en el contexto del uso del territorio. contaminantes específicos.

Los principios básicos, metodología y aspectos prác- La gradación de la vulnerabilidad, si se cuantifica o


ticos de la vulnerabilidad de los acuíferos a la polución categoriza, es apta para cartografía (Civita, 1994). Es al-
se analizan con detalle en Carbonell et al. (1993) y en go útil para la ordenación territorial, a nivel de gestor no
I Foster e Hirata (1991). Dos de los métodos para indexar experto en hidrología, si existe una clara leyenda y se in-
la vulnerabilidad son los llamados DRASTIC (Aller et dican claramente las limitaciones y orienta la utilización
al., 1987) y GOD (Foster, 1987; Foster e Hirata, 1992; racional de las aguas subterráneas. Sin embargo, los
Adams y Foster, 1992). cambios en las condiciones de explotación de un acuífe-
ro pueden modificar las condiciones de flujo del agua
El concepto de tiempo de transferencia de un conta- subterránea y, por lo tanto, las gradaciones de vulnerabi-
minante desde la superficie al acuífero no forma parte de lidad, de modo que un mapa de vulnerabilidad no es una
lo que normalmente se considera vulnerabilidad a la po- cartografía permamente.
lución sino que es algo más bien ligado al riesgo, ya que
condicionan las concentraciones que se alcanzarán. Un
largo tiempo de transferencia no significa ninguna pro- 4.- ASPECTOS DE LA UTILIZACIÓN DE LAS
tección absoluta sino sólo un diferimiento del problema. AGUAS SUBTERRÁNEAS QUECONFIGURAN SU
Ante una contaminación de una substancia no degrada- UTILIZACIÓN RACIONAL
ble, un mayor tiempo de transferencia sólo aporta dilu-
ción, tanto mayor cuanto más dispersivo sea el medio.
Pero esa dilución supone afectar a volumen grande de 4.1.- Generalidades
agua subterránea, que así pasará a tener un contenido ex-
traño, con frecuencia indeseable aún a muy bajas con- En el uso del agua subterránea existen ventajas y des-
centraciones. Por ello, atribuir un índice de baja vulnera- ventajas, como en cualquier actividad humana. Cómo
bilidad en función de un largo tiempo de recorrido es po- debe realizarse una actividad es un compromiso entre los
co recomendable, y por supuesto puede dar origen a beneficios y costes (o daños), lo cual no es un simple cál-
malas decisiones de gestión cuando los que las toman no culo matemático sino un complejo mundo de considera-
son expertos en hidrología subterránea. No obstante, una ciones técnicas, económicas, sociales, políticas y éticas,
llegada rápida del contaminante limita la posibilidad de y donde son frecuentes los errores por insuficiente cono-
atenuación y no deja tiempo para introducir medidas co- cimiento, visión parcial del problema, intereses creados,
rrectoras. Una notable retención, que retrasa la penetra- prepotencia y corrupción, entre otros. Este común deno-
ción, conlleva una lenta recuperación, salvo que la de- minador de la actividad humana no es razón para no ac-
gradabilidad sea elevada. tuar, pues hay demandas sociales ineludibles, en este ca-

31
so de agua, y una justa aspiración a mejorar el nivel de - menor dependencia en cuanto a cantidad y calidad de
vida, lo que exige dedicación, entusiasmo, optimismo y acciones exteriores de carácter castastrófico o provo-
honradez. Todo ello forma parte del uso racional. cadas intencionalmente o a causa de conflicto,
- menor dependencia de procesos tecnológicos com-
plejos, que están sujetos a fallos de funcionamiento y
4.2.- Aspectos favorables diseño, y a errores humanos de operación,
- reconocimiento, evaluación y control con frecuencia
Varias son las razones que explican el importante y más seguros y sencillos, y que requieren menor lon-
esencial papel de las aguas subterráneas cuando se las gitud de series de datos de base, aunque para llegar a
compara con las aguas superficiales, si bien estas venta- propuestas preliminares aparentemente se requiera
jas no son fruto del antagonismo sino de la complemen- un mayor tiempo y esfuerzo de estudio, personal ex-
tariedad y oportur~idadde uso. Esto lleva a que según las perto y superar un conjunto de deformaciones y pre-
circunstancias convenga usar la fase superficial o la fase juicios en el conocimiento popular, que alcanza con
subterránea, y más comunmente una adecuada combina- frecuencia a las personas con responsabilidades en
ción de ambas, cariviante en el espacio y en el tiempo. Es- las administraciones y órganos de gestión,
ta combinación requiere tanta mayor racionalidad cuanto - relativa fácil predicción del comportamiento ante es-
mayor grado de utilización exista, y más necesidad de cenarios diversos de acciones futuras, dado el gran
protección y mejolr conservación medioambiental se re- almacén asociado; para las aguas superficiales esa
quiera. En esto se basa al uso conjunto de aguas superfi- predicción tiene mayor incertidumbre al ser muy sen-
ciales y subterráneas, según el sentido que se da actual- sibles y no conocerse previamente la aportación plu-
mente a dicha designación (Sahuquillo, 1983; Andreu, vométrica futura,
1993): proporcionztr las mejores prestaciones en calidad y - gestión más local, sin las restricciones y conflictos de
cantidad, con el menor coste y la mejor garantía. organización e institucionales frecuentes en las gran-
des entidades,
Algunas de las razones favorables, dentro de las co- - frecuente fácil control de problemas organolépticos y
rrectas circunstancias, del uso de las aguas subterráneas, posibilidad de disminuir o incluso eliminar el trata-
que se han de tener en cuenta al considerar su utilización miento de desinfección previa si se utilizan redes de
racional son: distribución adecuadas.

-- general notable almacenamiento asociado, que hace La experiencia muestra que la explotación de las
que su cantidad y calidad estén menos afectadas por aguas subterráneas ha ido creciendo y ha sido el motor
la variabilidad de la pluviometría, y sean reservas de del desarrollo de muchas regiones del Mundo, con fre-
gran valor en sequías y situaciones de emergencia, cuencia a partir de iniciativas locales y privadas, y todo
- regularidad de su composición química, radioquími- ello a pesar de desidia y no pocos impedimentos admi-
ca y biológica y de la temperatura, y ausencia de tur- nistrativos e intelectuales. En muchos lugares son la
bidez si las captaciones estan bien construidas, principal y más segura fuente de suministro de agua po-
- mayor protección temporal frente a procesos contami- table y de regadio. Esto contrasta con la frecuente pro-
nantes accidentales, lo que proporciona la posibilidad pensión de ciertos organismos públicos, con frecuencia
de continuar disponiendo de agua adecuada durante los mejor dotados económicamente, hacia las grades
un periodo extendido de tiempo, mientras se adoptan obras hidráulicas (Llamas, 1988b, 1991b). Aunque exis-
las medidas paliativas y correctoras necesarias, ten claros aspectos positivos en el uso de aguas superfi-
- frecuente disponibilidad en el lugar o cerca de donde ciales, sobre todo para grandes áreas urbanas o industria-
se produce la demanda, con elementos de captación y les, o extensos desarrollos agrícolas, no siempre se justi-
transporte que suponen inversiones normalmente fican economicamente sin recurrir a subvenciones,
moderadas y graduales frente a las de las grandes declaraciones llamadas de interés general, o endeuda-
obras de regulación, captación y tratamiento de aguas miento encubierto.
superficiales,
- asequibilidad a riivel rural, municipal y de áreas en Cuando los acuíferos se usan conjuntamente con las
vías de desarrollo, sin necesidad de que para el abas- aguas superficiales para un mejor aprovechamiento de los
tecimiento y puesta a disposición se tengan que com- recursos de agua disponibles con frecuencia aquellos jue-
prometer recursos económicos muy necesitados para gan el papel de reserva y en circunstancias técnicas favo-
otros fines, rables son los receptores de excedentes temporales me-
diante alguna forma adecuada de recarga artificial. No cuadrado de la dimensión del acuífero e inversamente a
obstante lo más frecuente no es necesariamente la regla la difusividad hidráulica, y puede valer desde días hasta
universal. Cada circunstancia particular tiene su solución miles de años. Valores de años a muchas decenas de años
más racional o de oportunidad. La recarga artificial es so- son comunes.
lo una herramienta que tiene muy diversos aspectos (Cus-
todio, 1986) y cuya aplicabilidad requiere agua y cuya Así la puesta en explotación de un acuífero supone
aplicación ha de hacerse según las circunstancias locales. descensos de nivel continuados durante un largo periodo,
que pueden ser muchos años. Pueden alcanzar o incluso
Pero las aguas subterráneas no son una panacea, y descender bajo el nivel de las descargas, sin necesidad de
por supuesto no estan exentas de problemas importantes que la recarga se haya sido superada, y aún tomando só-
de cantidad, calidad, gestión y conocimiento, unas veces lo una fracción de ésta (fig. 4). Al mismo tiempo las des-
reales y otras fruto del desconocimiento y evaluaciones cargas naturales van mermando. Esto permite extraer
inadecuadas. caudales grandes en una época, sin apenas afectar a las
descargas naturales a corto plazo y con una afección me-
dia a largo plazo igual a la extracción media. Esta es una
4.3.- Problemas técnicos asociados a la explotación de interesante forma de utilización racional.
las aguas subterráneas: descensos y recarga
Los inconvenientes generales ligados a la explota-
Los aspectos y problemas técnicos relacionados con ción se manifiestan como descenso de niveles. Conllevan
la explotación de las aguas subterráneas son principal- un encarecimiento del agua extraida por requerirse ma-
mente los que refieren a los descensos de niveles, a los yor elevación y modificaciones en los medios de extrac-
cambios de la calidad y del agua y a los cambios locales ción y aporte de energía. Estos efectos son previsibles y
en las características del territorio. valorables, y se han de tener en cuenta al considerar la
racionalidad de una explotación.
El descenso de los niveles piezométricos es inheren-
te a la propia hidrodinámica del sistema acuífero y por lo Cuando la extracción supera a la recarga total no es
tanto es cuantificable y predictible en la medida en que posible llegar a una situación estable final manteniendo
los parámetros y las variables sean suficientemente bien dicha extracción. Se estaría en un proceso estricto de so-
conocidas. Según la complejidad del problema se pueden breexplotación, del que se hablará más adelante.
usar o bien simples cálculos o se debe recurrir a modelos
de simulación del flujo. En acuíferos conectados con masas de agua superfi-
cial (ríos, lagos, embalses) la extracción produce una re-
La explotación de un acuífero que se limita a captar carga inducida. Esta forma de recarga es importante en
los manantiales no sufre cambios a largo plazo sino se al- acuíferos aluviales con rios alóctonos. Este tipo de recar-
teran las circunstancias, pero supone limitaciones impor- ga es muy sensible a cambios en los niveles del agua su-
tantes en cuanto a la ubicación de las tomas y a la utili- perficial, velocidad de flujo, turbidez, naturaleza de los
zación de la capacidad del sistema acuífero para adaptar sedimentos, régimen de caudales, efecto de crecidas, ca-
la producción de agua a la variabilidad de la demanda. nalización, alteración del cauce por acciones antrópicas,
Para que el agua fluya a los puntos de captación hace fal- etc., y lo que en un momento es un aporte importante
ta un descenso piezométrico que cree el gradiente hi- puede dejar de serlo en épocas posteriores. La utilización
dráulico que movilice el agua hacia los mismos. Cuando racional de las aguas subterráneas requiere que se tomen
el descenso de niveles no incrementa substancialmen te las precauciones adecuadas y que se realicen actuaciones
la recarga, que es una situación común, a la larga se de- de mantenimiento de la capacidad de recarga.
traerá un caudal medio de los puntos de descarga (ma-
nantiales, rios, lagos, humedales) igual al de extracción. Es difícil evaluar a priori con exactitud el valor de la
Hasta llegar a este momento, la extracción supera a la recarga de un acuífero, que es el que define los recursos
merma media de descarga y la diferencia se obtiene de de agua y los caudales explotables bajo unas ciertas cir-
las reservas (agua almacenada) en el sistema acuífero. cunstancias y condicionantes. Su conocimiento se afina
Así, durante este periodo transitorio los niveles van des- con los estudios y observaciones que acompañan a la pro-
cendiendo hasta estabilizarse, en el bien entendido de pia explotación. En climas áridos y semiáridos la recarga
que la extracción no supere a la recarga. La duración de puede ser importante en años húmedos excepcionales,
este periodo transitorio es directamente proporcional al pero decrece muy rápidamente al disminuir la precipita-
'loSh m20 de
bombeo
Nivel freático

