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Hemoptisis
P. García López
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Tabla I. Clasificación de las hemoptisis según su Tabla I. Clasificación de las hemoptisis según su
causa. causa. (Continuación)
Hemoptisis Hematemesis
Antecedentes Enfermedad cardiorrespiratoria Enfermedad gastrointestinal
Síntomas Tos, disnea, dolor torácico Náusea, vómitos, melenas
Aspecto de la sangre Rojo brillante, espumosa Marrón o negra (en “posos de café”)
pH de la sangre emitida Alcalino Ácido
Material mezclado Secreciones respiratorias o Restos de alimentos
esputos,en los que pueden verse
macrófagos con hemosiderina
la historia clínica y la exploración física, para ayudar por dos motivos, ya que sirve para orientar el diag-
a la orientación etiológica inicial, valorar la grave- nóstico etiológico y además, permite estimar la gra-
dad de la hemoptisis y decidir que medidas diag- vedad de la hemoptisis y el compromiso hemodi-
nosticas y terapéuticas se van a realizar. námico y respiratorio presente en cada paciente.
Se debe establecer si el sangrado es agudo o Se debe evaluar la situación cardiorrespiratoria
crónico, pues algunas enfermedades como bron- midiendo la frecuencia respiratoria y cardiaca, la
quiectasias, tuberculosis o bronquitis crónica pue- presencia de cianosis, el empleo de musculatura
den manifestarse con una hemoptisis recurrente. accesoria de la respiración, el estado de perfusión
Tener en cuenta los factores de riesgo para carci- periférica, la tensión arterial y la auscultación car-
noma broncogénico (tabaquismo principalmente, diopulmonar. Si no existe gravedad extrema se rea-
pero también exposición a asbesto) y para tuber- lizará una exploración más detallada, inspeccio-
culosis pulmonar (contacto con pacientes bacilí- nando la piel para valorar la existencia de lesiones
feros, inmunodeprimidos, etc.); así como, la exis- cutáneas como telengiectasias, signos de vasculi-
tencia de enfermedades cardiacas, síndrome de tis, chapetas malares, equimosis o contusiones; exa-
Goodpasture, granulomatosis de Wegener, lupus men cardiovascular minucioso (auscultación car-
eritematoso sistémico. Mención especial merece diaca, ingurgitación yugular, reflujo hepatoyugular,
los tratamientos con anticoagulantes orales y antia- edemas en miembros inferiores); palpación de
gregantes plaquetarios. También valorar si ha exis- cadenas ganglionares cervicales, supraclaviculares
tido traumatismo torácico, aspiración de cuerpos y axilares; exploración abdominal y de miembros
extraños y manipulaciones diagnósticas o terapéu- inferiores.
ticas sobre la vía aérea o el pulmón.
Los síntomas acompañantes pueden servir de 3. Evaluación de la gravedad de la
ayuda para establecer el diagnóstico etiológico, así hemoptisis
si la hemoptisis aparece junto a un cuadro súbito Es imprescindible la cuantificación de la hemop-
de disnea, dolor torácico y signos de trombosis tisis para determinar el manejo diagnóstico y tera-
venosa profunda en miembros inferiores se debe péutico del paciente, pero en ocasiones el volumen
de descartar en primer lugar el tromboembolis- de sangre expectorado no corresponde con el san-
mo pulmonar como causa del sangrado; en el caso grado real, ya que parte de la sangre puede ser
de que la disnea se acompañe de ortopnea, expec- deglutida y parte puede desviarse hacia el sistema
toración espumosa y tos paroxística valorar la posi- bronquial contralateral.
bilidad de edema agudo de pulmón. Básicamente se diferencian dos tipos de
La exploración física del enfermo con hemop- hemoptisis: masiva y no masiva, aunque esta cla-
tisis, como ya se ha comentado, es de gran ayuda sificación es arbitraria; se considera que una hemop-
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del sangrado que la historia clínica o la exploración grado, bien por identificación directa de una lesión
física9. No obstante esta exploración es normal hasta endobronquial o por la existencia de coágulos o
en un 20 a 30% de los casos, no descartándose restos hemáticos en un bronquio determinado. El
en modo alguno la posible presencia de una enti- estudio broncoscópico debe completarse con la
dad patológica subyacente potencialmente grave. toma de las muestras anatomopatológicas o micro-
Además la presencia de imágenes alveolares, espe- biológicas que proceda.
