Professional Documents
Culture Documents
1. TERMINOLOGÍA:
El término “bulliing”, que procede del inglés, sabemos que tiene el mismo
origen que el término “mobbing” salvo que este último es un tecnicismo y el
otro se usa habitualmente hablado con el sentido de “acoso”. La palabra
“bulliing” pese a que se piense así, no procede del término inglés “bull” (toro)
sino del vocablo holandés “boel” que significa “amante” pero en un sentido
peyorativo ya que se aplicaba a los proxenetas.
2. DEFINICION
Bulling o Bulla, es el maltrato, intimidación u hostigamiento físico y/o
psicológico entre pares (compañeros) infantiles y/o juveniles; generalmente
inicia con un agresor, una víctima y un auditorio pasivo.
La bulla siempre ha existido, pero ahora las conductas son más graves llegan
a grados de mucho violencia, las repercusiones para la víctima son
generalmente para toda la vida.
3. NIVELES
Juan Manuel Moreno Olmedilla (1998) identifica distintos niveles o
categorías, no de violencia escolar, sino de comportamiento o conducta
antisocial. Establece seis categorías: Disrupción en las aulas: un alumno o
grupo de alumnos impiden el desarrollo normal de la clase con sus
comportamientos, lo que obliga al profesor a emplear parte del tiempo, a
controlar el orden.
5. CATEGORIAS
Las categorías que se conforman son: agresión física, agresión verbal,
exclusión social y amenaza.
A) Agresión física
La agresión o maltrato físico se refiere al acto mismo de atentar contra la
integridad física de la víctima, puede dividirse en directa cuando se refiere
a golpes y patadas o indirecta cuando la agresión va dirigida a sus
pertenencias, como robar, esconder o romper sus objetos.
B) Agresión verbal
La agresión o maltrato verbal es el tipo de agresión expresada a través
de la palabra, también puede dividirse en directa e indirecta;
generalmente se expresa por insultos, apodos, gritos, burlas crueles
acerca de indumentaria, aspecto físico, origen étnico o anomalías
visibles. En un niño la agresión verbal es más significativa que en un
adulto, porque él no tiene aún la noción clara de su personalidad y debido
a que está en búsqueda de ella, la agresión verbal puede causar
confusión entre cómo “debería ser” y cómo “es” (Voors 2005).
C) Exclusión social
La exclusión social hace referencia al acto a través del cuál la víctima es
separada del grupo en determinados aspectos —o en todos—; su división
entre directa e indirecta toma características de excluir, no permitir
participar, ignorar y menospreciar, respectivamente.
En el transcurso de la historia se ha encontrado la exclusión en diferentes
tipos de grupos humanos, desde los religiosos hasta en las
organizaciones de trabajadores, siempre cumpliendo la función de
asegurar la unidad grupal. En la escuela, el acoso escolar se usa para
castigar a quien no cumple con los criterios impuestos, generalmente, por
el líder. Este tipo de agresión es más común en las niñas que en los niños.
En la adolescencia, cuando los individuos están aprendiendo a socializar,
ser rechazado por el grupo puede resultar atroz, llevando a desestima,
depresión y el abuso de alcohol y drogas.
D) Amenaza
Es una categoría separada, aduciendo que las implicaciones psicológicas
difieren al resto debido a que la interpretación cognitiva de éstas produce
una angustia continua mientras la víctima espera que se cumpla la
amenaza. Acciones como amenazar para amedrentar, coaccionar y
chantajear, entre otros, son situaciones que caen dentro de esta
categoría.
E) Agresión grupal
Cuando la agresión se genera por dos o más niños, es considerada como
una agresión social. En nuestra sociedad es importante reconocerla por
las implicaciones que tiene.
6. CRITERIOS
Criterios que distinguen y caracterizan el acoso escolar El acoso escolar es
un tipo específico de violencia escolar, que se caracteriza por:
a. La existencia de una o más conductas de hostigamiento para causar un
daño intencionado. El agresor/a actúa con deseo e intención de dominar y
de ejercer poder sobre otro/a.
j. Por lo general, el acoso parece ocurrir sin provocación aparente por parte
de la persona que lo sufre.
Esta definición deja claro que el “bullying” puede ser considerado como una
forma de abuso entre iguales; lo que lo distingue de otras formas de abuso
como el maltrato infantil o hacia la mujer es el contexto en el que se desarrolla
y las características de la relación existente entre quienes participan en él.
Tipos de agresores
Agresores activos
Son los que inician y dirigen la agresión.
Las agresiones psicológicas son la principal forma de acoso escolar.
Esto se debe a que el Bully escoge a los compañeros con alguna
debilidad o diferencia. Ser inteligente, usar lentes, la timidez o tener
alguna otra de este tipo es suficientes para convertirse en víctima.
Pero el Bully no actúa solo, es líder de un grupo que decide a quién
se puede o no molestar y hasta qué grado. Sin el grupo, no podría
ejercer su poder.
Agresores pasivos
Son los que les siguen y animan, aunque en menor grado 3 de 10
estudiantes de educación básica en México viven con un temor
diariamente, pero no es a la muerte, inseguridad o algún secuestro.