Figura 4.- Representación esquemática de la explotación de los mate-


riales intracaldera de la cumbre de la isla de Gran Canaria en un largo
proceso transitorio de descensos progresivos en el que el manantial Ile-
ga a secarse, el caudal de la galeria merma si no se alarga y el pozo de-
be ser profundizado progresivamente para mantener el caudal. El proce-
so se estahilizará en estas circunstancias cuando la -
~zaleriadrene solo la
diferencia entre el caudal primitivo del manantial y el actual del pozo

Figure 4.- Schematic representation of groundwater exploitation in the


Gran Canaria island highland intracaldera formation. There is a long
transient process of progressive drawdown during which the spring
dries out, the discharge of the water gallery decreases if it is not exten-
ded, and the well needs progressive deepening to soustain the dischar-
ge. The process will attain a new steady state under this circumstances
when the gallery drains out the difference between the initial flow of
the spring and the current discharge of the well.

ción, lo cual exige prudencia al caracterizar el funciona- Las cavidades de poca a moderada profundidad exis-
miento del acuífero. Pero además los parámetros que ca- tentes en rocas karstificables (carbonatos y yesos) pue-
racterizan la recarga no son fijos y dependen de cambios den colapsar al disminuir la presión del agua en su inte-
territoriales tales como el grado de forestación, estado de rior, bien sea por cambios rápidos de nivel del agua o
las zonas inundables, existencia de regadios y dotaciones bien por erosión y corrosiones internas por aumento del
de agua aplicada (los retornos de riego pueden ser una re- flujo del agua. El resultado es un aumento de la frecuen-
carga importante), urbanización y estado de las redes de cia de hundimientos localizados y más o menos bruscos
distribución de agua y saneamiento. Además es posible del terreno (colapsos).
llevar a cabo inteilrenciones de incremento de la recarga
si hay agua disponible. Tales son el sobreriego y las ac- Las aguas subterráneas descargan en zonas bajas,
tuaciones de recarga artificial en superficie o mediante dando lugar a bosques de ribera a lo largo de los rios, a
pozos, si se dispone de medios económicos para la ope- humedales en zonas llanas y a franjas de vegetación
ración y mantenimiento. Todas esas acciones forman par- (ecotonos) en el límite entre formaciones de contrastada
te de la utilización racional de las aguas subterráneas. permeabilidad. La vegetación de esas áreas, la fauna aso-
ciada dependen del aporte sostenido de agua subterránea.
Los grandes descensos del nivel piezométxico en for- La explotación de agua en el acuífero puede suponer - y
maciones no consolidadas suponen que éstas pueden con seguidad lo supone si se produce cerca de esas áreas
compactarse al aumentar las tensiones efectivas en el te- - una reducción paulatina, diferida y a lo largo de un di-
rreno. El resultado es que se pueden llegar a producir latado periodo, de las descargas de agua subterránea. Por
descensos regionales importantes del nivel del terreno, lo tanto se produce una afección, que puede adoptar di-
lo cual supone modificación de red de drenaje y su fun- ferentes formas según las circunstancias. Así, puede tra-
cionamiento, mayor frecuencia de encharcamientos, dis- tarse de la desaparición de porciones de esas áreas natu-
torsión de las redes de canales y modificación del perfil rales o de un cambio del hábitat a causa de una reducción
costero. En acuífeos heterogéneos pueden originarse generalizada de aportes de agua, que suele traducirse en
además cambios l~ocalizadosde pendiente que pueden una mayor severidad de los periodos de sequia al hacer-
afectar a vias de transporte y canalizaciones. Este es un se más intensos y más frecuentes (fig. 5). La utilización
coste añadido a la explotación y por lo tanto deberia su- racional de un acuífero supone considerar y evaluar estos
marse al coste real del agua puesta a disposición. efectos.
4.4.- Problemas técnicos asociados a la explotación de do 3.2. No sólo son fuente de suministro sino también - y
los acuíferos costeros cada vez más - elementos de reserva para puntas de de-
manda y emergencias. Hidráulicamente se comportan co-
Los acuíferos costeros son elementos de gran impor- mo cualquier acuífero conectado a un cuerpo de agua su-
tancia en el conjunto de recursos de agua por su ubica- perficial, con la diferencia de que la recarga inducida que
ción en áreas de notable ocupación humana y elevada se produce es de agua marina. Basta que el agua extraida
demanda, y frecuente escasez de otros recursos de agua contenga un 2% de agua marina para degradarla seria-
dulce. Sus características se han comentado en el aparta- mente y un 4% la hace inútil para buena parte de los usos.

. .

TIEMPO. CADA DMSIÓN = 1 ANO

Figura 5.- Efecto de la explotación de un acuífero que alimenta a un humedal. Las desviaciones acumuladas de la precipitación muestran una secuen-
cia de años secos (descenso) y húmedos (ascenso), de diferente naturaleza e intensidad. Como consecuencia de la explotación que se inicia en los pri-
meros años, la evolución con bombeo difiere de la natural y se produce un descenso progresivo; las fluctuaciones representan el efecto de los bombe-
os estacionales en el punto de observación. La piezometría se refiere a niveles profundos más permeables y en ellos se asienta la vegetación y el hu-
medal, con las raíces en situación tal que sólo en las secuencias de años muy secos no pueden obtener el agua del nivel freático. A consecuencia de la
explotación los niveles freáticos van descendiendo, con lo que las secuencias secas para los árboles son progresivamente más largas y frecuentes (ins-
pirado en el acuifero de El Abalario y el Arroyo de la Rocina, Doñana, Huelva). H=época húmeda; S=época seca.

