Professional Documents
Culture Documents
L
a “modernidad” es una narrativa europea que a Occidente consolidar más tarde el capitalismo
tiene una cara oculta y más oscura: la colo- global, de la mano de las revoluciones libera-
nialidad. En otras palabras, la colonialidad es les-burguesas y la implantación por la vía de las
constitutiva de la modernidad: sin colonialidad no armas de la democracia republicana junto con los
hay modernidad (Mignolo 2001, 1). Estados-nacionales; “las oportunidades de la Eco-
nomía Naranja se nos presentan de manera similar
Cada sociedad humana posee su propia racionali-
a una revolución anterior: la segunda Revolución
dad con sus propios referentes sobre economía, jus-
industrial (la de la electricidad), también conoci-
ticia, corporalidad, espiritualidad, educación, con
da como la revolución tecnológica (Buitrago Res-
sus propias maneras de mirar, de escuchar, de sen-
trepo y Duque Márquez 2013, 64)”. Todo esto pa-
tir; a partir de ellas da y otorga sentido a sus expe-
sando sobre las racionalidades originarias de los
riencias vitales tanto individuales como colectivas,
pueblos, sus territorios, sus espíritus y sus gentes,
esto le permite vivir en sociedad y enfrentarse al
arrasando, quemando, esclavizando, asesinando e
mundo, lo que es una característica propia de Occi-
imponiendo la economía, la religión y la política
dente: la razón (logos) como afirma Estermann, “no
colonial como se hace hasta nuestros días; es decir,
es una una invariable cultural, ni menos una esencia
naturalizando la dominación colonial, las relacio-
supra-cultural, sino una “invención” eminentemen-
nes sociales asimétricas, el desarrollo y la demo-
te occidental” (Estermann 2006, 98), y agrega:
cracia como si fueran las únicas opciones posibles,
“Racionalidad” es un cierto “modo de concebir o peor, las más deseables.
la realidad”, una “manera característica de inter-
La sociedad liberal industrial se constituye –desde
pretar la experiencia vivencial”, un “modo inte-
esta perspectiva– no solo en el orden social desea-
gral de entender los fenómenos”, un “esquema
ble, sino en el único posible. Esta es la concepción
de pensar”, una “forma de conceptualizar nues-
tra vivencia”, un “modelo” (paradeigma) de (re) según la cual nos encontramos hoy en un punto de
llegada, sociedad sin ideologías, modelo civilizatorio
presentar el mundo. (Estermann 2006, 100)
único, globalizado, universal, que hace innecesaria la
Con la invasión europea al Abya Yala y el comien- política, en la medida en que ya no hay alternativas
zo del genocidio-epistemicidio sobre estas tierras posibles a ese modo de vida (Lander 2000, 246).
* Estudiante de la Maestría en Estudios de la Cultura, con mención en Políticas Culturales; Antropólogo por la Universidad de Antioquia. ‹elcorreo-
devlado84@gmail.com›.
20
América Latina
Como lo afirma Lander, el modelo civilizatorio de ha sido útil (y lo es aún) a intereses coloniales, mo-
la sociedad liberal industrial se impone a sí mismo dernos y capitalistas, el arte y las llamadas empre-
como el único horizonte posible de llegada, des- sas creativas han servido para los mismos intereses,
conociendo además de la Tierra en plena madures. entreteniendo a costa de la criticidad política, im-
Nombre dado por el pueblo Guna-dule al continente plantando deseos, estereotipos, cuerpos de molde,
llamado por los colonizadores América, este nombre adormeciendo rebeldías, vendiendo sueños a cuo-
fue adoptado por el movimiento originario continen- tas, hipotecando corazones en bancos Españoles.
tal para designarle en lugar de su nombre colonial.