cialmente en zonas declives, en enfermos con Está indicada cuando con las pruebas ante-
hemoptisis importante, puede corresponder a acu- riores no se ha alcanzado un diagnóstico, sobre
mulación de sangre por efecto de la gravedad. Tam- todo en enfermos mayores de 40 años con fac-
bién es útil considerar que la lesión radiográfica no tores de riesgo para carcinoma broncogénico, inclu-
siempre es el motivo de la hemoptisis. so cuando la perdida es escasa y la radiografía de
tórax es normal. En caso de existir lesiones locali-
5. Estudio del esputo zadas el diagnóstico específico se consigue en el
Análisis microbiológico con tinciones de Gram 80% de las ocasiones con esta prueba.
y de Ziehl-Neelsen y cultivos en medios habituales
y de Lowestein-Jensen; también se puede realizar 2. Tomografía axial computerizada
estudio citológico del esputo en caso de sospecha Es una técnica complementaria de la fibro-
de neoplasia. broncoscopia muy útil en el estudio de cualquier
Si se realiza un diagnóstico etiológico con las hemoptisis. La tomografía computerizada de alta
exploraciones anteriormente expuesta y el san- resolución posibilita el diagnóstico de algunas enfer-
grado es leve no hay que realizar otras pruebas medades bronquiales, como las bronquiectasias,
diagnósticas y se comenzará con el tratamiento. En con una sensibilidad y especificidad superiores al
caso de no llegar a un diagnóstico etiológico o de 90%. También facilita el reconocimiento de lesio-
existir un sangrado no leve se realizarán otras explo- nes parenquimatosas o de la vía aérea que no son
raciones. visibles en la radiografía de tórax y ayuda a deci-
• Pruebas dirigidas: dir cual es la técnica diagnóstica más adecuada en
cada caso (por ejemplo, la broncoscopia o la pun-
1. Broncoscopia ción aspirativa con aguja fina). El empleo de con-
La broncoscopia tiene una triple misión: ubicar traste intravenoso permite el estudio del medias-
el origen del sangrado, identificar la causa y con- tino y facilita el diagnóstico de las malformacio-
trolar, aunque sea de forma transitoria, la hemo- nes arteriovenosas. Incluso en algunos casos con
rragia. El rendimiento de la fibrobroncoscopia en la el modo helicoidal se pueden detectar las arterias
localización de la hemorragia depende de la pre- causantes de la hemoptisis10.
cocidad con la que se realice la técnica. Por ello, se Esta técnica está indicada cuando quiere des-
recomienda llevarla a cabo coincidiendo con el san- cartarse un carcinoma broncogénico o cuando exis-
grado activo o en las 48 horas siguientes a la te la sospecha clínica, radiológica o broncoscópi-
hemoptisis; siendo importante conocer el origen ca de bronquiectasias. También en los enfermos
de la hemorragia si la pérdida hemática pasa a que tienen una hemoptisis recidivante, persistente
ser masiva y, en consecuencia, se requiere un tra- o progresiva y en todos aquellos en los que no se
tamiento urgente. La fibrobroncoscopia practicada ha encontrado una causa que justifique la hemop-
durante la hemoptisis activa no provoca un agra- tisis.
vamiento de la misma; pero cuando se practica
durante el sangrado activo de una hemoptisis masi- 3. Otros procedimientos diagnósticos:
va, es preferible la utilización de anestesia general. En función de la sospecha clínica; gammagra-
Esta técnica permite la visualización de ambos fía pulmonar de ventilación-perfusión si se sospe-
sistemas bronquiales y localiza el origen del san- cha tromboembolismo; ecocardiograma en pacien-
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- Bloqueo de la luz bronquial mediante un caté- la arteria espinal anterior o de ramas espinales anó-
ter con un balón hinchable distal (catéter de malas o aberrantes
Fogarty o de Foley). El tratamiento quirúrgico de la hemoptisis
- Instilación bronquial, a través del broncosco- está indicado cuando la enfermedad causal puede
pio, de sustancias con efectos tópicos proco- resecarse y no existe tratamiento médico alternati-
agulantes, como la trombina o el fibrinógeno- vo ni hay contraindicación quirúrgica. La cirugía
trombina. urgente de la hemoptisis está asociada a una alta
- Braquiterapía12, que produce una fibrosis cica- morbilidad y mortalidad14., por lo que es preferible
tricial, y la fotocoagulación con láser, útiles en la intervención quirúrgica electiva una vez estabili-
las hemorragias de origen neoplásico. zado el sangrado y la situación general del enfer-
- Colocación de un tubo de doble luz, que per- mo. La cirugía es recomendable en pacientes con
mite la ventilación del pulmón no comprome- hemoptisis masiva causada por lesión vascular torá-
tido por el sangrado. cica, malformaciones arteriovenosas, aneurisma
La arteriografía bronquial tiene una doble fun- torácico con comunicación bronquial, quiste hida-
ción. Por un lado tiene utilidad diagnóstica, ya puede tídico y en otras condiciones en las cuales la embo-
mostrar el origen de la hemorragia, mediante sig- lización bronquial ha sido ineficaz o no se ha podi-
nos directos, como la extravasación del contraste o do realizar15, siempre que la resección quirúrgica
la trombosis aguda de la arteria bronquial, y signos de la zona implicada en la hemorragia sea facti-
indirectos, como la hipervascularización, los corto- ble y el enfermo operable.