Figure 5.- Effect of the exploitation of an aquifer which soustain a wetland. The cumulate deviation of rainfall show a sequence of different dry (de-
crease) and wet (increase) years. As a consequence of the groundwater exploitation starting in the early years, the evolution under pumpage shows a
progressive drawdown when compared with natural conditions. The groundwwater heads correspond to more permeable deep formations where well
screens are placed, while the upper formations are less permeable and support the vegetation and the wetlands. Root depth is such that only in sequen-
ces of very dry years plans cannot take water from the water table. As a result of groundwater exploitation the water table goes down, and then the dry
sequences for the trees are progressively longer and more frequent (based on the behaviour of the El Abalano and the La Rocina ravine, Doñana, Huel-
va). H=wet period; S=dry penod.
La explotación de agua dulce de un acuífero costero es posible tomar las medidas adecuadas para una utiliza-
supone la reducción de la descarga de agua dulce al mar ción racional. Los aspectos más difíciles son los relacio-
y por lo tanto una mayor penetración del agua marina y nados con la contaminación por el propio hecho de su va-
de la zona de mezcla - localmente un ascenso de la rnis- riabilidad y frecuente ocultación, clandestinidad o desco-
ma - y su ensanchamiento. El nuevo equilibrio se alcan- nocimiento, y los posibles focos pueden ser difíciles de
za tras un periodo transitorio más o menso dilatado (des- identificar con solo sencillas inspecciones. De ahí que la
de meses a cientos de años, con frecuencia varios años) utilización racional de las aguas subterráneas pase prefe-
durante el cual la zona de mezcla se puede dilatar extra- rentemente por la prevención, ya que la corrección, aun-
ordinariamente y reflejar las macroheterogeneidades del que posible, es costosa, difícil y puede suponer actuar so-
medio. Para hacer sustentable la extracción de agua dul- bre grandes volúmenes de agua y de medio.
ce en un acuífero costero es necesario limitar la penetra-
ción salina y la el~evaciónde la zona de mezcla, y ello su- La contaminación de las aguas subterráneas a causa
pone dejar que cierto flujo de agua dulce escape al mar, de la explotación puede producirse de diversas formas,
natural o artificialmente. Así los recursos explotables son cuya consideración es importante para la utilización ra-
menores que la recarga, y tanto menores cuanto más pró- cional de las aguas subterráneas:
ximas esten las captaciones de la costa.
- por desplazamiento horizontal de frentes de agua
El comportmento de un acuífero costero es científica contaminada o salina;
y técnicamente conocido, y es simulable si el grado de co- - por lixiviado lento de contaminantes al pasar el agua
nocimiento es suficientemente detallado. Buena parte de por terrenos;
lo que se consideran problemas de los acuíferos costeros, - por ascenso vertical de aguas contaminadas bajo la
bajo el punto de vista técnico son debidos a mala ubica- captación;
ción y diseño de las captaciones, inadecuada explotación, - a causa de la propia captación, por:
falta de observacic~nespara efectuar correcciones y desco- - paso de agua contaminada procedente de la superfi-
nocimiento de la liidrodinámica del acuífero. También a cie o desde otros acuíferos, entre la pared de la per-
veces son debidos a que la fuente de salinidad no es la pe- foración y la entubación a causa de cierres y cemen-
netración de agua marina actual. Circunstancias tales co- taciones inexistentes o mal realizadas;
mo retornos de riego muy concentrados, aridez climática, - establecimiento de comunicaciones (cortocircuitos)
entrada de agua salina antigua en los pozos por rejillas mal entre varios niveles permeables a causa de dejar el
colocadas y tubos mal aislados o corroidos, evaporación pozo sin revestir o con tramos filtrantes excesiva-
intensa de agua en superficie y fugas de transporte de agua mente largos;
salina por el territorio, pueden producir efectos que en es- - excesiva penetración o falta de aislamiento de forma-
tudios de insuficienite calidad fácilmente se confunden con ciones contaminadas o salinas;
la intrusión marina propiamente dicha. - corrosión y discontinuidades de la entubación frente
a formaciones contaminadas y10 salinas, incluso fren-
te a acuitardos, que teniendo una permeabilidad ver-
4.5.- Problemas técnicos en relación con cambios en la tical pequeña pueden dejar circular horizontalmente
calidad y salinidad cantidades apreciables de agua.

Los cambios potenciométricos que necesariamente En las zonas húmedas, a las variaciones debidas a los
impone la explotación de las aguas subterráneas pueden cambios de niveles piezométricos se pueden unir las de
hacer que masas de agua de calidad degradada o salina modificación de la composición química por alteración
existente en el acuífero o conectada con el mismo se des- de las superficies de evaporación, por penetración en el
placen hacia las captaciones. Un caso especial es el de medio subterráneo de agua salina o por contaminación
los acuíferos costeiros antes comentado. Otras situacio- del acuífero, por ejemplo por actividades agrícolas. El
nes son las de infiltración de aguas de rios o lagos, o ma- resultado es una modificación de la vegetación.
sas de agua en ciertas partes del acuífero, otros acuíferos
o acuitardos. En general los efectos aparecen diferidos -
meses a muchos años - y con un posible frente de avan- 4.6.- Problemas asociados a la gestión y administra-
ce relativamente disperso. Un buen conocimiento del sis- ción de las aguas subterráneas
tema acuífero permite prever los problemas que pueden
presentarse y estimar cuando van a aparecer, con lo que Buena parte de los problemas que se asocian a la ex-
plotación de las aguas subterráneas no son de carácter tiene experiencia, no se saben manejar las herramientas
técnico sino de gestión y administrativos, incluyendo los disponibles, no se utiliza personal adecuado, se obra con
relativos a consideraciones económicas, de conocimien- prepotencia y se actua deprisa y bajo presión para en-
to, de propiedad y derechos, y de legislación y norrnati- contrar salidas rápidas a situaciones que requieren una
va. Unos se derivan de las circunstancias técnicas pero maduración, un aprendizaje, una educación pública, la
otros no dependen de ellas. creación de un ambiente de confianza mútua entre los ac-
tores y la definición de objetivos en los que haya un con-
El coste creciente a causa del descenso de niveles, senso para la aceptación.
cuando se produce, forma parte de la naturaleza del acuí-
fero y de la ubicación de las captaciones, y es previsible La aglutinación de los intereses de la multiplicidad de
e internalizable. Además los acuíferos aportan la ventaja actores se puede conseguir en buena manera mediante la
de poder ponerse en explotación progresivamente, a me- formación de Comunidades de Usuarios de Aguas. En
dida que la demanda crece, con mínimos intereses inter- España estan configuradas en la Ley de Aguas de 1985
calarios, y siendo más barata al principio, lo cual favore- como entes de derecho público y con capacidad de ac-
ce el desarrollo en las etapas iniciales. tuación en la gestión de aguas (AIH-GE, 1995), si bien
su creación y funcionamiento no es fácil, ni en lo que
La utilización racional de un sistema acuífero supone respecta a su constitución ni a su encaje efectivo en la
poder tomar decisiones desde un organismo gestor, con- Administración del Agua. Su nacimiento eficaz parte del
sorciadamente o por acuerdo de las personas físicas y ju- reconocimiento de ese interés y beneficio mútuo por par-
rídicas involucradas. Estas decisiones comportan una te de los propios usuarios de forma que la constitución de
amplia gama actuaciones sobre el grado de explotación, la Comunidad de Usuarios sea una consecuencia. Esto
la ubicación de las captaciones y su modo de construc- supone un periodo de información, de difusión de los co-
ción y operación, todo ello en función de objetivos eco- nocimientos y de toma de conciencia, con la ayuda de es-
nómicos, sociales, ambientales e incluso políticos, y en- pecialistas en comunicación humana y en resolución de
tre ellas está la de no actuar (Custodio, 1989). Todo ello situaciones de conflicto, que forman parte de la trama de
incluye la toma en consideración de la cantidad de agua la utilización racional de las aguas subterráneas.
a extraer, sino también la preservación de la calidad del
agua mediante actuaciones sobre la propia explotación y
sobre el uso del territorio. Tales pueden ser las limitacio- 4.7.- Aspectos de carácter social y cultural del agua
nes en la aplicación de productos agroquímicos, el esta- subterránea
blecimiento de áreas de protección de captaciones o la
delimitación de perímetros de protección de la calidad y Los problemas sociales en relación con las aguas sub-
de la cantidad, que se comentarán más adelante. terráneas son poco acusados en las etapas iniciales de la
explotación, pero toman caracteres de enfrentamiento
En general el número de actores que intervienen en la cuando se instalan centros de extracción con pozos pro-
utilización y gestión de un sistema acuífero es muy ele- fundos y eficientes que dejan en seco o con notables mer-
vado y con muy diversos intereses. Los actores son los mas de caudal a manantiales tradicionales o a pozos an-
que detentan derechos de captación y los propietarios o tiguos de tipo rural o agrícola, y condicionan la utiliza-
concesionarios de pozos, así como los que van a usar ese ción racional de las aguas subterráneas en tanto que no se
agua, y los ocupantes habituales del territorio que son llegue a acuerdos, en general más efectivos y rápidos por
objetos potenciales de restricciones y condicionantes a via de negociación que por via administrativa o judicial.
sus actividades, y también los órganos que gestionan o En acuíferos costeros la situación se complica por las po-
van a gestionar obras públicas, tales como vias de comu- sibles salinizaciones de captaciones. Otras reacciones
nicación, encauzamientos, regadios, canales navegables, posibles, como las ocasionadas por la desecación de zo-
etc. La complejidad es normalmente mucho mayor que nas húmedas y pérdidas de vegetación que depende del
para las aguas superficiales, y ello independientemente agua subterránea, en general no produce tanta conflicti-
del carácter de dominio público o privado de las aguas, vidad dado que se pierde fácilmente memoria de situa-
que sólo modifica el procedimiento de las actuaciones ciones anteriores cuando la evolución es lenta, pero que
pero no altera sus fundamentos. deben ser tenidas en cuenta.

