Mayo del 68

Amalia de la Mata Blanco

Máster de Arte Contemporáneo Tecnológico Performativo
 Evento Cultural: Mayo del 68

“Porque la vida real está en otra parte. Los estudiantes arrancan el empedrado,
vuelcan los coches, levantan barricadas; su entrada en el mundo es bella y rui-
dosa, está alumbrada por las llamas y la festejan las explosiones de las bombas
lacrimógenas. ¡Cuánto más difícil lo tuvo Rimbaud, que soñaba con las barrica-
das de la Comuna de París y no pudo salir de Charleville para verlas! En cambio,
en 1968 miles de Rimbauds tienen sus barricadas propias; parapetados detrás
de ellas rechazan cualquier compromiso con los actuales dueños del mundo. La
emancipación del hombre será total o no será.”

Milan Kundera. La vida está en otra parte

Las jornadas son un acercamiento a los movimientos revolucionarios que se propagaron en

1968 en Francia, México y Checoslovaquia. Países que lucharon por un cambio político y social
y cuyas consecuencias están vigentes hoy día.

El Mayo del 68 se encuentra en la frontera entre las vanguardias modernistas y arte posmoder-
no, hay un cambio generacional de pensamiento y concepción de la sociedad.

La imaginación toma el poder, se podía leer esta frase en la Facultad de Ciencias políticas de
París. “La vida nace de la imaginación, ahí las personas* transgreden las normas y los conven-
cionalismos institucionales para crear y dejar salir fantasmas, dioses y demonios […] ¿Por qué
utópicos?.... porque estamos mal, la creación está mal hecha y hay que rehacerla; ¿quién?... el
artesano de la imaginación”1

Esta jornada cultural parte de unas proyecciones documentales con las que queremos que las
personas que asistan se envuelvan del pasado para otorgar a la exposición archivo de un signi-
ficante. Es necesario un conocimiento previo para dotar al objeto un valor simbólico. “En estos
casos, el archivo, tanto desde un punto de vista literal como metafórico, se entiende como el
lugar legitimador para la historia cultural”2

*He cambiado la palabra hombre por personas para renovar el lenguaje a la actualidad.

1 J.M. Gutiérrez -Soussa: Del homo faber al artesano de la imaginación.Revista cultural La

Pluma. Madrid. 1982, pag 5.
2 Anna María Guasch: Los lugares de la memoria:El arte de archivar y recordar. Revista
internacional d’Art, Materia. Barcelona. 2005, pag 157.
La exposición archivo quedará abierta un día y medio para que el público pueda generar ideas
sobre ella. Después se les informará de la modificación total de la exposición, pasando a ser un
taller, “nada tiene de «tautológico», sino que busca transformar el material histórico oculto,
fragmentario o marginal en ´ un hecho físico y espacial”3. Con el resultado de dicha interven-
ción se intenta crear una nueva lectura, tanto para la persona que participa en la acción como
para el nuevo público que contemplará el resultado del taller en forma de nueva exposición
colectiva.

Una de las incógnitas de la jornada cultural es la exposición final la cual no existe hasta el mo-
mento de creación in situ, lo que nos permite crear un misticismo idealizado ante lo desconoci-
do. Podría decirse que es una metáfora de la vida, puesto que nosotros construimos la incógni-
ta futura a partir de moldear el presente con los detritos del pasado.
El ser humano tiende a reconstruir la historia de forma lineal sin darse cuenta que la lineali-
dad no existe puesto que nos encontramos ante situaciones de dimensiones paralelas y tras
estos acontecimientos surgen dudas sobre cómo construir la realidad, “las viejas preguntas del
análisis tradicional (¿qué vínculo establecer entre acontecimientos dispares?, ¿cómo establecer
entre ellos un nexo necesario?, ¿cuál es la continuidad que los atraviesa o la significación de
conjunto que acaban por formar?, ¿se puede definir una totalidad, o hay que limitarse a re-
construir encadenamientos?)” 4.

No es casualidad que obras como Rayuela de Julio Cotázar (1963), Bande àpart de Jean-Luc
Godard (1964) así como el Movimiento Situacionista apareciesen como premonición de un
espíritu de cambio que se estaba gestando unos años antes de las revueltas del 68. Esas formas
artísticas cambian la manera de ver el mundo proponiendo romper con las normas estableci-
das, lo que otorga a la sociedad la oportunidad de ser crítica ante unas pautas de conductas
política, social y culturalmente adquiridas, desarrolladas y fundamentadas - haciendo alusión a
Judith Butler - en la inercia de esa repetición performática.

Tal vez sea ese el error del ser humano, dar por verdad lo que te dicen que es verdad, dar por
justo lo que te dicen que es justo, “quizá el error estuviera en aceptar que ese objeto era un
tornillo por el hecho de que tenía la forma de un tornillo. Picasso toma un auto de juguete y lo
convierte en el mentón de un cinocéfalo. A lo mejor el napolitano era un idiota pero también
pudo ser el inventor de un mundo. Del tornillo a un ojo, de un ojo a una estrella... ¿Por qué
entregarse a la Gran Costumbre?” 5
Por ello países se despertaron y decidieron qué es justo y qué no lo es, e indudablemente,
la sociedad política y social en la que vivían no lo era. Escaparon de esa Gran Costumbre de
alienación para transformarla en poesía callejera, porque la belleza está en la calle y la lucha en
busca de la libertad también.

3 Anna María Guasch: Los lugares de la memoria:El arte de archivar y recordar. Revista
internacional d’Art, Materia. Barcelona. 2005, pag 157
4 Michel Foucault: La arqueología del saber. Siglo veintiuno editores.Argentina. 2002.pag 4.
5 Julio Cortázar: Rayuela. Editorial Cátedra. Madrid. 2008, pag 304.
Por ello con esta jornada cultural contextualizamos y descontextualizamos al mismo tiempo,
cambiando el roll del espectador pasivo a un creador de realidades. Rompiendo literal y meta-
fóricamente el patrón de exposición (la cual lleva consigo unas normas adquiridas e interioriza-
das por las instituciones y el público) para generar nuevos discursos que hablen y se interpre-
ten por sí solos, anteponiendo un discurso surrealista al patrón modélico de archivo histórico,
porque a mi parecer la realidad tal y como la concebimos es inefable, y una imagen dice más
que... MIL PALABRAS.