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MASAJE CRANEOFACIAL

1. Galea aponeurótica 16. Músculo elevador


2. Fascia temporal (lámina del ángulo de la boca
superficial) 17. Músculo orbicular
3. Fascia temporal (lámina de la boca
profunda) 18. Músculo depresor
4. Músculo temporal del ángulo de la boca
5. Vientre frontal (seccionado)
6. Músculo orbicular del 19. Músculo mental
ojo 20. Músculo depresor
7. Músculo corrugador del labio inferior
superciliar 21. Glándula
8. Músculo prócer submandibular
9. Ligamento 22. Músculo
palpebralmedial esternocleidomastoideo
10. Músculo 23. Músculo trapecio
cigomático menor 24. Músculo masetero
11. Músculo elevador 25. Músculo
del labio superior y del buccinador
ala de la nariz 26. Glándula
12. Músculo elevador parotídea
del labio superior 27. Conducto
13. Músculo nasal parotídeo
(porción transversa) 28. Cuerpo adiposo
14. Músculo nasal de la boca
(porción alar) 29. Músculo
15. Músculo depresor cigomático mayor
del septo nasal 30. Vientre occipital
La parálisis facial puede afectar de forma muy importante la calidad de
vida de la persona. Todos los síntomas que produce en la persona
afectada puede significar una disminución en la confianza del paciente e
incluso llegar a sentirse avergonzado.
¿Qué es la parálisis facial?

La parálisis es un síndrome agudo que afecta al nervio facial o séptimo par


craneal produciendo debilidad parálisis temporal en la musculatura de la
cara.

El nervio facial se inicia en la corteza cerebral, terminando en las placas


motoras de los músculos enviando toda la información necesaria a los
músculos. Cuando se produce una lesión en algún lugar del trayecto del
nervio se produce la parálisis facial.

El nervio facial es uno de los 12 nervios que están unidos directamente con
el cerebro. Es un nervio mixto y doble en la cara. Tiene como funciones el
control de los movimientos de la musculatura de un lado de la cara, la
sensibilidad del oído y la amortiguación de los sonidos fuertes, controla las
lágrimas y saliva, el cierre y apertura del ojo y la parte anterior del gusto en
la lengua.

Puede ser una parálisis facial central donde se produce la interrupción de


las fibras nerviosas que unen la corteza cerebral con el nervio facial,
viéndose afectado el lado contrario de la cara a la lesión. Este tipo de
parálisis tiene como característica la afectación de la mitad inferior de la
cara de un lado, respetando párpados y frente. Se ve afectados los
músculos de la boca y mejilla.

Cuando hablamos de parálisis facial periférica el lado afectado de la cara


es el mismo donde existe la lesión del nervio. En este caso se ve asimetría
de todo el lado de la cara.
Causas de la parálisis facial

Las causas de la parálisis facial suelen ser el daño o hinchazón del nervio
facial, o daño en la zona del cerebro que envía las señales a los músculos
de la cara. La parálisis facial más frecuente es la llamada parálisis de Bell,
afectando al 40% de los casos y es idiopática. En segundo lugar de
importancia se encuentra la parálisis facial de origen traumático en un 25%
de los casos. Después, le siguen las parálisis causadas por tumores,
infecciones agudas y crónicas del oído, el virus herpes zoster, y por último
enfermedades del organismo que pueden afectar de forma secundaria al
nervio.
Parálisis facial idiopática

La parálisis facial idiopática también llamada parálisis de Bell ocurre en el


40% sin importancia del sexo de la persona. Aparece normalmente entre
los 18 y 50 años de edad.
Aunque su origen es idiopático se barajan diferentes teorías sobre sus
causas:

Mala circulación sanguínea. Se produce un edema del nervio dentro del


conducto de Falopio, con mal retorno venoso y posterior daño del nervio.

Infección del nervio por un virus. Es el caso del virus del herpes simple, el
virus de la influenza, o la enfermedad de Lyme.

El factor hereditario también puede ser otra posible causa de este tipo de
parálisis faciales, en la cuarta parte de pacientes afectados existen
antecedentes familiares.
Este tipo de parálisis se produce de forma aguda y brusca, siendo las
primeras 48 horas las más importantes. Los pacientes se suelen recuperar
entre 1-6 meses de forma completa en el 80% de los casos.

Tiene como característica la parálisis motora de los músculos que


producen la expresión facial, en el lado afectado desaparecen todos los
surcos de expresión, y en el lado sano se acentúan.
Parálisis facial por Herpes Zoster ótico

En el caso del herpes Zoster nos encontramos con parálisis facial


acompañada de otalgia y vesículas en el pabellón auricular. Solo el 60%
de los casos se recupera sin ninguna secuela.
Parálisis facial por otitis

Cuando se produce una otitis aguda suele ser suficiente el tratamiento con
antibióticos y tiene una rápida recuperación, es poco frecuente. En el caso
de otitis crónicas suele ser imprescindible el tratamiento quirúrgico.
Parálisis facial traumática

Su primera causa son traumatismos cráneo encefálicos, y son la causa del


25% de los casos de parálisis facial. Como consecuencia del TCE se puede
producir rotura del hueso temporal, desgarro del nervio, nervio dañado por
el impacto de una esquirla de hueso o compresión del nervio por
hematoma.

