Aprendizaje, Pensamiento, Inteligencia, Comunicación y Lenguaje conforman una serie de procesos mentales que el ser humano adquiere. Que inicia con Recepción de un estímulos físico que se puede transformar en algo consiente y transformable para así tener la capacidad de entender y adquirir la habilidad que nos permite almacenar, retener y recuperar información sobre acontecimientos del pasado.
Permite a los seres humanos modificar su conducta para
adaptarse a las condiciones cambiantes e impredecibles del medio que nos rodea creando un proceso que genera y controla la conducta teniendo la facultad de aprender razonar y resolver problemas que nos permitirán crear un proceso de transmisión de información mediante un proceso mental de estructurar el pensamiento.
Puede decirse que es un aprendizaje perceptual ya que
a través de éste somos capaces de detectar y diferenciar situaciones o eventos significativos. SENSACIÓN
Envuelve dos elementos:
1. Estimulación de los receptores sensoriales.
Los receptores sensoriales son células especializadas capaces de transformar energía física en impulsos nerviosos 2. Transmisión de mensajes neuronales desde los receptores sensoriales hasta el sistema nervioso central.4
En esencia, un proceso sensorial (sensación) se limita a
una recepción de estímulos físicos aislados simples del ambiente mientras que el proceso perceptivo (percepción) es una interpretación, significación y organización de esa información que brinda el proceso sensorial.
Es decir, sentimos enrarecimientos del aire (ondas),
pero percibimos sonidos; sentimos acciones mecánicas, pero percibimos caricias o golpes; sentimos gases volátiles, pero percibimos la fragancia de un perfume o el aroma del desayuno.
De modo que nuestras percepciones no son registros
directos del mundo que nos rodea, sino que se construyen internamente siguiendo reglas innatas y constricciones impuestas por las capacidades del sistema nervioso.
.La imagen que del mundo tiene el ser humano es tan
consistente que se asume que conocemos el mundo tal como es. Sin embargo, los hechos inmediatos que originan las percepciones, no están fuera sino dentro del sistema nervioso.
PERCEPCIÓN
La percepción es el acto de recibir, interpretar y
comprender a través de la psiquis las señales sensoriales que provienen de los cinco sentidos orgánicos. Es por esto que la percepción, si bien recurre al organismo y a cuestiones físicas, está directamente vinculado con el sistema psicológico de cada individuo que hace que el resultado sea completamente diferente en otra persona. Es, además, la instancia a partir de la cual el individuo hace de ese estímulo, señal o sensación algo consciente y transformable.
ATENCIÓN
La atención es la capacidad que tiene alguien para
entender las cosas o un objetivo, tenerlo en cuenta o en consideración. Desde el punto de vista de la psicología, la atención no es un concepto único, sino el nombre atribuido a una variedad de fenómenos. Tradicionalmente, se ha considerado de dos maneras distintas, aunque relacionadas. Por una parte, la atención como una cualidad de la percepción hace referencia a la función de la atención como filtro de los estímulos ambientales, decidiendo cuáles son los estímulos más relevantes y dándoles prioridad por medio de la concentración de la actividad psíquica sobre el objetivo, para un procesamiento más profundo en la conciencia. Por otro lado, la atención es entendida como el mecanismo que controla y regula los procesos cognitivos; desde el aprendizaje por condicionamiento hasta el razonamiento complejo.
En muchos casos actúa de manera inconsciente iniciado
en el hemisferio cerebral izquierdo y es mantenida en el hemisferio derecho. El estar atento ("Poner atención" o "prestar atención") tampoco es un comportamiento único del ser humano. Hay estudios en Massachusetts Institute of Technology donde varios científicos y estudiantes comprueban que tanto se puede afectar la atención de un individuo. Uno de los principales objetivos era ver si una persona era capaz de mantener la atención, teniendo en el oído un auricular al estar entablando una conversación o escuchando a otra persona. Como ya se había dicho anteriormente "prestar atención" no es un comportamiento único del ser humano. Algunos experimentos fracasaron, pero la mayoría lograron entender lo que se les estaba diciendo o ya sea mantener la conversación. Esto depende a que altura de sonido se esté escuchando o también de qué tipo de melodía se está escuchando, ya que las de carácter un poco ruidoso como el rock es más difícil que una persona logren entender la información que se le dé.
