RESUMEN

Como peruanos que somos debemos ser conscientes de dos cosas: la primera, somos un
país de montañas tropicales, y la segunda, somos un país telúrico. Los Andes son una
cadena de montañas localizadas en el trópico y de muy reciente formación, debido a la
colisión de la placa de Nazca con la placa continental de América del Sur. Los Andes aún
continúan en formación, por eso la nuestra es una región de inestabilidad geológica de
lata intensidad sísmica y muy sensible a los cambios climáticos. Esta cordillera configura
todos los ecosistemas andinos de nuestro territorio y es la columna vertebral del Perú, ya
que se extiende a lo largo del territorio y como paralela y muy próxima al océano Pacifico.
Las diferencias abismales de latitud entre las cumbres y los valles, por donde discurren
los ríos, imponen la dimensión de verticalidad en el habitad andino. Las masas de nieve,
las lagunas de las montañas y las precipitaciones constituyen las fuentes de agua que
originan los ríos que discurren por las laderas andinas hacia las vertientes del Pacifico,
del Atlántico y del Titicaca.

El Perú, por lo tanto, es un país de montañas que requiere una dinámica singular en el
manejo de sus recursos naturales, particularmente del sistema hídrico, en la construcción
de carreteras e hidroeléctricas, en los sistemas de cultivo y crianza, en la actividad minera
y en la ubicación de los pobladores. Los peruanos durante los últimos tiempos hemos
estado de espaldas a esta realidad, y que la naturaleza todavía nos sorprende con sequias,
heladas, aluviones, huaycos, deslizamientos de cerros y aluviones. Las catástrofes no son
naturales, sino sociales y económicas, ya que la desgracias radica en los daños materiales
y humanos ocurrido con la presencia normal de estos fenómenos, sobre los cuales la
sociedad ha construido en este territorio. La culpa no es de la naturaleza sino de la
insensatez y de la mala organización social. Es decir, si la sociedad se hubiera organizado
para prever los problemas y planificar soluciones, no se habrían perdido tantas vidas, no
se hubiera tenido que reconstruir tantas viviendas obras de infraestructura con el fin de
que la población afectada retorne a la normalidad de su vida social y económica.

Como se ha mencionado anteriormente debemos reconocer la estructura básica que

conforma nuestro ambiente. Estos son los siguientes: la ubicación en el trópico occidental
de América del Sur, la verticalidad del espacio, la transversalidad de las cuentas, la
variabilidad del clima, la diversidad biológica, la fragilidad de los ecosistemas, la
dispersión de los espacio productivos y la inestabilidad geológica.

Mia Araceli Tadeo Arcos