Esta memoria está basada en la actividad complementaria que se impartió el viernes
20 de abril, donde se trató el movimiento vanguardista aplicado al cine, sobre todo a partir de ejemplos de fragmentos de películas clásicas. Comenzamos con una introducción a lo que es la vanguardia: Las vanguardias no nacen después de la Primera Guerra Mundial, es un producto cultural de la crisis de finales de siglo. Se produce una crisis del realismo, de la razón, que acaba por representarse de forma distorsionada para representarse la realidad. En cuanto al impacto que tuvieron las dos guerras mundiales, hay que decir que la crisis cultural que se produjo después de la Primera Guerra Mundial fue mayor que le da la segunda. Se podría decir que la Primera Guerra Mundial fue el fin de una época. Esa crisis cultural que se produjo se convirtió en una forma de vida y de entender el mundo, pues representa la crisis de la sociedad burguesa. Luego de la Primera Guerra Mundial se inició la percepción de que había desaparecido un mundo, por lo que se vieron en la necesidad de crear una nueva alternativa. Fue así como surgieron las vanguardias en un momento de esplendor como lo fueron los años 20. Estas vanguardias estéticas representan manifestaciones artísticas y culturales muy diferentes; en todo caso se produjo una radicalización extrema del lenguaje de la modernidad donde las vanguardias tienen un papel principal, pues uno de los principios de las mismas es que buscan provocar a la sociedad, creando reacciones nuevas, entre otras cosas quieren que la gente se escandalice. La corriente que más representa esta voluntad es el Dadaísmo, y como ejemplo tenemos el urinario de Marcel Ducham; él lo que quería era coger objetos convencionales y darles la vuelta para crear una pieza de arte. De la mano de la idea de romper, se llega a la idea de romper con el pasado, incluso su descrédito; como, por ejemplo, la idea de quemar museos, que venía de la idea de que todo lo que fuera antiguo no era importante y debía de desaparecer, pues solo había que mirar hacia el futuro. Uno de los motivos referentes en cuanto a las vanguardias eran los nuevos sistemas de transporte, que está entrelazado con la fascinación por las ciudades, pues, de hecho, las vanguardias nacieron en ciudades europeas como lo son Londres, Berlín, París, etc. No se entienden las vanguardias sin las grandes ciudades, que inspiraban a los artistas. Eran pocos los que no vivían en estas grandes ciudades, como por ejemplo James Joyce, que extrañamente vivía en Dublín. El cine era el nuevo arte, y este proporcionada nuevos medios técnicos para desarrollarse. Fue en los años 20 cuando se desarrolló el lenguaje cinematográfico y no fue hasta el sistema sonoro cuando las películas se estandarizan, pues son más completas. Ruttmann creó una primera pieza en 1921 llamada Opus II, experimento y jugó con el uso del sistema que puede transmitir colores, movimientos, formas, etc. Podríamos decir que es cine experimental. Es por eso que al ser experimental no buscan crear una historia, más bien su objetivo es ver hasta qué punto “puedo hacer el cine”, como el movimiento y el sistema de sonido, cosas que no se puede hacer con una pintura. Y es por eso que, al ser una creación y experimentación personal, no está hecha para que sea comercial, ya que lo único que hace es jugar con las formas, las velocidades, los colores, etc. La segunda pieza expuesta es también otra película de Rothman llamada Berlin: Symphony of a great city. Es una película muda alemana que se estrenó en 1927 dónde se transmite la sinfonía y el ritmo de una ciudad, donde el protagonista es el movimiento urbano. Podemos observar que esta representación es mucho más realista. La peli es interesante porque te muestra la vida del Berlín de la época; cómo era, que se hacía, que había, y hace un seguimiento de todo lo que ocurre, como el ritmo laboral durante el día y los teatros y los cabarets por la noche. La película comienza en una estación de tren y en este primer fragmento observamos mucho movimiento, pero sobre todo mucha referencia a la tecnología, pues vemos trenes, tranvías, automóviles (a pesar de que también aparecen carros tirados por caballos), teléfonos, ascensores, máquinas de escribir, etc. Hay un fragmento en el que está representada la marcha de los trabajadores, la escena