MEMORIA
La definición más usual y la más aceptada es la que dice
que la memoria es el almacenamiento y la recuperación de información, que distingue entre el proceso de almacenamiento, que es cuando se guarda la información, el proceso de codificación, que es cuando se clasifica la información, y la recuperación, que es cuando se trae información guardada hacia el presente.
Es una habilidad mental que nos permite almacenar,
retener y recuperar información sobre acontecimientos pasados. Se dice que cuando las personas leen historias construyen significados y son estas construcciones las que se recuerdan.
En la memoria intervienen procesos que construyen y
reconstruyen la información. Memorizamos cosas nuevas basándonos en lo que ya sabemos.
Nuestros recuerdos sufren alteraciones mediante
diferentes procesos, no nos acordamos de lo que sucedió sino de lo que creemos que sucedió.
La memoria está relacionada con la totalidad de los
procesos del pensamiento. La memoria consista en una serie de sistemas complejos interconectados que se comportan de forma distinta. No tenemos una memoria sino muchas.
Finalmente, memoria hay de dos tipos, a corto y a largo
plazo, en la primera la información se almacena automáticamente, se mantiene un tiempo, y se puede ayudar a mantener con la repetición, como memorizar un número de teléfono o cuando ustedes se memorizan una definición que no fue significativa, se vacía constantemente. La memoria de largo plazo, es la que analiza, comprende y relaciona con otras ideas la información de la memoria de corto plazo, es ilimitada en tiempo y duración, generalmente se quedan ahí aquello que me impactó, que me importa, que se relaciona conmigo.
PENSAMIENTO
Es un proceso complejo, es propio de los seres humanos
el estímulo no siempre se halla presente y de alguna manera genera y controla la conducta. Se conoce como la capacidad mental para ordenar, dar sentido, interpretar la información disponible en el cerebro. Se caracteriza porque opera mediante conceptos. Siempre responde a una motivación, que pueda estar originada en el ambiente natural, social o cultural. Es una resolución de problemas. El proceso del pensar lógico siempre sigue una determinada dirección. En busca de una conclusión o de la solución de un problema Se presenta coherente y organizada, en lo que respecta a sus diversos aspectos, elementos y etapas. 16
Según la definición teórica, el pensamiento es aquello
que se trae a la realidad por medio de la actividad intelectual. Por eso, puede decirse que los pensamientos son productos elaborados por la mente, que pueden aparecer por procesos racionales del intelecto o bien por abstracciones de la imaginación. El pensamiento puede abarcar un conjunto de operaciones de la razón, como lo son el análisis, la síntesis, la comparación, la generalización y la abstracción. Por otra parte, hay que tener en cuenta que se manifiesta en el lenguaje e, incluso, lo determina. LOS TIPOS DE PENSAMIENTO SON:
Deductivo: ocurre cuando se toma una o varias
proposiciones y de ellas se obtiene una conclusión. Resulta la forma de pensamiento más común, la que utilizamos a diario para intentar comprender los hechos que nos rodean, para analizar las historias que nos cuentan los demás, etcétera.
Inductivo: de forma opuesta a lo antes definido, este
proceso se basa en una idea particular para luego generalizarla, apoyado en que su veracidad en el caso aislado se mantendrá en situaciones similares, aun sin poder comprobarlo.
Analítico: parte la realidad en porciones para poder
evaluarla a través de mecanismos lógicos.
Creativo: la base del arte, ya que se basa en la libertad
de modificar una idea, agregando o quitando elementos sin restricciones impuestas por el marco de lo posible.
Sistémico: propone un sistema orgánico que
interrelaciona los conceptos de manera compleja. Crítico: analiza a la vez que evalúa las ideas, intentando obtener respuestas convincentes relacionadas con la moral, la ética, los gustos, las tendencias; es el tipo de pensamiento que nos ayuda a formar nuestra personalidad y a reforzar nuestras convicciones a través de la observación activa de la realidad.
