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En primer lugar debemos de mencionar que Saint-Domingue (Haití), era la colonia mas
prospera de Francia; esta prosperidad estaba basada en la privilegiada situación geográfica
que gozaba, ya que la isla se había convertido, para la segunda mitad del siglo XVII, en
“centro del tráfico de negros” (Guerra 2010: 82), y por las plantaciones que se
desarrollaban en la isla, las mismas que estaban en las manos de pocos blancos colonos así
como de una minoría de mulatos propietarios.
Con estas medidas se buscaba que en la isla estos procesos sean permanentes, y lo que se
había logrado con el derramamiento de tanta sangre no cayera en otros potencias
imperiales como lo eran España e Inglaterra.
El Estado de Haití, que fue el resulto de la única rebelión esclava exitosa de la historia,
tuvo que pasar por un periodo de transdominación, entendido este como:
“el paso de un sistema de dominación por otro, entre los que media un triunfo
revolucionario, o sea, un proyecto liberador y una praxis radical, acometidas por
sujetos populares, en determinada sociedad y momento histórico concreto” (Prieto
2011: 78).
Esto quiere decir que la isla de Saint-Domingue, paso de la dominación de los blancos
franceses, a una dominación militar-jerarquizada, como resultado de las guerras de
independencia que se llevaron a cabo. Pero el periodo que se vivió entre estas dos
dominaciones, sustentaron ideas tan importantes como la abolición de la esclavitud de una
forma definitiva y la de dar derechos ciudadanos a todos los negros liberados, que en Haití
representaban más del 80% de la población.
Hasta este momento nos hemos centrado en la independencia, y constitución de Haití como
Estado-República independiente, pero a un no hemos tomado en cuenta el importante papel
que tuvo en el proceso independentista del resto de América Latina. Para esto debemos de
recordar que las primeras rebeliones de las colonias españolas, con miras a la
independencia, iniciaron el 1808, es decir cuatro años después de la declaración de Haití
como república, estas rebeliones se produjeron a raíz de la invasión de Napoleón
Bonaparte a España y la capitulación de Fernando VII.
Esto produjo en todo las colonias el establecimiento de juntas de gobierno, negando a las
autoridades españolas así como dando su apoyo al rey Fernando VII. Una vez establecidas
estas juntas de gobierno los dirigentes criollos, fueron más allá y proclamaron la
independencia de las colonias de España. Esto fue el caso de Venezuela y Nueva Granada,
que en este periodo 1808-1815, sufrieron fuertes reveses en sus constituciones como
repúblicas libres por parte de las tropas realistas.
En eta etapa las elites criollas, tanto de Venezuela como de Nueva Granada, al no incluir a
las capas inferiores de la sociedad, emprendieron campañas libertarias destinadas al
fracaso, ya que en un primer momento los criollos realizaban el conflicto en dos frentes
“hacia arriba y hacia abajo”, entendido esto como: “hacia arriba con la metrópoli, los
criollos no querían perder sus relación con sus centros culturales ni los privilegios que
ostentaban y hacia abajo para evitar que las clases bajas toman la dirección de estos
movimientos y busquen verdaderos cambios” (Guerra, 2010: 94-95), esto llevo a que las
dos primeras repúblicas venezolanas se pierdan en manos de los realistas, así como las
guerras intestinas de la llamada, según Guerra Sergio, “patria boba neogranadina”.
En estos lapsos de disputas internas, entre criollos, es que Haití toma una importancia
relevante, ya que se convertirá en un centro que acogió a los exiliados, en donde se puede
organizar y discutir nuevas escaramuzas a los territorios reconquistados por España, entre
estos refugiados que llegaron a Haití estuvieron: Simón Bolívar, Santander y otras figuras
relevantes en la independencia definitiva de las colonias españolas.
A mas de esto se debe de recordar que Haití Pétion, financio las campañas de Bolívar tanto
en transporte, alimento y hombres para que librara la ultima etapas de independencia de
1816 a 1824; con el propósito de que una vez establecidas las nuevas repúblicas dieran la
libertad a todos los hombres; el reconocimiento que tenia Bolívar a Haití se puede ver
claramente, en el discurso pronunciado por esté en la primera constituyente de Bolivia de
1825, al momento que habla del poder ejecutivo mencionando lo siguiente “su duración es
la del presidente de Haití. Yo he tomado para Bolivia el ejecutivo de la república (Haití)
más democrática del mundo” (Bolívar 1825: 103); en estas pocas palabras se puede notar
la admiración que tenia “el libertador” asía la isla, y el gobierno que lo acogió y colaboro
logísticamente para las batallas definitivas en contra de los españoles.
Pero una vez liberadas las colonia y constituidos como Estados independientes las
aspiraciones de Haití no se vieron reflejadas; es decir la liberación de los esclavos no se
produjo, como estaba pactado; ya que las economías de Nueva Granada y Venezuela (la
Gran Colombia) estaban basadas en la fuerza de trabajo gratuito que los esclavos
proporcionaban en las plantaciones de algodón, caña de azúcar, y otros; ya que los
productos de las plantaciones estaban destinados al mercado internacional. Es asi que una
medida tibia al problema de la esclavitud, fue el “decreto de vientre libre” aprobada en
1822, la cual proponía que cada hijo de esclavo, nacido después de la propagación de dicho
decreto, nacería libre y buscaba solucionar el problema en una o dos generaciones.
Pero una vez desintegrada la Gran Colombia, los países que la integraban no siguieron
esos decretos y la esclavitud siguió siendo legal en los países del continente hasta la
segunda mitad del siglo XIX.
Otro de las medidas que demuestran que Haití, a pesar de ser un pilar fundamental en la
independencia de Latino América, fue traicionado y apartado del panorama regional es el
hecho de que Haití no fue invitado al “Congreso Anfictiónico de Panamá” realizado en
1826 en donde se discutió de la liberación de Cuba y Puerto Rico de España, así como la
discusión de una posible integración regional.
Después de esta traición, de las nuevas Repúblicas americanas, Haití tubo que negocia, con
su “ex metrópoli el costo de inscribirse como Estado «paria» en el sistema-mundo; en 1825
el presidente Boyer acordó pagar a Francia unos ciento cincuenta millones de francos en
compensación por las pérdidas de propiedades durante la revolución; deuda que solo quedo
saldada después de varias renegociaciones en 1922” (Prieto 2011: 83).
Conclusiones:
Después de la revisión de varios textos podemos concluir que Haití fue una pieza
fundamental en la independencia de América Latina, principalmente de la Gran Colombia
(Venezuela, Colombia y Ecuador), que sin su apoyo tanto de hombres, armas, transporte y
suministros Simón Bolívar no habría podía confrontar los combates definitivos que
sellaron definitivamente la independencia de la región.
Tampoco podemos olvidar que las nuevas naciones Americanas, a pesar del apoyo
fundamental que proporciono Haití a su independencia, traicionaron los fundamentos
expuestos por sus representantes, principalmente Pétion, y la abandonaron para cuidar sus
intereses económicos destinados a abastecer al sistema-mundo; con los productos que
producían en las plantaciones.
Otra de las conclusiones que se pueden llevar a cabo es que la historia oficial, no sé ha
dado a Haití el papel fundamental a nuestra independencia, tomándolo como un episodio
aislado en la historia Americana y rengándolo al olvido, sin tomar en cuenta a la isla como
precursora de las ideas independentistas de toda la región.
Bibliografía: