2.1.4.

- Fases vegetativas del ajo

a) Plantación y emergencia

El ajo se reproduce vegetativamente de las yemas o dientes, los cuales componen el bulbo.

Para realizar la plantación se utiliza mano de obra especializada. Generalmente la siembra se

hace en surcos de 60 a 79 cm de ancho, se procura formar 4 hileras a lo largo del surco a una
distancia de 15 a 20 cm entre diente; en algunas zonas plantan el ajo en “melgas” de más o
menos de 5 a 7 surcos, totalmente aplanado o nivelado y realizando un picado para la
colocación del “diente” a una distancia de 10 a 15 cm (Comunicación personal).

Los dientes o el diente es colocado en la misma posición del bulbo, es decir por la parte por
donde germina hacia arriba. La profundidad a que se entierra depende en casi todos los casos
del tamaño de los dientes, siendo por lo general entre 2 a 3 cm de profundidad.

La cantidad de semilla utilizada con esta densidad de siembra es de 900 a 1000 kg de

dientes/ha (Llerena y Pardo, 1984). Otros datos obtenidos en distanciamiento, indican entre
surco y surco 50 4 hileras, entre hileras 8 a 12 cm, entre planta y planta 12 a 18 cm,
obteniéndose más o menos una densidad de 450 a 550 mil plantas/ha. La cantidad de semilla
que se usa es de 1500 a 1800 kg de bulbo/ha (Comunicación personal).

El periodo de duración de “emergencia del diente” desde que es plantado es más o menos
entre 10 a 20 días dependiendo del tipo de suelo y el periodo de dormancia que se le ha dado
previo a su plantación (tiempo en que es “desgranado” el diente del bulbo).

b) Crecimiento de la planta.

Para que exista un crecimiento vigoroso es necesario que las temperaturas nocturnas sean
inferiores a 16 ºC (Messiaen, 1974).

El periodo de crecimiento del ajo en la zona de mayor cultivo (Arequipa) oscila desde los 20
días a los 60 días, pudiéndose prolongar un poco más, hasta casi muy cerca del inicio del
periodo de bulberización. El crecimiento y la vigorización de la planta dependerá mucho del
tipo de suelo y el abonamiento y los deshierbos adecuados (Comunicación personal – técnico).
La planta alcanza alturas de 0,30 m a 0,40 m y de 0,10 a 0,15 mm de diámetro.

c) La bulberización de la planta.

La bulberización (hinchamiento y acumulación de reservas de las yemas axilares en dientes) se

produce cuando la temperatura media sobrepasa los 18 ºC y cuando la longitud del día
sobrepasa un periodo de 11 a 15 horas que es diferente para cada variedad (Messiaen, 1974;
Ogawa y Matsubaran, 1983; Peña y Ayuso, 1983).

El periodo de bulberización en el ajo empieza generalm,ente desde los 60 dias hasta los 120
dias mas o menos periodo en el cual la planta ha alcanzado su máximo desarrollo vegetativo
(Comunicación personal – Técnico).
d) Cosecha del cultivo

La cosecha del cultivo se realiza cuando la planta comienza a secarse, una vez cumplido todo su
periodo vegetativo, esto se inicia generalmente desde los 180 días hasta los 210 días para
cultivos diferentes y en épocas diferentes de siembra (Llerena y Pardo, 1989).

La recolección se efectúa casi siempre en forma manual empleando herramientas manuales

individuales “especiales”. La planta de ajo una vez arrancada, se deja por varios dias (10 a 15
dias) para el secado de la planta y parte del bulbo.

Comercialización.

La comercialización se produce o se realiza una vez secada la planta y el bulbo, y hay que tener
en cuenta los precios percibidos por los agricultores. Los precios dependen en gran medida del
tipo de ajo, de la calidad, fecha de cosecha, época de venta y la aptitud para su conservación.
Esta será mayor cuando hay lugar a exportación.

2.2.- Climas y recursos naturales

2.2.1.- Clima en la región

Existen factores que han originado que él, territorio de la región Arequipa presente contrastes
climáticos notables, al igual que en el resto del país.

Entre las principales variables que afectan el clima, se puede citar los patrones de circulación,
tanto de las corrientes oceánicas como de las masas de aire de la alta atmosfera; la posición
astronómica sobre la superficie de la tierra, las características de la superficie, sobre todo la
elevación y la exposición. Estas condiciones están sujetas a la influencia de los fenómenos
siguientes: La cordillera de los Andes, el anticiclón del Pacifico Sur, y la corriente Peruana
Oceánica.

La cordillera de los andes conforma una barrera natural que impide el paso de las masas de
aire húmedo del Atlántico al Pacifico lo que ocasiona escases de lluvias en la región. Por estar
ubicada en la Vertiente Occidental de la Cordillera.

El anticiclón del Pacifico Sur, es una masa de aire de alta presión que se ubica sobre el trópico
de Capricornio (20º77’ s), tiene circulación de vientos recoge la humedad que evapora del mar,
la eleva originando estratos de nubes que cubren el cielo de la costa en invierno. Los estratos
bajos producen una pequeña oscilación diaria de la temperatura y una precipitación.