Esta multiplicidad de actores parece plantear proble- La recuperación de niveles freáticos altos cuando se
mas de difícil solución para un uso racional cuando no se abandonan las captaciones que durante un tiempo habian
drenado zonas en las que se han construido obras subte- vicios, naturales o ya creados, con preferencia a nuevas
rráneas se traducen en problemas de inundaciones de las actuaciones estructurales y no estructurales.
mismas. Es un problema ligado al uso del agua subterrá-
na que tiene una conflictividad social limitada, pero que La gestión de acuíferos incluye:
también se ha de considerar.
- inventario de necesidades, usos, elementos y disposi-
Los problemas culturales son los que se derivan de tivos,
usos tradicionales de manantiales y pozos, acompañados - conocimiento de la demanda real, de su evolución y
o no de sentimientos y mitos en cuanto a la calidad, pro- de su elasticidad,
piedades o beneficios del uso del agua. El cierre de esas - considerar que el acoplo oferta de agua-demanda de
captaciones por contaminación puede suponer cierto ma- agua se hace desde los dos lados, y tener los medios
lestar, más que su progresivo secado. Más importante es para llevarlo a cabo,
la problemática ligada a la existencia real o sentida de - disponer de suficientes conocimientos científicos y
derechos de explotación del agua subterránea en base a técnicos,
su uso continuado, asentamiento en el territorio o parti- - disponer de personal suficiente y debidamente for-
cipación comunit'aria en obras de captación, y en el fon- mado,
do es una forma de problema social. - tener medios de observación de la cantidad y la cali-
dad del agua, y también de los impactos ambientales,
sociales y territoriales de la explotación,
5.- UTILIZACIÓN RACIONAL DE LAS AGUAS - ampararse en medidas administrativas y legales,
SCBTERRÁNEAS, GESTIÓN DE ACUÍFEROS Y - disponer de medios de aplicación de las reglas, tanto
PLANIFICACI~NHIDROL~GICA por vías coercitivas como estimuladoras,
- poder disponer de los medios extraordinarios para ac-
La utilización racional de las aguas subterráneas va tuaciones no comunes, además de medios de actua-
muy ligada a la posibilidad de su gestión y de su planifi- ción ordinarios,
cación. - recibir medios económicos adecuados,
- realizar campañas de información pública y de for-
La gestión de acuíferos es el conjunto de guías, nor- mación.
mas, leyes, reglamentos y actuaciones dirigidas a soste-
ner, conservar proteger, restaurar y regenerar esos acuí- Toda gestión ha de ser realista, aceptada socialmente,
feros. Hace referencia a la cantidad y calidad del agua implementable, adaptada a cada circunstancia local y
captable del acuífero, que ha de hacerse de forma com- temporal, e integrada en el conjunto de recursos que re-
patible con la demanda a servir, con otras demandas exis- quiere la sociedad.
tentes, con el medio ambiente y con la ordenación y uso
del territorio. La gestión incluye la consideración de los Así como la gestión atañe al presente, con visión de
costes y beneficios directos e indirectos, las prioridades futuro, la planificación se dirige al futuro considerando el
y restricciones no valorables económicamente, el uso presente. La segunda es la guía de la primera. La planifi-
sostenible del recurso y el respeto a los derechos interge- cación no debería ser ningún corsé rígido que defina es-
neracionales. En encuadre es la normativa vigente y los tsictamente todas las actuaciones, sino un marco o guía,
derechos legales y legítimos, aunque sean de facto. Entre suficientemente flexible para servir a un mundo carn-
los objetivos estan las limitaciones generales a los dere- biante y con una dinámica que lleva a situaciones a veces
chos, la compensación por las afecciones a derechos sin- poco previsibles. Todo esto requiere considerar la incer-
gulares y la corrección de abusos. tidumbre de los datos y de las prognosis, la elaboración y
estudio de escenarios verosímiles, y la integración de las
La gestión de las aguas subterráneas no es un objeti- restricciones macroeconómicas, sociales y políticas.
vo aislado, sino que se integra en la de otros recursos de
agua, en la ordenac:'ón temtorial y en los usos reales del La planificación - y la gestión que de ella se derive -
territorio. Supone una asignación del agua que sea eco- para ser eficaz debe aplicar generosamente el principo de
nómica (no necesariamente barata) y equitativa, y sufi- subsidiaridad (que lo que se puede realizar a un nivel so-
cientemente flexible como para poder adaptarse a un cial menor no se realize por un grupo social mayor) y
mundo y sociedad cambiante. Entre los objetivos figura contar con la participación de los usuarios de agua y de
el uso adecuado de la infraestructura hidráulica y de ser- los expertos, a través de asociaciones apropiadas, con
voz suficiente en los órganos de la planificación. Tam- así como los de salinidad que acaban afectando al bie-
bién se ha de fundamentar en la solidaridad, o sea en el nestar público y a la economía local.
reconocimiento de que todos los seres humanos tienen
igual dignidad, y por tanto todos tienen el mismo dere-
cho a participar de los frutos de la herencia común que es 6.2.- Protección de la cantidad
la Naturaleza. Estos principios, solidamente asentados y
aceptados como filosofía universal, han sido recogidos La protección de la cantidad del agua de un acuífero
en las Declaraciones de Dublín de 1992, de la Confede- o sistema acuífero pretende el uso sostenido del cauce de
ración Mundial de Naciones Unidas sobre el Medio Am- recursos de agua. No obstante, no puede desligarse de la
biente. calidad, ni de como se realiza la explotación, ni de hasta
donde hay realmente afección o solo se trata de una mo-
El marco amplio de una planificación debe incluir as- dificación ligada a la propia explotación, ni de qué inter-
pectos y criterios: ferencia~o afecciones se pueden tolerar en otras partes
del ciclo hidrológico o en el terreno. Una parte esencial
- técnicos en cuanto a cantidad y calidad del agua, de esta protección es la conservación de la recarga al
- económicos, tanto a pequeña como a gran escala, acuífero y, cuando convenga, su incremento estimulado
- sociales, legales, y políticos, o artificial. Los cambios de uso del territorio, tales como
- de seguidad de suministro para usos humanos, deforestación o reforestación, cambios de la agricultura,
- de atención a situaciones de emergencia y estratégi- urbanización, establecimiento de polígonos industriales,
cas, y paso de grandes vias de comunicación, pueden tener un
- de corrección continuada que respete la eficacia y la gran efecto. En los casos en que una parte importante de
equidad ante la generación presente y las futuras, la recarga procede de infiltración de aguas fluviales, in-
- de respecto a las situaciones consolidadas no abusi- tervenciones tales que cambien el regimen de las aguas y
vas o ineficaces, su turbidez, o que supongan encauzamiento y explota-
- de compensación por daños y cargas no generales o ción de áridos o que mantengan un flujo unidireccional
desproporcionadas, entre el rio y el acuífero, también tienen con frecuencia
- de predictibilidad, de forma que sea posible prever la un gran efecto, que hay que evitar, corregir o compensar.
forma de amortizar obras e inversiones, atraer em- Todo esto afecta profundamente a la utilización racional
pleo estable y evitar crispaciones sociales. de las aguas subterráneas.

La protección de la cantidad se realiza mediante la


6.- LA PROTECCIÓN DE LOS ACUÍFEROS COMO delimitación de polígonos en los cuales se aplican res-
ELEMENTO DEL USO RACIONAL DE LAS AGUAS tricciones y prohibiciones en cuanto a las extracciones y
SUBTERRÁNEAS sus condiciones, y a la construcción de nuevas captacio-
nes. Las restricciones y prohibiciones que tratan de man-
6.1.- Aspectos generales tener los caudales con tramos de rios o manantiales que
ya tienen cierto uso no suelen conducir a un uso racional
La protección de acuíferos incluye todo el conjunto del recurso agua. La protección de la cantidad no es algo
de actividades y disposiciones cuyo objetivo es conser- estático, sino que requiere un ajuste periodico a la evolu-
var tanto la cantidad como la calidad del recurso agua. ción de la explotación, de la recarga y de las actividades
En buena parte de los países industrializados, que con que afectan al balance hídrico. Por ello la confictividad
frecuencia coinciden con áreas templadas con relativa- asociada puede ser grande y son relativamente frecuen-
mente elevada lluvia útil, se suele sobreentender que la tes las situaciones de utilización no racional
protección hace referencia a la calidad y más en concre-
to a subtancias o propiedades que pueden ser nocivas a la En ciertos caso la delimitación de áreas de protección
salud. En cambio, en áreas en vias de desarrollo suele de aguas subterráneas pretende conservar acuíferos para
predominar el concepto de cantidad, es decir, que sea po- usos futuros, en general para obtener de ellos agua pota-
sible obtener los caudales deseados, en el lugar y mo- ble, limitando o prohibiendo el uso actual. En el mo-
mento oportunos. No obstante, los aspectos de calidad se mento de iniciarse la explotación, si ésta no se limita a
van poniendo de relieve ante la aparición de grandes captar las salidas naturales según su régimen, y pretende
concentraciones urbanas, pobremente saneadas, donde una explotación con captaciones profundas, se produci-
los efectos sobre la salud son notorios y multiplicativos, rán cambios, con lo que el estado preservado no se podrá
ya mantener, ni en cuanto al propio acuífero ni en cuan- de una determinada normativa. Eso no quiere decir dife-
to a los sistemas asociados. Tal puede suceder con la cre- rentes grados de protección de los acuíferos sino que, pa-
ación de parques naturales para proteger reservas de ra llegar a un mismo grado de protección de los recursos
agua para el futuro; la conservación del propio parque de agua subterránea, es preciso aplicar restricciones con
puede luego impedir o limitar el uso de esos recursos. diferente intensidad.

