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Plan Pastoral Diocesano 2012-2021

7º PROGRAMA ANUAL
Curso Pastoral 2018-2019
La Iglesia y la familia:
fuentes de caridad

–1–
Secretaría para la Coordinación del Plan Pastoral Diocesano

–2–
PLAN PASTORAL DIOCESANO 2012-2021

recordamos ... TERCER TRIENIO


Celebración y transmisión de la fe

1.1. Buscar nuevos medios pastorales para el primer anuncio en nuestras


1. Descubrir el anuncio de Jesucristo a parroquias y movimientos para llegar a los que no conocen a Jesucristo y a
los alejados como manifestación de la los alejados.
LA IGLESIA Y LA
caridad. 1.2. Priorizar la evangelización de los jóvenes.
FAMILIA, FUENTES
2018-2019

1.3. Renovar el compromiso diocesano con la Misión “ad gentes”.


DE CARIDAD.
2.1. Impulsar la pastoral socio-caritativa para promover el desarrollo integral,
7º 2. Fomentar el voluntariado con humano y social, con una clara opción preferencial por los más pobres y
identidad cristiana y el compromiso excluidos.
socio-político de los cristianos. 2.2. Cuidar la coordinación y la identidad apostólica de las organizaciones de
Caritas in Veritate
acción caritativa y social.
Sacramentum Caritatis
3. Fomentar la vivencia de la Eucaristía
3.1. Subrayar la centralidad del domingo en la iniciación cristiana.
Celebración y transmisión de la fe

como sacramento del Amor y plenitud


3.2. Impulso de la Eucaristía como centro y culmen de la vida cristiana.*
de la iniciación cristiana.
1.1. Priorizar la pastoral familiar desde el primer contacto de las familias con la
TERCER TRIENIO

LA FAMILIA: 1. Impulso de la pastoral familiar


parroquia, mediante los procesos de iniciación cristiana.
IGLESIA orientada en una perspectiva de
1.2. Fomentar espacios de acogida y acompañamiento para los hermanos que
2019-2020

DOMÉSTICA, Nueva Evangelización.


necesiten de una atención pastoral especial en el ámbito de la afectividad.
SACRAMENTO DEL 2.1. Promover la creación de grupos de matrimonio.
8º AMOR. 2. Fomentar la adecuada preparación y
2.2. Impulsar experiencias de catequesis familiar.
vivencia del sacramento del
2.3. Fomentar la coordinación entre pastoral juvenil y pastoral familiar para
matrimonio.
aprender a vivir cristianamente el matrimonio.
3. Promover la vivencia de los
Familiaris Consortio 3.1. Promover que la familia sea lugar para el descubrimiento de la vocación.
sacramentos en familia.
1.1. Articular la presencia pública de los laicos en nuestra Diócesis, especialmente
1. Ofrecer una propuesta cristiana a los
en los nuevos areópagos.
LA COMUNICACIÓN temas de actualidad desde el diálogo
1.2. Planificar la utilización de los medios de comunicación y las nuevas
Y EL DIÁLOGO CON fe-cultura.
2020-2021

tecnologías a nivel diocesano y parroquial para difundir la propuesta cristiana.


DIOS Y CON EL
2.1. Posibilitar, mediante actividades informativas y formativas, el conocimiento
MUNDO. 2. Posibilitar un mayor conocimiento del
9º Misterio de Cristo a través del arte
de nuestro patrimonio artístico y su relación con la Liturgia.
2.2. Aprovechar los elementos más significativos de nuestras obras de arte como
sacro.
medio de evangelización.
3.1. Impulsar en nuestra comunidades acciones que ayuden a vivir mejor los
Gaudium et Spes 3. Celebrar los misterios de la fe en
tiempos que nos ofrece el calendario litúrgico, especialmente en Adviento,
clave de oración-unión con Dios.
Cuaresma y Pascua.

* La reunión de la Secretaría para la Coordinación del Plan Pastoral Diocesano del 6 de febrero de 2018 presidida por el Sr. Arzobispo aprobó la inclusión de este objetivo respecto al Plan Pastoral aprobado en 2012.

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Plan Pastoral Diocesano 2012-2021
7º PROGRAMA ANUAL
2018-2019

La Iglesia y la familia: fuentes de caridad

«Se levantó y se puso en camino»


1. ASPECTOS GENERALES

1
Lema:
«Se levantó y se puso en camino» (Lc. 1, 39)

Imagen:
“La visitación”, Luca Giordano (1634-1705)
Camarín del Monasterio de Santa María de Guadalupe
TEMA
“Y María dijo al ángel: «¿Cómo será eso, pues no conozco varón?». El ángel le contestó: «El Espíritu Santo
vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer será llamado
Hijo de Dios. También tu pariente Isabel ha concebido un hijo en su vejez, y ya está de seis meses la que
llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible». María contestó: «He aquí la esclava del Señor; hágase
en mí según tu palabra». Y el ángel se retiró. En aquellos mismos días, María se levantó y se puso en camino
de prisa hacia la montaña, a una ciudad de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. Aconteció que,
en cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel de Espíritu Santo.”
(Del Evangelio de San Lucas, Cap. 1, ver. 35-42)

–4–
Santo Sacramento Eucaristía
Compendio de Doctrina Social de la Iglesia (DSI)
Carta Encíclica “Ecclesia de Eucharistia”, de S. Juan Pablo II, 17 abril 2003
Carta Encíclica “Deus caritas est”, de SS Benedicto XVI, 25 diciembre 2005
Carta Encíclica “Caritas in Veritate”, de SS Benedicto XVI, 29 junio 2009
Exhortación Apostólica Post-sinodal “Sacramentum Caritatis”, de SS Benedicto XVI, 22 febrero 2007
Textos de
Exhortación Apostólica “Evangelii Gaudium”, de SS Francisco, 24 noviembre 2013
referencia
Exhortación Apostólica “Gaudete et exsultate”, de SS Francisco, 19 marzo 2018
Carta Apostólica “Mulieris Dignitatem”, de S. Juan Pablo II, 15 agosto 1988
Carta Apostólica “Dies Domini”, de S. Juan Pablo II, 31 mayo 1998
Instrucción Pastoral “Iglesia, servidora de los pobres”, de la Conferencia Episcopal Esp, 24 abril 2015
Documento “La Caridad en la vida de la Iglesia”, de la Conferencia Episc. Esp. ,15-20 febrero 1993
Cáritas Diocesana de Toledo www.caritastoledo.com
Delegación Diocesana de Misiones www.misionestoledo.org
Delegación Diocesana de Liturgia* https://delegacionliturgiatoledo.wordpress.com/
Organismos Delegación Manos Unidas
diocesanos Secretariado Diocesano de Migraciones
Secretariado Diocesano de Pastoral Discapacitados
Secretariado Diocesano de Pastoral de la Salud https://sites.google.com/site/psaludtoledo/
Secretariado Diocesano de Pastoral Penitenciaria
XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos «Los jóvenes, la fe y
Octubre 2018
el discernimiento vocacional»
10º aniversario de la Consagración de la Diócesis de Toledo al Corazón de
23 noviembre 2018
Jesús.
Efemérides
Centenario de la Consagración de España al Corazón de Jesús (por el rey
30 mayo 2019
Alfonso XIII en el Cerro de los Ángeles)
21 junio 2019 10º aniversario de la toma de posesión de D. Braulio Rodríguez como Arzobispo
de Toledo
* La reunión de la Secretaría para la Coordinación del Plan Pastoral Diocesano del 6 de febrero de 2018 presidida por el Sr. Arzobispo aprobó la inclusión de estas delegaciones respecto al Plan Pastoral aprobado en 2012.
–5–
2. Instrumento de aplicación
del 7º Programa Anual del Plan Pastoral Diocesano
Como en años anteriores, con este documento se pretende profundizar en las razones y en el contexto del Programa
Anual del Plan Pastoral Diocesano. Constituye una guía útil para ayudar a todos los agentes de pastoral a concretar los
objetivos, líneas de acción y propuestas de actividades en sus respectivos ámbitos de actuación.