circuitos broncopulmonares o los aneurismas bron-
quiales. Se recomienda comenzar por la selectivi- BIBLIOGRAFÍA
zación de las arterias bronquiales, continuar con las 1. Haro Estarriol M, Vizcaya Sánchez M, Jiménez López J,
arterias sistémicas no bronquiales y, si éstas fueran Tornero Molina A. Etiología de la hemoptisis: análisis
prospectivo de 752 casos. Rev Clin Esp 2001; 201: 696-
negativas, realizar una arteriografía pulmonar13. Por 700.
otra parte, tiene utilidad terapéutica, ya que permite
2. Toker A, Tanju S, Bayrak Y, Cenesiz E, Guler N, Dilege S
la embolización de los vasos sangrantes. Los mate- et al Life-threatening hemoptysis in a child: the only
riales empleados son la esponja de fibrina o el alco- symptom. Ann Thorac Surg 2004; 77: 336-8.
hol polivinílico. La embolización bronquial se con- 3. López R, Abad A, De Miguel J, Juretshcke MA. Hemop-
sidera una medida terapéutica paliativa y puede ser tisis masiva secundaria a insuficiencia cardiaca en el con-
útil hasta que se ponga en marcha un tratamien- texto de una miocardiopatía dilatada. Arch Bronconeu-
mol 2001; 37: 289-290.
to médico o quirúrgico definitivo. También es un
procedimiento sustituto en enfermos en los que 4. Rabec C, Barcat J, Rey D. Hemorragia alveolar asocia-
da a enfermedad inflamatoria intestinal y tiroiditis de
han fracasado o no son factibles otras actuacio-
Hashimoto. Arch Bronconeumol 2003; 39: 283-5.
nes terapéuticas. Tiene una tasa inicial de éxitos
5. García Franco CE, Bravo Bravo JL, Zapatero Gaviria J.
superior al 80% tanto en el control inmediato como Seudoaneurisma arterial pulmonar secundario a cate-
en el tardío de la hemoptisis masivas o recidivan- terismo coronario. Arch Bronconeumol 2002; 39:
tes. Sin embargo, su tasa de recurrencias en las pri- 190-1.
meras semanas después del tratamiento es impor- 6. Roig Cutillas J, Llorente Fernández JL, Ortega Morales FJ,
tante, entre el 14 y el 20%. Las complicaciones de Orriols Martínez R, Segarra Medrano A. Manejo de
la embolización bronquial son poco habituales cuan- hemoptisis amenazante. Arch Bronconeumol 1997; 33:
31-40.
do la técnica se lleva a cabo por personas con expe-
7. Wong M, Szkup P, Hopley M. Percutaneous embolo-
riencia. La más frecuente es el síndrome postem-
therapy for life-threatening hemoptisis. Chest 2002; 121:
bolización, que consiste en dolor pleurítico, fiebre, 95-102.
leucocitosis y disfagia. Sin embargo, la más grave 8. Jonson JL. Manifestacions of hemoptysis. How to mana-
es la mielitis transversa o síndrome de sección ge minor, moderate, and massive bleeding. Postgrad
medular, que se debe a la oclusión iatrogénica de Med 2002; 112: 101-6, 108-9, 113.
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9. Haro Estarriol M, Vizcaya Sánchez M, Rubio Goday M, bronchial brachytherapy in the treatment of malignant
Jiménez López J, Núñez Ares A, Tornero Molina A. Uti- lung tumours. Eur Respir J 2004; 24: 348-52.
lidad de la historia clínica, examen físico y radiografía en 13. Gimeno Peribáñez MJ, Madariaga B, Alfonso Aguirán ER,
la localización del sangrado en pacientes con hemopti- Medrano Peña J, Fernández Gómez JA, Herrera M et al.
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