I: La teología es la fuerza que potencia el materialismo histórico: la teología es para Benjamin la

posibilidad de cambiar el tiempo del progreso por el tiempo del ahora, la posibilidad de la
redención y de un futuro radicalmente diferente (la llegada del Mesías).

II: Desde el punto de viste del presente, hay una mayor valoración de la redención del pasado
sobre el futuro en relación con la felicidad (fuerza mesiánica en nosotros, a la que el pasado dirige
sus reclamos).

III: Nada de lo que se ha dado en el pasado debe darse por perdido para la historia. Solo a
humanidad redimida le concierne enteramente su pasado (se le ha vuelto citable su pasado en
cada uno de sus momentos, en cada momento en del día presente/ siempre día del Juicio Final).

IV: Lucha de clases: lucha por cosas toscas y materiales, sin las que no hay cosas finas del espíritu.
Están presentes en lucha de clases de un modo distinto que en representación que de ellas (en
tanto su botín) se hacen los vencedores (objetos culturales pueden ser redimidos, tradición puede
ser salvada del conformismo).

V: Pasado solo es aprehensible como imagen que refulge en el instante en que es reconocida
(punto exacto donde materialismo histórico golpea a imagen de la historia que tiene el
historicismo). Imagen verdadera del pasado amenaza con desaparecer con todo presente que no
se reconozca en ella.

VI: Articular históricamente el pasado no implica conocerlo “como verdaderamente fue”. Es más
bien apoderarse de recuerdo tal como éste refulge en un momento de peligro. MH atrapa una
imagen del pasado tal como le aparece a sujeto histórico en instante de peligro (que amenaza
permanencia de la tradición y a sus receptores, con el peligro de que ambos se entreguen como
instrumentos de la clase dominante). En cada época es necesario esfuerzo de arrancar a la
tradición de las manos del conformismo que siempre está a punto de someterla (tampoco los
muertos están a salvo si el enemigo vence). Encender en el pasado chispa de la esperanza es don
del historiador que comprende esto (MH).

VII: MH rompe con pretensiones de objetividad aséptica del historicismo. Historiador historicista
sigue procedimiento de la empatía (con el vencedor: quien domina en cada caso es heredero de
todos los vencedores, y empatizar con él es ser favorable a los actuales dominadores), nacido de
apatía que no se atreve a adueñarse de imagen auténtica del pasado. Cultura (“bienes culturales”)
proceden de marcha triunfal de los vencedores. Mat. hist. puede ver en la procedencia de la
cultura el horror: la barbarie, los vencidos aplastados, la condición de botín reclamado por los
vencedores para sí. Mat. hist. debe hacer historia a contrapelo.

VIII: Horrores de la modernidad no son un estado de excepción, son más bien la regla. La tarea
revolucionaria es fundar el estado de excepción verdadero (discontinuidad, romper con
continuidad de la historia de los vencedores). Mejor lugar para enfrentar al fascismo. Progreso no
es norma histórica.

IX: Reflexión sobre el Angelus Novus (el ángel de la historia).

X: Derrota de políticos, vencidos por el fascismo, que tenían una fe ciega en la idea de progreso y
en su proyecto reformista (y que ahora además traicionan su propia causa) acaba siendo algo
bueno: libera de esas redes a los proletarios (redes a las que esos políticos siguen aferrándose).

XI: Conformismo (del agrado de socialdemocracia) afecta no solo tácticas políticas sino también
económicas. Razones del colapso de socialdemocracia. Principal causa de corrupción de la clase
trabajadora ha sido la idea de que ella nadaba con la corriente (que llevó a la idea de que el
progreso técnico implicaba un progreso histórico, de que el trabajo en las fábricas que generaba
desarrollo técnico era de por sí una forma de acción política; versión secularizada de ética
protestante, idea criticada por Marx en programa de Gotha de que el trabajo es la fuente de toda
cultura, que reconocía en ese trabajo la esencia de la dominación propia de la sociedad
capitalista). Marxismo vulgar abandona comprensión del MH de lo que el trabajo hace a los
trabajadores cuando no pueden disponer de él, solo ve el dominio sobre la naturaleza
cuantitativamente acrecentado sin ver los retrocesos cualitativos de la sociedad (socialdemocracia
ya muestra rasgos tecnocráticos del fascismo). Perspectivas de una organización racional del
trabajo que podría llevar a la Utopía (armonía hombre/naturaleza).