Como no podía ser de otra manera, el programa pastoral de este curso gira en torno a los objetivos generales que se
marcaron al inicio de este Plan Pastoral Diocesano 2012-2021 que invitaban a “dar un impulso de nueva evangelización para
la familia y desde las familias, inspirado en el proceso de iniciación cristiana” (Decreto de aprobación del Plan Pastoral
Diocesano 2012-2021. Toledo, 7 de junio de 2012).
2
INSTRUMENTO
PREÁMBULO

“La más grande es el Amor” (1Cor 13,13)

Esta expresión de San Pablo –que culmina su gran himno al amor, Carta Magna de todo el servicio eclesial1 – dirigida a
la comunidad cristiana de Corintio, tentada por desviaciones y divisiones en una ciudad plural y cosmopolita, sintetizan todo el
pensar, el sentir y el actuar del programa pastoral diocesano para el curso 2018-2019.
Su lema,“se levantó y se puso en camino” (Lc 1,39), quiere motivar y enmarcar toda la programación pastoral del curso
con la mirada puesta en María, Madre de la Iglesia evangelizadora, que nos está invitando constantemente a recorrer la senda del
servicio partiendo de la proclamación de la grandeza del Señor y su opción preferencial por los pobres. Esta invitación se hace
pedagogía pastoral para nuestras comunidades cristianas desde la llamada que hace el Papa Francisco a “abandonar el cómodo
criterio pastoral del siempre se ha hecho así” para “ser audaces y creativos” 2; o como nos dice en su última Exhortación
Apostólica Gaudete et Exsultate3:“Para un cristiano no es posible pensar en la propia misión en la tierra sin concebirla como un
camino de santidad, porque «esta es la voluntad de Dios: vuestra santificación» (1Ts 4,3). Cada santo es una misión; es un
proyecto del Padre para reflejar y encarnar, en un momento determinado de la historia, un aspecto del Evangelio”. Así pues,

1
Benedicto XVI, Encíclica «Deus Charitas Est» (DCE), nº 34
2
Papa Francisco, Exhortación Apostólica «Evangelii Gaudium» (EG), nº 33
3
Papa Francisco, Exhortación Apostólica «Gaudete Et Exsultate» (GE), nº 19
–6–
recorrer el camino de la santidad, y para ello buscar, servir, acompañar, levantar, curar las heridas de nuestro tiempo…, se
constituyen, sin duda, en las claves metodológicas para todos los procesos de reflexión-acción en este curso pastoral.
Hoy el Señor exige de sus discípulos que valientemente vayan contracorriente con respecto al pensamiento “políticamente
correcto”, sin complejos de inferioridad, con la conciencia que los cristianos tienen que ofrecer algo de lo que el mundo no puede
prescindir. En este gran desafío cultural está en juego la persona humana y las dos instituciones fundamentales para la humanidad:
el matrimonio y la familia; por eso el subtítulo de este curso pastoral es “La Iglesia y la familia, fuentes de caridad”. Para
lograrlo, queremos que resuenen las palabras del Mensaje que, aquél 8 de diciembre de 1965, el Concilio Vaticano II dirigía a las
mujeres que “en este momento en que la humanidad conoce una mutación tan profunda [...] llenas del espíritu del
Evangelio pueden ayudar tanto a que la humanidad no decaiga” 4. Por eso San Juan Pablo II pedía a los fieles laicos
hacerse promotores de un “nuevo feminismo” que “sin caer en la tentación de seguir modelos “machistas”, sepa
reconocer y expresar el verdadero espíritu femenino en todas las manifestaciones de la convivencia ciudadana,
trabajando por la superación de toda forma de discriminación, de violencia y de explotación” 5. Este nuevo curso
pastoral es una buena ocasión para volvamos a leer lo que escribía San Juan Pablo II hace 30 años: “La fuerza moral de la mujer,
su fuerza espiritual, se une a la conciencia de que Dios le confía de un modo especial el hombre, es decir, el ser humano.
Naturalmente, cada hombre es confiado por Dios a todos y cada uno. Sin embargo, esta entrega se refiere especialmente a la
mujer—sobre todo en razón de su feminidad —y ello decide principalmente su vocación [...] En este sentido, sobre todo el
momento presente espera la manifestación de aquel “genio” de la mujer, que asegure en toda circunstancia la sensibilidad por el
hombre, por el hecho de que es ser humano” 6.
Con esa audacia y creatividad que da Jesucristo, el amor de Dios encarnado 7 , y la fuerza del Espíritu que
transforma el corazón de la comunidad eclesial8, la propuesta pastoral para este curso, puerta de entrada al tercer trienio
configurado sobre la dimensión celebrativa y vivencial de la fe, ofrece a las parroquias, movimientos, asociaciones, grupos… líneas
operativas, materiales y recursos para que, desde la escucha y el discernimiento, y en un mundo cambiante, plural y cada vez más
secularizado, nuestra Comunidad eclesial diocesana haga de la caridad el corazón de toda auténtica evangelización. No en
vano, como señala el Papa Francisco, “Dios siempre es novedad, que nos empuja a partir una y otra vez y a desplazarnos para ir
más allá de lo conocido, hacia las periferias y las fronteras. Nos lleva allí donde está la humanidad más herida y donde los seres
humanos, por debajo de la apariencia de la superficialidad y el conformismo, siguen buscando la respuesta a la pregunta por el
sentido de la vida. ¡Dios no tiene miedo! ¡No tiene miedo! Él va siempre más allá de nuestros esquemas y no le teme a las