recuerda a la película de Chaplin “Tiempos modernos”, (en la cual critica elementos en el uso de las máquinas y la forma de trabajo como la explotación, la deshumanización, el tiempo de trabajo, etc.) con el ritmo frenético de la ciudad y que cada uno va, como se suele decir, “a su marcha”. Dentro del cine hay un principio fundamental y es que, si pones un plano y después otro inmediatamente, el espectador asocia los dos planos al momento; esto se llama continuidad narrativa y se puede hacer para establecer relaciones ideológicas o simbólicas. Un ejemplo de esto es la escena donde la mujer habla por teléfono gritando y después aparecen un mono chillando, seguido por una espiral que abarca toda la pantalla qué puede que haga referencia al ciclo de la vida moderna. Otra cosa que se puede observar es que las escenas se van haciendo más cortas a medida que avanza la película, haciendo referencia a cuando llevas en el trabajo un ritmo frenético. Realmente películas vanguardistas hay pocas, pero sí que hay mucho cine con influencia vanguardista. La idea de modernidad de las vanguardias es una idea contradictoria por diferentes motivos. Esta película tiene una mirada fascinante con la introducción de las nuevas tecnologías en la gran ciudad, pero dicha fascinación tiene una cara mala, ya que parte de la población del centro de Europa en los años 20 convive con una situación delicada económicamente. Un ejemplo es el cine alemán, ya que es uno de los más importantes de Europa por su parte industrial pero también artística. Es tan influyente que le hace competencia a Hollywood y desde un punto de vista artístico es junto con Francia de las más importantes. En Alemania se encarnan los dramas que tiene la Europa del Sur moderna, se trata de abordar un mundo complejo lleno de contradicciones y en crisis. Una de las películas más míticas de este periodo es El gabinete del doctor Caligari. Fue creada en 1920 y es una de las películas más importantes de Alemania, pues es una de las primeras en las que se representaba Alemania después de la Primera Guerra Mundial. Alemania será uno de los lugares de mayor creatividad cultural durante los años de la República de Weimar y el cine alemán se configurará como uno de los cines más potentes europeos. La película tuvo reacciones encontradas pues era una película que no todos entendían y eso hizo que la gente se llevase una impresión mala y pesimista, confusa y sin mucho sentido. Incluso en Francia se asociaba esta complejidad al mismo carácter alemán. La película causó bastante miedo y a pesar de que no era cine de terror, es una película muy importante en este género ya que no se entiende el cine de terror sin esta cinta, incluso en Hollywood. Se podría decir que esta película es un clásico de terror junto con “Frankenstein” o “La momia”. La película daba una sensación de confusión sin sentido y fue muy compleja al momento de definirla para los críticos extranjeros. De la película no podría decirse que es vanguardista del todo, sino que, más bien, presenta una gran cantidad de lenguaje vanguardista. La película está grabado en interiores, dentro de un estudio, donde el escenario está pintado y la realidad está distorsionada de forma deliberada, pues es una puesta estética vinculada al expresionismo, dónde hay una voluntad explícita de que el espectador se dé cuenta de que es irreal, los elementos de la película son exagerados; como las casas curvas, la silla con muchos respaldos, las ventanas con barrotes irregulares, la silla de la oficina del Ayuntamiento que es tan disfuncional como lo es la mesa. Es decir, la mayoría de los objetos representados son estéticamente excesivos. También se exagera el maquillaje de los personajes para crear una figura siniestra, como el personaje de César y el propio Doctor Caligari, dándoles así una aura maligna y misteriosa. Este tipo de maquillaje recuerda a otros personajes como Eduardo Manostijeras, de Tim Burton. Como todo en esta película, el estilo de la actuación de los actores también es muy exagerado, pues era el estilo de la época. Hay que decir que la música al principio no iba acompañada con la película, normalmente había bandas que tocaban cualquier cosa en la sala del mismo cine antes de la Primera Guerra Mundial. Sin embargo, en esta película la música compuesta acompaña la idea de distorsión