Contexto

El desarrollo de la temática, está relacionado con la situación migrante en Chile, en un

contexto global en el que la sociedad parece hacerse cargo de las realidades económicas que
trae consigo la actual globalización mas no, de las eventualidades sociales que subyacen a la
idea de un mundo globalizado, en las que se enmarca la migración, ya sea por motivaciones
económicas, sociales y políticas (Cubillos, 2003). El estudio se centrará en la percepción de
los habitantes chilenos del barrio de San Isidro, con respecto a esta nueva esfera social que
se está incorporando a su territorio, en un contexto de fragmentación social respecto de la
respuesta que se les da a estos actores que se integran al panorama sociocultural de nuestro
país.

Comprendiendo que en la actualidad esto se ha convertido en una preocupación latente para

las autoridades gubernamentales de Chile, con el creciente arribo de migrantes que han
provocado un desborde tanto en las oficinas de migración como en diversos focos de nuestra
capital, generando propuestas legislativas como lo ha sido la nueva reforma migratoria, he
aquí la importancia de comprender las percepciones socio espaciales (Gutierrez, 1996) de los
habitantes del barrio San Isidro entre avenida Alameda y calle Alonso de Ovalle, ya que
representa en gran medida un polo de inserción y conexión de dichos grupo para con los
habitantes chilenos establecidos en aquel sector, y como a partir de la construcción de estas
percepciones, se han generado propuestas legislativas a nivel país.

Considerando para ello la creciente presencia de extranjeros en el ámbito del comercio

ambulante en el eje Alameda - San Isidro, otorgando al barrio un carácter cosmopolita e
incluso más específicamente latinoamericano, respecto de los actores que residen, laburan o
transitan por dicha intersección. Todo ello en un plano nacional e internacional, en que el
transito humano es una constante debido principalmente a factores económicos,
posicionando a Chile como un país estable tomando en cuenta las realidades de las diversas
esferas, tanto políticas, económicas educacionales, sanitarias y sociales del panorama
latinoamericano restante, en que la empleabilidad y las condiciones de vida son consideradas
como paupérrimas, desde una visión occidentalizada del mundo (GEM, 2015) y en las que
Chile representa un foco atractivo tanto para el emprendimiento e inversión como para las
proyecciones de vida y estabilidad, aunque claro esto,| resta demasiado de la cotidianidad de
la sociedad chilena inserta en los estratos socioeconómicos medios.

Planteamiento del problema

Tomando en cuenta la alta sensibilidad a la que ha estado expuesta la temática de la

migración, consideramos que es importante conocer, comprender y analizar los diversos
lineamentos o visiones de la sociedad chilena, respecto de los nuevos integrantes sociales,
del Chile del siglo XXI, a través de situaciones tan comunes como el discurso de
empleabilidad, que existe en la matriz mental de cientos de chilenos, que ven al extranjero
como un agente económicamente opuesto a sus ideales y proyecciones personales, y a la
vez y como contrapunto, la recepción abierta al dialogo y pasiva ante dichos actores, que en
general han comenzado a nivel país a reactivar núcleos económicos que hasta hace un lustro
permanecían pasivos o inertes afectados por la gran oferta y atracción de los grandes centros
comerciales, desplazando el comercio barrial a una esfera aún menor, y que este grupo social
ha recuperado y reorientado hacia una multiculturalidad y a un estado de creciente flujo
económico que al parecer ha sido positivamente aceptado (Moraga, 2018), no solo en el
barrio San Isidro, sino que en comunas icónicas de lo que es este fenómeno migratorio como
Estación Central, Puente Alto y Quilicura por nombrar solo algunas.

Ahora, ¿será en su mayoría realmente positiva la recepción de estos agentes sociales por parte
de los habitantes chilenos, en lo que respecta al barrio?, puede que la recolección de
información este repleta de subjetividades, pero lo cierto es que a alguna dirección hemos de
llegar, aunque ello no podrá reflejar una generalidad de esta percepción y recepción a escala
nacional, nos conformaremos con desfragmentar lo acontecido en un barrio que es para
nosotros un nuevo escenario multicultural que esta respondiendo a esta creciente tendencia
global con bases económicas que hemos llamado efecto migratorio.

Las preguntas que estructurarán nuestra investigación serán: ¿Cuál es la Percepción a nivel
comercial, habitacional y social de los residentes chilenos del barrio San Isidro respecto de
los migrantes que se han incorporado al área? ¿Cómo ha sido recepcionada la influencia
extranjera en la reactivación comercial del barrido por parte de los residentes chilenos?
¿Cómo ha afectado a la idiosincrasia del barrio la presencia de agentes multiculturales? ¿Qué
nivel de relaciones sociales se han generado entre la comunidad chilena y la extranjera en el
barrio, considerando su permanente contacto comercial y habitacional?