4
Concilio Vaticano II, Mensaje a las Mujeres
5
S. Juan Pablo II, Encíclica “Evangelium Vitae», nº 99
6
S. Juan Pablo II, Carta Apostólica «Mulieris Dignitatem», nº 31
7
DCE, nº 12
8
DCE, nº 19
–7–
periferias. Él mismo se hizo periferia (cf. Flp 2,6-8; Jn 1,14). Por eso, si nos atrevemos a llegar a las periferias, allí lo
encontraremos, él ya estará allí. Jesús nos primerea en el corazón de aquel hermano, en su carne herida, en su vida oprimida, en
su alma oscurecida. Él ya está allí” 9.
Con estas claves trataremos de llevar a término los objetivos del programa que se han configurado en torno a tres
dimensiones fundamentales de la vida eclesial íntimamente interrelacionadas: el anuncio del evangelio, la comunión de
bienes y la celebración del amor. Las dos primeras porque, como afirma San Juan Pablo II en Novo Millennio Ineunte, son
inseparables en la misión del Señor, y por tanto, lo han de ser en la comunidad eclesial. El anuncio explícito del evangelio, aun
siendo la primera forma de caridad, sin el testimonio de la acción caritativa –dice– “corre el riesgo de ser incomprendido o de
ahogarse en el mar de palabras al que la actual sociedad de la comunicación nos somete cada día. La caridad de las
obras corrobora la caridad de las palabras 10.
Y la tercera, la Eucaristía, pues como celebración del Amor, articula las otras dos dimensiones: “la Eucaristía que edifica la
Iglesia como comunión de fe, amor y esperanza, imprime en quienes la celebran con verdad una auténtica solidaridad y comunión
con los más pobres. En ella culmina el amor evangelizador del Señor, en ella reparte Dios el pan necesario para andar por los
caminos de la vida” (LXXXIII Asamblea Plenaria de la CEE: “La caridad de Cristo nos apremia”).
Todo el programa pastoral diocesano para el curso 2018-2019 es una invitación a la escucha y al discernimiento sobre estas
tres importantes dimensiones de la vida eclesial. Y sus objetivos vienen formulados partiendo de la propuesta del objetivo general
de Plan Pastoral Diocesano: “dar un impulso a la Nueva Evangelización para la familia y desde la familia, inspirado en
el proceso de iniciación cristiana”:
—Descubrir el anuncio de Jesucristo a los alejados como manifestación plena de la caridad
—Impulsar la pastoral sociocaritativa para promover el desarrollo integral humano y social con una clara
opción preferencial por los más pobres y excluidos”
—Fomentar la vivencia de la Eucaristía como sacramento del Amor y plenitud de la Iniciación Cristiana
El presente documento para la aplicación del 7º programa pastoral diocesano pretende justificar y dar razones eclesiológicas
sobre el sentido pastoral de estos tres objetivos y servir de guía para su aplicación práctica en parroquias, movimientos,
asociaciones… Para su desarrollo se han tenido en cuenta tres aspectos que responden a importantes acentos pastorales de la
propuesta programática que el Papa Francisco como Pastor de la Iglesia Universal ha hecho para la Iglesia en los tiempos actuales:
—Una Iglesia en salida misionera
—Una Iglesia pobre para los pobres

9
GE, nº 135
10
S. Juan Pablo II, Carta Apostólica «Novo Millennio Ineunte», nº 50
–8–
—Una Iglesia que celebra

1. UNA IGLESIA EN SALIDA MISIONERA

“La Iglesia peregrinante es misionera por naturaleza” 11. Esta afirmación del Concilio Vaticano II resume de manera
breve y concreta la Tradición misionera de la Iglesia que tiene su origen en el mandato del Señor: “Id, pues, y haced discípulos a
todos los pueblos…” (Mt 28 19-20). Tradición que ha tomado un importante impulso y dinamismo en los últimos tiempos. Pablo VI
la prioriza desde su Exhortación Apostólica Evangelii Nuntiandi considerándola “la dicha y vocación propia de la Iglesia, su
identidad más profunda”; San Juan Pablo II, ante los profundos y significativos cambios que se estaban produciendo en el
mundo, convoca a la Iglesia a una nueva evangelización12; y Benedicto XVI trata de cimentar y dar contenido a esta nueva llamada
evangelizadora en la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos convocado sobre el tema “La nueva evangelización
para la transmisión de la fe cristiana”.
El Papa Francisco, desde el comienzo de su pontificado, ha hecho de la evangelización su preocupación fundamental. Desde
su exhortación programática “La alegría del Evangelio” hasta sus sencillas homilías y discursos están impregnadas de llamadas
al diálogo con el mundo y a la evangelización. Y en todos ellos se reproducen expresiones con un profundo contenido misionero: “la
alegría del evangelio”, “nueva salida misionera”, “salir de la propia comodidad”, “comunión misionera”, “llegar a todas las periferias.
Y así se pregunta y responde en Gaudete et Exsultate. “¿Acaso el Espíritu Santo puede lanzarnos a cumplir una misión y al
mismo tiempo pedirnos que escapemos de ella, o que evitemos entregarnos totalmente para preservar la paz interior? Sin
embargo, a veces tenemos la tentación de relegar la entrega pastoral o el compromiso en el mundo a un lugar secundario, como si
fueran «distracciones» en el camino de la santificación y de la paz interior. Se olvida que «no es que la vida tenga una misión, sino
que es misión»” 13.
En todas estas manifestaciones hay un denominador común: una Iglesia en salida. “Todos somos llamados a esta nueva
‘salida’ misionera. Cada cristiano y cada comunidad discernirá cuál es el camino que el Señor le pide, pero todos somos invitados a
aceptar esta llamada: salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio” 14.Y
lo concreta aún más en Gaudete et Exsultate: “El beato Pablo VI mencionaba, entre los obstáculos de la evangelización,
precisamente la carencia de parresía: «La falta de fervor, tanto más grave cuanto que viene de dentro». ¡Cuántas veces nos
sentimos tironeados a quedarnos en la comodidad de la orilla! Pero el Señor nos llama para navegar mar adentro y arrojar las
11
Concilio Vaticano II, Decreto «Ad Gentes» (AG), nº 2
12
S. Juan Pablo II, Encíclica «Redemptoris Missio» (RM), nº 30
13
GE, nº 27
14
EG, nº 20
–9–
redes en aguas más profundas (cf. Lc 5,4). Nos invita a gastar nuestra vida en su servicio. Aferrados a él nos animamos a poner
todos nuestros carismas al servicio de los otros. Ojalá nos sintamos apremiados por su amor (cf. 2Co 5,14) y podamos decir con
san Pablo: «¡Ay de mí si no anuncio el Evangelio!» (1Co 9,16)” 15.
Desde toda esta perspectiva se ha configurado el primer objetivo del programa pastoral diocesano para este curso:
“Descubrir el anuncio de Jesucristo a los alejados como manifestación plena de la caridad”. Y como ya se ha señalado, en íntima
conexión con el segundo objetivo referido a la dimensión caritativa y social del Evangelio, pues “si esta dimensión no está
debidamente explicitada, siempre se corre el riesgo de desfigurar el sentido auténtico e integral que tiene la misión evangelizadora
16
.
Para conseguir este primer objetivo se han programado tres líneas de trabajo pastoral, relacionadas cada una de ellas
con un importante campo de evangelización. Sin duda, son muchas las periferias que necesitan la luz del Evangelio; y cada una de
ellas da sentido al apostolado personal de cada cristiano. El programa las ha concentrado en tres campos o ámbitos de acción –
seguramente los que más nos interpelan– para discernir en comunidad el camino que el Señor nos pide en estos nuevos tiempos
de evangelización:
—El campo de los alejados e indiferentes
—El difícil ámbito de la juventud
—Y el amplio territorio pastoral de la misión “ad gentes”

