Una buena forma de clasificar las centrales eléctricas es haciéndolo en
función de la fuente de energía primaria que utilizan para producir la energía mecánica necesaria para generar electricidad:
1. Centrales hidroeléctricas: el agua de una corriente natural o
atificial, por el efecto de un desnivel, actúa sobre las palas de una turbina hidráulica. COMPONENTES: La presa: Se encarga de contener el agua de un río y almacenarla en un embalse. Rebosaderos: elementos que permiten liberar parte del agua que es retenida sin que pase por la sala de máquinas. Destructores de energía: que se utilizan para evitar que la energía que posee el agua que cae desde los salientes de una presa de gran altura produzcan, al chocar contra el suelo, grandes erosiones en el terreno. Básicamente encontramos dos tipos de destructores de energía: o Los dientes o prismas de cemento, que provocan un aumento de la turbulencia y de los remolinos. o Los deflectores de salto de esquí, que disipan la energía haciendo aumentar la fricción del agua con el aire y a través del choque con el colchón de agua que encuentra a su caída. Sala de máquinas. Construcción donde se sitúan las máquinas (turbinas, alternadores…) y elementos de regulación y control de la central. Turbina. Elementos que transforman en energía mecánica la energía cinética de una corriente de agua. Alternador. Tipo de generador eléctrico destinado a transformar la energía mecánica en eléctrica. Conducciones. La alimentación del agua a las turbinas se hace a través de un sistema complejo de canalizaciones. En el caso de los canales, se pueden realizar excavando el terreno o de forma artificial mediante estructuras de hormigón. Su construcción está siempre condicionada a las condiciones geográficas. Por eso, la mejor solución es construir un túnel de carga, aunque el coste de inversión sea más elevado. La parte final del recorrido del agua desde la cámara de carga hasta las turbinas se realiza a través de una tubería forzada. Para la construcción de estas tuberías se utiliza acero para saltos de agua de hasta 2000m y hormigón para saltos de agua de 500m. Válvulas: dispositivos que permiten controlar y regular la circulación del agua por las tuberías. Chimeneas de equilibrio: son unos pozos de presión de las turbinas que se utilizan para evitar el llamado “golpe de ariete”, que se produce cuando hay un cambio repentino de presión debido a la apertura o cierre rápido de las válvulas en una instalación hidráulica.
2. Centrales térmicas convencionales: el combustible fósil (carbón,
fueloil o gas) es quemado en una caldera para generar energía calorífica que se aprovecha para generar vapor de agua. Este vapor (a alta presión) acciona las palas de una turbina de vapor, transformando la energía calorífica en energía mecánica. COMPONENTES: Caldera. En este espacio el agua se transforma en vapor, cambiando su estado. Esta acción se produce gracias a la combustión del gas natural (o cualquier otro combustible fósil que pueda utilizar la central), con la que se generan gases a muy alta temperatura que al entrar en contacto con el agua líquida la convierten en vapor. Turbina de vapor. Máquina que recoge el vapor de agua y que, gracias a un complejo sistema de presiones y temperaturas, consigue que se mueva el eje que la atraviesa. Esta turbina normalmente tiene varios cuerpos, de alta, media y baja presión, para aprovechar al máximo el vapor de agua. Generador. Máquina que recoge la energía mecánica generada en el eje que atraviesa la turbina y la transforma en eléctrica mediante inducción electromagnética. Las centrales eléctricas transforman la energía mecánica del eje en una corriente eléctrica trifásica y alterna.
3. Centrales térmicas de ciclo combinado: combina dos ciclos
termodinámicos. En el primero se produce la combustión de gas natural en una turbina de gas, y en el segundo, se aprovecha el calor residual de los gases para generar vapor y expandirlo en una turbina de vapor.
