Correo del lector
que explicar es algo más profundo : no fue ni
Lo mhs f8cil y lo mas difícíl
... mis sentimientos religiosos, que en modo
alguno se sintieron ofendidos con la lectura
del Camionero de la Resistencia, editado por
Enaudi, y que de tal modo escandalizó a
algunos espíritus amplios, no me permiten
dejar de manifestar mis puntos de vista ante
un artículo publicado en el numero 2 de
Cuudernos de Ruedo ibérico...
No me refiero a la poesía Palomas de León
Felipe. Dejando aparte el discutible valor lite-
rario, la ignorancia que delata todo el contenido
me hace lamentar el papel que habéis empleado
en publicarla... No creo valga la pena dectr más
acerca de esto.
Me refiero al artículo de Rincón. Hablar de la
Iglesia es al propio tiempo lo más fácil y lo
más difícil... No seré yo quien venga a defender
la x Catolicidad x sociológica de nuestro pueblo
español. En cambio, se quiera o no, hay que
reconocer la impregnactón que la Iglesia
Católica ha ido inculcando a nuestro ueblo.
Se podrá lamentarlo o celebrarlo, pero rorzoso
es reconocer el hecho...
Decía el Cardenal Saliège que « los teólogos
ben una clase de gente que han pensado en todo
v lo han previsto todo, excepto solamente dos
cosas : el Espíritu Santo y el Pueblo n. Yo diría
que junto a los teólogos y los curiales del
Vaticano hay que incluir también todo sectario
que se permite examinar y juzgar a la Iglesia
desde fuera. Pondría aquí, juntamente al
Osservatore Romano, toda la literatura sectaria
de anticatolicismo que constantemente se va
acumulando, repitiendo con frecuencia los mis-
mos tópicos. Llamémoslo el Espíritu Santo o
llamemos unos valores ideológicos que van
manteniendo una determinada vitalidad por
espacio de los siglos, hay que reconocer que,
aparte de la huera espectacularidad eclesiás-
tica, aparte de este afán de ampararse en unos
poderes políticos o financieros, algo más hay en
la Iglesia que le da fuerza a través de los siglos.
Pero más evidente es todavía la existencia de
un Pueblo que guarda unos valores cristianos.
En tanto que católico, no me sorprende el olvido
de Rincón, pues estoy más que acostumbrado
a que nuestros Jerarcas también lo olviden. El
detalle de los « progresistas » e * integristas »
es un mero accidente histórico que se repite
siempre en cualquier sociedad con algo de
vitalidad y que pretende renovarse... Lo que hay
integrista ni progresista aquel curita de Carmo-
na que presidió el entierro laico de Besteiro,
no fue ni integrista ni progresista aquel bueno
del párroco de Moreda de Aher que abriendo
una cantina en los locales parroquiales hizo
más que nadie para la prolongación de la huelga
minera de Asturias en mayo de 1962. Saco.dos
solos ejemplos que Bpdrtamos multtphcar.
Todavía está por estu lar el caso de ciertos
curitas de pueblo (menos raros de lo que parece
y de lo que han querido caricaturizar nuestros
amigos franceses) que, en ciertos casos, han
iniciado un movimiento cooperatista como en
Zúñiga, o que, en otros, se han interpuesto
evitando el asesinato inmediato de n maquis »
por la Guardia Civil allá en las estribaciones dc
la Sierra Nevada.
Es preciso tener la sinceridad necesaria para
reconocer ciertos imponderables... Desde fuera,
no hay manera de explicar la actitud de aquellos
nuestros compatriotas que, en los campos de
concentración franceses, en aquellos inhumanos
amontonamientos inventados por la DEMOCRA-
CIA EUROPEA, contestaban rezando el c Padre
Nuestro » a la triste llamada radiofónica con
que Pio XII felicitaba al vencedor de nuestra
lamentable Guerra Civil. (Joan Comas : L’Esgle-
sia contra la República Espanyola, p. 275.) La
actitud de aquella buena gente, parte muy
auténtica de nuestro pueblo, no se puede expli-
car si no, de una parte, a través del mismísimo
proceso histórico que nos ha plasmado y for-
jado a nosotros mismos -1 Cuidado con que al
depurarnos no arranquemos carne de nuestra
propia carne !- y, por otra, mediante la meta-
física del u salto al vacío » de que habla Kier-
kegaard o « de la locura x a que se refiere Pablo
de Tarso.
