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Los suelos sódicos contienen alta cantidad de Sodio intercambiable y bajo nivel de sales
solubles.
En los suelos sódicos, las partículas de arcilla tienden a separarse. Este proceso de
disociación técnicamente se denomina dispersión. Las fuerzas que mantienen unidas a las
partículas de arcilla se interrumpen por los iones de Sodio.
Cuánto más pequeño es el radio hidratado, y cuánto mayor la valencia de un catión, mayor
es su poder de flocular el suelo. El calcio tiene un efecto floculante, mientras que el sodio
dispersa el suelo. El calcio es más efectivo que el sodio porque es bivalente y tiene un
menor radio hidratado. En presencia de sodio, los agregados del suelo se rompen.
Las partículas de arcilla dispersas se mueven por la estructura del suelo bloqueando sus
poros. Los resultados son que la infiltración del agua a través del suelo así como su
conductividad hidráulica, se reducen (la conductividad hidráulica es una medida de la
movilidad del agua por el suelo). Por lo tanto, el suelo puede anegarse y / o inundarse
cuando se moja por deficiencia del proceso natural de filtración.
Los suelos sódicos tienden a hincharse cuando se mojan, luego se endurecen y cuartean
cuando están secos. El suelo sódico una vez seco normalmente desarrolla y presenta una
costra dura, seca, cuarteada y agrietada en su superficie.
Los suelos sódicos son susceptibles a erosión. Esta genera pérdida de suelo y nutrientes.
La escorrentía contiene nutrientes y pesticidas que son adsorbidos por las partículas de
arcilla. Al no ser absorbidos adecuadamente, pueden llegar a fuentes de agua potable
contaminándolas (daño ecosistema local).
La aglutinación de las partículas del suelo mejora las propiedades físicas del suelo. El
suelo se vuelve más permeable, aumenta su nivel de aireación y el crecimiento de las
raíces mejora considerablemente.
A pesar de que las sales evitan los efectos destructivos del Sodio en la estructura del
suelo, la salinidad excesiva es perjudicial para el crecimiento de las plantas.
La conclusión es que los efectos del Sodio sobre la estructura del suelo son más
significativos en los altos niveles del pH de suelo
PSI (porcentaje Sodio intercambiable) y RAS (relación
adsorción Sodio)
El PSI (porcentaje de Sodio intercambiable) se define como la cantidad de Sodio adsorbido
por las partículas del suelo, expresado en porcentaje del CIC (capacidad de intercambio
catiónico:
Técnicamente hablando, los suelos que tienen un valor límite PSI (porcentaje PS Sodio
intercambiable) mayor de 15 se clasifican como suelos sódicos.
Cambiar el tipo de cultivo: Cultivar plantas más tolerantes a la utilización de las enmiendas
del suelo.
Hace unos días, mientras agonizaba bajo el sol cubierto de salitre en una cala
recóndita, me estuve preguntando por qué el mar es salado. Pero no me preguntaba
por qué es salado en el sentido de por qué contiene sales: la incógnita que me corroía
por dentro en ese momento era por qué contiene una cantidad tan
desmesurada de un tipo de sal en concreto. El cloruro de sodio.
¿Cómo que de un tipo de sal en concreto? ¿Que es lo otro? ¿La sal iodada? ¿Es ese el
otro tipo de sal que existe?
No, hombre, voz cursiva, hay muchas clases de sales. De hecho, una sal es cualquier
sustancia compuesta por iones positivos y negativos que forman una
estructura con carga eléctrica neutra. Algunos ejemplos de sales son el sulfato de
potasio (K2SO4), el cloruro de calcio (CaCl2) o el carbonato de calcio (CaCO3).
Aunque, para poner un ejemplo especialmente vistoso, ahí van unos cristales de
sulfato de cobre (II) (CuSO4):
(Fuente)
O sea que, aunque el cloruro de sodio sea la sal más abundante en los océanos,
en realidad está disuelto en el agua junto con otras sales como el sulfato de
sodio (Na2SO4), el cloruro de potasio (KCl) y el bicarbonato de sodio (NaHCO2).