1.1. Primerear en el campo de los alejados


“La Iglesia en salida es la comunidad de discípulos misioneros que primerean (…) La comunidad evangelizadora experimenta
que el Señor tomó la iniciativa, la ha primereado en el amor (cf 1Jn 4,10) y, por eso, ella sabe adelantarse, tomar la iniciativa sin
miedo, salir al encuentro, buscar a los lejanos y llegar a los cruces de los caminos para invitar a los excluidos”, Estas palabras del
Papa Francisco alientan la primera línea de acción de este primer objetivo. Salir, buscar el contacto con los no creyentes, alejados o
indiferentes, crear espacios de encuentro…, son tareas para la reflexión en nuestras parroquias, grupos y movimientos apostólicos
en este curso pastoral. Cómo llegar, acercarnos y dialogar con:
—Muchos bautizados que tienen olvidado su bautismo
—Familias que solicitan sacramentos para sus hijos, pero que viven instalados en la más completa indiferencia religiosa
—Compañeros de trabajo, familiares, amigos, conocidos, que desde la simplicidad de los tópicos miran a la Iglesia y a la
Religión incluso con recelo.

15
GE, nº 130
16
EG, nº 179
– 10 –
Todo este amplio espectro social es territorio de misión. De ahí que hoy cobre especial sentido la práctica metodológica del
“primer anuncio”. Sin olvidar que, en cualquier forma de evangelización, el primado es siempre de Dios que quiere llamarnos a
colaborar con Él e impulsarnos con la fuerza de su Espíritu 17 ;y que la evangelización es siempre un proceso complejo con
elementos variados, diferenciados, pero íntimamente interrelacionados 18 ; hemos de convenir en admitir -sin caer en
reduccionismos- cierto primado del “primer anuncio” como puerta de entrada a la experiencia cristiana de fe en estos nuevos
tiempos que vivimos. Esta es la llamada que hace esta línea de acción a nuestras comunidades eclesiales: analizar, reflexionar y
discernir sobre cómo entrar en contacto con personas en diversa situación, con grupos organizados, con
practicantes ocasionales, en catequesis de niños y jóvenes, en el servicio de caridad, en la enseñanza religiosa
escolar… para hacer posible hoy el anuncio al mundo del kerigma.

1.2. Acompañar a los jóvenes


“He querido que ustedes ocupen el centro de la atención porque los llevo en el corazón”. Con estas palabras presentó el Papa
Francisco el Sínodo de los Obispos que se va a celebrar en octubre de 2018 sobre “los jóvenes, la fe y el discernimiento
vocacional”. Estas palabras fundamentan la segunda línea de acción pastoral del primer objetivo del programa: priorizar la
evangelización de los jóvenes.
La Iglesia ha visto siempre a los jóvenes como la “esperanza”. En los tiempos actuales los contempla como “un gran desafío”
19
. A este gran desafío va a intentar dar respuesta la XV Asamblea General Ordinaria de los Obispos cuyo contenido va a ser la
evangelización de los jóvenes. Su documento preparatorio habla ya de dos actitudes básicas, acompañamiento y participación
activa: “A través del camino de este Sínodo, la Iglesia quiere reiterar su deseo de encontrar, acompañar y cuidar de todos los
jóvenes, sin excepción. No podemos ni queremos abandonarlos a las soledades y a las exclusiones a las que el mundo les expone.
Que su vida sea experiencia buena, que no se pierdan en los caminos de la violencia o de la muerte, que la desilusión no los
aprisione en la alienación: todo esto no puede dejar de ser motivo de gran preocupación para quien ha sido generado a la vida y a
la fe y sabe que ha recibido un gran don”.
En relación con la respuesta pastoral, el documento se pregunta: “¿Qué significa para la Iglesia acompañar a los jóvenes a
acoger la llamada a la alegría del Evangelio, sobre todo en un tiempo marcado por la incertidumbre, por la precariedad y por la
inseguridad?”; y nos adelanta tres acciones pastorales básicas: salir, ver y llamar. Sin duda, las conclusiones del Sínodo nos van
ayudar mucho a reflexionar y discernir sobre las acciones pastorales con jóvenes. Ellos ya han hablado en el cuestionario-encuesta

17
EG, nº 12
18
EN, nº 24
19
Directorio General de la Catequesis, nº 182
– 11 –
que ha llegado a todas las Diócesis y en el presínodo celebrado en marzo. Hay importantes coincidencias en sus manifestaciones:
diálogo y escucha.
Reflexionar, discernir y concretar experiencias, caminos, métodos… es la tarea que nos propone para este curso esta línea de
trabajo pastoral con la finalidad de hacer realidad en nuestras parroquias, movimientos, e instituciones, el acompañamiento y la
participación activa de los jóvenes.