4. Centrales nucleares: la fisión de los átomos de uranio libera una
gran cantidad de energía que se utiliza para obtener vapor de agua que, a su vez, se utiliza en un grupo turbina-alternador para producir electricidad. Presionador: Componente del circuito de refrigeración primario, en el que se mantienen en equilibrio la fase líquida y la fase vapor en condiciones de saturación, con el fin de controlar la presión del mismo.
Vasija del reactor: Vasija de acero en la que se aloja el reactor
nuclear, componente principal de la central nuclear en la que se produce la reacción de fisión en cadena. Su núcleo está formado por los elementos de combustible.
Combustible: Material en el que tienen lugar las reacciones de
fisión. Normalmente se emplea óxido de uranio enriquecido. Se utiliza simultáneamente como fuente de energía y de neutrones para mantener la reacción en cadena. Se presenta en estado sólido en forma de pastillas cilíndricas encapsuladas en varillas metálicas de unos cuatro metros de longitud.
Barras de control: Son los elementos de control del reactor y
actúan como absorbentes de neutrones. Son barras de indio-cadmio o carburo de boro, que permiten controlar en todo momento la población de neutrones y la reactividad del reactor, haciendo que sea crítico durante su funcionamiento y subcrítico durante las paradas.
Generadores de vapor: Son intercambiadores de calor en los que el
agua de refrigeración del circuito primario, que circula por el interior de los tubos con forma de U invertida, cede su energía al agua del circuito secundario, transformándose esta en vapor de agua.
Edificio de contención: Recinto que alberga el sistema de
refrigeración del reactor y diversos sistemas auxiliares. Sirve de blindaje en operación normal e impide la fuga de productos contaminantes al exterior. Tiene la responsabilidad funcional, junto con otros sistemas de salvaguardias, de impedir la liberación, en último término, de productos de fisión a la atmósfera en caso de accidente.
Turbina: Instalación a la que llega el vapor de agua proveniente de
los generadores de vapor, cuya energía se transforma, a través de los álabes, en energía mecánica de rotación. Existen varias secciones para la expansión del vapor. Su eje está solidariamente unido al eje del alternador.
Alternador: Equipo que produce la electricidad al convertir la
energía mecánica de rotación de la turbina en energía eléctrica de media tensión y alta intensidad.
Transformador: Equipo que eleva la tensión de la electricidad
producida en el alternador para minimizar las pérdidas en su transporte hasta los puntos de consumo. Agua de refrigeración: Agua que se toma de un río, un embalse o el mar y que se utiliza para licuar el vapor de agua en el condensador. Puede ser devuelta directamente al origen (ciclo abierto) o reutilizarse a través de la torre de refrigeración (ciclo cerrado).
Torre de refrigeración: Instalación que permite ceder a la
atmósfera, que actúa como foco frío, una parte del calor residual producido en la generación de electricidad. Se utiliza para enfriar el agua que circula por el condensador, formando parte del circuito auxiliar de refrigeración de la central.
Condensador: Intercambiador de calor formado por un conjunto de
tubos por los que circula el agua de refrigeración. El vapor de agua que entra en el condensador procedente de la turbina se licúa pasando a fase líquida. Esta conversión produce un vacío que mejora el rendimiento de la turbina.
5. Centrales eólicas: la energía cinética del viento se transforma
directamente en energía mecánica rotatoria mediante un aerogenerador.
COMPONENTES:
La góndola: Contiene los componentes clave del aerogenerador,
incluyendo el multiplicador y el generador eléctrico. El personal de servicio puede entrar en la góndola desde la torre de la turbina. A la izquierda de la góndola tenemos el rotor del aerogenerador, es decir las palas y el buje.
Las palas del rotor: Capturan el viento y transmiten su potencia
hacia el buje. En un aerogenerador moderno de 600 kW cada pala mide alrededor de 20 metros de longitud y su diseño es muy parecido al del ala de un avión.
El buje: El buje del rotor está acoplado al eje de baja velocidad del aerogenerador.
El eje de baja velocidad: Conecta el buje del rotor al multiplicador.