Es miedo de ingresar por estas puertas de lunes a viernes. Sin
embargo, no les preocupa reprobar un examen o fallar en clases. Su
temor es a vivir otro día más, enfrentando la violencia a la que son
sometidos por un "Bully", compañero de clase que mantiene algún
tipo de maltrato sobre él.
Motivos del agresor para hacer Bullying
Según los expertos, un niño puede ser autor de Bullying cuando solo
espera y quiere que hagan siempre su voluntad, cuando le gusta
probar la sensación de poder, cuando no se siente bien o no disfruta
con otros niños, si sufre intimidaciones o algún tipo de abuso en casa,
en la escuela o en la familia, cuando es frecuentemente humillado
por los adultos, o cuando vive bajo constante presión para que tenga
éxito en sus actividades.
B) Las víctimas
Dentro de los acosos escolares podemos encontrar dos tipos de víctimas,
las víctimas pasivas y las víctimas activas.
C) Espectador
Un elemento importante del bullying, que además es considerado un agente
del mismo, es el espectador. Aquellos alumnos, niños y niñas o grupos de
personas que son observadores de la agresión, más no participes directos
de ella, juega un rol integral en la intervención. De esta manera, padres de
familia, alumnos y profesores que juegan un rol pasivo, están a la misma vez
tomando un rol activo en el desarrollo de los actos agresivos escolares.
El espectador tiene una función crucial dentro del hostigamiento pues su
intervención es la manera más poderosa de parar los actos agresivos.
De esta manera, existe el conocido fenómeno del efecto del espectador. Este
explica que los espectadores al sentir una falta de responsabilidad individual
para ayudar a la víctima, deciden no hacer nada. Y aún si quisieran hacer
algo, ellos dicen no tener las herramientas, ni saben cómo ayudar a la
víctima. Se recomienda a las escuelas, maestros y a los padres de familia
sensibilizar a estas personas para que cuestionen al victimario y le resten
poder frente al resto de alumnos.
8. RECOMENDACIONES
Haz de tu influencia una positiva –trata a los demás como esperas ser
tratado-.
Dedica a tus hijos 10 minutos al día sin tecnología (TV, celular, internet,|
etc…).
Apoya a los profesores de tus hijos. Confía en ellos y si aparece alguna
diferencia trátala en privado y no demerites su autoridad frente a tus
hijos.
Firmeza sin violencia. No es necesario gritar y golpear para corregir. Ser
firme y mostrar autoridad, es mucho más efectivo que las amenazas de
golpes.
Pregunta ¿qué pasó? Antes de juzgar… A veces, lo obvio, no es lo
verdadero; a veces el hijo pequeño comienza los pleitos; a veces tus
hijos se equivocan y eso no los convierte en errores permanentes… sólo
son aprendizajes.
Estas acciones, sumadas a la profunda observación de nuestros hijos,
logrará proteger al ambiente del fenómeno bullying. Si cuidamos que
nuestros hijos no sean agresivos, que respeten a los demás, que sean
amables, estaremos apoyando a que su ambiente sea mejor.
9. CONSECUENCIAS
Baja autoestima.
Actitudes pasivas.
Trastornos emocionales.
Problemas psicosomáticos.
Depresión, ansiedad y pensamientos suicidas.
Pérdida de interés por los estudios, lo que puede desencadenar en un
menor rendimiento y fracaso escolar.
Aparición de trastornos fóbicos.
Sentimientos de culpabilidad.
Alteraciones de la conducta: intromisión, introversión, timidez. aislamiento
social y soledad.
Problemas en las relaciones sociales y familiares.
Baja satisfacción familiar.
Baja responsabilidad, actividad y eficacia.
Síndrome de estrés postraumático.
Rechazo a la escuela.
Manifestaciones neuróticas y de ira.
Faltas de asistencia a la escuela e incluso abandono de los estudios.
Pese a que no les provoca un sufrimiento directo, como ocurre con las víctimas,
algunos estudios indican que los acosadores pueden encontrarse en la
antesala de las conductas delictivas.
Falta de control.
Actitud violenta irritable, impulsiva e intolerante.
Muestras de autoridad exagerada.
Imposición de sus puntos de vista y consecución de sus objetivos
mediante la fuerza y la amenaza.
Relaciones sociales y familiares problemáticas.
Pérdida de interés por los estudios y fracaso escolar.
Las consecuencias para la masa silenciosa, los chicos y chicas que mantienen
una actitud condescendiente con el acoso y pasiva ante el sufrimiento ajeno, no
son tan evidentes. Sin embargo, pueden provocar en los sujetos pasivos
la sensación o convencimiento de que no se puede o que es mejor no hacer
nada frente a la injusticia, dando como resultado al afianzamiento de una
personalidad temerosa, donde valores como el esfuerzo, la tolerancia o el afán
de superación brillen por su ausencia.
12. CAUSAS
Personales: Un niño que actúa de manera agresiva sufre intimidaciones en
la escuela o en la familia. Adquiere esta conducta cuando es frecuentemente
humillado por los adultos. Se siente superior, ya sea porque cuenta con el
apoyo de otros atacantes o porque el acosado es un niño con muy poca
capacidad de responder a las agresiones.