SALMO 127:3-5. “He aquí, herencia de Jehová son los hijos;
Cosa de estima el fruto del vientre.
Como saetas en mano del valiente,
Así son los hijos habidos en la juventud.
Bienaventurado el hombre que llenó su aljaba
de ellos;
No será avergonzado
Cuando hablare con los enemigos en la puerta”.
REFLEXIÓN INICIAL SALMO 127:3-5.
LA IMPORTANCIA DE LOS HIJOS PARA EL PUEBLO DE DIOS.
▸ Los hijos, en la enseñanza bíblica, no son mero producto
de la virilidad y de la fertilidad: son un don de Dios.
▸ El salmista ocupa el concepto “herencia”, dando cuenta de
un don y de una esperanza.
▸ Otro elemento que brinda el salmo, es que los hijos son
como un arsenal de flechas, para la protección futura. Los hijos serán ayuda, defensa y apoyo en el futuro. REFLEXIÓN INICIAL SALMO 127:3-5.
LOS HIJOS EN LA SOCIEDAD ACTUAL.
▸ Los medios de comunicación nos brindan cotidianamente un panorama:
▸ Negligencia y descuido respecto a los niños.
▸ Maltrato y abuso.
▸ El aborto entendido como un “derecho reproductivo”.
Poco respeto por la vida de los niños. REFLEXIÓN INICIAL SALMO 127:3-5.
TAREAS QUE SE DESPRENDEN DEL TEXTO.
▸ Reconocer que los hijos son don de Dios como base de todas las tareas que tenemos como padres y madres.
▸ Si los hijos son un don de Dios, ¿por qué postergar la
procreación por motivos egoístas? ¿Por qué cerrarse a la adopción, en el caso, de que no pudieran ser padres por la vía natural?
▸ No delegar la educación en terceros. Ni la escuela ni la
iglesia podrán cumplir jamás la función que tú como padre y tú como madre debes cumplir. REFLEXIÓN INICIAL SALMO 127:3-5.
▸ Tener hijos es otra forma de hacer discípulos. Las iglesias
también crecen orgánicamente. Dietrich Bonhoeffer señaló: “Es de Dios que los padres reciben sus hijos, y es a Dios que deberían guiarlos”.
▸ Debemos dejar de lado pensar en los hijos para la
satisfacción personal, sino que pensar en ellos para la gloria de Dios. Que en todo lo que hagan, sean seguidores de Cristo, que amen su gracia. HIJOS Y MATRIMONIO.
¿QUÉ PASA CON EL MATRIMONIO?
▸ Los cónyuges, devenidos en padres y madres tienden a constituir la relación con los hijos como la más importante de la vida.
▸ Se olvida que ellos crecen y también “dejan padre y
madre…” (el matrimonio es exclusivista).
▸ La etapa crítica del “nido vacío”: el encuentro con un otro
olvidado o desdeñado.
▸ Nada los daña más que un padre y madre que no manifiestan
una unidad radical. HIJOS Y MATRIMONIO.
“Tu matrimonio ha de ser para ti más importante que todo
aquello otro que cuente en tu vida. Ningún ser humano tendrá mayor derecho a tu amor, tus cuidados, tu dedicación y tu fidelidad que tu pareja. Dios nos insta a dejar padre y madre, pese a lo importantes que han sido, y serán, en nuestras vidas, para poder formar así una nueva unión que habrá de ser la más primordial y fuerte de nuestra vida” (Timothy y Kathy Keller, El significado del matrimonio). ROLES.
TAREAS DE LOS PADRES. EFESIOS 6:4.
▸ No hacer enojar a los hijos: Elemento contracultural ante la figura del pater familias. El abuso de poder, malestar y favoritismo deben ser excluidos de la crianza de los hijos. El fastidiar a los hijos sólo trae resentimiento.
▸ Crianza en la disciplina y amonestación del Señor:
Cuidado del cuerpo, la mente y las emociones de los hijos, que son portadores de la imagen de Dios. Forjar la voluntad (disciplina). Desenvolvimiento de la mente (enseñanza). ROLES.
EL MODELO EDUCATIVO DE LOS HIJOS EN LA BIBLIA.
