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LA FUNCIÓN DE PRODUCCIÓN
La función de producción muestra la relación existente entre el producto obtenido y la
combinación de factores que se utilizan en su obtención, es decir, es la expresión matemática
que relaciona las cantidades de factores empleadas con la cantidad de producto obtenido según
una técnica determinada. Viene dada por la expresión:
Q f (T , L, K , E) donde:
Q = Cantidad máxima de producto obtenido
T = Tierra
K = Capital
E = Iniciativa empresarial
Por tanto, a la hora de estudiar la empresa como unidad productora de bienes y servicios
debemos tener en cuenta el periodo de tiempo considerado por ésta para adoptar sus
decisiones. En este sentido, atendiendo a su dimensión temporal, podemos diferenciar dos
perspectivas de producción:
Producción a corto plazo. Es la que se produce en un periodo de tiempo durante el
cual sólo puede variar la cantidad de algunos factores.
Producción a largo plazo. Es la que se obtiene en un espacio de tiempo durante el
cual todos los factores de producción pueden variar.
Para analizar la producción a corto plazo vamos a utilizar un ejemplo. Supongamos que un
grupo de amigos decide montar una pastelería. Los factores productivos necesarios para la
producción de pasteles son el trabajo (número de trabajadores a contratar), el capital (un local,
hornos, utensilios para hacer pasteles, mobiliario y materias primas) y la iniciativa empresarial
necesaria para llevar adelante el proyecto.
Para simplificar el análisis supondremos que sólo se utilizan dos factores productivos: capital y
trabajo. En concreto, los amigos han alquilado un local comercial de 200 m2 y dos hornos
que constituirán el factor capital, a corto plazo fijo o invariable. Por otro lado, el factor variable
será la mano de obra, es decir, el número de trabajadores o de horas de trabajo a contratar. Si
se quiere aumentar la producción de pasteles habrá que incrementar la cantidad de factor
variable (el trabajo).
De este modo, la función de producción a corto plazo viene dada por la expresión:
Q f (L, K ) donde:
Q = nivel de output (pasteles) a producir
L = trabajo o factor variable a corto plazo
K = capital o factor fijo a corto plazo
La producción semanal que alcanzaría la pastelería a medida que se aumente el factor variable,
es decir, según se incorporen trabajadores, se representa gráficamente como sigue: se sitúan
los valores recogidos en la tabla, colocando en el eje de ordenadas la variable dependiente
(producción total de pasteles) y en el eje de abscisas la variable independiente (nº trabajadores).
Este gráfico muestra que cuando no hay trabajadores la producción es nula y que, según se
van incorporando unidades de trabajo, la producción de pasteles se va incrementando hasta
un punto en que no sólo no se incrementa, sino que incluso decrece.
Este fenómeno se debe a la Ley de los rendimientos decrecientes que afirma que si aumenta
la cantidad de uno de los factores productivos (el trabajo), pero el resto se mantiene
constante (el capital), la producción total aumentará de forma cada vez más lenta hasta dejar
de crecer, pudiendo incluso disminuir.
Explicación de la ley: en nuestro ejemplo, el capital físico (el local y los dos hornos) tiene una
capacidad de uso limitada y aunque al incorporar los primeros trabajadores los incrementos de
producción son importantes debido a que pueden repartirse las tareas entre ellos (amasar,
hornear, atender al público, etc.) y especializarse, a partir de un determinado número de
trabajadores las posibilidades de dividir el trabajo entre ellos serán menores, lo que provocará
la aparición de tiempos muertos e incluso que unos trabajadores estorben a otros,
desembocando la situación en un descenso del rendimiento y, posiblemente, de la producción
total.
Esta ley sólo se cumple en el corto plazo, ya que existen factores fijos y la tecnología está dada.
No sería así de tener la posibilidad de incrementar los factores productivos que hemos
considerado fijos (aumentar el nº de hornos y/o alquilar otro local) o de mejorar la tecnología,
que es lo que ocurre en el largo plazo.