En un aerogenerador moderno de 600 kW el rotor gira muy lento, a unas 19 a 30 revoluciones por minuto (r.p.m.) El eje contiene conductos del sistema hidráulico para permitir el funcionamiento de los frenos aerodinámicos.
El multiplicador: Tiene a su izquierda el eje de baja velocidad.
Permite que el eje de alta velocidad que está a su derecha gire 50 veces más rápido que el eje de baja velocidad. El eje de alta velocidad: Gira aproximadamente a 1.500 r.p.m. lo que permite el funcionamiento del generador eléctrico. Está equipado con yn freno de disco mecánico de emergencia. El freno mecánico se utiliza en caso de fallo del freno aerodinámico, o durante las labores de mantenimiento de la turbina.
El generador eléctrico: Suele ser un generador asíncrono o de
inducción. En los aerogeneradores modernos la potencia máxima suele estar entre 500 y 1.500 kW.
El controlador electrónico: Es un ordenador que continuamente
monitoriza las condiciones del aerogenerador y que controla el mecanismo de orientación. En caso de cualquier disfunción (por ejemplo, un sobrecalentamiento en el multiplicador o en el generador), automáticamente para el aerogenerador y llama al ordenador del operario encargado de la turbina a través de un enlace telefónico mediante modem.
La unidad de refrigeración: Contiene un ventilador eléctrico
utilizado para enfriar el generador eléctrico. Además contiene una unidad refrigerante por aceite empleada para enfriar el aceite del multiplicador. Algunas turbinas tienen generadores refrigerados por agua.
La torre: Soporta la góndola y el rotor. Generalmente es una ventaja
disponer de una torre alta, dado que la velocidad del viento aumenta conforme nos alejamos del nivel del suelo. Una turbina moderna de 600 kW tendrá una torre de 40 a 60 metros (la altura de un edificio de 13 a 20 plantas). Las torres pueden ser bien torres tubulares (como la mostrada en el dibujo) o torres de celosia. Las torres tubulares son más seguras para el personal de mantenimiento de las turbinas ya que pueden usar una escalera interior para acceder a la parte superior de la turbina. La principal ventaja de las torres de celosia es que son más baratas.
6. Centrales termoeléctricas solares: la energía del Sol calienta un
fluido que transforma en vapor otro segundo fluido, que acciona la turbina-alternador que consigue el movimiento rotatorio y así, generar electricidad. COMPONENTES:
Caldera: Es la parte de la central solar en la que convergen los rayos
solares reflejados por los helióstatos, alcanzando una gran temperatura. Al alcanzar esa gran temperatura, calienta el agua que pasa por ella y la transforma en vapor.
Turbina: El vapor generado en la caldera mueve la turbina, la cual
está unida al generador para que éste reciba su movimiento. Generador o alternador: Es el encargado de generar energía eléctrica; gracias al movimiento rotatorio de la turbina, el generador transforma ese movimiento en energía eléctrica mediante inducción.
Acumulador: Almacena la energía calorífica que no ha sido utilizada,
ejemplo de los clásicos termos de agua caliente, para su posterior empleo en ausencia de radiación solar.
Transformador: Se encarga de transformar la energía eléctrica
generada en el alternador para hacerla llegar a la red eléctrica.
Condensador: Es donde se convierte el vapor (proveniente de la
turbina) en agua líquida. Ello es debido a que en el interior del condensador existe un circuito de enfriamiento encargado de enfriar el vapor, transformándose en agua líquida.
Bomba: Es la encargada de impulsar el agua de nuevo hasta la
caldera.
Centro de control: Es donde se controla todo el proceso de
transformación de la energía solar en energía eléctrica.
7. Centrales de biomasa o de residuos sólidos urbanos (RSU) :
utilizan el mismo esquema de generación eléctrica que una central térmica convencional. La única diferencia es el combustible utilizado en la caldera, que proviene de nuestros residuos.