También ocurre en recién nacidos por traumatismos en el parto. Otros


casos de origen traumático pueden ser operaciones en el oído, cerebro y
heridas por arma blanca.
Parálisis facial tumoral

Estas parálisis de desarrollan de forma lenta, dando lugar a dolores de


cabeza, convulsiones e hipoacusia. Se produce en el 13% de los casos. Se
debe tanto a tumores intrínsecos (neurinoma del facial, meningioma, et), o
por tumores extrínsecos (neurinoma del acústico, tumores parotídeos,
carcinoma del oído, etc).
Síntomas de la parálisis facial

Los síntomas van a variar mucho de la persona y del alcance de la lesión


del nervio. Pueden variar entre una parálisis débil a una parálisis total.

Ausencia de movilidad voluntaria de los músculos de la mitad de la cara


afectada, ocasionando la pérdida de expresión estando flácida y sin
surcos.
La boca estará caída hacia abajo y hacia el lado afectado.
Dificultad para cerrar el ojo.
Ausencia de lágrimas y saliva.
Sequedad en ojos y boca.
Ausencia de gusto en la parte anterior de la lengua del lado afectado.
Dolor facial.
Dolor en el oído con ruidos fuertes.
Ausencia de sensibilidad en el conducto del oído.

Todos estos síntomas van a producir grandes problemas en la calidad de


vida del paciente, como dificultad para comer y beber, dificultad para
hablar y expresar sus emociones.
Diagnóstico de la parálisis facial

El diagnóstico se basa en la clínica, asimetría facial, inmovilidad facial


cuando se le pide al paciente que realice diferentes movimientos con la
cara (levantar ceja, cerrar ojo, sonreír, etc), lado de la cara afectado
inexpresivo con desviación bucal y eliminación de los pliegues, ceja caída,
y dificultad para comer.

Se pueden realizar diferentes pruebas para ayudarnos, como el


electromiograma para comprobar el estado y daño del nervio y músculo,
una radiografía para descartar tumores o infecciones, etc.
Tratamiento para la parálisis facial

El tratamiento de la parálisis facial puede incluir medicamentos y


fisioterapia. La cirugía no suele ser opción en este tipo de afectación.

Tratamiento fisioterápico de la parálisis facial

Un fisioterapeuta nos puede ayudar a disminuir dolor y estimular los


músculos afectados, así como relajar la musculatura contraria donde
suelen aparecer tensiones y pequeñas contracturas.

Calor local: El uso de una compresa húmeda-caliente nos va a ayudar a


mejorar la circulación en la zona.

Masaje: El masaje mejora la circulación y el metabolismo local. El aumento


del calor en la zona nos ayudará a realizar a continuación los ejercicios.

La finalidad del masaje es esencialmente para obtener efectos


circulatorios, favoreciendo el metabolismo celular y estimular la troficidad
tisular muscular. Y otra parte importante es el rol psicológico para ganar
confianza con el paciente y obtener su relajación). Existe una relajación
importante a nivel facial.

La realización del masaje intrabucal y intranasal permite la relajación de los


músculos profundos (bucinador y elevador superior labial). Se efectúa con
la ayuda de dos dedos internos y el pulgar fuera en modo de pinza. Se
realiza mediante presiones circulares. El masaje se hace en un orden
establecido.

- Se empieza en la región del entrecejo hacia el sillón nasogeniano., el ala


de la nariz, el labio superior y después pasando bajo el mentón a lo largo
del maxilar, subimos hacia la oreja, donde el masaje se hace de una
manera más enérgica donde terminamos hacia las cejas.

- Después masaje del frontal, comenzando por los temporales, después


deslizándonos con ligera presión de los dedos hacia el eje de simetría de la
cara y retornamos hacia los temporales en estiramiento ligero, finalizando
en dirección a la raíz del cabello y haciendo un masaje transversal a nivel
de las arrugas.

- Masaje de los ojos; que debe de ser repetido de 5 a 6 veces. Comienza


en la región del entrecejo, pasando por los parpados superiores hasta el
ángulo externo del ojo y volviendo bajo el ojo hasta la raíz de la nariz. El
mismo masaje se realiza a la inversa y se termina por un estiramiento de la
piel del ángulo externo. Finalizando con un ligero pinzado rodado de los
pómulos. Es importante realizar el masaje alrededor del globo ocular en
apoyo con el hueso y NUNCA sobre el globo ocular.

- Masaje de labios de dentro hacia fuera seguido de un estiramiento hacia


el exterior. Existe también otro tipo de masaje que se puede hacer al
comienzo y al final de tratamiento que consiste en pases suaves, lentos y
simétricos sobre los dos lados de la cara en apoyo un poco más fuerte
sobre el lado paralizado. Realizamos presiones con deslizamiento
superficial, presiones locales y pinzados rodados suaves. Procuraremos no
provocar reacciones reflejas del lado sano.

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