En definitiva, a largo plazo, el elenco de opciones que se le abren a cualquier empresa para
acometer el proceso productivo son mucho mayores, ya que todos los factores pueden variar.
De este modo, si quisiéramos seguir aumentando progresivamente la producción de la
pastelería o de cualquier empresa, tendríamos que hacerlo incrementando tanto el trabajo como
el capital y eso, como hemos visto, sólo podríamos hacerlo a largo plazo, para lo cual
tendríamos que variar la escala en la que utilizamos los factores productivos.
Si variamos todos los factores utilizados en la misma proporción obtendremos una cantidad de
producto a la que se denomina rendimiento de escala. Por tanto, los rendimientos de escala
miden la variación del producto total cuando se aumentan proporcionalmente todos los
factores. De ahí que podamos encontrar:
Rendimientos de escala crecientes o economías de escala. Cuando al variar la
cantidad utilizada de todos los factores en una proporción determinada, la cantidad
obtenida de producto varía en una proporción mayor.
Rendimientos de escala constantes. Cuando la cantidad utilizada de todos los factores
y la cantidad de producto obtenida varían en la misma proporción.
Rendimientos de escala decrecientes o deseconomías de escala. Cuando al variar la
cantidad utilizada de todos los factores en una proporción determinada, la cantidad
obtenida de producto varía en una proporción menor.
Para ilustrar estos conceptos utilizaremos de nuevo el ejemplo de la pastelería. Partimos de una
situación inicial en la que con dos hornos y cuatro trabajadores se alcanzaba una producción
de 800 pasteles. Supongamos ahora que la pastelería incrementa sus factores productivos en
un 100%, de tal forma que dispone de 4 hornos y 8 trabajadores. Por tanto, dependiendo del
nivel de producción que alcance en esta nueva situación, podremos determinar si la pastelería
presenta rendimientos de escala constantes, crecientes o decrecientes:
Trabajo Producción
Capital Rendimientos de
Situación (unidades (pasteles)
(unidades físicas) escala
físicas)
Inicial 2 4 800 -
A 4 8 1600 Constantes
Nueva B 4 8 1200 Decrecientes
C 4 8 2000 Crecientes
Los ingresos de una empresa son el dinero que recibe por la venta de sus
productos. Los ingresos totales se obtienen multiplicando el precio de los
productos por el número de unidades producidas y vendidas de los mismos.
Los costes de producción de una empresa se pueden definir como el valor monetario de las
cantidades consumidas de factores productivos. Diferenciamos varios tipos:
Coste total (CT). Es el valor monetario de todos los factores utilizados para producir un
bien o un servicio. A corto plazo, al igual que hemos visto en la producción (en la que
algunos factores permanecían fijos y otros variaban), existen costes fijos y costes variables,
mientras que a largo plazo todos los costes, lo mismo que los factores, son variables.
- Costes fijos (CF). Son aquellos que no dependen del volumen de producción, se
incurre en ellos aunque la empresa no produzca nada. Aplicado al ejemplo de la
pastelería, serían el alquiler del local y de los hornos y la cuota fija de los suministros:
luz, teléfono, gas, etc.
- Costes variables (CV). Son aquellos que dependen del volumen de producción de la
empresa, es decir, estos costes no aparecen si no existe producción. Por ejemplo:
materias primas, mano de obra, etc.
CT
Coste medio o unitario (CMe). Representa el coste de cada unidad CMe
producida.
Representación gráfica:
Los costes fijos se representan gráficamente por medio de una línea recta que, partiendo del
eje de ordenadas por la cuantía de dichos costes, transcurre paralela al eje de abscisas, lo que
indica que serán siempre los mismos, independientemente de la cantidad producida.
Los costes variables parten del origen de coordenadas, ya que si no hay producción los costes
variables no existen. A medida que la producción se va incrementando también se incrementa
la cuantía de los mismos.
