Nombre: Luis Enrique Silva Rangel

Materia: MACROECONOMIA

Asesor: ADRIANA SORIA SUAREZ

Tema: Evidencia de aprendizaje. Política monetaria

Todos estos procesos de integración en el mundo se fundamentan en practicas liberales, que
para México inician fuertemente después de la crisis de 1983 en donde el país necesita
cambiar la política económica y en consecuencia la política económica exterior,
implementando un amplio proceso de liberalización económica, que se caracteriza por una
apertura de fronteras y una disminución de la intervención del estado en la economía.
Al investigar este tema revise que desde la década de los 80, observadores tanto nacionales
como internacionales han predicho (de manera repetida) que la economía mexicana está a
punto de despegar. Los factores más importantes que impulsan el crecimiento en las
economías emergentes están presentes en México: una fuerza laboral joven y creciente,
abundantes recursos naturales y el acceso a mercados de exportación (en el caso de México,
el país tiene una ubicación estratégica como vecino de Estados Unidos y su membresía al
TLCAN le da un acceso privilegiado). México abrió su economía al comercio y a la
inversión extranjera, aprobó extensas reformas, y desde el año 2000 ha logrado mantener
una estabilidad fiscal y macroeconómica.
En las décadas hubo un aumento extremadamente débil de la productividad. En las décadas
de 1950, 1960 y 1970, México estaba entre las economías pujantes del mundo, creciendo a
tasas de 6.5% al año, más que India y la mayoría de las economías en rápido crecimiento de
hoy. En aquellos días, México lideraba al mundo en cuando a crecimiento, ayudando a
millones a salir de la pobreza. 'El milagro mexicano' era señalado como uno de los mayores
casos de éxito en el mundo.
Muchos factores han contribuido al descenso económico y al retroceso del PIB per cápita
(que comenzó a caer a una tasa anual de 1.3% después de 1990), incluyendo la caída en los
precios del petróleo que impactaron a los presupuestos gubernamentales, las crisis fiscales
y la 'década perdida' de 1980.

Pero estos son eventos pasajeros. Otro elemento más importante que ha impactado al
crecimiento económico ha sido el de la pésima mejora en los niveles de productividad. El
crecimiento del PIB es motivado por dos factores: un ejército creciente de trabajadores y la
productividad de esos trabajadores. México aún tiene una creciente y joven población. A lo
largo de los últimos 50 años, la fuerza laboral mexicana creció 4.5 veces.

Hay muchos pero el principal problema es que la productividad de esos trabajadores ha

estado estancada. Desde 1990, después de la 'década perdida', la productividad de México
ha crecido a una tasa de únicamente 0.8% al año. Hoy, el crecimiento de la productividad
en México es una de las más bajas de todo el G20.

De acuerdo a todo lo plasmado podemos darnos cuenta y concluir que en este periodo a
pesar de los avances dados no se logró fomentar la producción, ni elevar sustancialmente la
productividad, por lo que la modalidad elegida para el financiamiento del desarrollo volvió
a la economía mexicana más vulnerable, sujetándola a las fluctuaciones de los mercados
internacionales y a las cambiantes decisiones de los inversionistas. Fue este el punto más
débil de la estrategia salinista, que finalmente (cuando los inversionistas foráneos
decidieron retirar sus capitales para colocarlos donde les reportaran mayores beneficios);
tiene como consecuencias la crisis de 1995 al no dar continuidad a las estrategias
económicas que se podían mantener para continuar dando estabilidad al país.