En esta tabla podéis ver las sales más abundantes en el agua de mar y su
concentración:
Pero, ojo, que todas estas sales no están flotando por el océano en forma de
pequeños cristales. En realidad, lo que hay en el agua es un batiburrillo de iones
diferentes que se unen para formar estas sales cuando el agua se evapora.
¿Lo cualo?
No te preocupes, voz cursiva, vamos a solucionar tu confusión hablando sobre
las soluciones.
Alguna vez habréis puesto sal de mesa en un vaso medio vacío de agua y lo habréis
removido para disolverla. Si es así, habréis notado que los cristales de sal se van
difuminando poco a poco frente a vuestras narices mientras los removéis
hasta que desaparecen de vuestra vista cuando se han disuelto por completo.
Y es posible que os hayáis preguntado adónde ha ido a parar todo ese material sólido
que había en el vaso hace un momento.
Pues resulta que, cuando una sal se disuelve, lo que ocurre en realidad es que
los iones positivos y negativos que la componen se han separado. El agua es un
compuesto polar, lo que significa que sus moléculas tienen un extremo con carga
positiva (el de los dos átomos de hidrógeno) y otro con carga negativa (el de
oxígeno), como si fueran pequeños imanes. Por tanto, si metes una sal en el agua, los
polos positivos y negativos de las moléculas del líquido separan sus iones, ocupando
el espacio entre ellos e impidiéndoles volver a unirse.
(Fuente)
Por supuesto, en este estado los iones no se pueden acercar para formar cristales
que se puedan observar a simple vista. De ahí que estas sustancias “desaparezcan”
cuando se disuelven.
O sea, que las sales que hay disueltas en el océano no están flotando por ahí en
forma de cristales, sino separadas en sus componentes básicos, que sólo se
unen entre sí para formar un sólido sólo cuando el agua que los mantiene
divididos se evapora.
Como dato extra, también es posible que hayáis notado que la sal deja de
disolverse en vuestro vaso de agua si echáis demasiada. Esto se debe a que,
llegados a cierto punto, hay tantos iones mezclados entre las moléculas de agua que
ya no queda espacio en el líquido para hacer hueco para los iones nuevos. Cuando
esto ocurre se dice que la solución está saturada y, si se sigue introduciendo sal, sus
iones se separan para formar parte de la solución al mismo ritmo que los que ya
están disueltos se unen para formar cristales nuevos. Y es por eso que no se puede
disolver más material en un líquido que ya esté saturado.
O sea que, en realidad, cuando se habla de la concentración de sales en una
solución, es más correcto referirse a los iones que están disueltos. En ese caso,
la tabla de la composición del agua del mar nos queda así:
Vale, pero entonces, ¿de dónde han salido todos esos iones que hay disueltos en el
océano? No veo muchos iones a mi alrededor en mi día a día.
Y tienes razón, voz cursiva, como tienen carga eléctrica, los iones tienden a
reaccionar con otros átomos para formar sustancias más complejas que no se
pueden volver a separar a menos que alguna otra reacción química los saque
de su lugar otra vez. Pero la atmósfera está llena de compuestos que acidifican
ligeramente el agua que entra en contacto con ellas. El dióxido de carbono, por
ejemplo, el mayor contribuyente en la erosión química de nuestro planeta, se disocia
en el agua para formar ácido carbónico. Algunos óxidos de azufre y nitrógeno que
están presentes en menor medida en la atmósfera también acidifican el agua al
entrar en contacto con ella, dando lugar a ácido sulfúrico y ácido nítrico.
Cuando estos ácidos entran en contacto con las rocas, disuelven en ellos los
iones de los minerales que las componen. Con el tiempo suficiente, estos iones
disueltos en el agua llegan hasta el océano (por ejemplo, a través de un río) y se
acumulan en él… Algo que lleva ocurriendo desde que se formaron los océanos,
haceunos 4.400 millones de años.