y la sensación de incomodidad, solo que, en muchas películas tampoco se puede saber bien del todo sí la música que acompaña a la película es la original, pues muchas no las conservan y la música que nos ha llegado a nosotros se compuso tiempo después. La trama de la película se crea en torno a la figura del doctor Caligari, un siniestro doctor con un aura maligna que llega a la ciudad para participar en la feria. Su atracción principal es un sonámbulo llamado a Cesare, que está bajo su control menta y solamente despierta cuando su amo se lo ordena, si no permanece dormido esperando a que el Doctor lo despierte. Lo que llama la atención de este personaje es su capacidad para leer mentes y el futuro de otras personas. En una de las escenas se ve a Cesare entrando en la habitación de una mujer con la orden por parte del Doctor de matarla, sin embargo, al mirarla mientras duerme se ve incapaz de matarla y la secuestra, pero no antes de que ella se despierte y grite alertando a los demás, por lo que es perseguido por la familia que alerta a más hombres y se van en su busca. Este es claramente una técnica muy conocida y utilizada en el cine de terror clásico; el monstruo que se enamoran de la chica y la rapta. Otros ejemplos son King Kong i Drácula. El que no pueda matarla a pesar de la orden del doctor hace pensar que, a pesar de todo, Cesare sea una persona racional. Otra curiosidad es el actor que interpreta a Cesare, llamado Conrad Veidt, quien era muy famoso en Alemania pero que sin embargo tuvo que huir Estados Unidos porque era judío. Una vez ahí hace películas en Hollywood, pero desgraciadamente solo le ofrecían papeles de nazis, como su personaje de general nací en la película Casablanca. Pasa de ser el icono de la vanguardia a hacer de nazi, de lo que ha tenido que huir de su país. La película es tan importante desde el punto de vista estético que acaba por apoyarse un término llamado Caligarismo. En general lo que encontramos es una mezcla de elementos vanguardistas, elementos narrativos propios del cine de Hollywood. Para hablar proyección utópica, Hablemos de la película de Fritz Lang, Metrópolis, estrenada en 1927. Es una adaptación de la obra de Theavon Harbon (su mujer), donde se plantea una distopía, donde se proyecta una sociedad futura opresora del individuo. Aquí se cuestionan si realmente la tecnología es posible que no sea buena en un futuro para el hombre. El mundo de Metrópolis está dividido en dos, la clase trabajadora, ordenada y masificada que vive debajo de la superficie en un ambiente industrial, donde la arquitectura es moderna y muy cuadriculada mientras que la clase alta o la élite arriba, en espacios abiertos y luminosos, con espacios de ocio como una metrópolis moderna, con una arquitectura con un toque clásico. Durante el rodaje se gastó mucho dinero para crear la puesta en escena de la película. Hubo mucha polémica alrededor del largometraje, pues lo que se plantea no es una solución al problema, no tiene un discurso de revolución del proletariado, la intención es dar un mensaje muy conservador de la armonía entre clases. No gustó ni política ni socialmente, ni tampoco gustó la ciencia ficción que mostraba. Además, se aprecian muchos símbolos religiosos. También se decía que la ciencia ficción era una estupidez. Desde el punto de vista estético la película agradó, sin embargo, gastaron tanto dinero en la escena de la película que no pudieron recuperarlo en taquilla. Por otro lado, ni la novela ni la película son fascistas, a pesar de lo que se diga pues el creador se afilió al Partido Fascista desde un principio, lo que pasa es que simplemente era conservador. A pesar de todo, curiosamente, los sectores que mejor acogieron la cinta fueron los más próximos al partido nazi. Por último, decir que para el estreno de la película fuera de Alemania se eliminó casi toda una hora de metraje, pues la cinta era muy larga y se pensó que no iba a agradar al público en los cines. De esa parte que se cortó de la película no se volvió a saber hasta 2008, donde apareció una copia de la película en el Museo de Buenos Aires, aunque en mal estado.
En mi opinión, la actividad ha sido interesante, sobre todo el tema a tratar. Y la verdad
es que siempre es más divertido tratar un tema como las vanguardias a partir de otro sistema más creativo como lo es el cine.