1.3. Involucrarse en la misión ad gentes


“La misión específica ad gentes parece que se va parando”. Esta constatación de la realidad que San Juan Pablo II
hace en su encíclica Redemptoris Missio, y a la que trata de dar respuesta invitando “a la Iglesia a un renovado compromiso
misionero” 20, es en síntesis la finalidad de esta línea metodológica de acción.
La misión “ad gentes”, que tuvo un gran impulso en siglos pasados desde una mentalidad inspirada en términos de
cristiandad, hoy continúa teniendo plena vigencia, aunque con respuestas diferentes en un contexto económico, social y político,
totalmente distinto. De ahí la propuesta de San Juan Pablo II “disipar dudas y ambigüedades sobre la misión ad gentes,
confirmando así en su entrega a los beneméritos hombres y mujeres dedicados a la actividad misionera y a cuantos les ayudan;
promover las vocaciones misioneras; animar a los teólogos a profundizar y exponer sistemáticamente los diversos aspectos de la
misión; dar nuevo impulso a la misión propiamente dicha, comprometiendo a las Iglesias particulares, especialmente las jóvenes, a
mandar y recibir misioneros; asegurar a los no cristianos y, de manera especial, a las autoridades de los países a los que se dirige
la actividad misionera, que ésta tiene como único fin servir al hombre, revelándole el amor de Dios que se ha manifestado en
Jesucristo 21. (RM 2).
En una Iglesia Particular, como es la nuestra, que ha respondido y está respondiendo plenamente a la llamada conciliar “a la
comunión y cooperación de las Iglesias, que es hoy tan necesaria para proseguir la obra de la Evangelización” 22, se
hace necesario profundizar y actualizar todos estos aspectos.
Involucrarnos en la misión ad gentes, ha de ser el resultado de una reflexión profunda en nuestras comunidades
eclesiales, parroquias y movimientos, sobre dos interrogantes claves que se hace y se responde San Juan Pablo II:“¿Para qué la
misión?” y “¿por qué la misión?” 23. A ello nos anima el programa pastoral de este curso, y en el horizonte está el mes de
octubre de 2019 que el Papa Francisco ha anunciado ya como Mes Misionero Extraordinario para toda la Iglesia.

20
RM, nº 2
21
Ibid, nº 2
22
AG, nº 38
23
RM, nº 11
– 12 –
2. UNA IGLESIA POBRE PARA LOS POBRES

La iglesia en salida misionera a la que nos invita el Papa necesita encarnarse desde la acción caritativa y social. “El kerigma –
dice el Papa– tiene un contenido ineludiblemente social: en el corazón mismo del Evangelio está la vida comunitaria y el
compromiso con los otros. El contenido del primer anuncio tiene una inmediata repercusión moral cuyo centro es la caridad 24. Esta
centralidad de la caridad está expresada de forma más significativa en su nueva Exhortación Apostólica Gaudete et Exsultate25: “Por
lo tanto, ser santos no significa blanquear los ojos en un supuesto éxtasis. Decía san Juan Pablo II que «si verdaderamente hemos
partido de la contemplación de Cristo, tenemos que saberlo descubrir sobre todo en el rostro de aquellos con los que él mismo ha
querido identificarse». El texto de Mateo 25, 35-36 «no es una simple invitación a la caridad: es una página de cristología, que
ilumina el misterio de Cristo». En este llamado a reconocerlo en los pobres y sufrientes se revela el mismo corazón de Cristo, sus
sentimientos y opciones más profundas, con las cuales todo santo intenta configurarse (…) Ante la contundencia de estos pedidos
de Jesús es mi deber rogar a los cristianos que los acepten y reciban con sincera apertura, «sine glossa», es decir, sin comentario,
sin elucubraciones y excusas que les quiten fuerza. El Señor nos dejó bien claro que la santidad no puede entenderse ni vivirse al
margen de estas exigencias suyas, porque la misericordia es «el corazón palpitante del Evangelio»”.
Este principio fundamental de la vida cristiana, que es reflejo de la vida de Jesús, se hace tarea en la vida de cada cristiano y
de la Iglesia; y como tal tarea, necesita de organización26. Con la mirada puesta en la parábola del buen samaritano, y la razón
transformadora-evangelizadora en las Bienaventuranzas, nuestra Iglesia Diocesana plantea este 2º objetivo para el curso 2018-
2019: “impulsar la pastoral sociocaritativa para promover el desarrollo integral humano y social con una clara
opción preferencial por los más pobres y excluidos”
A este impulso nos invita el objetivo desde dos fidelidades que siempre ha destacado la Tradición eclesial:
— Por una parte, para promover el desarrollo integral del hombre. Tema tratado con gran profundidad por el Papa
Pablo VI en Populorum Progressio y actualizado por Benedicto XVI en Caritas in Veritate.

24
EG, nº 177
25
GE, nos. 96 y 97
26
DCE, nº 20
– 13 –
— Y, por otra, para que dicha pastoral tenga como centro una clara opción por los pobres (2Cor 8,9), de la cual da
testimonio toda la historia de la Iglesia. Nos lo recuerda el Papa Francisco: “Para la Iglesia la opción por los pobres es una
categoría teológica antes que cultural, sociológica, política o filosófica …27
¡Con qué claridad expresa el Papa Francisco en su nueva Exhortación Apostólica estas dos fidelidades!: “es nocivo e ideológico
el error de quienes viven sospechando del compromiso social de los demás, considerándolo algo superficial, mundano, secularista,
inmanentista, comunista, populista. O lo relativizan como si hubiera otras cosas más importantes o como si solo interesara una
determinada ética o una razón que ellos defienden. La defensa del inocente que no ha nacido, por ejemplo, debe ser clara, firme y
apasionada, porque allí está en juego la dignidad de la vida humana, siempre sagrada, y lo exige el amor a cada persona más allá
de su desarrollo. Pero igualmente sagrada es la vida de los pobres que ya han nacido, que se debaten en la miseria, el abandono,
la postergación, la trata de personas, la eutanasia encubierta en los enfermos y ancianos privados de atención, las nuevas formas
de esclavitud, y en toda forma de descarte. No podemos plantearnos un ideal de santidad que ignore la injusticia de este mundo,
donde unos festejan, gastan alegremente y reducen su vida a las novedades del consumo, al mismo tiempo que otros solo miran
desde afuera mientras su vida pasa y se acaba miserablemente” 28.
Para conseguir este objetivo el programa pastoral propone las dos siguientes líneas de trabajo pastoral:

2.1. Fomentar el voluntariado y el compromiso sociopolítico de los cristianos


Benedicto XVI en su encíclica “Deus caritas est”, documento referencial para nuestra reflexión en este curso pastoral,
ofrece las claves que permiten definir y concretar el perfil de estas dos formas de hacer vida la caridad cristiana.
Por una parte, el voluntariado, que lo considera “como un importante fenómeno de nuestro tiempo” y que hay que
fomentar por los "múltiples servicios” que realiza29. Una lectura reflexiva de la Encíclica –sobre todo de los apartados 30 y 31– nos
ayudará, sin duda, al discernimiento personal y en grupo. El voluntariado ha jugado, juega y jugará un papel insustituible
en la acción caritativa y social de la Iglesia. Cuidarlo y fomentarlo, formándolo adecuadamente, es una tarea
eclesial prioritaria, pues sin él sería imposible el ejercicio organizado de la caridad en la vida de la Iglesia.
Esta línea de acción también nos invita a fomentar el compromiso sociopolítico de los cristianos. Un compromiso que
responde al “bien relacionado con el vivir social de las personas”, y que hace afirmar al Papa emérito: “Todo cristiano está llamado
a esta caridad, según su vocación y sus posibilidades de incidir en la polis. Esta es la vía institucional –también política, podríamos
decir– de la caridad, no menos cualificada e incisiva de lo que pueda ser la caridad que encuentra directamente al prójimo fuera de