Pero no me encaja nada de esta explicación. ¿De dónde salen tanto cloro y el sodio
acumulados en el océano? Porque, vaya, no veo mucho cloro a mi alrededor en mi día
a día, ¿EH?
Pues mira, voz cursiva, si echas un vistazo a esta lista podrás ver los elementos de
la tabla periódica ordenados por su abundancia en las rocas de la corteza terrestre
y verás que…
¿Ves? ¡El sodio es el sexto elemento más abundante y el cloro el vigésimoprimero! ¿No
debería estar el mar lleno de otras cosas como silicio o hierro, mucho más abundantes?
… Sí, esa es precisamente la pregunta que estaba a punto de responder.
Es verdad que los elementos más abundantes de la corteza terrestre son el oxígeno,
el silicio, el aluminio, el hierro o el calcio. Por eso no es de extrañar que los minerales
más abundantes sean el cuarzo (compuesto por óxido de silicio), los distintos
feldespatos (Al, Si, O, combinados con Na, Ca o K), piroxenos (con todo lo anterior y
magnesio) y sales como el carbonato cálcico, formadas por seres vivos hace millones
de años.
Antes de seguir, volvamos un momento al tema de la solubilidad para saber por qué
nuestros océanos no están llenos de óxido de hierro.
La cantidad de una sal que se puede disolver en un líquido dependerá del las
propiedades que tengan los iones que la componen. Las fuerzas que unen algunos
iones son más débiles que las de otros, por lo que las moléculas de agua
pueden separarlos (y disolverlos) más fácilmente. Por otro lado, a las moléculas de
agua les cuesta más separar los iones que están unidos formando estructuras más
grandes así que, en general, cuanto más débiles sean los enlaces y más pequeñas
sean las “moléculas” de la sal, más fácil será disolverla y cabrá un cantidad
mayor en un mismo volumen de agua.
Por otro lado, también hay compuestos químicos que no son sales y que ni
siquiera son solubles en absoluto…Y eso es precisamente lo que le pasa a los
elementos más abundantes que el sodio: las sales y compuestos más comunes que
forman el hierro y el aluminio son poco solubles o insolubles, el silicio ni siquiera
forma sales y las sales de calcio, como por ejemplo el carbonato de calcio, son muy
poco solubles (todo esto lo podéis ver en esta otra lista o en esta tabla
interactiva que me ha gustado mucho). Como resultado, cuando este tipo de
compuestos llegan al mar no se disuelven en el agua, sino que se precipitan
hacia el fondo en forma de sedimentos.
Por tanto, aunque el sodio “sólo” sea el sexto elemento más abundante de la
corteza, es el único que se puede disolver en los océanos en grandes
cantidades.
Vale, tiene sentido. ¿Y qué pasa con el cl...?
Claro, es que apenas hay minerales que contengan cloro en la corteza
terrestre y esto parece contradecir la explicación. Pero, ojo, que aquí viene
el quiebro.
Por supuesto, una parte del cloro que hay en los océanos viene de los minerales que
componen las rocas. Aunque hay relativamente pocos minerales que contengan
cloro, nuestro planeta es suficientemente grande y viejo como para que se hayan
podido acumular cantidades significativas de este elemento en el mar por la erosión
química del suelo. Pero si hay pocas rocas en la superficie que contengan cloro
es porque en condiciones normales, el cloro es un gas. ¿Y de qué lugares
suele salir mucho gas, voz cursiva?
De… Los… ¿Volcanes?
Eeequilicuá. Se cree que los volcanes han estado llenando los océanos de iones
de cloro durante miles de millones de años, ya sea porque el cloro emitido por
los volcanes de la superficie termina fijado en el agua de lluvia, que luego cae al mar,
o porque es vertido directamente al mar desde los volcanes submarinos.
En esta tabla tenéis la composición de los gases emitidos (en porcentaje) en tres
erupciones volcánicas distintas. Podéis ver que la emisión de los distintos gases,
entre los que se encuentra el ácido clorhídrico, varía según la naturaleza de la
emisión:
(Fuente)
Sí, todo tiene sentido, Pero también veo que las erupciones emiten muchos iones de
sulfatos. ¿Por qué no hay más sulfatos en el mar?