Lo privado versus lo colectivo
Humanidad de las gentes diversas al paradigma
Desde el pensamiento originario andino y amazó-
hegemónico, sus otras racionalidades económicas
nico, –así como en muchos otros territorios y cora-
con el fin (razón instrumental) de dominar socie-
zones– la tierra no es de nadie, todos somos de la
dades, territorios y cuerpos.
tierra, así el agua, así la palabra, así la idea, así la re-
el pensamiento racional es una forma de orga- ceta del almuerzo, la técnica agrícola, la herramien-
nizar el conocimiento, fraguada en el pasado ta, la canción o el remedio del padecimiento; no es
de la cultura occidental con el propósito de do- de nadie porque es de todos(as). Estos saberes son
minar el mundo [...] se trata de una forma par- propiedades colectivas (comunitarias, comunales)
ticular de conocer, de una forma orientada por y les pertenecen desde antes de que el régimen de
unos propósitos concretos, por esa voluntad de propiedad privada arribara en barcos desde el hori-
dominar el mundo. (Moreno 1991, 46) zonte del mar, con sus perros de guerra, sus caballos
Con la industrialización de la sociedad, a la par de árabes, sus enfermedades, sus biblias y su razón.
la globalización del capitalismo, se mercantiliza la Lo privado capitalista, o más generalmente lo
vida, se le asigna un precio al tiempo, a la salud, privado mercantil, implica un interés opuesto a
a la espiritualidad, a la educación, al placer, a la los del conjunto de la sociedad, de modo que
cultura; así se economiza la vida, se le capitaliza no puede ser compatible con la equidad, la
con base en las leyes de la oferta y la demanda. solidaridad, la libertad o una democracia que
¡La cultura NO ES gratis! –dicen Buitrago Restrepo esté constituida de esos elementos, sino hasta
y Duque Márquez (2013, 95)– en un texto produci- el límite del interés privado. (Quijano 2000, 22)
do por el Banco Interamericano de Desarrollo (en
adelante BID) para referirse a las industrias cultura- Así, para hablar de las industrias culturales en rela-
les y, en particular, a la denominada Economía Na- ción con su mundialización en la esfera del nego-
ranja, la cual caracterizada de la siguiente manera: cio privado, me remito a Cubeles quien afirma que
“Es el conjunto de actividades que de manera en- la evolución de las industrias culturares se produce
cadenada permiten que las ideas se transformen en esta relación en función de cinco grandes ejes:
en bienes y servicios culturales, cuyo valor está • La transnacionalización de las empresas.
determinado por su contenido de propiedad inte- • La concentración empresarial y la estructura-
lectual. El universo naranja está compuesto por: 1. ción d e redes.
la Economía Cultural y las Industrias Creativas, en • La tendencia a la centralización territorial.
cuya intersección se encuentran las Industrias Cul- • La estandarización de los medios de comuni-
turales Convencionales; y 2. las áreas de soporte cación y de los contenidos culturales.
para la creatividad (40). • El proceso de convergencia digital de los mer-
Según los presupuestos de la Economía naranja, el cados (Cubeles 2000, 3).
horizonte es el enriquecimiento económico de las Para relacionar estos ejes, con algunas de las ideas
industrias culturales o creativas, el desarrollo eco- anteriormente enunciadas, se considera que la
nómico sostenible, y en alguna medida, de manera transnacionalización de las empresas se
también instrumental y economicista, el respeto hace a partir de la compra de todos los
por las “minorías”, la diversidad y los derechos hu- pequeños o medianos negocios posibles,
manos. El arte no es una profesión menor, como no arruinando a la competencia y/o com-
lo es la antropología, el trabajo social o la comuni- prándola, esto lleva entre otras cosas al
cación, pero de la misma forma que la antropología surgimiento de grandes empresas mul- No. 6
Oct. 2017
21
Tema Central: América Latina, diversidad y grupos emergentes
22
América Latina
cas y de poder implantadas con la Colonia y con- empeña en recuperar y regenerar (Esteva 2001, 2).
tinuadas en la globalización de capitalismo, sobre
todo por la imposición de modelos de represen- Lista de referencias
tación e identidades foráneas y/o coloniales que Buitrago Restrepo, Felipe, e Iván Duque Márquez.
priorizan el consumo de lo creado en el centro 2013. La economía naranja: Una oportunidad infi-
del sistema mundo, las cuales tienen profundas nita. Bogota: Banco Interamericano de Desarrollo
influencias sobre cómo nos relacionamos y cómo / Puntoaparte.
percibimos el mundo, es decir sobre nuestros pro- Cubeles, Xavier. 2000. “Políticas culturales y el proceso
pios paradigmas y “cosmoexistencias” (Guerrero de mundialización de las industrias culturales”. Po-
2011, 31), a costa de nuestras racionalidades ori- nencia, Seminario Nuevos Retos y Estrategias de las
ginarias, ancestrales y mestizas. Industrializar la Políticas Culturales frente a la Globalización. ‹www.