Si no se tiene en cuenta este doble factor, vere-
mos siempre cualquier actitud de unos creyen-
tes, ya esté pintada de « integrismo u o lo esté
de « progresismo 1) como meras estrategias
políticas. No andemos buscando cinco pies al
gato, pues bastante trabajo tenemos ya los
católicos para liberarnos nosotros mismos de
tanta incrustación política como nos hemos
cargado. Los que sinceramente queremos a la
Iglesia tal como ella debe ser, no podemos
menos que alegrarnos, en cierto modo, al ver
cómo nuestros problemas interesan a nuestros
amigos que se consideran fuera de ella, pero no
podemos menos que recordarles estas palabras
de Machado : u Esta Iglesia espiritualmente
huera, pero de organización formidable, sólo
puede ceder al embate de un impulso realmente
126
 religioso... El clericalismo español sólo puede
indignar seriamente al que tenga un fondo
cristiano. Todo lo demás es política y sectaris-
mo, juego de izquierdas y derechas. La cuestión
central es la religiosa y ésa es la que tenemos
que plantear de una vez w (Carta a Unanumo
en 1913, publicada en Los Cowtplementarios,
p. 167).
La cuestión esencial es pues ésta y que unos y
otros debemos plantearnos con gran sinceridad
y crudeza : n El hecho de que la Iglesia haya
servido con tanta frecuencia y durante tanto
tiempo a unas instituciones humanas (Estado,
Ejército, Capitalismo, Feudalismo antes, etc.),
i es una circunstancia accidental a ella misma
o bien responde a su carácter esencial? Mien-
tras no nos planteemos francamente esta
pregunta continuaremos unos negando unas
verdades contundentes y desconfiando otros de
cualquier actitud o iniciativa de cristianos. Y
no pocos de éstos nos veremos en la incomo
dísima posición de ser desechados por unos >
otros por « cándidos e inocentes u cuando no
por « peligrosos, y compañeros de viaje u.
JOAN MISSER
Mas sobre SSJuliBn Marías
y el liberalismo-
En el artículo g Julián Marías y el “liberalis-
mo” » (p. 64) de Cuadetxos de Ruedo ibérico
(no. 1). se alude a Javier Muguerza; como sigue :
n i Todo se reduce a alguien que “se interesa
por la filosofía” - y de quien yo no sé que haya
publicado un libro o, al menos, ensayos impor-
tantes, etc. ? » El autor del artículo indicado
tiene seguramente razón en considerar que el
Sr. Javier Muguerza no merece todavía figurar
en una lista de ensayistas españoles posteriores
a 1953, porque, en efecto, ha publicado muy
poco. Sin embargo, habiendo tenido ocasión de
leer la tesis doctoral de Javier Muguerza (sobre
Gottlob Frege), puedo asegurar que el Sr. Mu-
guerza no es a alguien que sc interesa por la
filosofiax sin más. Si, como espero, se publica
la tesis doctoral del Sr. Muguerza, será fácil
ver que es uno de los mejores trabajos filo-
sóficos (específicamente, semánticos y lógicos)
hechos en España, en cualquier época.
JOSE FERPXERn MQRG
© faximil edicions digitals, 2002
Revlsta Indispensable
He recibido en días pasados el n”. 1 de
Cuadernos de Ruedo ibérico cuyo contenido me
ha interesado vivamente. Las noticias que por
aquí nos llegan, en publicaciones eriódicas, de
la situación actual de España suePen tener una
orientación que las desvirtúa. Por ello considero
$;;l,‘a revrsta editada por ustedes es mdtspen-
FERNANDO SALMERON
Universidad Nacional Auto&o~;
Rovlsta de tipo original
Recibí el primer número de Cuadernos de
Ruedo ibhico.. . Me gustó mucho. Es una
revista de tipo original, que en estos tiempos
de repeticiones y standardlzación, constituye
un verdadero acontecimiento editorial y tipo-
gráfico. Creo que tendrá mucho éxito, si logran
ustedes superar las dificultades inherentes a los
primeros tiempos de una nueva publicación.
Les felicito por la idea..
JOAQUIN MAURIN
Nueva York
Falta de valor...
Es significativo considerar que un lector del
interior, Alfonso Sastre, les envíe una carta
firmada con su nombre mientras que un
lector que evidentemente vive ahí se esconde en
el anónimo.