No he podido encontrar una respuesta exacta pero, por un lado, los sulfatos no son
tan solubles en el agua como el cloro y, por otro, parece ser que tienden a reaccionar
con otros elementos (como el hierro) para terminar fijado en las rocas. Y esa es la
razón por la que hay tantísimo cloruro de sodio disuelto en los océanos en vez de
otro tipo de sales, vaya.
Total, que me ha parecido curioso que los iones de cloro y sodio que forman la
sal de mesa lleguen hasta el océano a través de procesos distintos y sólo se
unan cuando el agua que los mantiene disueltos se seca, formando los cristales con
los que luego aliñamos nuestros platos.
l sodio es un importante mineral para el organismo encargado del
mantenimiento de balance de fluidos. Es el mineral que se encargado de
mantener los fluidos fuera de las paredes celiolas para evitar problemas de
salud.
NIÑOS
MUJERES
HOMBRES
Sal de mesa
Cubos de caldo
Salsa de soja
El tocino
Queso fundido
Salami
Jamón
Aceituna
Cecina de res
Encurtidos
Sodio - Na
Propiedades químicas del Sodio - Efectos del
Sodio sobre la salud - Efectos ambientales del
Sodio
Nombre Sodio
Número atómico 11
Valencia 1
Estado de oxidación +1
Electronegatividad 0,9
Sodio
Elemento químico, símbolo Na, número atómico 11 y peso atómico 22.9898. Es un metal suave, reactivo y d
bajo punto de fusión, con una densidad relativa de 0.97 a 20ºC (68ºF). Desde el punto de vista comercial, el
sodio es el más importante de los metales alcalinos.
El sodio ocupa el sexto lugar por su abundancia entre todos los elementos de la corteza terrestre, que contie
el 2.83% de sodio en sus formas combinadas. El sodio es, después del cloro, el segundo elemento más
abundante en solución en el agua de mar. Las sales de sodio más importantes que se encuentran en la
naturaleza son el cloruro de sodio (sal de roca), el carbonato de sodio (sosa y trona), el borato de sodio (bór
el nitrato de sodio (nitrato de Chile) y el sulfato de sodio. Las sales de sodio se encuentran en el agua de ma
lagos salados, lagos alcalinos y manantiales minerales.
El sodio reacciona con rapidez con el agua, y también con nieve y hielo, para producir hidróxido de sodio
e hidrógeno. Cuando se expone al aire, el sodio metálico recién cortado pierde su apariencia plateada y
adquiere color gris opaco por la formación de un recubrimiento de óxido de sodio. El sodio no reacciona con
nitrógeno, incluso a temperaturas muy elevadas, pero puede reaccionar con amoniaco para formar amida de
sodio. El sodio y el hidrógeno reaccionan arriba de los 200ºC (390ºF) para formar el hidruro de sodio. El sod
reacciona difícilmente con el carbono, si es que reacciona, pero sí lo hace con los halógenos. También
reacciona con varios halogenuros metálicos para dar el metal y cloruro de sodio.
El sodio no reacciona con los hidrocarburos parafínicos, pero forma compuesto de adición con naftaleno y ot
compuestos aromáticos policíclicos y con aril alquenos. La reacción del sodio con alcoholes es semejante a
reacción del sodio con agua, pero menos rápida. Hay dos reacciones generales con halogenuros orgánicos.
Una de éstas requiere la condensación de dos compuesto orgánicos que contengan halógenos al eliminar és
El segundo tipo de reacciones incluye el reemplazo del halógeno por sodio, para obtener un compuesto
organosódico.
https://www.lenntech.es/periodica/elementos/na.htm
https://biotrendies.com/minerales/sodio#bloque-2
https://www.hsnstore.com/blog/la-importancia-del-sodio/
https://www.lenntech.es/sodio-y-agua.htm
https://prezi.com/lslxdngchcw5/ciclo-del-sodio/