cultura y capitalizarla, según las lógicas del mer- consultoresculturales.com/documentos03.pdf›.
cado, dificulta el acceso a ella a quienes no poseen Escobar, Arturo. 2003. “Mundos y conocimientos de otro
el dinero para pagar el arte, la tecnología, la tierra, modo”. Tabula Rasa, No.1 (enero-diciembre): 51-86.
el saber; es decir, nos la roba al resto de la huma- Estermann, Josef. 2006. La filosofía andina: Sabiduría
nidad, además la lógica del mercado no es preci- indígena para un mundo nuevo, 2a. ed. La Paz: Ins-
samente satisfacer las necesidades de todas las tituto Superior Ecuménico Andino de Teología.
Esteva, Gustavo. “De la resistencia a la liberación”. 8
personas, sino de crearles unas nuevas que nunca
de enero de 2001. ‹http://www.cetim.ch/legacy/
podrán ser satisfechas totalmente o que les dejará
fr/documents/01dialogue-1.pdf›.
endeudados durante toda su vida con la opción
García Canclini, Néstor. 1995. “El consumo sirve para
de pagarla en “cómodas cuotas”. El problema no
pensar”. En Consumidores y ciudadanos: Conflictos
es si los(as) artistas, escritores(as), editores(as), di-
multiculturales de la globalización, 41-55. México
señadores(as), etc., viven y disfrutan de su trabajo,
DF: Grijalbo.
eso no está en discusión; lo que si se pone final-
Guerrero Arias, Paricio. 2011. Alteridad, No. 10 (ene-
mente en tensión es la orientación política, filosó- ro-junio). (Quito: Universidad Politécnica Salesia-
fica, económica de sus quehaceres profesionales, na): 23-39.
la coherencia de sus ideas con sus acciones y sus Lander, Edgardo. 2000. “Ciencias sociales: Saberes
esfuerzos por construir sociedades conviviales, coloniales y eurocéntricos”. En Edgardo Lander,
solidarias, cooperativas, recíprocas y autónomas, comp., La colonialidad del saber: Eurocentrismo y
sobre el proyecto moderno/colonial de muerte, ciencias sociales. Perspectivas Latinoamericanas,
que significa el capitalismo globalizado, con su 4-23. Buenos Aires: Consejo Latinoamericano de
naturalización de la competencia, su deshumani- Ciencias Sociales (CLACSO).
zación de la humanidad y su desnaturalización de Mignolo, Walter. 2001. La colonialidad: La cara oculta
la naturaleza que llama desarrollo. de la modernidad. Barcelona: Península.
Moreno, Amparo. 1991. Pensar la historia a ras de piel.
Más allá del desarrollo está también la crítica ra-
Barcelona: La Tempestad.
dical de la ciencia y la tecnología dominantes,
Pérez-Bustamante, Diana, y Ana Yábar. 2010. “El valor
que sustentan la estructura de dominación en el
económico de los bienes culturales y ambienta-
supuesto de que son neutrales y positivas: cons-
les: Cultura, desarrollo y sostenibilidad”. Observa-
tituirían un avance de la humanidad, en sí mismo torio Medioambiental, No. 13: 41-63.
benéfico, aunque pueda empleársele de modo Quijano, Anibal. 2000. “Colonialidad del poder, euro-
perverso. Pero las tecnologías, las herramientas lo centrismo y América Latina. En Edgardo Lander,
mismo que las instituciones, al igual que los “co- comp., La colonialidad del saber: Eurocentrismo y
nocimientos científicos”, expresan el sistema de ciencias sociales. Perspectivas Latinoamericanas,
conocimiento-poder que los genera. 122-51. Buenos Aires. CLACSO.
Más allá del desarrollo está la apertura hospitala- Walsh, Catherine. 2003. “Ecuador 2003: Pro-
ria a la pluralidad de ciencias y técnicas del mundo mises and Challenges”. Artículo presen-
tado en la Universidad de North Caroli-
real y a su evaluación crítica, para descartar las que
na-Duke Latin American Studies. 25 de
socavan o destruyen la amistad y convivialidad
abril.
que forman el tejido social que la gente común se No. 6
Oct. 2017
23