27
EG, nº 198
28
GE, nº 101
29
DCE, nº 30
– 14 –
las mediaciones institucionales de la polis” 30. Es una llamada que el Magisterio de la Iglesia nos está haciendo constantemente
pues representa, además, presencia evangelizadora de los cristianos y de la Iglesia en la vida social, política, económica, cultural...
El Papa Francisco en Gaudete et Exsultate vuelve a insistir sobre esta responsabilidad:“No se puede esperar, para vivir el
Evangelio, que todo a nuestro alrededor sea favorable, porque muchas veces las ambiciones del poder y los intereses mundanos
juegan en contra nuestra. San Juan Pablo II decía que «está alienada una sociedad que, en sus formas de organización social, de
producción y consumo, hace más difícil la realización de esta donación [de sí] y la formación de esa solidaridad interhumana». En
una sociedad así, alienada, atrapada en una trama política, mediática, económica, cultural e incluso religiosa que impide un
auténtico desarrollo humano y social, se vuelve difícil vivir las bienaventuranzas, llegando incluso a ser algo mal visto, sospechado,
ridiculizado” 31.
Para ayudarnos en el discernimiento sobre esta línea de acción, el programa pastoral recomienda varios documentos:
— Las cartas encíclicas “Deus Caritas est” y “Caritas in Veritate” de Benedicto XVI
— La exhortación apostólica “Evangelii Gaudium” del Papa Francisco
— La instrucción pastoral “La Iglesia servidora de los pobres” (CV Asamblea plenaria de la CEE)
— “La caridad de Cristo nos apremia” -Reflexiones en torno a la eclesialidad de la acción caritativa y social de la Iglesia-
(LXXXIII Asamblea Plenaria de la CEE)

2.2. Cuidar la coordinación y la identidad apostólica de las organizaciones eclesiales de acción caritativa y social
“El amor necesita también una organización, como presupuesto para un servicio comunitario ordenado”. Desde
esta idea básica, Benedicto XVI orienta la actividad caritativa organizada de la Iglesia como “opus propium suyo” para que pueda
“establecer un acertado nexo entre evangelización y obras de caridad”; y “no se diluya en una organización asistencial genérica”
32
.
El documento “La caridad de Cristo nos apremia” (reflexiones en torno a la eclesialidad de la acción caritativa y social de
la Iglesia), que fue redactado en la LXXXIII Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española, nos ofrece un importante
marco de sugerencias, reflexiones y claves metodológicas en relación con la organización, la coordinación entre organizaciones
dependientes de la Iglesia, e incluso, sobre las posibles “grietas” de eclesialidad que pudieren surgir en el actuar.

30
Benedicto XVI, Encíclica «Caritas in veritate» (CV), nº 7
31
GE, nº 91
32
DCE, nos 30 y 31
– 15 –
“El amor verdadero –dicen nuestros Obispos –trata de ser eficaz y creativo. La comunidad eclesial por tanto, bajo la
presidencia del Obispo, debe organizar el servicio a los pobres, conjugando efectividad, gratuidad y universalidad” 33. No hay duda
de que en la acción caritativa y social de la Iglesia “Cáritas ocupa un lugar destacado, por su carácter expresamente eclesial y
jerárquico” 34 , lo que no debe interpretarse, sin embargo, como si Caritas fuera la única forma de acción caritativa-social
institucionalizada existente en las diócesis. De ahí la llamada que hace a la coordinación esta línea de acción. No obstante, Cáritas,
definida por el Papa Francisco como “la caricia de la Iglesia a su pueblo” está llamada a jugar un papel fundamental al servicio
de la comunión interna y a la apertura universal, que debe caracterizar la acción caritativa y social de la iglesia.
El programa pastoral para este curso, a través de esta línea de acción pastoral, invita a todas las parroquias y realidades
eclesiales de nuestra diócesis -no sólo a las organizaciones específicas de acción caritativa y social- a un proceso de escucha,
reflexión y búsqueda para que, nuestra acción caritativa y social no responda solamente a criterios de efectividad, entre los que se
encuentran la organización y coordinación, sino que refleje también con claridad su ser eclesial y su sentido evangelizador.

3. UNA IGLESIA QUE CELEBRA

“Ninguna comunidad cristiana se edifica si no tiene su raíz y quicio en la celebración de la Santísima Eucaristía” 35. Estas
palabras del Concilio Vaticano II y que el Papa Francisco las significa como “celebración de la actividad evangelizadora y fuente de
un renovado impulso donativo” 36, fundamentan el contenido del objetivo 3º del programa pastoral: Fomentar la vivencia de la
Eucaristía como sacramento del Amor y plenitud de la Iniciación Cristiana.
El objetivo plantea la necesidad apremiante de que nuestras celebraciones eucarísticas sean vivas, participativas y gozosas.
Es el gran horizonte en que situaba el Concilio Vaticano II a la Eucaristía:“la Iglesia, con solícito cuidado, procura que los cristianos
no asistan a este misterio de fe como extraños y mudos espectadores, sino que comprendiéndolo bien a través de los ritos y
oraciones, participen conscientes, piadosa y activamente en la acción sagrada, sean instruidos con la palabra de Dios, se
fortalezcan en la mesa del Cuerpo del Señor, den gracias a Dios, aprendan a ofrecerse a sí mismos al ofrecer la hostia inmaculada
no sólo por manos del sacerdote, sino juntamente con él, se perfeccionen día a día por Cristo mediador en la unión con Dios y
entre sí, para que, finalmente, Dios sea todo en todos” 37.Y a lo que el Papa Francisco nos apremia en Gaudete et Exsultate:“La
33
LXXXIII Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española «La Caridad de Cristo nos apremia», nº 16
34
Ibid, nº 23
35
Concilio Vaticano II, Decreto «Presbyterorum Ordinis», nº 6
36
EG, nº 24
37
Concilio Vaticano II, Constitución «Sacrosanctum Concilium», nº 48
– 16 –
comunidad está llamada a crear ese «espacio teologal en el que se puede experimentar la presencia mística del Señor resucitado».
Compartir la Palabra y celebrar juntos la Eucaristía nos hace más hermanos y nos va convirtiendo en comunidad santa y misionera.
Esto da lugar también a verdaderas experiencias místicas vividas en comunidad, como fue el caso de san Benito y santa
Escolástica, o aquel sublime encuentro espiritual que vivieron juntos san Agustín y su madre santa Mónica” 38.
La Tradición de la Iglesia nos ha dejado muchos y ricos documentos sobre la Eucaristía, y en ellos y desde ellos “numerosas
iniciativas para despertar y acrecentar en los creyentes la fe eucarística, para mejorar la dignidad de las celebraciones y promover
la adoración eucarística, así como para animar una solidaridad efectiva que, partiendo de la Eucaristía, llegara a los pobres”39.
Todos ellos pueden ser referentes importantes para ayudarnos a encontrarnos con el Señor en el Sacramento del altar y saciar
nuestra hambre “de verdad y libertad”.
De todos esos documentos, el programa pastoral recomienda especialmente para la reflexión, el discernimiento y la acción
pastoral, la encíclica de San Juan Pablo II, “Ecclesia de Eucharistia”, y la Exhortación Apostólica de Benedicto XVI “Sacramentum
Caritatis”. Partiendo de sus reflexiones se proponen dos líneas de acción pastoral íntimamente interrelacionadas:
— Impulsar la Eucaristía como fuente y culmen de la vida cristiana
— Animar a vivir la centralidad del Domingo como día del Señor

