You are on page 1of 4

De acuerdo a Pear (1999) Conforme adquirimos nuevas conductas aprendemos a

desarrollarlas en el momento y en el lugar adecuado, por ejemplo llegamos a


comprender que no debemos de reírnos en un funeral o estar serios en una fiesta,
el comportamiento se ve fuertemente afectado por sus consecuencias, es decir, la
conducta que se refuerza se incrementa, y la que no se incrementa, decrece.

El término control de estímulo quiere decir el control de un estímulo sobre una


conducta como resultado de haber sido reforzada dicha conducta a base de dicho
estimulo.

Es probable que una conducta tenga lugar en presencia de estímulos que estaban
presentes cuando en ocasiones anteriores esa conducta fue reforzada; El
procedimiento mediante el cual aprendemos a emitir conductas apropiadas en
presencia de ciertos estímulos se llama: entrenamiento en discriminación del
estímulo. Hay nombres para los 2 tipos de estímulo asociados al refuerzo y al no
refuerzo de una respuesta determinada:

Es un estímulo que ha sido asociado con la disponibilidad de un refuerzo para una


respuesta particular, es decir, es un indicador de que una respuesta será
recompensada. Sin embargo, si un acontecimiento es un estímulo que ha sido
puesto en relación con ensayos de extinción de una respuesta determinada se
llama E * (e-delta): es un indicador de que una respuesta determinada no será
recompensada. E° está asociado al refuerzo_; y E* está asociado al no refuerzo o
extinción.

Un estímulo puede ser simultáneamente un E° para una respuesta y un E* para


otra, es decir, en presencia de un estímulo determinado una respuesta será
reforzada, mientras que la otra no lo será.

Según Skinner (1969) una formulación adecuada de la interacción entre un


individuo y su entorno debe especificar 3 cosas: la ocasión en que la respuesta
sucede, la respuesta misma y las consecuencias del esfuerzo. Las interacciones
entre ellas son las contingencias del esfuerzo.
Los factores que determinan la eficacia del entrenamiento en discriminación del
estímulo son: la elección de señales claras para cuando sea importante desarrollar
el control del estímulo de una conducta determinada, es deseable identificar los E°
controladores sean muy claros.

1- Minimizar las posibilidades del error: Dara pie a un control del estímulo más
eficaz del estímulo más rápidamente y con bastante menos frustración para el
estudiante.

2-Maximizar el número de ensayos: El control eficaz del estímulo se desarrolla


después de que una persona ha sido reforzada para emitir la conducta deseada
en presencia de E° en varios ensayos.

3-Hacer el uso de las reglas: describir contingencias: El desarrollo del control del
estímulo implica el método de ensayo y error, varios ensayos de refuerzo positivo
de una conducta en presencia de un E° y varios ensayos de esa conducta no
siendo reforzada en presencia de un E*.

Pautas para el entrenamiento eficaz en discriminación del estímulo

Escoger señales claras, seleccionar un refuerzo apropiado, desarrollar la


discriminación, y ser específico sobre que pautas seguir.

Pear J, Martin G. (1999), Modificación de conducta, Quinta edición, España.

Técnicas de autocontrol: ayudas para no comer de más

Hay nutricionistas, como María Sanabdón, que con el apoyo de una psicóloga
hace un abordaje global de los problemas de la conducta alimentaria con el
propósito principal de que el paciente sea consciente de los estímulos que recibe,
cómo le afectan y cómo es capaz de manejarlos o qué dificultades tiene para
canalizarlos.
La experta da ejemplos de distintos estímulos que hacen "comer mecánicamente",
no por hambre. Sugiere además que quien tiene el problema de comer sin
hambre, debe identificar el estímulo que le conduce a ello y responder a la
siguiente cuestión: ¿con qué estímulo se siente identificado? Al hecho de controlar
el comportamiento alimentario afectan:

Estímulos internos, comer más en el trabajo por estrés o ansiedad, por


aburrimiento en casa, al llegar nervioso del trabajo...

Estímulos externos, mientras se prepara la comida o la cena, cuando vemos la


televisión, justo después de hacer la compra, si se trabaja en un bar o en una
pastelería...

Llevar un diario dietético es de gran ayuda para controlar lo que se come y los
sentimientos asociados a la ingesta

Desde el ámbito de la psicología alimentaria se conocen distintas técnicas que,


bien aplicadas, ayudan a cambiar los hábitos o las costumbres que conducen a
comer más de la cuenta o a picotear de manera continuada. Se trata, en primer
lugar, de la autoobsevación: conocerse a uno mismo es el primer paso para
mejorar. Este paso siempre ha de ir acompañado del autocontrol, que consiste en
anotar en una hoja a modo de diario dietético todo lo que uno come a lo largo del
día. Llevar un registro de los alimentos que se comen, indicando el día, la hora, el
lugar y la cantidad estimada o las porciones de comida ingeridas, además de las
sensaciones que acompañan a lo comido, sirve para conocer de cerca nuestros
hábitos alimentarios y para identificar conductas o comportamientos erróneos. El
diario de los alimentos es una ayuda de autocontrol sobre lo que se come y sobre
los sentimientos que genera lo que se come.
Ideas para controlar la ingesta

Una vez identificado el problema, la nutricionista sugiere distintos planteamientos


para el control de los diversos estímulos. Se trata de una serie de pautas que
evitan iniciar una cadena de comportamientos contraproducentes para el control
de la ingesta alimentaria, bien en cantidad de alimentos o en número de ingestas.

Técnica de la parada. Pararse a pensar cuál es la razón que conduce a querer


comer y si de verdad se tiene hambre o es "gula", deseo de comer, apetito
desordenado. Y hacerlo antes de abrir la nevera, antes de entrar en la cocina,
antes de abrir el paquete de galletas, antes de entrar en la pastelería, antes de
entrar en la tienda de gominolas...

Técnica de sustitución. Son pautas que ayudan a evitar la sobreingesta por


cantidad o número de tomas mediante la sustitución de ciertos comportamientos
habituales obesogénicos por otros que beneficien el control de sus ingestas. El
experto en marketing y comportamiento alimentario Brian Wansink ha comprobado
en sus estudios de conducta que quienes comen delante del televisor o del
ordenador comen un tercio más de cantidad debido a que "no se está concentrado
en los alimentos y se come de manera inconsciente", lo que lleva a comer de más.
Hay que recordar tres reglas como método de la técnica de sustitución:

Comer solo en horarios de comidas

Comer solo en la mesa

No mezclar actividades (ordenador, TV, lecturas...)

Alternativas placenteras. Consiste en identificar actividades alternativas que


gusten y generen placer o tranquilidad (leer un libro, escuchar música, ver fotos,
técnicas de relajación, crucigramas, hacer punto...).

Artículo de Por MAITE ZUDAIRE 2 de abril de 2013 Eroski consumer.com

You might also like