Interrogativo: a la hora de tratar un tema en particular,
este tipo de pensamiento nos permite cuestionar distintos aspectos de nuestro interés, articulando así el proceso de aprendizaje.
LENGUAJE
Es la capacidad de comprensión y de comunicación con
el resto de personas viene determinada por el lenguaje.
Este proceso mental superior nos permite estructurar el
pensamiento, estableciendo conexiones entre las ideas y representaciones mentales mediante los esquemas. Por ello, se dice que el lenguaje es el vehículo sobre el que discurre el pensamiento, yendo ambos conceptos unidos de la mano. Los dos son distintas caras de una misma moneda. Pero no debemos confundir la capacidad del lenguaje con sus modalidades. Existen varias formas de lenguaje, siendo la más común el lenguaje verbal. Sin embargo, existen otras formas de expresión como los gestos - elaborados culturalmente- que complementan la comunicación oral. Las mismas palabras acompañadas de distintos gestos pueden significar cosas totalmente distintas. 24
Siempre es interesante, antes de determinar el
significado de una palabra en concreto, el llevar a cabo una pequeña investigación para encontrar el origen etimológico de la misma. En concreto, si hacemos lo propio con el término que nos ocupa hallaremos que dicho origen reside en el idioma provenzal y más concretamente en el concepto lenguaje. No obstante, este a su vez procede del término latino lingua. Una vez expuesto esto tenemos que determinar que con la palabra lenguaje lo que hacemos es referirnos a todo aquel conjunto de signos y de sonidos que ha utilizado el ser humano, desde su creación hasta nuestros días, para poder comunicarse con otros individuos de su misma especie a los que manifiesta así tanto lo que siente como lo que piensa acerca de una cuestión determinada.
El concepto de lenguaje puede ser entendido como un
recurso que hace posible la comunicación. En el caso de los seres humanos, esta herramienta se encuentra extremadamente desarrollada y es mucho más avanzada que en otras especies animales, ya que se trata de un proceso de raíces fisiológicas y psíquicas. El lenguaje, como sabrán muchos de ustedes, le brinda la posibilidad al hombre de seleccionar, citar, coordinar y combinar conceptos de diversa complejidad.
EL YO Y LA COMUNIDAD
De todas las teorías desarrolladas por Sigmund Freud,
la del Ello, el Yo y el Superyó es una de las más famosas. Según su enfoque psicodinámico, cada una de estas estructuras representa una instancia psíquica que, desde nuestro sistema nervioso, nos llevan a perseguir unos intereses que chocan entre sí.
Así pues, el Ello, el Yo y el Superyó son los conceptos
que Freud utilizó para referirse al conflicto y la lucha de fuerzas antagónicas que, según él, rigen nuestra forma de pensar y de actuar. El objetivo del psicoanálisis era, por lo tanto, hacer aflorar la verdadera naturaleza de los conflictos y los bloqueos que según Freud estaban en la base de la psicopatología.
LA GENESIS DE LA MORAL
Respecto a la moral es muy importante establecer una
distinción entre la conciencia y el conocimiento moral por un lado y la conducta moral por otro: un individuo puede haber recibido una serie de normas morales e incluso estar de acuerdo con ellas pero luego en la práctica no respetarlas consciente o inconscientemente.
Los primeros estudios de los psicólogos que se
ocuparon de los fenómenos morales trataron de ver cómo van adquiriendo los individuos las características morales que se consideran beneficiosas como la virtud, la honestidad, el altruismo, la generosidad, el autocontrol…
PIAGET: DE LA HETERONOMÍA A LA AUTONOMÍA
El trabajo de Piaget “el juicio moral en el niño” cambió la
orientación de los estudios sobre la génesis de la moral. En vez de centrarse sobre las valoraciones morales (contenido moral) que hacen los individuos o sobre la conducta moral se orientó hacia el estudio del razonamiento moral, es decir, con qué criterios los sujetos juzgan las conductas morales y cómo razonan acerca de ellas.