En planificaciones a corto y medio plazo, para evitar


6.3.- Protección de la calidad de los acuíferos perder acuíferos de valor presente o futuro para el abas-
tecimiento humano, cuando las acciones de protección a
Cada día aparecen más ejemplos de acuíferos salini- nivel general se preven de aplicación poco eficaz, cabe
zados, o contaminados por nitratos agrícolas y residuos considerar protecciones especiales. Estas pueden - y sue-
industriales, y más recientemente por plaguicidas diver- len - consistir en introducir restricciones a las actividades
sos. Las fuentes difusas, como la agricultura y las gran- humanas en determinadas áreas territoriales, y para ello
des áreas urbanas, de efectos más diferidos, son actual- se recurre a figuras tales como parques naturales, zonas
mente una de las causas más serias y preocupantes de la de reserva de la biofera, y otras, que en lo posible ade-
contaminación creciente de los acuíferos. La difícil ob- más cumplan otros objetivos.
servación del suelo y la zona no saturada y la falta gene-
ralizada de datos ha creado durante cierto tiempo una fal-
sa sensación de seguridad, que hoy queda claro que no es 6.4.- Perímetros de protección de las captaciones
real. Además el problema de la contaminación de las
aguas subterráneas no se limita a los acuíferos, sino que Tras una polución conocida o velada, la población
a medio o largo plazo repercute también en el resto del puede sufrir temporalmente el suministro de aguas de ca-
ciclo hidrológico, como en los rios y manantiales y tam- lidad inadecuada hasta el momento en que se detecta el
bién en las zonas húmedas y tramos de costa en los que problema o quedar sometida a restricciones de servicio,
descargan los acuiferos afectados. lo cual es indeseable para un país desarrollado, y no so-
lo por lo que representa en pérdida de calidad de vida -
La protección de la calidad del agua subterránea a ni- sino también cuanto a costes asociados. A este respecto,
vel de acuífero se basa en especial en la prevención de las captaciones de agua subterránea son fuentes de sumi-
aquellas acciones humanas con capacidad para producir nistro de agua potable de calidad estable y poco someti-
su contaminación, tanto por cambios hidrodinámicos co- das a afecciones por fallos tecnológicos, que requiere es-
mo por la presencia en el territorio de substancias y acti- pecial protección. Además, la pérdida temporal o defini-
vidades contamiriantes. Esto incluye normas generales tiva de una captación supone una pérdida de una
para la producción, distribución, almacenamiento, trans- infrastructura hidráulica y sus obras asociadas, la necesi-
formación y vertido de la gran diversividad de contami- dad de nuevas obras substitutorias y con frecuencia la
nantes existentes o que se puedan producir en el futuro, puesta a disposición de un recurso de agua más costoso
con reglamentos y guías para la actuación en caso de ac- y no en pocas ocasiones conflictivo. Por eso la protec-
cidente. También incluye el desarrollo de nuevas subs- ción de captaciones es además un objetivo económico y
tancias y procesos menos agresivos a las aguas subterrá- social importante. La conservación de inversiones per-
neas. Esta normativa incluye el uso de agroquímicos, de mite destinar los nuevos recursos económicos a otras ne-
estiercoles, de fangos de depuración y de vertidos a la at- cesidades de desarrollo, de bienestar y de creación de
mósfera que se puedan incorporar al agua subterránea oportunidades de empleo.
mediante la lluviai. También incluye a aquellas acciones
que alteren las características y espesor del suelo, o que La protección se hace mediante restricciones al uso
acerquen la superficie del terreno al nivel freático, o de del territorio y a actividades que supongan un riesgo de
perforación para cualquier fin. contaminación. Normalmente se imponen grandes res-
tricciones en las inmediaciones de la captación, y se van
Puesto que no es posible eliminar absolutamente el relajando al aumentar la distancia. Las limitaciones y la
manejo de substancias potencialmente contaminantes, zonificación varian de un pais a otro (Lallemand-Barrés
los mapas de vulnerabilidad a la polución de los acuífe- y Roux, 1989; Matthess et al., 1985; EPA, 1987; IGME,
ros - en especial los que se refieren a grupos de contarni- 1991; van Waegeningh, 1981) y los criterios son también
nantes específicos - son una ayuda a la ordenación terri- variables, pero hay un denominador comun que se puede
torial y a la forma de aplicar las restricciones derivadas resumir en la delimitación de las siguientes dreas:
1
Zona Inmediata: 10 a 20 m alrededor de la captación, la legislación y normativa al respecto. Es algo que en ge-
propiedad del explotador, cerrada y controlada; se exclu- neral va más allá de la esfera de competencia de los or-
1
ye cualquier actividad, almacenamiento, manipulación o ganismos de gestión del agua. En principio puede condi-
aplicación peligrosa. cionar actividades agrícolas, ganaderas, forestales, indus-
triales, mineras, de transporte (carreteras, ferrocarriles,
Zona Próxima: preferentemente para la protección canales de navegación), urbanas y de prospección y pe-
bacteriológica. El límite externo se suele fijar para un netración del subsuelo.
tiempo de tránsito del agua desde la superficie del terre-
no a la captación superior a un cierto valor, que suele va-
riar entre 50 y 100 días. Según el terreno, espesor no sa- 6.5.- Protección de los acuíferos costeros
turado y caudal de captación puede traducirse en distan-
cias de O a 300 m si bien es frecuente que se establezcan Buena parte de los problemas qile afectan a los acuí-
distancias mínimas a respetar, según se trate de un acuí- feros costeros son de gestión, es decir, de dónde, cómo y
fero libre o de un acuífero cautivo, y según la garantia de cuándo se realizan las extracciones, y qué cantidades se
construcción de la captación. Se toleran solo actividades extraen. La mala o ineficiente gestión puede fácilmente
no contaminantes, solo ciertos almacenamientos en con- llevar a una salinización por:
diciones bien controlables, y en general un paso restrin-
gido de personas y vehículos. - Extracción excesiva con respecto a la recarga del
acuífero.
Zona Lejana: en general hasta límites naturales (divi- - Captaciones demasiado próximas al litoral.
sorias de aguas) o suficientemente alejados como para - Pozos con explotación a caudal excesivamente alto.
conseguir tiempos de tránsito de al menos alguna decena - Pozos excesivamente cercanos unos a otros.
de años. Su extensión y forma es muy variable, pero es - Mala construcción e inadecuado proyecto de la cap-
corriente que alcance desde varios centenares de metros tación.
hasta más de 1 km en acuíferos libres, y puede ser ine-
xistente para acuíferos cautivos con performaciones do- En general muchos de los acuíferos costeros con pro-
tadas de buen aislamientos. En ella se aplican restriccio- blemas de salinización no disponen de ningún plan de
nes de uso del territorio en cuanto a ocupación industrial explotación ni de prevención de la contaminación mari-
o urbana o a determinadas prácticas agrícolas, y a la exis- na. La explotación suele ser el resultado de acciones ais-
tencia, diseño y conservación de vias de comunicación. ladas que no consideran los recursos explotables y me-
Sin son extensiones grandes, a veces se divide en dos nos aún el uso sostenible del acuífero.
partes, para graduar las restricciones.
El insuficiente conocimiento de la dinámica de los
Es evidente que además de la protección territorial, la acuíferos costeros hace que en ocasiones se trate de con-
captación deba estar construida de modo que se evite la seguir la protección o la corrección con medios inade-
penetración de contaminantes. cuados o desproporcionados, en base a concepciones no
realistas o por intento de imitación de actuaciones en
El concepto de área de protección de una captación otros lugares. Cada acuífero tiene su propia dinámica de
de agua subterránea destinada al consumo humano es in- acuerdo con sus peculiaridades geológicas e hidrogeoló-
tuitivamente claro y es fácil convencer de su necesidad. gicas, unidas a una forma de explotación y a actividades
Sin embargo, su definición territorial es más difícil, no es económicas y socio-legales ya establecidas, dentro de un
sencillo establecer aquellas restricciones que sean razo- determinado contexto poblacional. Difícilmente hay en
nables, y es mucho más arduo su implantación eficaz. La el mundo dos situaciones asimilables. Además, la ges-
existencia de límites territoriales con restricciones distin- tión, conservación y protección son dinámicas y hay que
tas a un lado y otro es objeto de conflictividad, así como prever los mecanismos de adaptación y corrección nece-
su trazado real, y aún más su modificación. Además, la sarios. La realidad de la explotación de acuíferos coste-
imposición de perímetros de protección afecta al valor de ros la frecuenta la utilización y distribución de aguas sa-
mercado de los terrenos afectados. lobres o saladas.

Así, el establecimiento de perímetros de protección El agua salobre o salina puede ser una fuente de agua
de captaciones supone una importante intervención en la si lo que se demanda es agua para desalinizar o simple-
ordenación territorial y por lo tanto debe coordinarse con mente agua de temperatura poco variable, como por
ejemplo para refrigeración. La captación de aguas subte- - dificulta o anula la posibilidad de reutilizar las aguas
rráneas de salinidlad similar a la del mar, que no es una si- residuales tratadas cuando el agua salinizada extraida
tuación frecuente (fig. 6), puede proporcionar un agua de va a parar al sistema de alcantarillado
características ccinstantes que puede ser una alternativa - puede afectar a la producción agrícola y afectar ne-
para la creación de acuicultivos de especies marinas. No gativamente al suelo
obstante, no es raro que estas aguas resulten anóxicas, con - puede ser una causa de salinización del acuífero sub-

presencia de amonio y otros iones metálicos tóxicos a la yacente, bien sea por la existencia de fugas en con-
vida, y por lo tanto que se requiera cierto tratamiento. ducciones de distribución de retorno al mar o de
transporte, o por originar excedentes de riego muy
La explotación de captaciones salinizadas reduce el salinos que se infiltran.
potencial del agua salina en el acuífero y por lo tanto su
penetración en el1 mismo, aún en situaciones de niveles Salvo en las situaciones aludidas, la explotación ra-
de agua dulce bajo el nivel del mar. Este es un efecto be- cional de los acuíferos costeros una necesidad, no solo
neficioso para el acuífero, de carácter temporal, y siem- porque el suministro de agua salobre o salada es sanitaria,
pre y cuando el agua salinizada extraida tenga algún uso económica y socialmente inaceptable, sino también por-
no nocivo, como la refrigeración. Es una interesante me- que los acuíferos costeros son depósitos naturales ya exis-
dio de gestión y protección si se utiliza racionalmente. tentes, situados en lugares donde poner a disposición otros
Pero la extracción de aguas salinas tiene una serie de in- medios de almacenamiento es muy caro o difícil por cues-
convenientes impiortantes: tiones de relieve y grado de ocupación del territorio. Es-

-..JL-superficie freática ! extraccidn -,lhea de flujo


--- nivel medio del mar recarga -- 30 - - - porcentaje de agua de mar

Figura 6.- Situación cle mezcla de agua dulce-agua salada en un acuifero costero muy permeable sometido a explotación intensa en áreas algo aleja-
das de la costa. El agua captada en parte es del interior continental y en parte agua manna que llega conjuntamente con la recarga de agua dulce en la
franja costera. Esto explica la gran variabilidad de salinidad de un pozo a otro, los cambios con la explotación y por qué no se llega a extraer ni agua
dulce ni agua marina. Situación inspirada en el área de Calafell, en la costa del Garraf (Tarragona).