Es significativo porque, además de una falta
de valor intelectual, moral físico refleja,
desgraciadamente,, el grave ma Pestar moral que
se respira en el Interior del grupo del que ha
salido la carta. Porque esa carta es obra de
grupo. Tiene razón “un lector” evidentemente
cuando asegura que el anticomunismo está de
capa caída, yo tambien lo creo. S610 que es
preciso aclarar más los conceptos. Es decir,
saber, o senalar, quien hace anticomunismo en
cada momento concreto. No se puede olvidar
que desde el xx Congreso sabemos que hasta
un secretario general puede hacer “anticomu-
nismo”.
MARCELINO PEREZ T;zJEDOi
A nivel de la conversacibn
personal
. , . la acogida dispensada al primer numero de
Cuadernos de Ruedo ibérico ha so rendido,
incluso a los que no les ha gusta T 0.. . las
críticas abundan, y por todos los lados.. . No
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 me refiero a la Presenfucidn (ésta ~610 la
critican los ortodoxos). Las criticas más corrien-
tes son la que se refieren al artfculo de Triguero
y a la reseña de cine * . . . J. G. me habló del
« derecho al pataleo y, es decir, del peligro que
la gente tome la revista como trampolin para
segregar el mal humor que, de forma justlfica-
da o no, todos tenemos acumulado. Del articulo
de Triguero unos dicen que parece un artículo
de El Español, pero al revés ; otros que es poco
seno.. . que este artículo quizá habría caído
bien en el 4” o 5” número y en la mitad de un
Cuaderno, pero jamás en el primer número y en
primera fila en el índice.. . Esto no lo opino
Eso es lo que opina mucha gente : orto-
%& músicos democratacristianos . . . En cier-
ta forma -di&- es degradar la revista. Decir
como Triguero sería válido -y aún se quedaría
corto- a nivel de la conversación personal ;
pero no casa con el resto de la revista, aunque
(no hago más que repetir) como análisis histó-
rico es bueno, y como relato humoristico, exce-
lente.. . El artículo de economia ha provocado
buena crítica.. Cur y poeTas. : excelentes. yuy
ksasreportade el del dlcclonarlo de Juh@
-fhudo, con mucho gancho. Jordi
Blanc y Angel Olmo, muy buenos. El diálogo
con Tierno, flojo, pero interesante, sobre todo
si la revista va publicando entrevistas de este
tipo que informen de las posiciones politicas e
ideológicas de personas muy de moda.. . La
nota de Semprún! como es lógico, ha provocado
verdaderos entusiasmos por un lado y enormes
cabreos -rectifico, « rabietas * por otro. Es
curioso que la misma gente que se ha radicali-
zado, lanzando anatemas contra Siglo XX,
muestre reticencias ante Cuadernos de Ruedo
ibérico. No obstante, les es dificil esconder que
CRI remesenta una verdadera u lección n oara
ellos . . 1 No sé cómo han logrado extender-una
imagen (captada fácilmente por las mentali-
dades primitivas de la Universidad) que asocia
un buen comunista con un austero y laborioso
monie de Montserrat. v a un « italiano n con un
invertido inconformista . . . Por tanto, la reseña
de libro de Kosik también ha molestado.. . Las
demás notas han gustado. En general, pues,
salvo tos dos c.itados artículos, lqs ortodoxos
~~;;~area de mfluencla, la acogda ha sido
...
0. 0.
Barcelona
l Franco, ese hombre (Cuadernos de Ruedo ib&lco, no. 1).

Notas de la redacción

Los Cuadernos de Ruedo Ibérico están abiertos a todas las colaboraciones -

ensayos, crónicas, notas informativas o críticas, creación literaria o gráfica - que
se sitúen dentro del cuadro, amplio, que fijaba nuestra Presentación.
Cuadernos de Ruedo Ibérico preparan su primer su leme& anual. Cada
suplemento anual será un volumen de alrededor de 400 p Pagmas, realizado por un
amplio equipo de colaboradores y con un acentuado carácter monográfico.
Nuestro primer suplemento tendrá como título El año XXV y en él nos esforzare
mas. en dar una visión. lo más exhaustiva posible de lo que para España han
slgndcado los años de cùctadva franquista. Ningún aspecto de la vida española a lo
largo de eF?s años será descuidado. El volumen constituirá una descripción general
y LXI anáhsls critico de un periodo, inacabado y por tanto de interés actualisimo,
sobre el que las fuentes mformativas son escasas, parciales cuando no están
simplemente falseadas, y sobre todo dispersas o inaccesibles. La publicación de
este suplemento está prevista para diciembre de 1965.
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