3.1. La Eucaristía fuente y culmen de la vida cristiana


“Suscitar en la Iglesia nuevo impulso y fervor por la Eucaristía” 40 es la propuesta operativa de acción pastoral del
tercer objetivo para este curso. Son muchas y muy importantes las dimensiones y exigencias de nuestra fe a las que el Misterio
Eucarístico nos emplaza por su incidencia en nuestra vida cristiana, pero el caminar metodológico de este curso pastoral, sugiere
incidir sobre dos aspectos fundamentales:
— La íntima conexión de la Eucaristía con el centro de interés del curso, “la Iglesia y la familia, fuentes de caridad”. Es
decir la Eucaristía, “Sacramento de la caridad” 41
— Y la Eucaristía, punto de referencia sacramental para el camino de la iniciación cristiana.
El primero, planteado desde las palabras de Benedicto XVI: “la mística del Sacramento tiene un carácter social, porque en la
comunión sacramental yo quedo unido al Señor como todos los demás que comulgan”, por lo que “una Eucaristía que no comporte

38
GE, nº 142
39
Benedicto XVI, Exhortación Apostólica «Sacramentum Caritatis» (SC), nº 4
40
SC, nº 5
41
SC, nº 1
– 17 –
un ejercicio práctico del amor es fragmentaria en sí misma” 42. La línea de trabajo pastoral, ateniéndose a los objetivos del curso,
pretende acentuar este carácter social de la Eucaristía, sin olvidar, por supuesto, las otras dimensiones. Son muy explícitas e
interpelantes las palabras de nuestros Obispos de la CEE: “Puesto que la Eucaristía es comunión con el Cristo total, el que se
acerque al banquete sagrado se compromete a recrear la fraternidad entre los hombres. Fraternidad imposible si cada uno
permanece encerrado en sus cosas e intereses”. (La caridad de Cristo nos apremia -CEE, noviembre 2004). Interpelaciones que han
de estar muy presentes en todos nuestros procesos formativos.
Benedicto XVI fundamenta también el segundo aspecto de la propuesta: “Puesto que la Eucaristía es verdaderamente fuente y
culmen de la vida y de la misión de la Iglesia, el camino de iniciación cristiana tiene como punto de referencia la posibilidad de
acceder a este sacramento”. Y en la misma dirección, argumenta sobre la importancia de la familia en este primer camino en la fe:
“A este respecto, deseo llamar la atención de modo especial sobre la relación que hay entre iniciación cristiana y familia. En la
acción pastoral se tiene que asociar siempre la familia cristiana al itinerario de iniciación. Recibir el Bautismo, la Confirmación y
acercarse por primera vez a la Eucaristía, son momentos decisivos no sólo para la persona que los recibe sino también para toda la
familia, la cual ha de ser ayudada en su tarea educativa por la comunidad eclesial, con la participación de sus diversos miembros”
43
.
La celebración y la transmisión de la fe que conforman los ejes transversales inspiradores del tercer trienio del Plan
Pastoral han de hacerse realidad pastoral en el planteamiento de esta línea de acción. Desde la pedagogía activa de reflexión-
acción que marca su caminar durante todos estos años, este objetivo hace una llamada especial a todas las realidades eclesiales de
nuestra Diócesis para impulsar la Eucaristía como “fuente y cima de toda la vida cristiana” 44; pues, con palabras de San Juan Pablo
II: “La Iglesia vive de la Eucaristía” 45.

3.2. Vivir la centralidad del Domingo como día del Señor


Desde la constatación que hace San Juan Pablo II sobre las nuevas formas de vivir el domingo en muchos ambientes de
nuestra sociedad secularizada, donde se ha consolidado la práctica del “fin de semana” y donde el domingo ha perdido su
significado originario, en su carta apostólica “Dies Domini” nos lanza el gran desafío de recuperar el “valor irrenunciable del
domingo en la vida cristiana” 46.

42
DCE, nº 14
43
SC, nº 17 y 19
44
Concilio Vaticano II, Constitución «Lumen Gentium», nº 11
45
S. Juan Pablo II, Encíclica «Ecclesia de Eucharistia», nº 1
46
S. Juan Pablo II, Carta «Dies Domini» (DD), nº 6
– 18 –
Esta es la finalidad de esta segunda línea de trabajo pastoral: “Subrayar la centralidad del domingo en la iniciación
cristiana”, y consecuentemente en toda la vida cristiana; pues como bien nos señala: “Este es un día que constituye el centro
mismo de la vida cristiana”. Esta carta apostólica de San Juan Pablo II nos proporciona pautas y claves doctrinales, metodológicas y
prácticas para reflexionar y trabajar en nuestros grupos, parroquias, movimientos, cofradías…esta línea de acción pastoral.
Desea incidir también, de acuerdo con el planteamiento general del Plan Pastoral diocesano, en la importancia de la
familia para revitalizar el domingo como día del Señor. El Papa Santo lo subraya cuando afirma la responsabilidad de los
padres para “educar a sus hijos para la participación en la Misa dominical…, ilustrando el motivo profundo de la obligatoriedad del
precepto” 47. “Es el cometido sacerdotal que la familia cristiana puede y debe ejercer en íntima comunión con toda la Iglesia…” 48 y
que el Papa Francisco refuerza en Amoris Laetitia: “el camino comunitario de oración alcanza su culminación participando juntos en
la Eucaristía, especialmente en medio del reposo dominical. Jesús llama a la puerta de la familia para compartir con ella la cena
eucarística” 49.