Figure 6.- Mixing of f ~ e s hand saltwater in a highly permeable coastal aquifer subjected to intense exploitation in areas far from the coast. Abstracted
water is in part inland continental water and partly manne water which arrives jointly with freshwater recharged in the coastal strip. This explains the
large variability of salinity among wells, the changes observed when exploitation is modified and why wells do not yield Freshwater nor manne water.
This is based on the behaviour of the Calafell area, at the Garraf coastal area, Tarragona.
tos acuíferos costeros son así una reserva de agua dulce guarda estrecha relación con la política fiscal de cada
para situaciones de emergencia (sequía, puntas estivales pais. Las limitaciones de derechos o costumbres o de
de demanda de agua, avenas en otros sistemas de abaste- simples situaciones de hecho deberian ser soportadas, al
cimiento), con alto valor estratégico (Custodio, 1995). menos en 6uena parte, por los propios usuarios del acuí-
fero o por el Municipio, ya que en general van en su di-
recto beneficio. Pero cuando esas limitaciones pretenden
6.6.- Protección de humedales que dependen del agua conservar caudales de base de un rio o áreas de valor
subterránea ecológico o transferir capacidad de extracción de un sec-
tor económico a otro, parece lógico que existan ciertas
Una parte importante de las zonas húmedas dependen compensaciones económicas desde el sector beneficiado
de la existencia y10 aportes de agua subterránea (Llamas, al sector perjudicado o que siente que merman sus posi-
1988a; 1988b; 1989; 1991a). No solo son de interés na- bilidades de acceso actual o futuro al recurso agua. Ello
turalístico sino económico inmediato, ya que son una supone una evaluación objetiva de ese perjuicio, tras de-
fuente de riqueza. Su protección es una actividad impor- purar situaciones evaluables de abusivas.
tante dentro de la conservación del medio ambiente, que
requiere a su vez la protección de los acuíferos con los La confiictividad y complejidad que puede conllevar
que guardan relación y su utilización racional. El agua la puesta en práctica parece aconsejar que el marco de
necesaria para conservar un humedal es una demanda de solución más adecuado sea la constitución de Comuni-
agua más del sistema acuífero, con la diferencia de que dades de Usuarios de Aguas (del acuífero, o del conjun-
el que ese agua esté disponible depende de que la distri- to de recursos de agua), también denominadas en Cali-
bución natural de potenciales hidráulicos no se altere o fornia Distritos de Aguas. Estas Comunidades de Usua-
se altere poco. Las captaciones de agua subterránea cam- rios estan definidas en la Ley de Aguas española de 1985
bian esa distribución y pueden producir notables afec- y en sus Reglamentos, y se han formado ya varias (AIH-
ciones, si bien el efecto puede pasar desapercibido du- GE, 1995), pero aún hay poca experiencia de funciona-
rante años debido a la lenta respuesta de los acuíferos y miento.
de la vegetación.
La protección general del agua subterránea como línea
La protección de humedales comporta la preserva- general de actuación, afecta al conjunto de una unidad po-
ción del acuífero tributario para mantener razonablemen- lítica y por lo tanto no parece que sea objeto de compen-
te la cantidad y niveles del agua. Es algo que se debe de- saciones por supuestos perjuicios, aunque no se excluye la
finir como un compromiso entre la atención a las de- conveniencia transitoria de ayudas y subvenciones a sec-
mandas humanas, la reducción ecológicamente tolerable tores economicamente débiles o de gran impacto social,
y el mantenimiento de la calidad. Los efectos de las ex- para acelerar la implementación de las normas.
tracciones y las alteraciones pueden aparecer diferidos
años o décadas, y establecerse muy lentamente, de forma Las limitaciones de uso de agroquímicos en agncul-
aparentemente imperceptible en observaciones en cortos tura tiene dos vertientes. Una es el correcto uso en cuan-
lapsos de tiempo. Ello obliga a restricciones serias en el to a tipo de producto, dosis, momento y forma de aplica-
uso del territorio y a adoptar medidas extraordinarias en ción. No parece que ésto sea objeto de compensación
cuanto a posibles asentarnientos humanos y agrícolas e económica, salvo ayudas o incentivos para adquirir la
incluso de zonas comerciales o de estacionamiento de tecnología y práctica adecuada. Tampoco parecen com-
vehículos. pensable~las diferencias de limitaciones o de exigencias
de un área a otra en función de cambios en el tipo de sue-
lo y de vulnerabilidad y riesgo de contaminación del
6.7.- Aspectos económicos y sociales de la protección acuífero. Pero si se imponen restricciones en la aplica-
de acuíferos ción de agroquímicos mas allá de lo que es una buena
práctica agrícola, sí que parece que debe ser objeto de
La aplicación de la normativa de protección de acuí- compensación económica por parte de los que se benefi-
feros supone la imposición de obligaciones y la aplica- cian de esa protección. La compensación puede medirse
ción de servidumbres y restricciones al uso del territorio, como pérdida de producción.
además de actuaciones de carácter general. Todo ello
conlleva costes, tanto de primera instalación como de Si se establecen áreas de reserva de aguas subterrá-
mantenimiento. La forma de cubrirlos es muy diversa y neas, su coste debe sufragarse a cargo de los futuros be-
neficiarios, los cuales deben compensar a los habitantes no se basa en un proyecto que integre los diferentes ele-
y entidades con (derechosobjetivos de explotación, tanto mentos de forma racional y que produzca el mayor be-
del agua como del territorio, de las pérdidas reales que nefico económico y social con el mínimo daño ambien-
puedan sufrir a causa de limitaciones presentes o pérdi- tal y dando el servicio adecuado.
das de expectativas. La compensación deberia tener lu-
gar siempre que (conla actuación prevista se produzca un La conservación y utilización racional de los acuífe-
daño desproporcionado. ros en buena parte depende del correcto conocimiento de
su valor y de su acertada incorporación en la definición
La creación de áreas de protección especial de acuí- y estudio de alternativas de aprovechamiento de recursos
feros y de áreas de protección de captaciones contiene de agua. Esto requiere educación popular, información
aspectos claros dle compensación económica. Está claro asequible y veraz, y ética ciudadana, profesional, admi-
que el área inmediata a una captación debe ser adquirida nistrativa y política, y la adecuada cooperación de los
y equipada por el propietario de la captación. Las limita- medios de información de masas.
ciones y prohibiciones en las otras áreas que no sean de
carácter general deben ser compensadas equitativamen-
te. Parece lógico que el coste sea cargado, al menos en 7.- Explotación intensiva y sobreexplotación de acuí-
parte, a los usuarios del agua de la captación o del acuí- feros
fero como un sobreprecio o una tasa adicional. No obs-
tante, también se puede financiar a partir de otras tasas El mundo es finito y la demanda de agua de adecua-
que graven el agua puesta a disposición. Sin embargo, da calidad es creciente. De ahí viene la constatación - en
unas limitaciones particulares que creen diferencias con general exagerada, mal documentada, tendenciosa y sen-
otras partes del territorio en donde no sean necesarias, sacionalista - y la generalización de problemas derivados
pueden ser también compensadas con una tasación gene- de la explotación de aguas subterráneas, tales como gran-
ral sobre la actividad en cuestión y su aplicación a las si- des descensos de niveles, agotamiento de reservas y sali-
tuaciones particulares, o bien proceder de la recaudación nización. Esto levanta reacciones neomaltusianas que
general de impuestos destinados a compensaciones. auguran un futuro de penuria y degradación sin aportar
más soluciones que ahogar el desarrollo y angustiar a la
Sin embargo, i.a puesta en marcha eficaz de cualquier población, imponiendo restricciones injustificadas. En
política de protección requiere al mismo tiempo la repa- este contexto aparece el borroso concepto de sobreex-
ración y restauración de lo ya dañado. En general el cau- plotación de acuíferos y sus variantes.
sante de la contaminación debe pagar el coste de la lim-
pieza. En la realidad, cuando éste no tiene capacidad La naturaleza es un conjunto de equilibrios y de evo-
económica o es desconocido, debe abordarse con fondos luciones fuera del control humano (por ejemplo como re-
públicos. Estos daños pueden ser importantes en áreas sultado de cambios climáticos, tectónicos y geomorfoló-
industrializadas y periurbanas. A menudo se requieren gicos) y la intervención del hombre los perturbaba de
grandes sumas de dinero para abordar el estudio, desa- una u otra manera y con intensidad diferente según las
rrollo de metodología de limpieza, intervención, descon- circunstancias. Esa perturbación se produce para obtener
taminación y restauración, que pueden fácilmente reba- un beneficio y como respuesta se obtiene un cambio que
sar las posibilidadles económicas a medio plazo de una implica unos costes. No obstante sucede con frecuencia
región o pais. que los que obtienen el beneficio no son aquellos que so-
portan el coste, y ello puede ser una causa de conflictivi-
Parte de la frecuente desidia en la protección de los dad que dificulta la utilización racional de las aguas sub-
acuíferos deriva de un menosprecio de fuentes de agua terráneas.
que resultan poco espectaculares, o cuya gestión requie-
re una cierta habilidad de la que se carece. A ello se su- Es fácil que la actuación a la que unos llamen sim-
ma la preferencia, por parte de los aparatos de la admi- plemente explotación - los que obtienen beneficio - otros
nistración y de las grandes empresas, por las grandes llamen sobreexplotación si reciben un costo no compen-
obras, espectaculares y con notables inversiones econó- sado. De ahí la enorme dificultad para definir lo que es
micas (Llamas, 19iB4; 1994b; 1995). Aunque en muchos sobreexplotación, o lo que son efectos indeseables en ca-
casos tal preferencia puede estar técnica, económica y so de hablar de caudal seguro y otros conceptos simila-
socialmente justificada, en muchos otros no responde a res. Con definiciones simplistas difícilmente se puede
un análisis correcto de alternativas (Sahuquillo, 1994) o llegar a un resultado satisfactorio, y de ahí que aquí no se
l
intente hacerlo, sino que más bien se trate de enmarcar el lle y una buena red de observaciones potenciométricas
concepto. Ello puede también explicar en cierta manera mantenida a lo largo del tiempo.
la razón por la que la Ley de Aguas española de 1985,
que introduce el término sobreexplotación - y su compa- Es importante considerar que un continuado descen-
ñero de riesgo de salinización - y que por lo tanto los ha so de niveles indica consumo de reservas de agua del sis-
convertido en términos con contenido legal, no aporta tema acuífero, pero no necesariamente implica que las
ninguna definición clara y deja un amplio margen de po- extracciones superen a la recarga, y en muchos casos no
sibilidades en el artículo 171.2 del Reglamento del Do- la superan. La causa hay que buscarla en la larga dura-
minio Público Hidráulico, de forma similar a la defini- ción del periodo transitorio entre el. inicio de la extrac-
ción de caudal seguro. ción y la llegada a un nuevo estado de equilibrio. En las
circunstancias más frecuentes puede variar entre pocos
Es una idea frecuente entre muchos hidrólogos y ges- años y decenas de años, pero en ocasiones puede mucho
tores del agua - en buena parte basada en una extrapola- más largo (fig. 7).
ción simplista de la hidráulica de embalses y depósitos a
los acuíferos - que la sobreexplotación se produce cuan- Más importante que el propio balance hídrico es la
do se extrae más de lo que entra o se recarga, y ello sin evaluación de los efectos de la expotación, incluyendo
considerar aspectos de calidad. Esta podna ser una so- los derivados de la profundización de los niveles del
breexplotación en sentido estricto, que es la que se hace agua, los químicos y los económicos. Pero también de-
en algunas zonas áridas, pero que no responde a la ma- ben considerarse los numerosos e importantes beneficios
yoria de situaciones en las que se aprecia efectos "nega- derivados del uso del agua subterránea, sobre todo en
tivos", sin conocer bien su dinámica. cuanto a magnitudes y progresividad de las inversiones
económicas, crecimiento acompasado de la demanda y la
Como ya se expuso anteriormente, la explotación de oferta de aguas, y menores problemas de calidad, al me-
todo acuífero que no sea la simple captación de sus sali- nos inicialmente.
das naturales, comporta una perturbación potenciométri-
ca para movilizar el agua subterránea hacia las captacio- La designación sobreexplotación en general pone én-
nes artificiales. Cuando el caudal de agua captada es me- fasis en los aspectos negativos y propende a prohibicio-
nor que la recarga que recibe el acuífero se acaba nes, cohartaciones e intervencionismo. Esto y la falta de
alcanzando un nuevo equilibrio en el sistema de agua definición clara hacen aconsejable que se abandone su
subterránea, de modo que el caudal captado se compen- uso (Custodio y Dijon, 1991; Custodio, 1993a, 1993b;
sa, pasado cierto tiempo, con la disminución de salidas Margat, 1992). Es más realista hablar de explotación in-
naturales (manantiales, caudal de base de los rios y arro- tensiva y analizar sus circunstancias, y en el caso de ser
yos, superficie evaporante de lagos, humedales y zonas claramente excesiva en su conjunto, calificarla como tal
de vegetación freatofítica, paso a otros acuíferos), y con o como abusiva, con la definición clara de las circuns-
un aumento de la recarga (infiltración de agua fluvial o tancias en que se produce.
de lagos - o del mar -, recarga desde otros acuíferos).
Cuando las extracciones superan a la recarga se produce En cierta manera a uso sostenible del agua subterrá-
un progresivo vaciado del acuífero por consumo de re- nea se opone la sobreexplotación de los acuíferos, mine-
servas, en un proceso llamado mineria del agua, y tam- ria del agua y contaminación de los acuíferos, si bien es-
bién sobreexplotación en sentido estricto. tos conceptos no deben verse en un ámbito limitado en el
tiempo y en el espacio, ni desligado del resto de las fuen-
Pero aún siendo la recarga algo conceptualmente ele- tes de agua aptas para el uso que se pretende (Margat y
mental, su plasmación en cifras es uno de los problemas Saad, 1982). Así, agotar las reservas no renovables de un
más difíciles de la hidrogeología si se requiere exactitud, acuífero o salinizarlo - por lo tanto substrayendo su agua
aunque no suele ser más dificil que evaluar las aporta- y uso a generaciones futuras - puede que sea aceptable
ciones temporales de un río, a igual precisión en las ci- como utilización racional si con los beneficios que se va-
fras. Es necesario considerar la variación espacial y tem- yan a obtener es posible crear riqueza y bienestar perma-
poral de la precipitación y de la evapotranspiración, de nentes, y con ellos se puede poner a disposición otras
los posibles aportes de aguas superficiales, del estado del fuentes de agua hasta aquel momento inasequibles, tales
suelo y de la cobertura vegetal y de la actividad humana como la traida de aguas superficiales o subterráneas des-
en el territorio, además de posibles acciones de recarga de lugares alejado's, o la extracción desde mayores pro-
artificial. El conocimiento se afina con estudios de deta- fundidades, o incluso mediante actuaciones complemen-
Tamaño del acuífero , km

