You are on page 1of 4

Descripción: El Señor del Viento encarga a los animales del mar una importante tarea, ¿quién

será capaz de cumplirla?


Personajes: Señor del Viento, Tortuga, Camarón, Tiburón, Pulpo
PRIMER ACTO
Se abre el telón mostrando un escenario en el que solo se ven el mar y el cielo. El Señor del
Viento, un personaje de largas barbas blancas y vestido con un túnica turquesa, entra y mira a su
alrededor.

Señor del Viento: ¡Animalitos del océano! Vengan a mí, vengan. Tengo algo muy importante que
decirles.

Entran entonces el tiburón, el camarón y el pulpo, y por último la tortuga, quien anda con pasos
muy lentos.

Camarón: ¿Para que nos ha llamado Señor del Viento?

Señor del Viento: Escuchen, queridos. Aquí no hay más que mar y cielo, voy a crear la Tierra para
poder darle vida a criaturas nuevas, pero para eso necesito arena de las profundidades del
océano. Esto es lo que les ofrezco: el animal que me la traiga será recompensado fabulosamente.

Los animales se miran entre sí con emoción.

Señor del Viento: Voy a estar esperándolos en mi casa. Por favor, traigan toda la arena que
puedan.

El Señor del Viento se retira.

Pulpo: Bien, ¡vamos a por esa arena, muchachos!

Tiburón: Sí, mientras más rápido mejor.

Tortuga: Deberíamos tomarlo con calma.

Camarón: ¿Y a ti quién te está hablando? Obviamente tú no vas a venir con nosotros, ¡eres muy
lenta!

Los animales se ríen y se van dejando a la tortuga sola.

SEGUNDO ACTO
En medio del escenario, los animales corren lo más rápido que pueden, llevando grandes
montículos de arena en sus manos.

Camarón: ¡Uf! No puedo llevar todo esto solo, soy muy pequeñito. (La arena se le cae). ¡Se
acabó! No pienso partirme la espalda para llevar toda esa tonta arena. (Se regresa muy enojado).

El tiburón es el siguiente.
Tiburón: Ay, que hambre tengo. no puedo llevar todo esto con el estómago vacío. (Le rugen las
tripas): Mejor me voy a cazar unos peces, el Señor del Viento puede esperar.

Suelta la arena y se va. El pulpo es el que sigue.

Pulpo (bostezando): Vaya, que cansado estoy. Llevo horas viajando con esta arena y siento que
se cierran mis párpados. Mejor tomo una siesta. (Suelta la arena y se tumba a dormir).

La tortuga entra de nuevo al escenario, transportando una montaña de arena que se le va


cayendo por el camino, a causa del esfuerzo que hace por ir más rápido. Cruza todo el escenario
y desaparece.

TERCER ACTO
En su casa, el Señor del Viento se encuentra preocupado cuando llega la tortuga.

Señor del Viento: ¡Pensé que ya ninguno de ustedes iba a venir! ¿Qué pasó?

Tortuga: Disculpe Señor del Viento, traté de venir lo más rápido que pude. Yo le traía un montón
muy grande de arena y por tratar de apurar el paso, toda se me cayó. Nada más me quedaron
unos pocos granitos.

La tortuga agacha la cabeza con tristeza pero el Señor del Viento sonríe.

Señor del Viento: No importa tortuguita, con esos granitos será suficiente. Y en agradecimiento
por tu esfuerzo, te prometo que tendrás una vida larga y feliz. Y podrás sobrevivir tanto en el mar
como la tierra.
Descripción: Laura y Eduardo pasan su primera Navidad en casa con amigos, sin imaginar la
macabra sorpresa que recibirán al día siguiente.
Personajes: Laura, Eduardo, Tomás, Alejandra, Paco
PRIMER ACTO
Es Navidad y Laura y Eduardo, una pareja de recién casados, están celebrando en su primera
casa. Esta se encuentra decorada con todos los adornos propios de la época, un árbol navideño
repleto de obsequios y la presencia de sus amigos, Tomás, Alejandra y Paco. Todos se reúnen
para brindar frente a la chimenea.

Alejandra: Laura, Eduardo, muchas felicidades por su nueva casa.

Laura: Muchísimas gracias, que gusto que hayan podido venir.

Paco: Realmente es una joya, han tenido suerte de conseguir un lugar así en el centro y tan
barato.

Eduardo: En cuanto la remodelemos quedará mucho mejor.

Tomás: Oye, ¿y no les incomoda vivir aquí? Recuerda que no por nada se las dejaron tan barata.

Alejandra: ¡Ay, Tomás! Que tema tan escabroso para hablar en Navidad.

Tomás: Bueno, ellos lo saben bien. A mí me gustaría que me informaran de algo así si voy a
comprar una casa.

Paco: ¿De qué hablan?

Eduardo: Bueno… ¿no te enteraste? Esta propiedad fue el hogar de una pareja que tenía un hijo
pequeño. Un loco entró a la habitación del pequeño y lo asesinó. Encontraron su cuerpo por la
mañana, sin la cabeza.

Alejandra: ¡Qué horrible, por Dios!

Tomás: Sucedió también en las Navidades. Los pobres padres decidieron alejarse lo más que
pudieran de esta casa. Por eso digo que da mal rollo.

Laura: Sí, fue algo espantoso… pero de eso ya hace un año y la verdad es que, la propiedad no
deja de ser estupenda. Nos gusta ser optimistas.

Paco: Tienes razón, de nada vale vivir con miedo. ¡Así que salud por los nuevos comienzos!

Todos vuelven a brindar.

SEGUNDO ACTO
Laura y Eduardo entran en su sala, abrazados y vestidos con batas de dormir. Se besan
amorosamente.
Eduardo: Feliz Navidad, mi amor.

Laura: Gracias, amor. Feliz Navidad.

Eduardo: Bueno, ¡a abrir los regalos!

Laura abre uno de sus obsequios, sacando un perfume de la caja.

Laura: ¡Mi favorito! ¡Gracias!

Eduardo: Solo lo mejor para ti. Anda, abre otro.

Laura: Este se ve interesante. (Toma una caja de cartón atada con un cordel rojo). ¿Se te acabó
el papel navideño?

Eduardo (frunciendo el ceño): Pero si ese regalo no es mío, ¿no lo pusiste tú?

Laura: Para nada.

Eduardo: ¿Se lo habrá dejado alguno de los muchachos? No recuerdo haberlo visto aquí anoche.

Laura: Puede ser… tal vez querían que fuera una sorpresa.

Ambos se miran extrañados y comienzan a abrir el regalo. Luego, Laura suelta un grito de horror
y deja caer la caja, de la que sale rodando la cabeza decapitada de un niño.

Eduardo: ¡¿Pero qué es esto, por Dios?!

Laura: ¡Dios mío! ¡Dios mío!

Eduardo toma tembloroso la tarjeta que venía con el regalo y la lee en voz alta.

Eduardo: Para los nuevos inquilinos de esta casa maldita… con amor, Santa Claus.

Ambos se miran aterrados.

You might also like