▸ Léase Deuteronomio 6:1-9.
▸ Cuidar el corazón: Marcos 7:21,22; Proverbios 4:23.
▸ Educación respetuosa de la personalidad y de la
integridad de los hijos.
▸ Educación inclusiva y transformadora: hijos e hijas son
alcanzados por la enseñanza del Maestro. ROLES.
“Enseñamos a nuestro hijos acerca de Dios
aun antes que ellos sepan hablar o caminar, y nunca dejamos de hacerlo. La educación en la vida del pacto no es opcional; Dios la requiere. También rechazamos la noción de que la ‘religión’ es un simple asunto de ‘elección personal’ puesto que pensamos que es inmoral ocultar a nuestros niños lo que es más grande y sagrado para nosotros. Sería criminal enseñar a nuestros niños a vivir, y negarles al mismo tiempo la vida misma. Conocer a Dios, ¡de eso se trata la vida!” (Andrew Kuyvenhoven, Partícipes del pacto). ROLES.
TAREAS DE LOS HIJOS. EFESIOS 6:1-3.
▸ Obedecer. Obedecer tiene el sentido literal de hacer lo que se nos dice después de haber escuchado con atención. “En el Señor”, implica que debe vivirse con distintivo cristiano y, a la vez, es motivo liberador. La obediencia es relativa, se aplica a lo justo.
▸ Honrar. Es valorar, es tener en alta estima. Esto no sólo se
aplica al nivel de las palabras, sino también a los hechos (inclusive, al financiamiento). Éste es un principio innegociable para la ética cristiana. Mandamiento con promesa: implica el Shalom de Dios. UN PROBLEMA DE LA SOCIEDAD ACTUAL.
EL GOBIERNO DE LOS NIÑOS.
▸ En esto sigo a Kevin DeYoung en su libro “Súper ocupados”.
▸ “Vivimos en una era en la que la felicidad y el éxito futuros
de nuestros hijos sobrepasan las demás preocupaciones”.
▸ “Bajo la kindergarquía todas las cosas están centradas en
los niños: su escolarización, sus lecciones, sus predilecciones, su cuidado y alimentación, y el alto mantenimiento en general; los hijos son el meollo del asunto” (Joseph Epstein). UN PROBLEMA DE LA SOCIEDAD DEL CRISTIANISMO ACTUAL.
▸ “Los padres cristianos en particular, a menudo, actúan con un
determinismo implícito. Tememos que unos pocos movimientos en falso arruinen a nuestros hijos para siempre y, a la vez, suponemos que la combinación correcta de protección e instrucción producirá invariablemente buenos hijos. Leslie Leyland Fields tiene razón: ‘Uno de los mitos más resistentes y valiosos de ser padres es que la crianza crea al hijo’”. […] “¿Podría ser que hemos hecho de la crianza y la educación algo demasiado complicado? ¿No será que lo más importante no es lo que hacemos, sino quiénes somos como padres? Ellos recordarán nuestro carácter antes que nuestras reglas exactas respecto de la televisión y los pastelitos” (Kevin DeYoung, Súper ocupados). PADRES E HIJOS CREYENTES.
ENTONCES, ¿CUÁL ES LA TAREA?
“Criar hijos no es ni mucho menos el tema principal de las Escrituras. Dios no da muchas instrucciones concretas sobre la relación padre-hijo, salvo que los padres deben enseñar a sus hijos acerca de Dios (Dt. 6:7; Pr. 1—9), disciplinarlos (Pr. 23:13; He. 12:7-11), estar agradecidos por ellos (Salmo 127:3-5) y no hacerlos enojar (Ef. 6:4). El resto de los detalles depende de la familia, la cultura, la sabiduría del Espíritu y mucha prueba y error” (Kevin DeYoung, Súper ocupados). FINALIZANDO.
¿CÓMO TE SIENTES DESPUÉS DE TODO?
FINALIZANDO.
▸ Hay trabajo que hacer, pero siempre afirmados en la
gracia.
▸ No somos la familia Ingalls, ni las familias perfectas del
sueño americano. Somos familias redimidas por pura gracia.
▸ “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece
en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer” (Juan 15:5).