Figura 7.- Tiempo en años (t) para que los descensos en un acuifero se estabilicen después de un cambio brusco en las condiciones de recarga-des-
carga en función del tzimaño (L, en km), la transmisividad (T, m2ldia) y el coeficiente de almacenamiento (S). t=ctL2S/T, en que cE un coeficiente de
proporcionalidad que, con un margen estrecho, depende de cada situación particular (según Custodio, 1993a; Custodio y Dijon, 1991).

Figure 7.- Time (t) in years to attain the steady state of groundwater head after a sudden change in the recharge-discharge contidions, as a function of
size (L, km), transmissivity (T, m2lday) and storage coefficient (S). t=aL2S/T, in which cX is a proporcionality coefficient varying in a narrow range
according with each particular situation (after Custodio, 1993a; Custodio and Dijon, 1991).
tarias más complejas, abordables por una sociedad eco- BEAR, J. (1979). Hydraulics of groundwater. McGraw-Hill: 1-589.
1
nómicamente mejor dotada, como la desalinización, reu- CARBONELL, A.J. (1993). Ground water vulnerability assessment:
predicting relative contamination potential under conditions of uncer-
tilización o el incremento de la regulación subterránea tainty. National Research Council. h'ational Academy Press, Washing-
por recarga artificial. ton D.C.: 1-204.
1
CIVITA, M. (1994). Le carte della vulnerabilith degli aquiferi all'in-
quinamento. Quademi di Techniche di Protezione Ambietttale 31. Pita-
La experiencia muestra que no se han cumplido los gore Editrice. Bologna: 1-325.
malos augurios sobre ciertos acuíferos (Llamas, 1992; CUSTODIO, E. (1986). Recarga artificial de acuíferos. Boletín de Zn-
Margat, 1992; Custodio y Dijon, 1992) - salvo en situa- formación y Estudios 45. Servicio Geológico del Ministerio de Obras
Públicas y Urbanismo. Madrid: 1-149.
ciones locales afectando a colectivos limitados y absor-
CUSTODIO, E. (1989). Strict aquifer control rules versus unrestricted
bibles por el conjunto - pero eso tampoco lleva a adoptar groundwarer exploiration: commenrs on economic consequerices.
la postura contraria, de que el recurso agua está disponi- Groundwater Economics. Elsevier, Developments in Water Science,
39: 381-395.
ble sin más, ilimitadamente en cantidad y calidad, supo-
niendo que el progreso técnico irá solucionando los pro- CUSTODIO, E. (1993a). Hydrogeological and hydrochemical aspects
of aquifer overexploitation. Selected Papers on Hydrogeology. Intern.
blemas a medida que aparezcan (Foster, 1991). Se trata Assoc. Hydrogeologists. Heise, 3: 3-27.
de posiciones extremas clásicas (Tiemey, 1990). El que CUSTODIO, E. (1993b). 1s groundwater overexploitation a new hy-
no se produzcan situaciones catastróficas reales es el fru- drogeological concept?. ZGEA, Rev. Sez. Ital. Acque Sotterranee, As-
soc. Minerana Subalpina. Torino, 2: 5-14.
to de un análsis desapasionado de las situaciones con su-
CUSTODIO, E. (1993~).Protección de los acuqeros y su correcta ex-
ficiente anticipación como para reconocer los problemas plotación: perímetros de protección. La Economia del Agua. Sociedad
y atraer recursos humanos y económicos para abordarlos. General de Aguas de Barcelona. Barcelona: 69-105.
Sin embargo esta postura se muestra poco atractiva, po- CUSTODIO, E. (1994). 1: Procesos de contaminación del agua en la
zona saturada, 11: Contaminación de las aguas subterráneas inducida
pular y políticamente. por la explotación, 111: Gestión yprotección de acuíferos. Temas Actua-
les de la Hidrología Subterránea. Univ. Nacional del Mar del Plata.
Argentina: 139-244.
CUSTODIO, E. (1995). La gestión de los acuíferos costeros como fuen-
AGRADECIMIENTOS te de un recurso importante y estratégico: encaje en la Ley de Aguas y
perspectivas: punto de vista del usuario. Las Aguas Subterráneas en la
Ley de Aguas Española: un Decenio de Experiencia. Asoc. Intern. de
El presente trabajo se ha preparado por la amable invitación del Dr. Hidrogeólogos-Grupo Español. Ponencias, Tomo 1: 219-252.
Jordi Serra. Su materialización se ha debido al apoyo del grupo de Hi- CUSTODIO, E. Llamas, M.R. (1983). Hidrología Subterránea. Edi-
drología Subterránea del Departamento de Ingenieria del Terreno (ET- ciones Omega, Barcelona, 2 vols: 1-2350.
SICCP) de la Universidad Politécnica de Cataluña y del Centro Inter- CUSTODIO, E. Bruggeman, G.A. (1987). Sea water problems in coastal
areas. Studies and Reports in Hydrology 45. UNESCO Press. París: 1-596.
nacional de Hidrología Subterránea. Se han utilizado datos y medios de
los proyectos Doñana de la CICYT (AMB 92-636) y GRACE de la CUSTODIO, E. Dijon, R. (1991). Groundwater overexploitation in de-
veloping countries: report of an Znterregional Workshop, Gran Cana-
CEE, que guardan relación con la temática. Las ideas expresadas son ria, Canary Islands, Spain. U.N. Dept. of Technical Cooperation for
las del autor y no tienen por que coincidir con las de los organismos Development. New York, 1992: 1-116.
mencionados. DAVIS, S.N.; de Wiest, R.J.M. (1965). Hydrogeology. Wiley: 1-463.
DE MARSILY, G. (1986). Quantitative hydrogeology. Academic Pres:
1-440.
DOMENICO, P.A. (1972). Concepts and models in groundwater hy-
drology. McGraw-Hill.
REFERENCIAS
DUIJVENBOODEN, W. VAN; WAEGENINGH, H.G. VAN (1987).
ADAMS, B.; FOSTER, S.S.D. (1992). Land-surface zoning for Vulnerability of soil and groundwater to pollutants. TNOíRIVM, Pro-
groundwater protection. J. Znst. Water & Environmental Management. ceedings and Information, 38. The Hague: 1-1143.
1 London. 6(3): 312-321. EPA (1987). Guidelines for delineation of wellhead protection areas.
AIH-GE (1995). Las aguas subterráneas en la Ley de Aguas Españo- U.S. Environmental Protection Agency, Ada, OK.
la: un Decenio de Experiencia. Asoc. Intern. de Hidrogeólogos-Grupo FALKLAND, A.; CUSTODIO, E. (1991). Hydrology and water re-
Español. 1: 1-384. sources of small islands: a practica1 guide. Studies and Reports in Hy-
I
ALBINET, M.; MARGAT, J. (1970) Cartographie de la vulnerabilité drology, 49. UNESCO Press. París: 1-435.
la pollution des nappes d'eau souterraine. Bull. BRGM, 2eme Serie, FOSTER, S.S.D. (1987). Fundamental concepts in aquifer vulnerabi-
3(4): 13-22. lity, pollution risk and protection strategy. Vulnerability of Soil and
ALLER, L.; BENNET, T.; LEHR, J.H.; PETTY, R.J.; HACKETT, G. Groundwater to Pollutants. TNOIRIVM, Proceedings and Information
(1987). DRASTIC, a standardized system for evaluating groundwater 38, The Hague: 69-86.
pollution potential using hydrogeologic setting. U.S. Environmental FOSTER, S.S. (1991). Unsustainable development and irrational ex-
Protection Agency, Ada, OK. EPA Report 60012-87-035: 1-455. ploitation of groundwater resources in developing nations: an overiew.
ANDREU, J. (1993). Conceptos y métodos para la planificación hidro- Aquifer Overexploitation. XXIII Congress Intem. Assoc. Hydrogeolo-
l lógica. CZMNE. Barcelona: 1--39 1. gists. Puerto de la Cruz. 1: 385-402.