Estas preguntas esbozaran los lineamientos que abordaremos en nuestra investigación

permitiéndonos comprender a nivel micro geográfico el impacto que ha generado el proceso
migratorio hacia Chile en la actualidad y cuáles son las principales visiones o interpretaciones
de la comunidad chilena del barrio anteriormente mencionado y como ello se inserta en un
contexto de cambio de las racionalidades propiamente chilenas al de nuevos preceptos
cosmopolitas en nuestro país.

La selección del área de estudio responde a cierta precepcion que hemos tenido en cuenta a
la hora de abordar el impacto del fenómeno migratorio y que es principalmente al carácter
histórico del mismo, ya que representa como conjunto arquitectónico constituido en pleno
siglo XX un lugar en que comenzó a gestarse, la identidad congregada de las clases bajas
chilenas que son las que fielmente reflejan la idiosincrasia nacional en sus costumbres,
dialectos y carácter, y que es precisamente lo que hoy nos hace diferentes de otras culturas,
contraponiéndolo con esta nueva construcción social que ha traído consigo el encuentro
multicultural expresado no solo en la Región Metropolitana sino a lo largo del país, que
creemos desarrollara o transformara nuestra identidad con el devenir de los años, hasta
producir lo que ambiciosamente se ha llamado aldea global.

Objetivos de investigación

Objetivo general: Analizar el trasfondo de la percepción socio espacial de los residentes

chilenos del Barrio San Isidro respecto del carácter cosmopolita que identifica al sector en la
actualidad, considerando para ello las temáticas del comercio, habitabilidad y relaciones
sociales.

 Objetivo especifico 1: Comprender la funcionalidad del comercio respecto de la

inserción de los grupos migrantes en el barrio san Isidro.
 Objetivo específico 2: Reconocer las diversas percepciones espaciales de los
residentes chilenos respecto de la habitabilidad de los grupos migrantes.
 Objetivo específico 3: Identificar las relaciones sociales estructuradas a partir del
proceso de encuentro entre los habitantes chilenos y los migrantes.
Marco teórico

La migración como nueva temática de estudio global ha insertado en la geografía de la

población, la necesidad de pasar de explicar los componentes de una población en un
territorio, a un debate más complejo sobre lo que significa dicho espacio, como los espacios
se viven, construyen y representan de acuerdo a las interacciones sociales que ahí se
enarbolan (Mendoza, 2006), que es en definitiva lo que está aconteciendo hoy en pleno barrio
San Isidro en el que sus diversos actores han comenzado a reconstruir la identidad de dicho
circuito espacial, sin ausencia de problemáticas como el racismo o el extremo nacionalismo
de ambas partes, aunque es evidente que los nuevos actores de dicho espacio están decididos
en llevar a cabo un lento proceso de adaptación al ambiente local (Christlieb, 2006). Es en
este profundo proceso en que comenzamos a examinar la globalidad del hecho, de causa y
efecto de las migraciones que ha provocado en diversos foros mundiales episodios críticos
sobre estos encuentros y de cómo ello ha generado una reconstrucción de las identidades, en
un contexto en que ha comenzado a estructurarse una preocupante ola de migraciones hacia
Latinoamérica en un marco en que las condiciones estructurales de desigualdad sistémica,
debilidad institucional y fragilidad de los sistemas de representación y participación políticas
(FAO, 2017) son hechos a los que se comienza a enfrentar el migrante dentro de la región,
debemos considerar que el futuro fructífero del proceso migratorio no está asegurado per se,
sino que dependerá del buen desarrollo de relaciones sociales que ellas produzcan .

En lo que se refiere al contexto nacional creemos importante considerar conceptos como la

cultura y la movilidad, que son factores inherentes al mismo proceso migratorio y que
identificaran una de las principales causas de dicho fenómeno, que es la búsqueda de nuevas
oportunidades económicas (Salvatori, 2013) por parte de estos grupos y que es una de las
aristas que estará en investigación respecto del impacto generado por los migrantes en el
cotidiano vivir de los habitantes chilenos en el área, en relación a su influencia en la
reactivación del barrio como un polo comercial económicamente activo, pero para verificar
ello no solo debemos estudiar los comportamientos sociales, sino que el mismo
comportamiento espacial que se manifiesta en el área de estudio seleccionada debemos
recordar que es la vinculación con el paisaje lo que nos convoca y como ello a su vez produce
una arista en lo que respecta a las relaciones espaciales.
Sin duda la inmigración en Chile, a lo largo de estos años, ha ocurrido por razones
económicas y de estabilidad política, pues esta siempre se ha mostrado en su peak en
momentos en que el país pasa por bonanzas económicas y de paz social (SICREMI, 2002)
convirtiendo nuestro país en una verdadera tierra de oportunidades, la gran problemática es
expuesta después y que está en función de la infraestructura de las ciudades, la funcionalidad
y la cobertura tanto del sistema educativo como educacional, que ya es deficiente para los
chilenos.

En su dimensión social y política, el espacio público de las ciudades está constituido por
lugares de interrelación, de encuentro social y de intercambio donde convergen diversos
intereses y donde, eventualmente, puede también configurarse la identidad colectiva de una
comunidad y esto es precisamente lo que nosotros.