El beneficio se obtiene como la diferencia entre los ingresos y los costes totales.
Bº IT CT
Al igual que hemos visto con los conceptos anteriores, podemos calcular el beneficio medio y
el beneficio marginal.
Bº Bº
BMe BMg IMg CMg
Ejemplo. Para ilustrar los conceptos que acabamos de analizar, vamos a servirnos de nuevo
del ejemplo de la pastelería. Nuestros amigos emprendedores disponen de estos datos relativos
a la estructura de costes diarios de la pastelería: los costes fijos (alquiler del local y de los hornos,
cuota fija de los suministros, etc.) ascienden a 60 € y los costes variables (materias primas,
mano de obra, consumo de suministros, etc.) presenta la siguiente evolución respecto a la
producción de pasteles medida en kilogramos:
Producción 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11
(Kg.)
Coste variable 20 35 48 60 70 78 87 100 120 150 193
Q
CF CV CT CMe CMg IT IMe IMg Bº BMe BMg
(Kg.)
0 60 0 60 - - 0 - - -60 - -
1 60 20 80 80 20 30 30 30 -50 -50 10
2 60 35 95 47´5 15 60 30 30 -35 -17´5 15
3 60 48 108 36 13 90 30 30 -18 -6 17
4 60 60 120 30 12 120 30 30 0 0 18
5 60 70 130 26 10 150 30 30 20 4 20
6 60 78 138 23 8 180 30 30 42 7 22
7 60 87 147 21 9 210 30 30 63 9 21
8 60 100 160 20 13 240 30 30 80 10 17
9 60 120 180 20 20 270 30 30 90 10 10
10 60 150 210 21 30 300 30 30 90 9 0
11 60 193 253 23 43 330 30 30 77 7 -7
A partir de la tabla podemos extraer conclusiones muy interesantes acerca del funcionamiento
de la pastelería. Así, si se vende menos de cierta cantidad de pasteles diarios, la empresa
incurrirá en pérdidas. En este sentido, resulta de especial interés para cualquier entidad
empresarial conocer su denominado umbral de rentabilidad o punto muerto, que es la cantidad
de producto que una empresa ha de producir y vender para obtener un beneficio nulo, es decir,
el nivel de ingresos necesarios para cubrir todos sus costes, tanto fijos como variables. En
nuestro ejemplo, el punto muerto de la pastelería está situado en 4 Kg., ya que para dicho nivel
de producción y venta el beneficio es cero. Por tanto, si los amigos emprendedores quieren
saber en un día concreto si han obtenido beneficios o pérdidas, esta variable es altamente
esclarecedora, ya que si no alcanzan unas ventas de 4 Kg. de pasteles sabrán que han incurrido
en pérdidas y si por el contrario superan este umbral habrán obtenido beneficios.
Punto muerto o umbral de rentabilidad de la empresa
Obtención analítica del punto
muerto:
350 En el punto muerto Bº 0 , por lo
300 que IT CT
250
IT=CT, Bº=0
200 IT P Q
IT, CT
Pérdidas
150
100 Beneficios CT CF CV
50 CV CVu Q
0
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 Por lo que:
Producción (Q)
IT CT P Q CF CVu Q
Sacando factor común Q nos queda: Q(P CVu) CF de donde se obtiene que:
De esta forma:
Si Q >Q* La empresa obtiene beneficios
Si Q < Q* La empresa obtiene pérdidas
La empresa maximiza sus beneficios cuando IMg = CMg. En esta situación, la empresa
obtiene por la venta de la última unidad un ingreso idéntico a su coste. Si IMg > CMg a la empresa
le interesaría aumentar la producción, ya que por cada nueva unidad que venda ingresará más de
lo que le cuesta obtenerla, por lo que incrementarán sus beneficios.
Por el contrario, si IMg < CMg la empresa optará por reducir la producción, ya que por cada
nueva unidad que venda ingresará una cantidad inferior a lo que cuesta obtenerla, por lo que
se reducirán los beneficios.