ASCE (1972). Ground water basin management. Manuals and Reports FOSTER, S.S..D.; HIRATA, R. (1991). Groundwaterpollution risk as-
on Engineering Practice no 40. Am. Soc. Civil Engineers. Washington. sessment: a methodology using available data. WHO-PAHOICEPIS.
Lima, Perú: 1-78.
FREEZE, R.A.; CHERRY, J.A. (1979). Groundwater. Prentice-Hall: nes. Intem. Contributions to Hydrogeology, 6. Intem. Assoc. Hydro-
1-604. geologists. Heise: 1-204.
IGME (1991). Guía metodológica para la elaboración de perímetros MEINZER, O.E. (1920). Quantitative methods of estimating ground-
de protección de captaciones de aguas subterráneas. Instituto Tecno- water supplies. Bull. Geological Society ofdmerica, 31: 329-338.
lógico Geominero di: España. Madrid: 1-289.
IRIBAR, V. (1992). Evolución hidrogeoquímica e isotópica de los PÉREz ADÁN, J. (1992). El pensamiento ecoló lógico" de Juan Pablo
acuqeros del Baix Llobregat. Tesis Doctoral. Universidad de Barcelo- II. Estudios sobre la Encíclica "Centesimus Annus". Aedos-Unión
na. Editorial. Madrid: 333-350.
LALLEMAND-BARRÉS, A,; ROUX, J.C. (1989). Guide méthodolo- QUERCIA, F. (1983). Summary review of available models forground-
gique d'établissemenst des périmetres de protection des captages d'eau waterflow and contaminar migration. UNESCO-IHP. París. Technical
souterraine destinée la consommation humaine. Manuels & Métho- Documents in Hydrology. París: 1-58.
des 19, Editions du BRGM. Paris--0rléans: 1-221.
SAHUQUILLO, A. (1983). Utilización conjunta de aguas superficia-
LLAMAS, M.R. (1984). Política hidráulica y génesis de mitos hidráu- les y subterráneas. Servicio Geológico de Obras Públicas. Madrid.
licos en España. Cimbra, Madrid, 218: 16-25.
LLAMAS, M.R. (1988a). Conflicts hetween wetland conservation and SAHUQUILLO, A. (1990). El método de los antrovalores en el análi-
groundwater exploitation: two case histories in Spain. Environ. Geol., sis de los aculjCeros cársticos. Livro de Homenagen a Carlos Romariz.
ll(3): 241-251. Seqcao de Geologia Económica e Aplicada. Lisboa: 200--229.
LLAMAS, M.R. (1988b). El agua subterránea como recurso económi- SAHUQUILLO, A. (1994). El tratamiento de las aguas subterráneas en
co-ecológico y como factor geológico. Real Academia de Ciencias el Plan Hidrológico Nacional. Revista de Obras Públicas, enero 1994:
Exactas, Físicas y Naturales. Madrid: 1-43. 41-54.
LLAMAS, M.R. (1989). Wetlands and groundwater: new constraints SAHUQUILLO, A.; ANDREU, J. (1987). The eigenvalue approach
in groundwater management. Groundwater management: quantity and solving linear groundwater flow problems. Groundwater Flow and
quality. Iptem. Assoc:. Scientific Hydrology, Publ. 188: 595-604.
Quality Modelling. LNEC. Lisboa. NATO AS1 Series C. 224, Reidel:
LLAMAS, M.R. (1991a). Groundwater exploitation and conservation 151-164.
of aquatic ecosystems. Aquifer Overexploitation. XXIII Congress In-
tem. Assoc. Hydrogeologists, Puerto de la Cruz, 1: 115-132. SAHUQUILLO, A.; ANDREU, J.; O'DONNELL, T. (1989). Groun-
water management: quantity and quality. Inter. Assoc. Scientific Hy-
LLAMAS, M.R. (1991b). Consideraciones iniciales sobre el pasado, drology, Publ. 188: 1-633.
presente y futuro de las aguas subterráneas en Espana. Revista de
Obras Públicas. Madlrid. Dic. 1991: 7-12. TIERNEY, J. (1990). Betting the planet. The New York Titnes Magazi-
LLAMAS, M.R. (1992). La sobreexplotación de aguas subterráneas en ne, Dec. 2: 53-54, 76-81.
España: bendición, maldición o mito. Riegos y Drenajes. Barcelona,
61: 17-33. TODD, D.K. (1976). Groundwater Hydrology. 2a Ed. Wiley & Sons:
1-535.
LLAMAS, M.R. (1994a). El Plan Hidrológico y las aguas subterráneas:
otro punto de vista. Revista de Obras Públicas. Marzo 1994: 13-26. VOLKER, A,; HENRY, J.C. (1988). Side effects of water resources tna-
nagement. Intem. Assoc. Scientific Hydrology. Publ. 172: 1-269.
LLAMAS, M.R. (1994b). La crisis del agua: ?'mito o realidad?. Hi-
drogeología. Granada. 10: 31-39. VRBA, J. (1991). Mapping o f groundwater vulnerability: working pa-
LLAMAS, M.R. (1995). Las aguas subterrúneas en España. El Cam- per. IAH Groundwater Protection Commission Meeting, Tampa, Fda.
po. Servicio de Estudios BBV, Bilbao: 129-147. UNESCO-Intem. Hydrological Programme IV, Project M-1.2 (a).
MARGAT, J. (1992). The overexploitation of aquifers. Selected Papers WCED (1987). Our common future. World Commission on Environ-
on Aquifer Overexploitation. Selected Papers on Hydrogeology. Intern. ment and Development. Oxford Univ. Press, Oxford, UK.
Assoc. Hydrogeologists. Heise. 3(1992): 29-40.
WAEGENINGH, H.G. VAN (1981). A proposal for the dimensions of
MARGAT, J. (1992). Que1 est le concept de suexploitation utile i la orotection areas. Oualitv of Groundwater. Studies in Envionmental
gestion des eaux souterraines?. Hydrogéologie. París-Orleáns,
4(1992): 145-152.
MARGAT, J.; SAADl, K.F. (1982). Utilisation des resources fossiles: WALTON, W.C. (1970). Groundwater resources evaluation. McGraw-
analyse de cas historiques. Hydrogéologie-Géologie de l'lngenieuc Hill: 1-664.
Sect. 111, (3/4): 289-304. YOUNG, R.A. (1970). Safe yield of aquifers: an economic reformula-
MATTHESS, G.; FOSTER, S.S.D.; SKINNER, A. (1985). Theoretical tion. J. Irrigation and Drainage Division. Am. Soc. Civil Engineers,
background, hydrogeology and practice of groundwater protection zo- IR 4: 377-385.

You might also like