47
DD, nº 36
48
S. Juan Pablo II, Exhortación Apostólica «Familiaris Consortio», nº 55 y ss.
49
Papa Francisco, Exhortación Apostólica «Amoris Laetitia», nº 318
– 19 –
3. ACTIVIDADES PROGRAMADAS

OBJETIVO
1º. Descubrir el anuncio de Jesucristo a los alejados como manifestación plena de la caridad.

LÍNEAS DE ACCIÓN
1.1. Buscar nuevos medios pastorales para el primer anuncio en nuestras parroquias y movimientos
para llegar a los que no conocen a Jesucristo y a los alejados.
3
OBJETIVOS
1.2. Priorizar la evangelización de los jóvenes.
1.3. Renovar el compromiso diocesano con la Misión “ad gentes”.

Actividad Organismo Responsable Destinatarios

OBJETIVO
2º. Fomentar el voluntariado con identidad cristiana y el compromiso socio-político de los cristianos.

LÍNEAS DE ACCIÓN
2.1. Impulsar la pastoral socio-caritativa para promover el desarrollo integral, humano y social, con una clara opción
preferencial por los más pobres y excluidos.
2.2. Cuidar la coordinación y la identidad apostólica de las organizaciones de acción caritativa y social.
– 20 –
Actividad Organismo Responsable Destinatarios

OBJETIVO
3º. Fomentar la vivencia de la Eucaristía como sacramento del Amor y plenitud de la iniciación cristiana.

LÍNEAS DE ACCIÓN
3.1. Subrayar la centralidad del domingo en la iniciación cristiana.
3.2. Impulso de la Eucaristía como centro y culmen de la vida cristiana.

Actividad Organismo Responsable Destinatarios


Encuentros Eucarísticos arciprestales, en los tiempos
Delegación de Liturgia,
de Adviento, Cuaresma y Pascua, con tiempo de
Delegación de HHyCC, Caritas
meditación, adoración al Santísimo, presentación de Cada arciprestazgo
Diocesana y otras
proyectos de Caridad, testimonios y actos de
instituciones.
Religiosidad popular.

– 21 –
4. ACTIVIDADES PROGRAMADAS CON CALENDARIO
4.1. ARZOBISPO

2018
Fecha
octubre-noviembre

4.2. CONSEJOS DIOCESANOS DEL ARZOBISPO


Actividad
Visita pastoral Parroquia de Méntrida
4
Fecha Actividad Lugar
25 de octubre Colegio de Arciprestes Casa Sacerdotal (Toledo)
2018

17 noviembre Consejo Pastoral Diocesano Casa Diocesana de Ejercicios (Toledo)


29 noviembre Consejo Presbiteral Casa Sacerdotal (Toledo)
7 febrero Colegio de Arciprestes Casa Sacerdotal (Toledo)
30 abril Reunión Curia Pastoral Casa Diocesana de Ejercicios (Toledo)
2019

4 mayo Consejo Pastoral Diocesano Casa Diocesana de Ejercicios (Toledo)


16 mayo Colegio de Arciprestes Casa Sacerdotal (Toledo)
6 junio Consejo Presbiteral Casa Sacerdotal (Toledo)

4.3. SECRETARÍA PARA LA COORDINACIÓN DEL PLAN PASTORAL DIOCESANO

2 octubre
2018

Reunión de la
18 diciembre
SECRETARÍA PARA LA COORDINACIÓN DEL Arzobispado de Toledo
29 enero
2019

PLAN PASTORAL DIOCESANO


4 junio

– 22 –
4.4. ACTIVIDADES DEL PLAN PASTORAL DIOCESANO

Organismo
Fecha Actividad Lugar Destinatarios
responsable
Jornada Diocesana de Inicio de Curso
10:15 Llegada y acogida
10:30 Vídeo-resumen del curso pasado
10:40 Explicación y Oración inspirada en la imagen de este curso.
11:00 Saludo y mensaje pastoral del Sr. Arzobispo sobre el tema del Programa Anual y
presentación de la Carta Pastoral. Vicaría General
Toledo
2018

11:40 Presentación de los Temas de Reflexión sobre la Eucaristía, fuente de la Caridad en la y Secretaría
22 Iglesia y la familia, preparados por D. Rubén Carrasco Rivera, Delegado de Liturgia. (Salón
para la
septiembre 12:15 Descanso Colegio Coordinación del
12:45 Presentación de los objetivos, actividades y nuevos proyectos del 7º programa anual del
Infantes) PPD
Plan Pastoral Diocesano a cargo de delegaciones.
13:30 Envío de los agentes de pastoral de liturgia y caridad. Entrega Carta Pastoral.
14:30 Tiempo para la comida
16:00 Reuniones específicas por Delegaciones y Secretariados
17:30 Primeras Vísperas del Domingo presididas por el Sr. Arzobispo
18:15 Fin de la Jornada
7as Jornadas de Pastoral. Toda la
Tema: La Iglesia y la familia: fuentes de caridad. diócesis
Ponente: Toledo
Secretaría para
11, 12 y 13 Ponencia 1ª. Una sociedad que busca el amor y la verdad: luces y sombras actuales. (Salón
la Coordinación
enero Ponencia 2ª. Llamados a vivir la vocación al amor: el designio de Dios sobre el hombre. Colegio del PPD
Ponencia 3ª. La caridad, fuente de la vida: retos actuales para la Iglesia. Infantes)
Experiencias Extradiocesanas.
Experiencias Diocesanas.
2019

Jornada Diocesana de Fin de Curso #DandoGracias


En el contexto de la Fiesta de la Visitación, en el año del 10º aniv. de la Consagración de la
Vicaría General y
Archidiócesis al Sagrado Corazón y con ocasión del 10 º aniv. de la toma de posesión de D.
31 mayo – Secretaría para la
Braulio. Toledo Coordinación del
1 junio Viernes: 31 de mayo: Conferencia final Curso de Profundización, Misa, Traslado de la imagen
PPD
del Sagrado Corazón a la Catedral, Catequesis-Concierto y Exposición del Santísimo.
Sábado, 1 de junio: Misa, encuentro de niños y jóvenes, encuentros de movimientos, Jornada
del Voluntariado de Cáritas y Concierto-Festival #DandoGracias.
Consejeros del CPD,
Toledo Vicaría General y Curia diocesana,
15 Acto de Presentación del 8º programa anual del PPD Secretaría para la Consejo Presbiteral,
(Casa de Coordinación del Colegio de Arciprestes
junio sobre “La familia, iglesia doméstica, sacramento del amor”
Ejercicios) PPD y responsables de
movimientos
– 23 –

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