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Entramos a este taller # 4 –el mismo que tiene 2 subtalleres-, con la finalidad de diseñar y realizar
una recogida de información oportuna y coherente con la misión de la universidad. En la
comprensión de que las competencias relacionadas con los rasgos del perfil de egreso planteado
en el currículo (Kemmis, 1988) configura la orientación de la enseñanza y despliegue del dominio
de la competencia y/o el logro del objetivo por parte del aprendiz, esto hace que la actividad del
docente se sitúa en su papel como evaluador.
Porque así como el aprendizaje es un proceso, es importante y necesario conocer los niveles de
desarrollo de las competencias y las necesidades de un estudiante durante dicho proceso. La
información obtenida, en el proceso de evaluación, debe ser válida y confiable; es decir, debe ser
pertinente, con respecto a lo que se pretende evaluar, y debe ser el reflejo más fidedigno de la
realidad que se pretende conocer.
En este sentido, trabajaremos los criterios y los indicadores de evaluación de los aprendizajes, con
el propósito de que puedan servir lo más objetivamente posible como insumos en el diseño y
construcción de los instrumentos de recogida de información.
Criterios de evaluación
Los criterios son categorías que actúan como referentes para establecer el nivel de desarrollo de la
competencia o el logro del objetivo específico de la asignatura en el área curricular
correspondiente. Asimismo, tomando como punto de partida el análisis que se hizo en las matrices
#1 y #3 se puede estimar que los criterios están en relación y estrecha coherencia con las
competencias relacionadas a la Misión de ULADECH Católica y a las de la Carrera Profesional.
Los criterios de evaluación se conciben como aquellas condiciones o efectos que se deben cumplir
en el proceso para lograr los objetivos del SPA o de la actividad educativa.
. Deben ser conocidos y aceptados por los involucrados –los estudiantes, la Escuela Profesional y
los docentes de la Red de Asignatura-. Es deseable que todos los implicados los acepten y que se
comprometan a alcanzarlos.
Los criterios son los parámetros que nos precisan lo que debe ser evaluado en cada asignatura
de un área curricular.
Lo anterior implica que los criterios son categorías que actúan como referentes para establecer el
nivel de desarrollo de la competencia. Así cada asignatura y área curricular teniendo en cuenta su
naturaleza e importancia tiene sus propios criterios de evaluación.
Indicadores de evaluación
Los Indicadores son construidos a partir de los Criterios. Y son definidos como medidas de los
sucesos del proceso de aprendizaje que a su vez permiten evaluar si se está cumpliendo o no, o en
qué medida, con los Criterios que se han elaborado.
Los Indicadores son hechos o expresiones concretas y cuantificables cuyos valores nos permiten
medir la idoneidad, la eficacia y la eficiencia de nuestro SPA respecto del aprendizaje de los
estudiantes. Para evaluar correctamente es necesario concretarlos y explicitarlos desde el inicio de
la planificación de SPA.
Uno de los elementos que debemos tener presentes todo el tiempo en la producción de
indicadores es el contexto en el que éste se enuncia. Esto implica que los indicadores además,
integran los elementos del contexto socio-cultural, institucional, cognitivo, afectivo y creativo
en el que está inscrito el proceso de enseñanza-aprendizaje. Ello exige que sean pertinentes en
relación al conjunto mayor del que dependen (una competencia, una actividad, una habilidad,
etc.), así como al contexto en el que se manifiestan
Los indicadores son medidas verificables de cambio o resultado. Sin embargo, en el proceso de
evaluación del aprendizaje de nuestros estudiantes, regularmente necesitamos una mayor
cuantificación, para ello, nos valemos de la escala vigesimal y podemos puntuar los indicadores
cualitativos según la importancia que asignemos a cada uno –ponderación- de manera que
obtengamos una nota final. Los resultados pueden servirnos para compararlos con evaluaciones
sucesivas o para tomar decisiones, no solo de aprobación o desaprobación; sino de tratamiento
pedagógico, reforzamiento, realimentación o reiteración.
Las características que deben tener los Indicadores son las siguientes:
.Deben ser comprensibles para que puedan ser interpretados por todos los involucrados en el
proceso.
.Deben servir para orientar futuras decisiones para mantener o modificar acciones.
Según el Ministerio de Educación del Perú, “Los indicadores son descriptores de los cambios o
resultados que evidencia el estudiante como consecuencia del proceso de enseñanza-
aprendizaje”
El proceso de aprendizaje de un estudiante es bastante complejo, este pasa por diferentes niveles
en los cuales se desarrollan varios procesos. Los docentes necesitamos conocer no solo el logro
final al cabo de un largo proceso de aprendizaje, sino los logros de niveles más cortos y simples
que nuestros alumnos vienen desarrollando. Es por ello, que, los indicadores son los elementos
que nos evidenciaran con mucha claridad el nivel en que un estudiante viene desarrollando una
determinada habilidad o actitud. Durante nuestro trabajo, los docentes nos preocupamos por
sobre todo, por el proceso que cada uno de nuestros alumnos viene realizando, para así brindarles
la ayuda oportuna y generar aprendizajes realmente significativos.
Los instrumentos son medios o herramientas que permiten recoger la información sobre el
logro de aprendizaje y competencias. (Domínguez, 2012, p. 7)
De esta forma, la información recogida nos permitirá formarnos un juicio de valor razonado con
el propósito de tomar decisiones en relación con el curso de las actividades de aprendizaje,
teniendo en cuenta los niveles previstos en el desarrollo de las competencias y las necesidades de
los estudiantes. Cómo los estudiantes avanzan en sus procesos de aprendizaje según el ritmo de
sus capacidades y habilidades.
El conocer –recoger información- interpretar y valorar –formar juicios- las situaciones reales del
aprendizaje de los alumnos carece de relevancia si no va acompañado de una acción estratégica
que se oriente a superar y dar solución a las dificultades, problemas e intereses detectados con la
evaluación. Es así que el éxito de los procesos de los alumnos y del docente se orienten en gran
medida a las tomas de decisiones acertadas, pertinentes y oportunas.
Santivañez, R. (1996). Evaluación de los aprendizajes escolares. Piura: Instituto de Cultura &
Universidad Nacional de Piura.