XII: Sujeto del conocimiento histórico es la clase oprimida cuando combate. La clase trabajadora
aparece para Marx como clase vengadora de todos los oprimidos de la historia, se libera en
nombre de todos los vencidos (los redime); esta conciencia tuvo vigencia una vez más
temporalmente con movimiento Spartacus de R. Lux. Nunca fue del agrado de socialdemocracia,
que ha preferido la imagen de la clase trabajadora como redentora de generaciones futuras,
cortando el nervio de su potencia. Bajo esta forma de pensar (que privilegia el ideal de los
descendientes liberados sobre la imagen de los antepasados esclavizados), la clase oprimida
desaprendió el odio y la voluntad de sacrificio.

XIII: Marxismo vulgar/teoría de socialdemocracia mantiene idea de progreso dogmática, ajena a la

realidad. Concepción de progreso como de la humanidad in toto (no solo de destrezas y
conocimientos) (1). Progreso continuo, sin término (perfectibilidad infinita de raza humana) (2).
Imparable, línea recta automática (3). Crítica debe ir más allá de estos puntos y dirigirse a lo que
los ata: la inseparabilidad de idea de un progreso lineal imparable de la humanidad con la
representación del tiempo como homogéneo y vacío. Crítica de esta concepción del tiempo es
fundamento de crítica del progreso.

XIV: Historia es objeto de construcción, por el contrario (no lugar de tiempo homogéneo vacío),
está lleno de “tiempo del ahora” (jetzeit). Robespierre-Revolución Francesa/República Romana. La
moda encuentra lo actual en el pasado, es un salto de tigre al pasado (en la arena del dominio de
clase opresora); el mismo salto (bajo cielo libre de la historia) es salto dialéctico que Marx
comprendía como la revolución.

XV: Conciencia de hacer saltar continuum de la historia es propia de clases revolucionarias en el

instante de su acción (reinicio del tiempo, cambio del tiempo al tiempo del ahora).
XVI: Mat. Hist. debe abrazar concepción de presente que no es tránsito, en el cual el tiempo entra
en reposo. Ese es el presente en el que escribe historia con su acción. Historicismo propone
imagen eterna del pasado, mat. hist. una experiencia única del mismo que se mantiene en su
singularidad (imagen monádica). Hacer saltar continuum de la historia.

XVII: Historia universal del historicismo carece de armazón teórica, a diferencia del MH.
Procedimiento de historicismo es aditivo: suministra masa indiferenciada de hechos para llenar
tiempo vacío y homogéneo. En fundamento de historiografía mat. hay un principio constructivo: lo
propio del pensar no es solo movimiento de las ideas sino también su detención. Cuando pensar
se para de golpe en una constelación saturada de contradicciones/tensiones, provoca shock que
cristaliza como mónada (mat. hist. aborda objeto histórico allí donde se presenta como mónada).
En esta estructura reconoce signo de detención mesiánica del acontecer, de oportunidad
revolucionaria en lucha por el pasado oprimido, y la usa para hacer saltar época determinada de
curso homogéneo de la historia (o a una vida de una época o a una obra del conjunto de obras
determinadas). Contiene esta singularidad nueva imagen del tiempo.

XVIII: En idea de sociedad sin clases Marx secularizó tiempo mesiánico. Los socialdemócratas la
jodieron al convertirlo en ideal kantiano, “tarea infinita” (tiempo homogéneo y vacío se vuelve
antesala en la que se puede esperar serenamente, para siempre, advenimiento de situación
revolucionaria). La verdad: no hay instante que no traiga su oportunidad revolucionaria (aunque
esta debe definirse en su singularidad específica: oportunidad de una solución completamente
nueva a una tarea completamente nueva). A pensador rev. se le confirma situac. rev. de cada
instante histórico en situac. política dada; y también se le confirma por clave que dota a ese
instante del poder para abrir un determinado recinto del pasado que estaba clausurado hasta
entonces. Ingreso en este recinto coincide con acción política; es a través de él que ésta, por
“aniquiladora” que sea, se da a conocer como mesiánica.

XIX: Tiempo del ahora: cualquier instante, en breve instante que constituye historia entera de la
humanidad.