Piaget consideró que las normas a las cuales se adecua
la conducta de los individuos pueden ser impuestas por otros (en el caso de los niños por los adultos) o pueden interiorizarse y el sujeto hacerlas suyas.
Piaget encontró un terreno en el que existían reglas
estrictamente infantiles, en el ámbito de los juegos. Durante un largo periodo de su desarrollo los niños juegan a juegos de reglas que son juegos de carácter propiamente social y que para poder llevarse a cabo necesitan de unas reglas explícitas acerca de cómo desarrollar el juego. Piaget encontró una serie de etapas tanto en lo que llamó la práctica de las reglas, como en la conciencia de las reglas.
Responsabilidad objetiva: se juzga la
responsabilidad por las consecuencias y perjuicios de la acción realizada. Responsabilidad subjetiva: se juzga la responsabilidad sobre la base de las intenciones que guían la acción.
DIOS FE Y RELIGIOSIDAD
En su interesante nota del pasado 12 de febrero, Enrique
Bianchi retoma la crítica de la religión, basada paradójicamente -como él afirma- en su promesa de colmar nuestras aspiraciones, de calmar nuestras angustias, de hacer posible lo que todos deseamos, de satisfacer nuestra sed de sentido y de eternidad. Todo ello encontraría su formulación más lapidaria en la frase de Andrés Comte-Sponville: "Una creencia que responde tan exactamente a nuestros deseos hace temer que haya sido inventada, justamente, para satisfacerlos". Me propongo aquí prolongar la reflexión, abordando un aspecto de la vivencia religiosa menos tenido en cuenta, a saber, el de la fe.
Ghislain Lafont, en su libro Dios, el tiempo y el ser,
aborda la cuestión de la experiencia bíblica de Dios. Allí señala que, en su etapa inicial, Dios es concebido a partir del humano -"demasiado humano"- deseo de felicidad: Dios bendice, Dios da, Dios protege, Dios acompaña, Dios cuida, Dios está presente. Y el hombre se siente bien con El; le resulta provechoso y natural relacionarse con ese ser benéfico que tan perfectamente se acomoda a su deseo de felicidad y lo garantiza. Al menos, para la vida en este mundo, que para el hombre bíblico será por mucho tiempo el único que cuente, ya que la esperanza en la vida eterna nace sobre el final del Antiguo Testamento.
El Dios bíblico no rechaza este modo "demasiado
humano" de ser buscado y encontrado por el hombre. Es más: parecería alegrarse -como el padre de la parábola del hijo pródigo- en ser reconocido así por el humano, es decir, en función de la felicidad a la que éste aspira.
Si la aventura religiosa terminara allí, ¿cómo no darles
la razón a Freud, a Comte-Sponville y a tantos otros que en esa figura de un padre bueno y todopoderoso han visto una mera ilusión o una proyección o un invento del corazón humano, herido por frustraciones de todo tipo, comenzando por la muerte?
Pero para el relato bíblico, eso es sólo el inicio de un
itinerario, el de la vida de la fe. La religión debe madurar en la fe. Será Dios mismo quien, una vez que el hombre haya reconocido su presencia anticipada en el don, en la bendición, en la protección, se distancie -a veces brutalmente- de esa imagen primera -religiosa, muy humana, a veces hasta idolátrica- que El mismo ha favorecido: ahora, el Dios bueno prohíbe (Adán); el Dios de la vida pide el sacrificio (Abraham); el Dios que colma de bienes permite la ruina total (Job); el Dios que dice amar a su Mesías lo abandona en el suplicio espantoso de la cruz (Jesús). Se podría pasar del texto bíblico a la experiencia de los que llamamos santos, y encontraríamos una continuidad esencial. Pensemos tan sólo en Teresa del Niño Jesús o en Teresa de Calcuta? El término "noche oscura", amado por los místicos, no dice ni de lejos el horror y el dolor de la muerte espiritual padecida por ellos ante la "desaparición de Dios" (Bellet).