La presencia europea en América transformó el modo de
vida de los indios, pero al mismo tiempo las culturas indígenas causaron un impacto en los usos y costumbres de los europeos. es necesario tener en cuenta el momento histórico en que tienen lugar los contactos entre colonizadores e indígenas, y también la influencia del cristianismo y los fenómenos de mestizaje para comprender las crisis derivadas de los contactos que llevaron a coexistir, de manera más o menos sutil, a hombres provenientes de diversos lugares de la tierra. desde el caso de la extinción o exterminio de los indígenas en unos lugares, hasta el de otros en que los indígenas eran la masa dominante de población, los resultados del encuentro entre colonizadores y naturales ofrecen matices variados según las características de los protagonistas de ese encuentro. Esto repercutiría en la estructura social y cultural de las distintas regiones americanas sometidas al dominio de la corona de Castilla.
Hacia comienzos del siglo XiX, el territorio americano sujeto
a españa estaba dividido en las cuatro circunscripciones de primera jerarquía (o virreinatos) siguientes (entre paréntesis, año de creación de la entidad): Nueva España (1535): abarcaba México y parte del sur y el oeste de lo que hoy son los estados Unidos. Perú (1542): circunscripción territorial que comprendía toda la América del Sur bajo dominio español, excepto la costa venezolana; fue perdiendo extensión con la creación de los virreinatos de Nueva Granada y del Río de la Plata, hasta quedar reducido al actual Perú. Nueva Granada (creado en 1717, fue suprimido en 1724, para ser reconstituido en 1739): comprendía Panamá, Colombia, venezuela y ecuador.
Río de La Plata (1776): comprendía las actuales repúblicas de
Argentina, Uruguay, Paraguay, Chile y bolivia.
. La implantación del español en América4
El proceso de hispanización lingüística de América comenzó hace cinco siglos, cuando se inició el trasplante a nuevos y extensos territorios de la lengua oriunda de Castilla. el español americano es, por tanto (y valga la perogrullada), una extensión del español europeo: no puede soslayarse, en efecto, el hecho histórico irreversible de que la lengua española tuvo una expansión colonial. Por ello se ha comparado el proceso, y con razón, al de expansión del latín en Europa. La hispanización de América fue, por consiguiente, un proceso lento. A medida que avanzaba la conquista, los españoles se encontraban con nuevas lenguas, lo cual los desesperaba. La Corona recomendaba la enseñanza del español pero los que estaban en el lugar de los acontecimientos, particularmente los misioneros, veían que esto era imposible debido tanto al desinterés de los indios por aprenderlo como a la difcultad que implicaba para ambas partes habérselas con lenguas de estructuras tan disímiles. dos elementos, sin embargo, fueron decisivos en este proceso de hispanización: la introducción de la imprenta (la primera, en México en 1535) y la creación de una estructura educativa colonial. Es sabido que las escuelas y colegios impartían las asignaturas en la propia lengua del territorio, y que no es sino a partir del siglo Xviii cuando se introduce la enseñanza del español debido a las órdenes reales que insistían en ello.
Pero, a decir verdad, lo que parece que impulsó realmente la
hispanización de América fue el mestizaje. en efecto, las uniones de españoles e indias fueron el puente más frme y seguro entre los dos pueblos y culturas. siendo los españoles escasos y las españolas más escasas aún, sin los mestizos no habría sido posible ni la conquista ni la hispanización del nuevo Mundo.
de esta manera el español se fue americanizando9 al mismo
tiempo que las lenguas indígenas se iban hispanizando
Quisiéramos para concluir este apartado retomar las nociones
de sustrato, adstrato y superestrato aplicadas esta vez a la historia del español comprendida su expansión americana. En esta óptica, el sustrato estaría constituido, también, por aquellos elementosde lenguas autóctonas desaparecidas que dejaron huellas en el español general, por ejemplo, las palabras procedentes del taíno que se hablaba en las Antillas, como ají, barbacoa, batata, bohío, cacique, canoa, enagua, guayaba, hamaca, huracán, maíz, maní, sabana, etc. El adstrato lo formarían los elementos procedentes de una lengua aún viva introducidos a consecuencia de una situación geográfica o social particular; es el caso, por ejemplo, del morfema español {-eco, -a} de origen náhuatl. El superestrato, en fin, lo constituirían los elementos africanos que entraron al español con la llegada de los esclavos negros; sus lenguas desaparecieron no sin antes dejar huellas (mínimas, como ya sabemos) en la nuestra; valgan como ejemplos las palabras banana, mambo, quilombo, etc. 5. Características generales del español en América51 Pretender exponer las características generales del español americano es casi una temeridad, e incluso una contradicción, si recordamos lo dicho sobre la diversidad de la lengua. Pero como no es menos cierto que hay una serie de elementos que le dan una relativa homogeneidad (que no uniformidad) respecto a otras modalidades del español, es por lo que nos atrevemos a dar unavisión sucinta, general y ciertamente simplifcada de los rasgos más sobresalientes que le imprimen ese color particular a la lengua usual de los americanos. no quisiéramos que el lector perdiera de vista lo expuesto sobre los rasgos defnitorios del español en América, lo cual le permitirá apreciar en su justa dimensión en qué consiste lo característico, la gran originalidad de esta modalidad: en la incorporación y asimilación, al mismo tiempo, de una serie de elementos hispánicos que en españa están dispersos en el tiempo o en los espacios dialectales; esa síntesis, en la que se hallan, por supuesto, aportaciones lingüísticas de otro origen, es lo que nos permite afrmar, y no creemos exagerar, que América es un compendio de la dialectología hispánica.