Buenas Noches, Señor

Antes de cerrar los ojos,

los labios y el corazón,
¡buenas noches!, Padre Dios.

Dios mío, Jesucristo: Te doy gracias por todos los beneficios que
has dispensado en este día. Te ofrezco mi sueño y todos los
momentos de esta noche.

Gracias por todo ese amor que nos das día tras día señor;
si muchas son nuestras deudas,
infinito es tu perdón.
Mañana te serviremos,
en tu presencia, mejor.

Quédate junto a nosotros

y danos tu bendición.
Si los nervios me traicionaron
si los impulsos egoístas me dominaron,
si di entrada al rencor o a la tristeza,
si el orgullo me domino
¡perdón, Señor! Ten piedad de mí

si pronuncié palabras vanas,

si me dejé llevar por la impaciencia,
si fui espina para alguien, ¡perdón, Señor!
No quiero esta noche entregarme al sueño
 sin sentir sobre mi alma
la seguridad de tu misericordia,
tu dulce misericordia
enteramente gratuita, Señor.

Te doy gracias, Padre mío,

porque has sido la sombra fresca
que me ha cobijado
durante todo este día.
Te doy gracias porque
invisible, cariñoso, envolvente
me has cuidado como una madre,
En tu nombre, Señor,
descansaré tranquilo. Así sea.
AMÉN…